Sueño Adolescente

Bueno, esto es lo que salió de una noche de inspiración. Espero que les guste. Se me ocurrió cuando escuchaba la canción "Teenage Dream" de Kate Perry (en verdad, cantada por los Warblers de Glee =P)... Espero que les guste!!!!

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Sueño Adolescente


Hacía días que Beckett y Castle no se miraban de igual manera. Algo había sucedido unos días atrás que hizo que ahora todo sea tan… extraño. Extraño, pero realmente lindo.

Habían logrado cerrar un caso difícil en un día lluvioso. Habían terminado los dos empapados, y cuando Beckett llevó a Castle a su casa él la miró con una sonrisa pícara y la invitó a pasar.

- Vamos Beckett, no puedes ir hasta tu casa así. Estás completamente mojada y aún te faltan 40 minutos de viaje. No te hará bien.

- Castle, tú no eres quien para determinar que me hará o no bien. Buenas noches.

- Beckett… No lo diré dos veces, subes ya mismo o si no soy hombre muerto… Y no justamente por ti, sino porque mi madre y mi hija me matarán por no haberte hecho subir a secarte. – Insistió mirándola con cara de perro mojado.

- Bueno, está bien… Pero solo lo haré por ellas. No te creas que eres tan importante.- lo miró con la mejor cara de póquer que le salía, aunque por dentro se derretía, como siempre que la miraba con esa carita de niño bueno.

Cuando subieron al loft de Castle se dio cuenta que no había nadie allí. Castle la había engañado.

- ¡Me mentiste! ¡Me dijiste que estaría tu madre y Alexis!- estaba notablemente enfadada, con la cara llena de rabia. Aunque a decir verdad le encantaba la idea de estar a solas con él. “Por Dios, Kate cálmate!!!” se repetía una y otra vez en su interior.

- Kate ¡por favor! Ya estás aquí, y mira cada vez más fuerte está lloviendo. Por favor, un baño te hará bien, y… - la observó dudoso antes de decir lo siguiente- y te puedo preparar el cuarto de invitados y te podrías quedar a la noche. Realmente te haría bien.

- ¡Castle! Una vez más te digo que no digas que es o no bueno para mí… - iba a seguir hablando pero en ese momento estornudó, lo que conllevó a Richard insistirle el doble a que se quedara.

- ¡Está bien! No insistas más. Pero solo un baño para entrar en calor y luego me iré!- así logro dejar contento a Castle y a su cuerpo. Realmente necesitaba un baño caliente de manera urgente.

- Ya vengo, ponte cómoda. Te voy a preparar el baño- y salió disparado escaleras arriba.

Kate se dejó caer en el sillón del loft. Miró alrededor del loft, nunca lo había visto con tanto detalle como aquella noche. Se quedó mirando un cuadro que había en una de las paredes, bueno, mirando, una manera de decir, ya que lo único que hacía era pensar en Castle. Allí estaba ella, esperando que él, su gran amor aunque nunca lo iba a aceptar, le preparara el baño. Nunca iba a aceptar que estaba perdidamente enamorada de Richard Castle. Cómo lo iba a hacer si vivían peleándose con él, bueno, ella enojándose y él poniéndola nerviosa. Pero luego lo veía en esa faceta de padre, de hermano, de amigo preocupado y se le derretía el corazón. Le encantaría quedarse allí toda la noche, todas las noches. Pero no, sabía que no debía ser así, que terminaría sufriendo como le sucedía generalmente cuando estaba con alguien. No, definitivamente no quería volver a sufrir, pero él… él tenía algo especial.
Castle apareció por la escalera, bajó suavemente porque la vio muy ensimismada en sus pensamientos y no la quiso molestar. A decir verdad, estaba completamente embobado mirándola, lo hermosa que ella se encontraba en el sillón pensando y mirando la nada misma. De repente se dio cuenta que tendría que estar teniendo frio, y si no se bañaba rápido se iba a enfermar.

- Kate… - la llamó suavemente. Ella sintió un escalofrío al igual que cada vez que él la llamaba por su nombre- ya está el baño preparado. Cuando quieras, aunque cuanto antes mejor…

- Ya voy- dijo sonriéndole y caminando hacia él. Ya había pensado, se tomaría el baño, se cambiaría y se iría a su casa. Si si, definitivamente así sería el resto de su noche.

Subió la escalera y entró al cuarto de baño. Cuando ingresó se encontró con una decoración que pocas veces hubiera esperado de un hombre, aunque sabía que era digno de Castle. Le había colocado velas aromáticas alrededor de la bañera y preparado un baño de espumas.

- Cuando te quites la ropa dámela así la pongo a secar- gritó Rick desde el pasillo. Kate no se, negó y le hizo caso. Castle le había dejado bien doblada una camisa de él y un pantalón de pijama para que use hasta que su ropa se seque completamente.

Una vez lista, bajo a la sala de estar y se encontró con un Castle cocinero. Dos platos en y dos copas de vino descansaban en la mesa. Al verlo lo único que atinó a hacer fue sonreir. Realmente estaba enamorada de ese hombre.

- Te ves hermosa así, sin maquillaje y 100% natural- le dijo al verla bajar.

- Ten cuidado Castle, aún tengo una pistola- amenazó sonriendo

- Y eres muy buena contando chistes- le guiñó un ojo al estilo Rick- siéntate, la comida ya está lista, sólo faltaba la agasajada.

En su cabeza se maldijo por haberse sentado, ¿no era que se bañaba e iba a su casa? “Tarde Kate ya estás aquí… Ahora sólo relaja y disfruta por primera vez en años”

- Para usted señora detective, aquí un rico pollo a la mostaza made in Castlelandia y un buen vino argentino- dijo sirviéndole

- Muchas gracias señor chef.

Estuvieron toda la cena charlando y riendo como viejos amigos. Así fueron pasando uno, dos hasta tres botellas de vino. Kate pensó “Al diablo, mañana es mi día libre”.

- Señorita- dijo Castle acercándose a ella y estirándole la mano como un caballero- la invito al sillón a ver la película que usted desee. De esa manera fueron los dos hasta el sillón y no lograron a sentarse dado que se cayeron a causa del alcohol que tenían en sangre. Ella quedó encima de él muy cerca, tanto que podían sentir la respiración del otro.

La cabeza de ella funcionaba demasiado rápido, hacía tres años que lo conocía, tres años que cada día se enamoraba más de él. Antes de que él apareciera no le encontraba sentido a su vida, y menos aún con el trabajo que realizaba. Desde la pérdida de su madre que había levantado un muro a los sentimientos y así había pensado tenerlos para siempre. Hasta aquel 9 de marzo, todavía no podía creer que se acordaba con tanta exactitud la fecha cuando ella era patética para recordar esas cosas, hasta aquel día que él apareció. Desde ese entonces rogaba poder pasar algún día de san Valentín con él. Él le devolvió la vida, le hizo recordar qué era vivir, y lo bueno que eso era. Y ahora allí estaba, a escasos centímetros de él, sintiendo su aliento, su respiración. Y no lo pensó dos veces. Se acercó más a él y lo besó.

Castle se sorprendió al comienzo, pero enseguida reaccionó. Estuvieron besándose suavemente, luego el beso cobró intensidad. Un beso recargado de amor. Se separaron un segundo, y enseguida lo comprendieron. Entendieron el amor que se tenían mutuamente. En ninguna de esas miradas había arrepentimiento, solo amor. Enseguida se fundieron en un beso más apasionado.

Kate se sentía como una adolescente. No podía creer aún que estaba besando al hombre de sus sueños. Pero también sabía que era a causa del alcohol que tenía en la sangre. No importaba, mañana sería otro día, esa noche quería ser ella misma, sentirse como una adolescente, vivir un sueño adolescente, él la hacía sentir una adolescente. Quería huir con él y no volver a ver atrás. Esos años de sufrimiento, los quería olvidar por completo, no ver nunca más atrás.

A medida que los besos cobraban intensidad, también lo hacían sus manos. Al principio caricias suaves, luego luchas desenfrenadas con la ropa para poder sentir sus pieles. Cada roce, cada caricia que Beckett sentía por parte de Castle le hacía detener el corazón. Aún no podía creer que sea realidad. Hasta que en un momento se separaron, Rick le acarició la mejilla, y ella se dio cuenta que era demasiado real, y no un simple sueño.

- Aprovecha la oportunidad Rick- le dijo en un breve suspiro.

Castle al escuchar eso de la boca de su amada, se sumergió una vez más en ella. Le terminó de quitar la ropa y vivieron juntos un sueño adolescente.

Cada vez que él la miraba su corazón se detenía. Vivieron una noche intensa, pero era SU noche, la noche en la que volvieron a ser dos adolescentes. La noche en la que la vida de Rick y Kate cambiaron por completo. La noche en que aprovecharon la oportunidad y no volvieron a ver atrás. La noche en que dejaron todos los sufrimientos pasados para ver un futuro diferente, un futuro en el que estaban juntos.

OHHHHH me ha encantaaadooo siguelo prontiito plisss no nos dejes a mediasss por la salud de todas las que estamos aqui sufriendo por Castle y Beckett XDXd

¡¡¡oooohhhhh!!! que bonito te ha quedado!!

me ha encantado!!!!!!!!

WOW...tengo un escalofrio recoriendo todo mi cuerpo...con eso del sueño adolescente i lo de "aprovecha la oportunidad" has acabado con mi vida....ademas lo he leido esuchando la cancion i JODER!!! mencanta!!!! es genial!!!! lo vas a seguir verdad?¿?¿?(i al final se tienen que fugar!!!!xd)

OOoooooOOOooo me encanta!!!! sueños de adolescente..o noche de adolescente? jeje me encanta! que pena que no tengas la inspiracion mas a menudo!

Que lindo me ha gustado mucho, Te ha quedado genial

Nuevo atacazo artístico (haciendo referencia a Art Attack xD)... Y les dejo lo que salió. Nuevamente escuchando música me surgió esto, en este caso "Just the way you are" de Bruno Mars. Espero que les guste!!! Eso si quedó corto a comparación del anterior, pero bueno...
Dedicado a Nikki Heat, rakel, casbeck2, kate&castle! y solesan. Por haber leído el anterior e insistir que escriba jajaja. Supongo que de ahora en más si escribo serán one-shots, locuras momentaneas!

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Algunos rayos de luz de la luna entraban humildemente por la ventana y se reflejaban en su cara. Él no hacía otra cosa que mirarla, aún no podía creer lo que había sucedido rato antes. Tanto imaginarlo y tan simple sucedió, “mejor de lo que me imaginaba” atinó a pensar y una amplia sonrisa se dibujo en su rostro.

Seguía mirándola, recorrió cada sector de su cara, desde su cabello hasta el cuello desnudo de ella. Sus ojos eran tan brillantes que las estrellas no tenían nada que envidiarle. “Es tan hermosa” volvió a pensar, siempre lo había pensado a decir verdad, pero pocas veces se atrevía a decírselo. Pero luego de lo sucedido previamente no dudaría dos veces a repetírselo una y otra vez todos los días de su vida. Sabe que ella pensará que se lo dice sólo porque la quiere y porque es su gran amor, el amor de su vida, pero es así. No me importa lo que piense, aunque se enojará y pondrá triste por ver cómo piensa ella de sí misma, pero él siempre estará ahí para elogiarla y decirle hermosas palabras cuando ella pregunte “¿Cómo me veo?”.

Una vez más recorre el rostro de ella, no se cansa de observarlo, lo bello que es. Realmente cada vez que lo observa, ve lo perfecta que es, y no se imagina cambiando ninguna parte física ni sentimental de ella. Es perfecta, asombrosa, es simplemente ella, Kate Beckett y eso es lo que lo enamora cada día más y más.

De repente ella se gira más hacía él y sonríe. No se despierta en ningún momento, sólo sonríe. “Con qué o quién estarás soñando, amor” dice él, lo suficientemente bajo como para no despertarla. Le encanta verla dormir, y sonreír por sobre todas las cosas. Cada vez que ve esa sonrisa el mundo a su alrededor se paraliza, se queda perdido en ella. Y esos labios, podría besarlos todo el día, claro, si ella fuese más permisible en el trabajo.

“Eres hermosa” no puede dejar de pensar en ningún momento. Lo último que haría en su vida sería pedirle que cambie, es perfecta así como es. Con sus enojos, sus sonrisas, sus llantos, sus locuras, es simplemente perfecta. Y él sabe que siempre se lo dirá, por más que ella no lo acepte, por más que ella lo niegue, siempre le dirá que está y es perfecta, porque así es como él la ve, así es como él la quiere. Definitivamente ella era mejor que la mujer de sus sueños, “ella es real” pensaba.

Mientras él se encontraba absorto en sus pensamiento no se dio cuenta que ella había despertado y lo miraba con esa sonrisa que a él lo volvía loco. Se acercó suavemente y lo besó con ternura, era de la única manera que ella podría confirmar que lo que había sucedido era real. Cuando se separaron ella se acostó sobre su pecho y lo miró directo a los ojos. Esos ojos azules que enamoran a cualquier mujer, imaginaba que se adentraba al mar, a un mar que le encantaba entrar y difícilmente salir.

“Rick, cariño, ¿qué piensas?”

“En ti y en lo asombrosa que eres. Por favor Kate, nunca cambies”

“No lo haré. Te amo, ¿lo sabes cierto?”

“Y yo a ti amor”

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Gracias por compartir tus ideas

que preciosidad!! la segunda parte me ha estado recordando a 'Just the way you are' de Bruno Mars todo el rato gracias por escribir el fic!

que bonito por favor!!! cuanto amor!! me ha encantado, gracias por compartirlo!!!!!

GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS

oHHhHhhHhHHh OhHhHHhHHhhH



estupendoOOoOoOooOoOOoOo


graciassssssssss por subir capiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii xDDDDDDDDDDDDD

Es precioso

P-R-E-C-I-O-S-O me encanta!! aunque algo cortito es...

Muchiiisimas graaaciaaass porr la dedicatoriaaa me ha encantaaadoo xDxD Que momento tan bonito has elegidooooo para ponernos eress increiibleee Gracias de nuevooo por la dedicatoriia y porfiii no te canses de hacer mas ficcss jejejej

¡Que bonito te ha quedado! Además me encanta Bruno Mars...

TE JURO QUE MORI!!!! ME ENCANTO MUY LINDO