El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
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El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
hola!!! ya tenia ganas de escribir otro fic (que desde el verano...). pero tenia ideas de diferentes escenas, ninguna historia formada... asi que me lo propuse para el 2011 y... voilá!!
el fic se llama El Nuevo Mandamiento y tendra... capitulos indefinidos aun. ni idea. y principalmente queria que fuese mas menos un capitulo mas de Castle, la misma estructura...
por cierto, no tienen ninguna relacion con el primer fic que escribi, asi que no hace falta que lo leais (si quereis, yo ecantadisima de la vida!!!)
espero que os guste!!!
CAPITULO 1 - ¿Heat o Beckett?
El Sr. Thomson tenia muchos motivos para ir deprisa aquella mañana. Las ventas habian bajado desde que ese amigote suyo empezo a trabajar con ellos, y se sentia culpable. Ademas, a su jefe no le caia muy bien, que se dijese. Estaba seguro de que a la minima le despidiria. Asi que, mas valia darse prisa para no pillar el atasco de las 8 en el centro.
Eran las 6:45 cuando cerro la puerta de su casa. Caminó por el camino de piedra de su jardín, con cuidado de no resbalar con las placas de hielo que se habian formado aquella noche. De pronto se paro en seco. Sintio que su corazon se paraba... cuando vio a uno de sus queridisimos gnomos de jardín hechos a mano recubierto de escarcha por todas partes.
- Oh, Henry... – exclamo, agachándose a mirar al gnomo.
“No, Joshua”, se reprimio a si mismo. Debia darse prisa. Camino de nuevo a paso rapido hacia el garaje, pero vio un coche aparcado justo en frente de la puerta, otro coche que no era el suyo.
- Ya estamos otra vez... – susurro el Sr. Thomson. Ya estaban sus vecinos tocando las narices, como siempre.
¿Y ahora que podia hacer? Esta claro que, a menos que su coche pudiese transpasar objetos, no iba a conseguir sacarlo de ahí.
Se acerco un poco mas al coche. Este estaba aparcado de mala manera, como si se hubiese parado un segundo y no lo hubiesen vuelto a arrancar.
Con los rayos del sol naciente, pudo ver una sombra en el interior del coche. Se acerco algo mas y vio que era la Sra. Marshall, como no, su vecina. Su cabeza estaba apoyada contra el volante, como si estuviese dormida. El coche tenia las llaves puestas y todas las cosas de su trabajo estaban en el asiento del copiloto.
- Sra. Marshall – la llamo, dando unos golpecitos al cristal de la ventana. No obtuvo respuesta. – ¡Sra. Marshall!
Nada. Estaba a punto de entrar en su coche a la fuerza, hasta que vio una mancha impropia en su camisa gris. Si, era una mancha oscura, rara en una camisa lisa. Se acerco un poco mas a la ventanilla, alzando sus gafas... Su abdomen estaba cubierto de sangre...
**********************************************************************
<< El sospechoso se habia largado. Otra vez. Ya era la segunda vez en aquel dia, y con el mismo tipo. Esto se les escapaba de las manos.
La detective habia corrido en su busca, mientras su fiel socio le pisaba los talones y sus dos compañeros les guardaban las espaldas desde el coche.
Pero nada, el tipo se habia esfumado, como el aire.
De pronto, él se vio solo en un callejón, y no sabia como habia llegado hasta ahí. ¿Dónde estaba la detective?
Cuando oyo un ruido tras el, se dio la vuelta, temiendo que fuese el sospechoso de nuevo. Pudo verla entre la penumbra, con los hombros hundidos y la cabeza gacha por el cansancio de la carrera.
Con incertidumbre, dio un paso mas hacia ella. Ella, dubitativa, alzo ligeramente su cabeza y dejo asomar una pequeña, pero timida sonrisa.
“Han pasado tantas cosas desde aquel dia...” penso él. “Aquel dia en el que se dieron su primer beso...” Y de pronto, si poder saber como, ella se abalanzo hacia el y le rodeo con sus brazos. El dudo antes de responder a su abrazo. Ahora estaban solos en mitad de un callejón y en las situaciones de mucha presion, los sentimientos son liberados y arrastrados por la brisa.
Sus cuerpos estaban tan juntos que podia sentir como su pecho se movia al ritmo de su agitada respiración.
Antes de poder evitarlo, ella sintio los labios de el buscando los suyos, con pasión y necesidad. Beckett alzo la cabeza y le beso. Y lo que empezo siendo un suave beso, muy tierno, se convirtió en un mar de locura y pasión. Se besaron, casi con furia, mientras se empujaban mutuamente contra las frias paredes de ladrillo de aquel callejo. Ella le mordio el labio, mientras el la apretaba contra la pared aun mas.
Entonces, oyeron una voz. Una de esas voces que estas acostumbrado a oir a diario pero que ahora odias mas que nunca. Esa voz que suele estropear los momentos especiales de la vida de una persona.
- Eh, tortolitos.
Ambos se separaron unos centrimetros y desviaron la vista al coche de policias que estaba aparcado al fondo, donde delante de el, dos personas que ellos bien conocían. Sus compañeros de trabajo. Les miraban con cara sonriente, aunque cargada de burla, como queriendo decir: “Os lo dijimos. Todos los sabiamos”.
La pareja se separo, bastante azorada. Beckett se aliso su pelo castaño oscuro, mientras su acompañante se colocaba bien su camisa y su chaqueta.
Y, tan dignamente como pudieron, fueron hacia el coche.
Ambos sabian que la cosa habia cambiado para ellos, para siempre. Nada volveria a ser igual. Pero los dos se preguntaban si seria para bien o para mal... Al menos, tenian derecho a darse una oportunidad... >>
- ¿¿Papa??
Una voz me sobresalto. Mi hija estaba detrás de mi, mirando la pantalla del ordenador por encima de mi hombro. Y yo sin enterarme. Cuando escribia, nada mas ocurria a mi alrededor. A veces, mi madre decia que si estallase la Tercera Guerra Mundial mientras yo escribo, ni me enteraría.
- Alexis... ¿¿Pero qué...?? – dije, cerrando la tapa del portátil.
- Papa... Eso a sido un poco... – mi hija busco un adjetivo que no me molestase.
- ¿¿Lo has leido?? – pregunte, aun mas avergonzado.
- No, lo he escuchado. Lo estabas leyendo en voz alta. ¿¿Y sabes?? En voz alta parece mas fuerte que leyéndolo en privado... – eso fue una indirecta por su parte.
Otro silencio entre ambos.
- ¿Es para el libro? – me pregunto, entonces.
- Por supuesto que si. – dije.
- Entonces puedes explicarme por que pusiste Beckett, en vez de Heat??
- ¿¿Cómo?? – abri la tapa de nuevo. – Eso no es cierto.
Uno de sus dedos se poso en la pantalla del ordenador. Se levanto y se volvio a posar unas lineas mas abajo.
- Dos veces. – insistio.
- No es cierto. – repeti, avergonzado, mientras borraba los nombres y los rescribía, bajo la mirada divertida de mi hija. – Deberias usar gafas.
Mi hija siguió mirándome, divertida. Supe en ese momento lo que estaba pensando. Abri la boca para decirle que se equivocaba, que no era eso lo que estaba imaginándome, pero mi movil empezo a vibrar en la mesita de cristal.
- Uy, es Beckett... – dijo Alexis. Conocia muy bien esa voz, muy tipica de mi madre. Maldije por lo bajo. – Deberias cogerlo.
- Castle. – conteste, mirando a mi hija.
- Castle, ¿te pasa algo? – la voz de Beckett se oia al otro lado de la linea.
- Eh, no, no, no... ¿Qué podria ir mal? – vi como mi hija se alejaba hacia el piso de arriba, con un andar que hacia que se moviese su larga coleta pelirroja. Carraspee. - ¿Hay un muerte?
- Pues la verdad es que si. – me contesto ella.
- Mira, me has alegrado la mañana.
- Que honor, haberle regalado un muerto al Sr. Castle... – su voz sonaba ironica, y sonrei.
- ¿Dónde es?
- ¿Tienes una hoja?
tampoco queria aburriros en el primer capitulo... si os gusta y continuo el fic, prometo que seran un pco mas largos, que tengan mas historia...
por cierto... jejeje
el fic se llama El Nuevo Mandamiento y tendra... capitulos indefinidos aun. ni idea. y principalmente queria que fuese mas menos un capitulo mas de Castle, la misma estructura...
por cierto, no tienen ninguna relacion con el primer fic que escribi, asi que no hace falta que lo leais (si quereis, yo ecantadisima de la vida!!!)
espero que os guste!!!
CAPITULO 1 - ¿Heat o Beckett?
El Sr. Thomson tenia muchos motivos para ir deprisa aquella mañana. Las ventas habian bajado desde que ese amigote suyo empezo a trabajar con ellos, y se sentia culpable. Ademas, a su jefe no le caia muy bien, que se dijese. Estaba seguro de que a la minima le despidiria. Asi que, mas valia darse prisa para no pillar el atasco de las 8 en el centro.
Eran las 6:45 cuando cerro la puerta de su casa. Caminó por el camino de piedra de su jardín, con cuidado de no resbalar con las placas de hielo que se habian formado aquella noche. De pronto se paro en seco. Sintio que su corazon se paraba... cuando vio a uno de sus queridisimos gnomos de jardín hechos a mano recubierto de escarcha por todas partes.
- Oh, Henry... – exclamo, agachándose a mirar al gnomo.
“No, Joshua”, se reprimio a si mismo. Debia darse prisa. Camino de nuevo a paso rapido hacia el garaje, pero vio un coche aparcado justo en frente de la puerta, otro coche que no era el suyo.
- Ya estamos otra vez... – susurro el Sr. Thomson. Ya estaban sus vecinos tocando las narices, como siempre.
¿Y ahora que podia hacer? Esta claro que, a menos que su coche pudiese transpasar objetos, no iba a conseguir sacarlo de ahí.
Se acerco un poco mas al coche. Este estaba aparcado de mala manera, como si se hubiese parado un segundo y no lo hubiesen vuelto a arrancar.
Con los rayos del sol naciente, pudo ver una sombra en el interior del coche. Se acerco algo mas y vio que era la Sra. Marshall, como no, su vecina. Su cabeza estaba apoyada contra el volante, como si estuviese dormida. El coche tenia las llaves puestas y todas las cosas de su trabajo estaban en el asiento del copiloto.
- Sra. Marshall – la llamo, dando unos golpecitos al cristal de la ventana. No obtuvo respuesta. – ¡Sra. Marshall!
Nada. Estaba a punto de entrar en su coche a la fuerza, hasta que vio una mancha impropia en su camisa gris. Si, era una mancha oscura, rara en una camisa lisa. Se acerco un poco mas a la ventanilla, alzando sus gafas... Su abdomen estaba cubierto de sangre...
**********************************************************************
<< El sospechoso se habia largado. Otra vez. Ya era la segunda vez en aquel dia, y con el mismo tipo. Esto se les escapaba de las manos.
La detective habia corrido en su busca, mientras su fiel socio le pisaba los talones y sus dos compañeros les guardaban las espaldas desde el coche.
Pero nada, el tipo se habia esfumado, como el aire.
De pronto, él se vio solo en un callejón, y no sabia como habia llegado hasta ahí. ¿Dónde estaba la detective?
Cuando oyo un ruido tras el, se dio la vuelta, temiendo que fuese el sospechoso de nuevo. Pudo verla entre la penumbra, con los hombros hundidos y la cabeza gacha por el cansancio de la carrera.
Con incertidumbre, dio un paso mas hacia ella. Ella, dubitativa, alzo ligeramente su cabeza y dejo asomar una pequeña, pero timida sonrisa.
“Han pasado tantas cosas desde aquel dia...” penso él. “Aquel dia en el que se dieron su primer beso...” Y de pronto, si poder saber como, ella se abalanzo hacia el y le rodeo con sus brazos. El dudo antes de responder a su abrazo. Ahora estaban solos en mitad de un callejón y en las situaciones de mucha presion, los sentimientos son liberados y arrastrados por la brisa.
Sus cuerpos estaban tan juntos que podia sentir como su pecho se movia al ritmo de su agitada respiración.
Antes de poder evitarlo, ella sintio los labios de el buscando los suyos, con pasión y necesidad. Beckett alzo la cabeza y le beso. Y lo que empezo siendo un suave beso, muy tierno, se convirtió en un mar de locura y pasión. Se besaron, casi con furia, mientras se empujaban mutuamente contra las frias paredes de ladrillo de aquel callejo. Ella le mordio el labio, mientras el la apretaba contra la pared aun mas.
Entonces, oyeron una voz. Una de esas voces que estas acostumbrado a oir a diario pero que ahora odias mas que nunca. Esa voz que suele estropear los momentos especiales de la vida de una persona.
- Eh, tortolitos.
Ambos se separaron unos centrimetros y desviaron la vista al coche de policias que estaba aparcado al fondo, donde delante de el, dos personas que ellos bien conocían. Sus compañeros de trabajo. Les miraban con cara sonriente, aunque cargada de burla, como queriendo decir: “Os lo dijimos. Todos los sabiamos”.
La pareja se separo, bastante azorada. Beckett se aliso su pelo castaño oscuro, mientras su acompañante se colocaba bien su camisa y su chaqueta.
Y, tan dignamente como pudieron, fueron hacia el coche.
Ambos sabian que la cosa habia cambiado para ellos, para siempre. Nada volveria a ser igual. Pero los dos se preguntaban si seria para bien o para mal... Al menos, tenian derecho a darse una oportunidad... >>
- ¿¿Papa??
Una voz me sobresalto. Mi hija estaba detrás de mi, mirando la pantalla del ordenador por encima de mi hombro. Y yo sin enterarme. Cuando escribia, nada mas ocurria a mi alrededor. A veces, mi madre decia que si estallase la Tercera Guerra Mundial mientras yo escribo, ni me enteraría.
- Alexis... ¿¿Pero qué...?? – dije, cerrando la tapa del portátil.
- Papa... Eso a sido un poco... – mi hija busco un adjetivo que no me molestase.
- ¿¿Lo has leido?? – pregunte, aun mas avergonzado.
- No, lo he escuchado. Lo estabas leyendo en voz alta. ¿¿Y sabes?? En voz alta parece mas fuerte que leyéndolo en privado... – eso fue una indirecta por su parte.
Otro silencio entre ambos.
- ¿Es para el libro? – me pregunto, entonces.
- Por supuesto que si. – dije.
- Entonces puedes explicarme por que pusiste Beckett, en vez de Heat??
- ¿¿Cómo?? – abri la tapa de nuevo. – Eso no es cierto.
Uno de sus dedos se poso en la pantalla del ordenador. Se levanto y se volvio a posar unas lineas mas abajo.
- Dos veces. – insistio.
- No es cierto. – repeti, avergonzado, mientras borraba los nombres y los rescribía, bajo la mirada divertida de mi hija. – Deberias usar gafas.
Mi hija siguió mirándome, divertida. Supe en ese momento lo que estaba pensando. Abri la boca para decirle que se equivocaba, que no era eso lo que estaba imaginándome, pero mi movil empezo a vibrar en la mesita de cristal.
- Uy, es Beckett... – dijo Alexis. Conocia muy bien esa voz, muy tipica de mi madre. Maldije por lo bajo. – Deberias cogerlo.
- Castle. – conteste, mirando a mi hija.
- Castle, ¿te pasa algo? – la voz de Beckett se oia al otro lado de la linea.
- Eh, no, no, no... ¿Qué podria ir mal? – vi como mi hija se alejaba hacia el piso de arriba, con un andar que hacia que se moviese su larga coleta pelirroja. Carraspee. - ¿Hay un muerte?
- Pues la verdad es que si. – me contesto ella.
- Mira, me has alegrado la mañana.
- Que honor, haberle regalado un muerto al Sr. Castle... – su voz sonaba ironica, y sonrei.
- ¿Dónde es?
- ¿Tienes una hoja?
tampoco queria aburriros en el primer capitulo... si os gusta y continuo el fic, prometo que seran un pco mas largos, que tengan mas historia...
por cierto... jejeje
Última edición por Kate el Sáb Mar 12, 2011 6:50 am, editado 2 veces
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"Hey, young blood, doesn’t it feel like our time is running out?", Fall Out Boy
- Spoiler:
Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
Jajajja ... Pobre Castle..... No me aburri de nada,... Sigue sigue.....
diana1518- As del póker
- Mensajes : 366
Fecha de inscripción : 04/01/2011
Edad : 36
Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
Apoyo a formar el club de fans de Henry, el enanito que soportó las heladas! xDDD Joshua Thomson es un trocito de pan... me lo imagino así, entrado en años, con el pelo cano, un poquito regordete y con la cara redonda y con gafas xDD Y sus gnomos! Helados de frío que los tiene!
Me ha gustado el capítulo! Castle no debería leer en voz alta... nunca se sabe cuando el móvil se descuelga sin saberlo, encima las paredes oyen. Podrían usarlo en su contra!
Me ha gustado el capítulo! Castle no debería leer en voz alta... nunca se sabe cuando el móvil se descuelga sin saberlo, encima las paredes oyen. Podrían usarlo en su contra!
Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
Me gusta Espero la continuacion...
Esto de hablar en voz alta..por dios!!
Esto de hablar en voz alta..por dios!!
Maite- As del póker
- Mensajes : 376
Fecha de inscripción : 13/12/2010
Edad : 30
Localización : Viña del Mar,chile
Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
ya siento que este fic nos regalara grandes momentos y con una perfecta historia es magnificooooo !!! pleaseee no me defraudes!!!!
vicky_heat- Moderador
- Mensajes : 1485
Fecha de inscripción : 23/07/2010
Edad : 30
Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
Me ha gustado mucho sobretodos que escribiera Beckett!!!
andrea3msc- Autor de best-seller
- Mensajes : 933
Fecha de inscripción : 15/01/2011
Edad : 28
Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
Ah que genial es poder leerte administradora, se me había olvidado que tú me contaste de tus ganas por escribir un fic. Síguelo porfa, promete interesante
Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
Me ha gustado mucho-mucho!! Tiene buenísima pinta
errauskine- Autor de best-seller
- Mensajes : 966
Fecha de inscripción : 02/11/2010
Localización : Bizkaia
Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
gracias a todas!!!! a ver si me puedo poner con el segundo capitulo pronto... me alegro de que os haya gustado!!!
sois las mejores!!
sois las mejores!!
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"Hey, young blood, doesn’t it feel like our time is running out?", Fall Out Boy
- Spoiler:
Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
Muy bueno el fic, me gusta, espero lo continues pronto.
Besos.
Besos.
mari_7- Actor en Broadway
- Mensajes : 231
Fecha de inscripción : 07/01/2011
Localización : Galicia
Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
FELICITACIONES KATE, SUBE PRONTO MUCHOS CAPITULOS!!!!
silvanalino- Escritor - Policia
- Mensajes : 2439
Fecha de inscripción : 01/12/2010
Edad : 51
Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
Muy bueno, Kate, esperaremos el segundo capitulo...
angela_beckett- Actor en Broadway
- Mensajes : 170
Fecha de inscripción : 19/12/2010
Edad : 44
Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
felicidades administradora pillado XDXDXD lo escribio dos veces
______________________
- Amor se llama el juego en el que un par de ciegos juegan a hacerse daño:
Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
Esta geniaaall!!Enhorabueenaa!!,te doy mis felicitaciones por el capitulo.
Cuando vi que no habia mas capitulos dije: No!,ahora que se ponia interesante! jajaja
Cuando vi que no habia mas capitulos dije: No!,ahora que se ponia interesante! jajaja
Raquelita Beckett- Policia de homicidios
- Mensajes : 537
Fecha de inscripción : 23/08/2010
Edad : 27
Localización : Tenerife Santa Cruz
Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
Muy bien la historia. Sigue por favor.
Cata Castillo- Escritor - Policia
- Mensajes : 1729
Fecha de inscripción : 25/09/2010
Localización : Al sur del sur
Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
Wiiii! Muy chulooo! Que ganas de que continueees
Me encanta Alexiis xD
Me encanta Alexiis xD
egaara- Autor de best-seller
- Mensajes : 999
Fecha de inscripción : 26/12/2010
Edad : 31
Localización : Barcelona!
Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
que guayyy!!!jejeje le atacan marcianos y ni se entera! xDxD siguesigue que esta interesante
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Yo adoro a Furia, a Ginger, a Travieso, a Flicka, a Spirit, a Pegaso,....
- Spoiler:
Si te deja de apuntar pongas donde te pongas, avisame /ilusion optica/
Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
siento haber tardado tanto, pero he tenido un famoso bloqueo mental. vamos, un atasco tan grande como los que hay en la M-30 de Madrid a la hora punta...
nada, que este capitulo se lo dedico a... todos los que gastais un ratito de vuestro tiempo para leer este fic. pero sobre todo a patri, que ha soportado mis miles quejas de que no podia escribir... ya no se cmo me aguantas, oye!!!
que lo disfruteis
- ¡¡Buenos dias, Inspectora!! – exclamé con mi habitual buen humor mañanero.
Me acerque a la inspectora Beckett, que salia de su viejo coche negro, con un par de cafes en la mano. Le ofreci uno de ellos y ella lo tomo, calentándose las manos con el, mientras me dedicaba un “gracias”.
Llegamos a la escena del crimen. Era un coche, un coche viejo. Habia muchos miembros del CSU examinando la calle y la parte trasera del coche.
Cuando nos acercamos, vimos a Lanie sentada en el asiento del copiloto, junto a la victima, escribiendo como era habitual el primer informe sobre el cadáver.
Ambos nos asomamos a la vez hacia dentro del coche desde la ventanilla del conductor.
- Uuhh... ¡¡Como huele aquí!! – exclame cuando un repugnante hedor se introdujo por mis conductos nasales. Me lleve la mano a la nariz y me la tape.
Beckett, mientras ponia los ojos en blanco, pregunto:
- ¿Qué tenemos esta vez?
- Mujer joven, yo le echaria unos 30 y pocos años. Tiene un disparo en la cabeza, justo aquí. – explico, tomando la cabeza del cadáver y girándolo un poco para que pudiésemos verlo.
- ¿Mortal? – se me ocurrio preguntar.
- Si no hubiese sido mortal, nosotros no estariamos aquí ahora mismo. – me resalto Lanie. – Yo estaria ahora mismo debajo del edredón... En mi cama... – cerro los ojos.
- No me lo recuerdes, por favor. – resoplo Beckett. La mire con atención, esperando lo que pudiese decir. Y ella, al notar mi mirada expectante, cambio su tono de voz: - Con ese camisón tan sexy que me compre, tan ajustado, tan transparente... Y luego me daria un baño caliente... A lo Nikki Heat, con mucha, mucha espuma... – me miro con la boca torcida, símbolo de una media sonrisa.
Yo me habia quedado embobado mirándola, con la boca ligeramente abierta.
Beckett, aun riendo, le dijo a Lanie que se iba a ver a Ryan y Esposito.
- Castle, cierra la boca. Aquí hay moscas... literalmente. – me advirtió la forense.
Obedeci de inmediato e hice ademan de retroceder, pero mi cabeza choco contra el techo del coche. Rascándome la nuca, fui hacia donde habia ido Beckett.
- ... Su nombre es Joshua Thompson. Es un tipo un poco raro... – explicaba Esposito. – Hola, Castle.
- Hola. – salude. – ¿Quién es un poco raro? ¿La victima?
- No, el hombre que descubrio el cadáver. Es su vecino. – explico Ryan.
- El tio vive solo, habla muy raro y tiene una colección de gnomos un tanto siniestra... – añadio Esposito.
- Como las viejecitas de las películas. – exclame yo.
- ¿A quien estamos investigando? ¿Al Sr. Thompson o a la mujer muerta? – corto Beckett.
Los tres pusimos cara de aburrimiento, pero obedecimos a Beckett, por la cuenta que nos traia...
- Hablando de la mujer muerta... – continuo Esposito. – Su nombre es Anne Marshall. Es doctora en el Lenox Hill Hospital. Esta casada y no tiene hijos. Nuestro amigo el gnomero afirma que mas de una vez les ha oido discutir “fuertemente”. Tanto que oia como alguien arrojaba objetos al aire... ¿Y sabeis que es lo mejor?
- ¿Puede haber algo mejor? – pregunte.
- El marido... – Ryan hizo una pausa teatral. – ... no esta en casa...
- Investigadle. Mirad donde puede estar, buscarle por todas partes. Algo me da que tiene algo que ver... – ordeno Beckett.
- No creeras que el la mato, ¿no? – la mire. Ella asintió en silencio, mientras caminábamos hacia el Sr. Thompson. - ¿En serio? Es demasiado facil, muy... obvio...
- Bueno, Ricky. Si te aburre un caso tan facil te doy el inmenso honor de dejarte volver a tu casa, donde seguro hay calefacción.
- ¿Y perderme el momento en el que descubras que yo tenia razon? ¡Ni en broma!
Llegamos frente a Joshua, un hombre alto y huesudo, que vestia unos pantalones rectos color azul marinos, algo cortos, que dejaban ver unos calcetines de puntitos de colores granate y azul. Calzaba unos mocasines de la época en la que los cromañones vivian en cuevas. El abrigo era largo, negro y viejo. De pronto, me vi viajando en el tiempo, 20 años antes.
La voz de Beckett me rescato de ese agujero negro infinito.
- Sr. Thompson, buenos días. Soy la Inspectora Beckett. Y el es Richard Castle. – dijo mientras le saludo con una ligera inclinación de cabeza, que no fue correspondida. – Nos gustaria que respondiera a algunas preguntas sobre los Marshall...
- Esos polis de ahí ya me han preguntado todo eso. – se quejo el, señalando a Esposito y a Ryan sin ninguna discreción.
- Lo se, y lo siento de veras, Sr. – dijo Beckett. – Pero esto es una investigación de homicidio y necesitamos saber el mayor numero de cosas...
A Joshua parecio convencerle el argumento de Beckett, por lo que cambio de cara y relajo los hombros.
- ¿Qué quiere que le cuente? – suspiro. – Esa pareja era insoportable. Ambos se engañaban con otras personas.
Beckett y yo le miramos con cara de asombro.
- Oigan, soy viejo, pero no tonto. Y estas paredes son como papel, se oye absolutamente todo. – explico. Una breve pausa. – La Sra. Marshall era agradable, a veces. Pero su marido no. Nunca era agradable. Y se gritaban mucho. Un dia, el Sr. Marshall salio de la casa hecho una furia y al sacar el coche del garaje piso mi jardín y atropello a cuatro de mis gnomos... ¡¡Cuatro!! Presente una denuncia, pero parece ser que tenian cosas mas importantes que hacer... – nos miro mientras hablaba con segundas malintencionadas.
Me aproxime a Beckett, atonito, mientras le susurraba al oido:
- ¿¿Esta diciendo... lo que creo que esta diciendo??
Beckett me aparto de un manotazo, que por casi me cruza la cara.
- ¿Y en algun caso hubo alguna pelea con violencia domestica?
- ¡Oh, si! En absolutamente todas se oian ruidos y golpes. Nunca vi a la Sr. Marshall con hematomas de alguna pelea, pero se oian platos rotos, u objetos estampados contra la pared. En una ocasión, me abrieron un boquete en el salon de estar con la Sagrada Biblia... ¡Que vergüenza...!
- Bueno, Sr. Thompson, muchas gracias por su ayuda. – se despidio Beckett, tendiéndole la mano. – Si necesitamos más su ayuda ya le llamaremos.
En cuento nos giramos, me volvi a acercar a Beckett:
- No puedes negar que ESO ha sido muy raro...
- Castle... – me riño de nuevo.
- Mi pregunta es: ¿Qué hace una respetada doctora con un tio como su marido?
- Calla, Castle. No adelantes acontecimientos...
nada, que este capitulo se lo dedico a... todos los que gastais un ratito de vuestro tiempo para leer este fic. pero sobre todo a patri, que ha soportado mis miles quejas de que no podia escribir... ya no se cmo me aguantas, oye!!!
que lo disfruteis
CAPITULO 2: PRIMERAS IMPRESIONES
- ¡¡Buenos dias, Inspectora!! – exclamé con mi habitual buen humor mañanero.
Me acerque a la inspectora Beckett, que salia de su viejo coche negro, con un par de cafes en la mano. Le ofreci uno de ellos y ella lo tomo, calentándose las manos con el, mientras me dedicaba un “gracias”.
Llegamos a la escena del crimen. Era un coche, un coche viejo. Habia muchos miembros del CSU examinando la calle y la parte trasera del coche.
Cuando nos acercamos, vimos a Lanie sentada en el asiento del copiloto, junto a la victima, escribiendo como era habitual el primer informe sobre el cadáver.
Ambos nos asomamos a la vez hacia dentro del coche desde la ventanilla del conductor.
- Uuhh... ¡¡Como huele aquí!! – exclame cuando un repugnante hedor se introdujo por mis conductos nasales. Me lleve la mano a la nariz y me la tape.
Beckett, mientras ponia los ojos en blanco, pregunto:
- ¿Qué tenemos esta vez?
- Mujer joven, yo le echaria unos 30 y pocos años. Tiene un disparo en la cabeza, justo aquí. – explico, tomando la cabeza del cadáver y girándolo un poco para que pudiésemos verlo.
- ¿Mortal? – se me ocurrio preguntar.
- Si no hubiese sido mortal, nosotros no estariamos aquí ahora mismo. – me resalto Lanie. – Yo estaria ahora mismo debajo del edredón... En mi cama... – cerro los ojos.
- No me lo recuerdes, por favor. – resoplo Beckett. La mire con atención, esperando lo que pudiese decir. Y ella, al notar mi mirada expectante, cambio su tono de voz: - Con ese camisón tan sexy que me compre, tan ajustado, tan transparente... Y luego me daria un baño caliente... A lo Nikki Heat, con mucha, mucha espuma... – me miro con la boca torcida, símbolo de una media sonrisa.
Yo me habia quedado embobado mirándola, con la boca ligeramente abierta.
Beckett, aun riendo, le dijo a Lanie que se iba a ver a Ryan y Esposito.
- Castle, cierra la boca. Aquí hay moscas... literalmente. – me advirtió la forense.
Obedeci de inmediato e hice ademan de retroceder, pero mi cabeza choco contra el techo del coche. Rascándome la nuca, fui hacia donde habia ido Beckett.
- ... Su nombre es Joshua Thompson. Es un tipo un poco raro... – explicaba Esposito. – Hola, Castle.
- Hola. – salude. – ¿Quién es un poco raro? ¿La victima?
- No, el hombre que descubrio el cadáver. Es su vecino. – explico Ryan.
- El tio vive solo, habla muy raro y tiene una colección de gnomos un tanto siniestra... – añadio Esposito.
- Como las viejecitas de las películas. – exclame yo.
- ¿A quien estamos investigando? ¿Al Sr. Thompson o a la mujer muerta? – corto Beckett.
Los tres pusimos cara de aburrimiento, pero obedecimos a Beckett, por la cuenta que nos traia...
- Hablando de la mujer muerta... – continuo Esposito. – Su nombre es Anne Marshall. Es doctora en el Lenox Hill Hospital. Esta casada y no tiene hijos. Nuestro amigo el gnomero afirma que mas de una vez les ha oido discutir “fuertemente”. Tanto que oia como alguien arrojaba objetos al aire... ¿Y sabeis que es lo mejor?
- ¿Puede haber algo mejor? – pregunte.
- El marido... – Ryan hizo una pausa teatral. – ... no esta en casa...
- Investigadle. Mirad donde puede estar, buscarle por todas partes. Algo me da que tiene algo que ver... – ordeno Beckett.
- No creeras que el la mato, ¿no? – la mire. Ella asintió en silencio, mientras caminábamos hacia el Sr. Thompson. - ¿En serio? Es demasiado facil, muy... obvio...
- Bueno, Ricky. Si te aburre un caso tan facil te doy el inmenso honor de dejarte volver a tu casa, donde seguro hay calefacción.
- ¿Y perderme el momento en el que descubras que yo tenia razon? ¡Ni en broma!
Llegamos frente a Joshua, un hombre alto y huesudo, que vestia unos pantalones rectos color azul marinos, algo cortos, que dejaban ver unos calcetines de puntitos de colores granate y azul. Calzaba unos mocasines de la época en la que los cromañones vivian en cuevas. El abrigo era largo, negro y viejo. De pronto, me vi viajando en el tiempo, 20 años antes.
La voz de Beckett me rescato de ese agujero negro infinito.
- Sr. Thompson, buenos días. Soy la Inspectora Beckett. Y el es Richard Castle. – dijo mientras le saludo con una ligera inclinación de cabeza, que no fue correspondida. – Nos gustaria que respondiera a algunas preguntas sobre los Marshall...
- Esos polis de ahí ya me han preguntado todo eso. – se quejo el, señalando a Esposito y a Ryan sin ninguna discreción.
- Lo se, y lo siento de veras, Sr. – dijo Beckett. – Pero esto es una investigación de homicidio y necesitamos saber el mayor numero de cosas...
A Joshua parecio convencerle el argumento de Beckett, por lo que cambio de cara y relajo los hombros.
- ¿Qué quiere que le cuente? – suspiro. – Esa pareja era insoportable. Ambos se engañaban con otras personas.
Beckett y yo le miramos con cara de asombro.
- Oigan, soy viejo, pero no tonto. Y estas paredes son como papel, se oye absolutamente todo. – explico. Una breve pausa. – La Sra. Marshall era agradable, a veces. Pero su marido no. Nunca era agradable. Y se gritaban mucho. Un dia, el Sr. Marshall salio de la casa hecho una furia y al sacar el coche del garaje piso mi jardín y atropello a cuatro de mis gnomos... ¡¡Cuatro!! Presente una denuncia, pero parece ser que tenian cosas mas importantes que hacer... – nos miro mientras hablaba con segundas malintencionadas.
Me aproxime a Beckett, atonito, mientras le susurraba al oido:
- ¿¿Esta diciendo... lo que creo que esta diciendo??
Beckett me aparto de un manotazo, que por casi me cruza la cara.
- ¿Y en algun caso hubo alguna pelea con violencia domestica?
- ¡Oh, si! En absolutamente todas se oian ruidos y golpes. Nunca vi a la Sr. Marshall con hematomas de alguna pelea, pero se oian platos rotos, u objetos estampados contra la pared. En una ocasión, me abrieron un boquete en el salon de estar con la Sagrada Biblia... ¡Que vergüenza...!
- Bueno, Sr. Thompson, muchas gracias por su ayuda. – se despidio Beckett, tendiéndole la mano. – Si necesitamos más su ayuda ya le llamaremos.
En cuento nos giramos, me volvi a acercar a Beckett:
- No puedes negar que ESO ha sido muy raro...
- Castle... – me riño de nuevo.
- Mi pregunta es: ¿Qué hace una respetada doctora con un tio como su marido?
- Calla, Castle. No adelantes acontecimientos...
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Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
muy interesante es como ver la serie ....gnomos
gracias por la dedicatoriaaa
gracias por la dedicatoriaaa
Última edición por clpatri el Sáb Mar 05, 2011 1:51 pm, editado 1 vez
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Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
Hablendo de gnomos... hoy mi Sim se ha encontrado 4 gnomos en un cementerio (enserio..) ¡serán los del señor Gnomos XD ????clpatri escribió:muy interesante es como ver la serie ....gnomos
Muy bueno el capi :
Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
Te quedo genial.. espero que lo sigas pronto
Maite- As del póker
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Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
gracias, chicas!!!
esos gnomos dan miedo. se mueven por la noche y aparecen de repente al lado de tu cama... no veas tu que miedo... un dia uno se colo en la cuna de mi bebe!!!
beleniKate escribió:Hablendo de gnomos... hoy mi Sim se ha encontrado 4 gnomos en un cementerio (enserio..) ¡serán los del señor Gnomos XD ????clpatri escribió:muy interesante es como ver la serie ....gnomos
Muy bueno el capi :
esos gnomos dan miedo. se mueven por la noche y aparecen de repente al lado de tu cama... no veas tu que miedo... un dia uno se colo en la cuna de mi bebe!!!
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Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
Muy buen capítulo. Está genial la historia.
Cata Castillo- Escritor - Policia
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Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
esta genial!! que risa con los gnomos! y la manotazo quecasi le cruza la cara!!
pd. pues si quetendran fuerza para hacer un boquete en la pared..con la biblia! xDxD
no tardes plissss
pd. pues si quetendran fuerza para hacer un boquete en la pared..con la biblia! xDxD
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Re: El Nuevo Mandamiento - Capitulo 3
escribes realmente bien...los dialogos son geniales y las narraciones tb
lucia- As del póker
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