Catarsis [14/14]

Pensar que pueden acabar mal también me aterra a mi, buscaras una solución para que no suceda así verdad?
otro estupendísimo capítulo.

Punto 1: mi pc a la hora de enviar el comentario ha dado error, lo escribo desde el móvil.
Punto 2: tengo calor y no puedo abrir la ventana porque se oye el jaleo de la feria, VIVA LA FERIA DE ALBACETE! (se hace publicidad)
Punto 3: ya no me acuerdo de más, me has descolocado...
Ah! SI!
Punto 4: a veces agradezco el estar single pero otras no lo pones fácil, cacho perra!!! Luego tengo sueños raros! Quien viene ahora a pagar este fuego!!!????
Ya vale de puntos, en resumen: ME ENCANTAAAAA!!! Ese modo en el que se buscan *.* y luego en el pasillo... Rick que las manos van al paaaan!!!
Jooooo dime que lo arreglarás para que no pase nada malo
Me ha gustado esa delicadeza con la que le muerde Rick, QUE BONITOOOOO!!
Bueno fiera, lo de siempre, sabes que sobran las palabras, mil gracias por TODO! Esto te lo perdonó, pero

Noooooo no le quería dar a enviar! Porras!
El final es: esto te lo perdono pero por ser tú!
Pd: no te quejarás, dos comentarios!! Jajjajaaja

Noooooo no le quería dar a enviar! Porras!
El final es: esto te lo perdono pero por ser tú!
Pd: no te quejarás, dos comentarios!! Jajjajaaja

Guaaaaauuu

Sigueeeeee

Me encantaaaa

Perfecto como siempre!

Guau... me dejas sin palabras enserio.

Continua pronto!!!

Me encanta, continua pronto.

Ya traigo aquí un nuevo capítulo. Un tanto extraño...quedais avisados. Espero que os guste ;-)
Gracias por todos los comentarios, la verdad, animan mucho!!!!!!!!





Durante tres días no dejó de darle vueltas a su frase post orgásmica “para siempre” “en tus brazos” “juntos” Todo eso se había metido bajo fuego en su mente y su piel y no había forma de olvidarlo.

Lo que había empezado como un juego… había acabado como algo más serio. Ella llevaba tres días trabajando, jugueteando con él, apenas un rápido encuentro en los baños del Heat Wave, un par de besos a la salida del trabajo. Habían estado ocupados. Pero tras mucho pensarlo… lo había decidido. Debía hacerla suya. No había otra forma. Sólo debía encontrar el momento, la ocasión para hacérselo saber… a ella, y a sus más allegados.





El corazón de Kate latía con fuerza cuando el Rolls Royce que hacía apenas una hora la había recogido en su casa paró ante una enorme verja de hierro franqueada por un muro de piedra de dos metros de altura.

Esa misma mañana, había sido agasajada por regalos por Castle y esas indicaciones: La recogería un coche, la llevaría a una de sus casas a las afueras de la ciudad. Pasarían un agradable fin de semana.

Ella tenía el fin de semana festivo. Él era el jefe, podía faltar cuando quisiera, a pesar que ese día no se habían visto por diferentes reuniones que tenía, salvo que ella no sabía que el motivo no era otro que su conversión.

No hizo falta llamar para entrar.

Un mayordomo perfectamente ataviado abrió la puerta. Cuando vio a Kate, le dedicó un ceremonioso saludo.

-Bienvenida, Señorita Beckett. El señor Castle la está esperando.

Kate sonrió nerviosa. Todo era muy elegante.

Sus altísimos tacones de aguja hacían mucho ruido mientras caminaban siguiendo al mayordomo; intentaba que no se notase la prisa que tenía por encontrarse con Rick. Se pasó los dedos por su indomable cabello y entró en la habitación que el hombre le indicó.

Su presión sanguínea aumentó cuando advirtió que la decoración giraba en torno a un mismo tema: el sexo.

La habitación estaba llena de gente.

Y no precisamente hablando o tomándose una copa; se encontraban en distintos niveles de desnudez. Se tocaban los unos a los otros y algunos hacían el amor  mientras los demás; a su alrededor, miraban.

Kate era incapaz de contar el número de cuerpos que había allí.

Inspiró con fuerza y se esforzó por no parecer conmocionada, pero no podía dejar de mirarlo todo. Hombres con mujeres, mujeres con mujeres y hombres con hombres… Castle no la había invitado a una velada intima. La había invitado a una orgía.

En el centro de la habitación, allí estaba él, acostado en un sofá con dos mujeres medio desnudas a sus pies. Una punzada de celos recorrió su cuerpo a pesar que se besaban entre ellas.

Rick la miró; estaba contento de que se hubiese vestido con el regalo que le había hecho.

-Estás Increíble. Justo como creía que estarías-la cogió de la mano, la atrajo hacía él y añadió – estás para comerte.

-Gracias-contestó ella, que advirtió que él sólo llevaba unos pantalones y una bata. Sin camisa. Descalzo.


Castle deslizó las manos por las curvas de su cuerpo y las pasó por su espalda hasta apretarle el culo por encima de la seda del vestido.

-Te extrañaba. Tenía ganas de volver a verte.

Kate, totalmente descontrolada, se puso nerviosa.
Se pasó la lengua por los labios.

-¿Quiénes son todas estas personas?-Ni en sus más salvajes fantasías hubiese imaginado que los rumores de las fiestas privadas de Castle, eran reales.
¿No eran ilegales las Orgías en Nueva York? Tal vez eso explicaba los altos muros de esa casa aislada de todo. Así era más difícil que los ojos curiosos pudiese ver lo ocurrido al otro lado.

Castle la atravesó con la mirada. Sus ojos tenían un tono más oscuro.

-Son miembros de mi colectivo… y… sus parejas. Por desgracia, hemos disminuido… Quedamos pocos.

Más confusión.

-¿Colectivo?

-No te agobies. No hagas caso a eso, solo quiero que esta noche mires… disfrutes… sepas…más o menos lo que hay…en mi vida.

Kate se confundió más. Las puertas de esa habitación se cerraron detrás de ella. Tragó saliva. El rubor enrojecía sus mejillas.

“Ya no hay vuelta atrás” pensó.




Castle la cogió de la mano.

-Ven, únete a la fiesta.

Kate vaciló un momento. Nunca había estado en ninguna orgía. Se sentía atraída por ese concepto de libertad sexual desenfrenada.

-¿Estas seguro de esto?

Castle se rió.

-Claro que si, si no supiera que estas preparada… no te habría invitado.

Kate se rió con timidez y al mismo tiempo se sintió mal. Él intentó descifrar su mirada. Él se estaba poniendo a prueba a si mismo. Debía pasar por ese trance.

-Es…mi mundo, Kate. Quiero que me entiendas.

Se hizo un profundo silencio. A Kate no le cabía duda que hablaba en serio. Ella ya estaba perdidamente enamorada de él. También era una prueba…un compromiso como el que veía a través de sus ojos.

-Me quedaré.

Ambos tomaron una copa y se sentaron en el sofá donde antes estaba Castle. Con los ojos muy abiertos, intentaba no mirar directamente a las personas desnudas que había en la habitación, pero no podía evitarlo.

Aquellos cuerpos eran imanes que atraían su curiosa mirada. Vio cómo un hombre le practicaba delicado sexo oral a una mujer. Otros estaban entrelazados en un 69, perdidos en las delicias del sexo del otro. Era una imagen hipnotica; tuvo la sensación de que no podría apartar los ojos de ella.

A Kate le tembló la mano; su cuerpo se calentó.

-Llevo todo el día esperando poder tocarte-susurró Castle en su oido, pasando la mano por encima de su hombro y deslizando el t grande de su vestido para invadir la barrera de su sujetador y acariciarle el pecho.

-Oh dios mio.

Él cogió el pezón y lo hizo rodar entre su índice y pulgar.

-Dios no tiene nada que ver en esto, cariño.

-Sigue haciendo eso y me correré como una loca

-Eso espero-Castle sonrió y le retorció el pezón con más fuerza- Déjate llevar.

Ella gimió sintiéndose extasiada por las caricias de Rick. Cada vez más intensas. Cada vez más relajada y excitada viendo como toda esa gente follaba. Se sentía confortable. Descruzó las piernas y bebió vino antes de apoyarse en los hombros de Richard y darle más acceso a su cuerpo.

Antes de darse cuenta, volvieron a rellenarle la copa, y volvió a beber, una, dos, tres veces.

Entonces fue cuando se percató. No sólo era sexo. Se tensó. Era un ritual. Bebían los unos de los otros. Y no bebían solo vino. Chupaban la sangre que brotaban de esos pequeños cortes en la piel de unos.

Y en lugar de sentir repulsión, recordó como Rick la había mordido, tan tierno y a la vez sensual. Cuidadoso. Erótico. Dios, estaba apunto de…Oh si, el orgasmo recorrió todo su cuerpo mientras observaba como algunos eran mordidos. Nadie protestaba. Lenguas lamían, labios chupaban, todo era demasiado excitante y aterrador al mismo tiempo.

-Kate…eres especial-le bajó los tirantes y el sujetador. Sus pechos quedaron al descubierto-quiero que formes parte de mi vida.

La cabeza le daba vueltas a causa del vino.

-Quiero formar parte de ella.

Sus labios se unieron a los de ella, luego  los deslizó por su rostro, su barbilla, la base de su cuello donde sentía su pulso. La tocaba lentamente.

Kate se reclinó sobre los almohadones y guió con sus manos la cara de Castle hasta su erecto pezón.

-Únete a nosotros- le susurró Rick al inclinarse sobre su oído.

Ella asintió sin saber muy bien lo que estaba hablando hasta que notó una de las mujeres besaba su pierna.

-Castle…-fue incapaz de seguir la frase. Otra mujer, estaba delante de ella y la cogía de las manos. Le bajó el vestido con habilidad y lo dejó caer el suelo.

Kate quedó desnuda; sólo llevaba el liguero, el tanga y unas finas medias. La guiaron a la alfombra y quedó recostada entre las dos mujeres que no dudaron en acariciarle su cuerpo, rigido por la excitación.

Sintió cómo unos suaves labios se posaban sobre los suyos.

-¿Te gusta?

-Nunca había estado con una mujer.

-Entonces te vas a llevar una grata sorpresa- le comentó Castle, que se había sentado a su lado.

-Pero…

-Sólo déjate llevar y disfruta.-la muchacha deslizó sus labios por el sensible cuello de Kate, su cálida boca tomó su pezón erecto y lo chupó con suavidad.

Kate, gimiendo, se retorcía de placer mientras Rick acariciaba sus hombros. Era vagamente consciente de que la otra chica le estaba quitando el ligero, las medias, y el tanga.

Como un gato merodeando ante su presa, la chica se situó entre sus piernas y empezó a acariciarle el interior de sus muslos, sus manos y su boca comenzaron a ascender hacia su palpitante sexo.

Los ojos ambarinos se clavaron en los azules de Castle mientras succionaba con devoción y bajo su boca, Beckett se retorcía de placer con los ojos cerrados, sintiendo como el orgasmo se apoderaba de ella.

Abrió los ojos y se cercioró que ya no solo las dos muchachas le prestaban atención, también un joven, con cuerpo de dios griego deslizaba su lengua por todo su cuerpo, prestándole mayor atención a su clítoris.

Castle estaba nervioso. Respiraba agitado, entre excitado por la escena que contemplaba ante sus ojos y los celos que se clavaban como agujas en su ser.

Mientras la otra chica, con una mano acariciaba su erección y con la otra disfrutaba de los pechos de Beckett, Mia, la rubia que proporcionaba sexo oral a  Kate, deslizó su lengua por su colmillo afilado al separarse de su cuerpo, deleitándose, provocando a su amo. Con la boca entreabierta gateó hasta besar su cadera suavemente y acarició con sus dientes la fina piel de la ex detective, dispuesta a beber de ella.

-No…-apenas una negación agónica escapó de los labios de Castle-detente.

-¿Amo?-Mia alzó la vista. Kate estaba completamente desorientada, perdida, abrió los ojos mirando a su alrededor, viendo como los unos bebían de los otros, como todos compartían sexo como algo natural. Se tensó. Miró su seno con algunas marquitas de sangre. Se echó hacía atrás asustada, chocando su espalda con el pecho de Castle.

-¿Qué?-

-Tranquila-susurró en su oído, aferrándola a el con sus fuertes brazos-todo esta bien…estoy aquí, Kate.

Castle con la mirada hizo que se quedaran solos, mientras Mia y los demás, retomaron sus actividades con otras parejas.

-Esta bien…ya acabó…estoy…aquí…-Castle hundió su rostro en el cuello de ella, besándolo suavemente, sintiéndose terriblemente tentado el magnetismo del fuerte palpitar de su pulso.-Todo está bien-dijo sintiendo como unas leves lágrimas se deslizaban por su rostro mientras la apretaba a su cuerpo con fuerza.

Kate se quedó inmóvil.


Continuará….

Uff no me ha gustado mucho el giro que ha dado la historia, yo que me pensaba que el dejaba ese mundo por ella y lo que quiere es que sea como todas las demás, no se, no se. Habra que seguir esperando a ver como la continuas.
Gracias por escribir

No me imagino s kate haciendo esto...siguee

que de genteeee!!!!! (pero no más que en la feria!)
Pobre Kate! entre el vino y encontrarse con la sangre y la gente debe de sentirse desorientada  
Con tu forma de describirlo me has hecho entrar en las escena, como si estuviera alli... y he de decir que Kate es muy valiente, y Rick todo un caballero quedándose con ella para protegerla *-*
Ya se nota como empiezan los dos a sentir... QUE BONITOOOOO!!!!!!!!!
Gracias por escribir, loki!!! moakis!!  

agecastbet escribió:Pero porqué lo dejas ahí, es que nos vas a tener siempre al borde del precipicio?? Pues esto no puede ser, ya está bien, que me tienes con el corazón en un puño.
Porqué la va a meter en este lío, si él no está seguro de querer permanecer dentro de ese mundo?? Lo hará o no lo hará, se sacrificará por ella o será ella la sacrificada por él. Es que no puedo dejar de preguntarme cosas y en vez de respuestas tengo más preguntas, esto tiene que terminar bien, que veo que no va a ser así, a este paso y me streso.
Y cómo díces que este capítulo te quedó raro, acaso no es raro todo el fic. Y no es raro por lo que escribes o como lo escribes, sino por las situaciones que describes. Por lo tanto no hay rarezas, sólo sigues el guión de la historia, que se está adentrando en un submundo, que a saber si existe o no, pero preferiría no saber mucho más, sabes que te dije que no es un género que me gustase especialmente, pero no por eso deja de ser atrayente y muy, muy entretenido, jajajajajaja
Lo diriges de forma magistral, consigues que casi tenga dudas, de si puede ser real o no y eso es lo que más me gusta de la lectura, por muy disparatado que parezca el tema a tratar, si está bien escrito, y descrito, consigues imbuírte de él y llegas casi a vivirlo en primera persona. Deja que te diga, que eso sólo lo consiguen los grandes escritores, ¡ como tú !
Sigue pronto que me tienes colapsada, y no es bueno para mi salud, jajajajaja
BESOTESSSSSSSSSSSSSSSSSSSS

Dejarte al precipicio...consiste en eso para mantenener enganchado a la historia.

Ya no sigo el guión de la historia original en la que esta basada. Nada que ver ;-) He dado un punto de giro...veremos a ver.

erikal escribió:Uff no me ha gustado mucho el giro que ha dado la historia, yo que me pensaba que el dejaba ese mundo por ella y lo que quiere es que sea como todas las demás, no se, no se. Habra que seguir esperando a ver como la continuas.
Gracias por escribir

Y no vas mal encaminada con lo que pensabas.Nada que ver con lo que imaginas...tu primer pensamiento era el correcto ;-)
Gracias a ti por leerme.

castle&beckett..cris escribió:No me imagino s kate haciendo esto...siguee

Me gusta qe no la imagineis asi jajajaja

NOOOOO!!! No puedes dejarlo así   uno de estos días me va a dar un ataque al corazón al ver llegar el final de el capitulo. La forma en que lo describes estaba ahí, sentía el estrés de Kate ante la situación, las dudas de Castle y como siempre con este fic... MUCHO CALORR xD

Continúa pronto  

ya me podía yo morir del asco esperando la notificación.... U_U
menos mal que soy una pesada por TW y me has respondido

Lo dicho, que me voy a la ducha!

Me ha gustado mucho y me tienes intrigada por varios aspectos que imagino que en el proximo capi me revelarás
Eres increible.

bss

Buenisimo, extraño? puede; inquietante, amor, sexo, lujuria y como reacciona Castle, que ve Kate y que pasará, no tengo ni idea de que puede pasar, por esto y por mi salud mental te pido a la mayor brevedad posible actualices este adictivo fic. Gracias  

Continuaaaaa

Gracias por cada comentario y cada lectura. Se agradece muchisimo. Soys grandes


Poco a poco se irá resolviendo para acabar el fic



13.




Kate, medio dormida y aturdida, luchaba por despertarse. Abrió los ojos en una tenue y desconocida habitación. Se dio la vuelta sobre la almohada y siguió luchando contra la desorientación.

Demasiado vino la noche anterior.

Se quedó erguida en la cama y tomó su cabeza con sus manos intentando establecerse y que la habitación no diera tantas vueltas. No, no había bebido tanto vino. Entonces recordó: Rick. La orgía. Hombres y mujeres desnudos deseándola. Sangre. Sexo. Alcohol.

Le dolían las sienes de recordar. Todo su cuerpo se tensó. Miró sus muñecas y tenían unas leves marcas, las yemas de Rick marcadas en ellas.

Se levantó descalza y se cubrió con una bata de seda que había a los pies de la cama.
Se paró frente al espejo que había en un rincón de la habitación y abrió la bata suavemente.

Se sentía avergonzada.

Se pasó una mano por su cuerpo, su cuello, adolorido, sus pezones aun dolían, su vientre…recordó todo y apartó la mirada de su reflejo.

Estaba tan enfadada que no escuchó como la puerta se abría lentamente detrás de ella, ni las suaves pisadas de Castle entrando en la habitación.

Sólo se dio cuenta que él estaba allí cuando la abrazó por detrás.

-Kate-le murmuró delicadamente al oído- No quería que te despertaras sola.

Ella lo apartó molesta.

-No me toques.

Cerró su bata con más fuerza y buscó su ropa por la habitación ante el silencio de él. Se puso el vestido, los zapatos, maldijo los tacones mientras las lágrimas brotaban por sus ojos. Trató de convencerse que tenía la fuerza suficiente para irse de allí sin decir nada más mientras cerraba los ojos con fuerza.

Castle se acercó a ella por detrás y le puso las manos sobre los hombros, deteniéndola.

-Kate no hicimos nada que tu no deseases hacer, cariño- dijo medio confundido.

Beckett se alejó de él como pudo y le miró con repulsión. Aún no entendía nada.

-Bebí demasiado vino.

-Kate…

-No. Siento… como si hubieseis abusado de mi. Dos mujeres… tu… yo….

-Katherine- Castle alzó la voz y sus ojos se oscurecieron. Kate jamás había visto sus ojos así. Era un tono peligroso.

La ex detective se calló y le miró.

-Tu deseabas desinhibirte sexualmente, por lo tanto no te violaron…Yo…quería que entrases en mi mundo, Kate, y no hay forma suave de hacerlo….-Rick suspiró. Fue a hablar pero ella le interrumpió.

-¿En tu mundo? Por favor, pensaba que eras mujeriego… adicto al sexo… pero esto es demasiado-quería gritarle de todo.-Ya no tienes mi confianza, Richard.

Él liberó su enfado. La tomó de las muñecas adoloridas y el rostro de Beckett demostró que le había dolido levemente. Intentó zafarse.

-Mírame.

El corazón de Kate latía con fuerza. Castle dirigió su mano a su cuello y pensó que la iba a asfixiar pero deslizó sus dedos por la leve marca que le había dejado con sus dientes las dos veces que había bebido de ella.

-Kate, yo he bebido de ti, eres mía…-suspiró- quería…tanto anoche... y no pude…te asustaste…me asuste… ¿Lo recuerdas?-le acarició

Ella asintió mirándole.

-Bebiste mi sangre….en esa cama…. Hicimos el amor después de salir de aquella sala…-dijo casi sin voz, asustada.

Con ternura, deslizó sus dedos por sus hombros y llegó a la curva de sus pechos. Los tomó con las manos como pudo y la provocó frotando suavemente por encima. Ella dejó caer la cabeza hacía atrás. Sus pezones se pusieron erectos.

-Oh dios…deja…de hacer…de tocarme así.

Quería alejarse, pero sabía que no podía.

La boca de Castle buscó la suya con calculada lentitud, haciéndola sufrir y acabó con sus débiles protestas entrelazando su lengua con la de ella.

Enroscó sus brazos alrededor de su cuello y él, con sorprendente facilidad, la cogió en brazos y la llevó hasta la cama de nuevo.

Él se acostó a su lado, paseó su mirada por el cuerpo de Beckett recreándose en sus pechos y en sus muslos.

Los ojos de Rick ardían en deseo. Él bajó la cabeza y empezó a chuparle la sensible punta de los pezones tras deshacerse de la ropa que lo impedía.

Kate se mareó.

Castle deslizó su mano entre sus piernas y las separó. La estaba tocando donde ella deseaba que lo hiciera. Él encontró y estimuló terminaciones nerviosas de su clítoris, que ella ni siquiera sabía que existían.

Él inspiró con fuerza y se separó. Ella le miró sin comprender, y vio en los ojos de él, miedo, duda, ternura, cariño, amor.

-¿Qué…?

Él se apartó levemente, le dio un beso en los labios.

-No puedo.

-¿Qué?

Beckett puso un dedo en sus labios y le besó intentando hacer que se callara pero él volvió a separarse.

Y comprendió que ambos se habían perdido en los deseos carnales sin hablar y no podían seguir así.

-Debo beber de ti…hasta hacerte como yo… o no podríamos seguir…cada vez soy más débil…y….esto tarde…

-Intento comprenderte pero…

Él tocó su mejilla.

-No es ningún juego. Te hablé de mi clan…mi grupo…como quieras llamarle.

Beckett le miró viendo lo serio que hablaba.

-Pensaba que bromeabas, que esa historia era parte de tu juego de seducción. Nunca pensé que hablaras en serio…

Con miedo, se alejó de él. Ahora sus caricias la molestaban. ¿Cómo podía haber disfrutado al sentir los labios de Castle sobre los suyos o sus manos? ¡No era un hombre! Era un psicópata acosador de mujeres que utilizaba el deseo sexual para saciar sus apetitos antinaturales.

Beckett se mareó. Pensó que se iba a desmayar hasta que consiguió no sentir otra cosa que Rabia. Ira. Dolor. Engaño.

-Si se trata de una broma, Castle, es de muy mal gusto y estás llegando muy lejos. Recuerda, que aunque no lleve arma, he estado entrenada y podría…

La reacción de Kate pilló a Rick desprevenido.

-Hablo muy en serio.- Buscó la mano de ella y la agarró con fuerza- Créeme. TIENES QUE ELEGIR POR MI, KATE. –Alzó la voz, asustado por perderla- TU DECIDES, NO PUEDO…NO VOY A OBLIGARTE A CRUZAR AL OTRO LADO POR MI… NO QUIERO QUE LO HAGAS.

-¿Unirme? ¿De dónde sacas la idea de que yo quiero ser una mujer vampiro?


Castle bajó la mirada al suelo. Por dentro estaba sufriendo. La deseaba. Quería que fuera su mujer. La quería para él, para siempre, para más allá de la eternidad. Estaba completamente enamorado, y al mismo tiempo, era egoísta pedirle que se uniera a ella, hacerle pasar por lo que él había pasado, estar atada a él… No podía y entendía que se negara, y a decir verdad, deseaba que se negara.

Él se aclaró la garganta e intentó explicarse.

-Hace mucho tiempo, yo era como tú. Mortal. Ojala te hubiera conocido entonces, Kate… no puedo…obligarte…sólo quiero que sepas que yo…

Las lágrimas resbalaron por su rostro.

-Lo siento. No puedo jugar más a este perverso juego.

-Kate-suplicó.

-No. Olvídate de mí. Mantente alejado de mí. No voy…no quiero…no seré como tú, jamás, Richard.

Él asintió. Ella le miró una última vez. Salió de la habitación, con rapidez. Huyendo. Corrió ciegamente por el pasillo y descendió por un largo y curvado tramo de escaleras. No sabía donde estaba. A donde iba. No sabía que sucedería a partir de aquel momento.


Continuará...

DRAMAAAAAAAAAA!!!! Guau he sentido de todo en éste capítulo, he entendido a Kate, y es normal que lo tome a broma porque no es que pase todos los días...
Pero también hay algo que me llama y es que Castle esta demostrando lo que realmente le importa, si no la hubiera utilizado y fuera! Pero no, le esta dando a elegir...
Si, tal vez lo que ha vivido alli ha sido algo nuevo, raro, duro, nose como más describirlo, pero ella tampoco se ha negado, y él le estaba mostrando su mundo con las consecuencias que conlleva... Ahora lo tomas o lo dejas?
Buen capi loki! Ahora le toca a Kate pensar muuuuchas cosas, que pasará!?
Me encantan leerte! Ya tu sabeh!! Muuuuuuas!