And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
+29
rubiodav
Cata Castillo
choleck
lovecaskett
patri_81
Maku_Stanathan
karlaguilarodgers
mary530
carly becket
LeFleur89
setejga
cris_beckett
castlelover
okusak
oml
silvanalino
NotAlone3000
Libou
Dra. Beckett
Teresita_yocastle$$NYPD
chelcas
castle&beckett..cris
Duende
maria_cs
DannyyFranco
Anver
LEILAKB
Massycb
Beckett_Castle_Alba
33 participantes
Foro Castle :: OffTopic :: Fan Fics
Página 9 de 12.
Página 9 de 12. • 1, 2, 3 ... 8, 9, 10, 11, 12
choleck- Escritor - Policia
- Mensajes : 1967
Fecha de inscripción : 07/06/2012
Localización : en la parra
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
choleck escribió: precioso
Muchas gracias
______________________
Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
Vuelvo de vacaciones y me encuentro todos estos capítulos y y y y ERES UNA GENIA ESCRIBIENDO! Me encanta, me encanta, me encanta. Qué historia tan completa. La manera que llevas la relación me enamora. Luego las descripciones de la ciudad: ¡qués ganas de ir! Dan ganas de hacer hasta una ruta Castle en esa ciudad y así conocer los maravillosos lugares que describes
No puedo más que decir: ¡ole, ole y ole!
No puedo más que decir: ¡ole, ole y ole!
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
Dra. Beckett escribió:Vuelvo de vacaciones y me encuentro todos estos capítulos y y y y ERES UNA GENIA ESCRIBIENDO! Me encanta, me encanta, me encanta. Qué historia tan completa. La manera que llevas la relación me enamora. Luego las descripciones de la ciudad: ¡qués ganas de ir! Dan ganas de hacer hasta una ruta Castle en esa ciudad y así conocer los maravillosos lugares que describes
No puedo más que decir: ¡ole, ole y ole!
Echaba de menos tus comentarios jeje
Gracias No sé que decir, tu comentario me deja sin palabras, a mi siempre me ha gustado mucho Vancouver y su cultura, quizás por eso me resulta relativamente fácil escribir sobre esa ciudad. Muchas gracias, estoy empezando el siguiente capítulo, espero poderlo subir pronto
______________________
Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
Dios iba atrasada 2 capitulos no habia tenido el privilegio de leer el 11 y el 12, que decir que me ha encantado.
El del silecion incomodo ha sido espectacular, me ha puesto hasta los pelos de punta, el hecho de como has plasmado a la perfeccion los sentimientos de los dos protagonistas.
Y en el último que decir, que ha sido muy sexy la forma en el que el deseo los lleva a ser locuras en cualquier momento, tambien en como Rick la trata como a una princesa/reina, espero que lo continues pronto, de hecho no nos hagas esperar ¡PORFAVOR!
Gracias y siento la tardanza
El del silecion incomodo ha sido espectacular, me ha puesto hasta los pelos de punta, el hecho de como has plasmado a la perfeccion los sentimientos de los dos protagonistas.
Y en el último que decir, que ha sido muy sexy la forma en el que el deseo los lleva a ser locuras en cualquier momento, tambien en como Rick la trata como a una princesa/reina, espero que lo continues pronto, de hecho no nos hagas esperar ¡PORFAVOR!
Gracias y siento la tardanza
Invitado- Invitado
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
Skyscraper escribió:Dios iba atrasada 2 capitulos no habia tenido el privilegio de leer el 11 y el 12, que decir que me ha encantado.
El del silecion incomodo ha sido espectacular, me ha puesto hasta los pelos de punta, el hecho de como has plasmado a la perfeccion los sentimientos de los dos protagonistas.
Y en el último que decir, que ha sido muy sexy la forma en el que el deseo los lleva a ser locuras en cualquier momento, tambien en como Rick la trata como a una princesa/reina, espero que lo continues pronto, de hecho no nos hagas esperar ¡PORFAVOR!
Gracias y siento la tardanza
Muchas gracias, también te echaba de menos a ti por aquí
El del silencio personalmente es de los que he escrito que más me gusta, lo acabé y me gustó, y eso es raro en mi porque suelo ser muy crítica con lo que escribo y rara vez termina gustándome jaja.
El último ha sido de los que más tiempo me ha llevado escribir porque tuve que recopilar toda la información que tenía y que recordaba después de haber investigado mucho sobre Vancouver porque siempre me ha gustado.
Prometo no hacer esperar demasiado, ya ando escribiendo el siguiente capítulo y espero subirlo pronto.
Gracias a ti por seguir leyendo y comentando
______________________
Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
Aunque volví de las vacaciones hace unos días, con la preparación de los próximos exámenes de la convocatoria de septiembre no he tenido tiempo de escribir nada nuevo. Por fin terminé hoy un nuevo capítulo, espero poder volver al ritmo que llevaba antes de las vacaciones y poderos dejar al menos un capítulo por semana, aunque no prometo nada.
En este capítulo he querido centrarme más en el caso, aunque también hay tiempo para la parejita
Capítulo 13: No todo es lo que parece
Un precioso anochecer la envolvía, unos tonos violetas y rojizos jugaban en un cielo que comenzaba a llenarse poco a poco de estrellas brillando en la inmensidad de la incipiente noche de Vancouver. Se sentía segura entre sus brazos, protegida, era una nueva sensación para ella el sentirse consentida y cuidada por otra persona, y que fuese él quien la hiciese sentir así le gustaba. Se recostó en su pecho y sus brazos la rodearon, haciéndola sentir en casa. Cerró los ojos percibiendo su dulce y embriagador aroma, ese olor a Richard Castle que tanto le gustaba. Sus dedos recorrían la forma del anillo que llevaba en la otra mano, ese anillo que horas antes le había regalado tras unas tiernas palabras.
“Este anillo me hizo recordar a nosotros. Los delfines son unos animales muy sociables que viven en grupo, necesitan del calor de los suyos. Cuando comienza el período de apareamiento, los machos buscan a hembras con las que comparten el resto de su vida, son animales de una sola pareja con la que tienen a sus crías y envejecen juntos. Estos delfines enlazados son un símbolo de amor, ese amor que te hace pensar en la felicidad de la pareja antes que en la tuya propia, ese amor por el que arriesgas todo por la otra persona, ese que hace que dos personas se fundan en una sola.”
Deposita su mano encima de la de ella, impidiendo que pueda seguir haciendo círculos con su dedo por alrededor del anillo, para entrelazar sus manos. Sus intensos ojos azules la miran con dulzura y sus labios buscan los suyos con ternura, con delicadeza, disfrutando de ese beso, convirtiéndola en magia. Se quedan apoyados frente con frente, mientras sonríen como dos adolescentes locamente enamorados.
Desde el pequeño sofá del balcón del hotel podían contemplar a sus pies la tranquila noche de Vancouver que hacía su aparición sigilosamente dejándoles disfrutar de un espectáculo de colores con la puesta de sol como protagonista, mientras los escasos coches que aun circulaban por la ciudad iban desapareciendo uno a uno.
Recostada en su pecho, dejándose acariciar por sus suaves y delicadas manos, su mente viajó por cada momento compartido a su lado durante sus días en la ciudad canadiense y agradeció la insistencia de su amiga porque fuera en su búsqueda.
Desde que su madre muriera asesinada se había creado un mundo donde creía que podría ser feliz sola, que no necesitaba a ninguna persona de forma permanente en su vida, son embargo Castle le había hecho cambiar de opinión. Desde la primera vez que lo vio en una de las presentaciones de su primer libro supo que tenía algo especial. Por aquella época ella no era más que una niña y lo veía como alguien inalcanzable que siempre iba rodeado de mujeres atractivas. Cuando años después coincidió con él en un caso relacionado con uno de sus libros, su admiración de adolescente había cambiado, ella misma había cambiado, pero aunque se lo negara a si misma, le seguía despertando muchos sentimientos que estaban latentes, dormidos en su interior. Con paciencia y cariño, Castle se fue ganando su confianza y ese muro que ella misma levantó, comenzó a caer.
En estos días se había dado cuenta de lo mucho que significaba en su vida, se había acostumbrado a despertar en sus brazos, apretándola contra él para sentirla cerca, a su forma de mirarla cuando creía que ella estaba dormida, a su dulce aroma, a sus bromas y locuras que la hacían parecer un niño pequeño, pero sobre todo, se había acostumbrado a sus constantes mimos y a sentirse querida.
- ¿Qué piensas, Kate? – le aparta suavemente un mechón de pelo de su cara y le da un dulce beso en la frente.
- Recordaba estos días que hemos pasado juntos, me he perdido mucho contigo estos cuatro años y ahora no quiero que pase el tiempo.
- Aun me quedan unos días por Vancouver para terminar todas las entrevistas, tenemos tiempo de disfrutar antes de volver al trabajo, cariño – se acerca a sus labios para besarlos delicadamente y estrecharla entre sus brazos mientras la luna se irgue imponente en el oscuro cielo azul.
- Prométeme una cosa – le dice en sus labios.
- Lo que sea, cariño.
- Prométeme que no te separarás de mí más de lo necesario.
- No podría separarme de ti aunque lo quisieses – le susurra al oído provocando que un sutil cosquilleo la invada – Te quiero, Kate.
- Y yo a ti, Rick.
- Será que he esperado tanto tiempo para que dijeras eso que ahora me parece un sueño. Vuélvelo a repetir, por favor – le dice en tono juguetón.
Parecía un niño pequeño entusiasmado ante un juguete nuevo de reyes. Él la había complacido desde que fuera en su búsqueda, “así que una vez que lo complazca yo no está mal” pensó.
- Te quiero Rick – sus ojos se había oscurecido y su voz sonó llena de lujuria, lo que no pasó desapercibido para él, que tras verla morderse el labio se acercó y le mordió el labio inferior antes de comenzar un juego de besos dando rienda suelta a la pasión.
En la sala de descanso, Espósito y Ryan miraban perplejos como Gates luchaba con el debate que se estaba librando en su interior.
Julian, el joven licenciado en Bellas Artes, experto en reconstrucciones faciales de la comisaría, se había encargado de realizar el retrato robot de la persona que el portero de Smith había visto subir al edificio de éste. Cuando Ryan y Espósito recibieron el dibujo, decidieron hablar con Gates en un lugar alejado del resto de compañeros.
Gates hacía círculos alrededor de la sala sujetando en una mano temblorosa el dibujo que no era capaz de volver a mirar.
- Esto no puede ser, debe haber un error.
Era lo único que había sido capaz de decir cuando los detectives se lo entregaron, aun sabiendo que trabaja con el mejor equipo de Nueva York y los errores están descartados.
Sabía que las personas cambian y que el Rob que ella recordaba podía no ser el mismo de ahora, pero se negaba a creerlo, quería pensar que solo era una absurda broma del destino que lo había llevado a estar en el lugar equivocado en el momento equivocado.
Recordaba como aun siendo una novata, Rob le había protegido en los casos que había llevado, cubriéndola, siendo su leal compañero, no se había separado de su lado durante los años que estuvo en la comisaría de California, le animaba a seguir sus instintos, le enseñó a entender que en ese trabajo que realizan a diario no siempre se gana pero que eso no quiere decir que sean mejores o peores en su trabajo, sino que viven en un mundo lleno de injusticias donde a veces la maldad sale impune y su trabajo consiste en tratar de hacer un mundo más justo.
No quería plantearse la posibilidad de lo que para todos comenzaba a ser una duda razonable, no quería creerlo, pero no podía dejarse guiar por sus sentimientos, no podía ser participe de una injusticia, debía trabajar como si de un caso más se tratase, al margen de lo que sus sentimientos y su corazón le dictase.
Rob había sido participe desde sus inicios como detective de todos los detalles referentes al caso de Joahnna Beckett, tenía tanta información como ella había podido conseguir en sus inicios. “Pero, ¿qué relación tiene Rob con todo este caso?” se preguntó. Mientras seguía caminando podía notar las miradas de los detectives estudiando cada movimiento que hacía. Entonces su mente viajó hasta una fotografía que había visto entre sus informes del caso de Joahnna. Con paso decidido, salió de la sala de descanso, con Espósito y Ryan pisándole los talones, hasta su despacho. Abrió el cajón cerrado con llave donde tenía los informes y allí estaba. Una fotografía de unos 10 años atrás apareció antes sus ojos.
- ¿Ocurre algo? – le preguntó Ryan con un tono que denotaba preocupación.
Gates parecía no haberle escuchado y siguió mirando la imagen. El alcalde aparecía en el centro de la fotografía realizada con motivo de las elecciones de ese año, en el ayuntamiento de Nueva York. Todo sería normal si no fuese por un pequeño detalle: al fondo de la sala, un hombre de no más de 40 años se dirigía a la salida, vestido de manera informal como si quisiese pasar desapercibido, pero el hecho de que ella le conociese tan bien hacía que fuese fácilmente reconocible a sus ojos, sin duda era Rob con 10 años menos.
Perpleja ante el hecho de que apareciese en la fotografía del alcalde, consciente de la posibilidad de una conexión entre ambos, le tendió la imagen a Ryan y Espósito que permanecían atentos a cualquier movimiento que hiciese o cualquier palabra que dijese.
- Este es un tema delicado que quiero que llevéis con la máxima discreción. Investigad cada paso de Rob desde la muerte de Joahnna Beckett, todos sus contactos, estudiad sus cuentas y fijaros en cualquier cantidad o movimiento sospechoso, investigad a sus familiares y su círculo de amigos, necesito saber si tengo algún motivo para creer que Rob es un asesino. Tened cuidado con la información, Rob es un hombre perspicaz y si descubre que tramamos algo no dudará en averiguar de qué se trata. Debemos ser cuidadosos y minuciosos con esta investigación.
Sin saber muy bien que decir, ambos asintieron y se marcharon a sus mesas, poniendo en marcha la investigación.
El sonido de las hojas al ser movidas por el viento lo despertó, estaban en al balcón de la habitación donde se habían quedado dormidos abrazados, cubiertos por una pequeña manta. Con cuidado de no despertarla, la tomó entre sus brazos y la dejó en la cama, acostándose junto a ella, apretándola contra su pecho. Besó su mejilla y se quedó dormido junto a su musa.
Protegida entre sus brazos, no quiso abrir los ojos y se hizo la dormida, sintiendo el calor de su cuerpo. Sus brazos la rodeaban impidiéndole hacer cualquier movimiento sin que él se diese cuenta. Con cuidado se separó de sus brazos y se fue hasta su bolso de donde, con cautela, sacó un libro titulado “Stanley Park”. Sabía que Richard la había buscado por Vancouver esos días y no la había encontrado, así que cuando paseando por Granville la vio, dejó a Castle eligiendo los regalos para su madre y su hija y ella fue a comprarlo con cuidado de que no se diese cuenta. Se trataba de una novela escrita por el conocido Timothy Taylor. Junto al libro, que dejó en la mesita de noche de Castle para que fuese lo primero que viera al despertar, un bolígrafo de pluma negra con la palabra ALWAYS grabada resplandecía en la habitación. Tras colocarlo todo, volvió a la cama entre sus brazos quedándose profundamente dormida mientras su respiración pausada jugaba con su cuello haciéndole cosquillas y su calor corporal la acurrucaba.
______________________________________________________________________
Espero que os guste y que comentéis
En este capítulo he querido centrarme más en el caso, aunque también hay tiempo para la parejita
Capítulo 13: No todo es lo que parece
Un precioso anochecer la envolvía, unos tonos violetas y rojizos jugaban en un cielo que comenzaba a llenarse poco a poco de estrellas brillando en la inmensidad de la incipiente noche de Vancouver. Se sentía segura entre sus brazos, protegida, era una nueva sensación para ella el sentirse consentida y cuidada por otra persona, y que fuese él quien la hiciese sentir así le gustaba. Se recostó en su pecho y sus brazos la rodearon, haciéndola sentir en casa. Cerró los ojos percibiendo su dulce y embriagador aroma, ese olor a Richard Castle que tanto le gustaba. Sus dedos recorrían la forma del anillo que llevaba en la otra mano, ese anillo que horas antes le había regalado tras unas tiernas palabras.
“Este anillo me hizo recordar a nosotros. Los delfines son unos animales muy sociables que viven en grupo, necesitan del calor de los suyos. Cuando comienza el período de apareamiento, los machos buscan a hembras con las que comparten el resto de su vida, son animales de una sola pareja con la que tienen a sus crías y envejecen juntos. Estos delfines enlazados son un símbolo de amor, ese amor que te hace pensar en la felicidad de la pareja antes que en la tuya propia, ese amor por el que arriesgas todo por la otra persona, ese que hace que dos personas se fundan en una sola.”
Deposita su mano encima de la de ella, impidiendo que pueda seguir haciendo círculos con su dedo por alrededor del anillo, para entrelazar sus manos. Sus intensos ojos azules la miran con dulzura y sus labios buscan los suyos con ternura, con delicadeza, disfrutando de ese beso, convirtiéndola en magia. Se quedan apoyados frente con frente, mientras sonríen como dos adolescentes locamente enamorados.
Desde el pequeño sofá del balcón del hotel podían contemplar a sus pies la tranquila noche de Vancouver que hacía su aparición sigilosamente dejándoles disfrutar de un espectáculo de colores con la puesta de sol como protagonista, mientras los escasos coches que aun circulaban por la ciudad iban desapareciendo uno a uno.
Recostada en su pecho, dejándose acariciar por sus suaves y delicadas manos, su mente viajó por cada momento compartido a su lado durante sus días en la ciudad canadiense y agradeció la insistencia de su amiga porque fuera en su búsqueda.
Desde que su madre muriera asesinada se había creado un mundo donde creía que podría ser feliz sola, que no necesitaba a ninguna persona de forma permanente en su vida, son embargo Castle le había hecho cambiar de opinión. Desde la primera vez que lo vio en una de las presentaciones de su primer libro supo que tenía algo especial. Por aquella época ella no era más que una niña y lo veía como alguien inalcanzable que siempre iba rodeado de mujeres atractivas. Cuando años después coincidió con él en un caso relacionado con uno de sus libros, su admiración de adolescente había cambiado, ella misma había cambiado, pero aunque se lo negara a si misma, le seguía despertando muchos sentimientos que estaban latentes, dormidos en su interior. Con paciencia y cariño, Castle se fue ganando su confianza y ese muro que ella misma levantó, comenzó a caer.
En estos días se había dado cuenta de lo mucho que significaba en su vida, se había acostumbrado a despertar en sus brazos, apretándola contra él para sentirla cerca, a su forma de mirarla cuando creía que ella estaba dormida, a su dulce aroma, a sus bromas y locuras que la hacían parecer un niño pequeño, pero sobre todo, se había acostumbrado a sus constantes mimos y a sentirse querida.
- ¿Qué piensas, Kate? – le aparta suavemente un mechón de pelo de su cara y le da un dulce beso en la frente.
- Recordaba estos días que hemos pasado juntos, me he perdido mucho contigo estos cuatro años y ahora no quiero que pase el tiempo.
- Aun me quedan unos días por Vancouver para terminar todas las entrevistas, tenemos tiempo de disfrutar antes de volver al trabajo, cariño – se acerca a sus labios para besarlos delicadamente y estrecharla entre sus brazos mientras la luna se irgue imponente en el oscuro cielo azul.
- Prométeme una cosa – le dice en sus labios.
- Lo que sea, cariño.
- Prométeme que no te separarás de mí más de lo necesario.
- No podría separarme de ti aunque lo quisieses – le susurra al oído provocando que un sutil cosquilleo la invada – Te quiero, Kate.
- Y yo a ti, Rick.
- Será que he esperado tanto tiempo para que dijeras eso que ahora me parece un sueño. Vuélvelo a repetir, por favor – le dice en tono juguetón.
Parecía un niño pequeño entusiasmado ante un juguete nuevo de reyes. Él la había complacido desde que fuera en su búsqueda, “así que una vez que lo complazca yo no está mal” pensó.
- Te quiero Rick – sus ojos se había oscurecido y su voz sonó llena de lujuria, lo que no pasó desapercibido para él, que tras verla morderse el labio se acercó y le mordió el labio inferior antes de comenzar un juego de besos dando rienda suelta a la pasión.
En la sala de descanso, Espósito y Ryan miraban perplejos como Gates luchaba con el debate que se estaba librando en su interior.
Julian, el joven licenciado en Bellas Artes, experto en reconstrucciones faciales de la comisaría, se había encargado de realizar el retrato robot de la persona que el portero de Smith había visto subir al edificio de éste. Cuando Ryan y Espósito recibieron el dibujo, decidieron hablar con Gates en un lugar alejado del resto de compañeros.
Gates hacía círculos alrededor de la sala sujetando en una mano temblorosa el dibujo que no era capaz de volver a mirar.
- Esto no puede ser, debe haber un error.
Era lo único que había sido capaz de decir cuando los detectives se lo entregaron, aun sabiendo que trabaja con el mejor equipo de Nueva York y los errores están descartados.
Sabía que las personas cambian y que el Rob que ella recordaba podía no ser el mismo de ahora, pero se negaba a creerlo, quería pensar que solo era una absurda broma del destino que lo había llevado a estar en el lugar equivocado en el momento equivocado.
Recordaba como aun siendo una novata, Rob le había protegido en los casos que había llevado, cubriéndola, siendo su leal compañero, no se había separado de su lado durante los años que estuvo en la comisaría de California, le animaba a seguir sus instintos, le enseñó a entender que en ese trabajo que realizan a diario no siempre se gana pero que eso no quiere decir que sean mejores o peores en su trabajo, sino que viven en un mundo lleno de injusticias donde a veces la maldad sale impune y su trabajo consiste en tratar de hacer un mundo más justo.
No quería plantearse la posibilidad de lo que para todos comenzaba a ser una duda razonable, no quería creerlo, pero no podía dejarse guiar por sus sentimientos, no podía ser participe de una injusticia, debía trabajar como si de un caso más se tratase, al margen de lo que sus sentimientos y su corazón le dictase.
Rob había sido participe desde sus inicios como detective de todos los detalles referentes al caso de Joahnna Beckett, tenía tanta información como ella había podido conseguir en sus inicios. “Pero, ¿qué relación tiene Rob con todo este caso?” se preguntó. Mientras seguía caminando podía notar las miradas de los detectives estudiando cada movimiento que hacía. Entonces su mente viajó hasta una fotografía que había visto entre sus informes del caso de Joahnna. Con paso decidido, salió de la sala de descanso, con Espósito y Ryan pisándole los talones, hasta su despacho. Abrió el cajón cerrado con llave donde tenía los informes y allí estaba. Una fotografía de unos 10 años atrás apareció antes sus ojos.
- ¿Ocurre algo? – le preguntó Ryan con un tono que denotaba preocupación.
Gates parecía no haberle escuchado y siguió mirando la imagen. El alcalde aparecía en el centro de la fotografía realizada con motivo de las elecciones de ese año, en el ayuntamiento de Nueva York. Todo sería normal si no fuese por un pequeño detalle: al fondo de la sala, un hombre de no más de 40 años se dirigía a la salida, vestido de manera informal como si quisiese pasar desapercibido, pero el hecho de que ella le conociese tan bien hacía que fuese fácilmente reconocible a sus ojos, sin duda era Rob con 10 años menos.
Perpleja ante el hecho de que apareciese en la fotografía del alcalde, consciente de la posibilidad de una conexión entre ambos, le tendió la imagen a Ryan y Espósito que permanecían atentos a cualquier movimiento que hiciese o cualquier palabra que dijese.
- Este es un tema delicado que quiero que llevéis con la máxima discreción. Investigad cada paso de Rob desde la muerte de Joahnna Beckett, todos sus contactos, estudiad sus cuentas y fijaros en cualquier cantidad o movimiento sospechoso, investigad a sus familiares y su círculo de amigos, necesito saber si tengo algún motivo para creer que Rob es un asesino. Tened cuidado con la información, Rob es un hombre perspicaz y si descubre que tramamos algo no dudará en averiguar de qué se trata. Debemos ser cuidadosos y minuciosos con esta investigación.
Sin saber muy bien que decir, ambos asintieron y se marcharon a sus mesas, poniendo en marcha la investigación.
El sonido de las hojas al ser movidas por el viento lo despertó, estaban en al balcón de la habitación donde se habían quedado dormidos abrazados, cubiertos por una pequeña manta. Con cuidado de no despertarla, la tomó entre sus brazos y la dejó en la cama, acostándose junto a ella, apretándola contra su pecho. Besó su mejilla y se quedó dormido junto a su musa.
Protegida entre sus brazos, no quiso abrir los ojos y se hizo la dormida, sintiendo el calor de su cuerpo. Sus brazos la rodeaban impidiéndole hacer cualquier movimiento sin que él se diese cuenta. Con cuidado se separó de sus brazos y se fue hasta su bolso de donde, con cautela, sacó un libro titulado “Stanley Park”. Sabía que Richard la había buscado por Vancouver esos días y no la había encontrado, así que cuando paseando por Granville la vio, dejó a Castle eligiendo los regalos para su madre y su hija y ella fue a comprarlo con cuidado de que no se diese cuenta. Se trataba de una novela escrita por el conocido Timothy Taylor. Junto al libro, que dejó en la mesita de noche de Castle para que fuese lo primero que viera al despertar, un bolígrafo de pluma negra con la palabra ALWAYS grabada resplandecía en la habitación. Tras colocarlo todo, volvió a la cama entre sus brazos quedándose profundamente dormida mientras su respiración pausada jugaba con su cuello haciéndole cosquillas y su calor corporal la acurrucaba.
______________________________________________________________________
Espero que os guste y que comentéis
______________________
Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
Ya sabes lo que te voy a comentar yo, verdad?
Me encanta como escribes, me gusta leerte.
Sigue con tu historia y siento que se hayan acabado tus vacaciones, bienvenida con los que llevamos trabajando todo el verano!!
Muy bien Alba
Me encanta como escribes, me gusta leerte.
Sigue con tu historia y siento que se hayan acabado tus vacaciones, bienvenida con los que llevamos trabajando todo el verano!!
Muy bien Alba
Anver- Policia de homicidios
- Mensajes : 711
Fecha de inscripción : 14/06/2012
Localización : Madrid
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
Anver escribió:Ya sabes lo que te voy a comentar yo, verdad?
Me encanta como escribes, me gusta leerte.
Sigue con tu historia y siento que se hayan acabado tus vacaciones, bienvenida con los que llevamos trabajando todo el verano!!
Muy bien Alba
Jaja si,tus comentarios siempre me animan a seguir escribiendo.
Bueno, en algún momento tenían que terminar, toca acostumbrarse a la rutina.
Muchas gracias Anver
______________________
Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
¿Qué si nos gusta? Pues hablar por mi misma y asegurar que a sido fantastico. Me ha encantado, esos mismo que le da, aunque creo que en la serie las cosas sucederan a un ritmo más pausado, y que Kate tardará, bastante mucho en poder decirle esas 3 palabras mágicas, espero que como mínimo nos regalen alguna escena, que como mínimo se parezca a la mitad de las tuyas.
Sigue pronto, me encanta...
Sigue pronto, me encanta...
Invitado- Invitado
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
sigueeeeeee
castle&beckett..cris- Escritor - Policia
- Mensajes : 5471
Fecha de inscripción : 20/03/2011
Edad : 33
Localización : Menorca..I LOVE NEW YORK..NYPD..RICK CASTLE & KATE BECKETT
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
Skyscraper escribió:¿Qué si nos gusta? Pues hablar por mi misma y asegurar que a sido fantastico. Me ha encantado, esos mismo que le da, aunque creo que en la serie las cosas sucederan a un ritmo más pausado, y que Kate tardará, bastante mucho en poder decirle esas 3 palabras mágicas, espero que como mínimo nos regalen alguna escena, que como mínimo se parezca a la mitad de las tuyas.
Sigue pronto, me encanta...
Muchas gracias Eso es casi seguro, en la serie Kate se tomará su tiempo antes de decir esas tres palabra,s pero en mi fic, después de como acabó todo en la azotea, ahora ella ve las cosas de otro modo y no duda en expresar lo que siente.
Muchas gracias por leer y comentar, me alegro que te guste, intentaré seguir lo antes posible
______________________
Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
Como siempre muy buen capítulo. Da gusto leerte, no acabes nunca este fic, es de los mejores que hay por el foro, un beso!!
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
Que gusto da leer comentarios tuyos Maria Ojala pudiera seguirlo indefinidamente pero alguna vez tendrá que acabar jaja Muchas gracias María, me vas a poner colorada Un beso guapa.maria_cs escribió:Como siempre muy buen capítulo. Da gusto leerte, no acabes nunca este fic, es de los mejores que hay por el foro, un beso!!
______________________
Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
muy bueno, continua pronto
chelcas- Escritor - Policia
- Mensajes : 1437
Fecha de inscripción : 27/01/2012
Edad : 31
Localización : México
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
Muchas gracias, prometo continuar cuanto anteschelcas escribió:muy bueno, continua pronto
______________________
Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
En este capítulo he intentado esclarecer un poco más el caso de Joahnna Beckett, sin dejar de lado los momentos entre Castle y Beckett. La historia va llegando a su fin, tanto por la trama que se irá aclarando poco a poco en los próximos capítulos, tanto por mi que ando liada con los exámenes de la universidad y solo tendré dos semanas libres antes de empezar el curso, y como no me gusta dejar los fics a media, lo terminaré en unos cuantos capítulos más.
Capítulo 14: El principio del final
Una joven deambulaba por la habitación del hotel de California incapaz de conciliar el sueño, su semana de vacaciones no estaba siendo lo que ella tenía pensado.
La preocupación se apoderaba de ella invadiendo cada poro de su piel, le resultaba imposible apartar ese miedo que la inundaba por completo.
Con cautela, salió de su habitación y se dirigió al pequeño salón de la suite, sentándose en el alfeizar de la ventana. El sonido de las olas al romper sobre las rocas la relajó un poco, aunque seguía inquieta. Pensaba en los chicos de su edad que viven la vida sin importarles nada, sin preocupaciones, y en ese momento maldijo el haber madurado a una edad tan temprana, pero era inevitable, o maduraba ella o lo hacía su padre y sabía que no había cabida para la segunda opción.
Unos pasos la alertaron, se incorporó para ver mejor con la escasa luz que se colaba por la ventana.
- ¿Quién anda ahí? – preguntó con un hilo de voz que sonó casi a un susurro.
- ¿Alexis? ¿Estás bien?
- Abuela, me has asustado – se volvió a sentar sobre el alfeizar de la ventana – No podía dormir.
Su abuela parecía tan serena, no podía comprender como no estaba preocupada, puesto que si lo estaba lo disimulaba muy bien. Admiraba su entereza y su fuerza, era algo que no había heredado y que en ese momento necesitaba.
- ¿Qué te ocurre querida? – se acercó hasta su nieta y se sentó a su lado.
- Me preocupa Kate y papá. Hace días que no sé nada de ellos, le dije a papá que lo llamaría cuando supiera donde me llevabas pero tenía su teléfono apagado. Le dejé un mensaje en el buzón de voz pero no me ha llamado desde entonces. Esto no es algo propio de él y me preocupa que le haya pasado algo.
- Alexis, tu padre tendrá una buena razón para no haber llamado, pero estará bien o de otro modo ya nos habríamos enterado por sus compañeros. Seguro que tanto tu padre como Kate están perfectamente. Vamos a dormir, si mañana no sabemos nada de ellos, te prometo que te ayudaré a averiguar que sucede.
Alexis asintió y se dirigió tras su abuela a su habitación, sabía que no podría dormir pero de nada iba a servirle quedarse levantada todo la noche.
Un dulce ronroneo junto a su nombre pronunciado por sus labios lo despertó. Con dificultad debido a los rayos del sol que se colaban por la ventana, abrió los ojos y pudo ver como ella dormía acunada por sus brazos. Con una sonrisa, se quedó disfrutando de su dulce ronroneo hasta que poco a poco comenzó a abrir sus hermosos ojos verdes.
- Buenos días, mi vida – le quitó algunos mechones de su cara y besó sus labios.
- Mmmm buenos días, Rick – le dijo en su boca.
- No dejo de maravillarme viéndote despertar, te ves preciosa durmiendo.
- ¿Eso quiere decir que cuando estoy despierta no lo soy, Castle?
Pudo apreciar el tono juguetón y como volvía a llamarlo como lo había hecho durante cuatro años.
- Cuando estás despierta eres toda una mandona sabelotodo – Kate alzó una ceja y Castle se precipitó a concluir – pero sigues siendo tan hermosa como cuando duermes.
Beckett se acercó a él y cuando estaban a escasos centímetros, se apartó.
- Eso por llamarme mandona sabelotodo.
- Eres muy mala – le dijo con tono de niño pequeño lo que provocó una sonora carcajada en Beckett.
- ¿Has visto la hora que es?
Castle se giró y Beckett se acercó a él abrazándolo por la espalda mientras esperaba alguna reacción por su parte.
- Kate, esto es… - le dijo emocionado pero ello lo calló con un beso.
- Te he escuchado preguntar por ese libro muchas veces y cuando lo vi pensé que sería un buen regalo.
- Gracias cariño, es el mejor regalo que me podría haber hecho – le confesó tomando entre sus manos el bolígrafo de pluma mientras pasaba su dedo anular por las letras grabadas.
- Es solo un pequeño detalle como agradecimiento a todo lo que me das siempre.
- Siempre – repitió lanzándose a sus labios con pasión mientras en Vancouver el sol iba cobrando protagonismo.
No podía dejar de dar vueltas en la cama, no quería despertarla pero no podía dormir, la escena vivida aquella tarde le volvía una y otra vez a la mente. Con sigilo se volvió a girar quedando frente a su huracán particular, porque así era ella, un huracán a punto de formarse en cualquier momento. Parecía tan serena cuando dormía que nada hacía presagiar la tormenta que estallaba cuando estaba despierta. Pero con tormenta o huracán incluido, le encantaba, habían llevado durante mucho tiempo una relación sin compromiso en la que ambos creían salir ganando pero se había dado cuenta que quería más, mucho más de lo que habían tenido y tenía la sensación que ella quería lo mismo que él.
- ¿Qué te ocurre Javi?
Ensimismado en sus pensamientos, divagando en ellos no se había dado cuenta que Lanie había despertado y lo miraba con ojos inquisitivos.
- No dejo de penar en lo que ocurrió esta tarde. Desde que Rob llegó a la comisaría tengo la extraña sensación de que entre él y Gates hay algo más. Veo esas miradas entre ellos y esa complicidad y me recuerdan a Beckett y Castle. Creo que debió ocurrir algo entre ellos en el pasado, he visto la mirada de tristeza y decepción de Gates al darse cuenta que Rob podía no ser el que ella creía que era. Me da miedo que Gates no pueda ser objetiva en el caso, ahora Rob es un sospechoso, no un compañero.
- No te preocupes por eso ahora, Javi, Gates ante todo es una profesional, creo que eso nos ha quedado claro a todas, sabrá como llevarlo. Trata de descansar, mañana nos espera un día duro – apoyó su cabeza en el pecho de él mientras era rodeada por sus brazos.
Con ella acurrucada y el contacto de sus cuerpos fue sumiéndose en un sueño que acabó llenando de traición, decepción, mentiras y muertes.
Se estaba levantando para pedir el desayuno mientras se maldecía por ser tan mal padre y no haberse preocupado de Alexis desde que llegó a Vancouver, no sabía nada de ella, así que fue hasta el salón para coger su iPhone.
- ¿A quién llamas? – preguntó mientras se terminaba de abrochar el último botón de la camisa de él que había tomando prestada al no encontrar la suya en la habitación.
- A Alexis, me dijo que me llamaría y lo hizo, pero tuve el teléfono apagado. Me dejó un mensaje de voz y hasta ahora no me había dado cuenta.
- ¿Pero cómo no se te ha ocurrido llamarlo antes? Debe estar preocupadísima, Richard – le dijo en un tono serio.
- Si, lo sé Kate, tú tienes la culpa.
- ¿Yo? – le preguntó enfadada sin entender nada.
- Si, tú. Desde que llegaste ocupas por completo mí tiempo.
Kate se lanzó sobre él, rodeando su cuello con sus brazos, atrapando su cintura con sus piernas.
- Kate, por favor, estoy llamando a Alexis – le suplicó mientras ella le mordisqueaba la oreja.
- Pues llámala – le dijo con un tono de voz juguetón mientras seguía sobre él.
- ¡Alexis! Hola cariño, siento no haberte llamado estos días pero he estado muy ocupado …
- … conmigo – gritó Beckett
- Papá, ¿esa es Kate?
- Si cariño, es una larga historia, solo quiero que sepas que estamos bien.
- Me tenías muy asustada papá, podrías haber llamando al menos para decirme que todo estaba bien.
- Lo siento Alexis – se disculpó.
- ¿Y qué hace Kate en Vancouver? No estaréis …
- Prefiero contártelo en persona cariño, pero si, estamos juntos – sabiendo que se le avecinaba una avalancha de preguntas prefirió cambiar de tema - ¿Qué tal las vacaciones por California con la abuela?
Castle pudo notar como su hija se relajaba y le contada todo lo que había hecho junto a su abuela por California. Beckett seguía atentamente a Castle con la mirada tras haberse sentado en la cama permitiéndole hablar tranquilamente con su hija, ya se le ocurriría alguna forma de hacerle pagar por sus palabras.
Había madrugado porque se sentía incapaz de perder ni un minuto más. La comisaría estaba silenciosa cuando ella llegó, eran las 6 de la mañana, aun quedaban dos horas para que comenzase el día laboral.
Pasó por la pizarra observando como los detectives la había llenado de nuevos datos. Habían omitido colocar la foto de Rob para evitar sospechas por su parte y en la línea temporal aparecía una R entre signos de interrogación en la hora de la muerte de Smith.
Un sonoro ruido la alarmó, no estaba sola. Con cuidado, sin hacer ruido, caminó por la sala hasta llegar a la fuente del estruendo, su despacho. A través de la ventana pudo vislumbrar la sombra de una persona que parecía buscar algo con ansias. El forcejeo con el cajón donde guardaba todos los informes recientes del caso de Joahnna la alertó, dándose cuenta que no podía seguir cruzada de brazos observando la escena por más tiempo. Entró en su despacho y le dio a la luz, provocando que el intruso quedara quieto.
- ¿Quién es? ¿Qué hace hurgando en mi despacho?
No obtuvo respuesta, sino un pronunciado silencio que no se rompió hasta que la persona que había entrado en la comisaría se destapó su rostro, provocando un grito de terror en Gates.
- Pe… pero… no lo entiendo… Pensaba que no había motivo alguno para sospechar de ti, pero veo que me equivocaba. ¿Cómo puedes hacerme esto, Rob?
- Gates, yo… lo siento, pero no es lo que tú piensas.
- ¿Cómo que no es lo que yo pienso? Te he visto, Rob.
- Necesito que te calmes para podértelo explicar, Gates. No debería hacerlo, pero ya que me has visto no te lo puedo ocultar.
Mientras Gates se sentaba en su sillón, Rob fue hasta la sala de descanso para volver junto a ella con una taza de café.
- Tómatelo mientras te cuento – deseosa de saber la verdad, se limitó a asentir tomando la taza de café entre sus manos – Todo esto empezó cuando tú entraste a trabajar en la comisaría de California. Yo era un detective que había perdido la esencia de lo que en su día me impulsó a hacerme detective. La muerte de mi compañero a manos de un terrorista en uno de los casos que investigábamos me traumatizó durante años. Tu entrada en la comisaría fue como una bocanada de aire puro y limpio para mí, volví a ser ese Rob con ganas de dar caza a los asesinos y de hacer justicia. Un día empezaste a hablarme del caso de Joahnna Beckett y comenzaste a despertar mi curiosidad, así que me ofrecí a ayudarte en todo y no dejarte sola. Yo tenía mucha experiencia y por temor a que en tus manos cierta información fuese una bomba, te lo oculté. Cuando te marchaste, seguí investigando y todos los datos apuntaban hacia una misma dirección: Daniel William, alcalde de Nueva York. Durante sus elecciones hasta 10 años estuve en todas las entrevistas que se le realizaron, ocultándome entre los periodistas y aficionados para que no pudiesen sospechas de mí – Gates asintió recordando la fotografía que el día anterior les había mostrado a Ryan y Espósito – Descubrí que la abogada tenía sospechas sobre cierta relación del alcalde con el narcotráfico, lo que me llevó a pensar que quizás fue asesinada para silenciar la trama que iba a desvelar. Por eso cuando le dijiste a los chicos que investigasen si Smith estaba metido en el narco te pregunté el motivo por el que pensabas eso, creía que ya sabías lo del alcalde. Smith solo era un viejo amigo de Joahnna, fue testigo de uno de los juicios más importantes de su carrera, su testimonio le ayudó a ganar el caso. Entablaron amistad, Joahnna tenía tal confianza en él que le llegó a contar sus sospechas sobre el alcalde. El día de la muerte de Smith me había citado con él a través de un mensaje encriptado para que el tema que quería tratar con él no fuese descubierto.
- Me negaba a creer que fuese un asesino – dijo asimilando todo lo que acababa de oír – Pero todo esto no explica que hacías aquí rebuscando entre mis cosas.
- A estas alturas el alcalde debe se creer que vais tras él y toda la información del caso de Joahnna no está segura aquí. Te conozco y sé que creerías que los informes estarían más seguros en la comisaría que en tu casa, sabía que estarían aquí, yo solo quería buscarles un lugar seguro conmigo, a mi nadie me relaciona con esto, nadie sospecha de mí.
- Supón que creo que esto último que me has contado es cierto. ¿Crees que hubiese movido cielo y tierra para buscar esos informes si no los llego a encontrar en mi despacho?
- Lo sé, pero no quería ponerte en riesgo Gates.
Gates permaneció en silencio pensando en lo que le había contado, como lo que ella pensaba que había sucedido no era así, como Rob era, ¿inocente? Aun no lo tenía muy claro, pero no iba a esperar para esclarecer esa duda.
- Es hora de trabajar, avisaré a mi equipo, vamos a averiguar que es lo que sucede realmente.
Al otro lado de la ciudad, un hombre de mediana edad se divertía viendo la reposición de la entrevista del famoso escritor.
- No sabe lo que ha hecho – dijo tras ver la declaración a su musa – Chicos, tenéis trabajo, os vais a Vancouver – le dijo a cuatro hombres de entre 20 y 30 años que asintieron obedientemente.
_________________________________________________
Espero que os haya gustado y que comentéis
Capítulo 14: El principio del final
Una joven deambulaba por la habitación del hotel de California incapaz de conciliar el sueño, su semana de vacaciones no estaba siendo lo que ella tenía pensado.
La preocupación se apoderaba de ella invadiendo cada poro de su piel, le resultaba imposible apartar ese miedo que la inundaba por completo.
Con cautela, salió de su habitación y se dirigió al pequeño salón de la suite, sentándose en el alfeizar de la ventana. El sonido de las olas al romper sobre las rocas la relajó un poco, aunque seguía inquieta. Pensaba en los chicos de su edad que viven la vida sin importarles nada, sin preocupaciones, y en ese momento maldijo el haber madurado a una edad tan temprana, pero era inevitable, o maduraba ella o lo hacía su padre y sabía que no había cabida para la segunda opción.
Unos pasos la alertaron, se incorporó para ver mejor con la escasa luz que se colaba por la ventana.
- ¿Quién anda ahí? – preguntó con un hilo de voz que sonó casi a un susurro.
- ¿Alexis? ¿Estás bien?
- Abuela, me has asustado – se volvió a sentar sobre el alfeizar de la ventana – No podía dormir.
Su abuela parecía tan serena, no podía comprender como no estaba preocupada, puesto que si lo estaba lo disimulaba muy bien. Admiraba su entereza y su fuerza, era algo que no había heredado y que en ese momento necesitaba.
- ¿Qué te ocurre querida? – se acercó hasta su nieta y se sentó a su lado.
- Me preocupa Kate y papá. Hace días que no sé nada de ellos, le dije a papá que lo llamaría cuando supiera donde me llevabas pero tenía su teléfono apagado. Le dejé un mensaje en el buzón de voz pero no me ha llamado desde entonces. Esto no es algo propio de él y me preocupa que le haya pasado algo.
- Alexis, tu padre tendrá una buena razón para no haber llamado, pero estará bien o de otro modo ya nos habríamos enterado por sus compañeros. Seguro que tanto tu padre como Kate están perfectamente. Vamos a dormir, si mañana no sabemos nada de ellos, te prometo que te ayudaré a averiguar que sucede.
Alexis asintió y se dirigió tras su abuela a su habitación, sabía que no podría dormir pero de nada iba a servirle quedarse levantada todo la noche.
Un dulce ronroneo junto a su nombre pronunciado por sus labios lo despertó. Con dificultad debido a los rayos del sol que se colaban por la ventana, abrió los ojos y pudo ver como ella dormía acunada por sus brazos. Con una sonrisa, se quedó disfrutando de su dulce ronroneo hasta que poco a poco comenzó a abrir sus hermosos ojos verdes.
- Buenos días, mi vida – le quitó algunos mechones de su cara y besó sus labios.
- Mmmm buenos días, Rick – le dijo en su boca.
- No dejo de maravillarme viéndote despertar, te ves preciosa durmiendo.
- ¿Eso quiere decir que cuando estoy despierta no lo soy, Castle?
Pudo apreciar el tono juguetón y como volvía a llamarlo como lo había hecho durante cuatro años.
- Cuando estás despierta eres toda una mandona sabelotodo – Kate alzó una ceja y Castle se precipitó a concluir – pero sigues siendo tan hermosa como cuando duermes.
Beckett se acercó a él y cuando estaban a escasos centímetros, se apartó.
- Eso por llamarme mandona sabelotodo.
- Eres muy mala – le dijo con tono de niño pequeño lo que provocó una sonora carcajada en Beckett.
- ¿Has visto la hora que es?
Castle se giró y Beckett se acercó a él abrazándolo por la espalda mientras esperaba alguna reacción por su parte.
- Kate, esto es… - le dijo emocionado pero ello lo calló con un beso.
- Te he escuchado preguntar por ese libro muchas veces y cuando lo vi pensé que sería un buen regalo.
- Gracias cariño, es el mejor regalo que me podría haber hecho – le confesó tomando entre sus manos el bolígrafo de pluma mientras pasaba su dedo anular por las letras grabadas.
- Es solo un pequeño detalle como agradecimiento a todo lo que me das siempre.
- Siempre – repitió lanzándose a sus labios con pasión mientras en Vancouver el sol iba cobrando protagonismo.
No podía dejar de dar vueltas en la cama, no quería despertarla pero no podía dormir, la escena vivida aquella tarde le volvía una y otra vez a la mente. Con sigilo se volvió a girar quedando frente a su huracán particular, porque así era ella, un huracán a punto de formarse en cualquier momento. Parecía tan serena cuando dormía que nada hacía presagiar la tormenta que estallaba cuando estaba despierta. Pero con tormenta o huracán incluido, le encantaba, habían llevado durante mucho tiempo una relación sin compromiso en la que ambos creían salir ganando pero se había dado cuenta que quería más, mucho más de lo que habían tenido y tenía la sensación que ella quería lo mismo que él.
- ¿Qué te ocurre Javi?
Ensimismado en sus pensamientos, divagando en ellos no se había dado cuenta que Lanie había despertado y lo miraba con ojos inquisitivos.
- No dejo de penar en lo que ocurrió esta tarde. Desde que Rob llegó a la comisaría tengo la extraña sensación de que entre él y Gates hay algo más. Veo esas miradas entre ellos y esa complicidad y me recuerdan a Beckett y Castle. Creo que debió ocurrir algo entre ellos en el pasado, he visto la mirada de tristeza y decepción de Gates al darse cuenta que Rob podía no ser el que ella creía que era. Me da miedo que Gates no pueda ser objetiva en el caso, ahora Rob es un sospechoso, no un compañero.
- No te preocupes por eso ahora, Javi, Gates ante todo es una profesional, creo que eso nos ha quedado claro a todas, sabrá como llevarlo. Trata de descansar, mañana nos espera un día duro – apoyó su cabeza en el pecho de él mientras era rodeada por sus brazos.
Con ella acurrucada y el contacto de sus cuerpos fue sumiéndose en un sueño que acabó llenando de traición, decepción, mentiras y muertes.
Se estaba levantando para pedir el desayuno mientras se maldecía por ser tan mal padre y no haberse preocupado de Alexis desde que llegó a Vancouver, no sabía nada de ella, así que fue hasta el salón para coger su iPhone.
- ¿A quién llamas? – preguntó mientras se terminaba de abrochar el último botón de la camisa de él que había tomando prestada al no encontrar la suya en la habitación.
- A Alexis, me dijo que me llamaría y lo hizo, pero tuve el teléfono apagado. Me dejó un mensaje de voz y hasta ahora no me había dado cuenta.
- ¿Pero cómo no se te ha ocurrido llamarlo antes? Debe estar preocupadísima, Richard – le dijo en un tono serio.
- Si, lo sé Kate, tú tienes la culpa.
- ¿Yo? – le preguntó enfadada sin entender nada.
- Si, tú. Desde que llegaste ocupas por completo mí tiempo.
Kate se lanzó sobre él, rodeando su cuello con sus brazos, atrapando su cintura con sus piernas.
- Kate, por favor, estoy llamando a Alexis – le suplicó mientras ella le mordisqueaba la oreja.
- Pues llámala – le dijo con un tono de voz juguetón mientras seguía sobre él.
- ¡Alexis! Hola cariño, siento no haberte llamado estos días pero he estado muy ocupado …
- … conmigo – gritó Beckett
- Papá, ¿esa es Kate?
- Si cariño, es una larga historia, solo quiero que sepas que estamos bien.
- Me tenías muy asustada papá, podrías haber llamando al menos para decirme que todo estaba bien.
- Lo siento Alexis – se disculpó.
- ¿Y qué hace Kate en Vancouver? No estaréis …
- Prefiero contártelo en persona cariño, pero si, estamos juntos – sabiendo que se le avecinaba una avalancha de preguntas prefirió cambiar de tema - ¿Qué tal las vacaciones por California con la abuela?
Castle pudo notar como su hija se relajaba y le contada todo lo que había hecho junto a su abuela por California. Beckett seguía atentamente a Castle con la mirada tras haberse sentado en la cama permitiéndole hablar tranquilamente con su hija, ya se le ocurriría alguna forma de hacerle pagar por sus palabras.
Había madrugado porque se sentía incapaz de perder ni un minuto más. La comisaría estaba silenciosa cuando ella llegó, eran las 6 de la mañana, aun quedaban dos horas para que comenzase el día laboral.
Pasó por la pizarra observando como los detectives la había llenado de nuevos datos. Habían omitido colocar la foto de Rob para evitar sospechas por su parte y en la línea temporal aparecía una R entre signos de interrogación en la hora de la muerte de Smith.
Un sonoro ruido la alarmó, no estaba sola. Con cuidado, sin hacer ruido, caminó por la sala hasta llegar a la fuente del estruendo, su despacho. A través de la ventana pudo vislumbrar la sombra de una persona que parecía buscar algo con ansias. El forcejeo con el cajón donde guardaba todos los informes recientes del caso de Joahnna la alertó, dándose cuenta que no podía seguir cruzada de brazos observando la escena por más tiempo. Entró en su despacho y le dio a la luz, provocando que el intruso quedara quieto.
- ¿Quién es? ¿Qué hace hurgando en mi despacho?
No obtuvo respuesta, sino un pronunciado silencio que no se rompió hasta que la persona que había entrado en la comisaría se destapó su rostro, provocando un grito de terror en Gates.
- Pe… pero… no lo entiendo… Pensaba que no había motivo alguno para sospechar de ti, pero veo que me equivocaba. ¿Cómo puedes hacerme esto, Rob?
- Gates, yo… lo siento, pero no es lo que tú piensas.
- ¿Cómo que no es lo que yo pienso? Te he visto, Rob.
- Necesito que te calmes para podértelo explicar, Gates. No debería hacerlo, pero ya que me has visto no te lo puedo ocultar.
Mientras Gates se sentaba en su sillón, Rob fue hasta la sala de descanso para volver junto a ella con una taza de café.
- Tómatelo mientras te cuento – deseosa de saber la verdad, se limitó a asentir tomando la taza de café entre sus manos – Todo esto empezó cuando tú entraste a trabajar en la comisaría de California. Yo era un detective que había perdido la esencia de lo que en su día me impulsó a hacerme detective. La muerte de mi compañero a manos de un terrorista en uno de los casos que investigábamos me traumatizó durante años. Tu entrada en la comisaría fue como una bocanada de aire puro y limpio para mí, volví a ser ese Rob con ganas de dar caza a los asesinos y de hacer justicia. Un día empezaste a hablarme del caso de Joahnna Beckett y comenzaste a despertar mi curiosidad, así que me ofrecí a ayudarte en todo y no dejarte sola. Yo tenía mucha experiencia y por temor a que en tus manos cierta información fuese una bomba, te lo oculté. Cuando te marchaste, seguí investigando y todos los datos apuntaban hacia una misma dirección: Daniel William, alcalde de Nueva York. Durante sus elecciones hasta 10 años estuve en todas las entrevistas que se le realizaron, ocultándome entre los periodistas y aficionados para que no pudiesen sospechas de mí – Gates asintió recordando la fotografía que el día anterior les había mostrado a Ryan y Espósito – Descubrí que la abogada tenía sospechas sobre cierta relación del alcalde con el narcotráfico, lo que me llevó a pensar que quizás fue asesinada para silenciar la trama que iba a desvelar. Por eso cuando le dijiste a los chicos que investigasen si Smith estaba metido en el narco te pregunté el motivo por el que pensabas eso, creía que ya sabías lo del alcalde. Smith solo era un viejo amigo de Joahnna, fue testigo de uno de los juicios más importantes de su carrera, su testimonio le ayudó a ganar el caso. Entablaron amistad, Joahnna tenía tal confianza en él que le llegó a contar sus sospechas sobre el alcalde. El día de la muerte de Smith me había citado con él a través de un mensaje encriptado para que el tema que quería tratar con él no fuese descubierto.
- Me negaba a creer que fuese un asesino – dijo asimilando todo lo que acababa de oír – Pero todo esto no explica que hacías aquí rebuscando entre mis cosas.
- A estas alturas el alcalde debe se creer que vais tras él y toda la información del caso de Joahnna no está segura aquí. Te conozco y sé que creerías que los informes estarían más seguros en la comisaría que en tu casa, sabía que estarían aquí, yo solo quería buscarles un lugar seguro conmigo, a mi nadie me relaciona con esto, nadie sospecha de mí.
- Supón que creo que esto último que me has contado es cierto. ¿Crees que hubiese movido cielo y tierra para buscar esos informes si no los llego a encontrar en mi despacho?
- Lo sé, pero no quería ponerte en riesgo Gates.
Gates permaneció en silencio pensando en lo que le había contado, como lo que ella pensaba que había sucedido no era así, como Rob era, ¿inocente? Aun no lo tenía muy claro, pero no iba a esperar para esclarecer esa duda.
- Es hora de trabajar, avisaré a mi equipo, vamos a averiguar que es lo que sucede realmente.
Al otro lado de la ciudad, un hombre de mediana edad se divertía viendo la reposición de la entrevista del famoso escritor.
- No sabe lo que ha hecho – dijo tras ver la declaración a su musa – Chicos, tenéis trabajo, os vais a Vancouver – le dijo a cuatro hombres de entre 20 y 30 años que asintieron obedientemente.
_________________________________________________
Espero que os haya gustado y que comentéis
______________________
Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
Dios como echaba en falta un nuevo capítulo, que juguetona Kate gritando jajajaja Me ha hecho mucha gracia imaginarme esa escena.
En cuanto a Alexis, me encantado la forma de describir lo que le estaba sucediendo.
Y Gates siempre y será más lista de lo que parece. Otro capítulo fabuloso.
Continuá pronto...plissss...
En cuanto a Alexis, me encantado la forma de describir lo que le estaba sucediendo.
Y Gates siempre y será más lista de lo que parece. Otro capítulo fabuloso.
Continuá pronto...plissss...
Invitado- Invitado
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
Skyscraper escribió:Dios como echaba en falta un nuevo capítulo, que juguetona Kate gritando jajajaja Me ha hecho mucha gracia imaginarme esa escena.
En cuanto a Alexis, me encantado la forma de describir lo que le estaba sucediendo.
Y Gates siempre y será más lista de lo que parece. Otro capítulo fabuloso.
Continuá pronto...plissss...
Es que después de leer tantos spoilers sobre la nueva temporada me he imaginado que su comportamiento podría ser ese jeje A Alexis la tenía olvidada en este fic y quise darle un poco de importancia en este capítulo. Gates es Gates, lista y con aspecto de ser de hierro pero yo siempre he creido que debajo de esa fachada hay una persona con un gran corazón.
Muchas gracias, me alegro que te haya gustado En cuanto los estudios me dejen un hueco me pongo con el siguiente capítulo.
______________________
Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
No te había comentado nunca en la historia, porque llevo un jaleo de fics, que he decidido tomármelo con calma, aparcar unos pocos, y leer otros con tranquilidad, porque al final una ya está mayor y se le lían las historias.
Está muy interesante y muy bien llevada la trama, sigue así.
Está muy interesante y muy bien llevada la trama, sigue así.
Cata Castillo- Escritor - Policia
- Mensajes : 1729
Fecha de inscripción : 25/09/2010
Localización : Al sur del sur
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
Cata Castillo escribió:No te había comentado nunca en la historia, porque llevo un jaleo de fics, que he decidido tomármelo con calma, aparcar unos pocos, y leer otros con tranquilidad, porque al final una ya está mayor y se le lían las historias.
Está muy interesante y muy bien llevada la trama, sigue así.
Da gusto ver a personas nuevas que comentar el fic
Jaja suele pasar, con calma te podrás poner al día con los fics.
Muchas gracias Cata por leer y por comentar, me alegro que te guste como llevo las historia.
Un saludo
______________________
Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
Como siempre un capítulo genial y la parte en la que Kate grita por telefono a Alexis me ha hecho mucha gracia =). No quiero que se acabe!!!! pero bueno, si haces un gran final como se que harás, me conformo!!
Un beso!!
Un beso!!
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
maria_cs escribió:Como siempre un capítulo genial y la parte en la que Kate grita por telefono a Alexis me ha hecho mucha gracia =). No quiero que se acabe!!!! pero bueno, si haces un gran final como se que harás, me conformo!!
Un beso!!
Muchas gracias María
Escribiendo esa escena de Kate me reía yo sola imaginándomela, es de las que me más me he reído escribiendo, me gusta mezclar ideas que creo que pueden ocurrir en la serie con otras que me gustaría, como este caso
En algún momento lo tengo que acabar María, y tampoco quiero alargarlo eternamente y escribir algo que no tenga mucho sentido, la historia va llegando a su fin y en unos cuantos capítulos más creo que estará terminada. Eso si, el final será un gran final
Besos guapa!!
______________________
Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
castle&beckett..cris- Escritor - Policia
- Mensajes : 5471
Fecha de inscripción : 20/03/2011
Edad : 33
Localización : Menorca..I LOVE NEW YORK..NYPD..RICK CASTLE & KATE BECKETT
Re: And if...? - Epílogo (pág.20) 04-10
Alba
Me veo en la imperiosa necesidad de decirte una vez más que me encanta como escribes.
El próximo huracán que asole las costas de USA debería ser llamado LANIE
jeje
(como siempre)
Me veo en la imperiosa necesidad de decirte una vez más que me encanta como escribes.
El próximo huracán que asole las costas de USA debería ser llamado LANIE
jeje
(como siempre)
Anver- Policia de homicidios
- Mensajes : 711
Fecha de inscripción : 14/06/2012
Localización : Madrid
Página 9 de 12. • 1, 2, 3 ... 8, 9, 10, 11, 12
Temas similares
» Solo tú puedes salvarme-Tamyalways (Final subido)
» Everything I Do (i Do It For You) Epilogo
» Mucho más que algo en común-Tamyalways-Epílogo subido
» A salvo-Tamyalways Final Subido
» Quiero una familia-Tamyalways-Final Subido
» Everything I Do (i Do It For You) Epilogo
» Mucho más que algo en común-Tamyalways-Epílogo subido
» A salvo-Tamyalways Final Subido
» Quiero una familia-Tamyalways-Final Subido
Foro Castle :: OffTopic :: Fan Fics
Página 9 de 12.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.