La pitonisa

carla_NYPD escribió:te esta quedando muy bueno el fic, continualo!

Gracias, por tu comentario, y tranquila que ya estoy trabajando en ello

kate_beckett escribió:Me ha encantadoo!!! esta Geniaaal!!!
siguelo pronto pleaseee!!!

Muchas gracias estoy ultimando el capitulo siguiente.....

yocastle_NYPD escribió: que interesante capituloo


quiero masss


xDDDDDDDDDDDDD


increíble capitulo


la pitonisa molaaaaaaaaaaaa mIL



GRACIAS por la fic

que bien que mole la pitonisa, eso es buena señal!!!

Raul escribió:Vaya con la pitonisa,ha acertado en todo jeje,sigue maripaz,no nos dejes con la intriga jaja

La intriga solo será por pocos días, te lo aseguro, gracias por tus palabras

Jorja escribió:A ver Richard Castle, Kate --> Lockwood --> Dragón --> peligro, tan dificil es? jajaja
muy buen cap! quiero la continuacion1!!!

Pronto sábrás el desenlace, no tardaré en subir lo que falta, y muchas gracias....me encanta que me dejeis vuestras opinione, de ellas se aprende a veces

Cata Castillo escribió:¡Qué pitonisa más buena! Te ha quedado un capítulo genial. Me ha gustado mucho.

Si... es una pitonisa como hay pocas. Me alegra que te guste

Me encanto!!!! necesito el siguienteeeeeee

Siguiente capi!

Pero no nos hagas sufrir mucho eh? ^^

Me encanta!!! e gusta la originalidad del fic

Cada vez se pone mejor esta historiaaaaaaaaaaaaa, como todas las historias que escribes
Que Rick cuide a Kate igual!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
gracias por seguir escribiendo

siguelooo..maravillosoo

¿pero esto que es? me dejas así? con la boca abierta????????????? Jopeta!!!!
quieres hacer el favor de subir lo que falta?
oye, y ya están tardando mucho en ir a esa cabaña. y me los cierras allí una semana, mas o menos, tú esplayate que ya sabes lo que me gusta a mí cuando están los dos solo metidos en una cabaña secreta!!!!
ayssssssssssssssssssssssssssss
como mola este fic!!!
Me ha enganchao!!! Vamos que, sigue, hija, sigue, que para ser tan joven, lo hacer muy bien. Voy a hacer de pitonisa y a decir que creo que vas a escribir unos fics maravillosos jajajajaajajajaja. BEsososooostotototes!!!!!!

escribió:Me encanto!!!! necesito el siguienteeeeeee

Tranquila que ya va llegando, despacito pero con paso seguro. Gracias!!!!

GabiiLovesCastle:D escribió:Siguiente capi!

Pero no nos hagas sufrir mucho eh? ^^

-Sufrimientos, solo lo justito, no te preocupes

caskett mola escribió:Me encanta!!! e gusta la originalidad del fic

Contentisima de que lo encuentres original, muchas gracias por dejar comentario

silvanalino escribió:Cada vez se pone mejor esta historiaaaaaaaaaaaaa, como todas las historias que escribes
Que Rick cuide a Kate igual!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
gracias por seguir escribiendo

Si..... Rick la cuidará no os preocupeis....
Gracias a ti, por seguir leyendo!!!

castle&beckett..cris escribió:siguelooo..maravillosoo

Y estoy en ello, no tardaré mucho en subir lo que falta.

Rossetta escribió:¿pero esto que es? me dejas así? con la boca abierta????????????? Jopeta!!!!
quieres hacer el favor de subir lo que falta?
oye, y ya están tardando mucho en ir a esa cabaña. y me los cierras allí una semana, mas o menos, tú esplayate que ya sabes lo que me gusta a mí cuando están los dos solo metidos en una cabaña secreta!!!!
ayssssssssssssssssssssssssssss
como mola este fic!!!
Me ha enganchao!!! Vamos que, sigue, hija, sigue, que para ser tan joven, lo hacer muy bien. Voy a hacer de pitonisa y a decir que creo que vas a escribir unos fics maravillosos jajajajaajajajaja. BEsososooostotototes!!!!!!

Madre del Amor Hermoso!!! menudo comentario casi tan largo como el relato.
Gracias, y me estás sacando los colores. Además de desorientar al personal, ya que se van a creer que soy una jovencita medio pervertida Nada más lejos de esto. Gracias por tu extenso comentario. No tardaré demasiado en subir el ultimo capitulo, ya que el próximo será el final. Veremos qué opinareis

Las predicciones, muy buenas!!
Marypaz, me encantan todos tus fics, y como siempre, espero con ansias el siguiente, me tienes totalmente intrigada!!
Gracias por otro capítulo!!

rakel escribió:Las predicciones, muy buenas!!
Marypaz, me encantan todos tus fics, y como siempre, espero con ansias el siguiente, me tienes totalmente intrigada!!
Gracias por otro capítulo!!

Gracias....espero que el final no te defraude... ya que muchos/as me dicen que suelo subirme por las ramas

jaja Qué chulo! muy original lo de la pitonisa y el guiño español! menos mal que Castle es cabezón y piensa ir tras Kate. Te está quedando muy bien, sigue pronto! Saludos

BrujaAle escribió:jaja Qué chulo! muy original lo de la pitonisa y el guiño español! menos mal que Castle es cabezón y piensa ir tras Kate. Te está quedando muy bien, sigue pronto! Saludos

Pues si.... lo de los taquitos de queso y el jamón es algo muy nuestro, me pareció una buena idea.
Y ahora mismo ya voy a subir lo que falta. Gracias por seguir leyendo

TITULO: La pitonisa (3ª parte)
ESRITO por: marypaz
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Este descubrimiento le desveló por completo. No estaba seguro de nada, pero la sola idea que la inspectora pudiera correr algún peligro, le hizo estar en una tensión poco habitual.
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Finalmente se decidió a llamarla a su móvil.

No obtuvo respuesta, le indicaba que estaba apagado, que dejara el mensaje. Y él sólo dijo “Llámame en cuanto puedas”.
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No obstante, volvió a llamarla al teléfono fijo. Sabía que posiblemente tampoco conseguiría hablar con ella, y por primera vez se preguntó, qué le diría si ella respondía a su llamada.
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Se rascó la cabeza nerviosamente mientras oía sonar el timbre. Tampoco lo cogía. Pero ya tenía preparada una frase, simplemente le diría la verdad, que estaba preocupado, ya que la consideraba una de las mujeres que le interesaban de verdad. Sólo eso. Era así de simple, ¿Qué tenía de malo, demostrarle sus verdaderos sentimientos? La posibilidad de un rechazo, pero bien valía la pena intentarlo y más si como ahora estaba pensando que podía correr peligro.
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Repasó mentalmente los últimos casos en los que había trabajado, para descubrir si alguna de las personas arrestadas, podían tener un cómplice, y querría tomarse la justicia por su mano.
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Con todos estos pensamientos rondando por su cabeza le era imposible dormir, por lo que se levantó de un salto, se volvió a vestir y con sumo cuidado para no despertar a nadie, salió a la calle, camino del apartamento de la inspectora.
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Cuando llegó a la puerta del apartamento, llamó con la esperanza que le abriera la puerta, pero nadie acudió a sus repetidos golpes suaves en la madera, ni tampoco al estridente timbre.
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Era arriesgado, pero no estaba dispuesto marcharse sin haber hablado con ella, necesitaba saber con sus propios ojos que estaba bien. Por lo que sin dudarlo y con ayuda de su llavero en forma de lanza, forzó la cerradura. Era delito pero le daba lo mismo. Sabía que podían suceder varias cosas, entre ellas, que Kate estuviera acompañada de alguien. Pero tal como le vino la imagen a la cabeza, la desechó, ella después de tantas llamadas telefónicas, y las de ahora en la puerta hubiera terminado por responder, por muy entusiasmada que estuviera con algún hombre, desde que empezó a llamarla, por lo menos había transcurrido media hora. Tiempo más que suficiente, para que se hubiera decidido a contestarle.
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No obstante todas estas reflexiones, la idea de encontrarla en brazos de alguien le dolía demasiado, como para dejarla circular por sus pensamientos. La borró de inmediato. Y entró en el apartamento, sin hacer ruido, como si fuera un vulgar ladrón.
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Lo primero que vio le dejó paralizado, un enorme desorden en toda la sala, los libros, fuera de las estanterías, tirados por el suelo los cojines del sofá, también estaban de cualquier manera.
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Y sólo entonces se le ocurrió pensar, que allí dentro quizás aún estaba la persona, que había hecho todo aquel caos, y que él, no iba armado. Sintió un sudor frío que le recorría todo el cuerpo, y que le costaba tragar saliva. Pero a pesar del miedo, tuvo el juicio, de no delatar su presencia en la casa. Le pareció que oía ruidos, en el dormitorio y fue hasta allí a una distancia prudencial para no ser visto.
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Kate, estaba tendida en el suelo, parecía inconsciente, desde donde él se encontraba podía ver todo el cuerpo de ella, y comprobó que no se veía ningún rastro de sangre. Que no estuviera herida le quitó un enorme peso de encima.
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Pero no sabía cómo actuar. ¿Qué hubiera hecho la inspectora si la situación fuera al revés? Sin dudarlo ella habría apuntado con su arma al intruso, pero no disponía de nada para hacer frente a la situación. Su cabeza era una vorágine, pensando en una solución. Tenía que encontrarla, y lo haría usando su mentalidad de escritor afamado de crímenes.
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Desde donde estaba, el ladrón, que sin duda estaba buscando algo muy concreto, en aquellos momentos se dedicaba a hurgar en los cajones de la ropa interior de Kate, después de tirarlo todo por el suelo, rebuscó en el armario.
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Castle, sólo podía adivinar que era de su misma estatura,- este detalle era importante por si llegaba el caso de una pelea - su cara cubierta con un pasamontañas, no dejaba adivinar, quien era. Se fijó que la ventana que daba a la salida de incendios estaba abierta, por lo que dedujo que se había colado por allí.
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En aquellos momentos, sólo podía hacer una cosa, y era no delatar su presencia. Vio la chaqueta de Kate colgada en el perchero de la entrada, sabía que allí solía guardar el arma y las esposas, ciertamente no se veía capaz de disparar a sangre fría, aunque hubiera sido al mismísimo diablo. Pero sí, que tuvo valor para agarrar con fuerza una pequeña talla de madera, y asaltarle por detrás, dándole un buen golpe, que lo dejó atontado, y de momento indefenso. Después de esto, él mismo le colocó las esposas. Le quitó el pasamontañas, y tal como temía, no era nadie conocido.
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Probablemente un ladrón, que supuso que el apartamento estaba vacío, y Kate al regresar, se encontró con la desagradable sorpresa de tener a un intruso en su casa. Lo demás era todo muy previsible, el ladrón seguro que iba preparado con alguna sustancia para sedarla. Hoy en día se vendían todo tipo de sprays, como defensa personal.
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Llamó a la Comisaría, pidiendo además una ambulancia. No tenía ni idea de cuál era el estado de Kate, que continuaba sin sentido en el suelo.
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Se acercó a ella, buscando el pulso poniendo los dedos en su garganta. Y se agachó para decirle, que estaba a su lado, que ya había pasado el peligro, pero Kate estaba sumida en una inconsciencia profunda. Le salieron palabras que de no ser por la situación tan anómala, nunca se las hubiera dicho
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A Kate le parecía que la cabeza le iba a estallar de un momento a otro.
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Se daba cuenta que tenía una visión desenfocada, pero aunque le costara entenderlo, le parecía que sentado muy cerca de ella, estaba Castle con la cabeza hundida en su pecho. No estaba dormido, pero a pesar de su mala visión, casi podría jurar que estaba meditando o rezando.
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Repasó todo lo que la rodeaba, y supo enseguida que estaba en una cama de hospital. Unas cortinas rodeaban el pequeño lugar en el que sólo había una camilla, donde estaba ella tumbada, y una silla que daba sostén a Castle.
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Y poco a poco empezó a recordar.
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Entró en su casa, dejando como solía hacer la ropa y el arma junto con las esposas, en el perchero de la entrada, y luego recordó que alguien se abalanzó sobre ella, y enseguida sintió un escozor en los ojos que le impidieron ver nada. Notó que su cuerpo caía pesadamente sobre el piso. Le quedaba una vaga sensación de alguien encapuchado luchando por derribarla. Después el vacío más absoluto y la oscuridad la envolvieron.
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Todo eran escenas que se mezclaban en su cabeza sin orden ni concierto. No tenían sentido, pero allí estaban. Le parecía oír la voz de Castle, diciéndole que ya había pasado el peligro. Luego el sonido irritante de la sirena de una ambulancia, y otra vez la voz de Castle susurrándole, palabras llenas de sentimiento, su voz le sonaba casi como un sollozo. Y volvían las lagunas, los momentos perdidos, hasta ahora, que parecía que poco a poco recobraba toda la lucidez
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B.- ¿Castle? –Preguntó como si temiera que fuera una alucinación-
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Al oír la voz, de la detective, casi dio un salto, se levantó tan rápido, que tiró la silla metálica al suelo, formando un gran estruendo.
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C.- Por fin….hola ¿cómo te encuentras?
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B.- Creo que no estoy bien. Me duelen mucho los ojos, y lo veo todo borroso.
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C.- Es natural, debieron rociarte con algún spray que ha afectado la visión, pero sólo será por unas horas. He llamado a Laine, para que se quede contigo esta noche. Supongo que no te importa.
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B.- No, claro que no- Pero dime, ¿cómo supiste que estaba con problemas?
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Castle suspiró.
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C.- Simplemente las palabras de la pitonisa, me hicieron pensar que podías ser tú, la mujer que correrías algún riesgo. Y me dejé llevar por el corazón, más que por la razón.
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B.- Ya…la razón no encaja para nada con todo lo sucedido.
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C.- No, pero a veces las cosas son así. Porque en mí, sí que existe una poderosa razón, para hacer lo que hice, desplazarme hasta tu casa, porque te imaginaba en peligro y no lo podía soportar. Vinieron a mi cabeza unas palabras dichas por alguien – no me preguntes quien, porque ni lo recuerdo- Cuando una persona que se dedica a desvelar el porvenir de alguien, y está en verdadero peligro, suele callárselo, para no angustiarla más.
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B.- Y por eso viniste en mi ayuda, porque estabas convencido de que podría tener serias dificultades.
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C.- Sí, supongo que sí. ¿Tenías algo de verdadero valor, algo que alguien pudiera necesitar? Me refiero a algún documento relacionado con algún caso de la Comisaría.
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Beckett, tardó un poco en contestar, en parte porque aún estaba aturdida y en parte, porque le dolía desnudar tanto sus interioridades delante de nadie, y menos de Castle.
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B.- En casa sólo tengo todo lo recopilado del caso de mi madre. Y no creo que fuera esto lo que buscaba. Siendo así, dudo que lo llegara a encontrar.
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C.- En cuanto llegues a tu apartamento deberás mirar si te falta algo de valor. Aunque a estas horas, si el ladrón consiguió alguna cosa, está ya en manos de la policía, y podrás recuperarlo.
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En aquellos momentos apareció Laine, ya estaba al corriente de todo lo sucedido. Se acercó a Kate, y la besó.
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Laine.- En cuanto te dejen salir, te llevaré a mi casa, me han dicho que tu visión aún tardará unas horas en normalizarse. Ahora están interrogando al ladrón. Pronto sabremos, si buscaba algo en concreto o simplemente quería dinero o joyas de valor.
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C.- Pues…. Yo creo que si de momento va a necesitar ayuda, lo mejor es que se venga a mi casa, allí estarán todo el día o mi madre o Alexis. Si se queda contigo, tendrás que pedir unas horas de permiso para dejar tu trabajo
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B.- Castle tiene razón Laine. Pero agradezco de veras tus ganas de ayudarme. Con Alexis y con Martha, siempre tendré a una persona a mi lado, hasta que recupere por completo la visión.
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Y dándose la vuelta, girando la cabeza se dirigió a Castle
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B.- Deberías ir a descansar, se te ve agotado. Gracias por todo.
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Castle levantó la mano en señal de despedida. En cuanto se hubo ido Laine exclamó
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.- Está loco por ti. Si no lo sabes ver es que estás ciega, pero de antes que te rociaran con el spray.
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Kate Beckett, la inspectora dura e inflexible en muchas ocasiones, no supo que contestar, se limitó a encogerse de hombros, mientras veía a Castle desparecer tras las cortinillas blancas que separaban los módulos-
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Sólo tenía un pensamiento que no lograba quitárselo de la cabeza. Él había corrido en su ayuda cuando pensó que estaba en peligro, a pesar de no ser una de las mujeres que le rodeaban y asediaban. Y una duda apareció de repente. Quizás sí que lo fuera y aún no lo sabía asumir y reconocer.
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Castle llegó a su casa y Alexis y su madre aún dormían. Nada extraño se dijo al comprobar la hora que era. Se dio cuenta que no había dormido, y empezaba a acusar el cansancio. Pero no quería meterse en la cama. Se duchó y cambió de ropa, sintiéndose como nuevo. El día justo empezaba a clarear, y la ciudad se incorporaba a la rutina diaria. En una hoja de papel escribió “Mamá, Alexis, estaré todo el fin de semana fuera. Besos a las dos” firmado Rick, y la dejó encima de un lugar bien visible, sería lo primero que verían al preparar el desayuno.
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Después buscó en los cajones de su mesilla de noche, unas llaves y se las puso en el chaqueta. Aquellas llaves tuvieron el poder de recordar con un inmenso placer aquel lugar, pequeño y escondido entre un bosque. No era la única cabaña, pero estaba todo el lugar planificado de manera, que quedaban aislados unos de otros. Era el lugar perfecto para una pareja de enamorados. Luego se encaminó otra vez hasta el hospital, calculó que el médico de guardia ya estaría a punto de hacer su recorrido. Quería que Laine, se volviera a su casa.
Por unos momentos dejó volar todas las fantasías que había imaginado con ella, y el lugar a donde iban era perfecto. Soledad y silencio, sólo el crujir de alguna rama, o el trino de un pájaro. Kate todavía con la visión mermada, no le quedaría otro remedio, que palpar su cuerpo si quería saber dónde ponía las manos. Las imaginó rodeando su rostro, buscando con sus dedos los labios, para besarle. Y no pudo reprimir imaginarlas en otros lugares, que sólo al pensarlo, dio un respingo, pensando que si seguía por aquel camino tendría que volver a ducharse con agua bien fría.
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Al entrar en el lugar donde estaba Kate, la forense estaba sentada en la misma silla que estuviera él mismo horas antes.
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C.- Hola Laine, he venido a reemplazarte, en cuanto pase el médico, me llevaré a Kate. Seré yo mismo quien la cuide. Espero que no hayan surgido complicaciones.
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Laine se quedó mirándole interrogante.
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C.- Ten fe en mí. Acabo de tomar una decisión. Sabré cuidarla bien. Tan sólo me adjudico el privilegio de ser yo el único que sabrá su paradero. En la Comisaría si te preguntan, les podrás decir que no tienes ni idea de dónde está, y no estarás mintiendo porque no voy a decirte a dónde me dirijo.
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- Te la dejo, con toda la tranquilidad de saber que serás un buen enfermero y la cuidarás muy bien. ¿Sabe ella la decisión que acabas de tomar?
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C.- No, es verdad que de momento la llevaré un poco engañada, porque le diré que la llevo a mi casa junto a mi madre y mi hija. Sólo miento en que no estarán ellas. Necesito tener una conversación larga, y vamos a un lugar donde nadie sabe que existe, por lo que no podrán interrumpirnos.
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Kate en aquellos momentos estaba dormida, le habían suministrado un calmante para que el reposo mitigara el dolor en sus ojos.
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Laine se despidió cariñosamente de Castle, mientras le decía
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-Si no la tratas bien, soy capaz de hacerte la autopsia en vivo –dijo haciendo gala de su buen humor –
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C.- Deberías preocuparte, de cómo me acogerá ella, cuando sepa que la llevo a un lugar que estaremos los dos completamente solos.
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Laine le hizo un guiño, mientras le decía
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-. Sabes cómo tratar a las mujeres, y no debes olvidar que aunque te pueda parecer un bloque de hielo, sólo tendrás que buscar la manera que se derrita.
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C.- Si sólo se trata de esto, puedes tener la seguridad que no habrán problemas. Por si fuera poco mi poder de seducción- dijo en un tono un poco compungido - el lugar al que vamos es perfecto para que una pareja pueda pasar por experiencias extremas, de todo tipo.
Se calló las fantasías que tuvo con Kate momentos antes de ir a verla. Eso sólo estaba en su cabeza, pero con unas ansias infinitas que se hicieran realidad. La deseaba hasta lo inimaginable, pero se comportaría según fuera la reacción de Kate. Si ella sólo buscaba en él, caricias y mimos, es lo que tendría, pero si como él, necesitaba sentirse como en un solo cuerpo, le proporcionaría el placer completo. En este aspecto sabía que él, era experto, y tratándose de Kate, ya sería como alcanzar la gloria con las manos.
Hizo un esfuerzo y volvió a la realidad. No quería deleitarse antes de tiempo pensando en situaciones que quizás no llegarían a cumplirse. Lo mejor era dejarlo todo al azar, estaba seguro que no habría fallos.
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Laine antes de salir del lugar, aún dedicó una mirada a su amiga medio inconsciente, y vio a Castle, reclinado sobre ella mientras le retiraba los cabellos del rostro. Pensó que un hombre que actuaba de esta manera, que la miraba casi con adoración, sabría cuidarla, y proporcionarle el mejor medicamento, tanto físico, como espiritual. Él sabría hacerle olvidar el mal rato que tuvo que soportar en su casa cuando se vio invadida por un ladrón.
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Y en su imaginación surgieron escenas apasionadas entre ellos.
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Sacó su móvil, y llamó a Expósito, que aún estaba en la cama y preguntó asustado si le ocurría algo grave
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-. Nada que no puedan solucionar unas caricias y unos besos. No te muevas que ahora mismo voy para tu casa.
FIN-
Agosto 2011

¿YA?¿YA?

Jooooooo! Podías seguirlo!

si no tendrás que compensarnos con otro fic tan maravilloso como este!

Me encantó

Buen capitulo,y el final asi dejando lo demas al aire esta bien,aunque estaria bien que pasaria en la cabaña
A Lanie me temo que le ha dado envidia o mejor dicho,le ha leido la mente a Castle jaja
Enorme Maripaz como siempre,un fic tuyo,exito asegurado

joooo!!! yo me he quedado con ganas de saber que pasaría en la cabaña, aunque tengo una ligera idea
me encanta cuando Castle se preocupa tanto por Kate, es taaaan monoooo!!!!
esta genial es fic!!!!!! me ha encantado!!!
haber si vuelven a venir las musas y te ayudan hacer otro fic mas
un beso