Y si todo fuera diferente...

Pues aquí estoy aventurandome en un fic algo distinto...
Pongamos que Beckett es una chica adolescente un tanto tímida y Castle un chico promesa que va ha publicar su primera novela... así lo que se llama un UA (Universe Alternative)
Soy una adolescente, y que mejor que escribir de ello ¿No?
Pues espero que os guste, si veis algo mal, no dudeis en decirmelo, las críticas son constructivas, y ya habiso por aquí cuando este en época de examenes y simplemente mi inspiración se valla de vacaciones, mi fic avanzará lentamente
Ale! Pues aquí os lo dejo

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Capítulo 1.

Me llamo Kate Beckett, tengo 17 años y se podría decir que soy una chica neoyorquina de lo más corriente. Vivo en un pisito del centro de Brooklyn con mis padres, y la verdad es que los quiero mucho.
Como todos los adolescentes de mi edad, cada día (desgraciadamente) tengo que ir al instituto del barrio. Y allí no encajo del todo bien. Aunque en el fondo soy una rebelde que incluso se ha hecho un piercing sin que sus padres lo sepan, al exterior solo muestro mi capa tímida de niña buena. Como dice mi amiga Emily, voy desbordando pureza por cada poro de mi cuerpo... y en el fondo tiene razón, con 17 años que tengo, todavía ni siquiera he besado nunca ha un chico...

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Kate Beckett, como cada miércoles a cuarta hora, con tantos libros en las manos que casi no podía ver por encima de ellos, se dirigía a toda prisa a su clase de Literatura universal. Llegaba tarde. La tonta de Emily la había entretenido con sus empalagosas historias con su novio, y ella, como buena amiga que era, tenía que hacer que le interesaba muchísimo, y que escuchaba atentamente los detalles de la cita del Sábado por la noche.
Y en el momento en el que Kate estaba absorta en sus pensamientos, un violento choque y sus libros desparramados por el suelo la devolvieron a la realidad. Y unos preciosos ojos azules la dejaron sin palabras.
- Lo siento mucho, yo... no te he visto-
Las mejillas de ella se colorearon rápidamente.
El chico de ojos azules la miró durante un instante, e insistiendo en disculparse el recogió los libros de Kate y se los devolvió con una gran sonrisa. Lo que ninguno de los dos sabía era que aquello sería algo importante.
Kate, tras recuperarse de su atontamiento, siguió su camino hacia literatura universal, adentrándose en el edificio D...

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Richard Alexander Roger estaba en uno de los muchos institutos de New York. Aquella señora con la que había hablado le había citado allí para poder hablar de la publicación de su primer libro. Estaba nervioso. Nunca se había atrevido a enseñar lo que escribía a nadie, y después de la charla con la editora, estaba más que nervioso. Le había dicho que había borrador y que le esperaba un brillante futuro por delante... más de lo que él jamás se imaginaría...
Y de repente una muchacha se chocó con él. Se la quedó mirando, era preciosa la verdad, tenía unos ojos verdes, que se tornaban ligeramente marrones y una dulce expresión en la cara. Sin dejar de mirarla, recogió los libros que se habían caído, y se los dio a la preciosa chica con una gran sonrisa que ella devolvió con una adorable mueca. Y ella, a toda prisa siguió su camino.

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Qué tal?

Muuyy bueeenoo!! Sigueelo

por favor por favor continua esto me gusta muy original tu historia

Genial comienzo! Seguilo seguilo!!!

como molaaaaa sigueeee

Pues aquí os dejo el capítulo 2...
Estoy actualizando rápido, no me lo creo ni yo xD Bueno, espero que os guste el capítulo y esas cosas
Gracias por los que comentais o simplemente leeis

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Capítulo 2


Hacía tres semanas desde que Kate Beckett se había chocado con un impresionante chico de ojos azules. Hacía dos semanas desde que ese suceso se había borrado de su mente.
Emily parloteaba incansablemente de su encuentro con su novio del fin de semana. Al parecer el chico se había presentado con un precioso ramo de rosas en su puerta y la había dicho lo mucho que la quería. Katie la miraba fijamente y asentía mientras pensaba en el examen de historia que tenía dentro de unos minutos. Y en ese momento Emily se calló, y con un tono divertido empezó a decir:
- Mira, mira Katie, el tio buenorro que va andando por ese pasillo-
Y la última persona que esperaba encontrar ella, estaba allí. Ese chico de los ojos azules del otro día, ese que le había regalado una hermosa sonrisa a la que solo había sido capa de contestar con una mueca, estaba allí. Vestido con una cazada de cuero y unas gafas de aviador, se paseaba con el instituto con un gran sobre en la mano y unos aires chulescos.
Kate, sin saber que decir, se quedó embobada hasta que su charlatana amiga la despertó:
- ¿Hola? ¡Llamando al planeta de Kate Beckett! Te he dicho que miraras, no te lo comieras desde lejos-
- Esto, ehhh, ¿Perdona? ¿Qué decías Em? –
Emily estalló en una carcajada y miró a su amiga
-¡Ay! Con lo modosita que tu eres. Bueno me voy que llego tarde a matemáticas. Te veo a la salida-
-Okey Em, luego nos vemos, me voy ya que tengo examen de historia –
Y Kate Beckett salió corriendo hacia el examen si quitase de la cabeza al chico misterioso de los ojos azules...

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Richard Rogers iba camino de la oficina de su editora (que resultó ser la directora de aquel instituto) pensando en un nuevo nombre artístico tal como le había dicho ella. Llevaba su manuscrito acabado bajo el brazo para darle el visto bueno, y le faltaba firmarlo con su nuevo nombre. Tenía en mente varios, pero el que más le gustaba sin duda era Castle. Richard Castle... sonaba a hombre afamado.
Más que perdido por el instituto, consiguió encontrar el despacho de su editora. Tenía todas las esperanzas en esa reunión...

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La joven Beckett corría por el edificio D del instituto. Había salido tarde del examen de historia, que por cierto le había salido perfecto, y tenía que llegar al edificio A lo antes posible. Le tocaba clase de Griego, y su profesora era demasiado borde como para dejarla entrar si llegaba más tarde.
Y en ese momento le vio, con una gran sonrisa en la cara y la chaqueta de cuero en la mano, totalmente perdido por el instituto. Kate, rápidamente se dio la vuelta hasta que un grito reclamó su atención:
-¡Eh! Chica, espera un momento –
Lo que no esperaba Rick es que aquella chica fuera la preciosa muchacha con la que se choco el último día.
-Hola, una pregunta ¿Sabes donde está la clase 345? Es que no la encuentro –
-Si... esto... si, claro que se donde está, pero te has equivocado de edificio, si quieres te puedo acompañar –
El la miró durante un instante.
-Esto... Creo que nos conocemos ¿Verdad? –
Kate enmudeció.
-Si, si, nos chocamos el otro día, o eso creo... –
Castle rió.
-Si, bueno, pues no nos hemos presenado. Me llamo Rick Roge... Rick Castle –
-Encantada de conocerte, Rick. Yo me llamo Kate Beckett –
-Encantado de conocerte también. Pues Kate Beckett, tienes unos ojos preciosos –
En ese momento la faceta más clara de chica tímida de Katie salió a la luz, y no fue capaz de hacer otra cosa que una extraña mueca con los labios. Subió la cabeza, y se quedó mirando los ojos de Richard...
-Esto.. la clase, la clase 345, ven sígueme –
Los dos echaron a caminar hacia el aula. A mitad del camino, Castle comenzó ha hablar.
-¿Sabes? Esto parece cosa del destino, ya sabes que nos hayamos vuelto a encontrar...-
Kate le miró divertida
-¿Destino? Buah... eso no son más que tonterías...
Y en ese instante, llegaron a la clase
-Esto... bueno, esta es la clase. Me voy ya que mi profesora de Griego me va ha cortar en cachitos, y luego los va ha quemar por llegar tarde.-
-Pues, espero volverte a ver Kate Beckett...-
Y ella medio riendo contestó
-Si, si el destino quiere ¿No?...

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Os gusta?

me ha encantado ya se la quiere ligar gracias por subir capi continua pronto

ke bonitooooo

siguee

Wooo!!! me gusto, es interesante como has planteado la historia espero la continuación

que lindo

WOW casi nunca me han gustado este tipo de historias pero te has lucido continua!!!!

me lo lei y me gusto mucho sigue

Siguee

Heyy(: escribes muy bien siguelo...