Everything I Do (i Do It For You) Epilogo

sigueee

espero que puedas continuar lo antes posible porque esta muy interesante

A ver como sale todo
Genial historia, como siempre =)

o dios, o dios, me lo eh leido de un tiron y eres culpable de que este despierta tan tarde por leer esto, mas vale que le continues no nos dejes asi por un buen tiempo D: , ya ya VAMOS CONTINUALE D:

NOOOOOOOOOO
Por que me haces siempre lo mismo???? Como me dejas asiiiii
Te gusta verme sufrir.... jajajajajaj
SIGUELO YAAAAAAA

Sigue pronto!!! No nos puedes dejar con esa intriga!!! Porfa no tardes, te lo suplico

Me he leido todo el fic de golpe u justo llego ahora y ...y...y...

Me has dejado enmudecida

Otro anda si que paso con castle las salvo.

Bueno... yo a lo mio. Gracias de nuevo por vuestros comentarios. Prometo que cuando termine este capitulo... la historia se vuelve mas ligera... o no...

Capitulo 34

Nada… no pasa nada… ¡Ha salido bien!

Kat - ¡Castle!

En ese momento Castle soltó su mano de la escalera metálica del techo y recorrió por el aire los cuatro… cinco metros…

Ale - ¡Estas loco!

Castle aterrizó en la plataforma y enseguida se incorporó. Su cara reflejaba el dolor del impacto, pero parecía que éste no era muy fuerte… había decidido caer sobre el hombro izquierdo… (al fin y al cabo era de lo mas sano que le quedaba en el cuerpo)…

Gat - ¡Señor Castle! ¡Detective Beckett!

Gates corría por la nave con su arma reglamentaria en la mano, seguida por Royal que ladraba con fuerza.

Kat - ¡Capitán! ¿Que hace usted…?

Ric - ¡Ya era hora! Quiero decir… ayúdeme a liberarlas. Tyson no esta aquí…

Gat – Tyson… todo esto ha sido obra del triple asesino.

Mientras hablaba, Gates subía por la escalera lateral de la plataforma y se acercó hasta Kate. Mientras tanto, Castle ya había llegado hasta donde estaba su hija y le desataba las manos. Cuando lo consiguió los dos se sentaron en la plataforma sin dejar de mirarse. Kate se acercó hasta ellos cojeando y los dos le echaron las manos para que se sentara en el suelo. Durante un par de minutos se miraron los tres… se acariciaron la cara… con gestos de cariño...felices por estar vivos…

Gat – Perdonad… pero creo que es más seguro que bajemos al suelo y…

Ric – Royal se va a volver loco de tanto ladrar. De acuerdo.

Con cuidado los cuatro bajaron las escaleras. Castle veía como Kate lo hacía con mucha dificultad y era un suplicio bajar cada peldaño. Cuando llegaron abajo Castle la cogió en brazos en un gesto rápido y sorprendente.

Kat – Pero Richard… ¿Qué haces? Debes estar muy dolorido y yo…

Ric – No me importa.

Cuando salieron fuera se dirigieron al coche de Gates…

Gat – Ustedes tres quédense dentro del coche y llamen a los refuerzos. Yo voy a peinar la zona por si ese cerdo sigue por ahí…

Ric – Creo que debería ir con usted… yo…

Kat – Castle tiene razón… no debe ir sin refuerzo…

Gat – Esta bien. Coja el arma que hay en mi guantera y sígame.

Ale – Papa por favor, ten mucho cuidado.

Ric – Lo tendré hija y… gracias Kate.

Kat – Ve con ella.

Ric – Royal, quédate con ellas y protégelas.

Mientras Kate llamaba a Javier en el coche de Gates sentada junto a Alexis, Gates y Castle caminaban lentamente, el escritor unos pasos por detrás del capitán atentos a cualquier extraño movimiento.

Gat – Toda esta zona parece abandonada…

Cas – Creo que se hizo hace algunos años previendo que la economía iría en auge y muchas empresas se instalarían por esta zona, pero la crisis mundial… este dinero gastado podría haber servido para tantas otras cosas más útiles…

Gat – Vaya… nunca pensé que le oiría hablar así… los meses que ha estado trabajando en la parroquia con Paul…

Ric – Eso… no tiene nada que ver… yo…

Gat - ¡Deténgase!

En ese momento un coche giró bruscamente hacia donde ellos dos se encontraban. Consiguieron apartarse a tiempo para no ser atropellados y…

Gat - ¡A las ruedas! ¡Dispare a las ruedas!

Castle y Gates dispararon al unísono y el coche empezó a dar bandazos de un lado para otro hasta que se paro bruscamente unos cincuenta metros por delante de ellos.

Gat - ¡Quédese ahí! Yo iré a…

Ric – Pero… capitán.

Gat - ¡Es una orden!

Gates llegó hasta el coche de Tyson y empezó a rodearlo con cautela. Parecía que el asesino no estaba dentro. En ese momento se vio sorprendida por Tyson que la atacó por detrás escondido tras un contenedor de grandes dimensiones. Forcejearon y el asesino se hizo con su arma y disparo hacia ella alcanzándole en el brazo izquierdo. Cuando iba a disponerse a disparar de nuevo Castle se le echo encima de él y lo tumbó enseguida, lo desarmó y con furia inusitada empezó a golpear a Tyson, cada puñetazo que le propinaba a aquel hombre, le producía un gran dolor en su cuerpo, pero parecía presa de la ira y…

Gat - ¡Déjelo!¡ ¡Déjelo!

En ese momento Castle desvió su mirada hacia Gates que se había incorporado y se sujetaba el brazo herido. Tyson aprovecho ese momento para recoger el arma del suelo y apuntar a Castle, pero éste se percató de su acto y lo retuvo a tiempo… forcejearon y el arma se disparó. Castle miro horrorizado la cara de Tyson y la última mirada que éste le dirigía mientras el asesino perdía la vida por el boquete en el pecho que le había causado el disparo. Incluso Castle pudo atisbar en ese último momento cierto atisbo de… orgullo… veneración… debía ser otra cosa. Se quedo allí arrodillado junto al cadáver sosteniendo la pistola en su mano. Gates se acercó junto a él y le rozó el hombro con su mano sana…

Gat – Yo… gracias… déme el arma, señor Castle… ya todo ha terminado. No debe preocuparse más por él. Todo ha acabado.

CONTINUARA…

Por fin murio!! A ver que pasa ahora entre Kate y Castle

Uno menos! Ahora a recuperar la relación con Martha!
Gran capítulo =)

Genial =)

Siempre lo dejas en lo mejor!!

sigueeee

Paso a comentar los capítulos que no había comen tado (32, 33 y 34) y a decirte que están geniales, están interesantes, continua pronto

me gusta mucho

Hola Soy Nueva me leído toda tu buena leyenda
Esta impresionante
Espero con muchas ganas el próximo capítulo

Al fin chau Tyson!!!! Castle le salvo la vida al as tresssss
Es mi idolo, ahora que el cuide de Kate en su loft y se reconcilien definitivamente asi el padre que es padre los casa, jajajaaaa Mucha novela de chica vi no??? Los años me delatan

POR FIN!!!! ESTA MUERTO!!! SIGUE PRONTO PISSS

Aqui sigo con mi historia que espero os siga gustando y enganchando...durante unos cuantos episodios cumplire mi deseo de que algun dia uno de los capitulos dobles de la temporada (si Dios quiere) no sea nada en referencia a asesinos en serie o grandes amenazas para la humanidad... sería algo tan sencillo a la vez que extraordinario... como sobrevivir a una nevada en Nueva York... con sus malos de turno... claro esta...

Capitulo 35

Una semana después… a mediados de abril aproximadamente.

Voz en off – Y por último, antes de que Christine Berry nos informe del tráfico en la gran manzana, nuestro hombre del tiempo, Charles Beckford nos tiene que dar una noticia de última hora. Adelante Charles.

Voz en off (2) - Gracias Nicky. Según las últimas previsiones meteorológicas que se han observado desde nuestros satélites una gran ola de frío y nieve tardía y sorprendente se acerca a nuestra ciudad y podría estar aquí en menos de doce horas. Las autoridades municipales todavía no han informado de la alerta pero supongo que lo harán en breve, así que vayan haciendo acopio de víveres y prepárense para resguardarse bien en sus casas porque la situación puede agravarse en poco tiempo. Seguiremos informando a la mayor brevedad.

Kate miraba atentamente las últimas informaciones que daba la televisión en una sala de descanso de la comisaría mientras se bebía el enésimo café del día. Hacía un par de horas que las autoridades municipales habían informado del estado de alarma que se avecinaba en la ciudad debido a la ola de frío y nieve que se acercaba. Aún recordaba la última. Fueron dos días y dos noches sin parar de trabajar.

Hablando de trabajar. ¿Dónde se había metido esa mañana Castle? Desde que había ocurrido lo del triple asesino parecía que su compañero hubiese recaído bastante en su recuperación y se mostraba huraño. Ella estaba muy preocupada por él, pero casi no se habían visto en esa semana, aunque Castle le había visitado para ver como se recuperaba de su tobillo, cosa que le había fastidiado bastante, porque se había pasado la semana prácticamente encerrada en su casa.

Aún le dolía un poco pero aquella mañana había decidido reincorporarse al trabajo y así tener la oportunidad de hablar con él. El problema es que siempre que se habían visto aquella semana nunca estaban solos…. venia con Alexis o alguno de los compañeros de la 12 y Castle y ella no habían podido tener ni una charla. Al menos Gates se había mostrado fenomenal después del altercado y había defendido a Castle delante de los de asuntos internos en todos sus movimientos durante aquel día.

Lanie le había insinuado que era el momento de pasar a su plan de ataque con Castle y le había sugerido pasar junto a él un fin de semana en una preciosa cabaña que era de un primo lejano de la forense y alli… ¡Estás loca Lanie! Bueno… pues y si vamos en plan de compañeros con Kevin, Javier y Jenny… la mujer del detective Ryan le había dicho hacia pocos días que necesitaba aunque fuera un par de días descansar de pañales y todo eso… y su madre estaba dispuesta a cuidar de la criatura… no era tan mala idea. En ese momento sonó el teléfono…

Kat - ¿Si?

Rya – Kate, soy Ryan, tenemos un caso. Lanie nos esta esperando en un callejón entre el Boulevard Malcom X y la 145.

Kat - ¿Porque no se encargan los de la quinta?

Rya - Con la nevada que se avecina están casi todos patrullando las calles por miedo a posibles saqueos.

Kat - Entiendo. Voy ahora mismo hacia allá.

Cogió su móvil y llamo a Castle. Después de cuatro llamadas alguien cogió el teléfono (suponía que era él) porque lo único que se oía al otro lado era…

Ric - Grrrrrrbpddpppdd ¡Queeee!

Kat – Buenos días a ti también. Tenemos un caso en un callejón del Boulevard Malcolm X con la 145.

Ric - ¿Eso no esta en el Harlem?

Kat – Si lo esta. Pero con la nevada que se aproxima todo esta un poco liado y nos han pedido el favor.

Ric – Muy graciosa detective… ¿Qué nevada? Que estamos a mediados de abril…

Kat – Pues la que está… algunas veces… eres desesperante ¡Ay, Dios! Pero en que mundo vives… ¿En Castlelandia?

Y colgó. Castle se levanto de la cama con aspecto fatigado. No había descansado mucho aquella noche, la verdad es que hacía días que descansaba más bien poco, entre las pesadillas y los dolores que habían vuelto a aparecer cogidos de la mano como si fueran dos macabros colegiales de una película B de terror.

Tras su enfrentamiento con el triple asesino los dolores habían vuelto con más fuerza a su cuerpo, sobre todo la mano derecha… aunque había intentado disimular delante de Alexis, Martha y Kate sospechaba que éstas se habían percatado de su problema aunque el lo había intentado ocultar. Gracias a Dios su hija parecía encontrarse bien y lo sucedido con el triple asesino no parecía haberla afectado demasiado… los jóvenes son así…

Hacía dos días había visitado al doctor Lizst en privado y éste le había advertido que no podía tentar a la suerte… eso que significaba… que tendría que dejar su colaboración con la policía… ¿Ahora? ¡No! Hace cinco meses le parecía la idea más horrible del mundo volver a Nueva York y… ahora… es lo único que le hacía feliz… estar con ella…

En menos de veinte minutos estaba duchado y aseado. Sin muchas ganas abrió el frigorífico para ver si se tomaba algo, pero desistió a los tres segundos. Antes de salir recogió sus gafas de sol, que últimamente iban a todos los lados con él y se miro al espejo que había justo a la derecha de la puerta de entrada de su loft. Durante unos segundos se miró en el mismo y suspiró fastidiado.

Ric – No, Kate. No vivo en Castlelandia. Vivo en el mundo real. En el maldito mundo real.

Mientras tanto en un callejón del Harlem, Kate observaba en silencio el cadáver que un vagabundo había encontrado hacia unas horas mientras buscaba restos en el basurero del Burger que se encontraba en el Boulevard Malcolm X. Lanie miraba atentamente el cadáver mientras le hacia las últimas pruebas antes de llevárselo a la morgue y miró a Kate con tristeza.

Lan - ¿Un ajuste de cuentas?

Kat – Seguramente.

Lan – Pues entonces nos va a resultar casi imposible que resolvamos nada.

Kat – Lo se, lo se.

Kate miró hacia arriba donde se encontraban algunas de las ventanas de los dos humildes inmuebles que daban al callejón. Prácticamente todas ellas estaban cerradas a cal y canto y no se veía ni un alma.

Lan – Vaya, por ahí viene tu compañero, la alegría de la huerta.

Kat - ¿Cómo le has llamado?

Lan – La aleg… bueno creo que ya es hora de poner en práctica mi plan de terapia de choque y el chico escritor y tú…

Kat - ¡Lanie!

Castle se acercó hasta ellas mirando al cielo de manera anodina y se encogió de hombros cuando estuvo delante de ellas.

Ric – Pues si que parece que viene una nevada… ya sabía yo que muy bromista no eres pero… pero ¡Dios mío! ¿Qué es…?

Kat – Pues un chico de doce años muerto a balazos en un callejón del Harlem. ¿Qué esperabas que encontráramos aquí?

CONTINUARA…

Que ganas tengo de leer un poco de acercamiento de Kate y Castle, a ver si se declaran! Sigue pronto