Tan solo, mi imaginación y yo - ACTUALIZADO 02/01
+45
Kate&Rick
roy-rogers
Delta5
Duende
True Castle
Luara
forever23
castlelover
Emily Claire
LEILAKB
Ange
Fanny_123
Netto10
Maku_Stanathan
Teresita_yocastle$$NYPD
Jorja
May
cris_beckett
Niki44841
rakel
lucia-rub09
Libou
nita85
silvanalino
Massycb
rickk y katee
Jani91
azuladna
castle4ever
Anver
casckettfan
maria_cs
Shura-chan
DannyyFranco
Stana Beckett
Cata Castillo
okusak
quierocreer
carla_NYPD
ximcastle
castle&beckett..cris
Beckett_Castle_Alba
trinity640
choleck
nato_kine
49 participantes
Foro Castle :: OffTopic :: Fan Fics
Página 7 de 17.
Página 7 de 17. • 1 ... 6, 7, 8 ... 12 ... 17
Re: Tan solo, mi imaginación y yo - ACTUALIZADO 02/01
Yo no se a que baño te refieres
Invitado- Invitado
Re: Tan solo, mi imaginación y yo - ACTUALIZADO 02/01
No me llegaron los mail que tenia 3!!!!! NUEVOS CAPIS!!!
muy buenos todos y como olvidar ese baño!!!! Un clasico!!!!!!
Escribes hermoso, sigueeeee
muy buenos todos y como olvidar ese baño!!!! Un clasico!!!!!!
Escribes hermoso, sigueeeee
silvanalino- Escritor - Policia
- Mensajes : 2439
Fecha de inscripción : 01/12/2010
Edad : 51
Re: Tan solo, mi imaginación y yo - ACTUALIZADO 02/01
Si se ke baño eessssss!!!como para no recordarlo jajajja
sigueeee
sigueeee
castle&beckett..cris- Escritor - Policia
- Mensajes : 5471
Fecha de inscripción : 20/03/2011
Edad : 33
Localización : Menorca..I LOVE NEW YORK..NYPD..RICK CASTLE & KATE BECKETT
Re: Tan solo, mi imaginación y yo - ACTUALIZADO 02/01
Jajajajaja Me encantaria ver stá escena en la serie, es fabulosa y muy divertida.
Continua pronto...
Continua pronto...
Invitado- Invitado
Re: Tan solo, mi imaginación y yo - ACTUALIZADO 02/01
¡Sigueloooo más amenudo! porfa,
me encanta este fic.
me encanta este fic.
lucia-rub09- Ayudante de policia
- Mensajes : 116
Fecha de inscripción : 16/08/2012
Edad : 28
Localización : GC
Shura-chan- Policia de homicidios
- Mensajes : 535
Fecha de inscripción : 07/09/2012
Edad : 26
Localización : Por ahí.
Re: Tan solo, mi imaginación y yo - ACTUALIZADO 02/01
Nato, Qué gran talento para escribir tienes!
Aunque no comente, sigo tus historias y me encantan.
Así que no tardes en escribir alguna otra cosa que se te ocurra.
Aunque no comente, sigo tus historias y me encantan.
Así que no tardes en escribir alguna otra cosa que se te ocurra.
rakel- Escritor - Policia
- Mensajes : 1218
Fecha de inscripción : 08/01/2011
Edad : 32
Re: Tan solo, mi imaginación y yo - ACTUALIZADO 02/01
Pido disculpas por no haber subido la historia todavía. Son las 4 de la madrugada y vengo de un cumpleaños. La escena está casi terminada, solo me falta afinar algunos detalles pero toy muy cansada para hacerlo ahora. Prometo que durante el día lo tendrán.
Título: LAS SOSPECHAS DE LANIE.
Título: LAS SOSPECHAS DE LANIE.
nato_kine- Policia de homicidios
- Mensajes : 510
Fecha de inscripción : 16/02/2012
Edad : 38
Localización : Argentina
Re: Tan solo, mi imaginación y yo - ACTUALIZADO 02/01
Tranquila, que esperamos . Además, la espera vale la pena . Un saludo!
okusak- Policia de homicidios
- Mensajes : 749
Fecha de inscripción : 03/05/2012
Edad : 34
Localización : Entre la nebulosa Nervitana y el país de nunca jamás.
Re: Tan solo, mi imaginación y yo - ACTUALIZADO 02/01
Genial. Continua pronto
Niki44841- Ayudante de policia
- Mensajes : 100
Fecha de inscripción : 30/07/2012
Localización : Granada
Re: Tan solo, mi imaginación y yo - ACTUALIZADO 02/01
me encantaaaa !!!! sigue cuando puedas
Jani91- Actor en Broadway
- Mensajes : 162
Fecha de inscripción : 13/09/2011
Edad : 33
Localización : En la 12th
Re: Tan solo, mi imaginación y yo - ACTUALIZADO 02/01
No te preocupes, seguro que la espera vale la pena
Shura-chan- Policia de homicidios
- Mensajes : 535
Fecha de inscripción : 07/09/2012
Edad : 26
Localización : Por ahí.
Re: Tan solo, mi imaginación y yo - ACTUALIZADO 02/01
Lo esperamos con desesperacion jajaja :3
Invitado- Invitado
Escena 18: Las sospechas de Lanie
Antes que nada: ¡¡¡¡¡FELIZ DÍA DE ESTRENO DE LA QUINTA TEMPORADA DE CASTLE PARA TODOOOOSSSS!!!!! jajajajaja.
Bien, finalmente está listo. Que disfruten la nueva historia.
Debido al estreno de la temporada, por hoy no creo que suba otra historia. Si llego a hacer alguna la subiré pero por el momento mi cabeza solo piensa en una cosa, jeje.
Saludos y les digo nos "vemos" a todos aquellos que se conecten para ver el capi en vivo en el chat.
Bien, finalmente está listo. Que disfruten la nueva historia.
LAS SOSPECHAS DE LANIE
Ambos bajaban por el ascensor camino a la morgue para ver lo que Lanie había descubierto. Kate se puso frente a él y le apuntó con el dedo en señal de advertencia.
- Acuérdate de lo que hablamos. Más te vale que te comportes o Lanie se dará cuenta. – le dijo muy seriamente.
- Si, Kate. Me lo haz repetido en cada oportunidad que pudiste. No te miro, no te toco, no te hablo. – le dijo él ofendido. – Y te recuerdo que no fui yo quien esta mañana se quería bañar acompañada. – Kate se mordió el labio y le sonrió pícaramente recordando los eventos de esa mañana.
- Pero esta mañana estábamos solo. – aclaró.
- Ahora también lo estamos. – le dijo acercándose hacia ella con una mirada seductora. Kate retrocedió hasta que quedó apoyada contra las puertas del ascensor.
- Ni se te ocurra que puede entrar alguien. – le advirtió.
- Oh, vamos… - se quejó como si fuera un niño. – Solo quiero un beso… - le pidió ya casi rozando sus labios. Kate no se movió, sus ojos, su voz, su cercanía la hipnotizaban. Pero entonces sonó el timbre del ascensor y las puertas se abrieron. Ella dio un paso para atrás haciendo que Castle casi se fuera de boca al piso. Kate se tapó la boca para que no se escuchara su risa por el pasillo y llegara a oídos de Lanie.
- Eso te pasa por ansioso. – le dijo mientras él la miraba haciendo puchero.
- Salvada por la campana. – le dijo con mala cara siguiéndola mientras ella ya caminaba hacia la entrada de la morgue. – La próxima no te salvas. – le advirtió. Kate frenó y se dio se dio vuelta repentinamente.
- Cállate o Lanie escuchará todo. – le susurró mientras abría la puerta.
- ¡Kate Beckett, ya mismo me dices con quien te estás acostando o no respondo! – le gritó Lanie efusivamente apenas la vio entrar. Kate se quedó parada en medio de la entrada mirándola sorprendida. Castle, que estaba detrás, le tocó la espalda para que reaccionara y avanzara.
- ¡¿Qué?! – le dijo ella inocentemente.
- No te irás de aquí hasta que me digas quién es. – le remarcó.
- ¿De qué me estás hablando? – le preguntó Kate tratando de parecer desconcertada.
- Sabes perfectamente de qué hablo. Soy tu mejor amiga. ¿Cómo no me dijiste que salías con alguien? – quiso saber. Sonaba ofendida.
- Simple, porque no estoy saliendo con nadie. – le respondió Kate como si fuera lo más obvio del mundo.
- Saliendo, acostándote, no importa—
- ¡Lanie! - dijo interrumpiéndola, tratando de pararla.
- Kate, ¡por favor! Cada poro de tu cuerpo grita que estás teniendo sexo, gran sexo, mucho sexo. – le aclaró. Kate no sabía que decir, tenía que pensar rápido. La había agarrado con la guardia completamente baja. Ella no estaba haciendo nada raro, actuaba igual que siempre, con Castle, con el resto, ¿cómo se había dado cuenta? ¿Tanto se le notaba? Por otro lado, Castle, que hasta el momento había preferido quedarse callado observando, no pudo contenerse más.
- ¡Vaya! Gran sexo ¿eh?… Debe ser todo un semental. – le dijo Castle, dándole la espalda a Lanie y mirándola a ella sugestivamente. – ¿Lo conocemos? – preguntó. Se le podía notar la satisfacción en la voz. Kate lo miró y lo fulminó con la mirada.
- Les estoy diciendo que no hay N-A-D-I-E, nadie. Punto. – dijo exasperada.
- ¡Oh, detective! Debe tenerte como loca para que te pongas así. – siguió él. Kate le mantuvo la mirada y con la boca moduló un: ¡Cállate! Pero él no parecía muy dispuesto a dejarlo pasar.
- Mira Lanie, no sé de donde sacas que me estoy acostando con alguien y suponiendo que lo estuviera, no veo por qué piensas que es tan grandioso. – le dijo. Castle hizo un gesto de dolor y moduló un: ¡Auch! señalándose el corazón, como si le hubiese dolido. La expresión de ella no había cambiado pero Castle sabía que se lo decía a propósito, y que por dentro sonreía.
- Porque desde que volviste eres todo sonrisas, te brillan los ojos, te mueves distinto, a mi no me engañas. – le contestó Lanie acercándose a ella. – Y tú Castle… - le dijo apuntándole con el dedo. Ambos se quedaron casi sin respiración, ‘Nos descubrieron’, pensaron. - …vete afuera, esta es una charla de chicas. – terminó. Ambos respiraron aliviados.
- Oh, por favor, yo también quiero saber—
- ¡Afuera! – le ordenó cortante. Castle rezongó y luego salió refunfuñando de la sala. Kate tuvo que hacer un gran esfuerzo por mantener la compostura. Si había alguien que la conocía era Lanie. – Bien, ¿ahora vas a decírmelo?
- Ya te dije que no hay nada—
- Y yo te dije que no puedes mentirme. – insistió. Kate la miró en silencio un momento y luego suspiró, así no llegarían a nada.
- Si vas a seguir con esto, vengo en otro momento. Tengo cosas que hacer. – le señaló secamente, dándose la vuelta para dirigirse a la puerta.
- ¿En serio no piensas contarme? – preguntó Lanie por última vez. Kate se dio vuelta para mirarla con una mano apoyada en la puerta. No dijo nada, su mirada lo decía todo, la respuesta era No. Lanie suspiró. – De acuerdo, lo dejaré por el momento. – le dijo finalmente. Kate se relajó y estaba por ir a buscar a Castle… - Pero eso no significa que te crea. – le advirtió. - Nadie me saca de la cabeza que Kate Beckett está teniendo sexo.
- Piensa lo que quieras, Lanie. – le dijo y luego se asomó por la puerta. Cuando miró afuera encontró a Castle, apoyado contra la pared, cabizbajo, ‘¿Sería posible que le hubiese afectado lo que dijo?’, se preguntó. Más tarde hablaría con él. – Castle, entra de una vez. – le pidió finalmente y antes de que siquiera él se moviera, entró de nuevo en la sala. Kate caminó hasta la mesa seguida por Castle. – Bien, ¿qué tenemos?
Lanie miró el semblante de Castle y le llamó la atención.
- Castle, ¿estás bien?
- ¿Eh? Si, solo que recibí una mala noticia… - dijo mirando a Kate, y luego pasó a Lanie. - …de mi madre. Sigue con lo tuyo. – le pidió. Lanie la miró extrañada pero terminó por hacerle caso.
- Bien… la causa de muerte fue traumatismo severo de cráneo con un objeto romo. Tiene que haber sido una especie de tubo. – aclaro Lanie.
- ¿Cómo un bate? – preguntó Castle ya más concentrado.
- Podría ser. Si consiguen algo con esas características, podría comparar las marcas.
- ¿Podría haber sido accidental? O sea, que se cayera y golpeara con algo… - preguntó Kate.
- Bueno, el análisis toxicológico… - dijo dándoles la espalda, buscando el informe.
Castle aprovechó la oportunidad y se puso detrás de Kate y sin que lo notara la apretó entre sus brazos e intentó darle un beso en la mejilla. Pero no llegó, porque cuando ella sintió el abrazo dio un respingo y lo empujó para que la soltara y le echó una mirada asesina. Sin embargo, un calor recorrió su cuerpo hasta llegar a su cara coloreando sus mejillas haciendo que Castle sonriera satisfecho. ‘Dulce venganza’, pensó.
- Aquí está. – continuó Lanie con el informe en la mano, mientras se daba vuelta. Rápidamente, ambos se acomodaron como estaban y miraron a Lanie, la cual se frenó y miró alternativamente a Kate, que se veía extrañamente agitada, y a Castle, que había pasado de estar decaído a tener una sonrisa radiante. Algo no cuadraba. - ¿Todo bien? – preguntó.
- ¿Dudas del análisis? – le preguntó Kate desviando el tema. Lanie se quedó unos segundos pensando y se obligó a centrarse en lo que estaba haciendo.
- No, perdón… El reporte muestra altas concentraciones de alcohol. Sin embargo, no es tanto como para que le afectara la consciencia. Por lo demás, gozaba de excelente salud. Por otro lado, la contundencia del golpe no cuadra con una caída normal, tendría que haber sido de bastante altura para producir ese daño. Por el momento eso es todo, lo lamento.
- De acuerdo. Gracias Lanie. – le dijo y se dirigió hacia la puerta seguida por Castle.
- ¡Segura que no quieres decirme nada! – le gritó Lanie por última vez pero Kate no contestó. No perdía nada con intentarlo.
Ambos caminaron en silencio hasta el ascensor y se mantuvieron así hasta que se metieron en él. Una vez que las puertas se cerraron, Kate empujó a Castle contra las paredes echa una furia.
- ¡¿Cómo se te ocurre agarrarme así?! ¡Con lo que me costó que dejara de preguntarme cosas! – Castle mantenía una enorme sonrisa. Levantó la mano y presionó un botón en el tablero de mandos que tenía a su lado haciendo que el ascensor se frenara. - ¡¿Qué estás haciendo?!
- ¡Ups! – le dijo apartándose de la pared, ahora era él quien avanzaba y ella la que retrocedía, hasta quedar apoyada contra la otra pared. – Quiero que me digas la verdad.
- ¿Qué verdad? ¿De qué hablas?
- De lo que le dijiste a Lanie.
- Oh, vamos, Castle, solo estaba molestándote porque tú lo hacías. – le contestó.
- Quiero que me lo digas. – insistió mientras le abría la chaqueta y pasaba sus manos por debajo de ella.
- Castle, aprieta el botón o llamaremos la atención de todos.
- Dilo y apretaré el botón. – le explicó acariciándole la espalda por arriba de la camisa y acercándose tentativamente a su boca.
- ¿Qué pasa si no quiero? – le preguntó retadoramente con voz provocativa mientras le pasaba los brazos por arriba de los hombros. Castle sonrió y le pasó la lengua delicadamente por el labio y cuando se separó, ella se lamió el mismo lugar sin apartar la vista de sus ojos azules. ‘Parece que alguien quiere jugar’, pensó Castle.
- Entonces, tendré que obligarte. – le contestó y antes de que ella pudiera hacer algo, la besó profunda y apasionadamente, arrancándole un gemido al sentir su lengua dentro de su boca mientras la apretaba más fuerte contra él levantándola del suelo. Rompió el beso y empezó a bajar por su mandíbula… - Dímelo… - …por su cuello... – Dime qué tanto te gusta acostarte conmigo. – le susurró al oído y luego le besó y mordisqueó el lóbulo de la oreja. Kate soltó otro gemido y lo apretó fuertemente contra ella.
- Mucho… mucho… - le dijo al oído casi en un susurro.
Rápidamente, Castle la soltó y apretó el botón del ascensor dejándola a ella visiblemente agitada y acalorada. Kate no podía creer que la dejara así. Se sentía ultrajada. Abrió la boca para quejarse pero entonces se escuchó el timbre y las puertas se abrieron. Castle salió y se dio vuelta para mirarla.
- Vamos detective, tenemos un caso que resolver. – le dijo con una gran sonrisa.
- Acuérdate de lo que hablamos. Más te vale que te comportes o Lanie se dará cuenta. – le dijo muy seriamente.
- Si, Kate. Me lo haz repetido en cada oportunidad que pudiste. No te miro, no te toco, no te hablo. – le dijo él ofendido. – Y te recuerdo que no fui yo quien esta mañana se quería bañar acompañada. – Kate se mordió el labio y le sonrió pícaramente recordando los eventos de esa mañana.
- Pero esta mañana estábamos solo. – aclaró.
- Ahora también lo estamos. – le dijo acercándose hacia ella con una mirada seductora. Kate retrocedió hasta que quedó apoyada contra las puertas del ascensor.
- Ni se te ocurra que puede entrar alguien. – le advirtió.
- Oh, vamos… - se quejó como si fuera un niño. – Solo quiero un beso… - le pidió ya casi rozando sus labios. Kate no se movió, sus ojos, su voz, su cercanía la hipnotizaban. Pero entonces sonó el timbre del ascensor y las puertas se abrieron. Ella dio un paso para atrás haciendo que Castle casi se fuera de boca al piso. Kate se tapó la boca para que no se escuchara su risa por el pasillo y llegara a oídos de Lanie.
- Eso te pasa por ansioso. – le dijo mientras él la miraba haciendo puchero.
- Salvada por la campana. – le dijo con mala cara siguiéndola mientras ella ya caminaba hacia la entrada de la morgue. – La próxima no te salvas. – le advirtió. Kate frenó y se dio se dio vuelta repentinamente.
- Cállate o Lanie escuchará todo. – le susurró mientras abría la puerta.
- ¡Kate Beckett, ya mismo me dices con quien te estás acostando o no respondo! – le gritó Lanie efusivamente apenas la vio entrar. Kate se quedó parada en medio de la entrada mirándola sorprendida. Castle, que estaba detrás, le tocó la espalda para que reaccionara y avanzara.
- ¡¿Qué?! – le dijo ella inocentemente.
- No te irás de aquí hasta que me digas quién es. – le remarcó.
- ¿De qué me estás hablando? – le preguntó Kate tratando de parecer desconcertada.
- Sabes perfectamente de qué hablo. Soy tu mejor amiga. ¿Cómo no me dijiste que salías con alguien? – quiso saber. Sonaba ofendida.
- Simple, porque no estoy saliendo con nadie. – le respondió Kate como si fuera lo más obvio del mundo.
- Saliendo, acostándote, no importa—
- ¡Lanie! - dijo interrumpiéndola, tratando de pararla.
- Kate, ¡por favor! Cada poro de tu cuerpo grita que estás teniendo sexo, gran sexo, mucho sexo. – le aclaró. Kate no sabía que decir, tenía que pensar rápido. La había agarrado con la guardia completamente baja. Ella no estaba haciendo nada raro, actuaba igual que siempre, con Castle, con el resto, ¿cómo se había dado cuenta? ¿Tanto se le notaba? Por otro lado, Castle, que hasta el momento había preferido quedarse callado observando, no pudo contenerse más.
- ¡Vaya! Gran sexo ¿eh?… Debe ser todo un semental. – le dijo Castle, dándole la espalda a Lanie y mirándola a ella sugestivamente. – ¿Lo conocemos? – preguntó. Se le podía notar la satisfacción en la voz. Kate lo miró y lo fulminó con la mirada.
- Les estoy diciendo que no hay N-A-D-I-E, nadie. Punto. – dijo exasperada.
- ¡Oh, detective! Debe tenerte como loca para que te pongas así. – siguió él. Kate le mantuvo la mirada y con la boca moduló un: ¡Cállate! Pero él no parecía muy dispuesto a dejarlo pasar.
- Mira Lanie, no sé de donde sacas que me estoy acostando con alguien y suponiendo que lo estuviera, no veo por qué piensas que es tan grandioso. – le dijo. Castle hizo un gesto de dolor y moduló un: ¡Auch! señalándose el corazón, como si le hubiese dolido. La expresión de ella no había cambiado pero Castle sabía que se lo decía a propósito, y que por dentro sonreía.
- Porque desde que volviste eres todo sonrisas, te brillan los ojos, te mueves distinto, a mi no me engañas. – le contestó Lanie acercándose a ella. – Y tú Castle… - le dijo apuntándole con el dedo. Ambos se quedaron casi sin respiración, ‘Nos descubrieron’, pensaron. - …vete afuera, esta es una charla de chicas. – terminó. Ambos respiraron aliviados.
- Oh, por favor, yo también quiero saber—
- ¡Afuera! – le ordenó cortante. Castle rezongó y luego salió refunfuñando de la sala. Kate tuvo que hacer un gran esfuerzo por mantener la compostura. Si había alguien que la conocía era Lanie. – Bien, ¿ahora vas a decírmelo?
- Ya te dije que no hay nada—
- Y yo te dije que no puedes mentirme. – insistió. Kate la miró en silencio un momento y luego suspiró, así no llegarían a nada.
- Si vas a seguir con esto, vengo en otro momento. Tengo cosas que hacer. – le señaló secamente, dándose la vuelta para dirigirse a la puerta.
- ¿En serio no piensas contarme? – preguntó Lanie por última vez. Kate se dio vuelta para mirarla con una mano apoyada en la puerta. No dijo nada, su mirada lo decía todo, la respuesta era No. Lanie suspiró. – De acuerdo, lo dejaré por el momento. – le dijo finalmente. Kate se relajó y estaba por ir a buscar a Castle… - Pero eso no significa que te crea. – le advirtió. - Nadie me saca de la cabeza que Kate Beckett está teniendo sexo.
- Piensa lo que quieras, Lanie. – le dijo y luego se asomó por la puerta. Cuando miró afuera encontró a Castle, apoyado contra la pared, cabizbajo, ‘¿Sería posible que le hubiese afectado lo que dijo?’, se preguntó. Más tarde hablaría con él. – Castle, entra de una vez. – le pidió finalmente y antes de que siquiera él se moviera, entró de nuevo en la sala. Kate caminó hasta la mesa seguida por Castle. – Bien, ¿qué tenemos?
Lanie miró el semblante de Castle y le llamó la atención.
- Castle, ¿estás bien?
- ¿Eh? Si, solo que recibí una mala noticia… - dijo mirando a Kate, y luego pasó a Lanie. - …de mi madre. Sigue con lo tuyo. – le pidió. Lanie la miró extrañada pero terminó por hacerle caso.
- Bien… la causa de muerte fue traumatismo severo de cráneo con un objeto romo. Tiene que haber sido una especie de tubo. – aclaro Lanie.
- ¿Cómo un bate? – preguntó Castle ya más concentrado.
- Podría ser. Si consiguen algo con esas características, podría comparar las marcas.
- ¿Podría haber sido accidental? O sea, que se cayera y golpeara con algo… - preguntó Kate.
- Bueno, el análisis toxicológico… - dijo dándoles la espalda, buscando el informe.
Castle aprovechó la oportunidad y se puso detrás de Kate y sin que lo notara la apretó entre sus brazos e intentó darle un beso en la mejilla. Pero no llegó, porque cuando ella sintió el abrazo dio un respingo y lo empujó para que la soltara y le echó una mirada asesina. Sin embargo, un calor recorrió su cuerpo hasta llegar a su cara coloreando sus mejillas haciendo que Castle sonriera satisfecho. ‘Dulce venganza’, pensó.
- Aquí está. – continuó Lanie con el informe en la mano, mientras se daba vuelta. Rápidamente, ambos se acomodaron como estaban y miraron a Lanie, la cual se frenó y miró alternativamente a Kate, que se veía extrañamente agitada, y a Castle, que había pasado de estar decaído a tener una sonrisa radiante. Algo no cuadraba. - ¿Todo bien? – preguntó.
- ¿Dudas del análisis? – le preguntó Kate desviando el tema. Lanie se quedó unos segundos pensando y se obligó a centrarse en lo que estaba haciendo.
- No, perdón… El reporte muestra altas concentraciones de alcohol. Sin embargo, no es tanto como para que le afectara la consciencia. Por lo demás, gozaba de excelente salud. Por otro lado, la contundencia del golpe no cuadra con una caída normal, tendría que haber sido de bastante altura para producir ese daño. Por el momento eso es todo, lo lamento.
- De acuerdo. Gracias Lanie. – le dijo y se dirigió hacia la puerta seguida por Castle.
- ¡Segura que no quieres decirme nada! – le gritó Lanie por última vez pero Kate no contestó. No perdía nada con intentarlo.
Ambos caminaron en silencio hasta el ascensor y se mantuvieron así hasta que se metieron en él. Una vez que las puertas se cerraron, Kate empujó a Castle contra las paredes echa una furia.
- ¡¿Cómo se te ocurre agarrarme así?! ¡Con lo que me costó que dejara de preguntarme cosas! – Castle mantenía una enorme sonrisa. Levantó la mano y presionó un botón en el tablero de mandos que tenía a su lado haciendo que el ascensor se frenara. - ¡¿Qué estás haciendo?!
- ¡Ups! – le dijo apartándose de la pared, ahora era él quien avanzaba y ella la que retrocedía, hasta quedar apoyada contra la otra pared. – Quiero que me digas la verdad.
- ¿Qué verdad? ¿De qué hablas?
- De lo que le dijiste a Lanie.
- Oh, vamos, Castle, solo estaba molestándote porque tú lo hacías. – le contestó.
- Quiero que me lo digas. – insistió mientras le abría la chaqueta y pasaba sus manos por debajo de ella.
- Castle, aprieta el botón o llamaremos la atención de todos.
- Dilo y apretaré el botón. – le explicó acariciándole la espalda por arriba de la camisa y acercándose tentativamente a su boca.
- ¿Qué pasa si no quiero? – le preguntó retadoramente con voz provocativa mientras le pasaba los brazos por arriba de los hombros. Castle sonrió y le pasó la lengua delicadamente por el labio y cuando se separó, ella se lamió el mismo lugar sin apartar la vista de sus ojos azules. ‘Parece que alguien quiere jugar’, pensó Castle.
- Entonces, tendré que obligarte. – le contestó y antes de que ella pudiera hacer algo, la besó profunda y apasionadamente, arrancándole un gemido al sentir su lengua dentro de su boca mientras la apretaba más fuerte contra él levantándola del suelo. Rompió el beso y empezó a bajar por su mandíbula… - Dímelo… - …por su cuello... – Dime qué tanto te gusta acostarte conmigo. – le susurró al oído y luego le besó y mordisqueó el lóbulo de la oreja. Kate soltó otro gemido y lo apretó fuertemente contra ella.
- Mucho… mucho… - le dijo al oído casi en un susurro.
Rápidamente, Castle la soltó y apretó el botón del ascensor dejándola a ella visiblemente agitada y acalorada. Kate no podía creer que la dejara así. Se sentía ultrajada. Abrió la boca para quejarse pero entonces se escuchó el timbre y las puertas se abrieron. Castle salió y se dio vuelta para mirarla.
- Vamos detective, tenemos un caso que resolver. – le dijo con una gran sonrisa.
Debido al estreno de la temporada, por hoy no creo que suba otra historia. Si llego a hacer alguna la subiré pero por el momento mi cabeza solo piensa en una cosa, jeje.
Saludos y les digo nos "vemos" a todos aquellos que se conecten para ver el capi en vivo en el chat.
Última edición por nato_kine el Mar Oct 23, 2012 5:38 pm, editado 2 veces
nato_kine- Policia de homicidios
- Mensajes : 510
Fecha de inscripción : 16/02/2012
Edad : 38
Localización : Argentina
Re: Tan solo, mi imaginación y yo - ACTUALIZADO 02/01
Natooooo! Ha sido la cañaaaaaaaaaaaaaaaaaaa....fabuloso la forma de preguntarselo y como se siente ofendido. Eso le pasa a Kate por jugar con fuego que se queda con las ganas jajajaja
Tan solo 7 horas nos serparan del estreno que ganas....!
Continualo cuando puedas que creo que con el estreno estaremos avastesido ¡POR EL MOMENTO! jajajaja
Tan solo 7 horas nos serparan del estreno que ganas....!
Continualo cuando puedas que creo que con el estreno estaremos avastesido ¡POR EL MOMENTO! jajajaja
Invitado- Invitado
Re: Tan solo, mi imaginación y yo - ACTUALIZADO 02/01
jajajjaja me ha gustado mucho esta escena, al igual que todas!! Pobre Kate que se quedó con las ganas
Escribes genial!! Espero que subas la próxima pronto
Escribes genial!! Espero que subas la próxima pronto
cris_beckett- Autor de best-seller
- Mensajes : 857
Fecha de inscripción : 29/05/2012
Edad : 33
Localización : Madrid
Re: Tan solo, mi imaginación y yo - ACTUALIZADO 02/01
preciosooooo sigueee
castle&beckett..cris- Escritor - Policia
- Mensajes : 5471
Fecha de inscripción : 20/03/2011
Edad : 33
Localización : Menorca..I LOVE NEW YORK..NYPD..RICK CASTLE & KATE BECKETT
Re: Tan solo, mi imaginación y yo - ACTUALIZADO 02/01
Que bueno lo de Lanie y que directa . Gracias por subir esta historia, me ha gustado mucho. Un saludo!
okusak- Policia de homicidios
- Mensajes : 749
Fecha de inscripción : 03/05/2012
Edad : 34
Localización : Entre la nebulosa Nervitana y el país de nunca jamás.
Re: Tan solo, mi imaginación y yo - ACTUALIZADO 02/01
Disculpen el atraso en las publicaciones. Ayer, con la emoción del estreno preferí no publicar nada y hoy he llegado a mi casa molida.
A la escena todavía le faltan algunos retoques pero calculo que durante el día la subiré.
Saludos.
A la escena todavía le faltan algunos retoques pero calculo que durante el día la subiré.
Saludos.
nato_kine- Policia de homicidios
- Mensajes : 510
Fecha de inscripción : 16/02/2012
Edad : 38
Localización : Argentina
Re: Tan solo, mi imaginación y yo - ACTUALIZADO 02/01
Pensé que ayer subirias uno nuevo
Bueno veo que no has tenido tiempo que penita, pero me tiene intrigada en cuanto a que ira la proxima, espero que la subas pronto.
Sin lugar a dudas la espero con ansia.
Bueno veo que no has tenido tiempo que penita, pero me tiene intrigada en cuanto a que ira la proxima, espero que la subas pronto.
Sin lugar a dudas la espero con ansia.
Invitado- Invitado
Escena 19: Cena, baile y oscuridad_Parte 1
Que bueno que por fin he tenido un tiempo para acomodar mis ideas, me hacía mucha falta esto. Debido a que pasé varios días sin escribir, la historia se hizo larga así que la dividí en 2 para que puedan leerla por partes y no se les haga tan pesado.
PARTE 1: DÉJALO EN MIS MANOS
CENA, BAILE Y OSCURIDAD
PARTE 1: DÉJALO EN MIS MANOS
Kate estaba perdiendo la paciencia. Odiaba no resolver un caso y en este no solo parecían estar muy lejos de resolverlo sino que en vez de avanzar, retrocedían. Todavía no sabían quien era la víctima, no tenían ningún sospechoso ni pistas. Y el arma no había conducido a nada, solo a hacerles perder el tiempo, lo cual seguramente era parte del plan del asesino. No habló durante casi todo el trayecto a la comisaría.
Castle la conocía bien y sabía lo que podía estar pasando por su cabeza. También sabía que romperse la cabeza pensando sin tener elementos era agobiante y solo empeoraría las cosas. Miró la hora y consideró que lo mejor sería distraerla un poco para que luego pudieran rendir mejor el resto del día. Mientras esperaban en el tráfico, Castle carraspeó.
- Kate, vamos a comer algo, ya es más del mediodía.
- Podemos comprar algo por el camino. – le contestó un poco ofuscada.
- No es eso, necesitas distraerte un poco.
- Distraerme es lo que menos quiero en estos momentos.
- No dije que quieras, dije que necesitas. Tienes que despejarte un poco para ver con más claridad las cosas. Si seguimos así, no vamos a llegar a nada.
Kate se quedó callada y se concentró en conducir. Castle pensó que no le haría caso pero cuando se dio cuenta, estaban llegando a Remi’s.
- No nos quedaremos mucho. – le dijo tajante.
- Está bien. Siempre y cuando prometas no hablar del caso. – le pidió. Kate rezongó pero finalmente aceptó.
Salieron del auto y una vez adentro del local, se sentaron en un lugar apartado.
- Si no quieres que hable del caso, ¿de qué quieres hablar? – Castle estaba por hablar pero fueron interrumpidos por la camarera, que les tomó el pedido y luego se retiró.
- No se… Podríamos hablar de lo hermosa que eres y de cómo te extraño. - le dijo con una leve sonrisa.
- Vamos Castle, hablo en serio. – lo regañó ruborizándose.
- Yo también. – la tomó de la mano y se la acercó para darle un beso. - ¿Tienes algo pensado para la noche?
- En realidad, ni lo había pensado.
- Me alegro. Me gustaría llevarte a comer… y podríamos ir a bailar, ¿quieres?
- Lo de comer afuera… preferiría comer en casa si no te molesta. Pero acepto lo de ir a bailar, hace mucho que no salgo.
- Grandioso porque desde que te vi bailar hace más de un año, cuando fuimos a ese club, me muero por repetirlo. – le miró con una gran sonrisa.
- ¿Eso? No creo que fuera para tanto… aunque sí recuerdo que mirabas algo que no debías. – le contestó con una sonrisa picarona.
- Oh, créeme que lo fue… y si, estaba mirando. ¿Realmente no pensabas qué me provocaría que te movieras? – le preguntó. Ella se mordió el labio conteniendo una sonrisa traviesa.
- La tentación era muy fuerte, no lo pude evitar. Sólo estaba jugando contigo.
- Y lo hiciste muy bien, debo decir. Con ese cuerpo, tienes que medirte. Creo que no tienes idea de lo que provocas en los hombres. – le advirtió. Ella lo miró sorprendida. Pensaba que por haber sido un mujeriego, estaría acostumbrado a esas cosas. Pero en vez de eso, reconocía que hasta sus gestos más sutiles eran capaces de despertar su imaginación. – Con respecto a la cena… - continuó sacándola de sus pensamientos. – …acepto que sea en tu casa pero yo me encargaré de todo.
- Mucho mejor para mi entonces.
- Voy a necesitar que me prestes tus llaves. – le avisó extendiendo su mano. Kate le miró la mano pensativa.
- Eso no será necesario. – le dijo finalmente. Castle iba a preguntar por qué pero justo llegó la comida y Kate siguió con otro tema. - ¿Ya tienes pensado donde me llevarás a bailar?
- Si, pero es una sorpresa. – dijo empezando a comer.
- Por lo menos dime como tengo que vestirme. – Castle lo meditó.
- Puedes ir con algo parecido a aquella vez, con eso será más que suficiente.
- ¿Seguro que no quieres decirme?
- Seguro, ahora come. – Kate rezongó por lo bajo y luego se dedicó a comer.
Cuando terminaron, Kate lo dejó en la comisaría y se excusó diciendo que se había acordado de que tenía que terminar un trámite. Él la quiso acompañar pero ella prefirió que se quedara ahí a ayudar.
Mientras esperaba, se puso a hojear unos registros bancarios en busca de algo que hubieran haber podido pasar por alto. Después de un rato decidió que necesitaba desesperadamente un café así que se levantó y se dirigió a la sala de descanso.
La comisaría estaba muy tranquila, casi desierta a excepción de algún que otro agente concentrado en llenar algún reporte.
En ese momento llegó Kate, que lo buscaba con la vista a la vez que miraba si alguien los estaba observando. Entró en la sala de descanso, le agarró la mano y le dio un juego de llaves. Se acercó a su oído. – Puedes quedártelas, no las pierdas. – le susurró. Luego le dio un beso rápido en la mejilla, dio media vuelta y se dirigió a su escritorio.
Castle no tuvo ni tiempo de reaccionar. Cuando se dio cuenta del significado de sus palabras, sonrió y rápidamente se guardó las llaves en el bolsillo… sus llaves, del apartamento de ella.
Terminó el café que había estado haciendo y preparó otro para ella. Después de pasarle el café se sentó a su lado para seguir con los informes.
Esposito y Ryan habían vuelto al barrio para ver si encontraban a alguien que no hubiese estado la primera vez y chequearon todos los accesos que se pudiera tener al edificio, incluyendo los más inverosímiles.
A eso de las 5 de la tarde, Castle se levantó con la idea de irse. Pero antes, se acercó un poco a ella, sin llamar la atención, y le habló despacio. – Me voy, tengo algunas cosas que hacer, ¿quieres que te prepare otro café antes de irme?
- Me vendría muy bien. Esto de estar sentada todo el día leyendo es peor que correr una maratón. – Castle fue a preparárselo y se lo dejó en el escritorio. Esposito y Ryan ya habían vuelto, un poco frustrados, aunque habían traído algunos datos para chequear. Castle tenía que decirle algo más a Kate pero no quería llamar la atención de ese par, que estaba muy atento. Agarró un papel y escribió:
Le pasó el papel. - ¿Me podrías hacer el favor de averiguarme esto? – le dij aparentando normalidad. Kate tomó el papel intrigada y lo leyó. Se mordió el labio.
- De acuerdo… pero recuerda que es un ida y vuelta. – le dijo en clave, refiriéndose a que ella también lo amaba.
- Te lo agradezco. – y dirigiéndose a todos. – Tengo cosas que hacer así que me retiro. Nos vemos mañana. – Saludó con la mano y fue camino al ascensor.
Se dirigió primero a su casa para buscar algunas cosas que necesitaría, después pasó a comprar las cosas para la cena y por último se dirigió a lo de Kate.
Cuando sacó las llaves se dio cuenta de que tenía un llavero en forma de placa de policía en miniatura. Inspeccionándola mejor notó que se abría y dentro tenía una foto. Nada más ni nada menos que una foto de ella, en primer plano, donde se le veían esos hermosos ojos que tanto le encantaban.
Kate estuvo un rato más revisando los informes y cuando terminó, sin encontrar nada, decidió ayudar a los muchachos con los datos que necesitaban. De esa forma, si no conseguían nada, por lo menos podrían irse todos más temprano. Y de todas maneras, tenía que hacer tiempo hasta las 8.
Castle entró al departamento de Kate y vio que le faltaba un poco de orden. Supuso que era por la pesadilla que había tenido la noche anterior. Dejó las cosas en la cocina y subió la ropa y el bolso a la habitación. Después decidió que lo mejor sería primero ordenar y preparar el lugar, luego cocinar y mientras todo se cocinaba, se ducharía. Se puso manos a la obra.
Cuando finalmente salió de la ducha, no se vistió, por dos razones. Primero que no quería que la ropa se le ensuciara y segundo porque no quería que ella lo viera ya preparado cuando llegara. Divisó su pijama, el cual se encontraba en el medio de la cama, arrugado junto con las sábanas. ‘Durmió abrazada al pijama’, pensó y eso le sacó una sonrisa. Se puso únicamente el pantalón. Antes de bajar a ultimar detalles de la decoración y la comida, armó la cama.
El equipo había terminado de chequear la información que tenían a eso de las 7:30 PM. Desgraciadamente, una vez más no habían llegado a nada. Acordaron que era suficiente por ese día. Cuando se estaban retirando, Kate recordó que si salían a la noche le costaría levantarse temprano, necesitaba una excusa para llegar tarde así que simuló que estaba un poco descompuesta. Espo y Ryan la vieron tan adolorida que se preocuparon pero ella dijo que lo único que necesitaba sería estar en su casa tranquila y una buena noche de sueño. Los muchachos le dijeron que no se preocupara, que si al otro día se seguía sintiendo mal, que ellos se ocuparían de la investigación. Misión cumplida.
El tránsito estaba fatal así que llegó a su apartamento a eso de las 8:20. Castle le había pedido que toque la puerta pero ella se moría por ver lo que había hecho dentro. Abrió la puerta lo más despacio que pudo y cuando pensó que lo lograría, algo trabó la puerta y luego empezó a cerrarla. Enseguida, él se asomó.
- Te pedí que tocaras la puerta. – le recordó. – No puedes ver, es una sorpresa.
- Vamos, Castle. Quiero subir a alistarme. Déjame pasar.
- No. Tendrás que entrar con los ojos cerrados.
- Ni se te ocurra pensar que subiré las escaleras con los ojos cerrados. – le dijo ella. Castle lo pensó.
- Entonces, yo te cargaré hasta arriba. – miró el pasillo para ver si había gente y salió. Kate no pudo evitar echarle una mirada. Estaba terriblemente sexy medio despeinado, con el torso desnudo y descalzo. Aparte, ese pantalón le quedaba muy bien.
- ¿Vas a quedarte toda la noche con esa ropa? – se le acercó y lo abrazó fuertemente. – Por mi, encantada. – Él le sonrió y le dio un beso.
- No quería que me vieras todavía. Bueno, veamos como hago para cargarte escaleras arriba. – Pensó un poco y después quiso agarrarla de la cintura para cargársela al hombro pero Kate retrocedió.
- Ni se te ocurra, piensa en otra. – le advirtió.
- De acuerdo… súbete a mi espalda. – le dijo dándose vuelta. Ella se imaginó la situación y se le ocurrió una forma más segura y por qué no, más divertida.
- No está mal pero es el ángulo incorrecto. Será más seguro por delante. De esa forma, si pierdes el equilibrio nos caeremos hacia adelante.
- Ese ángulo me gusta mucho más. – le dijo levantándole una ceja.
Se pusieron uno frente al otro y Kate levantó una pierna para que él la sostuviera. Sin embargo, no sabían muy bien como seguir.
- Es complicado hacer esto en el aire.
- De acuerdo, probemos algo. – le dijo él. Miró a ambos lados del pasillo cuidando que no hubiera nadie mirando. La acorraló contra la pared y la besó apasionadamente. Mientras, bajó un poco el cuerpo y la agarró de los glúteos para levantarla. Instintivamente, Kate levantó ambas piernas y le rodeó la cintura. Entonces, él dejó de besarla y le dijo con una sonrisa de satisfacción. – Funcionó.
Kate rápidamente se bajó indignada por ser tan predecible ante sus caricias y su tacto.
- Vamos Kate, no te enojes. No es algo malo que nuestros cuerpos reaccionen ante el otro. Es como cuando te muerdes el labio.
- ¿Que pasa cuando me muerdo labio? – le dijo extrañada.
- Lo haces cuando te reprimes. Por ejemplo… hoy lo hiciste cuando leíste la nota que te dejé. Eso me hizo ver que te gustó lo que puse y que te morías de ganas de besarme, ¿me equivoco?
Kate lo pensó y se dio cuenta de que estaba en lo cierto y se odió por eso. Le daba vergüenza ver como la leía y se daba cuenta de todas sus reacciones. Golpeó suavemente su cabeza contra su pecho y lo abrazó.
- Odio admitirlo pero… es cierto. – le dijo casi en un susurro. – Yo no noto ese tipo de cosas contigo, por lo menos no tan claramente.
- Es que yo soy más directo y si quiero algo, te lo digo o simplemente lo hago sin consultarte. – le dijo para molestarla. Kate levantó la vista para regañarlo por decir que hacía lo que quería. – O te preparo café. – continuó. Ella relajó la cara y asintió… esa seña la conocía bien. – Bueno, ¿vamos de nuevo? No pienses en nada, sólo concéntrate en mí. Kate asintió.
Castle volvió a mirar a los lados y la acorraló contra la pared. La besó de nuevo con intensidad y vio que ella se dejaba llevar. Entonces volvió a bajar un poco el cuerpo y la agarró nuevamente para levantarla. Otra vez y sin darse cuenta, ella levantó las piernas para abrazarse a él. Esta vez, el beso duró un poco más. Ambos se estaban dejando llevar. Castle reaccionó y dejó de besarla, un poco agitado. Miró y vio que habían logrado la posición de nuevo.
- Infalible. – le dijo con una sonrisa. Kate se mordió el labio. – Ahí esta de nuevo, por mi no te reprimas. – Kate le sonrió. Se abrazó fuerte a su cuello y se acercó a su oído.
- Ya quisieras. Entremos antes de que alguien nos vea. Aparte, tengo hambre.
- De acuerdo. Una última cosa… ¿puedes sostenerte sola? Necesito mis manos. – le pidió. Kate se aferró con brazos y piernas mientras él sacaba un antifaz para dormir. – Para asegurarme de que no veas nada. – Se lo puso. – Bien, aquí vamos.
Entraron y llegaron al pie de la escalera sin problemas. Antes de subir Castle se acomodó y la agarró un poco mejor. Mientras subía Kate empezó a jugar con su cuello, le lamía y mordía la oreja, detrás de ella, el cuello. Cuando estaban por la mitad Castle estaba muy agitado.
- Ahora veo por qué estabas preocupada de que pierda el equilibrio. – le dijo. Kate sonrió sin apartarse de su piel y lo mordió suavemente en el cuello. - Kate, si no quieres que nos caigamos, deja de hacer eso. – le dijo.
- ¿No te gusta? – le susurró con voz sensual.
- El problema es que me gusta demasiado y vamos a terminar por matarnos. Por lo menos aguanta a que llegue arriba.
- No veo que tendría eso de divertido. – se burló.
- Ja-ja-ja, muy graciosa. – se quejó. Respiró hondo y siguió subiendo.
Una vez en la habitación, se tumbó sobre la cama apoyándola delicadamente sobre ella. La posición en la que estaban era muy sugestiva y Kate quiso torturarlo un poco más así que empezó a besarlo de nuevo. Castle le siguió un poco la corriente pero notó que estaba empezando a excitarse demasiado, más sabiendo que ella tenía los ojos vendados. Era jugar con fuego.
- Será mejor que te prepares. Tengo que ver la comida. – le dijo separándose de ella. Kate se sacó el antifaz y se irguió apoyándose sobre los codos.
- ¿No eras tú la comida? – le preguntó con una sonrisa.
- Yo puedo ser el postre, si quieres. – tomó su bolso y un traje que estaba colgado y enfundado. Se dirigió a la puerta y antes de cerrar se dio vuelta. – Cuando estés lista mándame un mensaje o una señal para saber que estás por salir así me acomodo. – y sin más, cerró la puerta. Kate se dejó caer en la cama suspirando y tratando de calmarse.
Castle bajó, miró la comida y luego fue hasta la oficina para cambiarse.
Kate eligió su ropa detenidamente y se fue a preparar. Lo hizo lo más rápido que pudo porque la curiosidad y la ansiedad la estaban matando. Cuando estuvo lista, le mandó un mensaje al celular como le pidió. Castle revisó que todo estuviera listo y le avisó que podía bajar.
Castle la conocía bien y sabía lo que podía estar pasando por su cabeza. También sabía que romperse la cabeza pensando sin tener elementos era agobiante y solo empeoraría las cosas. Miró la hora y consideró que lo mejor sería distraerla un poco para que luego pudieran rendir mejor el resto del día. Mientras esperaban en el tráfico, Castle carraspeó.
- Kate, vamos a comer algo, ya es más del mediodía.
- Podemos comprar algo por el camino. – le contestó un poco ofuscada.
- No es eso, necesitas distraerte un poco.
- Distraerme es lo que menos quiero en estos momentos.
- No dije que quieras, dije que necesitas. Tienes que despejarte un poco para ver con más claridad las cosas. Si seguimos así, no vamos a llegar a nada.
Kate se quedó callada y se concentró en conducir. Castle pensó que no le haría caso pero cuando se dio cuenta, estaban llegando a Remi’s.
- No nos quedaremos mucho. – le dijo tajante.
- Está bien. Siempre y cuando prometas no hablar del caso. – le pidió. Kate rezongó pero finalmente aceptó.
Salieron del auto y una vez adentro del local, se sentaron en un lugar apartado.
- Si no quieres que hable del caso, ¿de qué quieres hablar? – Castle estaba por hablar pero fueron interrumpidos por la camarera, que les tomó el pedido y luego se retiró.
- No se… Podríamos hablar de lo hermosa que eres y de cómo te extraño. - le dijo con una leve sonrisa.
- Vamos Castle, hablo en serio. – lo regañó ruborizándose.
- Yo también. – la tomó de la mano y se la acercó para darle un beso. - ¿Tienes algo pensado para la noche?
- En realidad, ni lo había pensado.
- Me alegro. Me gustaría llevarte a comer… y podríamos ir a bailar, ¿quieres?
- Lo de comer afuera… preferiría comer en casa si no te molesta. Pero acepto lo de ir a bailar, hace mucho que no salgo.
- Grandioso porque desde que te vi bailar hace más de un año, cuando fuimos a ese club, me muero por repetirlo. – le miró con una gran sonrisa.
- ¿Eso? No creo que fuera para tanto… aunque sí recuerdo que mirabas algo que no debías. – le contestó con una sonrisa picarona.
- Oh, créeme que lo fue… y si, estaba mirando. ¿Realmente no pensabas qué me provocaría que te movieras? – le preguntó. Ella se mordió el labio conteniendo una sonrisa traviesa.
- La tentación era muy fuerte, no lo pude evitar. Sólo estaba jugando contigo.
- Y lo hiciste muy bien, debo decir. Con ese cuerpo, tienes que medirte. Creo que no tienes idea de lo que provocas en los hombres. – le advirtió. Ella lo miró sorprendida. Pensaba que por haber sido un mujeriego, estaría acostumbrado a esas cosas. Pero en vez de eso, reconocía que hasta sus gestos más sutiles eran capaces de despertar su imaginación. – Con respecto a la cena… - continuó sacándola de sus pensamientos. – …acepto que sea en tu casa pero yo me encargaré de todo.
- Mucho mejor para mi entonces.
- Voy a necesitar que me prestes tus llaves. – le avisó extendiendo su mano. Kate le miró la mano pensativa.
- Eso no será necesario. – le dijo finalmente. Castle iba a preguntar por qué pero justo llegó la comida y Kate siguió con otro tema. - ¿Ya tienes pensado donde me llevarás a bailar?
- Si, pero es una sorpresa. – dijo empezando a comer.
- Por lo menos dime como tengo que vestirme. – Castle lo meditó.
- Puedes ir con algo parecido a aquella vez, con eso será más que suficiente.
- ¿Seguro que no quieres decirme?
- Seguro, ahora come. – Kate rezongó por lo bajo y luego se dedicó a comer.
Cuando terminaron, Kate lo dejó en la comisaría y se excusó diciendo que se había acordado de que tenía que terminar un trámite. Él la quiso acompañar pero ella prefirió que se quedara ahí a ayudar.
Mientras esperaba, se puso a hojear unos registros bancarios en busca de algo que hubieran haber podido pasar por alto. Después de un rato decidió que necesitaba desesperadamente un café así que se levantó y se dirigió a la sala de descanso.
La comisaría estaba muy tranquila, casi desierta a excepción de algún que otro agente concentrado en llenar algún reporte.
En ese momento llegó Kate, que lo buscaba con la vista a la vez que miraba si alguien los estaba observando. Entró en la sala de descanso, le agarró la mano y le dio un juego de llaves. Se acercó a su oído. – Puedes quedártelas, no las pierdas. – le susurró. Luego le dio un beso rápido en la mejilla, dio media vuelta y se dirigió a su escritorio.
Castle no tuvo ni tiempo de reaccionar. Cuando se dio cuenta del significado de sus palabras, sonrió y rápidamente se guardó las llaves en el bolsillo… sus llaves, del apartamento de ella.
Terminó el café que había estado haciendo y preparó otro para ella. Después de pasarle el café se sentó a su lado para seguir con los informes.
Esposito y Ryan habían vuelto al barrio para ver si encontraban a alguien que no hubiese estado la primera vez y chequearon todos los accesos que se pudiera tener al edificio, incluyendo los más inverosímiles.
A eso de las 5 de la tarde, Castle se levantó con la idea de irse. Pero antes, se acercó un poco a ella, sin llamar la atención, y le habló despacio. – Me voy, tengo algunas cosas que hacer, ¿quieres que te prepare otro café antes de irme?
- Me vendría muy bien. Esto de estar sentada todo el día leyendo es peor que correr una maratón. – Castle fue a preparárselo y se lo dejó en el escritorio. Esposito y Ryan ya habían vuelto, un poco frustrados, aunque habían traído algunos datos para chequear. Castle tenía que decirle algo más a Kate pero no quería llamar la atención de ese par, que estaba muy atento. Agarró un papel y escribió:
Detective, nos vemos a las 8.
Cuando llegues toca el timbre, no entres.
Es una sorpresa.
I Y
RC.
Cuando llegues toca el timbre, no entres.
Es una sorpresa.
I Y
RC.
Le pasó el papel. - ¿Me podrías hacer el favor de averiguarme esto? – le dij aparentando normalidad. Kate tomó el papel intrigada y lo leyó. Se mordió el labio.
- De acuerdo… pero recuerda que es un ida y vuelta. – le dijo en clave, refiriéndose a que ella también lo amaba.
- Te lo agradezco. – y dirigiéndose a todos. – Tengo cosas que hacer así que me retiro. Nos vemos mañana. – Saludó con la mano y fue camino al ascensor.
Se dirigió primero a su casa para buscar algunas cosas que necesitaría, después pasó a comprar las cosas para la cena y por último se dirigió a lo de Kate.
Cuando sacó las llaves se dio cuenta de que tenía un llavero en forma de placa de policía en miniatura. Inspeccionándola mejor notó que se abría y dentro tenía una foto. Nada más ni nada menos que una foto de ella, en primer plano, donde se le veían esos hermosos ojos que tanto le encantaban.
Kate estuvo un rato más revisando los informes y cuando terminó, sin encontrar nada, decidió ayudar a los muchachos con los datos que necesitaban. De esa forma, si no conseguían nada, por lo menos podrían irse todos más temprano. Y de todas maneras, tenía que hacer tiempo hasta las 8.
Castle entró al departamento de Kate y vio que le faltaba un poco de orden. Supuso que era por la pesadilla que había tenido la noche anterior. Dejó las cosas en la cocina y subió la ropa y el bolso a la habitación. Después decidió que lo mejor sería primero ordenar y preparar el lugar, luego cocinar y mientras todo se cocinaba, se ducharía. Se puso manos a la obra.
Cuando finalmente salió de la ducha, no se vistió, por dos razones. Primero que no quería que la ropa se le ensuciara y segundo porque no quería que ella lo viera ya preparado cuando llegara. Divisó su pijama, el cual se encontraba en el medio de la cama, arrugado junto con las sábanas. ‘Durmió abrazada al pijama’, pensó y eso le sacó una sonrisa. Se puso únicamente el pantalón. Antes de bajar a ultimar detalles de la decoración y la comida, armó la cama.
El equipo había terminado de chequear la información que tenían a eso de las 7:30 PM. Desgraciadamente, una vez más no habían llegado a nada. Acordaron que era suficiente por ese día. Cuando se estaban retirando, Kate recordó que si salían a la noche le costaría levantarse temprano, necesitaba una excusa para llegar tarde así que simuló que estaba un poco descompuesta. Espo y Ryan la vieron tan adolorida que se preocuparon pero ella dijo que lo único que necesitaba sería estar en su casa tranquila y una buena noche de sueño. Los muchachos le dijeron que no se preocupara, que si al otro día se seguía sintiendo mal, que ellos se ocuparían de la investigación. Misión cumplida.
El tránsito estaba fatal así que llegó a su apartamento a eso de las 8:20. Castle le había pedido que toque la puerta pero ella se moría por ver lo que había hecho dentro. Abrió la puerta lo más despacio que pudo y cuando pensó que lo lograría, algo trabó la puerta y luego empezó a cerrarla. Enseguida, él se asomó.
- Te pedí que tocaras la puerta. – le recordó. – No puedes ver, es una sorpresa.
- Vamos, Castle. Quiero subir a alistarme. Déjame pasar.
- No. Tendrás que entrar con los ojos cerrados.
- Ni se te ocurra pensar que subiré las escaleras con los ojos cerrados. – le dijo ella. Castle lo pensó.
- Entonces, yo te cargaré hasta arriba. – miró el pasillo para ver si había gente y salió. Kate no pudo evitar echarle una mirada. Estaba terriblemente sexy medio despeinado, con el torso desnudo y descalzo. Aparte, ese pantalón le quedaba muy bien.
- ¿Vas a quedarte toda la noche con esa ropa? – se le acercó y lo abrazó fuertemente. – Por mi, encantada. – Él le sonrió y le dio un beso.
- No quería que me vieras todavía. Bueno, veamos como hago para cargarte escaleras arriba. – Pensó un poco y después quiso agarrarla de la cintura para cargársela al hombro pero Kate retrocedió.
- Ni se te ocurra, piensa en otra. – le advirtió.
- De acuerdo… súbete a mi espalda. – le dijo dándose vuelta. Ella se imaginó la situación y se le ocurrió una forma más segura y por qué no, más divertida.
- No está mal pero es el ángulo incorrecto. Será más seguro por delante. De esa forma, si pierdes el equilibrio nos caeremos hacia adelante.
- Ese ángulo me gusta mucho más. – le dijo levantándole una ceja.
Se pusieron uno frente al otro y Kate levantó una pierna para que él la sostuviera. Sin embargo, no sabían muy bien como seguir.
- Es complicado hacer esto en el aire.
- De acuerdo, probemos algo. – le dijo él. Miró a ambos lados del pasillo cuidando que no hubiera nadie mirando. La acorraló contra la pared y la besó apasionadamente. Mientras, bajó un poco el cuerpo y la agarró de los glúteos para levantarla. Instintivamente, Kate levantó ambas piernas y le rodeó la cintura. Entonces, él dejó de besarla y le dijo con una sonrisa de satisfacción. – Funcionó.
Kate rápidamente se bajó indignada por ser tan predecible ante sus caricias y su tacto.
- Vamos Kate, no te enojes. No es algo malo que nuestros cuerpos reaccionen ante el otro. Es como cuando te muerdes el labio.
- ¿Que pasa cuando me muerdo labio? – le dijo extrañada.
- Lo haces cuando te reprimes. Por ejemplo… hoy lo hiciste cuando leíste la nota que te dejé. Eso me hizo ver que te gustó lo que puse y que te morías de ganas de besarme, ¿me equivoco?
Kate lo pensó y se dio cuenta de que estaba en lo cierto y se odió por eso. Le daba vergüenza ver como la leía y se daba cuenta de todas sus reacciones. Golpeó suavemente su cabeza contra su pecho y lo abrazó.
- Odio admitirlo pero… es cierto. – le dijo casi en un susurro. – Yo no noto ese tipo de cosas contigo, por lo menos no tan claramente.
- Es que yo soy más directo y si quiero algo, te lo digo o simplemente lo hago sin consultarte. – le dijo para molestarla. Kate levantó la vista para regañarlo por decir que hacía lo que quería. – O te preparo café. – continuó. Ella relajó la cara y asintió… esa seña la conocía bien. – Bueno, ¿vamos de nuevo? No pienses en nada, sólo concéntrate en mí. Kate asintió.
Castle volvió a mirar a los lados y la acorraló contra la pared. La besó de nuevo con intensidad y vio que ella se dejaba llevar. Entonces volvió a bajar un poco el cuerpo y la agarró nuevamente para levantarla. Otra vez y sin darse cuenta, ella levantó las piernas para abrazarse a él. Esta vez, el beso duró un poco más. Ambos se estaban dejando llevar. Castle reaccionó y dejó de besarla, un poco agitado. Miró y vio que habían logrado la posición de nuevo.
- Infalible. – le dijo con una sonrisa. Kate se mordió el labio. – Ahí esta de nuevo, por mi no te reprimas. – Kate le sonrió. Se abrazó fuerte a su cuello y se acercó a su oído.
- Ya quisieras. Entremos antes de que alguien nos vea. Aparte, tengo hambre.
- De acuerdo. Una última cosa… ¿puedes sostenerte sola? Necesito mis manos. – le pidió. Kate se aferró con brazos y piernas mientras él sacaba un antifaz para dormir. – Para asegurarme de que no veas nada. – Se lo puso. – Bien, aquí vamos.
Entraron y llegaron al pie de la escalera sin problemas. Antes de subir Castle se acomodó y la agarró un poco mejor. Mientras subía Kate empezó a jugar con su cuello, le lamía y mordía la oreja, detrás de ella, el cuello. Cuando estaban por la mitad Castle estaba muy agitado.
- Ahora veo por qué estabas preocupada de que pierda el equilibrio. – le dijo. Kate sonrió sin apartarse de su piel y lo mordió suavemente en el cuello. - Kate, si no quieres que nos caigamos, deja de hacer eso. – le dijo.
- ¿No te gusta? – le susurró con voz sensual.
- El problema es que me gusta demasiado y vamos a terminar por matarnos. Por lo menos aguanta a que llegue arriba.
- No veo que tendría eso de divertido. – se burló.
- Ja-ja-ja, muy graciosa. – se quejó. Respiró hondo y siguió subiendo.
Una vez en la habitación, se tumbó sobre la cama apoyándola delicadamente sobre ella. La posición en la que estaban era muy sugestiva y Kate quiso torturarlo un poco más así que empezó a besarlo de nuevo. Castle le siguió un poco la corriente pero notó que estaba empezando a excitarse demasiado, más sabiendo que ella tenía los ojos vendados. Era jugar con fuego.
- Será mejor que te prepares. Tengo que ver la comida. – le dijo separándose de ella. Kate se sacó el antifaz y se irguió apoyándose sobre los codos.
- ¿No eras tú la comida? – le preguntó con una sonrisa.
- Yo puedo ser el postre, si quieres. – tomó su bolso y un traje que estaba colgado y enfundado. Se dirigió a la puerta y antes de cerrar se dio vuelta. – Cuando estés lista mándame un mensaje o una señal para saber que estás por salir así me acomodo. – y sin más, cerró la puerta. Kate se dejó caer en la cama suspirando y tratando de calmarse.
Castle bajó, miró la comida y luego fue hasta la oficina para cambiarse.
Kate eligió su ropa detenidamente y se fue a preparar. Lo hizo lo más rápido que pudo porque la curiosidad y la ansiedad la estaban matando. Cuando estuvo lista, le mandó un mensaje al celular como le pidió. Castle revisó que todo estuviera listo y le avisó que podía bajar.
Última edición por nato_kine el Mar Oct 23, 2012 5:39 pm, editado 2 veces
nato_kine- Policia de homicidios
- Mensajes : 510
Fecha de inscripción : 16/02/2012
Edad : 38
Localización : Argentina
Re: Tan solo, mi imaginación y yo - ACTUALIZADO 02/01
sigueee me encantaaa
castle&beckett..cris- Escritor - Policia
- Mensajes : 5471
Fecha de inscripción : 20/03/2011
Edad : 33
Localización : Menorca..I LOVE NEW YORK..NYPD..RICK CASTLE & KATE BECKETT
Re: Tan solo, mi imaginación y yo - ACTUALIZADO 02/01
que ganaaaaaaaaaas teniaa, ha sido fantastitititititicooooooooo!
Espero que nos des la segunda parte pronto
Espero que nos des la segunda parte pronto
Invitado- Invitado
Re: Tan solo, mi imaginación y yo - ACTUALIZADO 02/01
Más, más, más... quiero más! Continúa pronto, me encanta .
okusak- Policia de homicidios
- Mensajes : 749
Fecha de inscripción : 03/05/2012
Edad : 34
Localización : Entre la nebulosa Nervitana y el país de nunca jamás.
Página 7 de 17. • 1 ... 6, 7, 8 ... 12 ... 17
Temas similares
» YO Y MI IMAGINACIÓN
» producto de mi imaginación
» Caskett, lo que me da mi imaginación.
» Imaginacion del capi 3x22
» mi imaginación en todo lo alto
» producto de mi imaginación
» Caskett, lo que me da mi imaginación.
» Imaginacion del capi 3x22
» mi imaginación en todo lo alto
Foro Castle :: OffTopic :: Fan Fics
Página 7 de 17.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.