Secrets (Anuncio MUY importante) Lo siento

mery_caskett escribió:Que bien que has vueltoooooooooooooooooo

Veo que el cumpleaños te ha traido inspiración y eso me alegra un montón!!! ^^

Raul, la chica q se choca yo creo q es Alexis, por lo del papeleo de ir a Yale y que va a estudiar medicina forense aunq a su padre no le guste la idea

Yupiiiii
Si y despues me la quito 'u.u

Dejemosle que divague a ver que se le ocurre en esa cabecita suya muahahahahah

Si es que los Rodgers están cortados con el mismo patrón. Sufren enamoramiento a primera vista de los Beckett. (Porque supongo que es el muchachito de Beckett)

Buenos días señores y señoritas, para comenzar bien este veranito que nos espera he decidido que si dios lo quiere puedo subir capitulo diario hasta marcharme de campamento Espero que comenteis y esas cosilas que todo el mundo agradece.
Bueno para empezar me apetecía dedicar este capítulo a toda la gente que escribís fics, pero hoy me quiero centrar en unas personas que hace poco han terminado los suyos y en una que esta a puntito. Empezamos por la apuntito , a mi tocaya Elena moth13 que acabara dentro de poco abriendo el corazón, por esas vueltas de trama inesperadas y que adoramos GRACIAS espero vuelvas pronto con otro nuevo para hacer de nuestro verano más a meno. A maria_cs por La Tormenta que finalizo hace un tiempecillo pero que ha vuelto con ganas con su continuación y que os recomiendo os va a dejar... por seguir con tus maravillosas ideas GRACIAS. A amnigl por Everything I Do (i Do It For You) que termino unos días antes qeu el de maria y que me encanto ese final me emociono y todo y espero que vuelvas pronto con más cosillas que podamos adorar y a Cata Castillo por volver a verte, juntos pero no revueltos MAGNIFICO
A vosotras Gracias porque habéis hecho que en las largas noches de estudio tuviera algo que leer ademas de formulas
Y no me enrollo más

Capítulo 9: So call me maybe:

Se levanta de forma ágil y se coloca frente a ella, tiende sus manos y la ayuda a levantar. Se queda parado, completamente congelado, perdido en esos ojos azules. Pasados unos segundos, consigue articular palabra y reza por no haberle parecido un idiota.

-Dios, lo siento perdona.

-Tranquilo no pasa nada.

-Vaya golpe más tonto.

-Pues sí, sí que lo ha sido, no te he visto pasar.

-Ni yo salir. Parece que ambos necesitamos una visita al oculista.

-Si eso parece. Oh mierda mírate estas empapado, lo siento debo de haberte tirado el café.

-No me había dado ni cuenta. Espera te ayudo con los papeles.

-Gracias.

-Mira parece que están secos.

-Menos mal.

-¿Son importantes?

Silencio. Sus ojos azules se clavan en él y al instante se da cuenta que ha metido la pata

-Perdona no contestes soy un entrometido, no me conoces de nada, lo siento de verdad.

Comienza a irse, cuando una voz le para.

-Espera, te dejas tus manzanas

-Oh…em…Gracias

-Una está incomible, pero las otras todavía parecen aceptables, al contrario que mi magdalena.

No se había percatado de que en el suelo esparcidas, además de sus manzanas, había dos magdalenas.

-Vaya lo siento.

-No te preocupes, creo que aún me queda dinero, me comprare otra. Hasta luego.

-Adiós.

La ve entrar al local y no sabe porque siente el deseo de seguirla, normalmente no hace esas cosas, pero no puede evitarlo, no puede dejarla marchar así como así. Sin pensarlo dos veces entra en la cafetería y se coloca detrás de ella.

-Sabes, esto va a sonarte extraño, pero ¿por qué gastarte dinero contribuyendo con este mundo capitalista cuando yo tengo dos manzanas que le he comprado a un buen agricultor de la acerar de enfrente? Puedes compartirlas conmigo dando un paseo. Si tú quieres.

La chica se gira. Le mira con cara de asombro, la ha pifiado, no debería haber entrado ¿por qué no se habrá ido por su camino? Él nunca hacía eso, aun que tampoco nunca había sentido eso. La nota dudar, le observa de arriba abajo “y yo con estas pintas” piensa, está convencido de que se va a negar, es más se prepara para recibir el bofetón del siglo. No debería haber hecho eso.

-Mundo capitalista ¿eh?

-Am… si, el capitalismo es muy malo.

-Ya.

-Entonces…

-Ni siquiera sé tu nombre.

-Me llamó Nick- Tiende su mano esperando que la acepte, ella la mira y tras unos segundos eternos, coloca los papeles y el café
en el otro brazo para estrechársela.

-Alexis

-¿Eso es un sí?

-Eso es un acepto, y un más te vale que me resulte interesante el paseo.

-Oh créeme, lo será

Salen fuera de la cafetería, limpia las manzanas contra su manga y se la ofrece. Ella acepta y él no puede creer la suerte que ha tenido esa mañana, la suerte que está teniendo, le parece mentira, un sueño. Caminan entre la gente y se pierden entre la multitud buscando un sitio retirado donde poder charlar, hasta que cada uno tenga que seguir su propio camino.

Cuelga con rabia, no tenían nada, no tenían ni una maldita pista y eso empezaba realmente a frustrarle. Tenía que darle algo a Beckett antes de que se obsesionara, tenían que dar con esa pista. Mira hacía su compañero, esta igual que él buscando en las cámaras sin encontrar nada de provecho.

-No, no ,no… ¡mierda!

-¿Qué pasa Ryan?

-Algo ciega las cámaras durante aproximadamente un cuarto de hora, después el cadáver ya está ahí, dos horas más y el tío que
dio el aviso sale gritando. ¿Has encontrado algo en la hoja?

-Nada. Ni una huella, ni una sola sustancia. Esta limpia.

-Si por lo menos pudiéramos identificar a la víctima.

-Lanie está en ello

-Por qué tardaran tanto…

-Ya sabes hermano, hay demasiados asesinatos en esta ciudad.

-Tenemos que darles algo.

-Lo sé hermano, lo único que podemos hacer por ellos es seguir buscando.

-Y pensar que estaban acercándose…

-Quien sabe Ryan a lo mejor esto les une más

-Ojalá, ojalá…


Conduce en silencio, baja en silencio, ninguno se atreve a romperlo, y eso que ahora mismo la tensión es tan patente, que podría cortarse con el filo de una hoja. Necesitan algo, algo que les indique que es un crimen al azar, que ha sido casualidad que la N no tiene nada que ver con ellos.

-Dime algo que me tranquilice.

Kate gira sobre sus tacones, hasta quedar justo de frente a esos ojos azules que la observan con preocupación, y por segundos siente a su respiración fallar, recapacita unos segundos que siente eternos hasta conseguir que las palabras atascadas fluyan.

-Ocurren cientos de asesinatos en las calles de Nueva York a diario Castle, no podemos controlarlo y este no será distinto.

Ambos se observan, se conocen tan bien que sin pronunciar ni una simple palabra comienzan entre ellos una conversación que jamás tendría lugar en voz alta, se mantienen así hasta que el pitido del ascensor les saca de su trance, anunciándoles que han llegado a la última planta, a la morgue.

-Buen intento inspectora, se lo agradezco.

-No hay de que Castle

-Buenos días

-Hola Lanie ¿Qué tienes?

-He cotizado las huellas y ¡bingo! aquí tienes

-Jason Jepsen, profesor, residente en ¿Riverside?

-Lanie, Riverside queda muy lejos de donde lo encontraron ¿esto está bien?

-Si Castle no hay error, lo han comprobado

-¿Qué hacia un profesor de instituto publico en la 106 a esas hora?

-Castle ¿quién te ha dicho que fuera de público?

-Bueno, viviendo en Riverside…

-Pudo salir a pasear por el parque y que todo esto sea una coincidencia

-Lo dudo, esto no pinta nada bien

-Castle no te pongas en plan negativo o no llegaremos a ningún sitio

-Solo digo que no me gusta el ritmo que toma esto

-Un profesor asesinado en la 106 sobre las…- Kate le hizo un gesto a Lanie para que la indicara la hora de la muerte

- Sobre las 3-3:30 de la madrugada

-Ves

-Pudo salir a tomar algo a la 5º…

-¿Un domingo?

-¿Tienes alguna idea mejor?
-Tengo una, pero no va a gustarte

Kate está a punto de encararse de nuevo a Rick cuando oye a sus espaldas una especie de sierra que provoca que ambos se lleven las manos a sus oídos sorprendidos, giran a la vez para ver que Lanie agita algo en el aire que es lo que ha provocado el ruido

-Ya vale, vosotros dos estáis muy alterados, y descoordinados, todo hay que decirlo, esta mañana ¿A alguien se le ha olvidado su
café matutino?


-Hoy no he podido ir a por el Lanie

-Vaya chico escritor ¿se te han pegado las sábanas?

-Ella ha venido a recogerme al loft

-Vaya, vaya chica eso no lo habías comentado.


-Me pillaba de camino Lanie no divagues


Kate nota como la sangre comienza a subir por su cara. Tiene que salir de ahí antes de que su amiga se dé cuenta y comience su ronda de preguntas, y ella no está preparada para responder aún sobre las imágenes que se están formando de ella y Castle en la cabeza. Respira hondo para eliminarlas y devolver sus fluidos a sus sitios de origen.

-Te dejamos trabajar Lanie, a ver si Espo y Ryan han encontrado algo sobre nuestro ex misterioso amigo.
-Oh no, tengo tiempo, es lo que tienen los muertos, que sus citas han quedado canceladas.
-Adiós Lanie
Kate empuja a Castle de la sala para marcharse, no sin antes dedicarle una sonrisa pilla a su amiga.
-No vas a librarte Katherine Beckett o no, de esta no- susurra Lanie, esa noche tenía planeado hacer una visita a Beckett a altas horas para asegurarse que nadie podría enterarse.

En un lugar alejado de Central Park dos muchachos ríen con entusiasmo, se miran a los ojos y se persiguen, juegan, se divierten, nadie diría que acaban de conocerse, parecen dos buenos amigos de toda la vida, amigos que estuvieran a punto de cruzar esa línea que separa la amistad de una bonita relación de amor juvenil.

-¿De verdad hiciste eso?

- Te lo juro, el padre de mi amigo casi ni podía quitar el papel que envolvía el coche patrulla, pero se lo tenía merecido.

-¿Por qué? ¿Qué paso no os dio suficientes caramelos en Halloween?

-Ooh, muy graciosa Castle- comienza a perseguirla por el césped intentando atraparla para tirarla al suelo

-No me llames Castle- Alexis se detiene de golpe chocando contra su cuerpo, propinándole un pequeño empujón- No me gusta

-¿Por qué? Es tu apellido, te permito que me llames Collin


-Pues yo a ti no te permito que me llames Castle

Comienza a caminar haciéndose la ofendida, está jugando con él, llevándole al límite, a ver cuánto aguanta.

-Hey Alexis, espera, era broma.

Justo cuando está segura que le tiene a su altura estira la pierna, él no la ve justo como esperaba y cae cuan largo es al suelo. Se gira sorprendido, mirándola con los ojos abiertos hasta sus topes, eso sí que no se lo esperaba.

-Vaya parece que alguien está empeñado en tirarme por los suelos.

-Eso por mi café y por llamarme Castle.

- De acuerdo señorita usted gana, ahora es de justicia que sepa que en los juegos siempre tiene que haber dos participantes.

- Y que me dices de un soli… uo

Antes de que pueda ni siquiera acabar la frase o esquivarlo Nick la tiene sujeta por el tobillo y tira de ella. Alexis cae al suelo, muy
cerca de él y cuando aún intenta recuperar el aliento, Nick la esta sujetando las muñecas contra la hierba. Alexis le observa mira sus ojos se pierde en tanto verde, intenta poner cara de enfado, se revuelve lucha contra él, pero es más fuerte que ella y no le sirve nada más que para cansarse.

-Escúchame Alexis tengo algo que contarte.

-Suéltame Nick

-No, sé que si te suelto huiras corriendo y esto es importante

-No, te lo juro me quedare a escucharte

-¿Sabes que estoy bromeando verdad?

-Lo sé

Ambos rompen en sonoras carcajadas, Nick la libra de sus ataduras y la ayuda a incorporarse a su altura, esa chica le estaba
volviendo loco, pero él había visto su carnet y sabía que le sacaba tres años. Es consciente que por los golpes y lo vivido aparenta más años, y ha de asegurarse de que Alexis sepa la verdad, no quiere presionarla en ningún sentido. Empezaría a sincerarse poco a poco, no había necesidad de contarla todo de golpe, no quería que saliera corriendo, quería llegar a ella, tenerla como amiga y si no salía corriendo al decirle su edad, bueno… nadie sabe qué puede pasar en la vida…

Nick recibe un ligero puñetazo por parte de Alexis

-Ey ¿a que ha venido eso?

-Me has tirado al suelo recuerdas

-Tu primero

-Te lo merecías

-Tómatelo como una venganza

-Que caballero…

-Es que hoy estábamos destinados a estar tirados por el suelo

-Por lo menos no es asfalto

-Eso siempre se agradece

Se sonríen, y se quedan allí unos momentos en silencio mirándose directamente a los ojos, sin decir ni una palabra y diciéndoselo
todo, desde el primer momento que emprendieron el camino no saben porque conectan, el uno con el otro, es como si les viniera de
fábrica.

-Bueno ¿Qué querías decirme?

-Te lo cuento si me prometes que no saldrás corriendo y que me dejaras comprarte un helado después

-Nadie dice que no a un helado incluso aun que estemos en Septiembre

-De acuerdo ¿Cuántos años me echas?

-Algo súper importante

-Venga Lexie hablo en serio ¿Cuántos?

-17

-Tengo 15

-¿Cómo?

-Te dije que era importante, recuerda que prometiste no irte.

-¿15?

-Si te sirve el mes que viene cumplo los 16

-¿Por qué me cuentas esto?

-Cuando te has caído entre tus papeles estaba tu carnet y he visto la fecha. Sé que tienes 18 y he supuesto que no te haría
mucha gracia cuando te enteraras que has pasado toda tu mañana con un crio

-No me pareces un crio

-Eso es porque soy un niño grande

-Que tonto eres

-No te metas conmigo, se lo diré a mamá

Nick hace pucheros imitando a un niño pequeño, Alexis ríe ese chico le encanta, es graciosos y tiene un toque chulito. Al principio era reticente a ir con él sola por las calles de la ciudad sin conocerlo, pero poco a poco su desparpajo había hecho que olvidara la hora que era y se dejara llevar por la emoción. Redoblan las campanas de una iglesia lejana, las cuenta mentalmente, no tocan más que dos veces, miran a la vez sus relojes, se les ha hecho tardísimo, ninguno era consciente del tiempo, para ellos se había detenido, estaban en otro mundo, pero era la hora de bajar de las nubes y tocar con los pies en la tierra.

-Mi padre

-Mi madre

-Es tardísimo

-No me había dado cuenta

-Tengo que irme

-Y yo, encantado Alexis, espero que nos veamos

-Espera toma

Saca de su chaqueta un bolígrafo y le toma de la mano, apunta unos números antes de soltarle

-No olvides apuntarlo en un papel antes de comer

-Guau, eso ha sido

-¿Divertido?

-Si… eso… divertido…

-Tal vez podamos quedar esta tarde

-No lo sé, acabo de llega r a la ciudad desde Nueva Jersey y me he instalado este fin de semana con mi madre

-¿Es muy estricta?

-No lo sé

-¿No lo sabes?

-Es muy largo de contar, quizá otro día, te llamare lo juro, ahora he de irme o se preocupara. Adiós Alexis.

Se acerca lentamente a ella y justo cuando sabe que cree que va a besarla, gira la cabeza para ponerse frente su mejilla, susurrando se despide de ella, diciéndola lo encantado que esta de haberse chocado con ella. Deposita un tierno beso en su mejilla antes de echar a correr en contra dirección.

Alexis se queda ahí sin reaccionar, totalmente paralizada, ese chico… la tenia, hacia mucho que no se sentía así, desde Ashley no
había levantado cabeza, le resultaba imposible volver a querer a alguien como lo había hecho con él. Y ahora como por obra de magia chocaba con un muchacho misterioso y la encandilaba con sus gestos, sus miradas, sus risas, sus bromas. Se parecía tanto a su padre que le resultaba encantador. Le daba igual la edad, ese chico tenía algo, esa cosa, que hace que tu corazón de un vuelco y tu cabeza viaje a millones de años luz de la tierra. El tiempo a su lado se había detenido y eso le encantaba .Se sentía bien a gusto, y por un extraño motivo, se sentía como en casa.[/font]

Bueno pues he pensado que os puedo dejar una canción con cada capitulo y bueno en el anterior se menciona en varias ocasiones esta canción y fue la que me inspiro la escena del número y todo se llama Call me maybe De Carly Rae Jepsen (pillemos el apellido )Así que nada espero que os guste cancion y cap y siento si se os hace pesado

preciosooo siguee

Primero: muchas gracias por tu dedicatoria, y si me dejar elegir, prefiero los besos a que me mates

Y luego, este capítulo ha sido precioso, me encanta que te centres en Alexis. Un beso!!!!

Sigue prontooooo

Extrañaba esta historia! Hermoso capítulo!

castle&beckett..cris escribió:preciosooo siguee

gracias

maria_cs escribió:Primero: muchas gracias por tu dedicatoria, y si me dejar elegir, prefiero los besos a que me mates

Y luego, este capítulo ha sido precioso, me encanta que te centres en Alexis. Un beso!!!!

Primero: gracias a ti y lo de los besos te lo estas ganando poco a poco dentro de unos cuantos capitulos de la tormenta veras si en tu puerta gay un ramo de rosas o una avalancha de personas con hoces y antorchas

Y muchas gracias que me digas esas cosas tu M O L A
uii Alexis va a aparecer mucho

LEILAKB escribió:Sigue prontooooo

Muchas Gracias por comentar

Jorja escribió:Extrañaba esta historia! Hermoso capítulo!

Muchas gracias

Muy lindo el capítulo,
Continua pronto

Vale antes de nada decir que la primera parrafada va dedicada a Raúl para que me llame doña pastelosa con razón y bueno por favor comentad este capítulo con vuestra opinión por que a mi me ha dejado bastante mosca, no sé, cosas de adolescentes supongo. Un besito y espero que os guste

Capítulo 10: Seré tu fuerza

Es asombroso como algunos pueden estar viviendo en una pesadilla mientras, por obra de magia, sus seres más queridos se dejan llevar por un mar de emociones, que les mantienen en un cielo muy alejados de la tierra, que les hace flotar, soñar despiertos, mudarse sin salir de este a otros mundos. Todo Nueva York esta en ebullición, camareros acelerados con demasiado trabajo, gente de aquí para allá, todo el mundo corre, nadie mira a su alrededor, nadie se preocupa por los demás, los detalles que podrían solucionar un caso no se observan por despreocupación ajena, parece increíble que en una ciudad con tan alto nivel de auto preocupación existieran personas que atendían a algo más lejano de sus narices, pero solo hay que pasear un poco, observar mas a fondo y te encuentras con madres cuidando a sus hijos, a padres embobados con sus travesuras, abuelos que felices compran un helado a sus nietos, y amor, si en una ciudad tan grande el amor tiene un papel importante, cuida y protege a las personas que habitan en esta ciudad, y hoy esa manta que esta y no se ve había decidido dejarse caer sobre dos chicos jóvenes, dos chicos que nada sabían el uno del otro hacia unas horas, que habían pasado por mucho en su vida y que el destino les ofrecía disfrutar después de mucho tiempo, de vivir sin tener que preocuparse del mañana, de tomar esa oportunidad día a día.

Ambos meditan sobre su encuentro casual hace apenas unas horas, dejando que una ola de emociones les atrape y sacuda de pies a cabeza, sintiendo felices hasta la ultima fibra de su cuerpo. Ambos apoyados en las islas de sus respectivas cocinas, soñando con el otro. Él toma su móvil, observa con cuidado los números de su mano sonriendo al recordar esa escena que podría haber pertenecido a cualquier película. Manda un sms al número que esta grabado en su piel.

Oye su teléfono sonar indicándola que tiene un mensaje, lo lee y no puede evitar que una sonrisa ilumine su cara.

“Espero q pienses en mi cm yo en ti, mañana en el mismo sitio. No faltes. XOXO”

Un repiqueo en la mesa le indica que le han contestado, se lanza emocionado a por su teléfono, pero el nombre que ve le extraña, hasta que recuerda todo, pensaba que nunca vería ese nombre aparecer en pantalla “MAMÁ” le decía que no podría ir a comer, que tenían un caso complicado que la obligaba a ir a Nueva Jersey a interrogar a unas personas y que volvería sobre las 6 acompañado de un guiño y un te quiero. Pensaba que comerían juntos después de tantos años, pero no se decepciona, ya es tarde para concertar una cita así que decide que pasara toda la noche ordenando sus cosas y por qué no, tocando un poco la guitarra.

Tenían una pista, el profesor asesinado daba clases de español en un instituto público de Nueva Jersey el Sylvan Learning Center.
Castle y ella se dirigían hacia allí, eso le fastidiaba, tenía ganas de llegar a casa y disfrutar de una tarde tranquila con su hijo, desde que le había recuperado alejarse de él no le hacia gracia.

-Sabes algún día podría conducir yo

-Si claro, en tus sueños Castle, tu no tocas el volante de mi coche ni aun que me pegaran un tiro.

Castle la mira con los ojos abiertos como platos, esa respuesta no se la esperaba, no en esa situación

-Castle ha sido una broma lo he dicho sin pensar.

-Ya pues no te imaginas lo mal que suena con la que nos esta callendo

-Castle, no pasa nada, esto es un caso como cualquier otro.

-Te vi morir

Ahora era Kate quien le observaba asombrada, nunca había dicho nada, nunca se lo había contado, pensaba que él habría
superado ya todo el tema.

-En aquella ambulancia, moriste delante de nosotros. No me mires así ¿pensabas que lo habría superado? Nunca

-Castle… esto no es necesario.


-Si lo es Kate, sabes que lo es ¿Qué pasa si vuelve a explotar una bomba? Puede que la próxima vez no te metas en la bañera o
que yo no este lejos de el epicentro. Deberíamos aprovechar cada momento y no dejar para mañana lo que puedas hacer hoy
La estaba mirando con esos ojos, los mismos que puso el día del entierro de Montgomery. Ojos de miedo, pero que a la vez
estaban llenos de amor, de amor y terror combinados en un precioso azul que la hacia estremecerse. Lo recuerda todo y no se lo
ha contado, sabe que la quiere, y día tras día se calla, no podrá aguantar esa situación mucho más

-Rick… yo…

-Beckett hemos llegado

Kate centra de nuevo su vista en lo que tiene delante de los ojos y vuelve a encerrar todos sus sentimientos ‘después del caso’
se dice a ella misma, dándose tiempo para poder poner en orden sus ideas y calmar de paso su culpabilidad por mantener silencio esos meses.

Bajan del coche y se dirigen a la conserjería, justo cuando les van a dar el alto Kate saca la placa para identificarse

-Kate Beckett, inspectora de Nueva York y este es Richard Castle asesor de la unidad, necesitamos hablar con su director, es
urgente.

-Si señora sígueme.

El conserje les dirige a un despacho con grandes ventanales que da directo al pasillo por el que los alumnos pasan corriendo,
apurando los últimos segundos entre clase y clase. En la silla observando con rudeza el monitor de su ordenador hay una mujer de
unos 40 y pocos años que no nota su presencia hasta que el conserje la susurra al oído y señala a Castle y Beckett. Al instante la
directora despide al conserje y les indica con la mano que tomen asiento

-Buenos días inspectora, Señor Castle. ¿Qué les trae por nuestro colegio?

-Señora Figins ¿Tiene usted en nomina a Jason Jepsen?

-Si así es, es nuestro profesor de español ¿a tenido algún problema? ¿Ha pasado algo?

-Díganoslo usted hoy es lunes ¿ha asistido a clases?

-Bueno eso seria improbable, el señor Jepsen da cursos los sábados, por lo que libra los lunes ¿esta bien?

-Directora el señor Jepsen ha aparecido muerto esta mañana en un callejón de la 106 ¿sabe algún motivo por el que le quisieran

muerto?
La directora les mira a ambos con cara de asombro y pasa su mirada de uno a otro alternamente, intentando procesar todo.


-No, no que yo sepa, no tenía problemas con profesores y los alumnos le adoraban, era un buen hombre, algo juerguista… pero separaba lo personal de lo privado.

-¿Juerguista?

-Si señora, varios compañeros se lo encontraban más de un día borracho en un bar de la ciudad, pero siempre los domingos,
nunca en diario, ni si al día siguiente tenia que venir a dar clases.

-Sus alumnos son adolescentes ¿no tenía problemas con ninguno de ellos?

-Nuestros alumnos son buenos chicos, muchos de ellos hijos de familias importantes de la zona que prefieren traerlo a la pública
que a la privada, porque saben que nuestro programa educativo es más completo y personal con los chiquillos.

-Ósea que quiere hacernos creer que todo es perfecto en este instituto y con los muchachos no hay problemas

-Bueno…

-Eso ya suena más creíble señora Figins

-No es nada malo, los muchachos bromeaban con que el señor Jepsen tenía un especial cariño con uno de nuestros alumnos.

-¿Quién?

-No lo sé, nunca han dicho su nombre, y tenemos matriculados más de 700 alumnos no me sé todos sus expedientes, es algo que
oí de pasada hace unas semanas.

-¿Qué tipo de cariño señora Figins?

-Nada malo inspectora o le habríamos dado aviso, serán chiquilladas de los muchachos

-Esas cosas no son chiquilladas

-Escuche inspectora no era un pederasta, los niños hablan y si creen que un profesor ayuda a un alumno si tiene problemas o le
alaba si saca buena nota ya es el favorito.

- De acuerdo no le haremos perder más el tiempo pero nos gustaría hablar con los profesores.

-Las clases de por la tarde están a punto de terminar y las nocturnas comienzan en dos horas, cuando acabe este turno estarán
la mayoría en el aula de profesores, Hodgins, nuestro conserje, les llevara allí.

-Gracias señora Figins

-A ustedes, inspectora, señor Castle.

-Buenas tardes.

Se despiden con un apretón de manos, antes de que la directora llame por un interfono a conserje. Cinco minutos después Castle
esta sirviendo unas tazas de café para ambos en la sala de profesores.

-Aquí tienes.

-Gracias Castle

-De verdad crees que todo es tan de color de rosas como nos lo ha pintado

-Ni de lejos, creo que nos esconde algo


-Pues entonces opinamos igual

Oyen pasos cerca de ellos y a continuación el timbre que marca el final de las clases. Al poco un hombre de treinta y pocos años
aparece en el umbral de la puerta viene acompañado por una mujer en situación bastante acaramelada. Ni les ven, se ríen las
gracias y empiezan a acercarse más de lo debido cuando oyen el carraspeo de Beckett llamando su atención.

-Vaya, disculpen. Hola ¿ustedes son?

-Inspectora Kate Beckett y Richard Castle asesor de la NYPD

-Vaya… buenas tardes… Daniel O´Connor y Sarah Horan profesores de historia

-Buenas tardes ¿les importa si les hacemos unas preguntas?

-No para nada inspectora ¿Qué ha pasado?

-¿Conocian ustedes al señor Jepsen?

-¿A Jason? ¿El profesor de español? Si le conocíamos es compañero nuestro ¿Esta bien?

-Le hemos encontrado muerto esta mañana

-Dios eso es terrible

-Sabe si tenia algún problema con alguien

-No señora que se sepa no ha tenido ningún conflicto en los tres años que llevaba aquí

-Nunca

-Nunca. Yo ya estaba aquí cuando Jason entro y no recuerdo ningún altercado

-Ni con nadie de la comunidad escolar o de fuera de esta

-Ninguna queja de padres ni alumnos ni de los servicios de mantenimiento

Castle que había permanecido callado observando a los profesores, llevaba rato fijándose en que la mujer no hablaba ni hacia la
intención y aun así parecía con la mirada perdida, en algún punto de la habitación. Entonces decide actuar sabe que les esta
ocultando algo y podría ser importante

-Señora Horan ¿esta de acuerdo con todo lo que dice su compañero?

Kate mira a Castle, hace tiempo le habría propinado un puntapié para que se callara y no metiera baza , pero tantos casos juntos
la habían demostrado que Csolia tener buenas ideas y aunque le fastidiara aceptarlo que podría percibir cosas que a ella se le
pasaban, decide dejarle actuar a ver a donde les lleva sus locas ideas esta vez.

-Bueno…¿Daniel recuerdas el martes de la semana pasada?

-Si, estuve enfermo ¿paso algo?

-Si, Jason tubo un enfrentamiento, una tontería, el y el señor Figins el profesor de matemáticas se enfrentaron, pero todo quedo
en agua de borrajas.

Beckett y Castle se miran asombrados esa mujer acababa de decir lo que ellos creían.

-El señor Figins

-Si inspectora el marido de nuestra directora

-¿han hablado ustedes con ella?

-Hace solo unos momentos

-Que raro, a Rachel no se le suele olvidar nada

-Señorita Horan ¿recuerda el motivo de la discusión?

-No se llego a decir.

-¿Sabe la directora algo de esto?

-O si señora ella estaba delante, fue quien puso orden

-De acuerdo señores muchas gracias han sido de gran ayuda

Kate se pone en pien y en seguida la imitan tanto Castle como ambos profesores.

-Adiós inspectora.

Se despiden con un rápido saludo y Beckett emprende el camino a la salida seguida de Castle.

Montan en el coche y conducen todo el tramo en silencio, tienen un buen trayecto hasta llegar a la ciudad, están deseando que
acabe ese día, tumbarse en sus camas, abrazar a sus familias y contagiarse de buen humor y de cariño. Al rato de salir de Nueva
Jersey Castle duerme apoyado contra la ventana del copiloto, Kate le mira cada poco tiempo, esa imagen le resulta
enternecedora, parece un niño pequeño durmiendo, un niño ajeno a todo, la encantaría meterse en sus sueños, saber porque si
hace unos minutos estaba tan pesimista ahora en sus sonríe. Llegan a la ciudad con la noche recién caída, es demasiado tarde para pasar por la 12 mañana preguntaran por alguna novedad. Dirige el coche al loft de Castle e intenta despertarle por el camino dándole pequeños golpes en el brazo para que se espabile, pero Castle no responde, farfulla en sueños y sigue dormido, a escasas dos manzanas de llegar Kate opta por algo un pelín más brusco, por lo menos se reirá un rato. Coge la oreja de Castle y se la retuerce no demasiado fuerte, lo suficiente para espabilarlo

-Arriba Bello Durmiente

-¡¡¡AAAAHHH!!! ¡¡¡MANZANAS, MANZANAS!!! Suéltame la oreja por dios

-Ahí tienes Castle toda tuya. Hemos llegado.

-No sé si darla las gracias inspectora o irme ofendido por su manera “tan delicada” de despertar a un caballero.

-Sal del coche Castle, Alexis y Martha estarán preocupadas. Hasta mañana


-Hasta mañana inspectora que tenga usted unas muy buenas noches.

-Igualmente Castle

Espera a que entre en el portal antes de arrancar y dirigirse a casa. Lega sonriente, esperando encontrarse aun a su hijo
despierto. Le apetece verle, no entiende aún muy bien porque le pasa eso, pero quiere abrazarlo, sentirse unida a él. Hasta ella
vuelan un montón de recuerdos, de repente no es el adolescente quien le espera si no su bebe, risueño y feliz, con sus holluelitos
marcados cuando sonreía al verla, se detiene y se deja caer contra la pared, se la acaba de encoger el corazón por algún motivo
que desconoce, pero que la sacude. Se apresura a buscar las llaves para abrir la puerta de casa y se lanza al interior.

-Nick, ya estoy aquí hijo. ¿Nick?

Da vueltas por el salón buscando alguna señal de él, se encamina al baño pensando que se pueda estar dando una ducha pero allí
no hay nadie, vacío total y completo, se le acelera el pulso y todo parece dar vueltas, en acto reflejo su mano vuela a su arma, le llama y no responde, va a su habitación como última opción, sin dar la luz, en su cama hay un bulto ‘que sea él que sea él’ ruega de nuevo a ese dios en el que no cree y echa un poco hacia atrás la sábana descubriendo unos rizos rubios y a su hijo profundamente dormido, podría haber estallado una guerra que el ni se habría enterado, y mucho menos la habrá oído llamarle. Retira un mechón de pelo que se ha pegado contra su frente, acaricia su cara, sus moratones de los que no queda rastro alguno y le besa en la mejilla, necesitaba sentirle cerca, que estaba allí, hasta la mañana eso seria suficiente, le arropa y sale en silencio de la habitación asegurándose de no hacer ruido.

Se da una ducha rápida antes de cenar, entrecierra los ojos y su mente vuela a Castle, otra vez Castle, lo tenia en sus
pensamientos las 24 horas al día y sería peor cuando estrenara su nueva novela y periódico,s televisiones, radio, internet… todos los medios hablaran de ella, entonces si que le tendría hasta en la sopa.
Esta dispuesta a olvidarle, aunque solo sea por unas horas, justo cuando va a coger el teléfono para pedir la cena, ve una nota pegada en el auricular.

‘Tienes la cena en la nevera, no llames a nadie, tanta comida precocinada no te debe de sentar muy bien. Besos. Nick’
Sonrie, le había tocado la lotería con ese niño, era adorable. A punto de abrir la nevera tocan a la puerta, mira su reloj, es demasiado tarde y no ha llamado a nadie, vuelve a colocar su mano en el arma antes de abrir. ‘No puede ser, ¿por qué dios mio por qué´?

-Bueno chica ¿vas a dejarme pasar?

-Hola Lanie…

Vale ante todo aclarar un pequeño error que se me paso en la corrección de el anterior capítulo LAnie NO sabe nada de Nick así que mañana habrá marrón.

Y bueno e aquí la canción inspiradora del título de este capítulo que lleva en repeat mucho tiempo rn mi Mp3

Muy bueno, continua
Quiero ver que le dice
Lanie Y que pasa
Con Nick y Alexis

preciosooo siguelooo

chelcas escribió:Muy bueno, continua
Quiero ver que le dice
Lanie Y que pasa
Con Nick y Alexis

Muchisimas gracias
esos dos van a dar muchoooo de que habalr muahahaha (bueno eso espero)

castle&beckett..cris escribió:preciosooo siguelooo

Muchas gracias

Vaya doña pastelosa vuelve con doble capitulo y por supuesto me ha hecho vomitar arcoiris
Por cierto ya me he enterado..ya se quienes son esas dos personas que se han chocado,son los respectivos hijos de nuestra pareja favorita
Asi que,se podría decir que de tal palo tal astilla jajajaja.
Esto cada vez se pone mas interesante,sigue asi vecina

como te he echado de menos escribiendo!!!!! ahora si q se va a armar una buena con Lanie jojojo

Raúl escribió:Vaya doña pastelosa vuelve con doble capitulo y por supuesto me ha hecho vomitar arcoiris
Por cierto ya me he enterado..ya se quienes son esas dos personas que se han chocado,son los respectivos hijos de nuestra pareja favorita
Asi que,se podría decir que de tal palo tal astilla jajajaja.
Esto cada vez se pone mas interesante,sigue asi vecina

lo bueno y doble dos veces bueno hahah OBVIO y encima la parrafada cursi única y exclusiva para ti

hahaha siii bravo Raúl lo has descubierto
Tal palo tal astilla y de tal corazón tal copia
lo intentare vecino por lo menos que llegue a tus expectativas
PD: a ver si quedamos aun que sea con Gabriel

mery_caskett escribió:como te he echado de menos escribiendo!!!!! ahora si q se va a armar una buena con Lanie jojojo

Joe yo tambien echaba de menos tu comentarios Lanie va a ser la bomba que explota cuando menos te lo esperas hahahaha

SUBE EL SIGUIENTEEEE POR DIOOS

Bueno chic@s este capitulo es más corto que de costumbre pero como muchos sabeis me voy a un campamento una semana y no podre postear pero no queria irme sin despedirme de vosotros como es debido así que a todos GRACIAS espero que cuando vuelva me hayais saturado a mensajes porque os voy a echar muchiiisimo de menos no me enrollo más Besos os quiero que lo disfruteis y a si este va por mi family foreril mis hermanos y primos, qwerty, Javi, Einar, Mari y Jessi por esas tardes/mañanas en el Chat sois lo mejor me impulsais cada día Gracias por estar ahi y como siempre a Sara que solo la ha faltado ponerme una pistola en el cuello ayudada por Petra

Secrets Capitulo 11: WTF KATE??

Comenzaba a refrescar, la brisa de Nueva York traía ahora el frio del centro del océano. Pero a pesar de la locura de tiempo que sufría la ciudad, las calles estaban alborotadas de vida, de gente yendo de aquí para allá. El hecho de ser lunes noche, casi madrugada de martes, no impedía que las luces de neón brillaban con fuerza, iluminando la noche neoyorkina. Los habitantes iban a bares, a casas de amigos, a restaurantes, quedaban para charlar a vista de todos o en apartados reservados alejados del bullicio y nadie se llegaba a plantear en ningún momento si volverían a abrir los ojos para ver un nuevo amanecer.

Pero Beckett si lo hacía, cada mañana al despertar se paraba frente a su espejo y observaba su reflejo, pero no toda la imagen que el espejo la devolvía, si no esa pequeña marca a la altura de sus pechos, más cerca del izquierdo que del derecho. Cada mañana tomaba unos minutos de su tiempo para contemplarla, acariciarla y preguntarse cuanto la quedaba de vida, si esa sería su último día, para después dejar volar su mente a aquella tarde en el que abandonara su cuerpo por minutos. Se recordaba el golpe seco que sintió en el pecho, como notó la bala atravesar cada célula de sus tejidos, el sabor a sangre en la boca, el frio del metal introduciéndose en su pecho, el golpe contra el suelo. Recordaba también a Castle, mirándola con esos ojos llenos de terror, rogándola que se quedara, que no se fuera, mientras ella notaba expirar sus fuerzas. Sentía como el peso de Rick sobre desaparecía pero él seguía ahí, como su cuerpo ya no estaba, como todo se volvía oscuro alrededor de él y por último le recuerda pronunciando las últimas palabras que en ese momento esperaba oír, un te quiero. Si, Kate Beckett lo recordaba cada mañana antes de ir a trabajar, antes de ver a su compañero, como él la había confesado que la quería, y ella simplemente lo había dejado pasar, había fingido apartarlo en un lado de su memoria, cuando recordaba cada palabra que había salido de sus labios, como no iba a recordarlo si lo vivía cada noche en sus sueños, le imaginaba junto a ella queriéndola, amándola como solo él podía, pero al salir el sol, la bruma que hace que los árboles parezcan llenos de luces por el reflejo de las estrellas y el abrazo soñado de Rick se desvanecían y solo quedaban los árboles solitarios de la acera y el frio lado contrario de la cama al no haber dormido allí nadie en casi un año. Nadie más que ella conocía su pequeño secreto, bueno, ella, su psicólogo y aquel ladrón de poca monta al que hacia unas pocas semanas se lo había soltado en un interrogatorio, buscando sonsacarle la verdad de lo acontecido en aquella plaza. Daba gracias a todo lo que conocía, por que Castle no estuviera con ella ese día, pues no sabía si se habría podido controlar y Rick merecía saber de otra forma la verdad.

Cada día Beckett esperaba ese segundo disparo, en el que ni Castle, ni Lanie, ni Ryan, ni Esposito, ni siquiera Josh pudieran hacer nada y ella tuviera que irse sin poder decirles a las personas que quería lo que llevaba guardando desde hacía tanto tiempo. Pero esa noche Kate no temía a ningún francotirador, podría haber venido el ejército entero a matarla que ni la hubiera preocupado. Toda su atención se encontraba posada en la persona que aguardaba en su umbral, sonriente con una botella de vino en la mano y con intención de no atender a razones para marcharse. Si su amiga descubría que le había ocultado durante esos años que había sido madre adolescente y lo peor, que su hijo dado en adopción hacia tanto tiempo estaba dormido en su cuarto de invitados, la mataría con sus propias manos, para después ser su bisturí el que realizara su autopsia. Y tenía claro que no iba a librarse, no esta vez, su amiga iba a descubrir todo su pastel, esa noche no la iban a olvidar tan fácilmente todos los que estaban en el estudio de Kate.

-Bueno chica ¿vas a dejarme pasar?

-Claro Lanie, entra.

-Bueno amiga, nos debemos una charla y esta vez no vas a librarte tan fácilmente de mi porque he traído yo el vino.

-Qué será que me lo temía.

-Sabes que no puedes seguir así

-¿Así como?

-Se te ve triste distante, debes hablarlo con alguien, por ejemplo conmigo.

Beckett suspiró, la verdad es que sabía que hablarlo con Lanie no iba a hacerle ningún mal, podría ayudarla, al fin de cuentas era su mejor amiga.

-Trae esa botella de vino anda

Una sonrisa de victoria, eso es todo lo que recibió por parte de su amiga, además de la botella.

-Bien, ¿Qué está pasando?

-No sé Lanie, algo ha cambiado algo ha pasado con Castle, últimamente tenemos un rollo raro

-¿Ultimamente? Hace cuatro años que tenéis un rollo raro

-No esto es diferente. El esta diferente, como más distante

-¿y por eso le culpas? Seguro que está harto de esperar

-¿Esperar a qué?

-¿tú qué crees? Ese tío esta loquito por tus huesos y aunque intentes disimularlo tú estás loca por él.

Beckett negó con la cabeza, aunque en realidad su mirada de asombro confesaba todo lo que su boca no pronunciaba.

-¿Qué?¿se suponía que era súper secreto?

-Si…No

Se deja caer sobre la banqueta junto a su amiga

-¿Crees que lo sabe?

-¿recuerdas como era con una chica colgada de cada brazo? Hace mucho que no se ve a ese tío ¿por qué crees que es?... Está esperando por ti.

Silencio, silencio incomodo, Kate reflexionaba ¿y si lleva razón? ¿Y si Rick de verdad ha cambiado? Pero ¿por ella?

-Ya pero…

-Lo sé, lo sé tienes muchos problemas pero no puedes pedirle que espere eternamente. A no ser que no te importe que se acabe yendo.

-¿Y si no sale bien? ¿Y si acaba como lo tuyo con Javi?

-Nosotros al menos lo intentamos, vale, no salió bien ¿y qué? Ahora podemos pasar pagina salvando algún que otro revolcón

-Es que no quiero perder lo que tenemos.

-¿Lo que tenéis? ¿Cómo llamarías exactamente a lo que tenéis?

-Una amistad...

-No, lo que tenemos tu y yo es una amistad. Lo que tenéis Castle y tú es un tiovivo ¿Cuántas vueltas podéis dar sin que uno de los dos salga despedido?

Beckett se volvió a meter en su mundo de cavilaciones y cálculos pero esa vez, su amiga llevaba razón, esa tensión sexual se les estaba escapando de las manos. Estaba tan concentrada en sus pensamientos y cavilaciones que casi ignora el ruido seco que se había producido en su baño si un hubiera sido por la mirada fría y
llena de confusión que la acababa de lanzar Lanie.

-¿He interrumpido algo?

-No… no… clro que no. Estoy sola en casa.

-Espera-Lanie miro por encima- Ahí hay platos, en el fregadero, pero tu cena está en la mesa. Katherine Beckett ¿Quién está aquí?

La voz de Lanie comenzó a alzarse, estaba segura que Nick las estaba oyendo. No podía ocultar más aquello, tomo aire y se armo de valor.

-Nick, sal, sé que estas ahí.

Lanie se quedo boquiabierta cuando del cuarto de baño salió un muchacho completamente despeinado con una camiseta de tirantes y unas bermudas de pijama.
Traía cara somnolienta, de recién levantado, lo cual por las horas resultaba normal, lo anormal es que estuviera en casa de su amiga

-Kate ¿ahora eres una asalta cunas?

-¿Qué? ¡NO! ¿Cómo se te ocurre?

-12 de la noche, un niño sale de tu baño despeinado, no sé tú.

-Lanie , este es Nick, mi hijo.

*cortinita de estrellas*

pero como lo dejas asiiiiii!!!!siguelloooooo

como que asi se queda?!?!, noooo,

muy bueno, continua pronto