Buscando una nueva vida (Actualizado 11/12/2015)

Jajajajajaja, ni perros ni peras, que bueno!!! Me parece a mí que como Alexis y Kate se alíen Rick lo va a pasar muy mal, jejejejeje.
Me alegra que la parte de la familia de él se haya tomado bien la noticia de la relación
Espero que puedas continuar pronto.

19:16:38 10.04.2015

Que buen capitulo, y martha como siempre no se le pasa nada ...menos mal alexis se tomo bien la noticia sobre la relacion de kate y rick...ahora viene la union de las 3 mujeres para hacer sufrir un poco a rick alexis encontro una fran aliada..sobre todo si ya tenia pensado salir con scott ...

asi que continua super pronto porque esto esta mejor que nunca

Sigueeee

Me encanta!!!! Y si Rick va a sufrir un poquito cuando Kate y Alexis se pongan de acuerdo

06:38:59 10.10.2015

quiero un nuevo capitulo...por fiiiiiiisssssssssssss un nuevo capitulo pronto, ha pasado mucho tiempo ..quiero saber que pasaaaaaa.....

Buenaaas! He tenido una semana estresante sin apenas tiempo y no he podido escribir hasta el fin de semana. Muchísimas gracias por vuestros comentarios, me alegra y me hace muy feliz que os guste tanto!  
Os dejo con el capítulo!! Nos vemos 
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Kate se despertó a media noche al escuchar un ruido. Rick parecía no haberlo escuchado, pues seguía durmiendo. Se intentó incorporar, pero aunque su costilla estuviera mejorando día a día, todavía le seguía doliendo. Al final pensó que no sería nada y intentó volver a dormir. Otro ruido, esta vez como de una cerradura abriéndose y Kate ahí ya no pensó que no era nada. 
-Rick. –Llamó al escritor. –Rick despierta, he escuchado un ruido. –Le avisó ahora.
-¿Un ruido? –Preguntó arrastrando las palabras.
-Sí, como si alguien estuviera abriendo la puerta. –Estaban hablando en susurros. Rick se incorporó de golpe y cogió el móvil.
-Toma, voy a mirar a ver que es. Si es necesario llama a emergencias. –Kate asintió sintiéndose inútil por no poder ni incorporarse. Rick salió de la habitación sigilosamente y hubo un momento en que no se escuchó nada. De pronto se escuchó un golpe seco, como si alguien hubiera sido golpeado y posteriormente hubiese caído al suelo. Kate se alarmó y marcó el número de emergencias, pero no le dio tiempo a ponerse el teléfono en la oreja ya que de repente entró Maddox a la habitación con una pistola en la mano apuntando directamente hacia ella.
-Maddox. –Fue lo único que pudo decir Kate.
-Un placer volver a verte. –Dijo este con una sonrisa macabra. Se fue acercando hacia ella, y Kate no podía moverse porque le dolía demasiado la costilla. 
-¿Qué le has hecho a Rick? –Preguntó ahora con más firmeza, aunque estaba realmente preocupada por él.
-Nada que no se pase con un poco de hielo. Me he portado bien y todo con tu romeo. –Se mofó. Kate apretó los dientes con impotencia y Maddox se seguía acercando a ella y ahora estaba a su lado apuntándola directamente a la cabeza.
-¿Cómo has escapado? –Preguntó Kate para ganar tiempo.
-Sinceramente fue coser y cantar. En comisaría no hay mucha seguridad de noche. –Al acabar de decir aquello, cargó el arma, y Kate no sabía qué más hacer para entretenerlo.
-¡No! –Gritó Rick de repente, con una mano en la cabeza, allí donde había sido golpeado anteriormente. Fue corriendo hasta Maddox y éste no dudó un segundo en desviar el objetivo y disparar a Castle en el pecho. Kate se puso la mano en la boca y ahogó un grito mientras las lágrimas empezaban a salir de manera descontrolada. –Kate. –Dijo Rick en apenas un susurro.
-No, Rick, por favor. -Kate no podía controlar los sollozos, y la costilla le dolía más y más y Rick cerró los ojos, ya sin vida y Maddox volvió a apuntarla con la pistola y esta vez sí que apretó el gatillo.
-Kate. Despierta. –Kate abrió los ojos bruscamente y se encontró con la mirada preocupada de Rick. –Ha sido una pesadilla, ya pasó. –Castle la abrazó y le secó las lágrimas con las yemas de los dedos. -¿Quieres hablarlo? 
-No ahora mismo. –Se sinceró Kate. Se quedaron unos instantes en silencio, Rick abrazando a Kate y ella recordando el mal trago del sueño.
-Pues lo mejor que podemos hacer ahora mismo es dormir. –Rick abrazó más fuerte a Kate, aunque sin llegar a hacerle daño. –Si necesitas cualquier cosa, lo que sea, solo di mi nombre tres veces y allí estaré. –Bromeó ahora Rick, cosa que hizo reír a Kate.
-Gracias. –Soltó Kate.
-¿Por qué? 
-Por todo. Por hacerme reír incluso cuando yo lo veo todo negro, por mimarme tanto, más de lo que deberías, debo añadir. –Bromeó ahora ella. Rick se rió.
-Siempre. –Acercaron sus caras hasta besarse tiernamente. –Y ahora a dormir que es tarde. –Y tras decir aquello apagaron la luz y se volvieron a dormir, abrazados, y Kate no volvió a tener más pesadillas.
Rick fue el primero en despertarse, la mañana siguiente. Eran las diez de la mañana, aunque eso tampoco le alarmó mucho. Se levantó tranquilamente y fue directo a la ducha, dándose un corto baño. Luego se afeitó y se vistió. No quiso despertar a Kate para que descansara lo máximo posible. No sabía que había soñado, pero solo escuchó que gritaba su nombre y lloraba, así que se lo pudo imaginar.
No hizo el desayuno porque no sabía a qué hora se despertaría Kate, pero se hizo un café y se puso a escribir. Era la primera novela que no era de Derrick Storm y por eso intentaba que fuera lo más atrayente posible, con una trama intrigante y personajes muy característicos. Por el momento le estaba gustando el resultado, y eso que por el momento llevaba medio libro escrito. Estaba tan ensimismado en la escritura que no se dio cuenta que Kate estaba detrás de él.
-Buenos días. –Saludó abrazando como pudo a Rick por la espalda.
-Hey. –Rick giró la cara para encontrarse con la de Kate y darle un beso. –No deberías forzar tanto la costilla aunque me encante que me recibas así por las mañanas.-Sonrieron ambos. Kate se sentó en la silla de al lado y dejó las muletas apoyadas en la mesa.
-Es que no aguanto más tener que ir por ahí sin poder moverme. –Se quejó Kate.
-Piensa que te queda una semana para ir al médico y si todo está bien, que supongo que lo estará, podrás hacer vida normal. 
-Una semana todavía es mucho. –Volvió a quejarse Kate. Rick se rió ya que parecía una niña pequeña que ni tiene su juguete. –Además ¿qué voy a hacer cuando pueda hacer vida “normal”?
-Pues hacer todas esas cosas que no has, y hemos, -levantó las cejas múltiples veces. –podido hacer hasta ahora.
-Ya. –Kate se quedó pensativa un rato, tanto que Rick se empezó a preocupar.
-¿Estás bien? –Le acarició la mejilla suavemente.
-Eh sí, es solo que tengo dudas respecto a mi trabajo. Llevo más de un año sin ser policía, y ahora que tendré el alta, tengo que pensar seriamente si volver o no. 
-¿Te hacía feliz hacer lo que hacías? –Preguntó Rick.
-La verdad es que sí, y no por la parte negativa del trabajo, claro. Pero darles justicia a las víctimas y a sus familiares, era de lo más gratificante. 
-Entonces creo que ahí tienes tu respuesta. –Dijo Rick sinceramente. -¿De eso iba la pesadilla de anoche?
-En parte sí. Venía Maddox aquí y primero te mataba a ti cuando tu intentabas que no me hiciera nada y yo no podía hacer nada para evitarlo. Es algo que también me da miedo de volver al trabajo. Si sigo investigando a Bracken y eso hace que vayan a por ti o a cualquier pesona que me importe, no me lo perdonaría jamás.
-Sabes que eso no ocurrirá. Están teniendo mucho cuidado en cuanto a eso. Ya sabes que han imputado a Maddox y a Matt por solo secuestro y no han dicho nada de Bracken o de la relación con el caso de tu madre. Además que tenemos a Andrew y a Jake vigilándonos las 24 horas del día. –Le recordó Rick.
-Tienes razón, Rick. A veces le doy demasiadas vueltas a todo cuando no debería. –Dijo Kate con una sonrisa triste.
-Anda, ven aquí. –Dijo Rick y la abrazó durante unos minutos. Después se dieron un profundo beso, cargado de amor y pasión y Kate se sintió feliz por tener a Rick a su lado. 
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Dudas, dudas y más dudas.... Pero Kate es así 
Suerte que tiene a Rick para que se las resuelva!
¿Qué os ha parecido? 
En el próximo, es posible que Kate ya pueda hacer vida "normal"

Que susto y que miedo con la pesadilla... que monos son los dos... capi super romanticon (exceptuando la pesadilla claro)...m me gusta mucho... continua

10.12.2015 07:51:47

wow regresaste y que buen capitulo , casi me da un ataque con la presencia de maddox...por suerta solo era una terrible pesadilla .. espero con ansias el siguiente capitulo y la vuelta a la "normalidad" en la vida de kate...espero que esta semana no se tan estresante y te de tiempo de subir un nuevo capitulo

Menos mal que todo ha sido una pesadilla. Esperemos que pronto Kate vuelva a ser la persona que era y deje de tener esos sueños tan escalofriantes. Menos mal que ahora cuenta con Rick que no la dejará nunca.

Sugeee

Perdonadme muy muchoo!  estoy teniendo unas semanas muy a tope y no tengo tiempo para nada. Tengo el capítulo a medias y espero tenerlo acabado antes del viernes, pero no sé si podré hacerlo.
Me disculpo una vez más y espero veros pronto

No te preocupes. Entendemos que no siempre hay tiempo para escribir. Esperaremos

10.21.2015 20:58:26

ANIMO y no te apures, igual seguire esperando(aunque si es mas pronto mejor ) porque esta historia no me la pienso perder, asi no tengas mucho tiempo libre, asi que tranquila que aqui esperaremos el siguiente capitulo...

Hola!!! Antes de dejaros con el capítulo quería daros la gracias por vuestro apoyo y paciencia hacia mi. Me animáis a seguir capítulo a capítulo aunque no sepa qué escribir, así que MUCHÍSIMAS GRACIAS!!!
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-Las heridas superficiales han cicatrizado correctamente y su problema más grave, es decir la fractura de costilla, se ha curado con normalidad y en principio no debería tener molestias. –El doctor estaba leyendo el informe mientras una Kate nerviosa y un Rick expectante le escuchaban con atención.
-¿Entonces ya puedo hacer vida normal? 
-En principio sí, aunque sobretodo estas primeras semanas procure no forzar mucho por si acaso. –Explicó. Kate y Rick se miraron sonrientes ante la noticia y se levantaron después de que lo hiciera el doctor. –En recepción le esperan los papeles con el alta y los resultados.
-Muchas gracias, doctor. –Kate le tendió la mano a modo de despedida y luego Rick repitió el proceso. Fueron a recepción y Kate firmó los papeles del alta, mientras Rick leía los resultados de las radiografías a su lado.
-Bueno, pues ya podemos decir oficialmente que estás completamente bien. –Dijo Rick mientras entraban en el coche. Él, por si acaso, la ayudó a acomodarse por si le dolía o algo.
-Pensé que nunca acabaría. –Rick ya había puesto el coche en marcha y se dirigían hacia el loft entre las muy transitadas calles de Nueva York. Estuvieron un rato en silencio, aunque no fue incómodo, sino más bien un simple silencio. De pronto sonó el móvil de Kate, asustando a la pareja por el repentino sonido.
-Beckett. –Respondió como hacia cuando era policía, y al principio le hizo gracia por la naturalidad con que lo hizo.
-¿Qué hay chica? ¿Ya tienes el alta? –Era Lanie.
-La tengo en mi mano ya firmada. 
-¿Y qué tal? ¿Qué se siente al volver a la normalidad?
-Pues de momento estupendamente. Oye, ¿qué tal si quedamos para comer y hablamos mejor?
-Esa es la iniciativa, chica. Yo salgo en media hora, ¿qué te parece si quedamos en ese restaurante de al lado de comisaría al que íbamos tanto?
-¿El italiano? –Preguntó Kate mientras se le hacía la boca agua de pensarlo.
-Ese mismo.
-En media hora estoy allí. –Y colgaron.
-¿Me dejas solito a la hora de comer? –Le preguntó Rick con voz de niño y cara de pena.
-¡No pongas esa cara para que cambie de idea! –Se quejó Kate en broma. –Además, aunque sé que eres muy guapo y que no me cansaría nunca de ver tu cara, creo que debemos empezar a ser una pareja que lleva un mes saliendo, es decir, en cuanto pueda me volveré a mi apartamento y veremos como lo vamos llevando.  –Explicó Kate.
-¡¿Qué?! ¿Y qué voy yo a hacer sin ti tanto tiempo?
-Yo no he dicho que no nos veamos. Solo digo que un día puedo ir a dormir a tu casa y tu otro día a la mía, y así también probar como otro tipo de convivencia.
-Bueno esa idea ya me gusta más, pero si quieres volver a tu apartamento, tendremos que pasarnos antes a limpiarlo a fondo porque tanto tiempo cerrado... –Sugirió el escritor.
-¿Qué tal si vamos mañana? 
-Por mi perfecto, siempre y cuando tú no fuerces mucho. –Kate sonrió a Rick por preocuparse tanto por ella y Rick le devolvió la sonrisa. Llegaron al restaurante donde había quedado Kate con Lanie y Rick salió antes que ella para ayudarla a salir. –No hace falta que me ayudes, ¿no ves que ya tengo el alta? –Dijo Kate en broma.
-No, no señorita, todavía vas a tener que aguantar un poco más de mimos extra. –Le replicó Rick.
-Bueno, tampoco me importa tener mimos extra. –Kate ya estaba de pie fuera del coche y estaban uno en frente del otro. Se acercaron un poco más hasta que se dieron un breve y tierno beso.
-Buen provecho. Y saluda a Lanie de mi parte. –Se despidió Rick.
-Gracias. –Se volvieron a besar. –Se lo digo de tu parte. Adiós. –Y tras un breve beso en la mejilla entró en el restaurante a esperar a Lanie. Rick se metió de nuevo en el coche y se dirigió al loft.
Kate no tuvo que esperar mucho a su amiga, pues no tardó ni dos minutos en llegar.
-Qué puntual chica. –Dijo Lanie nada más entrar.
-Venía con Rick en el coche directamente del hospital. –Explico la amiga. 
-¿Te ha acompañado al médico? –Preguntó Lanie con una sonrisa pícara. Kate sin querer se sonrojo, gesto que no paso desapercibido por la morena. No pudo hacerle la pregunta ya que el camarero vino a tomarles nota del pedido. Cada una pidió un plato diferente y el camarero volvió a irse.
-¿Y tú qué tal? –Trató de cambiar de tema Kate.
-No me cambies de tema guapa, que tu amiga no es tonta. Dime qué pasa entre Rick y tu antes de que te lo diga yo. –Kate quería contarle que estaba con Rick desde hacía un mes, pero no sabía qué le parecería a él.
-Eh, yo... –No sabía qué hacer.
-Vale te lo voy a decir yo entonces. ¿Des de cuando os besáis en los labios cada vez que os despedís? Porque hace un rato os he visto y estabais monísimos.
-¡Qué! –Dijo Kate boquiabierta. Los clientes de al lado se giraron para ver si todo iba bien, lo cual hizo sonrojar más aún a Kate, que les pidió perdón.
-Estos ojitos lo ven todo así que ahora que confirmamos relación sentimental, quiero saber más. –Lanie estaba poniendo nerviosa a Kate, pero en parte le gustaban esas charlas donde ella negaba y su amiga deducía por sí sola.
-Bueno pues empezamos el día que estuve en el hospital, él me dijo que después de lo que me había pasado no quería ignorar más sus sentimientos hacia mí, y como yo tampoco quería eso, pues empezamos. –Explicó Kate.
-Así que me lo has estado ocultando un mes... –Lanie le puso, en broma, cara de asesina. En ese momento reapareció el camarero y les trajo el pedido, le dieron las gracias y se fue. -¿Y qué tal es en la cama? –Lanie fue directa, lo cual casi hace escupir la comida a Kate.
-¡Lanie, qué he estado convaleciente! 
-Bueno, quien sabe, cosas peores he visto. 
Después de que Kate le hiciera una mueca a Lanie, siguieron un rato más hablando de Rick y de su relación, y luego hablaron de Lanie y fue el turno de Kate para preguntarle por ella y Javi, y Lanie rehuyó del tema tal y como había hecho ella anteriormente.
Al acabar de comer pagaron a medias la cuenta y cada una se fue a su casa, prometiéndose en quedar otro día para comer. 
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Lanie siempre se entera de todo 
¿Qué os ha parecido?

Lanie siempre tan atenta, se da cuenta de todo... Jejejeje... Me encanta...

A esta Lanie no se le escapa una, está en todo y sino con su mirada asesina se lo saca
Espero que puedas continuar pronto.

23:06:53 10.24.2015

me alegra que regresaras con un nuevo capitulo ya extrañaba esta historia...es sorprendente la capacidad que tiene lannie para descubrir todo y no quedarse con las ganas...continua pronto...

Siguee

Buenaaas! Siento estar tardando tanto en actualizar, espero que no sea por mucho más tiempo  . Sobre el capítulo solo deciros que no estoy muy satisfecha con él ya que podría haberlo hecho mejor pero prefería actualizarlo antes y no tardar más. También agradeceros el apoyo en vuestros comentarios, sois geniales!
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Kate se despertó al primer rayo de luz de la mañana. Se desperezó en silencio y observó unos segundos cómo dormía Rick. Tenía un pelo sobre la frente así que delicadamente, y con una sonrisa traicionera, le colocó el pelo en su sitio. Luego se levantó y se puso la bata antes de salir al comedor. Todavía no se había levantado nadie, lo cual era lógico ya que era muy pronto para ser fin de semana. Hizo dos cafés y les dejó preparados otros dos para cuando Martha y Alexis se levantaran. Luego miró en la nevera y cogió los ingredientes necesarios para hacer tortitas. Hizo también de más para Alexis, ya que Martha no solía comer nada de buena mañana. Exprimió un par de naranjas e hizo dos zumos. Para acabar cogió dos piezas más de fruta y puso el completo desayuno en una amplia bandeja la cual llevó hasta la habitación donde Rick seguía durmiendo. Kate dejó el desayuno en la mesita de noche y empezó a despertar a su novio.
-Rick. –Le acarició suavemente la mejilla. –Despierta. –Rick se movió un poco y gruño un poco aunque todavía no abrió los ojos.
-Cinco minutos más... –Rogó arrastrando las palabras. Hubo un momento de silencio en el que Kate no sabía si dejarle esos cinco minutos más o despertarle directamente. No le dio mucho tiempo a tomar una decisión puesto que Rick volvió a hablar. -¿Eso que huelo son café y tortitas. –Se incorporó tan rápido como pudo y examinó la habitación.
-Por eso te venía a despertar. –Le respondió Kate. –Hoy te lo traigo yo a la cama. –Dijo, mientras cogía la bandeja de la mesita de noche y la apoyaba en la cama. Acercaron sus caras hasta darse un suave beso en los labios. –Buenos días. 
-Buenos días. Vaya, qué buena pinta tiene todo. –Y tras decir eso, empezaron a desayunar entre besos y caricias.
Pocas horas después y ya desayunados, se encontraban en el apartamento de Kate, la cual al principio se sintió algo nostálgica por tantos buenos recuerdos que había vivido ahí. Rick quiso dejarle unos minutos de privacidad y no presionarla mucho.
-¿Empezamos? –Sugirió ella unos minutos más tarde. Rick asintió y se pusieron manos a la obra. Primero empezaron limpiando a fondo, ya que el apartamento había cogido mucho polvo con el tiempo. Estuvieron un par de horas sin parar, solo para cambiar alguna canción de vez en cuando. Así que pararon la música y se sentaron en el sofá, agotados.
-Al menos lo peor está hecho. –Dijo Rick, el cual tenía la cabeza echada para atrás. Kate asintió y cerró los ojos con cansancio. Estuvieron un rato sin hablar, solo descansando hasta que el teléfono de Kate sonó.
-Beckett. –Respondió todavía con los ojos cerrados.
-Hola Katie, sé que ayer ibas al médico pero me fue imposible llamarte. ¿Cómo estás?
-Hola papá. Bien la verdad, ayer me dieron el alta y me siento muy bien. ¿Qué tal tú por Washington?
-El juicio de momento va bien pero hasta la semana que viene no estoy de vuelta. ¿Qué te parece si cuando vuelva quedamos para comer? Puede venirse Rick si quiere, hace tiempo que no le veo. –Jim sonaba amable. 
-Claro, ya se lo diré. –Afirmó su hija. –Adiós papá.
-Adiós Katie. –Y colgaron.
-¿Tu padre? –Preguntó Rick aunque ya sabía la respuesta.
-Aha. –Respondió Kate. –Vuelve la semana que viene de Washington y nos ha invitado a comer.
-¿A los dos? –Preguntó Rick sorprendido.
-Sí, me ha dicho que hacia tiempo que no te veía. –Kate rió al ver la cara que había puesto Castle. -¿Todo bien Castle?
-Sí, es solo que, ¿no sabrá que estamos juntos? 
-No creo. Ha estado fuera muchas semanas. Aún así creo que sería conveniente decírselo en la comida.
-¿Tú crees? –Castle sonaba preocupado y eso hizo reír más a Kate.
-¿De verdad te da miedo mi padre? 
-¿Debería tenerlo? –Castle cada vez hacía preguntas más tontas.
-¡Pero si ya le conoces! –Kate estaba que se desternillaba de la risa. –No creo que cambie mucho vuestra relación por mucho que la nuestra si que haya cambiado.
-Que sepas que no me dejas tranquilo. –Admitió Rick, dramatizando un poco. 
-Aish, como eres a veces. –Kate se acercó más a él y le dio un beso en la mejilla antes de abrazarle. –Tú que no dudaste en poner tu vida en peligro para venir a salvarme, tienes miedo de lo que pueda decir mi padre sobre nuestra relación. Y confía en mi, no creo ni que se sorprenda. –Contó Kate.
-En ese caso, ya me quedo tranquilo. –Dijo Rick. Acercaron sus caras para darse un suave pero cariñoso beso en los labios.
Pidieron algo de comida para llevar y se pusieron a comerla en el sofá, ya que era el sitio más cómodo. Al acabar tiraron los cacharros y tras un breve descanso de media hora, acabaron de limpiar y ordenar el apartamento de Kate. Rick fue quien más trabajó, pero porque no quería que Kate forzara mucho, ya que, aunque tuviera el alta, todavía no estaba al cien por cien. Aún así ella hizo mucho, porque no quería que Rick cargara con todo el trabajo de limpiar un apartamento que  no era suyo. Acabaron a media tarde por lo que decidieron empezara a hacer la cena una vez se ducharan.
-No solía cocinar mucho antes. –Explicó Kate mientras cortaba la verdura. –Llegaba a casa y pedía algo por lo que apenas utilizaba la cocina. 
-¿Y te perdías el placer de preparar la cena? –Preguntó Rick.
-Cuando llegué a Langhorne empecé a aplicarme en este mundo de la cocina, supongo que porqué tenía más tiempo, pero cuando conocí a Amber y quedábamos para cenar, volvía a la comida para llevar. 
-Vaya, pues espero que sepas lo bueno de cocinar en pareja. –advirtió Rick. Kate hizo una cara rara. -¿No? –Kate negó con la cabeza. Rick estaba lavando zanahorias. –Pues lo bueno es que siempre puedes mojar a tu novia con el grifo. –Y tras decir eso, giró rápidamente el grifo hacia Kate, dejándola empapada en segundos.
-¡Eso no es justo! –Kate corrió hacia el grifo y lo cogió, aunque Rick también lo tenía así que forcejeaban para mojar al otro en vez de a ellos mismos. Mientras, también se fueron acercando más y más hasta que quedaron muy juntos. Como si de dos imanes se tratasen, se empezaron a besar apasionadamente y ya no le hacían caso al grifo, hasta que Rick lo cerró, antes de coger en brazos a Kate, mientras esta iba desabrochándole los botones de la camisa. Llegaron hasta la habitación y Rick dejó con cuidado a Kate en la cama.
-¿Estás segura? No quiero que tu costi...
-No te preocupes. –Y volvieron a besarse, hasta que sus respectivas prendas desaparecieron de sus cuerpos, y empezaron un baile que acabó con un orgasmo al unísono.
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¿Qué os ha parecido?
El siguiente capítulo no centra en nuestros protas.... Espero no tardar mucho 

22:05:49 11.07.2015

wow si que echaba de menos esta historia...apesar de lo que dices el capitulo estuvo buenisisimo..por fin a la normalidad...espero que actualices pronto...aunque igual sere seguidora 100% hasta el nuevo cap...y el siguiente y el siguiente...asi que continua prontisss...

Me gusta, me gusta mucho

Vamos, como dos adolescentes mojándose el uno al otro, jejejejeje. ¿para qué están limpiando tanto el apartamento de Kate? ¿es qué se va a ir a vivir allí sola?
Que ganas de leer esa comida con el padre de Kate y ver lo nervioso que se pone Rick, jajajaja

Preciosooo digeee

Holaa! Estoy muy contenta por vuestros mensajes tan positivos y es por eso que ya os traigo el siguiente capítulo. Como ya dije, este capítulo no se centra en nuestra pareja adolescente favorita , así que espero que os guste el cambio.  
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Abrió los ojos decidida a lo que iba a hacer aquel día. Amber se desperezó con rapidez y se dio una ducha rápida. Había encontrado un pequeño y barato apartamento donde Alex y ella vivían lo mejor que podían. Su hijo, pero, todavía no había aceptado la idea de lo que era su padre, y eso le hacía visitar un psicólogo una vez por semana. 
Amber abrió la puerta de su habitación, asegurándose de que el niño todavía durmiera y la cerró con cuidado al ver que así era. Fue hasta la pequeña cocina y empezó a hacer el desayuno. No tardó más de media hora en tenerlo todo preparado. Era pronto para ser domingo, pero fue a despertar a su hijo.
-Alex, despierta cariño. –Acarició la cara del niño, el cual abrió los ojos por el contacto, y se desperezó como un gato.
-¿Ya? –Preguntó Alex, y cerró los ojos de nuevo.
-Venga dormilón, que ya está el desayuno. –Alex abrió los ojos de golpe ya que era muy quisquilloso con tomar el desayuno frío. Era un truco que tenía Amber para despertarlo. 
En cinco minutos estaban los dos desayunando, en silencio, pues Alex seguía todavía medio dormido.
-¿Has acabado los deberes? –El niño asintió.
-Los acabé ayer por la tarde para poder jugar hoy todo el día. –Explicó Alex.
-Muy bien, entonces. Hoy me tendré que ir un rato por la mañana y tendré que pedirle a Lanie si se puede quedar contigo. –Explicó Amber.
-¿Dónde vas? –Preguntó el niño con curiosidad.
-Tengo que arreglar unos papeles del apartamento y del colegio, así que como tengo una mañana aburrida, mejor si te vas con Lanie, si puede, claro. –Mintió. Después de desayunar cogió el móvil y escribió un mensaje a la persona que había cuidado de ellos nada más llegar a la ciudad. La forense contestó pocos minutos después diciendo que lo sentía mucho, pero le era imposible. Amber estuvo pensando un rato a quién podía dejarle a Alex hasta que un nombre se le vino a la cabeza: Kate. Se le hacía raro tener que llamarla así cuando ella la había conocido por Jennifer, pero al fin y al cabo era su nombre. Le puso un mensaje y Kate contestó casi al instante diciéndole que sí podía quedarse con Alex. Le envió la dirección de su apartamento y una vez su hijo estuvo preparado con una consola en la mochila, salieron de casa. Tardaron una media hora en llegar por culpa del metro. Entraron en el portal de Kate y subieron hasta su piso en ascensor. Tras picar al timbre, Kate abrió la puerta.
-Hola Amber. Cuanto tiempo sin verte, Alex. –Saludó Kate y abrazó a ambos. De repente apareció Rick saliendo de una habitación, lo cual extrañó a Amber, aunque no dijo nada. –Pasad. 
-Yo tengo prisa. –Dijo Amber algo nerviosa. Alex entró en el apartamento y saludó a Rick.
-¿Va todo bien? –Preguntó Kate, la cual se había preocupado. Entornó un poco la puerta dejándolas fuera del apartamento.
-Verás, no te voy a mentir Kate. He recibido una llamada de la cárcel, de Matt, y tengo que ir a verle. Decirle en persona que deje de llamar por el bien de Alex. –Explicó Amber.
-¿Quieres que te acompañe? Alex se puede quedar con Rick si quieres. –Se ofreció Beckett.
-No tranquila, necesito hacerlo yo. –Amber bajó la cabeza y Kate le dio un abrazo.
-Si necesitas tiempo a solas, Alex puede quedarse el tiempo que quieras.
-Gracias Kate. Lo tendré en cuenta. –Tras darse un último abrazo Kate volvió a entrar al apartamento mientras Amber se dirigía a la cárcel donde se encontraba Matt. Alex había sacado la consola y tanto él como Rick, el cual miraba cómo jugaba, estaban absortos en la pantalla.
-¿Vas a estar todo el día así Rick? –De repente éste reaccionó y miró a Kate.
-Este Alex es un campeón, ha tardado menos que yo en pasarse el nivel. –Kate le hizo una mirada acusatoria. –Sí, yo también juego. –Tras una sonrisa acompañada de una negación con la cabeza, Kate le hizo una seña a Rick para que la acompañara a la cocina. -¿Todo bien con Amber? –Preguntó Rick preocupado. Kate le contó todo lo que le había dicho su amiga y lo mal que sentía por verla así. El escritor abrazó a Kate para darle fuerzas y le dio un beso en la frente.


Amber había llegado a la cárcel y le estaban dando la acreditación de visitante juntamente con unos papeles que debía firmar sobre las normas de visitante penitenciario. Una vez lo tuvo todo listo, una policía la acompañó hasta la sala de visitas en la cual sólo había una silla y un teléfono por el que podías comunicarte con el preso. Ya se encontraba Matt detrás del cristal, con la mirada perdida y la cara muy demacrada. Su marido señaló el teléfono y ambos lo cogieron.
-Hola Amber. –Tenía la voz triste, al borde del sollozo, lo que hizo que Amber, a pesar de todo lo mal que lo había pasado por su culpa, se derrumbara un poco.
-Hola Matt. –No pronunciaron palabra en segundos.
-Gracias por venir. Pensé que no lo harías y tus motivos justificados tendrías para no hacerlo.
-¿Qué quieres? –Preguntó Amber con una frialdad que pensaba que no tenía. -¿Por qué has estado llamando cada día?
-Necesito verte, veros a los dos, a Alex y...
-¿Y pensabas que yo iba a dejarte ver a Alex? –Le interrumpió Amber. Matt bajó la mirada con tristeza. –Entonces creo que me has estado subestimando demasiado.
-Solo te pido eso, nada más, no me volverás a ver. –Suplicó.
-Creo que a lo largo de nuestro matrimonio me pediste demasiado y por aquel entonces no era lo bastantemente fuerte para no obedecer. –Y tras aquellas duras palabras se levantó, aunque todavía no había soltado el teléfono. –Adiós Matt. Y no vuelvas a llamarme jamás. –Y con eso colgó y salió de la sala acompañada por el mismo policía de antes. No se dio cuenta que estaba llorando hasta que una lágrima le cayó en la mano. Decidió sentarse en un banco y relajarse antes de entrar en algún restaurante a comer algo. Aunque no tenía hambre. Pero tenía que ser fuerte por Alex.


En el apartamento de Kate no habían hecho mucho. Salieron un rato al parque y Alex estuvo jugando con otros niños mientras Rick y Kate le miraban desde un banco.
-Amber me contó que está yendo al psicólogo. –Soltó Kate, mirando al hijo de su amiga.
-Ahora mismo debe tener un gran lío en su cabeza con todo lo que está pasando. –Dijo el escritor. –Con el tiempo la herida se irá cerrando y podrá volver a la normalidad.
-¿Crees que algo así se puede cerrar? –Kate había apoyado la cabeza en el hombro de Rick.
-Supongo que no del todo, pero si lo suficiente para seguir para delante. –Y ahí acabaron la conversación, ya que volvió Alex diciendo que tenía hambre, así que cogieron el coche y fueron a una hamburguesería a comer.
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Hacía tiempo que quería escribir este capítulo...
¿Os ha gustado el cambio? Os gusta la idea que de vez en cuando lo haga?

Diablos tardé un rato en recordar quien eran Amber y Alex... Me gustó que aparecieran...