Y ahora... ¿que? (EPILOGO) 21/09

preciosoooo

Bueno que se hayan acostado o no que tenga un final feliz me conformo

silvanalino escribió:No tuvo nada, estaba lastimada y triste y solo salio a tomar algo con un colega
TENIA DERECHO, EL SALIO CON LA RUBIA.
No es nada malo salir a tomar algo, eso no significa que tiene que pasar...
Muy buen capitulo, me encanta la historia, sigueeee...y los celos entre ellos, creo que asi pasara en la 5 temporada

Jajaja... cuando tenga un rato tengo que recopilar datos y vemos quien gana.

Muchas gracias, ya sabes que espero siempre tus comentarios.

El viernes .... hasta el viernes no podré tener nada, pero os leo desde el móvil y me dáis ánimos!!!

castle&beckett..cris escribió:preciosoooo

Mil gracias por leerme

castlelover escribió:Bueno que se hayan acostado o no que tenga un final feliz me conformo

Hummm..... el diablo luchando contra el ángel.

Eso esta hecho!!

Como siempre, genial
Lo mejor para mi de este capítulo es la conversación entre Castle y Harry, parece la voz de su conciencia y le dijo las palabras claves para que dejase de estar nervioso por Hunt. No sabemos si en la serie llegaron a algo más o no, que por otra parte, como decis, tampoco lo vería mal, si Castle anda con barbies por ahi para darle celos a Beckett, ¿por qué ella no puede hacer lo mismo? Están en las mismas condiciones, o ¿es que por ser mujer si se va con un hombre es una puta y un hombre si se va con una mujer es muy guaya? Esa forma de pensar en estos tiempos no tiene cabida.

Bueno, dejando de lado ese tema, me encantó tu capítulo, la escena de Sarah dandole ese beso a Anthony fue preciosa, la cara de embobado que se le debió quedar a él jaja La chica es muy lista, se ve que por algo Gates confiaba tanto en ella.

Tengo ganas de saber como continua el caso y saber que pasa al final en la cita de Castle con las 20 fans, que suerte que este Harry para calmar los celos de Beckett

Me encanta éste fic!! Me tienes maravillada!!

por cierto, si vas a tener en cuenta las opiniones yo si quiero que se hubiese liado, me muero por ver la reacción de Castle y el sentimiento de culpa por haberse puesto a jugar con la rubia =)

Beckett_Castle_Alba escribió:Como siempre, genial
Lo mejor para mi de este capítulo es la conversación entre Castle y Harry, parece la voz de su conciencia y le dijo las palabras claves para que dejase de estar nervioso por Hunt. No sabemos si en la serie llegaron a algo más o no, que por otra parte, como decis, tampoco lo vería mal, si Castle anda con barbies por ahi para darle celos a Beckett, ¿por qué ella no puede hacer lo mismo? Están en las mismas condiciones, o ¿es que por ser mujer si se va con un hombre es una puta y un hombre si se va con una mujer es muy guaya? Esa forma de pensar en estos tiempos no tiene cabida.

Bueno, dejando de lado ese tema, me encantó tu capítulo, la escena de Sarah dandole ese beso a Anthony fue preciosa, la cara de embobado que se le debió quedar a él jaja La chica es muy lista, se ve que por algo Gates confiaba tanto en ella.

Tengo ganas de saber como continua el caso y saber que pasa al final en la cita de Castle con las 20 fans, que suerte que este Harry para calmar los celos de Beckett

Mil gracias por leer, efectivamente esa conversación ... Me costo eh?

Continuare

LeFleur89 escribió:Me encanta éste fic!! Me tienes maravillada!!

Mil gracias por leerme y dar tu opinion

maria_cs escribió:por cierto, si vas a tener en cuenta las opiniones yo si quiero que se hubiese liado, me muero por ver la reacción de Castle y el sentimiento de culpa por haberse puesto a jugar con la rubia =)

Si, quiero teneros en cuenta, pero ganara lo q diga la mayoría puede que no compartamos opinión

De acuerdo?

Gracias por leerme

Anver escribió:

maria_cs escribió:por cierto, si vas a tener en cuenta las opiniones yo si quiero que se hubiese liado, me muero por ver la reacción de Castle y el sentimiento de culpa por haberse puesto a jugar con la rubia =)

Si, quiero teneros en cuenta, pero ganara lo q diga la mayoría puede que no compartamos opinión

De acuerdo?

Gracias por leerme

por supuesto ganará quien tu quieras que para eso eres la que escribes, perdona si te he ofendido

Muy bueno sigue pronto!

LEILAKB escribió:Muy bueno sigue pronto!

El viernes prometido

Gracias por leerme

Gran capítulo.
Yo realmente dudo que pasara algo entre el rubiales y Kate hasta dudo que pasara entre Rick y la azafata. Querría molestar a Kate pero seguramente no llegó ni a acostarse con ella.
Me ha gustado mucho el detalle del beso y los celos de ambos.

May escribió:Gran capítulo.
Yo realmente dudo que pasara algo entre el rubiales y Kate hasta dudo que pasara entre Rick y la azafata. Querría molestar a Kate pero seguramente no llegó ni a acostarse con ella.
Me ha gustado mucho el detalle del beso y los celos de ambos.

Gracias, creo que vais ganando quienes pensáis que paso algo entre Colin/Kate Rick/rubia-azafata-sin nombre... jajaja

GRACIAS POR LEERME.

Cata Castillo escribió:¡Que entretenida esta minipolémica! Me hacen gracia tantas opiniones y a lo mejor en la serie ni se vuelven a acordar de la Barbie del Ferrari, (Jacinda creo que se llamaba), ni del Ken, o sea "El buenorro de Colin"

Realmente no sé si Castle se acostó con la rubia, si Kate se acostó con Colin, si se acostaron Colin y la rubia, o Castle y Colin, o Kate y el Ferrari , o si no se acostaron ninguno y creo que no debería importar.

Ni Castle ha sido cartujo, ni Kate monja de clausura, los dos tienen su pasado, y lo que debe importar es lo que ocurra a partir de que están juntos. Antes no eran nada el uno del otro y no se debían nada como pareja, y decir que Kate es una puta, me parece un poco precipitado. Que se sepa estas señoras denominadas así, se dedican a comerciar con su cuerpo y que se sepa Kate no ha comerciado con el suyo, en todo caso disfrutado.

Y si hay que opinar sobre lo que hipotéticamente pasó como soy una romántica empedernida, por mi que no hubiera habido nada ni entre Castle y la rubia, ni entre Kate y Colin, pero que si ha tenido que haberlo tampoco lo censuro.

P.D: Me sigue gustando un Castle castrado emocionalmente, al que solo se le levante con su musa.

CATA ADORO TUS COMENTARIOS, TOTALMENTE DE ACUERDO EN TODOOOOOOOOOOOO CON VOS!!!

silvanalino escribió:

Cata Castillo escribió:¡Que entretenida esta minipolémica! Me hacen gracia tantas opiniones y a lo mejor en la serie ni se vuelven a acordar de la Barbie del Ferrari, (Jacinda creo que se llamaba), ni del Ken, o sea "El buenorro de Colin"

Realmente no sé si Castle se acostó con la rubia, si Kate se acostó con Colin, si se acostaron Colin y la rubia, o Castle y Colin, o Kate y el Ferrari , o si no se acostaron ninguno y creo que no debería importar.

Ni Castle ha sido cartujo, ni Kate monja de clausura, los dos tienen su pasado, y lo que debe importar es lo que ocurra a partir de que están juntos. Antes no eran nada el uno del otro y no se debían nada como pareja, y decir que Kate es una puta, me parece un poco precipitado. Que se sepa estas señoras denominadas así, se dedican a comerciar con su cuerpo y que se sepa Kate no ha comerciado con el suyo, en todo caso disfrutado.

Y si hay que opinar sobre lo que hipotéticamente pasó como soy una romántica empedernida, por mi que no hubiera habido nada ni entre Castle y la rubia, ni entre Kate y Colin, pero que si ha tenido que haberlo tampoco lo censuro.

P.D: Me sigue gustando un Castle castrado emocionalmente, al que solo se le levante con su musa.

CATA ADORO TUS COMENTARIOS, TOTALMENTE DE ACUERDO EN TODOOOOOOOOOOOO CON VOS!!!

Que conste que ya me lo estaba pasando pipa escribiendo, pero desde que me he puesto a contestaros, estoy a todas horas con el Movil!!! Que enganche!!!

Sois geniales!!! Jajaja

A veces miento...

Esta es una de esas veces... finalmente saqué algo de tiempo hoy ¿Os molesta?

CAPITULO 21

Gates empezó a temer que Grady se derrumbaría. Intentó hablar con él, pero no era posible mantener una conversación coherente. Estaba histérico. Tenía que hacer algo, estaba claro que ella no tenía ningún valor para aquel tipo, en cuanto matase a Grady, ella también moriría, o incluso antes para meterle miedo y que confesase. Su única esperanza es que Grady abriese la boca lo más tarde posible y aparentar que sabía más de lo que realmente sabía.

El asesino dormía en la parte de arriba, se despertó durante unos minutos. Llevaba una semana sin dormir tranquilo, y ahora, con esos dos abajo la cosa cambiaba. No tenía prisa y seguiría durmiendo lo que necesitase. Que se desesperasen, sin moverse, sin agua, sin comida, sin ir al baño…

Espo y Sarah estaban llegando a la dirección donde estaba el móvil desechable de Gates. Espo no había trabajado con Sarah y ahora esta era su único apoyo. La vio retorcer nerviosa un mechón de pelo entre sus dedos. Ese gesto le recordó a Beckett, a veces también lo hacía, pero en Sarah parecía infantil, porque el aspecto de Sarah era en de una niñita frágil. Se acercaron a la casa unifamiliar y la observaron rápido mientras pasaban de largo y buscaban un lugar alejado para aparcar sin despertar ninguna sospecha.

- Es hora que probemos esa mente tuya – le dijo Espo aparcando y volviéndose para mirarla – ¿que has visto?

- Es una casa de dos plantas – comenzó Sarah cerrando los ojos- garaje y una buhardilla. Tiene sótano con dos pequeñas ventanas en los laterales de la casa, están enrejadas, deben de medir un metro de largo por poco más de medio de alto. La casa esta en venta, tiene un cartel en lo que antes fue un jardín, y esta desde hace bastante tiempo, esta descolorido por el sol y hay restos de hojas del otoño pasado en la entrada aparte que el buzón esta lleno de publicidad.

Todas las ventanas están cerradas excepto una de la segunda planta, seguramente haya alguien allí porque la casa olerá a cerrado, y supongo que será el tipo que buscamos, a Victoria y Grady les tendrá encerrados en cualquier parte seguramente en la buhardilla o el sótano, lo más fácil sería el sótano, las ventanas de la buhardilla son grandes y no tienen cortinas. No tiene luz eléctrica, el contador esta precintado. Si llegaron en coche hasta aquí, no está dentro de la casa, no hay huellas de coche en el acceso, y la hojarasca estaría aplastada. La puerta principal será fácil de abrir, la cerradura es muy común, creo que hasta yo podría… es más sencillo acceder al jardín por la parte izquierda, aún hay setos y maleza por donde esconderse y avanzar..

- Vaya, sorprendente… ahora te contaré yo. Rezaré para que sólo este él con Gates y Grady, ese tío es más alto y fuerte que yo, me noqueó de un solo golpe y por lo que me dijo Beckett a ella le vapuleó como si fuese una marioneta rota, cosa que no hace cualquiera, vamos que tendremos que evitar enfrentarnos cuerpo a cuerpo. Además es tirador experto, no creo que nos dejase con vida si nos mete un tiro. Pero tenemos que entrar ahí. No tenemos tiempo para ver si tiene o no compañía, no podemos jugárnosla y que les aniquile. Si tiene compañía lo llevamos aún peor, porque si ya nos enfrentamos Beckett y yo la semana pasada a uno y salimos perdiendo, a dos como él… no sobreviviríamos ninguno. Y ahora necesito la verdad Sarah…. ¿Qué experiencia tienes en enfrentamientos como este? – ella le miro

- Ninguna – bajo la vista – lo siento. Siempre que hemos tenido que enfrentarnos a alguien yo estaba en la cuarta fila. No tengo mala puntería, pero jamás he disparado a nadie. Y la única lucha que conozco fue la que nos enseñaron en la academia. Pero se observar. Y tengo que ayudar a Victoria – dijo decidida.

- Bueno, al menos tienes un arma y ganas – le dijo sonriendo.

Espósito sabía que esto no era una empresa fácil, quizá en un par de horas todo acabaría y tan sólo serían cuatro cuerpos inertes más en el contador particular de aquel tipo. Pensó en Lanie. Si todo salía bien tenían que dejar de hacer el tonto… le vino a la mente una canción en español y la tarareo en su mente: “Esto es una tormenta y continuará, es como ir hundiéndose en el mar, seria un poco absurdo un final pactar, yo busco paz y tu eres tempestad….”

Tenían que intentarlo. Ese tipo le había herido, casi había matado a su compañera y sobre todo amiga Beckett y ahora quería cargarse a su capitana, que aunque no le caía bien, era su jefa y compañera.

- Sarah, tendrás que quedarte detrás de mí. Necesitaré que cubras mi espalda, yo me enfrentaré de cara, pero no quiero que me sorprenda por detrás. Sarah, es muy importante que si le ves, no lo dudes, dispara y procura hacerlo donde no pueda recuperarse, o nos matará él a nosotros. Tendrás que ser una gata, ágil y silenciosa. Que él si me ve no sepa que estas. Te voy a necesitar ahí dentro y puedes hacerlo.

Sarah se estremeció pensando en lo que le estaba diciendo Espósito. Sus compañeros jamás le habían dejado participar, y él, un poli al que no conocía de nada, estaba prácticamente poniéndole la vida en sus manos. Le asintió en silencio y decidió que tenía que tomar el control de su cuerpo poniéndolo en modo observación, esa era la mejor forma de calmarlo.

Bajaron del coche tras ponerse los chalecos y revisar sus armas y se encaminaron hacia la casa, escondiéndose entre las vallas de las casas cercanas y la vegetación que encontraban. Afortunadamente la zona no era nada concurrida, seguramente y por el olor de algún arroyo cercano que les llegaba, era un asco vivir allí, al menos era una ventaja que nadie los mirase, aunque eso también podría llamar la atención del asesino. Un coche paso cerca de ellos, se quedaron inmóviles y pero este, sin percatarse de su presencia continuó su camino. Llegaron a la valla de la casa y la saltaron por donde había dicho Sarah, por la parte izquierda. Se agacharon entre la maleza y esperaron unos minutos.

- ¿Tienes algo que decirme Sarah?
- No, está todo igual.
- Vamos

Se acercaron a la puerta principal, primero Espósito, que comenzó a jugar con la cerradura, después ella. Los cuatro minutos que él tardó en abrir la cerradura, a ella le parecieron eternos. La sorprendió ver como él guardaba las ganzúas que había utilizado en un pequeño estuche y sacaba un minúsculo espejo con un mango articulable. Abrió un apenas un centímetro la puerta y metió el espejito… no vio nada que estorbase la apertura de la puerta, no vio al tipo por allí… guardó el espejo y cogió su pistola. Le quitó el seguro y la miró. Ella le imitó, poniendo su arma a la altura de su cara. “Al infierno” pensó Esposito mientras abría la puerta sigilosamente y se quedaba plantado en la misma con el arma apuntando hacia dentro.

Nada. Silencio. Miró a Sarah y con la mente le dijo “tú puedes”. Cerró con sumo cuidado la puerta. Buscaría el sótano. Se dirigió hacia la derecha, buscando la cocina. La mayor parte de las puertas de sótano se encuentran en las cocinas. Sarah miraba hacía lo alto de la escalera que había frente a la entrada de la casa. Daría su brazo porque el tipo estaría en la habitación que ella había dicho. “Necesitaré que cubras mi espalda” recordó, y sin entretenerse más siguió despacio a Espósito en su búsqueda. En un extremo de la cocina, había una puerta con un cerrojo por fuera. Tenía que ser la del sótano, o quizá alguna despensa. Esposito se giró y se la señaló, ella asintió y pegando su espalda a la pared esperó a que él la abriese.

El cerrojo cedió silencioso, y Esposito pensó que todo estaba saliendo demasiado bien. Abrió la puerta, unas escaleras conducían hacía abajo, estaba oscuro. Sacó una pequeña linterna y le hizo señas a Sarah. El bajaría. Ella se quedaba arriba y le cubriría por si la bestia les descubría y bajaba. Ella le asintió. Él la señaló una esquina de la cocina, alejada de la puerta “ve ahí Sarah, buena chica” pensó.

Entró en el sótano. Guiñó un ojo a Sarah. Todo iba bien. Cerró la puerta tras de él, quería oscuridad. Se quedó unos instantes quieto, escuchando y acostumbrando a sus ojos a la oscuridad. Silencio. Por las ventanas que le había descrito Sarah entraba algo de luz. En unos instantes estaría preparado para continuar bajando. Comenzó a hacerlo muy despacio. Quizá allí no encontraría nada. O quizá los cadáveres de Gates y Grady… el sótano estaba vacío. Únicamente se distinguían varias vigas de sujeción, le quedaban pocos escalones… terminó de bajar.

Observó en silencio. Allí, en la viga de la derecha había algo.

- ¿Gates? –preguntó en voz muy bajita, temiendo no ser escuchado
- Shhhhhs, no digas nada Grady, silencio – dijo Gates

Espósito se acercó a ellos y vio la mirada de advertencia de Gates ¿Por qué le miraba así? Él fue a abrir la boca para preguntarle pero ella le negó con la cabeza, tajante. El gesto le dejo confundido, se agachó junto a ella y examinó la atadura que les ligaba a la viga. Sacó una navaja de su bolsillo.

En la cocina, Sarah estaba atenta, nerviosa y pensando que esto era lo más arriesgado que había hecho desde que era policía. Esto y esposar a un joven que intentó atracar en el supermercado a punta de destornillador cuando ella estaba en la cola para pagar. No le oyó llegar. Una rápida y enorme sombra cruzó la cocina sin fijarse en ella y entró en el sótano. Su corazón se agitó como si una bomba le alcanzase. La bestia bajo las escaleras de cuatro en cuatro, arma en mano apuntando a Espósito que le daba la espalda.

- Deja eso amigo. Tira tu arma donde yo pueda verla – le dijo

Gates había perdido la esperanza. Cuando vio a Espósito pensó que saldrían de esta. Pero ahora… Espósito miró a su jefa, esbozando una sonrisa ladeada intentando pedir disculpas por dejarse pillar así y sobre todo por no haber podido terminar de cortar la cuerda. Pensó en Sarah, esperaba que no la hubiese hecho nada. Dejo su arma en el suelo.

- Levántate y pon tus lindas manitas sobre tu cabeza

Esposito obedeció, y él se acercó a su espalda dándole con la culata de su arma en la nuca y haciendo que cayese al suelo…

BANGGGGG

El asesino se estremeció al notar la bala atravesar su brazo. Se giró y miró a Sarah que le apuntaba mientras bajaba la escalera.

- No sabía que ahora la policía contrataba bebés – le dijo – apuesto a que eres incapaz de apretar ese gatillo mirándome a los ojos
- Suelte el arma o le dispararé y esta vez no será al brazo – le dijo temblando
- Vamos preciosa, acércate a mi y dejaré que me dispares bien cerca, así no volverás a fallar – le dijo dando un paso hacia ella

Sarah terminó de bajar la escalera, seguía apuntándole, le miraba a los ojos que brillaban con el reflejo de la luz que entraba por una de las pequeñas ventanas “eres incapaz de apretar ese gatillo apuntándome a los ojos” recordó… y sintió que efectivamente no podría hacerlo.

- Suelte el arma
- Ja y si no… ¿vas a dispararme entre los ojos precio…

BANGGGGG

Un circulo rojo apareció en la mitad de la frente del asesino, y su cuerpo cayó hacía atrás completamente inerte.

- Ella puede que no, pero yo si – dijo una voz desde lo alto de la escalera.
- Ryan!! - Gritó aliviada Gates – No sabe como me alegro que no cumplan mis órdenes, vamos baje y desáteme, hay que comprobar como esta Espósito.

Espabilaron a Espósito, que tendría un bonito dolor de cabeza durante las siguientes horas, y se pusieron al corriente de cómo habían llegado allí. Sarah y Espósito le contaron como habían dado el uno con el otro y como siguiendo la pista de un móvil desechable, que Gates sacó de un escondite secreto en el forro de su chaqueta para mostrárselo, habían llegado hasta allí, sin saber que eran seguidos por un Ryan alertado por Lanie.

- Grady ¿esta bien?
- No, no estoy bien. Quiero irme a casa.
- Primero tendremos que hablar.
- Ya les he dicho que no sé de lo que me hablan….
- Esta bien Grady, luego hablamos, ahora – dijo mirando a Espósito y Ryan – hay que montar un plan para esconder todo esto….
- ¿Cómo? – pregunto incrédulo Ryan
- Escúcheme, este caso es una bomba que explotará cuando menos lo espere. Mientras mantengamos la mayor parte de los datos lejos de miradas ajenas, mejor. Espósito, busque donde ha podido impactar la bala del brazo y guardela. Sarah no debería estar aquí. Ryan ¿sabe si han empezado a buscarme? La bala de la frente es de su arma reglamentaría….
- Si señor, su marido llamó a comisaría anoche, se ha montado un operativo
- ¿Y que hace usted que no está en ese operativo?
- Lanie ya me había llamado, y dije que estaba enfermo.
- ¿Y no podía simplemente no coger la llamada? … a ver que inventamos.

Ryan miró a Espósito con cara de asombro. No podía creer lo que estaba escuchando. Pero Espósito no le miraba con la misma cara.

- Gracias tío – le dijo sincero y Ryan le sonrió – creo que últimamente apareces siempre donde más se te necesita…
- Si, allí donde noquean a mi compañero…

Ryan por fin respiró aliviado. Se había sentido una sabandija durante la última semana, aunque sabía que su gesto había salvado a Beckett no podía soportar que su compañero le ignorase y se sintiese traicionado. Javi tenía que entender porque avisó a Gates, al igual que entendía porque Lanie le había avisado a él. Tan sólo era por miedo… eran humanos y también tenían miedo. Miedo de perder a sus amigos y a sus seres queridos. Y no lamentaba haberlo hecho. En alguna parte de Europa Beckett disfrutaba de su vida y ellos también.

Por su parte Espósito sabia que tenía que hablar con aquella furia morena que había enviado a Ryan a su rescate… otra vez tarareo en su mente aquella canción que un tiempo atrás se había repetido hasta la saciedad: “vivir así a tu lado no es normal, yo busco paz y tu eres tempestad, prefiero darme por vencido y terminar, no quiero ser mas tu rival”, ahora ya no pensaba lo mismo....

- Señores, en marcha… esa bala Espósito… Ryan, tendrá que decir que se le ocurrió rastrear mi móvil y dio conmigo, no creo que nadie pregunte nada
- Señor, creo que no será posible rastrear su móvil
- ¿Cómo?
- Bueno… digamos que… me aconsejaron tirarlo al Hudson. Pero le rescaté esto – y buscando en su bolsillo le tendió el adorno que había quitado antes de enviarlo al fondo del río, esperando que eso la consolase
- Bueno, ya pensaremos… - le dijo Gates cogiendo el adorno y mirándole con cara de pocos amigos.


Mientras, al otro lado del Atlántico, y después de buscar detalles en la joyería y en la casa del joyero, el extraño trío de policías decidía dejar el caso para el día siguiente. Eran las nueve de la noche y no tenían nada en claro. Mañana continuarían junto a Harry y Castle.

Se despidieron de Colin, que se subió en su coche, y mientras caminaban hasta la moto, Jimmy preguntó

- ¿Tuviste algo con él? – brusco y directo, pensó ella.
- No creo que eso importe para solucionar el caso – contestó
- No, pero si importa para “tu” caso. No quiero que Castle se cabree y se largue de vuelta a Nueva York porque le de otro ataque de celos como esta mañana.
- ¿Qué? – preguntó ella haciéndose la nueva
- Venga ya Beckett!, que llevamos mucho tiempo en esto, no finjas, al menos no al maestro de las mentiras – le dijo riendo tendiéndole el casco… y ella no pudo más que echarse a reír
- ¿Vamos a ver que hace tu enamorado con sus fans?
- ¿Podemos?
- Claro…

Llegaron al estudio y se identificaron, Harry ya había avisado que posiblemente vendrían a apoyarla los guardaespaldas norteamericanos del escritor y a nadie le pareció extraño verles allí. Les guiaron hasta donde estaban haciendo la grabación. Tomaron asiento detrás de los focos, las cámaras y los técnicos que trabajaban en las sombras, observando el plató.

Sentadas a una gran mesa con forma de aro, estaban las fans y Harry, haciéndose pasar por una de ellas, y en el centro de ese aro, una mesa redonda, con dos sillas, Richard sentado en una silla, iba compartiendo esa mesa por turnos con las diferentes invitadas, que tenían derecho a hacerle preguntas y compartir unos minutos al lado de su ídolo.

Kate estudió a todas y cada una de las mujeres que había allí. Seis adolescentes, que rondarían la edad de Alexis que reían y chillaban cada vez que Castle abría la boca, cuatro mujeres mayores de cincuenta años que asentían a todo lo que él decía, un grupito de cuatro mujeres de mediana edad con aspecto de ser cultas e independientes y seis jóvenes que parecían modelos recién sacadas de una pasarela, y por supuesto Harry, que con su aspecto señorial e indiferente, a Kate se le antojó estar totalmente fuera de lugar. Era un grupo demasiado rebuscado. Se preguntó si de verdad eran las 20 primeras que habían reservado su libro o si habían pasado un casting para poder cenar con él. Se fijo en las aprendices de modelo. Estas eran las típicas que siempre se le lanzaban al cuello a Castle en sus presentaciones.

El conductor del programa dio turno a la candidata número quince, y la mujer salto hacia el centro de la mesa dando grititos de alegría. No hay peligro, pensó Kate, es como Martha…. La mujer le hizo preguntas sobre el futuro de sus libros, sus gustos culinarios y le pidió, como todas, que le diese un beso, a lo que él accedió, como anteriormente, acercándose a su mejilla y besándola, gesto que aprovechaba el cámara para acercarse más y coger primeros planos. El presentador dio paso a la siguiente afortunada, y mientras la mujer se retiraba a su sitio, tropezó con varios cables por el suelo y cayó de bruces provocando que Castle se levantase a socorrerla y la mujer se abrazase con él en señal de agradecimiento:

- Ojo Beckett, que esta va fuerte… - le dijo picando Jimmy
- No me preocupa – contestó Kate – le van más jovencitas – y señalo con la cabeza al grupito de aprendices de modelo.

El director ordenó que parasen un momento, la caída había provocado la desconexión de un foco. Preguntó al cámara si había grabado como Castle había levantado a la mujer y antes de que pudiese reanudar la grabación, Castle le dijo que tenía que ir al baño. Aprovecharon para parar unos minutos.

Jimmy silbó un corto y suave tono y Harry miró en su dirección, pero los focos no dejaban que le viese, aunque sabía que él estaba allí. A Kate le hizo gracia esa “contraseña”. Castle era ajeno a la visita de ambos y volvió a su sitio, una maquilladora se acercó para quitarle el exceso de brillo en la cara y él con una sonrisa educada le dio las gracias. A Kate le parecía que se desenvolvía como pez en el agua. Realmente él tenía razón, era su trabajo.

La siguiente en acercarse a Richard fue una de las adolescentes, a la que él desarmó cuando a la pregunta de si le gustaban las chicas más jóvenes, él dijo que le encantaban, y que llevaba cuidando de una desde hacía…. Hizo adrede un silencio y dijo dieciocho años, desde que era el más bello bebe… y la muchacha se puso colorada, pues había entendido que él la dejaba claro que podía ser su padre.

- Bien esquivada –dijo Jimmy

Se sucedieron el resto de mujeres, llegando el turno de la última, una de las guapas jovencitas con aspecto de modelo. Kate se tensó. La chica se sentó frente a Castle con gran seguridad. Le preguntó si la protagonista de su relato estaba realmente basada en alguien real, y el con orgullo contestó que sí. A la chica no pareció gustarle la respuesta y le preguntó si acabaría con ella igual que lo hizo con el anterior protagonista. Castle le dijo que no estaba en sus planes. Cosa que también pareció molestarla. Y entonces se lanzó a realizar preguntas sobre las tórridas escenas de sexo de sus novelas.

- Vaya, vaya Beckett – le dijo Jimmy ganándose un codazo- sus libros se basan en ti y parece que son para mayores de edad…

Castle no tenía intenciones de contestarle y fue esquivando como pudo las preguntas. Cuando el presentador dijo que habían terminado y que ahora una de las mujeres podría ir con el escritor a tomar una copa por Londres, la chica lanzándose a la oreja de Castle, pero siendo captado por los micrófonos le dijo:

- Ojala me toque a mi, porque tendrías todo el material que quisieras para poder escribir todo tipo de escenas.. – y abalanzándose sobre Castle le besó en los labios.

Castle, con aplomo, la retiró de su cara y educadamente la despidió dándole las buenas noches.

La cara que puso Kate, era una mezcla de asombro y rabia. Realmente él no la estaba dando pie a actuar así, pero la locura de algunas fans… Notó la mano de Jimmy sobre su antebrazo.

- Sabe lo que hace – intentó tranquilizarla y por una vez, el comentario no había sonado a guasa y Kate le miró agradeciéndole sus palabras.

El presentador comenzó a hablar sobre el sorteo, alargándose un poco, y finalmente llevaron a Castle la bolsa en la que supuestamente y tras enseñar a todo el mundo, estaban las veintiún bolas con el número de las participantes. Él debía meter la mano y sacar una bola, lo hizo, dando mucha importancia a ese momento y saco la mano, enseñando a todos el número nueve y las cámaras fueron hacía la afortunada que sonreía por su gran suerte.

- Esto puede ser una bomba en unos meses, si sacan a la luz su relación, después de este programa, tendremos a unos cuantos llamándonos para que les hagamos una versión propia – comentaba al director un tipo trajeado que posiblemente sería de la editorial de Castle.

- Prensa… - dijo Jimmy encogiéndose de hombros – no te puedes fiar de la prensa.

De pronto, la chica despechada anteriormente, se levantó de su asiento y volvió a la carga sobre Castle, provocando que Harry interviniese, alerta y tuviese que improvisar yendo hacia ambos y poniéndose de espaldas a Castle separó a la chica y le dijo

- Tendrás que aprender a perder… ahora es mio… - y mirando muy sugerente a Castle le dio un corto beso en los labios, dejando claro a la chica que debía rendirse.

- ¿A quien mató primero? – preguntó Jimmy mirando la escena

- A quien quieras, pero el otro es para mí – contestó Kate

***************
FIN DEL CAPITULO 21

G R A C I A S por leer hasta aqui.

Espero que no os haya defraudado, y sigo sin tener claro que paso entre Colin, Kate, la rubia, el escritor y el ferrari ( jajaja Cata Castillo muy bueno) quizá en el del viernes pueda aclarar algo más (ahora si el viernes, que mañana tengo turno doble)

Esta es la canción de Espósito: https://www.youtube.com/watch?v=9CC4HPGhQHY

Escribes genial una se engancha super rapido sigue asi,

Me encanto el final!!! no paro de reirme frente a la computadora...que buena historia, ahora a esperar calmadita hasta el viernes, que me parece que se viene divertida...

EXCELENTEEEEEEEEEEEEE

jajajajajajajajajajajajajajajaja mas que buenooo la ultima parte de mucha risaaaaaaa