"Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
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"Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
Bueno, queridos lectores, acosadores, pesados, amigos, familia, y demás cosas que existan! Aqui os dejo con el primer capitulo de "Nuevos Caminos", es la continuación de mi fic anterior "Vacaciones"----> https://forocastle.forosactivos.com/t1922-vacaciones-cap9-final-nota-de-la-autora (Hay lo teneis por si alguien no lo ha leido)
Y bueno, no voy a decir mucho porque estoy muy, muy, pero que muy cansada, os lo aseguro! haahahah Así que no me alargaré más! ahahah Si eso ya lo haré en el siguiente capitulo! hahahha (Lo siento Raul, es lo que toca )
Simplemente aclarar que, bueno... El fic lo escribi antes del capitulo 3x24, en donde muere Montgomery, disparan a Kate, y blah, blah, blah..
Asi que vamos a ver, imaginaos que este fic está escrito como una continuación del 3x23, de acuerdo? Así que Kate está completamente sana, NO ESTÁ GATES, sino Montgomery, y todo eso!
En fin, si os gustó "Vacaciones" estoy segura de que os gustará este fic de continuación! Espero vuestros comentarios y opiniones, y como siempre, muchisimas gracias a todos!! Sois los mejores!
PD: Aviso, estoy tan cansada que posiblemente veréis un montón de fallos, o cosas que no están bien, o simplemente no os guste como ha quedado para ser el primero, pero estoy terriblemente cansada, apenas sé lo que estoy escribiendo ahora mismo! hahaha Pero os prometo que mañana lo corregiré! Pero si veis fallitos, no dudéis en decirmelo!!
(Anteriormente en Vacaciones...)
Mientras apoyaba la cabeza contra la fría pared, unas piezas encajaron en ese momento. Aquella hambre voraz, las nauseas, los vómitos, el mareo...
-No puede ser-.susurré para mí misma antes de que Castle apareciera por la puerta con el vaso de agua en las manos y me ayudara a tomármelo.
-2 meses después-
-Castle POV-
-No lo intentéis, nadie puede conmigo-.canturreó feliz Esposito sin apartar la mirada de su ordenador.
-¿Puedes bajar el volumen, Javier?-.pidió su compañero quién no tardó en volver a dirigir la vista a la pantalla.
-Vamos, Bro. ¿Es que no puedes mirar tartas de boda con un poco de ruido?
-¿No tenéis trabajo?-.interrumpí pasando por su lado y dejando mi café y la manzanilla de Kate en la mesa de ésta.
-Bueno, Lanie está en el depósito examinando al cadáver, y hasta que no llegue Beckett no podemos hacer nada.
-¡Lo sabía!-.exclamó Esposito alz
ando los brazos en señal de victoria.-¡Soy invencible!
-¿Beckett no ha llegado?-.pregunté con tranquilidad omitiendo el comentario del detective.
No era la primera vez que llegaba tarde en aquellas últimas semanas, aquellas últimas semanas en las que manteníamos duelos de miradas y apenas cruzábamos palabras. Desde que había decidido cambiar su café diario por manzanillas o en algunas ocasiones, té, todo entre nosotros había cambiado. Discutíamos a la mínima oportunidad y la existencia de comunicación entre ambos era prácticamente nula. Había intentado hablar con ella, averiguar qué era lo que le pasaba desde que volvimos al trabajo, pero por cada paso que daba, retrocedíamos tres. Tenía que preguntarle a Lanie si tenía idea de que era lo que le pasaba por la cabeza y que provocara esos cambios de humor tan repentinos en ella. Necesitaba saber si había hecho algo mal para llegar a estar de ese modo.
-Ya ves, parece ser que a nuestra jefa se le han vuelto a pegar las sábanas esta mañana-.dijo Kevin.
-Ha sido el despertador, y no está bien que habléis de mí a mis espaldas-.se defendió Kate apareciendo ante nosotros y ocupando su sitio habitual cogiendo a la vez su bebida.-¿Qué tenemos?
-Nada del otro mundo-.comenzó Ryan buscando entre sus notas.-Mujer, treinta y pocos años y sin identificación. El camarero del restaurante de la esquina que salió a tirar la basura la encontró y nos llamó. Viendo la escena del crimen se puede deducir que allí la mató su asesino.
-¿Causa de la muerte?
-Disparo a quemarropa, calibre pequeño, una nueve milímetros aproximadamente.
-El asesino la conocía-.aseguró la inspectora.-¿Testigos o alguien que haya escuchado algo?
-De momento tenemos a una señora de ochenta años que vive cerca del callejón donde se encontraba la víctima y se asomó por la ventana al escuchar el fuerte rugido de un motor.
-De acuerdo. ¿Podríais traerla? Me gustaría hablar con ella-.pidió Beckett.
-Nos hemos adelantado, así que ya tiene que estar a punto de llegar-.aclaró Javier mientras continuaba con su juego.
-Buen trabajo.
En cuanto cada uno volvió a lo suyo, apoyé con los codos en su mesa y me acerqué lo más que pude a ella.
-Anoche te llamé más de cinco veces, pero no he recibido ninguna respuesta-.comencé, tanteando el terreno y preparándome para su reacción.
-Castle, ¿por qué no te compras un perro y me dejas tranquila? Yo también tengo una vida fuera de estas cuatro paredes-.dijo a la defensiva sin tan siquiera levantar la vista de todo el papeleo que tenía en su mesa.
-Kate, tenemos que hablar. No soporto estar así, necesito saber qué demonios te ocurre.
-No me ocurre nada, simplemente necesito mi espacio-.trató de decir mientras Esposito se dirigía hacia nosotros, por lo que tuve que alejarme y apoyar mi espalda contra el respaldo de la silla.
-Me han llamado los compañeros que traían a nuestra testigo, dicen que van a tardar bastante por culpa de un accidente de tráfico que acaba de producirse cerca de la 79 Este con Lexington Aveniu.
-Está bien. Entonces me pasaré por el depósito a ver que nos cuenta Lanie de nuestra víctima-.el detective asintió y volvió a su mesa mientras Beckett cogía su chaqueta con la mano y con la otra su bebida.-¿Te vienes?-.preguntó mirando en mi dirección. No tardé en ponerme de pie y seguirla.
Permanecimos en silencio todo el trayecto hasta que nos encontramos con la forense, que no pudo evitar hacer uno de sus comentarios ante nuestras expresiones.
-Chicos, ¿se puede saber qué os pasa? Incluso la señorita Gilbert tiene mejor cara que vosotros dos juntos.
-¿Gilbert?
-Así es: Susan Gilbert, treinta y dos años, detenida anteriormente por conducción temeraria, y poco más que sepamos de momento.
-¿Se sabe algo de su familia? ¿Hijos, pareja, padres?-.siguió interrogando Beckett a la forense.
-Lo siento, esa parte te toca a ti, la base de datos solo ha podido darnos esa información.
-¿Al menos se sabe donde vivía?-.preguntó con esperanza.
-Eso si que puedo decírtelo. Apunta.
En lo que le dictaba la dirección no pude evitar observar la cara de Lanie y como su mirada recorría la mitad superior del cuerpo de su mejor amiga.
Le miré extrañado tratando de averiguar lo que pasaba por su cabeza, pero el móvil de la inspectora me hizo dar un respingo y sacarme de mis pensamientos.
-Ahora vuelvo. Beckett-.contestó mientras salía de la sala con su teléfono pegado a la oreja.
-¿Qué le ocurre?
-¿No te ha contado nada?-.preguntó intrigada.
-¿Qué es lo que me tiene que contar?-.dije con preocupación ante la respuesta de Lanie. Pero cuando estaba a punto de responder, la Inspectora entró por la puerta interrumpiendo nuestra rápida conversación.
-Era Espo. Nuestra testigo acaba de llegar-.contó más para mi que para la forense.-Lanie, avisame si encuentras algo nuevo. Vamos.
-Kate, ¿puedo hablar un momento contigo? Es rápido-.añadió cuando su amiga iba a quejarse.
-Esta bien. Castle, vete saliendo, enseguida voy.
Hice lo que me pidió, pero no pude evitar dirigirle una última mirada a Lanie antes de salir por la puerta hasta el ascensor, esperando a que no le dijera nada sobre mi pregunta.
Saqué mi iPhone y miré la pantalla esperando alguna llamada de mi madre o un mensaje de Alexis, pero la pantalla indicaba que no había nada.
-Sabes, creo que dependes emocionalmente de ese aparato-.dijo divertida Beckett acercándose hasta mí y pulsando el botón del ascensor, dónde la puerta no tardó mucho en abrirse. Por su cara, parecía de mejor humor.
-Bueno, en algo tengo que entretenerme cuando espero-.ella asintió y no volvió a hablar más hasta llegar a la planta de homicidios, aunque estuve tentado de pulsar el botón rojo del panel tan solo para poder tener una charla con ella sin miedo a que pudiera huir.
-Al fin habéis llegado, no creo que Ryan pueda soportar unos minutos más escucharla hablar de su pequeño gato Sissi, o de Bola de Pelo, o de Lucky...
-Con que la típica abuelita con siete gatos en casa-.dije divertido.
-Once, para ser exactos-.corrigió Esposito asintiendo con la cabeza al observar mi cara de asombro. Nos detuvimos delante de la pequeña ventana que daba al interior de la sala de interrogatorios, allí dentro estaba la anciana, sentada tranquilamente observando su reflejo en el espejo y con un bolso bastante grande sobre sus rodillas.
-Será mejor acabar con esto cuanto antes y ponernos a trabajar con la pizarra. Esperemos que nos pueda resolver algunas pistas-.dijo en un suspiro Kate y entrando por la puerta mientras yo la seguía y me sentaba a su lado.
-Buenos días, señora Smith. Soy la Inspectora Kate Beckett y éste es Richard Castle-.presentó, señalándome con su mano.
-Por favor, llámame Mary Louise-.pidió con una sonrisa en la cara.-Señora me hace parecer mucho más vieja.
-Esta bien, Mary Louise-.rectificó mi compañera.-Según me han informado los detectives, usted escucho el ruido de un motor cerca del callejón que da a la parte trasera de su edificio. ¿Se acuerda de la hora aproximada?
-Eran las doce menos cuarto-.aseguró muy confiada y sin borrar aquella sonrisa de su rostro.
-¿Está usted segura?
-Sí. El pequeño Bola de Nieve tiró el reloj de mi mesilla cuando me fui a asomar por la ventana y al recogerlo me fije en la hora.
Me puse lo más cómodo que pude en la silla, pues estaba claro que aquello iba a ser una conversación muy larga.
Al final, muy poco conseguimos sacar de esa entrevista, pero aprendimos bastantes cosas sobre las enfermedades de moda entre los felinos neoyorquinos.
-Muchísimas gracias por su colaboración Mary Louise-.agradeció Kate poniéndose en pie y recogiendo los papeles que estaban esparcidos por la mesa.-Por favor, si recuerda algo más no dude en llamarme-.concluyó ofreciéndole una tarjeta.
-No se preocupe, Inspectora. Encantada de conocerla-.se despidió comenzando a salir con pasos cortos por la puerta.
-Castle, ¿podrías ser tan amable de acompañar a la señora Smith hasta el taxi?
-Por supuesto-.acepté acercándome hasta la abuelita y ofreciendo mi brazo para que se apoyara.
-Muchas gracias, joven. Es bonito ver que todavía quedan caballeros en el mundo, solo espero que tu novia no se ponga celosa-.dijo con una sonrisa y girando la cabeza hasta Kate, que abrió los ojos desmesuradamente al escuchar lo que acababa de decir.
-Tranquila, dudo mucho que lo haga. Nuestra relación es... complicada-.continué yo sin apartar la mirada de la Inspectora.-Siempre quiere ser la que lleve la relación, quién toma las decisiones, ¿sabe lo que quiero decir? Ella es la que manda. A veces pienso que solo me utiliza para su interés como hombre objeto.
Kate se acercó a nosotros y disimuladamente pellizcó mi brazo, hablando lentamente más para mí que para los allí presentes.
-Ricky, no hace falta que le cuentes nuestra larga y aburrida vida a esta señora, seguro que tiene mejores cosas en las que pensar.
-Que bonito es el amor a vuestra edad-.dijo en un suspiro y trató de estirarse hasta mi oído, así que al interpretar sus intenciones me incliné hasta ella con tal de ahorrarle el esfuerzo.-Chico, no desaproveches la oportunidad o algún día puede que sea demasiado tarde-.recomendó con una sonrisa y la mirada perdida, posiblemente pensando en sus antiguos amores.
-Venga, Castle. Acompáñala y déjate de conversaciones aburridas con Mary Louise-.insistió con la curvatura de sus labios hacia arriba, divertida ante la situación del momento.
-¿Siempre está así de mandona?-.preguntó con una sonrisa dirigida a Kate que se había sentado en su mesa, y a lo que yo solo pude responder con un asentimiento de cabeza.
-Ya se lo he dicho.
Tras unos pocos pasos más, la señora Smith me miró fijamente a los ojos, como si me reconociera.
-Ahora que me fijo, yo a ti te conozco de algo.
-¿A mí? ¿De qué?-.pregunté alzando la ceja de forma interrogativa.
-Sí, estoy segura. ¿Cómo habías dicho que te llamabas?
-Richard Castle, señora-.respondí sorprendido por el hecho de que alguien de su edad pudiera reconocerme
-Ah, espera. Creo que ya me acuerdo-.continuó observándome fijamente.-¿Tú eres escritor verdad?
-Sí, Flores para tu tumba, Ola de Calor, Calor Desnudo...-.nombre por si acaso le sonaba alguna con la que pudiera acordarse.
-Sí, sí. Ya me acuerdo-.aseguró zafándose de mi brazo y cogiendo su bolso con la mano, con el que comenzó a golpearme.-Debería de darte vergüenza.
-Pero ¿qué he hecho?-.exclamé tratando de esquivar sus golpes y retrocediendo por donde acabábamos de pasar.-¿Podría dejar de golpearme? ¡AH! Manzanas, manzanas! ¡Ya vale!
-¿Cómo puedes escribir esas escenas en tus libros? ¿Pretendes recordar a la gente de mi edad que ya no podemos disfrutar de momentos como esos? ¡Vergüenza tiene que darte!-.volvió a repetir sin dejar de mover el brazo con su bolso hasta que consiguió darme en el hombro.
-Yo...yo.. Pero es que yo no...-.trataba de decir con una de mis manos sobre el lugar en el que me había golpeado.
-¡Vamos, señor!-.exclamó mirando al techo.-¡Ni mi marido, en paz descanse, me había hecho el amor de esa manera!
-P..Pero yo no...-.era incapaz de encontrar las palabras para hablar, y al escuchar las risas ahogadas de Beckett no pudimos evitar detenernos para verla.
-Anda, Espo-.llamó al detective entre risas.-¿Podrías acompañarla tú antes de que le mate? Me gustaría seguir viendo a Castle por aquí, no creo que esté preparada para perderle tan pronto
-Encantado-.se ofreció el detective acercándose a ella y apartándome a un lado.-Tranquilo, ya me ocupo yo.
-Vale. Un placer, señora-.me despedí mientras se alejaba con Javier a su lado.-Gracias por tu ayuda-.ironicé al acercarme a Beckett que seguía subida a su mesa tratando de contener las carcajadas.
-Lo siento, Castle. Pero reconoce que ha sido divertido. No me imaginaba que tus libros fueran capaces de despertar tantas pasiones en mujeres de todas las edades.
-Ríete lo que quieras-.refunfuñé ocupando mi silla y apoyando la cabeza sobre mi mano, hasta que Kate consiguió apaciguar las risas y la llamada de su móvil nos devolvió a la realidad y al trabajo.
El resto del día pasó de forma mucho más tranquila, apenas salimos del edificio y nos ocupamos principalmente de completar la pizarra y comenzar a unir los cabos sueltos, buscando pistas que nos pudieran ayudar a atarlos o formulando nuevas teorías. Tuvimos un pequeño descanso en cuanto cogí dos latas de refresco y nos las tomábamos con tranquilidad, pero nada más terminar de comer, nos pusimos manos a la obra con el trabajo.
-¿Todavía estáis aquí?-.preguntó Lanie apareciendo por las puertas del ascensor y acercándose a nosotros.-Ya son las nueve, deberías de descansar-.dijo observando principalmente a su amiga.
-Me alegra ver que te preocupas por mí-.dejé escapar sarcásticamente clavando mi mirada en la suya.
-Es un placer-.respondió con una sonrisa y girando la cabeza a Beckett.-¿Nos podemos ir ya?
-Sí, claro. Voy a por mi chaqueta y nos vamos-.aseguró tapando el rotulador que tenía en sus manos y colocándolo en su mesa.-¿Por qué no os vais vosotros también? Será mejor descansar. Ya seguiremos mañana-.dijo mirando a los detectives que se encontraban en sus mesas y que asintieron al mismo tiempo que comenzaban a recoger y ordenar sus papeles.
-¿A dónde vais a ir?
-A cenar. Si te quieres apuntar...-.ofreció Lanie hasta que su amiga la cortó.
-Mejor no le des ideas, o se apuntará y no podremos hablar.
-Tienes razón-.afirmó tras sopesar la idea.-Otra vez será, Castle.
-Vale, vale-.dije con desdén.-No me gustaría estropearos vuestra “salida de chicas”.
-Buen chico-.me premió Kate pasando por delante nuestra y dándome leves palmadas en la mejilla, como si fuera un perro.
-Anda, vamos-.llamó la forense a su amiga justo cuando la puerta del ascensor se abrió y aparecieron dos niñas dentro. La mayor no debería de tener más de diez años y agarraba la mano de la más pequeña que no llegaría a los cinco y que sujetaba con fuerza un osito de peluche contra su pecho.
Nos quedamos perplejos al comprobar que iban solas y sus rostros reflejaban cierto temor, sobretodo la menor de las dos.
-Hola, chicas-.saludó Lanie acercándose a ellas y poniéndose de cuclillas para hablar.-¿Queríais algo?
-Pues-.comenzó la mayor sin saber exactamente lo que decir tras un largo silencio y observando atentamente nuestras caras.-Nos hemos perdido, y un señor nos ha acompañado hasta aquí. Nos dijo que vosotros nos podríais ayudar-.concluyó tímidamente. “-Ya que las acompaña hasta el edificio, podría haberlas subido hasta aquí-” no pude evitar pensar eso al ver lo asustadas que estaban.
-Bueno, ¿por qué no os quedáis aquí mientras tratamos de localizar a vuestra madre?-.ofreció la Inspectora, uniéndose a Lanie. La mayor asintió y aún con la mano de su hermana agarrada, salieron del ascensor y se acercaron a las mujeres, que las llevaron hasta la mesa de Beckett. La forense cogió a la más pequeña y la sentó en la mesa, en cambio la otra se sentó en la silla.
-¿Qué os parece si comenzamos por vuestros nombres?-.dijo Lanie tratando de quitarles esa expresión de miedo que tenían.-Yo me llamo Lanie, y ella es Kate-.prosiguió señalando a su amiga.
-Mi nombre es Madison, y ella es mi hermana, se llama Allie.
-Bonitos nombres, me gustan-.exclamó divertida Lanie sentándose al otro lado de la mesa.-Él es Richard, y ellos son Javier y Kevin-.continuó señalándome y luego a los dos detectives que se acercaban.-Y ¿cuántos años tenéis?
-Tengo nueve, y Allie acaba de cumplir los cuatro-.dijo un poco más confiada que unos minutos atrás.
-Con que cuatro añitos. ¡Vaya, pero si ya eres una chica grande!-.exclamó Kate con un gran tono maternal.-Me imagino que sabrás hablar, ¿verdad?
-Sí-.fue lo único que consiguió sonsacarle a la pequeña que estaba completamente sonrojada.
-Esta bien, vosotras dos os vais a quedar aquí con Lanie mientras llamo a un amigo para que me ayude a buscar a vuestra madre, enseguida vuelvo-.continuó la Inspectora sacando su móvil del bolsillo de su chaqueta y alejándose un poco para poder hablar.-Castle, ¿puedes venir?-.me llamó y no tardé en estar a su lado.
-Dime-.dije con una amplia sonrisa.
-¿Por qué no vas a buscar algo para cenar? Me parece que va a ser una noche muy larga-.pidió con una mirada agotada. Parecía estar bastante cansada.
-Claro, voy enseguida-.aseguré sin borrar la expresión de mi rostro, pero su cara me estaba comenzando a preocupar.-Kate, ¿Te encuentras bien?
-Sí, tranquilo. Sólo estoy cansada, nada más...
-Como digas. Y, ¿qué es lo que apetece? ¿Chino? ¿Tailandés? ¿O puede que comida mexicana?-. ofrecí.
-Lo primero que encuentres, no hace falta que compres mucho, y ya que estás, pasa por el supermercado que está en la esquina y compra cualquier cosa para ellas.
-¿Cómo qué?-.pregunté observando a las niñas que estaba con Lanie.
-No lo sé, tú eres el padre, deberías de saber qué es lo que les gusta a las niñas de nueve y cuatro años-.respondió con una inexplicable sonrisa apenas visible en la cara al pronunciar aquella frase y que no me pasó desapercibida ante mis ojos.
-Esta bien-.acepté girando sobre mis talones y preparado para irme, dedicándole una última mirada a la inspectora que ya tenía su móvil pegado a la oreja.
-Castle-.me llamó su voz cuando ya estaba dentro del ascensor.-Gracias-.dijo tratando de sacar una de sus mejores sonrisas.
-Siempre-.concluí a la vez que las puertas se cerraban y desaparecía de mi vista.
Continuará...
Qué os parece para ser el primer capitulo?? Deja mucho que desear comparado con Vacaciones?? ^.^
Y bueno, no voy a decir mucho porque estoy muy, muy, pero que muy cansada, os lo aseguro! haahahah Así que no me alargaré más! ahahah Si eso ya lo haré en el siguiente capitulo! hahahha (Lo siento Raul, es lo que toca )
Simplemente aclarar que, bueno... El fic lo escribi antes del capitulo 3x24, en donde muere Montgomery, disparan a Kate, y blah, blah, blah..
Asi que vamos a ver, imaginaos que este fic está escrito como una continuación del 3x23, de acuerdo? Así que Kate está completamente sana, NO ESTÁ GATES, sino Montgomery, y todo eso!
En fin, si os gustó "Vacaciones" estoy segura de que os gustará este fic de continuación! Espero vuestros comentarios y opiniones, y como siempre, muchisimas gracias a todos!! Sois los mejores!
PD: Aviso, estoy tan cansada que posiblemente veréis un montón de fallos, o cosas que no están bien, o simplemente no os guste como ha quedado para ser el primero, pero estoy terriblemente cansada, apenas sé lo que estoy escribiendo ahora mismo! hahaha Pero os prometo que mañana lo corregiré! Pero si veis fallitos, no dudéis en decirmelo!!
Capitulo 1
(Anteriormente en Vacaciones...)
Mientras apoyaba la cabeza contra la fría pared, unas piezas encajaron en ese momento. Aquella hambre voraz, las nauseas, los vómitos, el mareo...
-No puede ser-.susurré para mí misma antes de que Castle apareciera por la puerta con el vaso de agua en las manos y me ayudara a tomármelo.
-2 meses después-
-Castle POV-
-No lo intentéis, nadie puede conmigo-.canturreó feliz Esposito sin apartar la mirada de su ordenador.
-¿Puedes bajar el volumen, Javier?-.pidió su compañero quién no tardó en volver a dirigir la vista a la pantalla.
-Vamos, Bro. ¿Es que no puedes mirar tartas de boda con un poco de ruido?
-¿No tenéis trabajo?-.interrumpí pasando por su lado y dejando mi café y la manzanilla de Kate en la mesa de ésta.
-Bueno, Lanie está en el depósito examinando al cadáver, y hasta que no llegue Beckett no podemos hacer nada.
-¡Lo sabía!-.exclamó Esposito alz
ando los brazos en señal de victoria.-¡Soy invencible!
-¿Beckett no ha llegado?-.pregunté con tranquilidad omitiendo el comentario del detective.
No era la primera vez que llegaba tarde en aquellas últimas semanas, aquellas últimas semanas en las que manteníamos duelos de miradas y apenas cruzábamos palabras. Desde que había decidido cambiar su café diario por manzanillas o en algunas ocasiones, té, todo entre nosotros había cambiado. Discutíamos a la mínima oportunidad y la existencia de comunicación entre ambos era prácticamente nula. Había intentado hablar con ella, averiguar qué era lo que le pasaba desde que volvimos al trabajo, pero por cada paso que daba, retrocedíamos tres. Tenía que preguntarle a Lanie si tenía idea de que era lo que le pasaba por la cabeza y que provocara esos cambios de humor tan repentinos en ella. Necesitaba saber si había hecho algo mal para llegar a estar de ese modo.
-Ya ves, parece ser que a nuestra jefa se le han vuelto a pegar las sábanas esta mañana-.dijo Kevin.
-Ha sido el despertador, y no está bien que habléis de mí a mis espaldas-.se defendió Kate apareciendo ante nosotros y ocupando su sitio habitual cogiendo a la vez su bebida.-¿Qué tenemos?
-Nada del otro mundo-.comenzó Ryan buscando entre sus notas.-Mujer, treinta y pocos años y sin identificación. El camarero del restaurante de la esquina que salió a tirar la basura la encontró y nos llamó. Viendo la escena del crimen se puede deducir que allí la mató su asesino.
-¿Causa de la muerte?
-Disparo a quemarropa, calibre pequeño, una nueve milímetros aproximadamente.
-El asesino la conocía-.aseguró la inspectora.-¿Testigos o alguien que haya escuchado algo?
-De momento tenemos a una señora de ochenta años que vive cerca del callejón donde se encontraba la víctima y se asomó por la ventana al escuchar el fuerte rugido de un motor.
-De acuerdo. ¿Podríais traerla? Me gustaría hablar con ella-.pidió Beckett.
-Nos hemos adelantado, así que ya tiene que estar a punto de llegar-.aclaró Javier mientras continuaba con su juego.
-Buen trabajo.
En cuanto cada uno volvió a lo suyo, apoyé con los codos en su mesa y me acerqué lo más que pude a ella.
-Anoche te llamé más de cinco veces, pero no he recibido ninguna respuesta-.comencé, tanteando el terreno y preparándome para su reacción.
-Castle, ¿por qué no te compras un perro y me dejas tranquila? Yo también tengo una vida fuera de estas cuatro paredes-.dijo a la defensiva sin tan siquiera levantar la vista de todo el papeleo que tenía en su mesa.
-Kate, tenemos que hablar. No soporto estar así, necesito saber qué demonios te ocurre.
-No me ocurre nada, simplemente necesito mi espacio-.trató de decir mientras Esposito se dirigía hacia nosotros, por lo que tuve que alejarme y apoyar mi espalda contra el respaldo de la silla.
-Me han llamado los compañeros que traían a nuestra testigo, dicen que van a tardar bastante por culpa de un accidente de tráfico que acaba de producirse cerca de la 79 Este con Lexington Aveniu.
-Está bien. Entonces me pasaré por el depósito a ver que nos cuenta Lanie de nuestra víctima-.el detective asintió y volvió a su mesa mientras Beckett cogía su chaqueta con la mano y con la otra su bebida.-¿Te vienes?-.preguntó mirando en mi dirección. No tardé en ponerme de pie y seguirla.
Permanecimos en silencio todo el trayecto hasta que nos encontramos con la forense, que no pudo evitar hacer uno de sus comentarios ante nuestras expresiones.
-Chicos, ¿se puede saber qué os pasa? Incluso la señorita Gilbert tiene mejor cara que vosotros dos juntos.
-¿Gilbert?
-Así es: Susan Gilbert, treinta y dos años, detenida anteriormente por conducción temeraria, y poco más que sepamos de momento.
-¿Se sabe algo de su familia? ¿Hijos, pareja, padres?-.siguió interrogando Beckett a la forense.
-Lo siento, esa parte te toca a ti, la base de datos solo ha podido darnos esa información.
-¿Al menos se sabe donde vivía?-.preguntó con esperanza.
-Eso si que puedo decírtelo. Apunta.
En lo que le dictaba la dirección no pude evitar observar la cara de Lanie y como su mirada recorría la mitad superior del cuerpo de su mejor amiga.
Le miré extrañado tratando de averiguar lo que pasaba por su cabeza, pero el móvil de la inspectora me hizo dar un respingo y sacarme de mis pensamientos.
-Ahora vuelvo. Beckett-.contestó mientras salía de la sala con su teléfono pegado a la oreja.
-¿Qué le ocurre?
-¿No te ha contado nada?-.preguntó intrigada.
-¿Qué es lo que me tiene que contar?-.dije con preocupación ante la respuesta de Lanie. Pero cuando estaba a punto de responder, la Inspectora entró por la puerta interrumpiendo nuestra rápida conversación.
-Era Espo. Nuestra testigo acaba de llegar-.contó más para mi que para la forense.-Lanie, avisame si encuentras algo nuevo. Vamos.
-Kate, ¿puedo hablar un momento contigo? Es rápido-.añadió cuando su amiga iba a quejarse.
-Esta bien. Castle, vete saliendo, enseguida voy.
Hice lo que me pidió, pero no pude evitar dirigirle una última mirada a Lanie antes de salir por la puerta hasta el ascensor, esperando a que no le dijera nada sobre mi pregunta.
Saqué mi iPhone y miré la pantalla esperando alguna llamada de mi madre o un mensaje de Alexis, pero la pantalla indicaba que no había nada.
-Sabes, creo que dependes emocionalmente de ese aparato-.dijo divertida Beckett acercándose hasta mí y pulsando el botón del ascensor, dónde la puerta no tardó mucho en abrirse. Por su cara, parecía de mejor humor.
-Bueno, en algo tengo que entretenerme cuando espero-.ella asintió y no volvió a hablar más hasta llegar a la planta de homicidios, aunque estuve tentado de pulsar el botón rojo del panel tan solo para poder tener una charla con ella sin miedo a que pudiera huir.
-Al fin habéis llegado, no creo que Ryan pueda soportar unos minutos más escucharla hablar de su pequeño gato Sissi, o de Bola de Pelo, o de Lucky...
-Con que la típica abuelita con siete gatos en casa-.dije divertido.
-Once, para ser exactos-.corrigió Esposito asintiendo con la cabeza al observar mi cara de asombro. Nos detuvimos delante de la pequeña ventana que daba al interior de la sala de interrogatorios, allí dentro estaba la anciana, sentada tranquilamente observando su reflejo en el espejo y con un bolso bastante grande sobre sus rodillas.
-Será mejor acabar con esto cuanto antes y ponernos a trabajar con la pizarra. Esperemos que nos pueda resolver algunas pistas-.dijo en un suspiro Kate y entrando por la puerta mientras yo la seguía y me sentaba a su lado.
-Buenos días, señora Smith. Soy la Inspectora Kate Beckett y éste es Richard Castle-.presentó, señalándome con su mano.
-Por favor, llámame Mary Louise-.pidió con una sonrisa en la cara.-Señora me hace parecer mucho más vieja.
-Esta bien, Mary Louise-.rectificó mi compañera.-Según me han informado los detectives, usted escucho el ruido de un motor cerca del callejón que da a la parte trasera de su edificio. ¿Se acuerda de la hora aproximada?
-Eran las doce menos cuarto-.aseguró muy confiada y sin borrar aquella sonrisa de su rostro.
-¿Está usted segura?
-Sí. El pequeño Bola de Nieve tiró el reloj de mi mesilla cuando me fui a asomar por la ventana y al recogerlo me fije en la hora.
Me puse lo más cómodo que pude en la silla, pues estaba claro que aquello iba a ser una conversación muy larga.
Al final, muy poco conseguimos sacar de esa entrevista, pero aprendimos bastantes cosas sobre las enfermedades de moda entre los felinos neoyorquinos.
-Muchísimas gracias por su colaboración Mary Louise-.agradeció Kate poniéndose en pie y recogiendo los papeles que estaban esparcidos por la mesa.-Por favor, si recuerda algo más no dude en llamarme-.concluyó ofreciéndole una tarjeta.
-No se preocupe, Inspectora. Encantada de conocerla-.se despidió comenzando a salir con pasos cortos por la puerta.
-Castle, ¿podrías ser tan amable de acompañar a la señora Smith hasta el taxi?
-Por supuesto-.acepté acercándome hasta la abuelita y ofreciendo mi brazo para que se apoyara.
-Muchas gracias, joven. Es bonito ver que todavía quedan caballeros en el mundo, solo espero que tu novia no se ponga celosa-.dijo con una sonrisa y girando la cabeza hasta Kate, que abrió los ojos desmesuradamente al escuchar lo que acababa de decir.
-Tranquila, dudo mucho que lo haga. Nuestra relación es... complicada-.continué yo sin apartar la mirada de la Inspectora.-Siempre quiere ser la que lleve la relación, quién toma las decisiones, ¿sabe lo que quiero decir? Ella es la que manda. A veces pienso que solo me utiliza para su interés como hombre objeto.
Kate se acercó a nosotros y disimuladamente pellizcó mi brazo, hablando lentamente más para mí que para los allí presentes.
-Ricky, no hace falta que le cuentes nuestra larga y aburrida vida a esta señora, seguro que tiene mejores cosas en las que pensar.
-Que bonito es el amor a vuestra edad-.dijo en un suspiro y trató de estirarse hasta mi oído, así que al interpretar sus intenciones me incliné hasta ella con tal de ahorrarle el esfuerzo.-Chico, no desaproveches la oportunidad o algún día puede que sea demasiado tarde-.recomendó con una sonrisa y la mirada perdida, posiblemente pensando en sus antiguos amores.
-Venga, Castle. Acompáñala y déjate de conversaciones aburridas con Mary Louise-.insistió con la curvatura de sus labios hacia arriba, divertida ante la situación del momento.
-¿Siempre está así de mandona?-.preguntó con una sonrisa dirigida a Kate que se había sentado en su mesa, y a lo que yo solo pude responder con un asentimiento de cabeza.
-Ya se lo he dicho.
Tras unos pocos pasos más, la señora Smith me miró fijamente a los ojos, como si me reconociera.
-Ahora que me fijo, yo a ti te conozco de algo.
-¿A mí? ¿De qué?-.pregunté alzando la ceja de forma interrogativa.
-Sí, estoy segura. ¿Cómo habías dicho que te llamabas?
-Richard Castle, señora-.respondí sorprendido por el hecho de que alguien de su edad pudiera reconocerme
-Ah, espera. Creo que ya me acuerdo-.continuó observándome fijamente.-¿Tú eres escritor verdad?
-Sí, Flores para tu tumba, Ola de Calor, Calor Desnudo...-.nombre por si acaso le sonaba alguna con la que pudiera acordarse.
-Sí, sí. Ya me acuerdo-.aseguró zafándose de mi brazo y cogiendo su bolso con la mano, con el que comenzó a golpearme.-Debería de darte vergüenza.
-Pero ¿qué he hecho?-.exclamé tratando de esquivar sus golpes y retrocediendo por donde acabábamos de pasar.-¿Podría dejar de golpearme? ¡AH! Manzanas, manzanas! ¡Ya vale!
-¿Cómo puedes escribir esas escenas en tus libros? ¿Pretendes recordar a la gente de mi edad que ya no podemos disfrutar de momentos como esos? ¡Vergüenza tiene que darte!-.volvió a repetir sin dejar de mover el brazo con su bolso hasta que consiguió darme en el hombro.
-Yo...yo.. Pero es que yo no...-.trataba de decir con una de mis manos sobre el lugar en el que me había golpeado.
-¡Vamos, señor!-.exclamó mirando al techo.-¡Ni mi marido, en paz descanse, me había hecho el amor de esa manera!
-P..Pero yo no...-.era incapaz de encontrar las palabras para hablar, y al escuchar las risas ahogadas de Beckett no pudimos evitar detenernos para verla.
-Anda, Espo-.llamó al detective entre risas.-¿Podrías acompañarla tú antes de que le mate? Me gustaría seguir viendo a Castle por aquí, no creo que esté preparada para perderle tan pronto
-Encantado-.se ofreció el detective acercándose a ella y apartándome a un lado.-Tranquilo, ya me ocupo yo.
-Vale. Un placer, señora-.me despedí mientras se alejaba con Javier a su lado.-Gracias por tu ayuda-.ironicé al acercarme a Beckett que seguía subida a su mesa tratando de contener las carcajadas.
-Lo siento, Castle. Pero reconoce que ha sido divertido. No me imaginaba que tus libros fueran capaces de despertar tantas pasiones en mujeres de todas las edades.
-Ríete lo que quieras-.refunfuñé ocupando mi silla y apoyando la cabeza sobre mi mano, hasta que Kate consiguió apaciguar las risas y la llamada de su móvil nos devolvió a la realidad y al trabajo.
El resto del día pasó de forma mucho más tranquila, apenas salimos del edificio y nos ocupamos principalmente de completar la pizarra y comenzar a unir los cabos sueltos, buscando pistas que nos pudieran ayudar a atarlos o formulando nuevas teorías. Tuvimos un pequeño descanso en cuanto cogí dos latas de refresco y nos las tomábamos con tranquilidad, pero nada más terminar de comer, nos pusimos manos a la obra con el trabajo.
-¿Todavía estáis aquí?-.preguntó Lanie apareciendo por las puertas del ascensor y acercándose a nosotros.-Ya son las nueve, deberías de descansar-.dijo observando principalmente a su amiga.
-Me alegra ver que te preocupas por mí-.dejé escapar sarcásticamente clavando mi mirada en la suya.
-Es un placer-.respondió con una sonrisa y girando la cabeza a Beckett.-¿Nos podemos ir ya?
-Sí, claro. Voy a por mi chaqueta y nos vamos-.aseguró tapando el rotulador que tenía en sus manos y colocándolo en su mesa.-¿Por qué no os vais vosotros también? Será mejor descansar. Ya seguiremos mañana-.dijo mirando a los detectives que se encontraban en sus mesas y que asintieron al mismo tiempo que comenzaban a recoger y ordenar sus papeles.
-¿A dónde vais a ir?
-A cenar. Si te quieres apuntar...-.ofreció Lanie hasta que su amiga la cortó.
-Mejor no le des ideas, o se apuntará y no podremos hablar.
-Tienes razón-.afirmó tras sopesar la idea.-Otra vez será, Castle.
-Vale, vale-.dije con desdén.-No me gustaría estropearos vuestra “salida de chicas”.
-Buen chico-.me premió Kate pasando por delante nuestra y dándome leves palmadas en la mejilla, como si fuera un perro.
-Anda, vamos-.llamó la forense a su amiga justo cuando la puerta del ascensor se abrió y aparecieron dos niñas dentro. La mayor no debería de tener más de diez años y agarraba la mano de la más pequeña que no llegaría a los cinco y que sujetaba con fuerza un osito de peluche contra su pecho.
Nos quedamos perplejos al comprobar que iban solas y sus rostros reflejaban cierto temor, sobretodo la menor de las dos.
-Hola, chicas-.saludó Lanie acercándose a ellas y poniéndose de cuclillas para hablar.-¿Queríais algo?
-Pues-.comenzó la mayor sin saber exactamente lo que decir tras un largo silencio y observando atentamente nuestras caras.-Nos hemos perdido, y un señor nos ha acompañado hasta aquí. Nos dijo que vosotros nos podríais ayudar-.concluyó tímidamente. “-Ya que las acompaña hasta el edificio, podría haberlas subido hasta aquí-” no pude evitar pensar eso al ver lo asustadas que estaban.
-Bueno, ¿por qué no os quedáis aquí mientras tratamos de localizar a vuestra madre?-.ofreció la Inspectora, uniéndose a Lanie. La mayor asintió y aún con la mano de su hermana agarrada, salieron del ascensor y se acercaron a las mujeres, que las llevaron hasta la mesa de Beckett. La forense cogió a la más pequeña y la sentó en la mesa, en cambio la otra se sentó en la silla.
-¿Qué os parece si comenzamos por vuestros nombres?-.dijo Lanie tratando de quitarles esa expresión de miedo que tenían.-Yo me llamo Lanie, y ella es Kate-.prosiguió señalando a su amiga.
-Mi nombre es Madison, y ella es mi hermana, se llama Allie.
-Bonitos nombres, me gustan-.exclamó divertida Lanie sentándose al otro lado de la mesa.-Él es Richard, y ellos son Javier y Kevin-.continuó señalándome y luego a los dos detectives que se acercaban.-Y ¿cuántos años tenéis?
-Tengo nueve, y Allie acaba de cumplir los cuatro-.dijo un poco más confiada que unos minutos atrás.
-Con que cuatro añitos. ¡Vaya, pero si ya eres una chica grande!-.exclamó Kate con un gran tono maternal.-Me imagino que sabrás hablar, ¿verdad?
-Sí-.fue lo único que consiguió sonsacarle a la pequeña que estaba completamente sonrojada.
-Esta bien, vosotras dos os vais a quedar aquí con Lanie mientras llamo a un amigo para que me ayude a buscar a vuestra madre, enseguida vuelvo-.continuó la Inspectora sacando su móvil del bolsillo de su chaqueta y alejándose un poco para poder hablar.-Castle, ¿puedes venir?-.me llamó y no tardé en estar a su lado.
-Dime-.dije con una amplia sonrisa.
-¿Por qué no vas a buscar algo para cenar? Me parece que va a ser una noche muy larga-.pidió con una mirada agotada. Parecía estar bastante cansada.
-Claro, voy enseguida-.aseguré sin borrar la expresión de mi rostro, pero su cara me estaba comenzando a preocupar.-Kate, ¿Te encuentras bien?
-Sí, tranquilo. Sólo estoy cansada, nada más...
-Como digas. Y, ¿qué es lo que apetece? ¿Chino? ¿Tailandés? ¿O puede que comida mexicana?-. ofrecí.
-Lo primero que encuentres, no hace falta que compres mucho, y ya que estás, pasa por el supermercado que está en la esquina y compra cualquier cosa para ellas.
-¿Cómo qué?-.pregunté observando a las niñas que estaba con Lanie.
-No lo sé, tú eres el padre, deberías de saber qué es lo que les gusta a las niñas de nueve y cuatro años-.respondió con una inexplicable sonrisa apenas visible en la cara al pronunciar aquella frase y que no me pasó desapercibida ante mis ojos.
-Esta bien-.acepté girando sobre mis talones y preparado para irme, dedicándole una última mirada a la inspectora que ya tenía su móvil pegado a la oreja.
-Castle-.me llamó su voz cuando ya estaba dentro del ascensor.-Gracias-.dijo tratando de sacar una de sus mejores sonrisas.
-Siempre-.concluí a la vez que las puertas se cerraban y desaparecía de mi vista.
Continuará...
Qué os parece para ser el primer capitulo?? Deja mucho que desear comparado con Vacaciones?? ^.^
Última edición por SaraMSeyfried el Vie Feb 08, 2013 9:12 am, editado 8 veces
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
impresionanteeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee
muchas gracias por subir nuevos capi
muchas gracias por subir nuevos capi
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
Siiiiiiiiiiiiiiiiiiii exceleeeeeeeente comienzo prima,siiigueeeeeeeeeee porfi
Stana Beckett- Autor de best-seller
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Edad : 27
Localización : Nueva York, trabajando con Richard Castle. Y pegando tiros con Kate. Ausente!
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
GENIALLLLLLLLLLLLLLLLLLLL ME ENCANTA
SIGELO PRONTO
SIGELO PRONTO
Duende- Escritor - Policia
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Edad : 36
Localización : Galicia
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
Buen comienzoo!! Espero que lo sigas pronto!
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
preciosoooo sigue prontooo
castle&beckett..cris- Escritor - Policia
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Localización : Menorca..I LOVE NEW YORK..NYPD..RICK CASTLE & KATE BECKETT
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
a mi me encantaaaaa sigue pronto por favor
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
Te diria que me encanta! Pero eso es poco! :loL:
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
esta muy bello, interesante, continualo pronto
chelcas- Escritor - Policia
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Edad : 31
Localización : México
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
A la espera de nuevo capi!! me encanta esta historia!!
BrujaAle- Escritor - Policia
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Edad : 41
Localización : En el Sur
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
jejejejeje te juro que cuando comenté hace un rato en Vacaciones no había leido este nuevo fic. Parece que tenemos pensamientos parecidos. Kate vuelve a ocultar cositas a Castle...Claro que este secreto físicamente va a ser complicado aguantarlo por mucho tiempo.
Me gusta, me gusta. Tiene muy buena pinta
Me gusta, me gusta. Tiene muy buena pinta
Apples82- Actor en Broadway
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Fecha de inscripción : 28/02/2012
Edad : 42
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
Verguenza debería darte a ti Corasón escribir ese testamento solo para poner excusas y mas excusas
La escena de la abuelita me suena muchisimo de algo,es como si lo hubiera leido en otro fic
Y lo de las niñas ha mejorado un poco el capi jejeje,que le pasara a Kate,que estara ocultando??
A ver que nos tienes preparado con este fic Sarita y dejate de rollos y excusas
La escena de la abuelita me suena muchisimo de algo,es como si lo hubiera leido en otro fic
Y lo de las niñas ha mejorado un poco el capi jejeje,que le pasara a Kate,que estara ocultando??
A ver que nos tienes preparado con este fic Sarita y dejate de rollos y excusas
Raúl- Moderador
- Mensajes : 1189
Fecha de inscripción : 18/05/2011
Edad : 32
Localización : Parla City
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
Me ha gustado mucho, ya estoy enganchada jajaja sigue pronto!
Estefanía988- Actor en Broadway
- Mensajes : 170
Fecha de inscripción : 19/12/2011
Edad : 36
Localización : Una pequeña isla en medio del Atlántico
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
me encanta ni se te ocurra dejar de escribirlo jejejejejjejej y vacaciones era buenissimo y este tres cuartos de lo mismo asi ke palante
castleaddict- As del póker
- Mensajes : 268
Fecha de inscripción : 02/04/2012
Edad : 37
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
Felicidades No deja nada que desear al de vacaciones, la primera fue una gran historia y esta tiene pinta de que lo va a ser.
lastral- Policia de homicidios
- Mensajes : 747
Fecha de inscripción : 10/04/2011
Edad : 35
Localización : Madrid
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
Ya echaba de menos este fic A mi este cap. me ha encantado.
KBCAlways- As del póker
- Mensajes : 444
Fecha de inscripción : 11/03/2012
Edad : 29
Localización : Granada
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
saritaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa pero k dices k si deja mucho k desear bobadasssssss es un muy buen comienzo para volvernos a engachar a todos asik sigue escribiendo y subiendoooooooooooooooooooooooooo
muy muy bn hermanitaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
muy muy bn hermanitaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
castle_OCD- Actor en Broadway
- Mensajes : 163
Fecha de inscripción : 06/10/2011
Edad : 30
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
No deja nada que desear. Es un capítulo fantástico. Sigue pronto.
caskett mola- Autor de best-seller
- Mensajes : 874
Fecha de inscripción : 27/01/2011
Edad : 26
Localización : Castlelandia
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
Ese si que es un SECRETO y lo demas son tonterias jejeje. Yo creo que a Castle le va a dar un patatus cuando se entere.... Ahora que ya iba a mandar a alexis a la uni, y se iba a quedar tranquilito a disfrutar con Kate....uf uf.
Bien escrito Sara, con ganas de ver por donde llevas la historia. Y con ganas de saber que siente kate ante todo esto!
Bien escrito Sara, con ganas de ver por donde llevas la historia. Y con ganas de saber que siente kate ante todo esto!
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
la primera parte me encanto y esta tambien me esta gustando, continua pliss
anaforo- Escritor - Policia
- Mensajes : 1090
Fecha de inscripción : 06/02/2012
Edad : 31
Localización : Murcia. Y en una de las 20 manzanas que hay entre la casa Rick y la de Kate :)
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
Me lo he leido entero tanto la primera parte como esta, y me ha encantado!!! Me estoy divirtiendo muchisimo Beckett embarazada!! Lo cierto es que ni me la imagino!! Sigue prontito por fis
mery_caskett- Actor en Broadway
- Mensajes : 206
Fecha de inscripción : 03/11/2011
Edad : 36
Localización : Cordillera Cantábrica p'arriba
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
Hooooolaa amoreeeessss!! ^.^
Sé que tendría que responder a todos los comentarios, y lo haré... pero en cuanto tenga un pequeño hueco libre y no esté cansada!
Aún así doy las gracias a todos por leer y comentar! Y bueno, sé que solo hay un capitulo (con este dos), pero espero que os esté gustando y que no hayan bajado las espectativas respecto a "Vacaciones"
En serio, un besazo a todos y muchisimas gracias!!
PD: Adoro los comentarios, más si son constructivos. Así que no seais bobos y comentad! Que es gratis! ^^
-Kate POV-
-Ha pasado bastante tiempo-.su voz reflejaba tristeza e imaginaba que estaba recordando las últimas semanas que estuvimos juntos.
-Lo sé. Pero sabes que sigues estando invitado a tomar café en nuestra máquina-.dije amablemente con una sonrisa en la cara.
-¿La máquina de Castle? No, gracias. No creo que le guste mucho la idea de volver a verme por aquí.
-Vamos, Tom. No seas cabezota, sabes tan bien como yo que Rick no es tan malo como aparenta ser-.le dí un golpe en el brazo de forma juguetona.
-¿Ya la llamas por su nombre de pila?-.preguntó curioso.-Parece que vuestra relación ha avanzado.
-A ti te sigo llamando Tom-.declaré.-Bueno, podremos hablar otro día de nuestras cosas, ahora tenemos trabajo que hacer-.dije poniéndome en pie y ofreciendo mi mano la cual rechazó mientras se levantaba por su propia cuenta.
-Kate, te echo de menos-.reconoció sin apartar su mirada de la mía y acercándose lo más que pudo.
-He traído un poco de todo, cómo no estaba seguro de lo que queríais pensé que lo mejor sería compensarlo trayendo...-.comentó el escritor apareciendo por las puertas del ascensor con varias bolsas en la mano y levantando la vista en mi dirección.-Vaya, no pensé que fuéramos a tener un invitado-.dijo con cierto toque amargo en sus palabras.
-¿Qué hay, Castle?-.saludó el policía que estaba a mi lado y dejando un poco de espacio entre ambos.
-Demming-.fue lo único que dijo a la vez que dejaba la comida en mi mesa.
-¡Ya era hora!-.exclamó Lanie levantando la vista del dibujo que estaba haciendo en el suelo junto con Madison y Allie.-Me muero de hambre-.continuó arrastrándose de rodillas hasta las bolsas y rebuscando entre ellas.
-¿Qué les has traído?
-Bueno, no sabía que les podría gustar, pero espero haber acertado-.comenzó revolviendo el interior de una de las bolsas y sacando un paquete de galletas con chocolate-.Cuando iba de paseo por Central Park con Alexis solía comprarlas, no son como las que vendían en la tienda que había al lado del Starbucks que hace esquina ni la dependienta está tan...Con ese vestidito ceñido que marcaba su...
-¡Castle!
-Perdón, perdón. Bueno, y no podía faltar nunca su batido de fresa-.concluyó sacando un paquete con seis de éstos y acercándoselo a las chicas junto con las galletas.
-Gracias, tito Ricky-.le agradeció la más pequeña levantándose y abrazando su pierna. Al ver el movimiento, Castle la cogió en brazos y dejó que rodeara sus delgados brazos por su cuello. Ante aquel gesto no pude evitar sonreír y preguntarme si sería así cuando naciera nuestro hijo.
-Nuestro hijo-. Aún no me había acostumbrado a la idea de que aquel pequeño ser que crecía día a día en mi interior fuera nuestro, tanto de Castle como mio, fruto de una de nuestras muchas noches alocadas de los últimos dos meses. Según Lanie, estaba de nueve semanas aunque no sería hasta el cuarto o quinto mes como mucho cuando comenzara a notarse de verdad, pero cómo consecuencia tendría que soportar los mareos y las nauseas casi diarias, que muchas veces iban acompañadas de los vómitos.
Aún recordaba el día que aparecí en la puerta de su casa con los ojos llorosos mientras llevaba el test de embarazo que había dado positivo guardado en uno de los bolsillos de mis pantalones , la reacción de Lanie al escuchar lo que había ocurrido el último día que estuvimos en los Hamptons y cómo continuaba desde que habíamos vuelto. No podía dejar de sonreír al repetir en mi cabeza el momento en que le enseñé el test y los saltos de alegría que daba gritando por todo la casa: ¡Voy a ser tía! ¡Voy a ser tía!
-Ya me imaginaba que os iba a gustar-.dijo Castle sonriendo, comenzando a sacar la comida de las bolsas y colocándolas encima de la mesa.-Esta bien, nosotros tenemos fideos fritos con rollitos de primavera, además de arroz con un poco de pollo-.continuó levantando las tapas una a una por el orden en la que las nombrabas, y no fue hasta que el olor de las frituras entremezcladas con el olor del pollo se adentró por mis vías respiratorias y me hizo salir corriendo al baño con una mano en la boca y la otra en la barriga.
Me dejé caer de rodillas nada más colocarme enfrente del retrete y comencé a vomitar, escuchando unos pasos que se acercaban deprisa hasta mi y sintiendo como unas manos atrapaban cada mechón de mi pelo y lo sujetaban a modo de coleta. Acto seguido podía escuchar como la puerta del servicio se abría de nuevo y otros pasos comenzaban a acercarse, pero mi compañera le detuvo.
-Castle, ¿qué parte de servicio de señoras es la que no has entendido?-.preguntó retóricamente, acercándome un trozo de papel con el que limpiarme la boca.
-¿Kate, estás bien?-.hizo caso omiso y continuó avanzando por el pasillo con intención de llegar hasta nosotras.
-Castle, vuelve a dar otro paso y te juro que no dudaré en usar mi pistola-.amenacé con la voz ronca mientras Lanie me ayudaba a sentarme.
-Pe.. pero yo-.trató de decir, sin embargo le detuve al instante.
-¡Castle, vete!-.grité más alto de lo necesario y la cabeza, que ya de por sí sola me dolía, no paraba de moverse de un lado a otro al mismo tiempo que era incapaz de mirar a un punto fijo con claridad.
El aludido retrocedió por donde había venido y nos dejó solas otra vez.
-¿Te encuentras mejor?-.preguntó mi amiga apartándome los pelos de mi frente sudorosa.
-Sí, tranquila. Sólo estoy un poco mareada.
-Ven aquí, vamos a mojarte la cara-.dijo ayudándome a levantar y pasando su brazo por mi espalda consiguió llevarme hasta los lavabos, donde me refrescó tratando a su vez de disipar el mareo.-¿Mejor?-.continuó con notable preocupación en su voz.
-Bastante-.logré decir una vez que la habitación dejó de moverse.-Creo que ya se me ha pasado.
-¿Estás segura?-.insistió sin soltarme por miedo a que me fuera a desmayar.
-Sí, creo que sí.
-¿No tienes las pastillas de te receté el otro día?
-Las tengo en mi bolso-.respondí apoyando mi mano en el lavabo y la otra la mantenía en el hombro de mi amiga.
-Voy a buscarlas, enseguida vuelvo. ¿Puedes esperar?
-Solo es un mareo, Lanie. Me pasa casi todos los días, así que estoy segura de que podré sobrevivir unos minutos-.se limitó a sonreír y salir por la puerta en busca de mis pastillas.
A los pocos segundos apareció por la entrada el escritor, contra todo impedimento de los chicos que estaban en la salida esperando a que saliera.
-Creo que te había advertido de que...-.traté de decir, pero mis piernas me fallaron en ese momento y mi cuerpo se dejó caer directo al suelo. Por suerte Castle llegó a tiempo de frenar mi caída y de ahorrarme un buen golpe en la cabeza.
-¿Te encuentras bien?-.preguntó con apremiante preocupación en la voz.
-No me ocurre nada, solo me he resbalado.
-¿Podrías dejarte de evasivas?-.dijo exasperado.-Tan solo quiero ayudarte, estoy preocupado-.continuó completamente serio y sin apartar su mirada de la mía.
-Ya he traído las past...-.comentó la forense entrando por la puerta y observando la escena.-Pensé que te habíamos dicho que te quedaras fuera-.saltó a la defensiva mi amiga.
-Déjale, Lanie. Por mucho que se lo digamos, nunca aprenderá-.susurré con la voz más débil de lo habitual y forzando a mis labios para sacar una sonrisa.
-Esta bien-.continuó acercándose a mi y tendiéndome un vaso de agua con el medicamento.
-¿Por qué no te vas a casa y descansas?-.preguntó Castle más como una orden que una oferta.
-No hace falta, la pastilla hará efecto y me encontraré mejor.
-El escritor tiene razón. Necesitas descansar. Es por tu bien-.le apoyó Lanie.
-¿Y que pasa con Allie y Madison? Quiero ayudarlas, para eso he llamado a Tom. Además, vosotros también deberíais descansar, ya es tarde.
-Las niñas se quedarán esta noche en mi casa con Javier. Y por los demás no te preocupes, solo vete y descansa-.insistió mi amiga.-¿Castle, puedes llevarla tú?
-Por supuesto que sí-.aseguró con una sonrisa en la cara que me dio muy mala espina.-¿De verdad te quieres quedar con las niñas?
-Claro,no vendría mal que Esposito se comenzara a acostumbrar-.dijo en broma mientras Rick cogía mis manos y sin apenas esfuerzo me puso en pie otra vez.
Ya las pastillas estaban comenzando a hacer su trabajo, consiguiendo que me sintiera mejor.
Salimos del baño y los chicos no tardaron en acorralarnos preguntando qué tal estaba, y aunque Demming buscaba el modo de llamar mi atención, fueron las niñas quienes consiguieron colarse entre las piernas de mis opresores y llegar hasta mi.
-Tita Katie, ¿Estás bien?-.preguntó preocupada la pequeña Allie atrapando la mano que colgaba en uno de mis costados tratando de llamarme. Me puse de cuclillas cogiendo sus pequeñas manitas entre las mías.
-Sí. Lo que pasaba es que el olor de la comida no me ha gustado y he ido al baño. Le he dicho muchas veces a Ricky que no me gusta los rollitos de primavera, pero él lo sigue trayendo-.dije con una pequeña sonrisa-.Pero ya estoy bien.
La pequeña se acercó aún más y abrió sus brazos en forma de abrazo, e instintivamente imité su gesto.
Un sentimiento maternal se apoderó de mí en aquel momento, y no pude evitar apretarla con más fuerza. Desde luego tenía las hormonas revolucionadas, no lo podía negar.
-Vamos chicas-.dijo Lanie desde mi escritorio.-La tía Katie necesita descansar.
-Cuidate Kate-.se despidió Madison separándose y siguiendo a la forense para recoger los lápices de colores y los dibujos que habían dejado en el suelo.
-Ponte buena-.continuó Allie dándome un beso en la mejilla y recorriendo los mismos pasos que su hermana. Posé la mano por el lugar en el que había depositado aquella muestra de cariño y no pude evitar sonreír.
-Venga, Beckett-.insistió el escritor por tercera vez.-Hasta mañana chicos. Adiós niñas-.sonrió mirando a Madison y a Allie que levantaron su mano a modo de despedida.
-Hasta mañana.
-¿Se puede saber qué hace Demming aquí?-.preguntó una vez que las puertas se cerraron y nos quedamos los dos solos.-Pensaba que trabajaba en robos. No entiendo que pinta aquí.
-Y allí está, pero han recortado la plantilla de desapariciones y robos, por lo que ahora hace las dos cosas, así que se me ocurrió llamarle y pedirle ayuda.
-Espero que no tardemos mucho en encontrar a su madre-.refunfuñó esquivando mi mirada.
-¿Es que no te gustan las niñas? Pensé que con eso de que eres padre te gustaría tenerlas por aquí.
-Ellas claro que me gustan. Me hacen recordar los buenos tiempos en los que Alexis era pequeña y yo era un padre novato que apenas sabía calentar un biberón.
-¿Entonces a qué viene ese...?-.no completé la frase pues ya había adivinado su problema.-Richard Castle, no me digas que estás celoso-.dije de forma acusatoria incapaz de reprimir una sonrisa mientras el abría la puerta del copiloto y me invitaba a sentarme. Cuando se sentó en mi sitio, puso el coche en marcha y con la mirada fija en la carretera, trató de esquivar mis miradas a la misma vez que el tema.-Vamos, Rick. ¿Cómo puedes estar celoso de alguien con el que terminé hace un año?
-¿Quién ha dicho que estoy celoso?-.se defendió manteniendo el semblante serio.
-¡Oh, venga!-.exclamé.-Reconócelo.
-No puedo reconocer algo que no es verdad.
-Castle...-.me cortó en aquel mismo instante.
-Te he dicho que no estoy celoso.
-Eres patético, Castle.
-¡Vale! ¡Estoy celoso de él! Y si eso me hace ser patético, pues soy patético-.dijo exasperado y apretando con fuerza el volante.-¿Contenta?
-Sí-.reconocí con una sonrisa y depositando un rápido beso en su mejilla que le pilló desprevenido.
Apenas pasaron diez minutos en silencio cuando el coche se detuvo y pude apreciar el lugar en el que estábamos.
-Rick, esta no es mi casa.
-Esta noche sí-.fue lo único que dijo saliendo del vehículo y a continuación ayudándome a mí.-Kate, tenemos hablar, y esta noche no pienso recibir un no por respuesta. Estoy confuso y tu necesitas un enfermero mientras sigas con esos vómitos, así que ya me ofrezco yo para estar a tu lado.
-De acuerdo-.acepté con voz débil cerrando la puerta y siguiendo sus pasos hasta llegar a su loft.
-¿Te pondrás el traje de enfermera?
-Lo haría, pero lo he dejado en la tintorería-.respondió con sequedad y por el tono de voz, sabía que no estaba para bromas.
Cuando entramos por la puerta y dejó su chaqueta en la percha, se giró a mí y se acercó con pasos lentos.
-Tú nueva casa temporal-.afirmó sonsacando una sonrisa forzada que me partía el corazón al imaginar que era por mi culpa que se sintiera de aquel modo.
-¿Y Alexis y Martha?-.pregunté tratando de aplazar la conversación que sabía que tarde o temprano terminaríamos teniendo.
-Alexis está de acampada con unas amigas y mi madre esta ensayando su nuevo papel para una obra en la que la acaban de coger-.asentí y rodé los ojos, al parecer no íbamos a tener interrupciones durante aquella noche.-Kate-.me llamó mientra yo iba caminando hasta el centro de la sala y tomaba asiento en uno de sus sillones, acompañada por él.-Kate, por favor. No lo puedo soportar más-.continuó tras unos largos minutos en silencio.-Desde que volvimos a trabajar hace ya varias semanas no eres tú. Reconozco que no tenía ni idea de cómo iba a ser nuestra relación tras lo que había ocurrido entre nosotros, pero sabía que podría salir bien, que nada cambiaría, podríamos seguir juntos y adelante, sin embargo, ha sido todo lo contrario a cómo me lo imaginaba. He tratado de averiguar que es lo que he hecho mal para que te comportes de esa forma y me trates de ignorar, en cambio no consigo entenderlo por mucho que lo intente. Pensaba que después de lo que había pasado en los Hamptons ibas a dejar de evitar lo que sientes y hacerle frente de una vez. Cuando llegamos todo entre nosotros iba perfecto, me alegraba de que al fin podría estar contigo como una pareja normal, pero desde que hemos vuelto al trabajo estas irreconocible. Y ¿sabes qué es lo peor? Que no me quieres decir qué es lo que te ocurre. ¿Es qué todavía no confías en mí lo suficiente para contármelo? Sea lo que sea, siempre me tendrás a tu lado, soy tu noble compañero, tu escudero, y me tendrás para cualquier cosa que necesites, pero sólo necesito una respuesta clara que me expliqué por qué esos cambios de humor tan repentinos.¿Por qué con cada paso que doy tratando de buscar una solución con el fin de que todo vuelva a ser como antes, buscas la manera de esquivarme en lugar de hacerme frente? Es algo que me supera y no puedo evitar preguntarme qué es lo que ha cambiado. Kate Beckett, te quiero y no soporto esta situación, necesito que me respondas-.confesó sin tan siquiera detenerse a coger aire y sujetando mis manos entre las suyas, observando cada movimiento que realizaba con sus ojos azul cobalto que tanto adoraba y una expresión indescifrable en el rostro. No fue hasta el momento en el que sentí como algo húmedo traspasaba mi pantalón cuando me di cuenta de que las lágrimas brotaban de mis ojos y resbalaban por mis mejillas, aterrizando como consecuencia en mis piernas.-Kate, por favor, dí algo-.pidió acariciando mi cara y tratando de hacer desaparecer aquellas lágrimas con su pulgar.
Sentía rabia en aquel momento. Sentía como iba a estallar y las palabras estaban apunto de escapar de mis labios. Sentía rabia, y no era por él. Sino por mi. Por haberme comportado como una estúpida las últimas semanas. Aún así era incapaz de controlar lo que las hormonas en ese momento me gritaban.
-¡Demonios, Castle!-.exclamé apartando su mano y poniéndome en pie.-¿Qué es tan difícil de entender? ¡Estoy embarazada!-.concluí subiendo lo más deprisa que pude hasta su habitación, mirando por última vez su rostro completamente perplejo y casi de piedra.
Cerré la puerta, me tumbé sobre la cama y dejé que las lágrimas cayeran libremente mientras mi cabeza recordaba lo que acababa de producirse en el salón y me autoculpaba el remordimiento: su discurso cargado de preocupación al mismo tiempo que de desesperación, mis gritos, su reacción ante mis últimas palabras... Dejé a mi mente que siguiera reviviendo aquel momento al mismo tiempo que me preguntaba si había hecho bien en contárselo y como sería todo a partir de ahora.
Continuará...
Sé que tendría que responder a todos los comentarios, y lo haré... pero en cuanto tenga un pequeño hueco libre y no esté cansada!
Aún así doy las gracias a todos por leer y comentar! Y bueno, sé que solo hay un capitulo (con este dos), pero espero que os esté gustando y que no hayan bajado las espectativas respecto a "Vacaciones"
En serio, un besazo a todos y muchisimas gracias!!
PD: Adoro los comentarios, más si son constructivos. Así que no seais bobos y comentad! Que es gratis! ^^
Capítulo 2
-Kate POV-
-Ha pasado bastante tiempo-.su voz reflejaba tristeza e imaginaba que estaba recordando las últimas semanas que estuvimos juntos.
-Lo sé. Pero sabes que sigues estando invitado a tomar café en nuestra máquina-.dije amablemente con una sonrisa en la cara.
-¿La máquina de Castle? No, gracias. No creo que le guste mucho la idea de volver a verme por aquí.
-Vamos, Tom. No seas cabezota, sabes tan bien como yo que Rick no es tan malo como aparenta ser-.le dí un golpe en el brazo de forma juguetona.
-¿Ya la llamas por su nombre de pila?-.preguntó curioso.-Parece que vuestra relación ha avanzado.
-A ti te sigo llamando Tom-.declaré.-Bueno, podremos hablar otro día de nuestras cosas, ahora tenemos trabajo que hacer-.dije poniéndome en pie y ofreciendo mi mano la cual rechazó mientras se levantaba por su propia cuenta.
-Kate, te echo de menos-.reconoció sin apartar su mirada de la mía y acercándose lo más que pudo.
-He traído un poco de todo, cómo no estaba seguro de lo que queríais pensé que lo mejor sería compensarlo trayendo...-.comentó el escritor apareciendo por las puertas del ascensor con varias bolsas en la mano y levantando la vista en mi dirección.-Vaya, no pensé que fuéramos a tener un invitado-.dijo con cierto toque amargo en sus palabras.
-¿Qué hay, Castle?-.saludó el policía que estaba a mi lado y dejando un poco de espacio entre ambos.
-Demming-.fue lo único que dijo a la vez que dejaba la comida en mi mesa.
-¡Ya era hora!-.exclamó Lanie levantando la vista del dibujo que estaba haciendo en el suelo junto con Madison y Allie.-Me muero de hambre-.continuó arrastrándose de rodillas hasta las bolsas y rebuscando entre ellas.
-¿Qué les has traído?
-Bueno, no sabía que les podría gustar, pero espero haber acertado-.comenzó revolviendo el interior de una de las bolsas y sacando un paquete de galletas con chocolate-.Cuando iba de paseo por Central Park con Alexis solía comprarlas, no son como las que vendían en la tienda que había al lado del Starbucks que hace esquina ni la dependienta está tan...Con ese vestidito ceñido que marcaba su...
-¡Castle!
-Perdón, perdón. Bueno, y no podía faltar nunca su batido de fresa-.concluyó sacando un paquete con seis de éstos y acercándoselo a las chicas junto con las galletas.
-Gracias, tito Ricky-.le agradeció la más pequeña levantándose y abrazando su pierna. Al ver el movimiento, Castle la cogió en brazos y dejó que rodeara sus delgados brazos por su cuello. Ante aquel gesto no pude evitar sonreír y preguntarme si sería así cuando naciera nuestro hijo.
-Nuestro hijo-. Aún no me había acostumbrado a la idea de que aquel pequeño ser que crecía día a día en mi interior fuera nuestro, tanto de Castle como mio, fruto de una de nuestras muchas noches alocadas de los últimos dos meses. Según Lanie, estaba de nueve semanas aunque no sería hasta el cuarto o quinto mes como mucho cuando comenzara a notarse de verdad, pero cómo consecuencia tendría que soportar los mareos y las nauseas casi diarias, que muchas veces iban acompañadas de los vómitos.
Aún recordaba el día que aparecí en la puerta de su casa con los ojos llorosos mientras llevaba el test de embarazo que había dado positivo guardado en uno de los bolsillos de mis pantalones , la reacción de Lanie al escuchar lo que había ocurrido el último día que estuvimos en los Hamptons y cómo continuaba desde que habíamos vuelto. No podía dejar de sonreír al repetir en mi cabeza el momento en que le enseñé el test y los saltos de alegría que daba gritando por todo la casa: ¡Voy a ser tía! ¡Voy a ser tía!
-Ya me imaginaba que os iba a gustar-.dijo Castle sonriendo, comenzando a sacar la comida de las bolsas y colocándolas encima de la mesa.-Esta bien, nosotros tenemos fideos fritos con rollitos de primavera, además de arroz con un poco de pollo-.continuó levantando las tapas una a una por el orden en la que las nombrabas, y no fue hasta que el olor de las frituras entremezcladas con el olor del pollo se adentró por mis vías respiratorias y me hizo salir corriendo al baño con una mano en la boca y la otra en la barriga.
Me dejé caer de rodillas nada más colocarme enfrente del retrete y comencé a vomitar, escuchando unos pasos que se acercaban deprisa hasta mi y sintiendo como unas manos atrapaban cada mechón de mi pelo y lo sujetaban a modo de coleta. Acto seguido podía escuchar como la puerta del servicio se abría de nuevo y otros pasos comenzaban a acercarse, pero mi compañera le detuvo.
-Castle, ¿qué parte de servicio de señoras es la que no has entendido?-.preguntó retóricamente, acercándome un trozo de papel con el que limpiarme la boca.
-¿Kate, estás bien?-.hizo caso omiso y continuó avanzando por el pasillo con intención de llegar hasta nosotras.
-Castle, vuelve a dar otro paso y te juro que no dudaré en usar mi pistola-.amenacé con la voz ronca mientras Lanie me ayudaba a sentarme.
-Pe.. pero yo-.trató de decir, sin embargo le detuve al instante.
-¡Castle, vete!-.grité más alto de lo necesario y la cabeza, que ya de por sí sola me dolía, no paraba de moverse de un lado a otro al mismo tiempo que era incapaz de mirar a un punto fijo con claridad.
El aludido retrocedió por donde había venido y nos dejó solas otra vez.
-¿Te encuentras mejor?-.preguntó mi amiga apartándome los pelos de mi frente sudorosa.
-Sí, tranquila. Sólo estoy un poco mareada.
-Ven aquí, vamos a mojarte la cara-.dijo ayudándome a levantar y pasando su brazo por mi espalda consiguió llevarme hasta los lavabos, donde me refrescó tratando a su vez de disipar el mareo.-¿Mejor?-.continuó con notable preocupación en su voz.
-Bastante-.logré decir una vez que la habitación dejó de moverse.-Creo que ya se me ha pasado.
-¿Estás segura?-.insistió sin soltarme por miedo a que me fuera a desmayar.
-Sí, creo que sí.
-¿No tienes las pastillas de te receté el otro día?
-Las tengo en mi bolso-.respondí apoyando mi mano en el lavabo y la otra la mantenía en el hombro de mi amiga.
-Voy a buscarlas, enseguida vuelvo. ¿Puedes esperar?
-Solo es un mareo, Lanie. Me pasa casi todos los días, así que estoy segura de que podré sobrevivir unos minutos-.se limitó a sonreír y salir por la puerta en busca de mis pastillas.
A los pocos segundos apareció por la entrada el escritor, contra todo impedimento de los chicos que estaban en la salida esperando a que saliera.
-Creo que te había advertido de que...-.traté de decir, pero mis piernas me fallaron en ese momento y mi cuerpo se dejó caer directo al suelo. Por suerte Castle llegó a tiempo de frenar mi caída y de ahorrarme un buen golpe en la cabeza.
-¿Te encuentras bien?-.preguntó con apremiante preocupación en la voz.
-No me ocurre nada, solo me he resbalado.
-¿Podrías dejarte de evasivas?-.dijo exasperado.-Tan solo quiero ayudarte, estoy preocupado-.continuó completamente serio y sin apartar su mirada de la mía.
-Ya he traído las past...-.comentó la forense entrando por la puerta y observando la escena.-Pensé que te habíamos dicho que te quedaras fuera-.saltó a la defensiva mi amiga.
-Déjale, Lanie. Por mucho que se lo digamos, nunca aprenderá-.susurré con la voz más débil de lo habitual y forzando a mis labios para sacar una sonrisa.
-Esta bien-.continuó acercándose a mi y tendiéndome un vaso de agua con el medicamento.
-¿Por qué no te vas a casa y descansas?-.preguntó Castle más como una orden que una oferta.
-No hace falta, la pastilla hará efecto y me encontraré mejor.
-El escritor tiene razón. Necesitas descansar. Es por tu bien-.le apoyó Lanie.
-¿Y que pasa con Allie y Madison? Quiero ayudarlas, para eso he llamado a Tom. Además, vosotros también deberíais descansar, ya es tarde.
-Las niñas se quedarán esta noche en mi casa con Javier. Y por los demás no te preocupes, solo vete y descansa-.insistió mi amiga.-¿Castle, puedes llevarla tú?
-Por supuesto que sí-.aseguró con una sonrisa en la cara que me dio muy mala espina.-¿De verdad te quieres quedar con las niñas?
-Claro,no vendría mal que Esposito se comenzara a acostumbrar-.dijo en broma mientras Rick cogía mis manos y sin apenas esfuerzo me puso en pie otra vez.
Ya las pastillas estaban comenzando a hacer su trabajo, consiguiendo que me sintiera mejor.
Salimos del baño y los chicos no tardaron en acorralarnos preguntando qué tal estaba, y aunque Demming buscaba el modo de llamar mi atención, fueron las niñas quienes consiguieron colarse entre las piernas de mis opresores y llegar hasta mi.
-Tita Katie, ¿Estás bien?-.preguntó preocupada la pequeña Allie atrapando la mano que colgaba en uno de mis costados tratando de llamarme. Me puse de cuclillas cogiendo sus pequeñas manitas entre las mías.
-Sí. Lo que pasaba es que el olor de la comida no me ha gustado y he ido al baño. Le he dicho muchas veces a Ricky que no me gusta los rollitos de primavera, pero él lo sigue trayendo-.dije con una pequeña sonrisa-.Pero ya estoy bien.
La pequeña se acercó aún más y abrió sus brazos en forma de abrazo, e instintivamente imité su gesto.
Un sentimiento maternal se apoderó de mí en aquel momento, y no pude evitar apretarla con más fuerza. Desde luego tenía las hormonas revolucionadas, no lo podía negar.
-Vamos chicas-.dijo Lanie desde mi escritorio.-La tía Katie necesita descansar.
-Cuidate Kate-.se despidió Madison separándose y siguiendo a la forense para recoger los lápices de colores y los dibujos que habían dejado en el suelo.
-Ponte buena-.continuó Allie dándome un beso en la mejilla y recorriendo los mismos pasos que su hermana. Posé la mano por el lugar en el que había depositado aquella muestra de cariño y no pude evitar sonreír.
-Venga, Beckett-.insistió el escritor por tercera vez.-Hasta mañana chicos. Adiós niñas-.sonrió mirando a Madison y a Allie que levantaron su mano a modo de despedida.
-Hasta mañana.
-¿Se puede saber qué hace Demming aquí?-.preguntó una vez que las puertas se cerraron y nos quedamos los dos solos.-Pensaba que trabajaba en robos. No entiendo que pinta aquí.
-Y allí está, pero han recortado la plantilla de desapariciones y robos, por lo que ahora hace las dos cosas, así que se me ocurrió llamarle y pedirle ayuda.
-Espero que no tardemos mucho en encontrar a su madre-.refunfuñó esquivando mi mirada.
-¿Es que no te gustan las niñas? Pensé que con eso de que eres padre te gustaría tenerlas por aquí.
-Ellas claro que me gustan. Me hacen recordar los buenos tiempos en los que Alexis era pequeña y yo era un padre novato que apenas sabía calentar un biberón.
-¿Entonces a qué viene ese...?-.no completé la frase pues ya había adivinado su problema.-Richard Castle, no me digas que estás celoso-.dije de forma acusatoria incapaz de reprimir una sonrisa mientras el abría la puerta del copiloto y me invitaba a sentarme. Cuando se sentó en mi sitio, puso el coche en marcha y con la mirada fija en la carretera, trató de esquivar mis miradas a la misma vez que el tema.-Vamos, Rick. ¿Cómo puedes estar celoso de alguien con el que terminé hace un año?
-¿Quién ha dicho que estoy celoso?-.se defendió manteniendo el semblante serio.
-¡Oh, venga!-.exclamé.-Reconócelo.
-No puedo reconocer algo que no es verdad.
-Castle...-.me cortó en aquel mismo instante.
-Te he dicho que no estoy celoso.
-Eres patético, Castle.
-¡Vale! ¡Estoy celoso de él! Y si eso me hace ser patético, pues soy patético-.dijo exasperado y apretando con fuerza el volante.-¿Contenta?
-Sí-.reconocí con una sonrisa y depositando un rápido beso en su mejilla que le pilló desprevenido.
Apenas pasaron diez minutos en silencio cuando el coche se detuvo y pude apreciar el lugar en el que estábamos.
-Rick, esta no es mi casa.
-Esta noche sí-.fue lo único que dijo saliendo del vehículo y a continuación ayudándome a mí.-Kate, tenemos hablar, y esta noche no pienso recibir un no por respuesta. Estoy confuso y tu necesitas un enfermero mientras sigas con esos vómitos, así que ya me ofrezco yo para estar a tu lado.
-De acuerdo-.acepté con voz débil cerrando la puerta y siguiendo sus pasos hasta llegar a su loft.
-¿Te pondrás el traje de enfermera?
-Lo haría, pero lo he dejado en la tintorería-.respondió con sequedad y por el tono de voz, sabía que no estaba para bromas.
Cuando entramos por la puerta y dejó su chaqueta en la percha, se giró a mí y se acercó con pasos lentos.
-Tú nueva casa temporal-.afirmó sonsacando una sonrisa forzada que me partía el corazón al imaginar que era por mi culpa que se sintiera de aquel modo.
-¿Y Alexis y Martha?-.pregunté tratando de aplazar la conversación que sabía que tarde o temprano terminaríamos teniendo.
-Alexis está de acampada con unas amigas y mi madre esta ensayando su nuevo papel para una obra en la que la acaban de coger-.asentí y rodé los ojos, al parecer no íbamos a tener interrupciones durante aquella noche.-Kate-.me llamó mientra yo iba caminando hasta el centro de la sala y tomaba asiento en uno de sus sillones, acompañada por él.-Kate, por favor. No lo puedo soportar más-.continuó tras unos largos minutos en silencio.-Desde que volvimos a trabajar hace ya varias semanas no eres tú. Reconozco que no tenía ni idea de cómo iba a ser nuestra relación tras lo que había ocurrido entre nosotros, pero sabía que podría salir bien, que nada cambiaría, podríamos seguir juntos y adelante, sin embargo, ha sido todo lo contrario a cómo me lo imaginaba. He tratado de averiguar que es lo que he hecho mal para que te comportes de esa forma y me trates de ignorar, en cambio no consigo entenderlo por mucho que lo intente. Pensaba que después de lo que había pasado en los Hamptons ibas a dejar de evitar lo que sientes y hacerle frente de una vez. Cuando llegamos todo entre nosotros iba perfecto, me alegraba de que al fin podría estar contigo como una pareja normal, pero desde que hemos vuelto al trabajo estas irreconocible. Y ¿sabes qué es lo peor? Que no me quieres decir qué es lo que te ocurre. ¿Es qué todavía no confías en mí lo suficiente para contármelo? Sea lo que sea, siempre me tendrás a tu lado, soy tu noble compañero, tu escudero, y me tendrás para cualquier cosa que necesites, pero sólo necesito una respuesta clara que me expliqué por qué esos cambios de humor tan repentinos.¿Por qué con cada paso que doy tratando de buscar una solución con el fin de que todo vuelva a ser como antes, buscas la manera de esquivarme en lugar de hacerme frente? Es algo que me supera y no puedo evitar preguntarme qué es lo que ha cambiado. Kate Beckett, te quiero y no soporto esta situación, necesito que me respondas-.confesó sin tan siquiera detenerse a coger aire y sujetando mis manos entre las suyas, observando cada movimiento que realizaba con sus ojos azul cobalto que tanto adoraba y una expresión indescifrable en el rostro. No fue hasta el momento en el que sentí como algo húmedo traspasaba mi pantalón cuando me di cuenta de que las lágrimas brotaban de mis ojos y resbalaban por mis mejillas, aterrizando como consecuencia en mis piernas.-Kate, por favor, dí algo-.pidió acariciando mi cara y tratando de hacer desaparecer aquellas lágrimas con su pulgar.
Sentía rabia en aquel momento. Sentía como iba a estallar y las palabras estaban apunto de escapar de mis labios. Sentía rabia, y no era por él. Sino por mi. Por haberme comportado como una estúpida las últimas semanas. Aún así era incapaz de controlar lo que las hormonas en ese momento me gritaban.
-¡Demonios, Castle!-.exclamé apartando su mano y poniéndome en pie.-¿Qué es tan difícil de entender? ¡Estoy embarazada!-.concluí subiendo lo más deprisa que pude hasta su habitación, mirando por última vez su rostro completamente perplejo y casi de piedra.
Cerré la puerta, me tumbé sobre la cama y dejé que las lágrimas cayeran libremente mientras mi cabeza recordaba lo que acababa de producirse en el salón y me autoculpaba el remordimiento: su discurso cargado de preocupación al mismo tiempo que de desesperación, mis gritos, su reacción ante mis últimas palabras... Dejé a mi mente que siguiera reviviendo aquel momento al mismo tiempo que me preguntaba si había hecho bien en contárselo y como sería todo a partir de ahora.
Continuará...
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
YESSSSSSS!
Love it, espero que lo sigas prontito
Love it, espero que lo sigas prontito
Invitado- Invitado
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
genial, si continuas pronto te lo agradeceré profundamente
Re: "Nuevos Caminos" Cap.8.1 (Continuación de "Vacaciones")
sigue no nos dejess asiiiiiiiiiiiii!!!!!!!!!!!!!!!1
Me encanta!!!!!!!!!!
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eectcastle- Ayudante de policia
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