La chica del lago

Ey! Estoy pensando escribir un relato navideño de Castle, la idea lleva más de una semana rondándome y mientras consigo darle forma y para ir abriendo boca, aquí os dejo este mini fic navideño. Lo escribe hace dos años para un concurso de relatos de Navidad en el foro de JAG donde escribo habitualmente, y todavía no puedo explicar cómo, gané! He tenido que cambiar algunas cosas de las vidas de nuestros chicos para poder hacer la adaptación, digamos que es un relato de Becket y Castle pero sin que sean exactamente los Castle y Becket de la serie, espero que os guste. Besitos!!

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Titulo: La chica del lago
Autora: Zeny_Katekenzie

Esta historia comienza en una fría noche de diciembre. Como cada año, Richard Castle huía de su insulsa y vacía vida. La Navidad era la peor época del año para él. La blanca y dulce Navidad era oscura y amarga para Rick por eso, no dudaba en coger el coche y conducir hasta el único lugar donde se encontraba seguro: la granja que había sido de su abuela.
Había ido allí por las fiestas desde aquella Nochebuena de 1969 cuando su padre desapareció en el mar llevándose con él la infancia de su único hijo. Cuando su abuela Kate vivía, Rick se esforzaba en mostrar un poco de espíritu navideño, por ella, pero ahora…,ni siquiera ella estaba para dar sentido a su vida.
Condujo hasta la granja en silencio, el año había sido difícil para todos. Sus mejores amigos, a quienes consideraba parte de su familia habían perdido a su bebé, su madre estaba en una gira navideña y su hija Alexis pasando las fiestas con su ex mujer ¡¡¡todo estaba mal a su alrededor!! Este año con más razón le apetecía perderse del mundo, admirar el la luna llena reflejada en el lago que había cerca de la casa y dormir hasta el dos de enero.
Llegó a la granja pasadas las doce de la noche, aparcó el coche, sacó el equipaje y caminó hasta su lugar preferido: el lago.
A medida que se acercaba divisaba una silueta, de lejos le pareció una mujer. Conforme se acercaba sus sospechas se confirmaron. Se trataba de una mujer, una hermosa mujer de cabello castaño que parecía entretenida en tirar piedras al lago.

R:Ejem- carraspeó para hacerse notar intentando no asustarla- Disculpe señorita- le dijo- Está usted en una propiedad privada- le advirtió.
La misteriosa dama levantó la cabeza y le miró. Rick no tardó en anclar sus ojos azules en los marrones de ella que le miraba con el rostro completamente bañado en lágrimas.
R: ¿Está usted bien? ¿Puedo ayudarla en algo?
: No lo creo…, siento haberme colado en su propiedad, de verdad lo siento ya…ya me voy.
R: ¡¡No espere!- le gritó sin saber el motivo- No importa, puede, quedarse un rato…- informó educado- Me llamo Richard.
K: Becks- respondió tomando la mano que le ofrecía, en ese instante los dos sintieron una descarga por todo el cuerpo- Solo …estaba tratando de…olvidar algunas cosas- declaró completamente perdida en aquellos ojos claros velados de tristeza.
R: ¿Olvidar? ¿Sabe cómo hacer eso?
K: Mi abuela paterna, era una india cherokee, cuando yo era niña, me contaba historias sobre cómo alejar de ti las cosas malas, lanzándolas a un profundo lago una noche de luna llena…cada piedra, es un mal recuerdo del que te deshaces.
R: ¿Y funciona?
K: Es la primera vez que lo hago…¿lo intentas conmigo?- él solo asintió, se sentó junto a ella y lanzó una piedra con todas sus fuerzas.
R: Por la desaparición de mi padre...-sabía que ese había sido el desencadenante de todos los males de su vida, por eso se cerró al amor, no dejaba que nadie se acercara a él lo suficiente como para amarlo, solo se lo había permitido a Meredith y le engañó.
K: Por la muerte de mi madre- siguió ella.
R: Por la muerte de Diane- otra gran pena en su alma, la muerte de su hermana pequeña cuando apenas tenía tres años le dejó herido de por vida.
K: Por la de Eddie- dijo, aún se sentía culpable por haber sobrevivido a aquel accidente en el que por culpa de sus locuras perdió la vida su mejo amigo de la niñez.
R: Por mi carrera como escritor perdida.
K: Por mi alcoholismo-
Durante un rato estuvieron lanzando piedras al lago, en silencio se escuchaban, parecía una competición de quién lo había pasado peor en la vida.
Abandonos, decepciones, errores, una casi boda, la muerte de la hija de sus mejores amigos y un larguísimo etcétera eran las cosas que Rick y Becks quisieron alejar de sus vidas para siempre.

K: Será mejor que me vaya- dijo tras unos minutos de silencio- Me espera un largo camino hasta Nueva York.
R: ¿Vas a conducir a la ciudad ahora? – ella asintió- ¡¡Estás loca!!, hay amenaza de tormenta de nieve, no llegarías…te quedarás encerrada en el coche y morirás de frío.
K: ¡Qué optimista eres!!- contestó con una sonrisa- No tengo más remedio, es eso o dormir en el coche…y como tú has dicho, moriré de frío.
R: Puedes quedarte en mi casa…es decir, la granja de mi abuela está a cinco minutos en coche…tiene muchas habitaciones y solo estoy yo.
K: No quisiera ser una molestia.
R: No te preocupes, ¡vamos!- se levantó y le tendió la mano para ayudarla- ¿Tu coche?
K: En el sendero de la entrada- respondió, se sentía algo cohibida, pasar la noche en la casa de un desconocido no era algo demasiado sensato pero él le daba buena espina.

Llegaron enseguida a la granja y Becks se sorprendió. La casa era enorme. Tenía un bonito porche con dos mecedoras fuera, establos para caballos y otros animales.
K: ¿Tienes bichos?
R: ¿Bichos? – dijo sin poder contener una carcajada- Ya no, cuando mi abuela vivía tenía vacas, pollos, gallinas…yo solo conservo a Rayo, mi caballo.
K: Me encantan los caballos, ¿es muy tarde para dar una vuelta verdad?
R: El viejo Rayo no tiene rayos X en los ojos, es de noche…si te quedas mañana unas horas podemos intentarlo- le sugirió, realmente no sabía que le pasaba, sentía que no podía dejarla marchar.
K: Veremos cómo pasamos la noche…, es decir cómo la paso…- se hizo un lío, ese hombre la desconcertaba.
R: Sí claro, pasa, te pondré sábanas en el cuarto de invitados.

El cómo pasó ella del cuarto de invitados al de Rick, a su cama, entre sus brazos, es algo que ninguno de los dos sabía explicar.
En un punto de la noche él oyó un ruido, fue hasta donde había alojado a su nueva amiga y la encontró hecha un mar de lágrimas…sin preguntar el motivo se acercó, la abrazó, ella le miró con sus grandes ojos marrones cristalinos por las lágrimas y entonces Rick no puedo controlarse.
Lentamente se acercó a sus labios y la besó. Becks no tardó en corresponderle y los dos se perdieron en el deseo que les nubló la mente. Sus manos se exploraban, las caricias se hicieron cada vez más intensas y sus cuerpos se unieron en uno solo, conectando a la perfección, haciéndoles sentir a ambos un torrente de sensaciones y sentimientos hasta ahora desconocidos para uno y otra.
Fuera la nieve caía con fuerza, cubriéndolo todo en pocas horas.

Rick despertó pocas horas después de haberse dormido y miró a la extraña que dormía abrazada a él. Tenía que reconocer que no era la primera vez que metía a una mujer en su cama la misma noche que la conocía pero lo que debía aceptar era que nunca antes había sentido nada parecido.
Se despertó sintiendo una enorme sensación de plenitud, como un sediento que vaga por el desierto y encuentra un oasis, como quien camina sin rumbo por el mundo y consigue llegar a casa.

K: Buenos días- dijo somnolienta…- ¿Así que todo esto fue real? ¡Dios no quiero imaginar lo que estarás pensando de mí!!
R: Pienso que…eres preciosa, que eres fantástica…
K: Y que me voy a la cama con el primero que se me pone por delante- comentó con cierto temor.
R: No soy nadie para juzgarte.
K: Nunca antes había hecho algo así…- dijo apenada.
R: ¿En serio? Lo siento, ¿te hice daño?- lo menos que quería era hacerla sufrir más.
K: No…lo que quise decir es que nunca antes me había acostado con alguien a quien acababa de conocer…- los dos rieron- Tengo que irme…
R: ¡¡NO!!- chilló- Es decir, no hace falta…aunque claro, tendrás familia, estarán preocupados, hoy es Nochebuena…
K: No tengo a nadie Rick estoy sola, completamente sola- Rick notó como su voz se quebró y las lágrimas volvieron a mojar sus ojos.
R: Shhh, tranquila, ¿por eso llorabas anoche?
K: Mi padre murió era mi única familia y…murió hace cinco días…él y yo íbamos a pasar esta Navidad en Aspen esquiando…pero ahora él se ha ido y yo estoy sola.
R: Lo siento mucho- calló unos minutos y continúo- Yo sé que casi no nos conocemos pero, me gustas mucho y tengo algo que proponerte…
K: Tú dirás- respondió
R: Quédate aquí conmigo, pasemos la navidad juntos, yo…tampoco tengo a nadie, en casa de mi madre no se ha celebrado una cena de navidad desde 1969 - tomó aire y siguió- mis compañeros de trabajo son como mi familia pero este año…dos de ellos esperaban un bebé y…la niña murió, así que tampoco habrá fiesta en su casa, mi hija se ha ido a Europa con su madre y … yo siempre paso la navidad aquí, hasta hace unos años con mi abuela pero ella ya no está así que…estoy tan solo como tú.
K: Acepto- dijo sin pensarlo un segundo, Rick la besó y volvieron a perderse en sus cuerpos.

La mañana dejó paso a la tarde y ésta a la noche. Rick preparó una cena para los dos, hablaron, poniéndose al corriente cada uno del pasado del otro, pero sin mencionar el presente, y luego volvieron a la cama.
Paseos a caballo y otros de la mano a la luz de la luna, a orillas del lago donde se conocieron, siempre sin perder el contacto físico, se necesitaban de una manera que resultaba irracional.
Así pasaron la navidad nuestros dos desconocidos, sin árbol, ni adornos, ni regalos, ni grandes cenas, pero sintiéndose felices y completos por primera vez en mucho tiempo.

El uno de enero llegó demasiado rápidamente y tuvieron que separarse, volver a sus vidas, de las cuales no sabían demasiado, acordaron no llamarse, no buscarse, pero hicieron un pacto.

R: Prométeme que el próximo año vendrás aquí de nuevo…
K: Prometido Rick- se besaron una vez más y sellaron su acuerdo, volverían a verse en un año.

23 de diciembre de 2011

Rick había llegado al lago casi a media tarde, quería estar allí cuando ella apareciera. Había pasado un año sin poder sacarla de su cabeza, e incluso intentó buscarla pero sin un nombre, sabía que Becks no era su nombre, seguramente sería un apodo o un diminutivo, era imposible.
Las horas pasaban y ella no llegaba…era casi media noche cuando Rick se dio por vencido. Estaba claro que esto pasaría, una mujer como ella no iba a estar un año esperando por volver encontrarse con él.

Cogió un par de piedrecitas y cuando iba a lanzar una al lago una voz tras él le detuvo.

K: ¿Qué mal recuerdo ibas a alejar de ti este año Rick?
R: A ti- respondió sincero levantándose hasta quedar a su altura- Pensé que no vendrías- dijo y sin poder evitarlo más la besó con la intensidad del miedo a no volver a verla.
K: Yo siempre cumplo lo que prometo…- respondió cuando se separaron.
R: Fui un imbécil el año pasado Becks, no tendría que haber propuesto ese pacto estúpido, tendría que haberte preguntado tu nombre, tu teléfono y pedirte una cita, conocernos más, salir juntos….¡¡tal vez casarnos!!!
K: ¡¡Estás loco!!- exclamó- Yo también he sido una tonta…ven, vamos a tirar juntos algunas piedrecitas al lago…tú primero.
R: Ésta…porque casi pierdo a la mujer que me volvió loco.
K: Ésta por haberme enamorado de un desconocido- dijo sincera
R: Ésta por haberme enamorado de una desconocida- añadió en el mismo tono y le cogió la mano.
K: Y ésta por no tener ni un teléfono, ni un apellido, ni ninguna forma de…- respiró hondo y continúo- encontrar al padre de mi hija.
R: ¿El padre de tú…? ¿Yo?- ella asintió- ¿Estás segura?, lo siento, no quiero ofenderte…yo…
K: Lo entiendo Rick- le interrumpió- Pero ya te lo dije aquel día, nunca antes había hecho lo que hice contigo hace un año…y no volvió a pasar, mi hija, es tuya también…entendería que quisieras una prueba de paternidad pero te prometo que es tuya y te bastará con verla para aceptarlo, se parece a ti muchísimo.
R: ¡Pues llévame a conocer a mi hija Becks!!
K: Ven, te espera en el coche- de la mano caminaron hasta allí.

Kate abrió la puerta y él se acercó. En el asiento delantero, en un portabebés descubrió unos grandes ojos azules que le miraban con curiosidad.
R: Es preciosa...
K: Cielo, este señor es tu papá.
R: ¿Cómo se llama?
K: Ella nació en septiembre, y yo…decidí esperar hasta hoy para presentártela y que juntos le busquemos un nombre…si quieres…claro, no voy a pedirte nada, solo me parecía que tenías derecho a saber que tenías una hija.
R: ¿Qué te parece Kate?- preguntó ignorando su comentario, ¡¡claro que quería a la niña!!, es más, ¡¡las quería a las dos en su vida!!- Mi abuela se llamaba así, y la hija que perdieron mis amigos el año pasado también, pienso que puede ser un buen homenaje a ellas.
K: ¿Kate?- inquirió, no se lo podía creer- Me parece genial…Kate es un nombre precioso para ella yo…lo llevo desde que nací aunque no suelo usarlo.
R: ¿Te llamas Kate?- preguntó
K: Katherine Beckett , inspectora Katherine Beckett , de la policía de Nueva York- dijo tendiéndole la mano como la primera vez que se vieron, él sonrío-
R: Richard Castle, escritor y periodista del New York Leger- respondió estrechándosela y la acercó a él para besarla- Vamos a casa para que pueda coger a mi hija…
K: Vamos…una cosa Rick ¿qué va a pasar con nosotros? Quiero decir, en este año habrás conocido a alguien y ..
R: Me he pasado todo el año buscándote Kate, pero era imposible con tan poco…, todo este año he estado deseando que llegara diciembre, y eso es algo que no me pasaba desde que tenía 5 años…te quiero Katherine Beckett , desde que te vi por primera vez llorando sentada en ese lago…te quiero y me gustaría que lo intentáramos que fuéramos una familia, los tres…los cuatro, mi otra hija va a ponerse eufórica cuando se entere- dijo acariciando la mejilla de su hija pequeña- ¿Qué me dices? ¿Aceptas?
K: Acepto, ¡vayamos a casa Rick!- él volvió a besarla, para sellar su pacto, como un año atrás, pero con la certeza de que a partir de ahora, no iban a separarse.

Y así fue como, las de 2010 fueron la última navidad que Rick y Kate odiaron y las primera de muchas que pasaron juntos y amándose.

FIN!

oh me encanta tu historia impresionante

HERMOZO

PRECIOSO!!!!!

TE FELICITO!!!!!!!! ME HA ENCANTADO TU FIC!!

Mori de ternuraaaa

Vaya pero que tierno,que hermoso,es maravilloso y muy emotivo.
No sabria que mas decir,bueno si,enhorabuena por este fic

Pero que preciosidad de fic!!!! Y ademas ambientado en estas fechas y sin quitarle las caracteristicas de los personajes a ninguno de los dos, me refiero a que has mantenido las caracteristicas de Castle y de Beckett.

ME HA ENCANTADO!!!!

que preciosidad!!!!..me a encantadooooo te a kedao de cineeeee...


haz otro prontooo

Divino, dulce, romantico, todo junto.
Me gusto, felicitaciones

Enhorabuena y me quito el sombrero con este fic!!
Está muy bien redactado y porsupuesto es precioso!!
Muchísimas gracias por este hermoso y maravilloso (y me quedo corta) fic!!

¡¡ES GENIAL, GENIAL, GENIAL, GENIAL, GENIAL..............!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Me gusto muchoooo!!

Otra perspectiva de los personajes

Que bonito, es un one-short precioso.    

Me a gustado mucho