BONITO FIN DE SEMANA (4ª parte final)

TITULO: BONITO FIN DE SEMANA (4-ª parte)
ESCRITO POR: marypaz


Castle mientras iba caminando para encontrarse con Alexis, su cabeza no dejaba de pensar, qué podía ser tan importante, para que le pusiera un mensaje. Se alivió al recordar que la noche que estuvo en el bosquecillo, no era ella la que estaba merodeando por el lugar. Alivio por dos cuestiones bien diferentes, una saber que los monitores les vigilaban, y la otra era sin duda saber que aún le quedaba la esperanza que su hija, aún no había tenido ningún encuentro íntimo con ningún compañero. Claro que este detalle sólo lo podía imaginar, todo eran cábalas. En realidad se daba cuenta que se estaba resistiendo mucho, a aceptar que ya no era un niña, que el día menos pensado le presentaría a un chico, como su novio.
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Y al llegar aquí, no pudo por menos que recordar que hacía escasas horas, él, y Kate mantuvieron un apasionado encuentro. Y se dijo que su hija aunque le doliera saber que ya no era un bebé, también tenía derecho a ser feliz. Pero dolía, vaya si dolía saber que dentro de poco, ya no le pertenecería por completo como hasta ahora.
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La vio pasearse arriba y abajo delante de la cafetería, supo por la manera de moverse que estaba nerviosa y aceleró el paso
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C.- Me tienes preocupado hija, ¿Qué ocurre?
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Alexis, se abrazó a él fuertemente.
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Alexis.- Papá no sé cómo decírtelo.
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C.- Pues la mejor manera es rápido y conciso.
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Alexis.- Pues…mamá está de camino. Me ha llamado. Dice que tu móvil está apagado, quería decírtelo a ti personalmente, pero al no poder hacerlo me ha llamado a mí.
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El rostro de Castle sufrió un cambio radical. De la amable sonrisa, pasó a fruncir las cejas y un rictus en sus labios, denotaban su enfado.
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Antes de decir nada, pensó en qué palabras podía usar para no lastimar a Alexis. Pero no encontró ninguna. Porque lo primero que se le vino a la cabeza fue que en la cabaña estaba esperándole Kate. Y no era la inspectora de policía seria y comedida, era simplemente una mujer que le demostró su amor, y de qué manera…
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Alexis.- He intentado decirle que no viniera, que sólo contigo tenía suficiente. Lo de la entrega de los premios, tampoco era tan esencial que estuvieran el padre y la madre. Papá te aseguro que intenté decirle que no viniera. Lo que no me atreví a decirle, es que habías venido acompañado. Ella está convencida que estoy contigo y con la abuela.
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Castle la miró. Desde luego que su hija ya no era una niña pequeña. Se había dado cuenta enseguida de la situación anómala de Kate en todo este asunto.
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C.- Bien, hija, no te preocupes. Voy a llamarla y yo mismo se lo explico. Cuando le pedí que viniera, todo fueron excusas. Me gustaría saber a santo de qué este cambio tan repentino. Y bueno quiero que sepas que mi móvil no estaba apagado. O sea que ni intentó hablar conmigo.
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Alexis conocía a su padre lo suficiente, para saber que estaba verdaderamente furioso. Y le abrazó buscando protección y a su vez dándole a él, todo su apoyo.
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Llamó varias veces a su ex, pero no consiguió hablar con ella. Por lo que imaginaba que no tardaría mucho en llegar.
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C.- No te preocupes, cielo, todo tiene arreglo. Ahora mismo voy a hablar con la inspectora. Tranquila, que todo se solucionará.
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Cuando entró en la cabaña, Kate aún no se había vestido por completo, aún permanecía tumbada indolente en el sofá. En cuanto vio la cara de Castle, supo enseguida que algo iba mal.
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B- . ¿Le ha ocurrido algo a Alexis? –preguntó alarmada-
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C.- Por suerte ella está bien. A mí, me puede dar un infarto de un momento a otro.
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Y le contó todo, casi con las mismas palabras que lo hiciera su hija.
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C.- La conozco, es muy capaz de armar un buen jaleo, sin importarle que pueda dañar a Alexis, siempre ha obrado de esta manera, supongo que esto forma parte del motivo de nuestra separación.
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B.- Bueno no es tan grave…encuentro natural que quiera estar presente en la entrega de los premios.
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C.- Yo más bien diría que se le pasó en turno. Fue a la primera persona que llamé para que viniera. Y me dio mil excusas para no venir. Cambiar en el último momento de manera de pensar sólo se puede deber a una cosa. Le ha fallado el compañero de turno. Y eso me revienta, te lo aseguro.
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Kate le miraba mientras hablaba, y comprendió que su enfado era real, y desde luego motivos no le faltaban, pero ella no quería añadir más leña al fuego. Estuvo unos momentos callada, cuando por habló, lo hizo mientras se dirigía al dormitorio, y sin decir nada todavía empezó a preparar su maleta de equipaje.
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C.- ¿Qué haces?
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B.- Lo único sensato en esta situación. Salir de en medio. Soy yo, la que está en falso. Ella tiene todo el derecho a estar con su hija.
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C.- Sí, pero tuvo la oportunidad y nos rechazó a los dos. Ahora no tendría que aparecer por aquí. Es más, no quiero que se asome. No, después de lo ocurrido entre tú y yo hace pocas horas.
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Se acercó a ella, y le besó estrechándola entre sus brazos, casi la ahogaba. Kate no opuso resistencia, pero tampoco correspondió a la caricia. Se limitó a decir
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B.- Ha sido un bonito fin de semana, lo recordaré siempre como algo muy especial entre tú y yo.
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Castle aflojó el abrazo, separándola un poco de él, para poder mirarla a los ojos directamente.
C.- ¿Es lo único que se te ocurre decir?- preguntó enfadado-
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B.- Más bien diría que es lo único que puedo decir, bueno además de pedirte que me lleves a la estación de Bus más cercana, para poder volver a la ciudad. No quiero despedirme de Alexis, porque sé, que ella también lo debe estar pasando mal. Hazlo tú por mí.
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Y acabó de recoger todas sus cosas, poniéndolas en su pequeña bolsa de mano.
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Castle parecía que había perdido el don de la palabra. Le desarmó por completo la frase de Beckett. “Un bonito fin de semana” ¿Era eso lo que pensaba de lo ocurrido momentos antes?
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En cuanto salieron de la cabaña, uno de los coches aparcados, parecía que tenía intención de marcharse de allí. En aquellos momentos actuaba la detective, fría y concienzuda que era Kate Beckett. Pidió con amabilidad, si le importaba dejarla en algún sitio cerca del bus. La mujer que conducía, la miró un poco extrañada, pero le sonrió, ofreciéndose para llevarla hasta la ciudad, que era donde iba ella.
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Castle se quedó allí en medio del campamento, en el que cuando entró el día de ayer le pareció un lugar bonito y agradable, donde seguro pasarían unas horas alegres y distendidas. En estos momentos su percepción de lo que le rodeaba era completamente diferente. Obviamente su ánimo había cambiado por completo. Y en su cabeza las palabras de Kate diciendo que había sido “un bonito fin de semana”, le dolían como si en una herida echaran sal. ¿Eso había sido para ella? Como hombre de mundo comprendía que podía hablar el despecho, y la ira al tener que marcharse precipitadamente como lo hizo. Pero fue ella la que lo decidió, él, habría luchado para que se quedara. Y comprendió que Kate, ni le dio la oportunidad de hablar.
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En cuanto supo la situación, huyó de allí.
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La entrega de los premios, para Castle fue muy diferente a como la había imaginado. Pero para no desengañar a su hija, representó su papel de padre cariñoso y se sintió orgulloso cuando le entregó una orla con su nombre, y luego su madre le puso alrededor del cuerpo una banda con las iniciales de la escuela.
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La entrega se alargó mucho más de lo previsto, Castle no podía dejar de mirar su reloj. Quería salir cuanto de allí, necesitaba hablar con Kate.
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Estuvo contemplando desde lejos como Alexis y su madre mantenían una conversación. Probablemente estarían despidiéndose. No le interesaba lo más mínimo de qué estarían hablando., por lo que ni se acercó, quería que su ex supiera que estaba muy enojado con ella. Trató de sosegarse, pensando que al fin y al cabo, aunque le fastidiara, aún estaban unidos por algo muy importante, una hija en común, era motivo suficiente para no tirarse los trastos a la cabeza, no, por lo menos delante de la niña. La niña que ya no lo era tanto. Los años habían pasado casi sin darse cuenta y Alexis tenía ya el cuerpo y la mente de una persona adulta. Sabía que aunque estuviera con su madre, él, nunca la perdería.
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Y con esta idea, se fue hasta la cabaña para recoger todas sus cosas, después ya se podrían ir a casa, seguro que Alexis tendría muchas cosas para contar su abuela.
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Nada más entrar en la cabaña revivió las escenas al lado de Kate. Fueron unas horas de perfecto entendimiento a todos los niveles.
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Repasó cuidadosamente todo el recinto para asegurarse que no había quedado nada. En el dormitorio aunque él, ni lo hubiera pisado se aseguró que Kate no hubiera olvidado nada. En el baño encontró el pijama, lo tuvo entre sus manos lo acercó para olerlo. Le pareció como si la tuviera entre sus brazos.
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En cuanto hubiera dejado a Alexis en casa, iría a ver a Kate. Necesitaba hablar con ella. Quería que comprendiera que aunque hubiera vuelto su ex, eso no tenía nada que ver con él. Sólo era en consideración a su hija. Ese vínculo no podía ni quería romperlo.
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En el trayecto de regreso, Alexis se puso a su lado, parecía muy absorta en sus pensamientos, y a Castle no le pareció demasiado alegre tras haber conseguido el premio. Por unos momentos dudó en si respetar aquel silencio, o indagar qué había hablado con su madre, porque sabía perfectamente que aquel silencio se debía a la conversación que tuvieron ellas dos
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C.- Bueno, ya se acabó la entrega de premios, ha sido muy emotiva para todos los padres – dijo en un intento que cortar el silencio –
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Alexis.- Sí, mamá se ha disculpado por no haber aceptado cuando la llamaste, para que viniera.
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C.- Ya, era lo menos que podía hacer. No se puede ir por la vida haciendo y deshaciendo a su antojo las cosas. Cuando se da la palabra, hay que cumplir con lo establecido.- No podía reprimir su enfado ni delante de su hija-
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Alexis.- Papá… estás enfadado y con razón, te comprendo. Además la inspectora Beckett, estoy segura que tuvo que pasarlo mal. Deberías ir a su casa y hablar con ella. Creo que es lo menos que le debemos.
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Castle movió la cabeza asintiendo. Y por si tenía alguna duda de que su hija ya no era una niña pequeña, aquello lo acabó de aclarar.
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Cuando llegó a la casa de Beckett, por unos momentos dudó en llamar. No sabía qué palabras usar, porque comprendía que ella debía sentirse mal con todo lo sucedido. Llevaba doblado cuidadosamente y dentro de una bolsa, el pijama.
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Y pensó que por allí tenía una excusa para empezar la conversación. Prestó atención, y desde donde estaba se oían perfectamente unas voces. Kate no estaba sola, y de pronto pensó que quizás estuviera acompañada por algún amigo. Pero bueno, hizo acopio de voluntad y llamó presionando el timbre.
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Kate apareció ante él, con la misma ropa que llevaba puesta al salir del Campamento. Con la mirada buscó a alguien más, pero a simple vista el apartamento estaba vacío.
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C.- ¿Puedo pasar?- Preguntó no sin cierto temor a un rechazo.-
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B.- Sí, claro
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C.- ¿Estás acompañada?
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B.- Sí
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A Castle le pareció como cuando en los dibujos animados, los protagonistas se golpean con una pala, y quedan hundidos en el asfalto. Igual se sentía él.
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C.- Vale, ya hablaremos en otro momento, te olvidaste esto – dijo completamente frustrado, mientras la entregaba la bolsa con el pijama.- Si estás con alguien…
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B.- No creo que tenga ningún inconveniente en que hablemos, si es que has venido a eso.
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Y contenido las ganas de reír, señaló la televisión que estaba encendida
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Castle sintió como si un soplo de aire fresco hubiera entrado. Dio un paso y oyó cerrarse la puerta detrás de él.
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C.- ¿Entonces estás sola? – y al ver que ella movía la cabeza afirmando, no se contuvo por más tiempo.
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La acercó tomándola por los brazos, hasta tenerla muy junto a él.
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C.- Yo he venido entre otras cosas porque necesitaba hablar contigo de todo lo sucedido esta mañana. No me diste tiempo a que intentara solucionar el problema con Meredith.
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B.- Alexis merecía tener a su madre a su lado en aquellos momentos. Fue lo primero que pensé, después en ti, y comprendí que la única que sobraba, era yo.
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C.- No digas eso. Tú en mi vida nunca estarás de sobra. Quiero que esto te quede muy claro. Y además has de saber, que mi hija me pidió que viniera a verte. Ella también se ha sentido muy mal, con todo lo sucedido.
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B.- ¡Pobre Alexis! Ya hablaré con ella, no quiero que lo pase mal por mi culpa
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C.- Me parece muy bien. Pero ahora soy yo el que necesita algo que borre las palabras que dijiste “Un bonito fin de semana”, me sonó mucho peor que una bofetada,
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B.- Lo imagino, pero era lo único que podía decirte, para que aceptaras aunque fuera de mala gana a la madre de Alexis.
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Castle se quedó quieto con la mirada fija en la detective.
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C.- ¿Sabes una cosa? Las mujeres nos dais lecciones casi siempre. Tú usaste conmigo la única estratagema que sabías que me iba a doler de verdad, obligándome a salir al encuentro de mi ex, aunque fuera de mal humor y cargado de resentimientos contra ella, tus palabras como dichas al azar, fueron un verdadero golpe bajo, y tú lo sabías.
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B.- Claro, no en vano llevo muchos interrogatorios, y sé dónde se puede atacar a una persona.
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C.- O sea que lo hiciste para facilitarme que aceptara su presencia aunque no fuera de mi agrado. Necesito oír de tu boca, que este fin de semana, no fue solamente bonito. Que hubo algo muy especial.
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B.- Por favor…no hagas que me sonroje. Ya sabes lo que me hiciste sentir en aquellos momentos.
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C.- Pero necesito escucharlo, como si fuera la declaración de un reo. Jurando con la mano levantada, si es necesario.
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Cuando Kate le oyó hablar de esta manera, ya supo que volvía a ser el Castle de siempre, el escritor divertido y protector que ella conocía. Al Castle de la cabaña se podría decir que lo descubrió hacía tan solo unas horas.
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Lo arrastró hasta el sofá, y dejó muda la televisión. Se sentó y tirando de la mano, lo obligó a que se quedara a su lado, sus cuerpos muy juntos, igual que lo estuvieron en la cabaña del Campamento.
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B.- Podemos reanudar lo que empezamos, como si las últimas horas no hubieran sucedido. ¿Estás de acuerdo?
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No le hizo falta ninguna respuesta.
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Castle en aquellos momentos volvía a ser el escritor famoso, el que sabía muy bien por dónde empezar un asedio a una mujer. Aunque supiera que ella era diferente a todas las que había tratado, que no eran pocas, nunca se resistían a aquellas caricias, hechas con suavidad, recorriendo su cuerpo como lo haría un explorador en busca de un tesoro. Él, pretendía nada menos que encontrar la felicidad para ellos dos.

FIN
Agosto 2011

Menos mal que todo era un truco de ella,buen final con los 2 bien juntitos jajaja.
Otro maravilloso fic Marypaz,enhorabuena y a ver si te vemos pronto con otro sorprendente fic
PD: me has das dado una idea y espero poder empezarlo pronto jeje

Felicitaciones marypaz!!!
Que claro tiene todo Kate, es una genia!!!!!!!!!!!!
Muy buen capitulo, me gusto mucho

me gusta mucho el capitulo

fenomenal capitulo



escribes de lujoo




gracias por la historia

Me gusta muchísimo. A ver si nos sorprendes con otro fic como este.

FELICIDADES

Muy buen trabajo! enhorabuena, te ha quedado genial!

maravillosooooooooooooo

Que buen final!!!
Menos mal que las palabras de ella en cierta manera era para ayudarlo a él!
Me encanto =)

silvanalino escribió:Felicitaciones marypaz!!!
Que claro tiene todo Kate, es una genia!!!!!!!!!!!!
Muy buen capitulo, me gusto mucho

Me alegra muchisimo que te haya gustado, de eso se trataba.....

"...y en cuanto a subir otro fic, de momento no tengo nada en la cabeza, y quizás espere a ver qué ocurre en la 4ª temporada. Aunque nunca se sabe, igual me da un arranque de esos raros, y empiezo otro... a mi aire"[/quote]

---

Marypaz, en relación a tu comentario sólo puedo (y quiero ) pensar que la inspiración te volverá en un abrir y cerrar de ojos, por suerte en nada comenzarán los spoilers, sneak peaks, fotos, filtraciones, etc. de Castle y, con seguridad, nos sorprendes con otro fic.
Por otro lado, me rindo nuevamente a tu creatividad, me postro a tus pies en espera de otro MARAVILLOSO, GENIAL, ESTUPENDO, FANTÁSTICO, SORPRENDENTE, ALUCINANTE...fic.

PD: Si no te has dado cuenta ya he comenzado a hacerte la ola

Bonito fin de semana y bonito fic. ¿Que digo? Fantástico fic

Sara Castle escribió:"...y en cuanto a subir otro fic, de momento no tengo nada en la cabeza, y quizás espere a ver qué ocurre en la 4ª temporada. Aunque nunca se sabe, igual me da un arranque de esos raros, y empiezo otro... a mi aire"

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Marypaz, en relación a tu comentario sólo puedo (y quiero ) pensar que la inspiración te volverá en un abrir y cerrar de ojos, por suerte en nada comenzarán los spoilers, sneak peaks, fotos, filtraciones, etc. de Castle y, con seguridad, nos sorprendes con otro fic.
Por otro lado, me rindo nuevamente a tu creatividad, me postro a tus pies en espera de otro MARAVILLOSO, GENIAL, ESTUPENDO, FANTÁSTICO, SORPRENDENTE, ALUCINANTE...fic.

PD: Si no te has dado cuenta ya he comenzado a hacerte la ola [/quote]
se me nota??? se me han subido los colores. GRACIAS, GRACIAS y referente a otro fic nunca digo NUNCA JAMAS, QUIEN SABE!!!! pero de momento estoy en el dique seco. ?Te he dado las gracias??? Un saludito cariñoso

qwerty escribió:Bonito fin de semana y bonito fic. ¿Que digo? Fantástico fic

De verdad que es un gran alivio ver que os van gustado los fics... Gracias, gracias!!!!!

me ha encantado!!!!
espero que hagas otro!!!!

kate_beckett escribió:me ha encantado!!!!
espero que hagas otro!!!!

Tendré que invocar a las musas para que me ayuden...de momento no se me ocurre nada interesante

me ha encantado

Preciosa história y Kate genial.