FAN FIC STANATHAN "Light in the Storm" [Luz en la Tormenta]

me he enganchado en dos dias...sigolo prontito anda....

me vas a matar de un infarto a este paso¡¡¡¡¡ lo adoroooooo

esto en la realidad me mataria pero es que en ficcion ya lo hace

siguelo pronto por dios nos tienes enganchadisimos a todos¡¡¡¡¡¡

Antes de irme a mimir quiero poneros un capitulo! ^^ Dentro de un rato estara!

Stanathanshipper escribió:Antes de irme a mimir quiero poneros un capitulo! ^^ Dentro de un rato estara!

Mi médico te lo agradecerá

ESTA GENIAL EL FIC

Stana perdió la noción del tiempo en el estudio de grabación. Con lo del embarazo estaba resultando cada vez más difícil interpretar a la inspectora Beckett. Desde luego era una mujer de armas tomar. Estaba exhausta.
Miró el reloj y descubrió que eran casi las ocho de la tarde. Rápidamente, llamó a un taxi y se fue a casa.

Nathan la estaba esperando en casa cuando llegó, su expresión era irritada.

—Llegas muy tarde—dijo él paseándole la mirada por el cuerpo—. Deberías descansar más, tendríamos que decírselo a Andrew.

—Ni hablar, todavía no, no me parece justo. Ya le hemos dado mas de un dolor de cabeza, no se lo diré hasta que sea absolutamente necesario.

—Si, cuando le tengas que decir que llame a una ambulancia que has roto aguas.

Nathan intento aguantar las carcajadas al ver la cara de ella.

—Anoche no viniste a dormir, ¿me has oído quejarme de que no me hayas llamado? —le espetó ella.

—Siempre me estas restregando que ya no soy nada para ti —respondió Nathan con mirada arrogante.- Así que supuse que donde yo pasara la noche te daba igual.

—Me pones enferma —dijo ella—. A pesar de lo que dijiste el otro día, que me seguias amando, sigues teniendo relaciones con esa mujer. Desde luego te meres ese Emmy al que estas nominado.

—Eso no tiene sentido —dijo él fríamente—. Para estar celosa, tendrías que seguir enamorada de mí. Y, para empezar, es lo único que me repites una y otra vez para convencerte a ti misma de que no me amas.

—Eso no es verdad. Te quería —«aún te quiero».

Nathan esbozó una sonrisa desdeñosa.

—Me advirtieron que solo me darías problemas. Debería haberles hecho caso, al igual que a mis ami¬gos, que me dijeron que era un idiota por casarme contigo. Por dejar mí libertad por ti.

—En ese caso, ¿por qué demonios te casaste con¬migo? Podrías haberte limitado a acostarte conmigo y te habrías ahorrado mucho dinero en abogados.

Con enfado contenido, Nathan agarró un sobre y se lo dio.

—A propósito de abogados, esta carta es de tu abogada.

Stana tomó el sobre.

—¿No vas a abrirlo? —preguntó Nathan.

—Todavía no —Stana no quería que Nathan pu¬diera leer el contenido del sobre.

Su abogada, Rose Mattew, era bastante dura con los divorcios. La mayor parte del tiempo que Stana estaba con
su abogada, lo pasaba mirándose las uñas, asintiendo a todo lo que Rose decía y soñando con que, al final, todo se arreglara entre Nathan y ella.

Stana enderezó la espalda y empezó a caminar hacia las escaleras.

—Voy a darme una ducha.

—Stana.

—He dicho que voy a ducharme.

Stana siguió andando, pero Nathan le dio alcance y la agarró por los brazos apenas conteniendo la furia.

—Estás decidida a hacerme perder la cabeza, ¿verdad, Stana? Estás empeñada en recordarme cada segundo de
mi vida que cometí un error. Que me acosté con una mujer, que no fuiste tu. Que rompí nuestra promesa del “para siempre”Que destruí lo único que me daba la fuerza para vivir cada dia, nuestro matrimonio. Y que te destroce a ti, a la persona que más he amado en mi vida, la que me enseño que la vida es mucho mas que fiestas y mujeres.-añadio con amargura- ¡Y si maldita sea, te falle, pero ya no sé de que manera pedirte perdón!-estalló-.

Stana cerró los ojos para no ver el odio que pro¬yectaban los de Nathan.

—¡Maldita sea, mírame! —gritó él hundiendo los dedos en la carne de ella.

Stana abrió los ojos al tiempo que, sin poder con¬tenerse más, estallaba en sollozos.

—Stana… Por favor, no. No llores, no es propio de ti.

—Por favor, déjame… —dijo ella entre sollozos.

Nathan le soltó los brazos y la abrazó.

—Ssss. Vamos, cariño… —dijo él acunándola.

Stana se apoyó en él, dejando que las tiernas cari¬cias de Nathan rompieran sus defensas.

—No estoy seguro de poder soportar tres meses así —le dijo Nathan revolviéndole el cabello—. Creía que podría, pero ya no estoy seguro.

—Yo tampoco —susurró ella—. Es muy duro…

Nathan le alzó la barbilla y la miró fijamente a los ojos.

—No soy de piedra —concedió él a pesar suyo—. El sentido común me dice una cosa, pero el cuerpo me dice otra.

Stana se humedeció los labios con la lengua.

—A mí me pasa lo mismo.

—Entonces, ¿qué vamos a hacer? —preguntó Nathan.

Stana contuvo la respiración, y notó como el bebe se movia.

—¡Nate! Esta dando patadas —respondió Stana—.

Nathan esbozó una sonrisa y puso sus enormes manos en el vientre de ella.

—Lo noto —dijo él en carcacajas—. Dios, esto es increíble.

Nathan le cubrió una mejilla con la mano.

—Para mi esto no es ningún juego Stana, ni una batalla. Estoy perdidamente enamorado de ti. Y pienso hacer lo que sea para que me perdones, para que te vuelvas a enamorar de mí.

Stana abrió mucho los ojos y así recibió su beso.

De repente, su cuerpo se encendió. Mientras seguía besándola, le oyó gemir. Pronto, las manos de Nathan le desabrocharon los botones de la blusa, despojándola de ella. Después el sujetador y, al instante, la boca de
Nathan le chupaba los henchidos pezones.

Por fin, Nathan apartó la boca de ella y la miró a los ojos.

—Eres la única persona que, en cuestión de segundos, me pone en este estado —dijo él—. Me había jurado no tocarte, pero ahora que lo he hecho no quiero parar.

Stana se aferró a él con desesperación.

—No quiero que pares. Quiero que me hagas el amor. Te he echado tanto de menos…

—No puedo aguantar más —dijo él levantándole la falda y moviéndole la braga para penetrarla.

—Oh, Dios mío… —gimió ella mientras Nathan la acariciaba íntimamente—. Oh, por favor, por favor…

Nathan se bajó la cremallera de los pantalones y lanzó un gemido de placer al entrar en Stana.
Era una locura, todo precipitado, casi salvaje, pero imparable. Stana se preguntó por qué estaba permitiendo que aquello ocurriera, pero había per-dido el control de su cuerpo.
Cada empellón de Nathan engrandecía su placer. Sus cuerpos se movían al mismo ritmo. Stana le co¬nocía tan bien que logró anticipar el momento en que Nathan alcanzaba el éxtasis.
Ella, sin embargo, no había llegado a ese punto cuando le sintió perder el control. Habría necesitado algo más de tiempo. Por otra parte, le extrañó que Nathan hubiera tenido un orgasmo sin asegurarse de que ella lo hubiera tenido primero. No sabía si Nathan lo había hecho intencionadamente, con el fin de dejar claro que no la consideraba más que un objeto de placer, o si realmente no había podido controlarse. Esperaba que se tratara de lo último.

—Lo siento —dijo Nathan al tiempo que se sepa¬raba de ella—. No debería haber ocurrido.

Stana bajó los ojos.

—No obstante, yo no debería haber permitido que las cosas llegaran tan lejos —declaró Stana mientras se arreglaba la ropa—. No tenía intención de te-ner relaciones sexuales contigo. Te lo digo porque no quiero que te hagas ilusiones.

—Lo comprendo —contestó Nathan al tiempo que se daba media vuelta para ir al cuarto de baño—. Voy a darme una ducha, espero no tardar.

Stana se pasó la mano por el cabello mientras lo veía alejarse.


Nathan la estaba esperando cuando, al rato, Stana bajó.
—Stana, me parece que deberíamos aclarar algunas cosas antes de reunimos con los chicos esta noche.

Stana apretó los labios y ocultó sus verdaderos sentimientos respecto a lo que había ocurrido recurriendo al sarcasmo.

—Olvida lo que ha pasado, Nathan —dijo ella—. Ha sido simplemente un caso de eyaculación precoz, nada más. Quizá debieras solucionar ese pe-queño problema con tu amante. Lo cierto es que no tiene nada que ver conmigo.

—¡Maldita sea, claro que tiene que ver contigo! De repente, estás sollozando en mis brazos como una niña pequeña y, al momento, prácticamente me estás rogando que te haga el amor. No sé quién eres realmente.
Los ojos de ella brillaron.

—Tú también te comportas de forma contradictoria, Nathan—. Yo creía que no íbamos a tocamos, pero mira lo que has hecho.

—Hemos sido los dos, no te hagas la inocente.

Stana arqueó las cejas.

—No del todo, Nathan. Por lo que he podido ver, has perdido ciertas habilidades.

Nathan apretó los dientes y agarró las llaves que estaban en la consola del vestíbulo.

—Eres despreciable. Estoy deseando que acabe esta farsa.

—Lo mismo digo, cielo —respondió ella vulgar¬mente.

Nathan la condujo hasta el coche con el rostro ensombrecido de furia. Por fin, a medio camino del restaurante, él rompió el silencio:

—Espero no tener que recordarte lo importante que es que disimulemos delante de la gente. Andrew, Tam, Seamus…Jon. No quiero que nos vean raros.

—No es necesario que me lo recuerdes. Y será mejor que dejes de mirarme como si quisieras asesinarme con la mirada.

Nathan le lanzó una mirada de advertencia antes de salir del coche y estrechó la mano de Jon antes de saludar a los demás.

Stana abrazó a Jon y luego se volvió hacia Nathan, que la miraba con furia. Se estaba muriendo de los celos.
Cuando todos terminaron de saludarse entraron al restaurante, donde había un reservado para ellos.
Nathan interrumpió una vez mas a Jon antes de que pudiera hablar.Esto se estaba convirtiendo en una batalla de niños.

—Yo le ayudaré a mi mujer Jon, ese es mi trabajo —dijo Nathan dando un ligero empujón a Jon para que se apartara de la silla de Stana—. ¿Así estas cómoda cariño?

Ella asintió con la cabeza y él le dio un ligero beso en el cuello, que hizo que a Stana se le pudiera la piel de gallina.

Stana enrojeció de vergüenza bajo la sensual mirada de Jon. Se le revolvió el estómago cuando Nathan notablemente enfadado salió fuera.

—¿Últimamente Nate esta un poco de mal humor no? —dijo Tamala con toda la curiosidad-.

—Yo creo que la competencia le da claustrofobia. —dijo Jon mirando a Stana—

—No digas tonterías Jonny…—dijo Tam entre carcajadas—.

—¿Qué quieres decir, Tam? —le preguntó Nathan entrando de nuevo a la zona vip.

—Que no estais compitiendo por nadie. —contestó Tamala.

—¿Compitiendo quien? ¿Por qué? —dijo Nathan, agarrando una mano de Stana y llevándosela al muslo—. Si con alguien compito es con mi mujer, en la cama.

Jon apretó los puños.

—Dijiste que jamás volverías con él —declaró Jon con desdén—. Después de lo que te ha hecho, yo tampoco lo haría. Es un cabrón, putero.

—Cállate, imbécil —le interrumpió Nathan.

Stana estaba a punto de echarse a llorar.

—Por favor, chicos… Por favor…

Nathan la miró y, tras lanzar un juramento, acercó su silla a la de ella y abrazó a Stana.

—No te preocupes, tesoro —dijo él besándole la frente—. No hagas caso a lo que diga este idiota. No se da cuenta de lo mucho que nos queremos.

Ella le lanzó una temblorosa sonrisa y aceptó el pañuelo que Jon le ofrecía mientras deseaba con todo el corazón que aquellas palabras que Nathan había dicho fueran since¬ras.

—Lo siento, nena—dijo Jon arrepentido—.

—No se te ocurra volver a llamar así a mi mujer—dijo Nathan antes de volverse hacia Stana—. Por favor, vámonos o al final voy a darle una paliza—suplicó Nathan con la voz quebrada—.

—Vaya, tienes que comerle mucho la cabeza para que siga contigo ¿verdad? —respondió Jon con desdén.

—Está casada conmigo y, por tanto, tú te callas —dijo Nathan.

—Ya. Dime, ¿cuánto va a durar vuestro matrimonio? —Jon sonrió burlonamente—. Apenas llevabais un año
de casados cuando este perro te…

Nathan se levantó dando un golpe en la mesa y se abalanzó sobre Jon. Empezó a pegarle puñetazos como si fuera de goma. Stana entre gritos les suplicaba que se separaran. Agarró el brazo de Nathan para separarlo de Jon y sin querer él le dio un puñetazo en el vientre.

Stana calló al suelo redonda, inconsciente.

—¡No, no! —Nathan se echo las menos a la cabeza—.

Tamala llamó inmediatamente a una ambulancia.

—Dios… nuestro bebe. —le susurro Nathan mientras intentaba que Stana recuperara el conocimiento.




ESPERO QUE OS GUSTEEE

OMGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGG
EL BEBE NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO
NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO



OH NOOOOOOOOOOOOOOOOOO
ARREGLALOOO

Esto se pone cada vez peor... Y nosotros ya no sabemos qué hacer... se nos "estruja" el corazón
Sigue por favor!!!!

DIOOOOOOOS QUE CAPITULOOOOOOOOOOOOOOOO!!!!
No puedes dejarnos asi DIOS, continua prontooooooooo
y por dios jon que se meta en su vida locooo aggggggggggggggggs

oh por dios el bebe !!!

que no le vaya a pasar nada xfavor

y te lo suplico q de una buena vez por todas
estos se arreglen

Malaaaa esta noche no duermo por tu culpa!! jajajajaajaja Mas Mas Mas Mas Mas Mas Mas... Está genial. Cuando será el proximo?? Espero q Stana no pierda su bebe

OMG!!!!!!!!!! ESTO SEE PONEEE CADAA VEZ MEEJOOOR!! CONTINUAA PRONTOO O MORIREE.... JAJAJA ME ENCANTAA TU FIC!

OH POR DIOSSSSS!!!! espero que no le pase nada al bebe, es el fruto de su amor y el es el puede hacer que se reconcilien !!! continua por favor

que no pierda al bebe, nooooooo, me va a comer la desesperación por saber que sigue, que no pierda al bebe

Oh por Dios! Oh por Dios!!! Estoy con el corazón en la boca por favor continualo pronto

aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa estoy haciendo un trabajo pero no puede resistirme a leer sigueeeee pronto y cuando los vas a arreglar

dios nooooooooo!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

sigueeeeeeee

JODERRRRRRRRRRRR NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO



CONTINUAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA NO LO DEJES A SI


QUE NO LE PASE NADA AL BEBE



NOS QUIERES HACER SUFRIR NOOOOOOOOOOOOOO






MAGNIFICO CAPITULO


CONTINUA PRONTO POR FAVOR

MUCHAS GRACIAS POR EL CAPI

TU QUIERES QUE MI CORAZON EXPLOTE ???
POR FAVORRRRRRRRRRRRRRRR CONTINUALOOOOOOOOOOOO

SOMOS TU FAN!!!!!!!!!!!!!!! CADA VEZ MEJORRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRR

Empiezo a estar segura de que te gusta hacernos sufrir...espero que no nos hagas esperar demasiado por el siguiente capítulo. Y por favor, no seas demasiado cruel y no hagas que pierda a la criatura .

Otro capi por favor, por favor, por favor y yaaaaaaaaaaaaaa

Pero, pero, pero... ¿Qué haces con tu vida? Como lo dejas así!
Me muero eso es todo.

NOOOOO EL BEBE NOOOO!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

QUE???????? QUE????????????
Como pierdan el bebé... TE MATO!!!

no mates al bebe POOOOOR DIOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOSSSSSSS QUE ESTRES DE CAPITULOOOOOOOOOOOO
Te superas cada diaaaaaaa
GENIIIIIIAL¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡