Dos balas en el funeral Capítulos: I; II, III; IV; V; VI; VII; VIII; IX Pte. I y II; X; XI; XII; XIII; XIV; XV; XVI ; XVII-Pte I y II; XVIII; XIX; XX; XXI (Finale) P I; Parte II ; -EPÍLOGO-

Solexite escribió:

agecastbet escribió:
Hola mi amiga!  Parece que te olvidaste de que trabajo mejor bajo presión, así que sentíte libre de presionarme cuando quieras, jajajajajajajajaja
No me tientes, no me tientes, jajajajajaja
Eso intento, eso intento… ¿lo logré? jajajajajajaja

Sole, sole, por tu propio bien no juegues con fuego que te puedes quemar, jajajajajaja y de momento no me has tentado lo suficiente, jajajajajaja

Sigo estando (lo que es bastante, Ja!) Sé que, como siempre, los dejé en vilo y estan esperando la continuación. Te agradará saber que estoy de lleno dedicándome a eso,  así que espero terminar pronto.
Espero impaciente que lo termines pero también sé que me volverás a dejar en vilo, así que no se si arrendar la ganancia de un nuevo capítulo, jajajajaja
Me encanta que me conozcas tanto…jajajajajaja

No se si es conocimiento o temor, jajajajaja

Como me decís que no me acuerdo de ustedes? Siempre los tengo presentes cuando me siento a escribir. Y nada de quejas  que ya sabés que no puedo evitar ser un poco retorcida. Es parte de mi naturaleza  y supongo que es eso lo que los atrae de mis historias, sino con lo que tardo entre capi y capi ya la hubiesen dejado de leer hace rato, jajajajajajajaja
Menos mal que solo eres un poco retorcida, que si llegas a ser más nos dejas a todos sin aliento, como a los actores de tu fic, jajajajajajaja, pero eso es efectivamente lo que me gusta, que lo hagas creíble y además consigas siempre mantener el listón tan alto, amén de tus sorpresitas que si que me dejan al borde del abismo, nunca sé por dónde vas a salir y eso sí que me engancha, jajajajajaja
Puedo retorcerme más aun… no me tientes! Jajajajajaja Espero seguir sorprendiéndote con otro de mis capítulos, sé lo exigente que podés ser, jajajajajajajaja

Cuando quieras te pongo a prueba, jajajajaja sabes que siempre estoy predispuesta a darte créditos, se que mis expectativas siempre serán superadas y la verdad con un maromo como Josh, todo puede suceder, jajajajaja



Como siempre profe, un placer leerte! Te mando besos y abrazos. Nos leemos pronto.
Bueno si tu dices que vas a seguir pronto, me lo creo, que no eres de las que promete lo que no va a cumplir, y se que cuando hablas lo haces en serio, así que en ti confío para poder leerte pronto.
BESOS Y ABRAZOS también para ti querida amiga

Hacés bien en creerme. Ya tengo escrito más de la mitad y la parte que falta la tengo toda en la cabeza. Sólo me falta transcribirlo y darle unas cuantas vueltitas más… jajajajajajaja
Abrazos amiga![/quote]

Pero a qué esperas para transcribirlo???, que quieres que nos muramos todos de impaciencia cuando ya lo tienes en el hormo, deja de darle vueltas que lo vas a marear y luego va a ser peor, sobre todo si se te chamusca, jajajajaja
Bueno pues cuando te apetezca, ya estoy preparada, jajajajajaja
Muchos BESOTESSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS

Solexite escribió:

Kynu escribió:
JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJJAAJJAJAJ noooooooooooooooooo!!!! que no respondaaaaaaaaaaaaaa!!!!!! que la liamoooooooooooooooooooos!!!!!! JAJAJAJAJAJAJAJJAJA

oye! pues me alegro que te rías con esto :Dsignifica que te saqué un poquito de tu rutina y te reiste! ^__^
Entre mami Adri y yo... a veces nos pasamos, lo reconozco JAJAJAJAJAJJAJA pero nos puede el cachondeo


Y de nada! Tu sin que te de cosa, me preguntas =) que yo ahora tengo demasiado tiempo libre :)Y la tecnología y yo vamos ligadas de la mano, para algo es mi profesión jeje

Ey! Cualquiera diría que le tenés miedo a tu mami! Jajajajajajajaja

Por supuesto que sirvió para salir de la rutina, siempre logran hacerme reír mucho. Los mensajes de ustedes dos son realmente graciosos y los disfruto de verdad. Así que espero siempre que te conteste, jajajajajajaja

Gracias nuevamente por ofrecerme tu ayuda. De verdad que lo voy  tener en cuenta!!! Una pregunta respecto a tu profesión ¿a que te dedicas exactamente?

en la informática a casi todo menos a programar xD, todo lo técnico y diseño =)

agecastbet escribió:

Kynu escribió:en la informática a casi todo menos a programar xD, todo lo técnico y diseño =)

Yo diría que más a joder con la tecnología que a arreglarla,  jajajajajaja

peeeeeeeeeerdona?? tienes algo que decirme?

agecastbet escribió:

Kynu escribió:

agecastbet escribió:

Kynu escribió:en la informática a casi todo menos a programar xD, todo lo técnico y diseño =)

Yo diría que más a joder con la tecnología que a arreglarla,  jajajajajaja

peeeeeeeeeerdona?? :|tienes algo que decirme?

Si que el que se pica ajos come, jajajajajajajaja

no pico nada no como nada

Kynu escribió:

agecastbet escribió:

Kynu escribió:

agecastbet escribió:

Kynu escribió:en la informática a casi todo menos a programar xD, todo lo técnico y diseño =)

Yo diría que más a joder con la tecnología que a arreglarla,  jajajajajaja

peeeeeeeeeerdona?? :|tienes algo que decirme?

Si que el que se pica ajos come, jajajajajajajaja

no pico nada :bleh:no como nada

P´os como sigas así te me vas a quedar en el chasis, jajajajajajaja

agecastbet escribió:

Kynu escribió:

agecastbet escribió:

Kynu escribió:

agecastbet escribió:

Kynu escribió:en la informática a casi todo menos a programar xD, todo lo técnico y diseño =)

Yo diría que más a joder con la tecnología que a arreglarla,  jajajajajaja

peeeeeeeeeerdona?? :|tienes algo que decirme?

Si que el que se pica ajos come, jajajajajajajaja

no pico nada :bleh:no como nada

P´os como sigas así te me vas a quedar en el chasis, jajajajajajaja

descuida, sabes que comer como bien, pero no ajo

agecastbet escribió:

Solexite escribió:

agecastbet escribió:
Hola mi amiga!  Parece que te olvidaste de que trabajo mejor bajo presión, así que sentíte libre de presionarme cuando quieras, jajajajajajajajaja
No me tientes, no me tientes, jajajajajaja
Eso intento, eso intento… ¿lo logré? jajajajajajaja
Sole, sole, por tu propio bien no juegues con fuego que te puedes quemar, jajajajajaja y de momento no me has tentado lo suficiente, jajajajajaja

Lástima… creí que lo había conseguido… Por cierto, me encanta el fuego ¿no lo sabías? jajajajajajajajaja


Sigo estando (lo que es bastante, Ja!) Sé que, como siempre, los dejé en vilo y estan esperando la continuación. Te agradará saber que estoy de lleno dedicándome a eso,  así que espero terminar pronto.
Espero impaciente que lo termines pero también sé que me volverás a dejar en vilo, así que no se si arrendar la ganancia de un nuevo capítulo, jajajajaja
Me encanta que me conozcas tanto…jajajajajaja
No se si es conocimiento o temor, jajajajaja

No te asustes (no mucho, al menos), no va a ser tan terrible (creo) jajajajajajaja



Como me decís que no me acuerdo de ustedes? Siempre los tengo presentes cuando me siento a escribir. Y nada de quejas  que ya sabés que no puedo evitar ser un poco retorcida. Es parte de mi naturaleza  y supongo que es eso lo que los atrae de mis historias, sino con lo que tardo entre capi y capi ya la hubiesen dejado de leer hace rato, jajajajajajajaja
Menos mal que solo eres un poco retorcida, que si llegas a ser más nos dejas a todos sin aliento, como a los actores de tu fic, jajajajajajaja, pero eso es efectivamente lo que me gusta, que lo hagas creíble y además consigas siempre mantener el listón tan alto, amén de tus sorpresitas que si que me dejan al borde del abismo, nunca sé por dónde vas a salir y eso sí que me engancha, jajajajajaja
Puedo retorcerme más aun… no me tientes! Jajajajajaja Espero seguir sorprendiéndote con otro de mis capítulos, sé lo exigente que podés ser, jajajajajajajaja
Cuando quieras te pongo a prueba, jajajajaja sabes que siempre estoy predispuesta a darte créditos, se que mis expectativas siempre serán superadas y la verdad con un maromo como Josh, todo puede suceder, jajajajaja
Sabés que siempre estoy dispuesta a rendir examen, jajajajajajaja
En cuanto a la foto… Madre mía que cosita preciosa para comérsela a besos!!!!!!! Con esa barba hermosa y esos mechones en la frente… lo despeino todo, todo…. Y no sigo porque soy una persona seria y debo guardar compostura, jajajajjajajajajaja



Una sola cosa más voy a agregar: ¿Cómo se puede ser tan bonito?
Bueno, basta! Gracias profe por compartir la foto. MUCHAS GRACIAS!!!


Como siempre profe, un placer leerte! Te mando besos y abrazos. Nos leemos pronto.
Bueno si tu dices que vas a seguir pronto, me lo creo, que no eres de las que promete lo que no va a cumplir, y se que cuando hablas lo haces en serio, así que en ti confío para poder leerte pronto.
BESOS Y ABRAZOS también para ti querida amiga

Hacés bien en creerme. Ya tengo escrito más de la mitad y la parte que falta la tengo toda en la cabeza. Sólo me falta transcribirlo y darle unas cuantas vueltitas más… jajajajajajaja
Abrazos amiga!

Pero a qué esperas para transcribirlo???, que quieres que nos muramos todos de impaciencia cuando ya lo tienes en el hormo, deja de darle vueltas que lo vas a marear y luego va a ser peor, sobre todo si se te chamusca, jajajajaja
Bueno pues cuando te apetezca, ya estoy preparada, jajajajajaja
Muchos BESOTESSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS[/quote]

Ojalá fuera tan fácil… tengo toda la idea en la cabeza, pero hay que encontrar las palabras.  Las vueltas son indispensables para darle sabor y que se cueza parejo, jajajajajajajaja  
Muchos besos!!!

Solexite escribió:Genial Sos un cerebrito!!! Por una de esas casualidades ¿sabrás algo sobre placas o interfaces de audio?  
Serías algo así como una enviada del cielo… jajajajajajaja
(Habrás notado que no presté atención al mensaje de tu mami,  ese que dice:"Yo diría que más a joder con la tecnología que a arreglarla, jajajajajaja" Sólo espero haber hecho bien, jajajajajajajaj)

Cerebrito no, pero no se me da mal jeje. Y sí, omite el comentario de ADri..... pura envidia!! jajajajaja además sabe de sobra que cuando suba a verla le arreglaré el suyo y diciendome esas cosas.... no se yo , no se yo jajajajaja

Sí si de esas cosas Solexite, mandame un mail o un MP y dime qué es lo que pasa =)

Besos!

Solexite escribió:

agecastbet escribió:

Solexite escribió:

agecastbet escribió:
Hola mi amiga!  Parece que te olvidaste de que trabajo mejor bajo presión, así que sentíte libre de presionarme cuando quieras, jajajajajajajajaja
No me tientes, no me tientes, jajajajajaja
Eso intento, eso intento… ¿lo logré? jajajajajajaja
Sole, sole, por tu propio bien no juegues con fuego que te puedes quemar, jajajajajaja y de momento no me has tentado lo suficiente, jajajajajaja

Lástima… creí que lo había conseguido… Por cierto, me encanta el fuego ¿no lo sabías? jajajajajajajajaja
No me digas que encima eres piromana, si es que no hay arreglo, por algo te gustan tanto los bomberos, jajajajaja

Sigo estando (lo que es bastante, Ja!) Sé que, como siempre, los dejé en vilo y estan esperando la continuación. Te agradará saber que estoy de lleno dedicándome a eso,  así que espero terminar pronto.
Espero impaciente que lo termines pero también sé que me volverás a dejar en vilo, así que no se si arrendar la ganancia de un nuevo capítulo, jajajajaja
Me encanta que me conozcas tanto…jajajajajaja
No se si es conocimiento o temor, jajajajaja

No te asustes (no mucho, al menos), no va a ser tan terrible (creo) jajajajajajaja
No se yo que hacer si asustarme ahora o dejarlo para después, jajajajajaja


Como me decís que no me acuerdo de ustedes? Siempre los tengo presentes cuando me siento a escribir. Y nada de quejas  que ya sabés que no puedo evitar ser un poco retorcida. Es parte de mi naturaleza  y supongo que es eso lo que los atrae de mis historias, sino con lo que tardo entre capi y capi ya la hubiesen dejado de leer hace rato, jajajajajajajaja
Menos mal que solo eres un poco retorcida, que si llegas a ser más nos dejas a todos sin aliento, como a los actores de tu fic, jajajajajajaja, pero eso es efectivamente lo que me gusta, que lo hagas creíble y además consigas siempre mantener el listón tan alto, amén de tus sorpresitas que si que me dejan al borde del abismo, nunca sé por dónde vas a salir y eso sí que me engancha, jajajajajaja
Puedo retorcerme más aun… no me tientes! Jajajajajaja Espero seguir sorprendiéndote con otro de mis capítulos, sé lo exigente que podés ser, jajajajajajajaja
Cuando quieras te pongo a prueba, jajajajaja sabes que siempre estoy predispuesta a darte créditos, se que mis expectativas siempre serán superadas y la verdad con un maromo como Josh, todo puede suceder, jajajajaja
Sabés que siempre estoy dispuesta a rendir examen, jajajajajajaja
En cuanto a la foto… Madre mía que cosita preciosa para comérsela a besos!!!!!!! Con esa barba hermosa y esos mechones en la frente… lo despeino todo, todo…. Y no sigo porque soy una persona seria y debo guardar compostura, jajajajjajajajajaja
Como sabía que te iba a gustar el niño con barbita, jajajajajajaja, quién dijiste que era una persona seria???, guardar compostura??? desde cuando te han abducido los ........... serios y peripuestos???



Una sola cosa más voy a agregar: ¿Cómo se puede ser tan bonito?
Bueno, basta! Gracias profe por compartir la foto. MUCHAS GRACIAS!!!


Como siempre profe, un placer leerte! Te mando besos y abrazos. Nos leemos pronto.
Bueno si tu dices que vas a seguir pronto, me lo creo, que no eres de las que promete lo que no va a cumplir, y se que cuando hablas lo haces en serio, así que en ti confío para poder leerte pronto.
BESOS Y ABRAZOS también para ti querida amiga

Hacés bien en creerme. Ya tengo escrito más de la mitad y la parte que falta la tengo toda en la cabeza. Sólo me falta transcribirlo y darle unas cuantas vueltitas más… jajajajajajaja
Abrazos amiga!

Pero a qué esperas para transcribirlo???, que quieres que nos muramos todos de impaciencia cuando ya lo tienes en el hormo, deja de darle vueltas que lo vas a marear y luego va a ser peor, sobre todo si se te chamusca, jajajajaja
Bueno pues cuando te apetezca, ya estoy preparada, jajajajajaja
Muchos BESOTESSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS

Ojalá fuera tan fácil… tengo toda la idea en la cabeza, pero hay que encontrar las palabras.  Las vueltas son indispensables para darle sabor y que se cueza parejo, jajajajajajajaja  
Muchos besos!!!
[/quote]

Si fuera fácil no lo harías tú, lo haría cualquiera, jajajajajaja, pero convendrás conmigo que nos dejas avandonados mucho tiempo, y el diccionario de la RAE tiene todas las palabras que necesites. jajajajajaja
Vale te otorgo el tiempo necesario para que el guiso salga bien, pero espero con mucha impaciencia el capítulo, que lo sepas, jajajajajaja
Hasta cuando quieras amiga, que aquí estaremos esperando jajajajajaja
BESOTESSSSSSSSSSSSSS

Yo quiero el siguiente:D t.t que triste!!

Hola a tod@s!!! Acá les dejo el capi. Perdón por la demora (como siempre) Ojalá que les guste…
 
 
Capítulo XIX
 
Entró en su habitación, se dirigió hacia la cama y sin siquiera sacarse la bata  dejó caer de espaldas su cuerpo exhausto, derrotado por la frustración y envuelto en dolor.  Fijó su vista en el techo, traspasándolo, mirando  a la nada misma,  mientras repasaba mentalmente cada minuto vivido desde que ella  había entrado en la habitación de Alessandra,  hasta el momento en que él se marchó del cuarto  donde se encontraba ahora la joven detective.  No podía entender como había pasado de la felicidad absoluta a la más profunda tristeza en tan sólo unas horas.  No podía aceptar que Beckett lo alejase de su lado y ciertamente no podía resignarse  a que todo hubiese terminado así, sin siquiera saber cómo comenzaría.
 
Dio una y mil vueltas en la cama  tratando de serenar su mente anidada de frescos recuerdos, intentando apretar los parpados  para obligarse a dormir. Pero lo único que conseguía al cerrar los ojos era volver a esa habitación, donde ella lo había ido a buscar para decirle cuanto lo amaba, donde él la había saboreado integra, disfrutándola centímetro a centímetro y al abrirlos no podía evitar que su  incansable cerebro rememorara las últimas palabras que se habían dicho.  Miles de sentimientos se mezclaban en su cabeza, miles de preguntas, miles de reproches que inevitablemente recaían en su hija y en Kate,  dos de las tres mujeres más importantes de su vida.  La inoportuna llegada de su familia a los Hamptons, o mejor dicho, el reproche que había sufrido Castle por parte de Alexis,  había provocado un quiebre en lo que sería el inicio de la relación con su musa. Ellas estaban de acuerdo en lo mismo: que estando junto a la detective su vida corría terrible peligro; y probablemente tuviesen razón, pero no habían tomado en cuenta su opinión al respecto, y Beckett  no había querido aceptar las razones que el escritor tenía sobre todo esto. Castle era muy consciente de lo expuesto que podía llegar a estar. Lo comprendía perfectamente, sólo que no le importaba. No le interesaba estar a salvo si no podía estar con ella. No le servía seguir con vida si cada segundo sin su detective era morir lentamente.  Y eso lo atormentaba aun más. Se sentía pésimo al pensar así,  al no importarle su propia seguridad sentía estar fallándole a su hija. Se estaba comportando como un padre miserable y egoísta y Alexis no se merecía eso.  
Demasiado ruido había en su cabeza como para intentar dormir, así que decidió levantarse e ir por un par de tragos, a ver si eso lograba atontar  su mente y así poder esquivar un poco  la situación que tanto atormentaba su espíritu.  Salió de su habitación rumbo al living, sin recordar que inevitablemente pasaría por delante de su puerta.  Al percatarse de ello, ya se encontraba parado frente a la entrada de la habitación. Tuvo el impulso de abrir la puerta; entrar y decirle que nada podría apartarlo de su lado, que si era necesario la raptaría y se la llevaría a una isla perdida en el medio de la nada sólo para que esté a salvo, que haría cualquier cosa, absolutamente cualquier cosa para estar con ella el resto de su vida y otras cientos de locuras más; pero se detuvo. No abrió la puerta, ni siquiera llegó a tocar el picaporte. En lugar de eso cerró su puño con fuerza y lo golpeó contra el marco, reflejando su impotencia. Permaneció inmóvil unos minutos  juntando fuerzas para irse, su madre que había llegado sigilosamente observándolo, se acercó a él acariciando su rostro.
 
-Hijo… - Richard sorprendido, levantó la vista.
-Madre… no te escuché llegar ¿Qué haces aquí?
-No podía dormir y pensé en tomarme un vaso de leche tibia, pero creo que  vendrán mejor  unos tragos mientras hablamos un poco. Ven conmigo.- Martha lo tomó de la mano como si fuese un niño, sabiendo que sin su ayuda quizás hubiese tardado horas en moverse de ahí.
Richard se dejó llevar sin decir nada. Le vendría bien hablar con su madre sobre todo esto. Martha era muy buena escuchando, pero sobre todo sus consejos siempre venían cargados de inmensa sabiduría.
Después de servir un par de vasos de whiskey, Martha se sentó junto a su hijo. El escritor le agradeció el trago, dio un par de sorbos a su bebida  y miró a su madre que aguardaba en silencio. Poco a poco le contó todo lo que había pasado esos últimos días, todo lo malo y todo lo bueno. Le explicó lo feliz que se había sentido cuando Beckett le dijo que lo amaba, que nunca había sentido latir su corazón así al escuchar esas palabras de los labios de una mujer, que con nadie se entendía tan bien, que ella lo completaba en todo sentido.  Luego habló sobre la charla que habían tenido él y Kate en la habitación de huéspedes, contándole como ella lo había apartado de su lado, explicándole que al escuchar al Alexis tan asustada comprendió lo peligroso que podía ser permanecer junto a ella.
 
-No quiso escucharme, madre. No me dio la oportunidad de decidir que hacer, simplemente me dijo que no podíamos estar juntos, que era sumamente peligroso...
-Richard, sé que no lo vas a entender ahora, pero lo que hizo Beckett es la demostración de amor más pura que pueda existir. Ella está sacrificando su felicidad, la de ambos  por mantenerte a salvo… Con esto te está demostrando cuanto te ama verdaderamente.
-Lo sé. Pero aun así,  no me resigno a aceptarlo. Me niego a terminar esto sin que siquiera empiece… No es justo… Y sí, lo sé. Tengo que pensar en Alexis, si algo me pasa…  pobrecita. No quiero ni pensarlo. Sería terrible para ella… pero  madre, no puedo evitar sentir que mi destino está trazado junto a Kate, que debo intentar protegerla para que nada le pase, que debo luchar por ella hasta las últimas consecuencias… Y eso me retuerce la conciencia… sé que estoy actuando mal, que soy un egoísta  y que primero debo pensar en mi hija y en su bienestar, pero se me hace imposible quitarme a Beckett de la cabeza…- el escritor dejó de mirar a su madre y bebió el resto de su vaso. Se levantó del sofá para servirse otro.  Martha lo siguió con la mirada mientras pensaba en todo lo que le había contado su hijo. Se le partía el alma al verlo así, tan afligido, tan vulnerable. Estaba irreconocible, un velo de oscuridad comenzaba a cubrirlo y su madre no podía permitir que eso pase. Pero la situación era complicada, sin lugar a duda, y debía escoger muy bien las palabras que le diría a su hijo para tratar de aliviar su pesar.
 
-Escucha bien lo que te voy a decir hijo: Entiendo perfectamente lo que sientes por Kate. Es amor, sin lugar a dudas. Se nota que la amas con locura y has demostrado que darías tu vida por ella o lo intentarías las veces que fuese necesario. Nunca te vi actuar así por nadie… el brillo de tus ojos cuando hablas de ella es enceguecedor y no me cabe duda de que nunca habías amado a una mujer de esta manera.  Sé también lo infeliz que puedes llegar a ser si renuncias a ella,  y aunque probablemente te resulte más fácil mantenerte a salvo,  sería una decisión que te mataría lentamente. Pero yo tampoco quiero que te pase nada, Richard y al igual que Alexis, no sé qué es lo que haría si algo malo te sucede…
-Tienes razón… debo pensar en ustedes…- dijo con tremenda resignación.- ¿Cómo puedo siquiera pensar en…?- Martha lo interrumpió.
-Aun no he terminado, Richard...- Castle levantó la vista mirando a su madre nuevamente. Ella prosiguió: -… es verdad lo que te dije antes que no quiero que nada malo te pase, pero también es cierto que no sé si soportaría verte así, hecho un paria. Y sé que harás todo lo posible por mostrarte bien y alegre como siempre para hacernos sentir bien. Intentarás volver a tu vida de playboy millonario que tanto te caracteriza, te llenarás de mujeres superficiales envuelto en relaciones intrascendentes que no te llevarán a nada, y sé que hasta volverás con un personaje nuevo, escribiendo una nueva y exitosa saga. Te conozco lo suficiente como para asegurar que será así, pero estarás vacío. Serás solamente una cascara hueca, hijo… y estoy segura de que tampoco aguantaría verte así.  Conociste el amor verdadero y ese  es uno de los más grandes regalos que nos puede dar ésta vida. No a todos los seres humanos se les concede ese obsequio y ciertamente no es algo que pase dos veces en la vida…
- ¿Entonces? ¿Qué es lo que debo hacer, madre? Nunca estuve tan confundido en toda mi vida… siento que estoy caminando sobre una delgada línea, muy al borde de un inmenso dilema moral…  Voy a terminar por volverme loco…- con tan sólo mirarlo podía verse que el escritor no exageraba con respecto a su cordura.
-Debes hablar con Alexis, Richard.
-¿Tú crees? No sería justo para ella, tampoco para ti, madre. Debo hacer lo correcto…- el escritor bajó la vista mirando hacia el suelo.
-¿Lo correcto?- dijo Martha frunciendo levemente el ceño.-Y eso sería sacrificar tu felicidad ¿no es así?-  Rick siguió mirando hacia abajo.
-Sí… ante todo debe estar la familia…
-Estoy de acuerdo en eso. Y dime ¿No te imaginaste nunca a Kate formando parte de esta familia?
-Miles de veces…- una mueca parecida a una sonrisa se dibujó en su rostro al responder.
-Entonces eso es lo que deberás hacerle entender a Alexis. Que tú  la necesitas a tu lado, como a cualquiera de tu familia. Además, hijo ¿no sería igual de egoísta de nuestra parte exigirte que renuncies a tu felicidad para asegurar la nuestra?  Yo al menos no creo poder hacerlo y estoy casi segura de que Alexis tampoco.
-De todos modos,  aunque logre que mi hija entienda todo lo que siento, se me va a hacer muy difícil convencer a Beckett de que me permita seguir a su lado…- comentó apenado.
-Debes llevártela lejos, al menos por un tiempo. Alejarla de aquí para mantenerla a salvo y así tú también lo estarás. No será difícil desaparecer si te lo propones.
-Lo sé y se lo propuse… me dijo que no podíamos pasarnos la vida huyendo.
-Quizá no tendría que ser toda la vida...  es probable que si deja de investigar el caso de su madre, las cosas se tranquilicen y no vuelvan a atentar contra su vida.
 -Sí…yo también lo pensé, sobre todo si tenemos en cuenta de que no parece haber pistas concretas que seguir, pero conociéndola a Beckett hará falta mucho más que eso para que se dé por vencida…-
-El amor que se tienen será suficiente para que lo haga. Sólo tiene que darse cuenta de eso y tú deberás ayudar a que pueda verlo. Es posible que no  te sea sencillo, pero estoy segura de que te la ingeniarás para lograrlo.- Martha acarició su cabeza sonriendo. Esperaba que la conversación que acababa de tener con su hijo sirviera al menos para lograr serenarlo un poco. 
Richard le devolvió la sonrisa y agregó un dulce abrazo. Se levantó despidiéndose hasta mañana y se dirigió a su cuarto. Al pasar por la puerta de Beckett, aminoró el paso e inevitablemente pensó de nuevo en entrar, pero rápidamente se sacó esa idea de la cabeza. No era el momento para hablar con ella, aun no,  así que reanudó la marcha hacia su cuarto. Intentaría dormir ahora que se encontraba más tranquilo.
Ciertamente la charla con su madre había arrancado la mayor parte de la inmensa culpa que sentía. Sus sabias palabras consiguieron que se replanteara toda la compleja situación en la que se encontraba, llenándolo de optimismo. No sería nada fácil hablar con Alexis y mucho menos con Kate, pero por alguna razón se sentía confiado de poder  lograr que ambas lo escuchen.  Y con ese pensamiento esperanzador en la cabeza, se acostó consiguiendo dormirse a los pocos minutos.  
 
 
 
 
Recostada en la cama y sin poder dormir se encontraba la joven detective de homicidios del precinto 12 de New York. La habitación se encontraba a oscuras y sólo un haz de luz proveniente de la ventana permitía adivinar su cuerpo prácticamente inmóvil echado boca arriba. Lloraba en silencio, como lo había hecho durante años. Lloraba con verdadera tristeza, como lo seguiría haciendo cada vez que su orgullo se lo permitiese. Necesitaba desahogarse, vaciarse de angustia, secarse de lágrimas para así poder volver a empezar.
Todo el precioso castillo de cristal estrenado esa misma noche, se había hecho añicos al echar al príncipe. Sólo había durado unas horas en pie, las más asombrosas que había experimentado en su vida, completamente inolvidables.  Había vuelto a la realidad de un golpe. Un golpe durísimo del que todavía intentaba reponerse.
Mañana volvería nuevamente a su vida. Completaría la licencia, iría a las sesiones que le restaban de terapia y regresaría a su trabajo. Volvería a obsesionarse con el caso de su madre, seguramente mucho más de lo que ya estaba, ya que  se le había puesto en la cabeza, que quizá si lograba descubrir al responsable de todo tendría una chance de volver con Castle. Eso claro, si él todavía estaba dispuesto a recibirla. Pero no pensaría en eso ahora, ya habría tiempo más adelante para preocuparse. Ahora debía sacarse a Rick de la cabeza a como diera lugar, de otra forma sería muy duro de sobrellevar toda esta situación que de momento, la superaba ampliamente.
 
La detective escuchó unos pasos afuera, acercándose. Sintió que se le paraba el corazón al notar que se detenían frente a su puerta. -¡Que no sea él! ¡Por favor!- pensó. No quería verlo. No quería tenerlo en frente. Sabía que si él volvía a intentar convencerla de seguir juntos  no podría decirle que no otra vez, no podría resistirse a esos hermosos ojos azules de los que se desprendía la más dulce mirada. No podría resistirse a sus suaves labios de los que salían las más bellas palabras. No podría resistirse a sus fuertes brazos que le ofrecían la más tierna protección. Beckett tenía la absoluta certeza  que si Castle atravesaba esa puerta, no podría de ninguna manera evitar caer rendida a sus pies. Lo sabía y es por eso que no debía permitir que suceda. No era lo correcto. Debía velar por la seguridad de Rick como sea. Y ella sabía perfectamente cuál era la forma. Aunque todo su cuerpo le dijese lo contrario, su cabeza era la que seguía mandando, y ella ordenaba tenerlo lejos.
No recordaba si le había puesto llave a la puerta, así que se levantó muy despacio y sin hacer el menor ruido fue en dirección a ella. Quedó congelada, sin moverse un centímetro más, cuando sintió el puño de Rick impactar contra el marco. Podía sentir la frustración de él, podía atravesar la puerta. Beckett podía percibir el dolor que el escritor sentía, también ella lo vivía en su propia carne. Creyó no poder aguantar el impulso de abrir, creyó que todo su cuerpo se sublevaría  en contra de su cerebro y finalmente se lanzaría a sus brazos, pero se contuvo. Su parte racional siempre había sido más poderosa que su parte emocional. El motín había fracasado rápidamente.
Escuchó la voz de Martha y aguzó el oído.
 
-Hijo…  
-Madre… no te escuché llegar ¿Qué haces aquí?
 
Decidió no escuchar más. No volvería a hacer lo mismo que hacía unas horas atrás. Volvió lentamente a su cama sin hacer el menor ruido e intentó cerrar los ojos para así poder dormir. Estaba exhausta, tanto física como mentalmente. Aun así no le fue fácil conciliar el sueño.
Se levantó apenas escuchó el despertador, lo había programado bien temprano. Lo único que quería era marcharse de ahí cuanto antes, aunque todavía  no sabía si llamaría a Lanie o se tomaría el tren directo a Manhattan.
Decidió que se iría desayunar a la hostería donde se alojaba su amiga. Esperaría hasta una hora prudencial y la llamaría por teléfono. Después de todo, si Lanie se llegaba a enterar de que se había ido sola tendría que escuchar como la regañaba durante un largo tiempo. Además le haría bien hablar con ella de todo lo sucedido, debía desahogarse con alguien si no quería explotar y quien mejor que su adorada amiga Lanie para contenerla.
Llamó a un taxi al terminar de vestirse, juntó todas sus cosas y salió con sus maletas hasta la calle a esperar el auto afuera. No quería correr el riesgo de cruzarse con Castle, debía irse de ahí de inmediato y no tener siquiera la más mínima posibilidad de verlo.
Al llegar a la hostería se acercó a recepción preguntando por su amiga. Un empleado le informó gentilmente que la Dra. Parish se encontraba en su habitación. También le avisó que  había llegado tarde y probablemente se encontrara durmiendo. La detective agradeció la información y se dirigió hasta el pequeño restaurant de la hostería para desayunar mientras esperaba un rato para despertarla.
Se pidió un café con un croissant. No tenía demasiadas ganas de comer, pero realmente resultaban tentadores viéndolos detrás del vidrio del exhibidor. Luego se pidió otro café, miró su reloj y decidió que ya era hora de molestar a su amiga. Tomó el celular y marcó el número de Lanie.
 
El móvil repiqueteaba insistente sobre la mesita de luz. La Dra.  abrió levemente los ojos mientras que con torpeza trataba de encontrar el aparato.  Miró la pantalla y de inmediato miró su reloj. -¿Kate? ¿Tan temprano? No puede ser nada bueno…- pensó en voz alta atendiendo de inmediato.
 
-Hola Kate ¿Por qué tan temprano? ¿Qué es lo que ha pasado?- dijo la doctora incorporándose lentamente mientras se refregaba los ojos.
-Hola Lanie. Siento molestarte… verás surgió algo con Castle y… me vuelvo a New York.- largó Kate del otro lado del teléfono. Su amiga notó la congoja que la detective tenía al hablar.
-¿Cómo que te vuelves? ¿Qué paso? ¿Dónde estás ahora?- Lanie se levantó de la cama como un resorte esperando que su amiga le contestara.
-Estoy desayunando abajo. Si quieres puedes acompañarme… me vendrá bien hablar contigo amiga…
-En 15 minutos estoy allí. Déjame darme una ducha rápida para terminar de despertarme. 
-No es necesario que te apures. Y… gracias.
-Sabes que no tienes nada que agradecer, Kate. Para esto estamos los amigos. Te veo en un rato.-  Lanie cortó la comunicación y se dirigió de inmediato al baño. Al cabo de unos minutos estaba bajando para reunirse con la detective.
 
Al verla llegar, Kate sonrió. Su amiga notó de inmediato la tristeza que verdaderamente ocultaba detrás de esa sonrisa. Inmediatamente después de sentarse, el camarero se paró junto a la doctora esperando para tomar la orden. Lanie pidió un café doble y se dispuso a escuchar a la detective.  Mientras que Beckett relataba lo sucedido en la casa de Rick, Lanie podía ir adivinando porque a su amiga le urgía volver a New York.  Se prometió a sí misma no interrumpirla hasta que terminase de hablar, aunque tuviese que morderse la lengua para no hacerlo.
 
-...le dije que debíamos separarnos. Que era lo correcto…- la detective bajó la vista al recordar el doloroso momento.
-¿Por qué hiciste eso, Kate? ¿Por qué lo alejaste de tu lado?- preguntó indignada Lanie sin poder comprender la decisión que había tomado su amiga.
-¿No escuchaste nada de lo que te acabo de decir? Alexis tiene razón. Castle corre peligro al estar cerca de mí y no puedo permitir que algo vuelva a pasarle. Estoy tratando de protegerlo…
-¿Cómo puedes estar tan segura de que algo va a pasarle?
-Porque ya pasó una vez, Lanie. Pudo haber muerto y tú lo sabes. Si llega a intentar una locura como esa otra vez y no tiene tanta suerte ¿Qué se supone que deba decirle a Alexis y a Martha? ¿Crees que podría vivir con eso?
-¿Y Castle? ¿No dijo nada?- la detective le contó a su amiga como el escritor había intentado hacerla cambiar de opinión,  y como ella había rechazado todas las opciones que él le ofrecía.
-… Me dijo que nos fuéramos lejos de aquí…
-¿Y por qué no aceptaste?
-¿Y alejarlo de sus afectos? ¿Pasar la vida huyendo? No me parece justo…
-Si te lo propuso es porque quiere estar junto a ti, Kate. Estoy segura de que alguna forma hubiese encontrado para mantenerse cerca de sus afectos sin tener que aparecer por New York.
-De todos modos, nada nos garantiza que no nos encuentren. No sabemos en verdad con quien estamos tratando… podría tener contactos por todo el mundo…
-Sí, podría. También podría dejar de buscarte, sobre todo si tú dejas de buscarlo a él. La pregunta es ¿Estás dispuesta a abandonar la investigación sobre el asesinato de tu madre?
-No puedes asegurar que no va a intentar buscarme…
-Tú tampoco puedes asegurar lo contrario. Las dos estamos especulando y ninguna tiene la certeza de nada… y aun no contestaste mi pregunta, ahora que tu vida estuvo en serio peligro ¿Dejarás de investigar?- la detective se la quedó mirando pensando la respuesta. No se lo había preguntado hasta ese momento. Nunca se le había cruzado por la cabeza el dejarlo y en verdad no sabía la respuesta.
-No lo sé, Lanie. En verdad nunca me pregunté eso.- contestó bajando la mirada.
-Entonces, quizá deberías empezar a hacerlo… Es probable que cuando encuentres la respuesta puedas decidir realmente que quieres hacer con tu vida.- La voz de Lanie se tornó de lo más seria. No muchas veces la había escuchado así. La detective volvió a mirar a su amiga frunciendo levemente el ceño.
-¿Qué se supone que quieres decir con eso?
-Simplemente  eso: hasta que no tengas en claro que es lo que realmente quieres para tu vida te la pasarás huyendo.
-¿Huyendo? ¿De qué estás hablando, Lanie? 
-Sí, amiga. No sólo tienes miedo de que Castle resulte muerto por estar junto a ti. Estoy segura de que no sólo es eso,  creo que él tenía razón cuando te dijo que habías perseguido esto durante tanto tiempo que tienes terror de abandonarlo, creo que piensas que al renunciar no podrás brindarle paz a tu madre, y que te sientes culpable de sentir tanta felicidad cuando estas con él … Podrías haber aceptado la propuesta de Rick de largarse de aquí pudiendo mantenerse a salvo, pero tendrías que abandonar la investigación, probablemente para siempre y no pareces estar preparada para hacerlo.
-Para siempre es mucho tiempo… Mi madre se merece que su muerte no quede impune. Se lo debo a mi padre…
-¿Crees que tu padre tiene intención de cobrarte esa deuda que tú sola te impusiste? ¿Tú qué crees  que tu padre prefiere, Kate? ¿Qué logres formar una familia con  el hombre que amas o que sigas persiguiendo al responsable del asesinato de tu madre hasta que lo resuelvas o mueras en el intento? ¿Por qué no se lo preguntas? Estoy segura de que sabes bien la respuesta...- Lanie al notar que estaba elevando su voz, respiró hondo y al largar el aire continuó:- Amiga… no desperdicies tu vida, intenta vivirla. Tienes una oportunidad única de estar con el hombre que más has amado, que tan feliz te ha hecho. Tienes la suerte de que él te ama con la misma locura, que haría cualquier cosa por ti, incluso perder su propia vida intentando salvar la tuya… No puedes dejar pasar esta oportunidad, quizás no tengas otra igual…
-Ya tomé una decisión, Lanie. Y Castle pareció aceptarla… ya no hay vuelta atrás.
-Estás cometiendo un error, Kate… Estoy segura de que tarde o temprano te vas a reprochar esto.  Piénsalo bien, amiga… o al menos inténtalo.
Beckett había agachado levemente la cabeza, escuchando a su amiga, quien parecía conocerla mejor de lo que se conocía ella.
 
-Prométeme que lo pensarás ¿Si?- dijo la doctora intentando que la detective vuelva a mirarla. Beckett levantó la vista y le dijo:
-Te lo prometo… o eso intentaré.
-Sé que lo harás... Voy a buscar mis cosas a la habitación así podemos irnos.
-Ok. Te espero aquí.- la doctora se levantó llamando al mozo para pagar la cuenta. Kate le indicó  que ella pagaría y de paso pediría otra taza mientras la esperaba.
 
A los pocos minutos el camarero se acercó depositando el café en frente de la detective. Beckett estaba tan inmersa en sus pensamientos que el joven la sorprendió con su presencia. Se había quedado pensando en todo lo que le había dicho su amiga, quien había sacado una radiografía perfecta de su situación y le había mostrado algo que ella no veía: la tremenda culpa que sentía al experimentar tanta felicidad junto a Rick, felicidad absoluta que no provenía de la resolución del caso de su madre, el cual había sido el motor que había impulsado  su vida nuevamente tras su asesinato, sino que  provenía del amor más puro que jamás había sentido. Ella se había prometido atrapar al culpable y se había permitido distraerse con Castle hasta el punto de perderse en él, sin poder pensar en nada más que  en disfrutarlo. Sentía que si no seguía con la investigación le estaría fallando a su madre, a su padre, y lo que es peor aún,  a ella misma. Al parecer, su inconsciente se lo había hecho saber al alejar a Richard de su lado, parecía ser la decisión  más fácil, la correcta, pero por alguna razón sentía que no era así.  Definitivamente tenía mucho que pensar,  muchas cosas que ordenar en su cabeza durante estos días por venir.
 
Beckett pagó la cuenta y bebió el café mientras esperaba a su amiga. No había dormido casi nada y el cansancio comenzaba a notarse en la detective. Las tres tazas que se había bebido la ayudaban a mantenerse despierta, pero no estaba segura de poder hacerlo durante el viaje.
La doctora Parish bajó con su maleta en dirección a la recepción para registrar su salida y abonar la cuenta.  Beckett se dirigió con su equipaje hacia la puerta, no sin antes pedirle el ticket del estacionamiento para que le acercaran el auto.
En tan sólo unos minutos estaban arriba del vehículo de Lanie rumbo a New York. Como era de esperar, Kate se durmió al instante en que el auto alcanzó velocidad. Estaba verdaderamente exhausta. Su amiga la miró con ternura comprendiendo la noche que había pasado y la decidió no molestarla. Estaba preocupada por Beckett. Esperaba que la charla que habían tenido hacía un rato hubiese servido para hacerle entender el error que estaba cometiendo, pero conociendo lo cabeza dura que su amiga podía ser, no estaba segura de haberlo conseguido.
 




 
Alexis volvía de la playa con su abuela después de haber disfrutado del sol durante gran parte de la mañana. La habían pasado estupendo, como siempre lo hacían cuando estaban juntas. Martha jamás mencionó la discusión  que la adolescente había tenido con su padre, ya que había decidido mantenerse al margen, permitiendo así que su nieta pudiese analizar con calma toda la situación; pero por alguna extraña razón, Alexis sentía algo de reproche en su mirada. Seguramente se debiera a la conversación  que habían tenido abuela-nieta cuando Castle salió del coma. En ese momento, los argumentos de su abuela habían sido bastante convincentes y le había dado bastante en que pensar. Realmente hasta ella misma se había sorprendido de la reacción que tuvo frente a su padre al enterarse que Beckett estaba ahí  y las cosas desde ese momento habían estado raras. A su padre no lo había visto demasiado desde que habían llegado, en gran parte porque se la pasaba durmiendo la mayor parte del día y durante la noche sólo se veían un rato durante  la cena. Conversaban, bromeaban  como siempre lo han hecho,  hasta intentaban reírse, pero se notaba algo extraño en el aire, que resultaba hasta incómodo. Definitivamente debía volver a hablar con su padre de todo lo sucedido y decidió que esa conversación no debía pasar de hoy.
Llegaron a la casa en pocos minutos, a pesar de que caminaron lentamente disfrutando de la fina arena bajo sus pies. Para su enorme sorpresa, Rick se encontraba despierto tomando una enorme taza de café en el living.  
El escritor sonrió al verlas, las saludo con un beso a cada una y luego se dirigió a su hija y le dijo:
 
-Alex, me gustaría hablar contigo ¿tienes un momento?
-Por supuesto, papá. Yo también quiero hablarte.
-Yo, entonces no tengo nada que hacer aquí. Así que me voy a dar un buen baño…- acotó Martha saliendo de escena como la gran actriz que era.
 
Castle invitó a sentar a su hija junto a él en el sofá. Le costaba empezar a hablar y no sabía muy bien cómo hacerlo, pero lo que sí sabía es que no podía dejar pasar más tiempo para decirle a su hija como se sentía realmente.
 
-Hija…-dijo finalmente.-… tenemos que hablar de la discusión que tuvimos la noche que llegaste…
-Sí, papá. Estoy de acuerdo. Las cosas han estado raras entre nosotros desde ese día…-
-Es verdad y te pido disculpas por eso… Yo he estado raro estos días. Estuve pensando mucho sobre todo esto, Alex. Créeme que se me hace muy difícil. Pero necesito que sepas lo que siento en este momento… Sé cómo te sientes al respecto sobre todo lo del atentado contra Beckett y sé lo asustada que estás, temiendo que algo me pase, pero necesito que sepas lo que yo opino al respecto…- el escritor guardó silenció unos segundos, juntando el valor necesario para seguir hablando ante la atenta mirada de su hija.
 
 – Yo amo a Kate. Mucho, como nunca antes lo he hecho, y siento que la necesito a mi lado, que se me hace muy difícil tenerla lejos…Probablemente no lo entenderás hasta que no te pase algo semejante, pero te aseguro que es lo más increíble que te puede pasar en la vida. No me había sentido de esta forma con ninguna de mis parejas anteriores. Nunca había experimentado tanta felicidad al imaginarme a ella formando parte de esta familia y es por eso que arriesgué mi vida para salvarla, del mismo modo que lo hubiese hecho por ti o por tu abuela si se encontrasen en peligro… Imagino que es lo que piensas, que al arriesgarme por ella no pensé en lo que podía llegar a pasarte a ti si algo me sucedía. Y créeme que eso me tortura desde hace un tiempo, pero entendí que fue algo completamente involuntario, automático,  ahí me di cuenta en verdad cuanto la amaba y lo difícil y dolorosa que sería mi vida sin ella… Beckett opina lo mismo que tú y por eso me alejó de su lado al escucharnos discutir la otra noche, y no sé si podré convencerla algún día de volver junto a mí, pero por lo menos quiero que entiendas que ella no tuvo la culpa de nada de lo que pasó y que lo primero que hizo al enterarse lo que tu pensabas fue dar un paso al costado.
Alexis lo escuchaba en silencio. Podía notar la angustia que tenía su padre por todo esto, también se daba cuenta de lo enamorado que estaba  de la joven detective.  No podía verlo así, no le parecía justo y a pesar de que le preocupaba su seguridad, debía reconocer que los celos hacia Kate también habían colaborado para que ella reaccionara de esa forma.
-Yo quiero pedirte disculpas… me comporté como una niña de 8 años. No fue justa la forma en la que te traté, pero tienes que entender papá, que no quiero que nada te pase y me aterra pensar que al estar junto a ella estás en constante peligro…y al mismo tiempo siento que la detective te importa más que yo y qué harías cualquier locura por ella… No pienses que me siento bien al haber actuado así… supongo que los celos me pusieron de esa forma, pero no puedo evitarlo…
-¿Cómo puedes pensar que me importa más que tú? Eres mi hija, Alexis. Eres la persona más importante en mi vida y nada va a cambiar eso. Te amo desde lo más profundo de mi corazón desde que estabas dentro del vientre de tu madre y nada ni nadie podrá cambiar eso nunca. Eres parte de mí, tienes mi sangre y ese  lazo es indestructible. Y quiero que sepas que aunque me duela terriblemente, si tú me lo pides, yo renunciaré a ella para siempre… aunque sacrifique mi propia felicidad para lograr la tuya. No podría luchar por recuperar a Kate si tú no estás de acuerdo con ello…
Castle había pensado como hablar con su hija desde que él había hablado con su madre. Martha lo había hecho ver las cosas desde una perspectiva diferente y había conseguido aliviar un poco la culpa que sentía. Tenía pensado hacerle entender a Alexis que estaba dispuesto a luchar por su amor  hacia la detective hasta las últimas consecuencias, pero al tener a su dulce niña adelante, comprendió que no podría simplemente huir con Beckett sin la aprobación de ella. Tampoco confesarle que lo mataría por dentro él no intentar recuperarla o el irrefrenable deseo de estar a su lado para protegerla ante cualquier peligro que pudiese atravesar.  No, simplemente no podía.  Sentía que no debía echarle esa tremenda carga sobre sus espaldas a su pequeña hija. No podía llenarla de culpa de esa manera,  tenía que guardárselo para él.
Alexis bajó la mirada y se quedó observando el piso, pensando en todo lo que le había dicho su padre. También recordó la charla que había tenido con su abuela. Poco a poco fue comprendiendo que no podía odiar a Beckett por lo que había pasado, no había sido su culpa y lo entendía perfectamente, pero aun así tenía miedo por su padre. Su abuela le había dicho aquella vez que nadie tenía la vida comprada y estaba de acuerdo con eso, pero también comprendía que tenía más posibilidades de resultar herido si volvían a intentar matar a la detective y él se encontraba cerca.  La adolescente era brillante y como tal, analizaba cuidadosamente toda la situación,  pero además tenía un corazón gigante al igual que su padre, y no podía pedirle que sacrifique su gran amor por dejarla tranquila. Eso sería ser completamente egoísta y no la habían criado de esa manera.
 
- No soporto verte así, papá. Creo que puedo comprender lo que sientes por Beckett, y supongo que debe ser muy duro intentar mantenerse alejado de ella… No creo ser capaz de pedirte que hagas una cosa así… no sé si podría soportar el cargo de conciencia por haberte llevado a tomar esa decisión. No odio a Kate, quiero que lo sepas. Sólo me preocupa tu vida,  pero supongo que tu vida no sería vida sin ella junto a ti…  No creo que puedas amar a otra mujer como la amas a ella, puedo notar la felicidad que desborda de tu mirada cuando hablas de Beckett. Así que creo que debes ir a buscarla y convencerla de que deben estar juntos, pero lo único que te pido es que intentes mantenerte a salvo a como dé lugar… Quizá lo mejor que pueden hacer es desaparecer por un tiempo. Yo podría quedarme con la abuela y viajar hasta donde estés para verte… Te extrañaría muchísimo, pero por lo menos estaría tranquila de que no estarías en la mira de algún francotirador.
-No puedo creer que tengo una hija tan increíblemente maravillosa… e inteligente.  También pensé en que lo mejor era desaparecer por un tiempo, pero al proponérselo a Kate me dijo que no podía permitir que yo abandonara a mi familia para huir con ella…
-No estarían huyendo, sólo escondiéndose un poco hasta que todo se tranquilice. Siempre pensé que si Beckett abandonaba la investigación sobre la muerte de su madre, no vendrían por ella otra vez. No es fácil atentar dos veces contra la vida de un oficial de policía. Quién sabe, en una de esas podrían regresar antes de que pueda extrañarte…-
-Yo opino lo mismo, pero conociendo a Beckett no va a ser fácil que se rinda…
-¡Vamos, papá! No quisiera creer que tú te  vas a dar por vencido, no lo hiciste conmigo, así que no lo hagas con ella. Estoy segura de que podrás convencerla de lo contrario. Y si no lo logras, yo misma iré a hablar con ella para hacerla entrar en razón- dijo la adolescente sonriendo. Richard sonrió también y se acercó para abrazarla con fuerza. Su hija le había demostrado lo madura que era, también le había demostraba cuanto lo amaba al haber aceptado su posible relación con la detective. Se sentía orgulloso de su niña, pero sobre todas las cosas se sentía feliz. Ahora solamente debía lograr que Beckett le otorgara la oportunidad de hablar con ella. Sabía que no sería sencillo, que no querría verlo, pero como le había dicho Alexis, no debía darse por vencido.
 
-Voy a darme un baño, papi ¿almorzamos luego?
-Por supuesto, mi amor. Te prepararé algo rico ¿De acuerdo?
-¡De acuerdo! ¡Volveré enseguida!- dijo la adolescente desapareciendo del living.
 
El celular de Rick comenzó a sonar. El escritor buscó dentro del bolsillo y lo sacó para atender. El número estaba bloqueado y no podía saber quién era, así todo respondió.
 
-Hola.- dijo intrigado el escritor
-Buenos días ¿Es usted Richard Castle?-  preguntó una voz masculina.
-Así es ¿con quién tengo el gusto de hablar?- Castle quedó helado al escuchar la respuesta.
 
 
Había pasado casi una semana desde que la detective había regresado de los Hamptons. Sus días habían sido de lo más oscuros y su tristeza se había duplicado al no atender los llamados que Castle había realizado durante los últimos dos días. También había ignorado los mensajes de texto, borrándolos sin siquiera leerlos. No quería tener ningún tipo de contacto con el escritor hasta no aclarar un poco sus pensamientos. No quería estropear más las cosas hasta no saber que quería hacer de su vida. La charla que había tenido con su amiga le había resultado sumamente reveladora en cuanto al comportamiento que había mostrado frente a Castle. Tenía algo que resolver dentro de su cabeza si no quería contaminar todo lo que intentara en su vida de acá en más.
La detective había tenido hoy su segunda sesión de terapia, pero le costaba demasiado abrirse delante de un extraño. Estaba segura que lo conseguiría, que la terapia le ayudaría, como ya lo había hecho antes,  a superar todo este horrible momento que vivía, pero también sabía que le costaría muchísimo explicar todo lo que sentía su corazón en este momento.
Al llegar a su casa, se dirigió a la heladera para buscar algo de comer. Para variar no había nada interesante. Miró su reloj comprobando que ya era tarde para ir de compras así que tomó su teléfono y llamó al delivery.
En su celular había un mensaje de Josh, al que tampoco había atendido cuando la llamó más temprano. El mensaje decía que necesitaba las cosas que había dejado en el departamento, entre ellas la credencial del  hospital, con la que tenía acceso a ciertas áreas a la que sólo los médicos y las enfermeras podían entrar. Parecía necesitarla urgente, así que la detective le contestó el mensaje diciendo que a primera hora de la mañana le dejaría todo en el hospital.
La comida tardaría al menos media hora en llegar, así que decidió tomar una ducha rápida antes de que el repartidor golpeara su puerta.  Al salir del baño se secó el pelo con la toalla, lo desenredó con el peine y con sus dedos le terminó de dar forma.  Luego se vistió con unos jeans gastados y una remera holgada y salió rumbo a la cocina  buscando algo para beber.
Dos golpes en la puerta interrumpieron su dirección y fue a tender suponiendo que su cena había llegado. Abrió sin preguntar quién era. La expresión de su rostro se transformó de inmediato al verlo.
 
-¿Josh? ¿Qué diablos haces aquí? Te dije que mañana a primera hora tendrías tus cosas en el hospital.- dijo la detective mostrando su fastidio por la visita inesperada de su ex.
-Quise ahorrarte el viaje. Además tenemos que hablar, creo que me debes una explicación ¿No lo crees?- contestó el doctor Davidson entrando en el departamento sin darle tiempo a Kate a que se lo impida.  La detective giró para mirarlo diciéndole:
-No. No lo creo. No te debo absolutamente nada,  Josh y no sé cómo te da la cara para pedirme algún tipo de explicación después de cómo te comportaste. Así, que, por favor, te pido que te retires de inmediato.- a Beckett se le notaba el enorme fastidio que empezaba a sentir al tenerlo en frente.
-Al menos, ya que estoy aquí, tráeme mis cosas.- la detective resopló y se dirigió a buscar la bolsa que había preparado con todas sus pertenencias, después de todo prefería dárselas ahora y no correr el riesgo de volver a cruzárselo algún otro día. Josh la observó irse mientras una sonrisa se dibujaba en sus labios al cerrar la puerta tras de él. Había logrado el primer paso de su estrategia. Había conseguido estar dentro del departamento de Kate.
 
-Aquí tienes.- le dijo al regresar de su cuarto con las cosas. –Ahora vete.- Beckett se mostró de lo más hostil, no quería tenerlo ahí. Se sentía sumamente incómoda y la forma en que él la miraba comenzaba a perturbarla. Josh se disponía a hablar cuando otros dos golpes en la puerta lo interrumpieron.
-Esa es mi cena y el final de tu tiempo aquí. Ya te di tus cosas, así que largo,  Josh.- la detective se dirigió hacia la puerta y abrió nuevamente sin preguntar. Quedó completamente petrificada cuando vio quien estaba parado en frente de ella, y lo único que atinó a decir fue:
 
-¿Castle? ¿Qué haces aquí?
 
 
Continuará…
 
Bueno, espero que les haya gustado el capi. Ya saben que espero sus comentarios, críticas y sugerencias  como siempre! Saludos y hasta pronto!!!!

Se acerca momento incomodo... ojala que Rick no se enfade por ver a Josh alli...
CONTONIA PRONTO

Sabias palabras la de Martha y Lanie. Me gusta que Alexis haya recapacitado y entendido que su padre ama a Kate y que seria muy infeliz si no está a su lado solo por hacerla feliz a ella. 

Que casualidad que le ha dado a los dos por ir el mismo día y a la misma hora, vaya coincidencia!!!!!, jejejeje, ahí va as arder troya. Miedo me da a la reacción que estos dos puedan tener.

Me ha gustado mucho el capítulo entero. A la espera del siguiente 

Sigueee

Vi por la mañana que habías subido capi y no me dio tiempo a leerlo porque sino perdía el bus, estuve todo el rato deseando llegar a casa para leerlo y ahora que lo leí sólo puede decir... Wow! 

En primer lugar hay que reconocer que el capitulo tiene de todo, me han encantado las charlas Rick-Martha y Rick-Alexis, sin duda sus lazos familiares son increíbles, y todo lo que se apoyan y ayudan unos a otros es envidiable, me alegra ver que la pelirroja por fin recapacitó y aprueba la relación de los dos, y todo lo que eso supone, ya dicen que hablando se entiende la gente, y ella sin duda es muy madura e inteligente  Y chapó también por Lanie y por la conversación que tiene con Kate, ¡esa si es una amiga en condiciones! 

En cuanto a la llamada que recibió Castle... ¿quién será? Imagino que tiene que ser grave/importante por la reacción de él, y porque busque urgentemente hablar con Beckett, hasta el punto de volver a la ciudad para ir a buscarla a su apartamento, estoy muy intrigada con eso, pero toca esperar al siguiente

Y Josh, ¡será imbec..!  Ya es mala pata que Rick aparezca justo cuando él está ahí, esperemos que no se lo tome a mal y le de a Kate tiempo para explicarse, porque ya bastante liadas están las cosas como para que se pongan peor... 

En fin, aquí me tienes muerta de ganas por leer el siguiente! 

Jooooo solo pasan k desgracias al final de los capitulos.
Odio al estupido de Josh k no hace k mas k molestar y hacer k las cosas entra Kate y Rick esten mal. Por eso pregunto ¿Cuando mataras a Josh? Es simpe curiosidad nada mas. Y entonzes se muere o no, yo creo k la mejor forma de acerlo es k se clave algo en la cara por "accidente" . Jajajaj
Bueno es un fic estupendo, y me encanta.
Continua cuando piedas k estoy deseando saber k pasa.

tambien me he quedado petrificada con este estupendo capitulo, no tardes y sácame de mi estado

Como siempre espectacular y también como siempre me dejas con ganas de mas así que a esperar toca

Bueno bueno bueno.... el capítulo ha sido todo un lujo de placeres para la vista y la imaginación.

Enhorabuena por el capítulo Sole; has mostrado dos bazas con un final la mar de interesante y dubitativo.

El lado "castle" con sus charlas ha sido muy bueno, has dado el enfoque que una Martha Rogerds daría y a una Alexis como tal.

El lado "Beckett" con Lanie espectacular, y como siempre... una amiga está para lo bueno y para lo malo y para dar siempre consejos aunque a veces no nos guste escuchar la verdda tan clara.

Todo UN DIEZ!

Y se que es todo un esfuerzo sacar tiempo para escribir y además con tanta delicadeza.

Gracias por estos capis pero ya sabes... queremos el siguiente YA!!! jajajajaja no te hagas de rogar .. que te gusta!


Besos!