Completa y Mentalmente Insana *~*

cururi escribió:akjakjkjkajakjakjakjak buenisimo kjakjakjka k manera de reirme me encanto el directo paso de ser acusador a acusado! vamos continua tan pronto puedas k me encanta cada vez mas!

Solo nuestra Beckett puede hacer eso!! Estoy en proceso de pasar ideas a letras   

Sigue

Dije que iba a tardar, estaban advertidas, pero sepan que esto tiene segunda parte y todo ;)Y que saqué un 9 en el examen
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Adrenalina… O.O

- Por cierto, Kate…qué le has dicho al director? – Rick estaba intrigadísimo, y no paraba de molestarla –
- Un pequeño truquito que aprendí…
- Lo usaste en ti o en…otras? – la expresión de Castle solo podía estar mas completa si la baba le caía por un lado de la boca –
- Hmmmm excelente pregunta, Castle… - dice ella mirándolo de forma pervertida, para luego irse tranquilamente a su clase –

Castle se llevó el puño a la boca para contener su imaginación nada decente.
Beckett entró mas que satisfecha a su clase. El periodo de descanso de los exámenes estaba por comenzar, y se moría de ganas por ir a visitar a su madre y a su padre, que llevaban varios meses insistiendo para que se quedara con ellos.
Al llegar al apartamento, se puso a hacer las maletas junto con Castle, que insistió en ayudarla.

- Por cuantos días te vas?
- Una semana, Rick, por qué?
- Te extrañaré…mucho. Lo sabes, no?
- Sí, sabes que yo también te extrañaré – dice ella colgándose de su cuello – pero tengo que ir a ver a mis padres, a ellos también los extraño.
- Lo sé…yo tengo que hacer de niñero con Alexis, y de mucama con mi madre… - dice acercándola a él, sujetándola de la cintura -
- Awwww  - ella lo miraba ladeando la cabeza, haciendo que su cabello cayera desordenado hacia un lado - eres muy tierno cuando quieres….
- Y también puedo ser muy pervertido cuando me lo propongo, sabes..? – dice aferrándola mucho mas –
- Suena bastante bien para mí – dice mordiéndose el labio –

Estaban por besarse, cuando Lanie apareció por la puerta. Se quedó viéndolos, apoyada en el marco, y ellos mirándola a ella, con cara de “y esta loca, que?”
Ella consiguió reaccionar.

- Kate, tus padres han venido a buscarte…
- Sí, voy… - dice ella cerrando la última valija y dándole un beso largo e intenso a Rick – para que no me olvides – le susurra segundos después de hacerle un bonito chupetón en el cuello –
Beckett bajó contoneándose, feliz de tenerlo a él. De que todo fuera tan bien. Lo estaba llevando demasiado bien, Castle era un buen chico, pero era bastante mujeriego. De eso estaba informada. Y haciéndolo esforzarse por re-conquistarla cada día, era su forma de demostrarle que no era una chica mas.
Él se había dado cuenta de ello desde que la conoció. Su forma de caminar, de mirar, de hablar…de besar. Suspiró. No eran las de una chica que pasaría desapercibida ante él.
Katherine Beckett era un desafío constante, y eso lo mantenía pegado a ella. A ese magnetismo que lo volvía loco.


Ella subió al auto, luego de dejar las maletas en el asiento trasero, y se puso a hablar con su padre.
- Y mamá?
- No pudo venir a buscarte, Katy, aunque realmente quería. Estaba muy entusiasmada.
- Oh…. – dice ella bajando la vista –
- Mhmmm
- Cuanto tiempo mas va a seguir en ese caso, papá? Realmente es un laberinto!
- Sí, hija, estuve intentando ayudarla, pero no quiso contarme mucho. Al parecer es uno de esos casos confidenciales que le tocan de vez en cuando.
- Es porque mamá es una excelente abogada…
- Con los años se ha hecho muy reconocida por su media de casos resueltos. Es muy eficaz en su profesión.
- Quisiera ser así en algún futuro.
- Seguro lo serás, Katy, y aún mejor, en lo que a mi respecta. El ADN de Johanna está bien, pero…combinado con el de este ganador… - dice conteniendo la risa –
- Claro, no voy a salir ni pizca de creída… - dice riendo –
- Te apetece ver un partido de baseball?
- Sabes que siempre me apetece -  dice mirándolo extrañada –
- Lo sé, es solo que…a tu madre no le gusta…necesitaba a mi compañera – le pellizca levemente la mejilla –
- Papá…
- Puedes estar a punto de egresarte, pero nunca dejarás de ser mi Katy.
- Lo sé – ella lo abraza y luego vuelve a su lugar – realmente los extrañé mucho.

Martha no dejaba de correr por la casa. Tenía que organizar una gran fiesta por la llegada de su hijo a casa…y por el gran éxito de su best-seller. De cualquier modo, necesitaba hacer una fiesta, hacía mas o menos un mes que no asistía a ninguna. Y eso, para Martha Rodgers, era demasiado.

- Cuidarás a Alexis? – le dijo ni bien lo vió entrar a su casa -
- Sí, pero…no puedes organizar la fiesta en otro sitio? – Castle no había ni dejado el equipaje en el suelo, y ya le estaban tratando como al niñero de turno -
- Lo mejor es organizar la fiesta en tu casa, si sabes a quienes invitar, porque puedes poner las reglas…y romperlas luego, claro. Aparte, no tienes que moverte hacia ningún sitio.
- Como digas, madre…pero no quiero ninguna fiesta. No en casa por lo menos.
- Espera, espera…pero si tú amas las fiestas? Además, si faltas, te pierdes la oportunidad de conocer a muchas chicas…he invitado a muchas muy bonitas…
- Madre…solo me interesa una.
- Así que estás enamorado, y yo no estaba enterada? –
- No es algo que se lo diga a cualquiera…
- Se llama Kate, mamá, es hermooooosaaa – dice la pequeña Alexis mientras corre para que su hermano la cargue en brazos – te extrañé mucho, hermanitooo
- Y yo a ti, enana…
- Así que hasta, Alexis sabe?
- Si, ella no va a publicarlo en la prensa…
- Me vas a decir que esa chica no esta detrás de tu fama…
- Nunca me ha molestado para que la lleve a ningún sitio conmigo. Es una mujer autosuficiente y segura de si misma, que va por la vida tranquila.
- Suena muy bien…y la conoces desde..?
- Principio de año.
- Hace cuanto comenzaron a salir?
- Hace 5 meses ya… - dice sonriendo – y 3 días…
- Eso de llevar los días…yo no llevaba la cuenta, solo cuando llegaban a la semana. – le guiña un ojo – Si organizo la fiesta en otro sitio…vendrás, o no?
- Soy el alma de las fiestas, o no? Pero cuidado con las chicas que traes.
- Por quién me tomas?
- Te conozco, y ahora que sabes que tengo novia…te agradecería que lo respetaras con los invitados.
- Vale…solo a gente cercana.


La fiesta era en un gran salón con un decorado súper llamativo. Un gran candelabro colgaba del techo, haciendo la iluminación muchísimo mas tenue. Ideal para el baile.

Rick entró al salón, intentando no llamar la atención. Se acercó a la barra, y pidió un tequila. Miró la bebida con indecisión. ¿Realmente quería beber?
Antes ni se lo hubiera preguntado. Le daba igual si se emborrachaba, y lo que hacía en ese estado.
Solía irse de fiesta casi todos los fines de semana, y el hecho de que terminara en la cama con una chica distinta cada noche, le daba igual. Para él era normal, no se sorprendía en absoluto.
Pero ahora…cada vez que miraba una copa, pensaba en Kate, si llegaba a embriagarse, y cometer una estupidez. No, Beckett era una chica fantástica. Extraordinaria. No se perdonaría a sí mismo hacerle eso.

Martha entra con un Martini en la mano, y se acerca a Castle.
- Hijo…no bebes nada? A estas alturas siempre estas… - apunta el dedo índice hacia arriba y lo gira –
- No quiero beber mas, madre…
- Wow…ahora realmente quiero conocer a Kate. Dejar de beber? Tú? Eso no me lo creería de no estarlo viendo –
- Pues aquí me tienes…
- Rick? – una voz familiar se acerca a la barra, y lo abraza –
- Bueno…yo me voy… - Martha se aleja y se pone a hablar con un par de amigos –  
Castle no sabía quien era, realmente no tenía ni idea. Lo había abrazado de la nada, Beckett no era. Se alejó un poco.

(entra Kira a la fiesta, y se acerca para intentar retomar la relación con él, la rechaza, y se pone a pensar en un futuro con Beckett)


- Y cuándo vemos a mamá? – pregunta Kate desde el baño -
- Tú arréglate, Katy. – responde Jim frente al espejo, intentando anudarse la corbata -
- Pero sabes que voy a tardar… -
- Tenemos tiempo, créeme. –  continúa intentando -
- Bueno, da igual, ya estoy lista. – Beckett sale vestida relativamente simple, con unos vaqueros, unas botas color negro, y una camisa. Pero en ella se veían de maravilla – después de todo este tiempo, aún no sabes anudarte la corbata, papá?
- Es culpa de tu madre…me ha malcriado…
- A ver… - ella se acerca, trae otra corbata, y se la anuda en un par de minutos – ahora explica eso de “malcriarte”
- Tu madre y yo comenzamos a salir a los 16 años…cuando comencé a usar corbata, ya estaba viviendo con ella, por lo tanto…
- Ahhhh – Kate se va hasta su antigua habitación y busca algo en sus maletas – en ese caso, entonces mi regalo de cumpleaños atrasado para ti, es el correcto.
Beckett le da una pequeña caja con un gran lazo rojo. Jim la abre entusiasmado, pero su expresión cambia a desconcierto en cuando lo abre.
- Katy…esto qué es?
- Mira… - ella saca la corbata de la caja – ya esta anudada perfectamente, y… - le rodea el cuello con una parte, y luego acerca el nudo, que se prende – y se prende con botón.
- Eres una genio… - dice abrazándola –
- Ya puedes darte por emancipado, papá –
- Que haría sin ti, mi pequeña – le da un beso en la cabeza – Ven, que ya es hora de irnos al restaurante –



- Kira? – dice mirándola sorprendido –
- Qué, no me reconoces, Rick? Cuando supe que vendrías quedé muy sorprendida – suspira – realmente hace…mucho tiempo…
- Sí, no te veía desde…
- Desde eso…sí…yo…realmente estuve pensando en ti.
- Si?
- Y has…conocido a alguien? – ella se acerca un poco mas –
- Y tú? – dice alejándose lentamente, simulando ver las bebidas de la barra –
- Un par de relaciones pero… - se acerca de nuevo – nada que no pueda dejar…
- Yo estoy en una relación. – dice intentando no sonar demasiado dubitativo –
- Y es algo serio?
- Como un ataque al corazón. – dice sonriendo al recordar a Kate –
- Y no…hay ninguna posibilidad de…
- No. Discúlpame Kira.
- No, déjalo, esta bien… yo solo…quería descartar…
- Descartarme? Pues hazlo.  – dice con naturalidad –
- De verdad es serio? Piénsatelo bien Rick, porque si me dices que no…no volverás a verme –
- No tengo nada que pensar, Kira
Ella se fue de la fiesta. Y Rick se quedó en la barra. No quería a nadie mas, la quería a ella.
Ese momento para Castle, fue uno de esos en los que clavamos la vista en el infinito, y nos perdemos en pensamientos.
¿Realmente me ha cambiado tanto? Si, sin duda.



- Tu madre tendría que estar aquí – Jim estaba mas preocupado que de costumbre. Hacía ya una hora que estaban esperando, Johanna era en extremo puntual. Y mas tratándose de su hija –
- No contesta su teléfono – dice Kate con el móvil en la mano –
- Tenemos que guardar la calma…seguro quiso ir a casa para arreglarse y se durmió – intentaba relajarse Jim –
Beckett miraba hacia la calle. Luego su teléfono, quería, esperaba, un mensaje al menos. Guardó su móvil en el bolsillo, y fue ahí cuando este mismo comenzó a sonar.
Kate miró con alegría el indicador de la llamada, y luego atendió.
- Mamá? – dice felíz, pero su tono cambia al instante al escuchar la respiración agitada de su madre – Estas bien?
- Hija, escúchame, alguien me sigue, al salir del estudio pude verlos, y ahora estoy escondida en…oh no.
- Mamá? Qué ocurre?! – Beckett estaba totalmente desesperada – Dónde estas?
- Estoy…estoy en…estoy a 2 manzanas de casa.
- Entonces entra! – Kate no entendía nada –
- Los…los estaría guiando a nuestra casa, hija… -
- Si saben donde queda tu estudio, no supones que también saben donde vives?
- No creo hacer tiempo.

Ella reaccionó de repente. Que hacia todavía ahí? Entró al restaurante y le sacó las llaves del coche a su padre, que intentó hablarle, sin mucho éxito.
No tenía tiempo para dar explicaciones. Subió al coche y aceleró.
Le daba igual el tránsito. Los coches la gente que le decía de todo por el exceso de velocidad. Solo quería ver a su madre sana y salva. Estaba cansada de quedarse esperando.


Johanna corría desesperadamente. Estaba tras un viejo contenedor de basura, y sentía pasos a su alrededor. Cuando escuchó el ruido alejarse, se asomó a ver. No había nadie. Salió de su escondite, con mucha precaución. La calle estaba terriblemente desierta, y eso no era bueno.
Caminó despacio,  procurando no hacer ningún ruido.
Vio acercarse a un hombre con mucha decisión hacia ella, atravesando la calle. Quiso correr, pero sus piernas no le respondían. Menos cuando este sacó un cuchillo de su chaqueta.
Ella observó con pánico el particular brillo que tenía la hoja. Por qué no respondía su cuerpo? Quería salir de ahí inmediatamente, y no podía. Desde pequeña tenía un miedo hacia los objetos con filo, y no le favorecía en ese preciso momento.
Vio dos luces paralelas que se acercaban a toda velocidad. Y también como el cuerpo de su atacante era arrollado por un coche. SU coche.

Kate había actuado de forma instintiva. Había localizado a su madre, y a un sujeto acercándose peligrosamente a ella. No, no iba a pensárselo dos veces. Aceleró a todo lo que pudo, y cerró los ojos por un momento al sentir ese cuerpo chocando contra el parachoques.

- Mamá, sube, que nos vamos. – dice con mas pánico que Johanna, que por poco se cae –

PUTA MIERDA NO HAY SEXO
;(
Gracias x no matar a Johanna cuando tuve un ataque de miedo.
Te amo, deja lo de los fantasmas .
Pd: cantas genial

JOOODEER, pedazo de capitulo, que pasada de principio a final, lo único malo, es que NECESITO MAAAAS!! SIGUE CUANDO PUEDAS, PERO QUE SEA PRONTO, PLIIIIIS!!!    

Eso estuvo genial! K buen aventon le dio al idiota ese jajajaja. Continua pf

Sgueeeee

   
Salvó a su madreeee!! Gracias por haber salvado a Johanna, no sabes, me
hubiera dado algo si ese hubiera sido el momento en que la asesinan.
Me tuviste al borde todo el tiempo     

Miinn_19 escribió:   
Salvó a su madreeee!! Gracias por haber salvado a Johanna, no sabes, me
hubiera dado algo si ese hubiera sido el momento en que la asesinan.
Me tuviste al borde todo el tiempo     

estoy muy de acuerdo contigo

oye, como hiciste lo de Castle con tu nombre?

Que genial!! Johanna está viva!! y lo que es mejor, Kate la salvó!! solo me queda decir gracias y continua pronto

juro que pense que la matarias!!!! que bien que llego kate

Me estoy poniendo de lleno a terminar el capi que sigue, les juro que se me complica bastante con los putos examenes   

Caskett1123 escribió:

Miinn_19 escribió:   
Salvó a su madreeee!! Gracias por haber salvado a Johanna, no sabes, me
hubiera dado algo si ese hubiera sido el momento en que la asesinan.
Me tuviste al borde todo el tiempo     

estoy muy de acuerdo contigo

oye, como hiciste lo de Castle con tu nombre?

Me lo hizo una chica en twitter. Si se lo pides, lo hace con mucho gusto. El costo, un simple follow para ella
@angelcosta78 este es su Nick   

Les cuento, aunque quizá a casi nadie le interese que tuve 3 pruebas esta semana, y tengo 4 en la siguiente. Puto cierre de trimestre. Y por eso tardé tanto. Bueno, por fin subo el capi, asi que disfrutenlo.

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Adrenalina… O.O (Parte 2)



- Mamá, sube, que nos vamos. – dice con mas pánico que Johanna, que por poco se cae –
Su madre subió rápidamente al auto en cuanto consiguió reaccionar. Ella volvió a acelerar, y fue rumbo a la comisaría, pero su madre la detuvo.

- No hija, no vayas…
- Pero qué dices?! Tenemos que informar a la policía de esto, mamá, intentaron asesinarte!
- Si los alertas de que estoy viva, mandarán a mas personas a por mi, no adelantes el tiempo.
- Es solo la policía!! En qué estas metida, mamá?! – su madre bajó la vista – es por ese estúpido caso, verdad?
- No puedo decírtelo, hija…estarías en el mismo peligro que yo.
- Y a quien podemos decirle?
- Por ahora, a nadie. Dónde esta tu padre?
- Lo dejé en el restaurante. – dice ella recordando minutos atrás -
- Y te llevaste el auto?! – Johanna abrió los ojos como si le hubieran mostrado un prototipo de bomba atómica -
- Mamá, no es momento para que me sermonees, vale? – Kate corrigió el rumbo hacia donde estaba su padre –

Jim estaba fatal. Su hija se había ido, y su esposa también. Estaba solo, sin referencia alguna de donde, y con quien estaban sus dos tesoros. Observó la barra de bebidas del lugar. Un trago no le haría daño para calmar un poco los nervios y pensar mejor.
No, le había prometido a su esposa no volver a beber desde el incidente.
Él se había ido de fiesta con unos amigos, y había regresado a la casa ebrio, no había reconocido a su propia mujer, y casi golpea a Kate, que en ese momento tenía solo diez años.
Johanna había tomado a su pequeña del brazo, y se habían ido. Ella le dijo que si seguía bebiendo así, no iba a quedarle otra alternativa que dejarle, y fue entonces cuando Jim recapacitó.
Ahora realmente necesitaba un trago. Necesitaba a sus hijas, qué estaba diciendo?! Las quería a ellas, a su esposa, a su pequeña Katy.

Beckett bajó del coche a toda velocidad, su padre estaba de pie al lado de la barra, y se quedó mirándola extrañado. Entonces ella le tomó del brazo, sin dar explicaciones, y lo arrastró por poco hasta el auto. Jim estaba en el asiento trasero. Sorprendido aún. Reaccionó cuando escuchó la dulce voz de Johanna.

- Jim? – ella estaba a su lado en el asiento trasero, y al verse, y comprobar que ambos estaban bien, se abrazaron –

Kate sonrió al verlos por el retrovisor. Qué hubiera sido de ellos de haberle pasado algo a su madre…se reprimió el impulso de pensar eso. No, lo importante era que estaba con su familia de siempre.
- Mamá… - dijo cuando ya llevaban unos minutos conduciendo – qué ocurrió? Tienes que contarnos del caso para que podamos ayudarte a pensar en una solución.
- Yo, hija…
- Jo…va a ser mejor que nos cuentes.
- Recuerdan el caso que estoy llevando, verdad? – tomó aire – al parecer es mas importante de lo que cualquiera puede suponer. Este caso es…abarca…
- Es mas grande. – resumió Kate –
- Déjala hablar, Katy –
- Hay alguien muy influyente detrás de todo esto. Es quien controla todo lo vinculado a mi caso. Y si lo resuelvo…
- Vas a arruinarle todo lo que ha planeado, que le ha resultado de maravilla –
- Pero…es tan influyente como para que no podamos siquiera avisar a la policía?
- Podríamos, pero se enteraría de alguna manera. Tiene demasiados contactos.
- Y eso como lo sabes?
- Me han amenazado.
- Y no nos habías dicho?! – ahora el enojado era Jim –
- Siempre recibo alguna que otra amenaza, no serviría en mi trabajo si hiciera caso a cada amenaza que cualquier pirado me manda.
- Pero estos no son ningunos pirados, madre. Son personas que, como ya hemos visto, no dudarán un segundo en matarte, o enviar a alguien para que lo haga –
- Espera…intentaron matarla?! Pero por qué siempre me dejan al último?! – él estaba mas desconcertado que de costumbre –
- Enviaron a un matón para que la… - ella tragó saliva – apuñalara. Déjalo papá, basta. No quiero hablar de eso.
- Pero yo sí quiero saber, como sabes lo del apuñalamiento, están heridas, qué ocurrió con el sujeto? Puede seguirnos y…
- Lo arrollé con el coche – dijo Kate intentando sonar menos orgullosa –
- QUE?!
- QUÉ QUERÍAS QUE HICIERA?! – dice ella fuera de sí – Iban a matarla, y de no ser por mí… - una lágrima cae por la mejilla de Beckett –
- Bueno, ya…basta de hablar del tema, lo importante es que estamos todos bien – su madre toca el hombro de Kate y de su padre al mismo tiempo. Quería que supieran que, pase lo que pase, ella estaba ahí. Que eran su familia. –
- Pero… - Jim no podía parar de pensar – qué haremos ahora? Jo, qué piensas hacer?
- Supongo que voy a tener que retirarme del caso – dice mirando al infinito – la familia siempre está primero, siempre.
- Hasta que te retires oficialmente, seguirán buscándote. Regresar a casa ya no es una opción. – continuó él –
- Se me ocurre un sitio donde podemos ir – dice Beckett –


Rick se encontraba con la vista perdida. Kate había prometido llamarlo, ya había pasado una hora y no tenía noticias de ella. Seguro estaba con sus padres, y se le había olvidado. No la culpaba.
Todas las veces que iba a su apartamento, se quedaba viendo las fotos que Beckett tenía colgadas en la pared. Su familia era muy unida, y se notaba a kilómetros.
Esa fiesta era mas para su madre y sus amigos que para él. Había hecho lo que nunca creyó posible en años: volverse de una fiesta temprano. Se había quedado en el sofá, y desde ahí vigilaba las calles de New York.
Bajó la vista hacia la calle y vio detenerse un coche muy familiar. No se detuvo a pensar y salió disparado hacia el ascensor.


- Podemos no, Katy, puedes.
- Pero tenemos que estar los 3 juntos! – dice mirándolos con decisión –
- Nosotros vamos a ir a casa de tu tía Teresa. – explica Jim – Lanie nos dijo que podíamos dejarte en esta dirección, que estarías bien en caso de emergencia.
- Y tú cuando hablaste con… - observa el teléfono con What´s App abierto en la mano de su madre – Eres un peligro cuando te topas con la tecnología, mamá… - dice esbozando una sonrisa, cosa que puso felices a todos en el coche –
- Hija, hay muchas cosas que necesitamos hablar en privado con tu padre, importantes. Y queremos que tú estés relajada, y a salvo mientras.

Kate bajó del coche con un bolso en la mano, y cara de preocupación. Estaba muy arreglada como para venir de cualquier sitio. Estaba por tocar el timbre, cuando lo vio aparecer por la planta baja, para abrirle la puerta.

Rick no podía contener su emoción, por fin volvía a verla, luego de un par de días, pero realmente la necesitaba. Observó como ella se aproximaba a la puerta, al mismo tiempo que una mano salía del coche, y la saludaba, también vio como Beckett observaba con tristeza el coche. Algo no andaba bien.

Ella lo saludó y Castle le cargó el bolso camino al apartamento. En el ascensor, el ambiente era tremendo, Beckett no tenía esa sonrisa que a él tanto le gustaba, estaba muy seria, y con los ojos algo vidriosos. No le dirigió la palabra hasta que estuvieron dentro del apartamento.

- Hola… - dijo mirando al suelo, pero él no la dejó seguir hablando y la abrazó con fuerza –
Beckett no opuso resistencia y lo abrazó colocando sus manos en la espalda de él, con sus brazos bajo los de Rick  -

Él no la conocía de esa forma, tan vulnerable y frágil. Es que era una mujer fuerte, quizás lo había sido demasiado tiempo para la edad que tenía.
Todo tiene su límite y Rick estaba presenciando el de Beckett.
Se quedaron en silencio, abrazados, escuchando solo el sonido de sus respiraciones. Castle quería saber que le había ocurrido, en qué estaba pensando para llegar a ponerse así. Quienes venían con ella en el coche? Quizá eran unos familiares, además de sus padres. La mente de Rick daba vueltas y vueltas. Su imaginación de escritor se inventaba un sinfín de historias basadas en nada, y eso no era lo que ellos necesitaban en ese preciso momento.

- M-mamá… - ella intentaba decirle qué le ocurría, pero las lágrimas comenzaron a brotar solas –
- Shhh, shhh – le palmeaba delicadamente la espalda – cuando estés mejor me cuentas, vale? No me gusta que estés asi… -

Beckett odiaba mostrarse asi ante la gente, pero sobretodo con Rick. La idea de que se preocupara por ella, de que se pusiera triste, culpa suya, le molestaba mucho. Se había estado haciendo la fuerte por mucho tiempo, y eso tenía efectos secundarios.
Se aferró mas a él, quien la apartó por unos segundos para verle el rostro. El maquillaje se le había corrido, y tenía una lágrima en la mejilla. Él se la secó con el pulgar.
- Ven, Kate, siéntate. – Castle la llevó al sofá y se fue a la cocina. Mientras, Beckett se puso a ver las fotos que había sobre la mesa, estaba él con Alexis, con su madre, pero no había indicios de un padre en ninguna foto. Es mas, Rick estaba en muchos eventos donde correspondía la presencia de un padre. Y la de un esposo en muchas fiestas. – te hice un café – dice extendiéndole una tasa con la cara de un gatito. Ella inhaló profundo, era café, pero podía percibirse un fondo de chocolate. Él sí que sabía como hacer que se relajara – cuéntame bien que ocurrio…cuando te sientas lista, claro.
- Yo… - tomó aire – mi madre es abogada. Está trabajando en un caso muy importante.
- No te dio detalles?
- No, y, al principio, eso fue lo que me sorprendió, ella siempre me habla de su trabajo, me explica los casos, y yo intento ayudarla. Pero este caso…
- Era diferente de los otros.
- Aún ahora, luego de lo que pasó…no quiere darme detalles… - Kate hablaba para sí misma –
- Y…qué pasó? –
- Ella… - los ojos de Kate se llenaron de lágrimas de nuevo – habíamos quedado para ir a cenar con mi padre, y no llegó.
- No me digas que…
- No. Por suerte no, estaban por apuñalarla, Rick. A unas pocas manzanas de casa.
- Y cómo sabes eso? – Castle intentaba no sonar preocupado -
- Porque lo ví…me avisó por teléfono, y fui a buscarla con el coche de mi padre…y la encontré paralizada a un lado de la calle.
- Kate…le… - ahora el nervioso era él – le ocurrió algo?
- No, pero estaba paralizada, yo arrollé al tipo con el coche… - dice lo último en voz baja, pero Rick lo escucha de todos modos –
- Fueron con la policía?
- Eso es lo que me preocupa, Rick…mamá dijo que no le avisara a nadie, porque el caso era muy gordo, y si se enteraban de que estaba viva aun, mandarían a mas gente a por ella. Me dijo que no adelantara las cosas.
- Y cómo…pero…no hay nadie seguro?
- Eso es lo que me preocupa, me dejaron aquí, y se fueron a casa de mi tía para hablar de cosas “importantes” que, por supuesto, no quieren decirme – Beckett dejó la tasa en la mesa y volvió a abrazarlo – tengo miedo, no sé que va a pasarle a mi familia ahora…
- Sé que es difícil, Kate, pero por ahora intenta calmarte…relájate, asi puedes pensar con claridad. Ahora están todos bien, y seguro a tus padres se les ocurre una forma de apartarse de ese caso, y asi quedan inmunes.
- Supongo… -Beckett no estaba muy convencida, pero decidió que hacerle caso a Rick iba a ser lo mejor para ella –
- Quieres ir a dormir? Se esta haciendo un poco tarde. Yo puedo dormir en el sofá, si es que necesitas espacio y…
- Por favor, te necesito mas que nunca, Rick, duerme conmigo – dijo abrazándolo mas fuerte –
- Ahí estaré, no te preocupes.

Se recostaron en la cama de Rick. Ella se amoldó a su cuerpo. Se sentía protegida, cálida. Comenzó a cerrar sus ojos, pero escuchó unos pasitos inquietos en el comedor. Castle ya se había dormido, así que se levantó despacio.
Alexis estaba hecha bolita en el sofá, mirando las fotos, con un peluche de casi su altura en la mano.
- Lex? – Ella la vio y fue con alegría hacia Beckett – Estas bien?
- Si, Kate, es solo que tuve una pesadilla y…Rick siempre esta por aquí…y…pensé que…
- Mira, esta dormido, pero yo puedo hacerte compañía en el sofá si quieres, y me cuentas bien la pesadilla.
- Vale – dice sonriendo –

Rick se despertó al día siguiente. Su cama estaba vacía. No veía a Kate por ningún lado. Le parecía muy raro que se fuera sin despedirse.
Fue hasta el comedor, su bolso seguía ahí. No se había ido, pero…¿dónde estaba?
Caminó en silencio hasta el comedor. Pateó algo. El peluche gigante de su hermanita, no podía dormirse sin esa cosa. Se acercó mas hacia el living. Alexis y Beckett estaban durmiendo en el sofá. Kate abrazaba a la niña, que dormía sobre ella.
Castle fue a por su cámara y les sacó una foto. No sabía bien si era cierto o no, pero podría jurar que ambas estaban sonriendo.

   
Pero que maravillosisisismisidad!! :3 ....
sigue PORFAVIUUURS ... Sigueeee!!     

QUE BONITOOOO  , ESE RICK TAN ATENTO CON SU KATE!!   Y EL FINAL, PRECIOSO    Me encanta cuando los dos estan juntos, es tan de pareja normal y corriente!!

Awwww<3 que liindo... sigue pronto me encanta como escribes!!

que capitulo tan mas lindo,espero que todos vayan a estar bien

Sigueee

bellisimo el final del capitulo! esto 2 son mas tiernos!!! continua pronto porfis!

Chicas, este capitulo que sigue voy a tardar en subirlo. razon? se me rompio la puta netbook, y tengo que mandarla a arreglar. aviso desde ya que estoy escribiendo el capi en el movil, asi lo transcribo en cuanto tenga la net :3 las quiero

Sigue porfavor !!

Ok tu tranquila

Ya volvii! Lo que tenía el aparato este era leve, y me la devolvieron. Ni bien la tuve en mi poder, comencé a escribir y transcribir este fic. Espero que les guste. Muchísimas gracias por esperarme   

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Cazador Cazado


Kate despertó por el aroma a waffles que impregnaba el living. No tenía que ser detective para saber de donde venía. Alexis se movió un poco sobre su pecho. Dormía profundamente, y sus mechones pelirrojos caían desordenados sobre su cara. Le colocó un mechón tras la oreja, y ella se movió un poco.
Era tiempo de levantarse. Estiró su mano hasta que tocó el suelo. Algo tenía que encontrar para salir sin despertarla. Volvió a verla. Se veía tan tranquila, tan apacible. No quería interrumpirle eso. Encontró algo suave, era el peluche gigante. Salió de a poco, y, antes de que ella sintiera el vació, reemplazó su espacio por el del peluche.
Caminó lentamente hacia la cocina, procurando no hacer nada de ruido.
El aroma la guiaba. Hasta podía percibir la miel.

Rick estaba preparando el desayuno. Al levantarse y ver a sus dos chicas descansando, se había inspirado para cocinar. Además, al otro día no había clases, razón mas que suficiente para estar feliz.

Beckett se acercó hacia donde estaba, y tuvo que reprimir el impulso natural de morderse el labio, solo porque era demasiado temprano. Castle estaba cocinando, si, pero solo con unos viejos jeans gastados, descalzo, y no, no llevaba camisa.
- Veo que ya estas despierta – dice feliz mientras mueve una sartén de lugar –
- Lex duerme como un tronco… - dice intentando no ser tan obvia mientras lo mira –
- Lamento decirte esto pero…podrías despertarla por mí mientras termino con los waffles? – le suplica con su infalible cara de cachorrito –
- Vale… - dice haciendo cara de enojada. Hace dos pasos en dirección al living, y voltea justo a tiempo para ver a Rick, que estaba muy entretenido viéndole el culo –
- Este…yo…estaba…  - dice señalando el vacío –

Ella se aleja riendo.  Aún no sabía como lo hacía, como siempre conseguía hacerla sonreír, sin importar lo que le pasara.

Alexis dormía abrazada al peluche. Beckett se acercó y comenzó a trazarle pequeños círculos en toda la cara con sus dedos. La pequeña arrugó la nariz y comenzó a protestar.
- Kate…es muy temprano…
- Lo sé…sabes que si fuera por mí, seguirías durmiendo, verdad?
- Sí… - dice aabrazándose a ella y volviéndose a dormir –
- Venga, despierta… - le pása un dedo por el cuello, haciéndole cosquillas –
- Me llevas a desayunar?
- Cómo? – ella le extiende los brazos, y Alexis se sienta en el sofá y le indica con su pequeño índice que se de la vuelta – Ahhh, ya entendí…

Cuando Rick vió asomarse por la puerta a Kate, lo primero que estaba por preguntar, era donde estaba su hermanita. Pero no hizo falta. Beckett avanzó un poco, dejando ver que Lex estaba en su espalda, de lo mas cómoda.
Él le indicó que se acercara a donde estaba, y cuando ambas estuvieron cerca de él, pasó una cuchara colmada de miel por delante de la nariz de Alexis, quien no tardó en detectar el aroma, y meter la cuchara en su boca a velocidad récord.
- Que ricooo – dice ni bien terminó de tragar –
- Todavía falta lo mejor, pero primero ve a sentarte… - ella se bajó de la espalda de Kate y fue corriendo a la mesa – Quieres? – dice con la cuchara cargada – debe ser duro ser la mula de Alexis…
- Llámalo como quieras…pero me gusta – dice metiéndose la cuchara en la boca. Rick hizo lo mismo con otra cuchara, y luego dejaron ambas en la cocina – Rick, tienes… - le señala un lado de su boca –
- Donde? – dice con toda inocencia, intentando limpiarse, pero sin acertar –
- Aquí… - ella desliza su dedo índice por la gota de miel, y luego se lo lleva a la boca –
- V-vale…gracias – él traga saliva. Esta chica cada vez comenzaba mas temprano –


- Rick, hoy tengo una pijamada! – dice contenta Lex –
- No eres muy pequeña para eso? – le dice él alzando una ceja -
- Que no…además mamá dice que puedo ir… - suelta como ultimo recurso -
- A casa de quién vas? – le pregunta mientras se sirve jugo de naranja -
- Jenny – dice terminando de comer su último waffle -
- Vale, voy a llamar a sus padres para que me digan a qué hora debo pasar por ti…
- Entonces puedo ir? – ella quería confirmar 100% -
- Si… - dice mientras termina de recoger la mesa -
- Bieeeeen – dice aplaudiendo y dándole un sonoro beso en la mejilla a su hermano –
- Ya sabes qué vas a llevar? – dice Kate –
- Emmmm…me ayudas? – pone la misma cara de cachorrito que Rick -
- Con todo gusto! – exclama Beckett levantándose de la mesa – luego te ayudo con los platos – dice guiñándole un ojo a Castle –

Al cabo de unos minutos, ambas chicas regresan del cuarto de Alexis con un bolso color rosa.
- Qué llevan ahí? – pregunta él, curioso como siempre –
- Mi pijama de los Muppets, mi oso de peluche…
- Dios, ese oso… - dice cargándola en brazos –

Cuando volvieron a la casa, había un silencio terrible. Sin Lex, estaba todo muy callado, tranquilo. Martha aún no volvía, y había mandado un mensaje al móvil de Rick, diciéndole que se quedaría un par de días en la casa de un amigo.
Mientras regresaban de casa de Jenny, habían hablado de ir al parque, o a tomar algo. Pero el clima había pasado de nublado, a lluvioso. Y llegaron con la tormenta tras ellos.

- Ya que…estamos solos…no se te ocurre nada que podamos hacer? – dice desde el sofá, mirándola con complicidad –
- Ahora que lo dices, sí. – dice ella buscando algo en su bolso, hasta que finalmente lo encuentra y lo deja sobre la mesa con total entusiasmo –
- Póker, en serio? – Rick tenía esa sonrisita triunfadora en su cara –
- Strip-Póker – termina ella mirándolo de forma provocador. Sí, tal como lo imaginaba, la sonrisita mega-confiada de su rostro, se borró para dar paso a la expresión de asombro –
- Estas segura…? Mira que soy muy buen jugador… - volvió la sonrisita -
- Que bueno, no me gustaría que jugaras en desventaja – dice desafiándolo con la mirada, a la vez que le alcanza el mazo – Baraja.

Castle trae las fichas y comienza a mezclar las cartas.
- Sabes las reglas? – le pregunta mientras mezcla –
- Pues claro…jugamos Hold’em? -
- Como guste… - dice dejando el mazo -


Ya habían pasado 4 rondas, ambos eran muy buenos jugadores. Aunque…claro, Kate tenía puesto el sujetador y los vaqueros, y Rick solo su camisa.
Última ronda.
Castle observa sus cartas, era una buena mano, pero tenía que ver que tocaba en el River.
- Mi resto. – Kate se veía tremendamente confiada –
- Mi resto. – dice mirándola –
River.
La expresión de Kate cambio de triunfo a una sonrisa traviesa. Rick la observaba triunfante desde el otro lado de la mesa. Flor Imperial.

Beckett se puso de pie y se subió a la mesa. Castle tendría la mejor jugada, pero…ella tenía lo suyo.
Desabrochó uno por uno los botones de sus vaqueros, y luego los deslizo hasta quedarse solo con las bragas. Se dio la vuelta delante de él y desprendió su sujetador, para luego tirarlo a un lado.
Castle estaba tragando saliva. Madre mía. La había visto desnuda muchas veces, pero siempre encontraba la forma de dejarlo babeando. Era imposible aburrirse con ella.

Se acercó mas y colocó su dedo índice en el pecho de él. La distancia se mantenía, pero el ángulo cambiaba, ya que el escritor cada vez se inclinaba mas por la presión de ella.
Cuando lo tuvo recostado en el sofá, se incorporó, colocando sus pies uno a cada lado de Rick.
Se estaba dejando llevar, y esa era la mejor parte. Las bragas se le deslizaron por la piel, hasta que levantó primero un pie, y luego el otro, para finalmente sacárselas de encima.

No era fácil ocultar su reacción natural ante tanta vista. Y menos sin llevar nada bajo la camisa. Pero Kate no había terminado aún. Lo tomó por las solapas, elevándolo de nuevo. Caminó hacia atrás con él hasta llegar a su habitación. Cerró la puerta con el pie, sin dejar de devorarlo con la vista.
Con toda relajación, fue desprendiendo uno por uno los botones de la camisa de Rick.
Castle no soportaba mas tanta tensión, el tira y afloja lo volvía loco, ella lo volvía loco. Con su sensualidad y sus jueguecitos que lo ponían al límite en minutos.
Quizo ayudar a acelerar el proceso, pero ella se llevó el dedo a los labios, luego a los de él, para finalmente indicarle que no, frente a sus propias narices.

Terminó de abrirle la camisa y se mordió el labio inferior con tan solo pensar en todo lo que harían. Pasó sus manos por el pechó de él, hasta rodearle los hombros, y ayudar a quitar finalmente la prenda.

Rick respiraba audiblemente. Dejó las manos en el pecho de él, y la boca muy cerca, respirándole sobre el cuello.
Levantó la vista para verlo, tampoco iba a soportar mucho, pero estaba intentando ver cuanto podía llegar a tolerar él.
Castle le rodeó la cintura y la acercó aun mas a él. Sintió el calor de su piel contra la suya. Ahora la respiración audible fue de ella. El escritor comenzó a darle besos en el cuello, y luego descendió hasta sus pechos. Beckett se arqueó  en cuanto percibió su lengua sobre uno de sus pezones, pero él no estuvo ahí mucho tiempo, volvió a subir hasta que llegó a su boca, se detuvo milímetros antes y la esquivó. Dejándola deseosa de un beso. Finalmente volvió, pero fue Kate la que amagó esta vez. Le sonrió divertida.
La tomó de la nuca, introduciendo directamente su lengua, acción que ella acompañó con la suya. Continuaron devorándose hasta que cayeron en la cama de él.
Beckett se puso a horcajadas sobre Rick y siguió besándolo. Gimió en su boca en cuanto él se introdujo en ella.
Comenzó a masajearle los pechos, para luego besarlos. Kate tiró la cabeza hacia atrás, para luego tomarle el rostro entre sus manos y volver a besarlo. Después comenzó a bajar con los besos, pasando por su cuello, su pecho, sus abdominales, y luego subir hasta su boca de nuevo, pasando su labio inferior por la piel de él.
Empezaron a moverse, y lo hizo delirar con sus movimientos de cadera. Sonrió de forma maliciosa en cuanto lo escucho ahogar un leve gemido. Aceleraron el ritmo, y la Castle la sujetó por la cadera, profundizando cada embestida.
- Oh, por Dios! – se escuchó decir Beckett en cuanto vio venir ese orgasmo que iba a dejarla desplomada –
Cerró los ojos, y siguió moviéndose. Sus sentidos se fueron anulando uno por uno, hasta que solo quedó el tacto. Lo sentía, en cada milímetro de su piel. Su calor. Empezó a jadear con mas frecuencia.
Se desarmó completamente sobre él, gritando su nombre.
A él le pasaba lo contrario, todos sus sentidos estaban alerta, y todos se vieron totalmente estimulados por ella, lo que lo llevo a su propio éxtasis.

Se quedaron en silencio unos minutos, jadeando hasta que pudieron volver a hablar y sus respiraciones se relajaron.
- Te extrañé mucho, Kate – dice él acariciándole el pelo, mientras ella relajaba la cabeza en su pecho –
- Yo también, Rick, no te imaginas cuanto – dice volviéndose a acomodar –

Castle sonríe, mirando el techo. Sí, realmente la había echado de menos. Ese par de días que había pasado sin ella, no había hecho mas que pensarla. Su sonrisa, sus ojos, sus gestos, su forma de mirarlo, su aroma. Toda ella lo volvía loco.  
Así eran las cosas, y no lo dudaba. Le encantaba.

- Cazador cazado – pensó recordando lo que le habían dicho Ryan y Espo la última vez que lo vieron todo cursi – pues eso.
Beckett había profundizado la respiración, se había quedado dormida. Él dio un largo suspiro y cerró los ojos, para por fin poder conciliar el sueño tranquilo.

Me encantaaaaa!! Pero me voy a darme una ducha fría.....