Obligada a improvisar (Epílogo) 23/07 TERMINADO

Un finde sin entrar y me encuentro con dos grandes capítulos.
En el primero Kate sigue en su salsa, siendo grosera con el y si aceptar un mínimo acercamiento, parece que sólo quiere hacerle daño, y creo que lo está consiguiendo.
En este segundo, ante la ausencia de Castle parece que se da cuenta daño que le causó en la anterior discusión. Jejejejeje, me ha hecho gracia el pensamiento de ella acerca de que Castle aun no le ha tocado la barriga, ¿cómo quiere que lo haga, si cada vez que el intenta un acercamiento lo ataca como las hienas? Jejejejeje.
Bueno deseando que llegue la madre de kate y saber si acepta la propuesta de Rick, a ver si en ese tiempo que fingen ser pareja logran aclarar las cosas

Sigue esta genial espero que Kate acepte!

Me gusta, me gusta, me gusta!

Yaye escribió:Un finde sin entrar y me encuentro con dos grandes capítulos.
En el primero Kate sigue en su salsa, siendo grosera con el y si aceptar un mínimo acercamiento, parece que sólo quiere hacerle daño, y creo que lo está consiguiendo.
En este segundo, ante la ausencia de Castle parece que se da cuenta daño que le causó en la anterior discusión. Jejejejeje, me ha hecho gracia el pensamiento de ella acerca de que Castle aun no le ha tocado la barriga, ¿cómo quiere que lo haga, si cada vez que el intenta un acercamiento lo ataca como las hienas? Jejejejeje.
Bueno deseando que llegue la madre de kate y saber si acepta la propuesta de Rick, a ver si en ese tiempo que fingen ser pareja logran aclarar las cosas

jajaja ya ves, él pobre debe temer por su vida al pensar en tocarle el vientre xD

28Caskett escribió:Sigue esta genial espero que Kate acepte!

y que les vaya bien jeje

agecastbet escribió:Biennnn éste capítulo es la madre del cordero, jajajajajajaja Menuda propuesta, ahora sí que ya no tiene escapatoria, y me has dejado intrigadisima con la madre de Beckett, no sé cómo pensar pues no se parece en nada a la de la serie, y además entran en juego otros parámetros, como el qué dirán... para la familia de Kate que es como decir para los más importantes, pues en toda relación, casi siempre la familia de la novia es la que asume más claramente que como se suele decir popularmente, no se pierde a una hija, se gana un hijo, eso, claro siempre que sea mujer, si se trata del hombre ahí de fijo que se pierde un hijo, jajajajajajaja tonterías de los que son tan conservadores como parecen ser los familiares de Kate.
Las espadas en alto, qué decidirá Kate??? yo creo adivinar que teme más a su madre que a Castle, jajajajajaja y pienso que la mamá de Kate va a quedar muy impresionada, a pesar del inicio no muy convencional de la pareja, jajajajajaja
Pero eso es lo que pienso yo, ahora veremos lo que tienes pensado tú, jajajajajaja
Y lo más importante para mí, la caída de una diosa... en los brazos de un ...   jajajajajajajaja
Sigue pronto que ya ves que estoy un tanto liada con tanta teoría, haz que pueda ver la luz, jajajajajaja
BESOTESSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS

jaja sí, la madre de Kate es todo un personaje... y yo tb creo que le teme más a ella que a él xD jaja además, en este caso Rick no tiene familiares, así que el lo tiene más fácil. Ahora ver cómo se desenvuelven :)Besos

moxaCaSkett(sariita) escribió:Me gusta, me gusta, me gusta!

Me alegro!

Capítulo 13

-Sé que tú no quieres nada conmigo ni… bueno, creo que no hace falta que yo te lo diga. Tú lo sabes mejor que yo. –Se rasca la cabeza, nervioso. –Solo tendríamos que fingir.

Yo miro al suelo, pensando en si aceptar o no. Sí, eso me podría ayudar para aguantar a mi madre pero qué sería de mí, de mis principios. En qué lugar me dejaría. Además, no es que me siente bien con él aceptar su ayuda…

Rick me está dejando pensar tranquila. No interviene pero no deja de cambiar el peso de su cuerpo sobre sus piernas y no me quita los ojos de encima, por lo que me está poniendo nerviosa y, así, no puedo pensar por muy callado que esté.

-¿Por qué me ayudarías? –pregunto, observando sus ojos azules.

Ahora es su turno de quedarse pensativo.

-Eres la madre de mi hija, futura hija –se encoge de hombros.

-Okay… -digo, haciendo una mueca,

-¿Eso es?

Me tapo la cara con mis manos, frustrada por no saber qué contestar. Hacerme pasar por su novia sería jugar con fuego, pero no, yo no voy a enamorarme de él. Y ahora que lo pienso, me debe hacerme este favor.

-Eso es que sí. –Acepto, finalmente.

Lo veo reprimir una sonrisa.

-Bien, pues, entonces, tenemos una semana para ponernos de acuerdo y conocernos lo suficiente para no ser pillados.

-Sí –contesto, comprendiendo que esto es un gran error.  Y, todavía, no ha empezado.


Entramos en su casa. Hoy mismo empezados a “estudiar” nuestro teatro. Mi madre es muy meticulosa. Mucho más que yo. Y sé que va a querer saber todo. Por no decir, que se va a fijar hasta en el último detalle. Y lo más importante: va a querer saber por qué no nos hemos casado y nos atosigará con la boda. Querrá que lo hagamos antes de que dé a luz.

Yo solo espero que esté tan conmocionada con las “noticias”, en plural, sobre todo, con mi embarazo que no quiera profundizar mucho en mi relación con Rick. Por ahí, sí, estoy perdida.

-Ponte cómoda, voy a ir a recoger a Daniela a lo de la vecina –me avisa.

-Vale.

Siento algo rascarme las piernas. Cuando miro hacia abajo me encuentro con Olaf, que me mira con sus patas de delante echadas en mí, moviéndola para que le haga caso. Me agacho, flexionando las rodillas, y lo acaricio entre sus orejas.  Ha crecido bastante en este mes que no lo he visto. Le sonrío y el perro quita sus patas para ponerlas en el suelo. Me mira y menea su cola.

-Ya estamos aquí –oigo la voz de Castle en mi espalda.

Olaf ladra y corre hasta Daniela, que también corre graciosamente hacia él.

-Parece que llevan semanas separados y solo han sido unas horas –me dice Rick, cuando su hija se agacha a abrazar a su perro.

-Es bueno que tengan esta amistad. Él nunca la va a decepcionar ni nada. Nunca tendrá a alguien más fiel a su lado.

-¡Eh! –dice, como si estuviese molesto con mi comentario. Aunque por la sonrisa que se dibuja en sus labios, sé que no lo está. –Me tendrá a mí. Siempre. –Es tal la seguridad y la intensidad en su mirada al decir la última palabra, que yo asiento de inmediato y no soy capaz de contestar.



-¿Dónde se supone que nos conocimos? –me pregunta, poniéndome un folio en blanco delante y ofreciéndome un bolígrafo. Yo lo miro desconcertada. –Para que lo apuntemos y lo estudiamos. Así, no se nos olvidará nada. –Acepto el bolígrafo y escribo la pregunta.

-¿Dónde sugieres tú? –inquiero.

-No lo sé. Podría ser en el centro comercial, en la calle, en una cafetería… o podemos poner la verdad, que nos conocimos en…

-En una firma de mis libros –termino yo, apartando mis ojos de los suyos cuando lo veo sonreír.

-¿Te acuerdas? –sonríe.

-¿Qué? –finjo que no sé de qué me habla.

-De cuando nos conocimos, con toda la gente que había allí…

-¿Hace cuánto? –pregunto, queriendo dejar la anterior pregunta ahí. No quiero terminar dándole la razón. No me acuerdo de todo el mundo al que firmo un libro y más en una firma con tantísima gente como fue aquella, pero… sus ojos, el azul de sus ojos me llamaron la atención desde que nuestras miradas chocaron.

-Tiene que hacer, a ver, tienes casi 4 meses, 15 semanas de embarazo. ¿Cuánto cree que le gustaría a tu madre que durase nuestra relación antes de que te quedases embarazada?

-El suficiente como para que nos dé tiempo a casarnos, así que...

-Pero puedo suceder –escucho que dice entre dientes, trago saliva.

-1 año, hace poco más de un año que no viene a verme, así que, sería creíble. –Sigo, haciendo que no he escuchado su última frase.

-Bien –dice, solamente, anotándolo en su folio. –Oye, Kate, -deja el bolígrafo encima de la barra de la cocina, donde estamos escribiendo. –Preferiría no decir lo de Daniela, no quiero que se sepa que es adoptada.

-Vale. Si así lo quieres, vale. Yo no diré nada.

-Gracias.

Yo solo asiento, mirando mis anotaciones. Mentiría si dijese que no tengo curiosidad por saber por qué no quiere decir la verdad sobre ese asunto, pero entiendo que debe de ser algo muy personal e importante para él.

-¿Qué más tenemos que tener en cuenta? –inquiero, para romper el silencio que se ha instalado entre nosotros.



Dos horas después tenemos todas las respuestas que necesitamos para pasar el examen de la visita de mi madre, aunque tengo mis dudas de que esto salga bien. No es solo dar respuestas también es…

-¡Oh, Dios! –exclamo al recordar algo.

-¿Qué? ¿Qué se no ha olvidado? –pregunta, mirando todas las preguntas de su folio.

-Lo más importante… -me llevo las manos a la cabeza.

-¿Qué es? –inquiere.

-Que ella siempre se queda a dormir en mi casa y, si se supone que tenemos una relación estable y todo eso, lo normal es que vivamos juntos…

-Por lo que sería un problema, o, bueno, puedo no serlo. –lo miro confundida, sin saber muy bien a qué se refiere o prefiriendo no estar en lo cierto en lo que va decir. –Puedes mudarte el tiempo que se quede.

-No. –Me niego. –Una cosa es fingir que somos parejas y otra muy distinta tener que convivir juntos.

-Kate… es casi lo mismo.

-Casi, pero no lo es.

-¿Me estás diciendo que hemos hecho todo esto para nada? –me enseña el papel pintado por las dos carillas. -¿He gastado dos horas de mi vida para que al final te niegues?

-Yo nunca he tenido claro esto.

-Y yo pensaba que el favor te lo estaba haciendo yo a ti. Aunque parece que es al revés.

-Yo no te lo he pedido. –Digo a la defensiva.

-Lo sé. Solo quería ayudarte.

-¿Con qué intenciones? Porque, seguro, que no son buenas. –He empezado a levantar la voz y Rick me señala a su hija que está al otro lado de la sala dormida con la cabeza encima del cuerpo de Olaf.

-¿Con qué intenciones? –repite, levantando los brazos, exasperado. –¡No lo puedo creer! ¿Qué intenciones podría tener?

-No lo sé, dímelo tú. –Me cruzo de brazos.

-Pues no lo sé. Eres tú la que lo has dicho. Yo solo quería ayudar, pero ya veo que no quieres mi ayuda. –Se levanta de su banco. –Que te vaya bien con tu madre.

Se va, dejando me allí, sentada. Lo veo coger a su hija en brazos y llevarla hasta su habitación.

Apoyo mi cabeza en uno de mis brazos, que a su vez está apoyado en posado en la barra. Bufo. ¿Por qué tiene que ser todo tan complicado?


-Rick –lo llamo cuando lo veo salir de la habitación.

-¿Qué? –se da la vuelta para mirarme, parece cansado.

Camino varios pasos hacia él, dubitativa.

-Lo siento –nada más decir estas dos palabras, agacho mi mirada. No lo hago por vergüenza, sino porque una parte en mi interior no ha parado de repetirme de que no tenía de qué disculparme pero, al final, ha ganado la otra.

Él asiente. Parece satisfecho porque se acerca más a mí.

-Entonces, ¿te vas a mudar?

Yo cierro los ojos y suspiro. Intentando convencerme de que esto es lo mejor.

-Sí, me mudaré. –Digo en un susurro.

-Pues tendremos que prepararlo todo. Te dejaré espacio en mi armario.

-Rick –pongo mi mano en su brazo cuando pasa por mi lado-, gracias.

-No hay de qué. –Me dice con una sonrisa.

Que bien que ha aceptado el plan, jejejejeje, ya pensaba yo que cuando Rick dijo lo de mudarse se marcharía debido a su reacción. Que odisea les va a tocar vivir, aunque en esa semana que tienen antes de que llegue su madre tendrán que seguir conociéndose, a ver si se empiezan a llevar bien ya
Deseando leer ya el siguiente   

sigueee

Que bien lo llevas!! Siempre kate que se sale de sus casillas y el pobre rick sólo queriendo ayudar

Esta genial!! Espero con ansias el proximo capitulo sigue!!!!

Yaye escribió:Que bien que ha aceptado el plan, jejejejeje, ya pensaba yo que cuando Rick dijo lo de mudarse se marcharía debido a su reacción. Que odisea les va a tocar vivir, aunque en esa semana que tienen antes de que llegue su madre tendrán que seguir conociéndose, a ver si se empiezan a llevar bien ya
Deseando leer ya el siguiente   

le teme más a su madre xD Sí, ahora toca conocerse y dejar de discutir tanto jeje

castle&beckett..cris escribió:sigueee

En minutos

Ruth Maria escribió:Que bien lo llevas!! Siempre kate que se sale de sus casillas y el pobre rick sólo queriendo ayudar

bueno, en el próximo se verá un poco sobre la razón de Kate.

28Caskett escribió:Esta genial!! Espero con ansias el proximo capitulo sigue!!!!  

Gracias!!

Capítulo 14

Estos últimos tres días han sido un auténtico caos. Cosas para aquí, cosas para allí. Comprar un dormitorio para que duerma mi madre en el loft de Castle, que ocupará una de las habitaciones del piso superior. Quería pagarla yo, ya que es por mí por lo que se compra, pero Castle se ha negado. Dice que luego se la quedará él y no sería justo. Después de pelear, algo común entre nosotros, he podido pagar el 25% por ciento. Poco para mí, demasiado para él.

-¿Está todo? –me pregunta, entrado a su habitación, o nuestra habitación, como será en estos días. Aún me da dolor de cabeza pensarlo.

-Sí. –Afirmo, mirando a mi alrededor, viéndolo todo ordenado. Por fin, he terminado de colocar toda mi ropa en el espacio que me ha dejado en su armario.

-¿Has tenido suficiente espacio o...?

-Sí, me ha cabido todo. –Le sonrió con esfuerzo. Estoy muy cansada. Si ya de por sí me siento cansada desde que estoy embarazada, estos días de un no parar me han dejado agotada. Camino hasta la cama y me siento.

-¿Estás muy cansada?

-Un poco –miento. No estoy “Un poco” estoy MUY cansada.

Cuando va a decirme algo Olaf entra corriendo en la habitación con un peluche de Daniela en la boca y la niña detrás llorando, intentando alcanzarlo, interrumpiéndolo.

El perro se escapa, del intento de Rick por atraparlo, por la puerta que comunica la habitación con el despacho de Castle. La pequeña se quedó quieta cerca de mí, con uno de sus dedos metidos en la boca, sin dejar de llorar.

Rick fue a buscar al perro para quitarle el juguete.

-Ven, cariño –la agarro de la mano y la acerco lo suficiente para poder cogerla en brazos sin tener que ponerme de pie. Le limpio las lágrimas de la cara con el dedo pulgar y le sonrío. –Tu papi ya ha ido a por él. -Ella no dice nada y yo la abrazo para intentar calmarla y porque, simplemente, tengo ganas de abrazarla.

-Aquí está –dice Rick entrando con el peluche en la mano. Camina hasta nosotros y se lo da a su hija, que se ha separado de mí nada más ver el juguete.

Aunque ha dejado de llorar, todavía se le escapan algunos sollozos.

-¿Qué te parece si te limpiamos la cara y vamos a jugar nosotras? –le sonrío. Acerco mis labios hasta su oído –pero solo nosotras dos, ¿eh? –cuando me separo puedo verla sonreír y, eso, hace que yo también lo haga, porque la sonrisa de un niño es la cosa más bonita que existe.

La bajo de mis piernas y caminos hacia el baño para lavarle la cara y quitarle el rastro que le han dejado las lágrimas. Luego, le quito la coleta deshecha y se la hago bien.

-Ahora sí, ¿vamos a jugar?

-Sí –me dice, dándome la mano y tirando de mí hacia fuera del baño.

 

-¿A qué jugamos? –le pregunto cuando ya estamos sentada en su alfombra de juegos.

No dice nada, tan solo me da un muñeco. Río al verlo, es casi más grande que ella. Le cuesta hasta cogerlo.

-¿Quieres que le demos de comer?

-Sí. –estira tanto la “s” que sonrío.

-Vale, pásame el bibi –le pido.

Cuando me lo pasa, sonríe, enseñándome todos sus pequeños dientes blancos.

Tras unos segundos dándole de “comer” al muñeco. Arrugo la nariz y pongo cara de asco.

-Oh, Oh. Creo que alguien necesita que le cambien el pañal. -Alzo al muñeco y señalo con mi dedo índice su culo.

Daniela ríe a carcajadas.

Seguimos jugando con la muñeca hasta que la pequeña se cansa y decido cambiar de juego.

Por el nombre de su perro sé que le gusta la película de “Frozen”, así que, busco la banda sonora de la película y elijo una canción. “Do you want to build a snowman?” comienza a sonar en mi móvil.

Para mí sorpresa la niña comienza a bailar nada más escucha los primeros acordes.

Rick, que está en la cocina “haciendo la cena” ríe ante mi desconcierto.

-Solemos bailarla a menudo, bueno, ésa y todas las canciones de la peli.

Vuelvo a posar los ojos en Daniela que mueve su pequeño cuerpo graciosamente al ritmo de la música. No puedo evitar soltar unas carcajadas cuando se agacha meneando su culo.

-Verás –me dice Richard que se ha unido al baile de su hija.

Ahora no solo es Daniela la que baila graciosamente, también lo hace su padre, que, supongo que, baila así por su hija.

Al principio solo se escucha mi risa en el loft pero, luego, se les une la de los dos Castle, que cada vez hacen más tonterías en ese baile.

Cuando esa canción acaba para dejar paso a “For the first time in forever”, Rick coge a su hija en brazos y baila con ella como si fuese un baile de esos en la que la pareja baila agarrados.

“In summer” suena ahora y Castle me ayuda a levantarme.

-Baila con nosotros –me invita, yo me niego, meneando la cabeza, pero insiste aunque no consigue que acepte. Sin embargo, Daniela lo logra con tan solo tirar de mi mano y sonreírme.

Me ruborizo cuando noto la mirada de Richard puesta en mí pero, finalmente, me dejo llevar y termino haciendo los mismos pasos de baile que la niña.


El momento que más temía ha llegado. No se puede retrasar más. Es hora de ir a dormir… con Castle.

Suspiro cuando entro en la habitación, él ha ido a echar un vistazo a su hija.

Despacio, camino hasta el armario para buscar uno de mis pijamas.

-Hey –me dice él cuando entra, yo me giro y le muestro mi ropa de dormir.

-Voy al baño a cambiarme.

-Ok –me dice él, descalzándose.

Creo que nunca en mi vida he tardado tanto en cambiarme de ropa o me he quedado encerrada en el baño  tanto tiempo para no tenerme que enfrentar a lo que “hay” fuera.

-¿Estás bien? –oigo la voz de Rick al otro lado de la puerta. –Llevas mucho tiempo. ¿Te sientes mal?

-No –respondo rápidamente. –Ya salgo.

-Vale.

Dos minutos después, tras inspirar profundamente, abrí la puerta, lentamente, y caminé hacia la cama.

En ese momento, entró Castle.

-Fui a por agua –me enseño la botella que llevaba en una de sus manos pero yo no me fijo en el objeto, sino en su torso desnudo.

Carraspeó, haciendo que mis ojos subieran hasta encontrarse con los suyos. Sentí mis mejillas arder al darme cuenta de que había sido pillada. Desvié mi mirada y, ahora sí, destapé la cama y me metí dentro.

Instantes después lo hizo Castle a mi lado. Yo estaba de espalda de él y en el filo completamente.

-Puedes ponerte más al centro, no muerdo –bromeó Rick.

Me giré y me moví un poco, haciéndole caso.

-¿Cómo ha sido tu primer día aquí? ¿Mejor o peor de lo que te esperabas?

Hice una mueca con mis labios antes de contestar.

-Mejor.

-Bien –sonrió. –Aunque supongo que tú te imaginabas que sería un desastre total… -reí.- Tu risa me da la razón. –Asentí, era verdad. Yo pensaba que todo sería un completo desastre, pero no. Me he divertido.

-Bueno, compréndeme. Siempre estamos peleando.

Rick gruñe. –Pero eso es porque tú quieres –Abro la boca, sorprendida y él aprovecha para acortar más la distancia entre nuestros cuerpos.

-Yo no soy la única que discuto. “Dos no discuten, si uno no quiere” –cito.

-Sí –me da la razón –pero tú eres la que empieza. –Lo veo alzar una ceja.

-Claro, ahora todo es mi culpa. –Refunfuño, pegando mi espalda al colchón, quedando boca arriba. Estoy tapada hasta la cintura, así que, Rick, puede ver que mis manos están sobre mi vientre.

Cuando ladeo la cabeza al no escuchar ninguna respuesta por parte de él, lo observo mirando mis manos que están directamente sobre mi piel, por debajo de la ancha camiseta que visto.

Al darse cuenta de que lo estoy mirando, traga saliva y retira sus ojos de ahí.

Me quedo unos segundos sin saber qué decir. Castle tampoco dice nada.

-¿Quieres tocar? –le ofrezco, finalmente. Le dije que lo dejaría participar en el proceso y, por ahora, solo he permitido que venga conmigo a las citas con la ginecóloga.

-¿Puedo? –pregunta, sorprendido.

-Claro. –Me sonríe con sus ojos brillantes, como un niño en el día de Navidad.

Me levanto un poco la camiseta, dejando que mi vientre se viese. Con cautela, como si tuviese miedo de que me arrepintiera, Rick, coloca su mano sobre mi piel. Sin moverla.

Me mira a los ojos y me sonríe.

-Es la primera vez que toca la barriga de una embarazada –me confiesa- ¡Y encima mi hija está dentro! –exclama con tanta ilusión que hace que sonría.

Empieza a acariciar mi vientre, moviendo su mano despacio.

-¿La sientes?

-Solo noto un pequeño cosquilleo. Aún es pronto para sentirla moverse y dar patadas.

-¿Me dejarás…? –por el movimiento de su cabeza sé que se refiera a tocarme el vientre más veces, cuando esos momentos llegue.

-Sí –asiento.

-Gracias –me dice, con una gran sonrisa.

-Es tu hija, también.


Le doy un pequeño golpe.

-Auch –se queja. -¿Qué he hecho?

-No te hagas el gracioso conmigo –le advierto.

Ríe entre dientes. A mí se me escapa un bostezo.

-Alguien está cansada –canturrea.

-Es el embarazo y estos días.

-¿Y la edad? –bromea.

-¡Eh! –vuelvo a darle en el brazo.

-Es verdad, eres mayor que yo.

-Solo tres años.

-Sí, pero lo eres –se burla.

Yo rodo los ojos.

-Voy a dormir –me giro, dándole la espalda.

-Buenas noches, Kate.

-Buenas noches, Rick –digo antes de cerrar los ojos.

Algunos de los momentos de ese día invaden mi mente y sonrío. Ha sido un buen día. Ojalá no fuese todo esto una maldita apuesta para él. Dejo escapar un suspiro para disipar de mis pensamientos ese recuerdo y poder concentrarme en dormir.

---

Bueno, ya se sabe la razón por la que Kate se porta así con él.

Gracias por leer y comentar

Al final no entendí, rick apostó con ella??

Sigueee

Primer día de convivencia superado y con buenos resultados
Me parece muy fuerte lo de la apuesta de Rick, normal que se comporte así, pero bueno, todo con una buena conversación se intenta arreglar. Hay una duda que me surge, ¿cómo se ha enterado ella de la apuesta? ¿Lo dijo estando dormido? Jejejejeje.
Espero que puedas continuar pronto.

Woow conrazon es así con el. No lo se pero su madre parece un pelin ¿anticuada? Jejeje.
Ya quiero verlos fingir con la mama ahi.

Espero que se aclare lo de la apuesta. Y que la madre de ella al estar hay haga que ellos se acerquen mas. Sigue, muy interesante

Sigue!! me encanta!!!

Ruth Maria escribió:Al final no entendí, rick apostó con ella??

Con ella no, se supone que fue con alguien más.

castle&beckett..cris escribió:Sigueee

A ver cuándo vuelve la inspiración.

Yaye escribió:Primer día de convivencia superado y con buenos resultados  
Me parece muy fuerte lo de la apuesta de Rick, normal que se comporte así, pero bueno, todo con una buena conversación se intenta arreglar. Hay una duda que me surge, ¿cómo se ha enterado ella de la apuesta? ¿Lo dijo estando dormido? Jejejejeje.
Espero que puedas continuar pronto.

sí, primer día superado   
yo no le volvería a hablar en la vida xD
no, no fue por eso, se verá más adelante jeje

moxaCaSkett(sariita) escribió:Woow conrazon es así con el. No lo se pero su madre parece un pelin ¿anticuada? Jejeje.
Ya quiero verlos fingir con la mama ahi.

la madre, sí. Mucho   

masomi03 escribió:Espero que se aclare lo de la apuesta. Y que la madre de ella al estar hay haga que ellos se acerquen mas. Sigue, muy interesante

por lo pronto tienen que ser "cariñosos" en su presencia xD

28Caskett escribió:Sigue!! me encanta!!!

A ver cuándo vuelve la inspiración... ahora mismo brilla por su ausencia..

agecastbet escribió:Creo que tengo alguna que otra pregunta por ahí sin responder, pero no las voy a formular, esperaré haber qué pasa y como se sigue desarrollando la historia.Tampoco es cosa de ir destripando la historia antes de ser contada.
De momento me quedo con lo que importa, al fin Kate ha entrado por el aro, sea por lo que sea que de momento no lo tengo claro, por mucho que tema a su madre, jajajajaja pero como decía al menos están ya juntos y no parece que las cosas vayan a ir mal, pues incluso Kate ha interactuado con la niña y parece que esta tampoco ha reaccionado mal, sino al contrario. Aquí hay muchas carencias por parte de todos los protagonistas, quizá sea arriesgado pensar que se vayan a complementar en tan poco tiempo, pero cuando tienes la necesidad de algo, el conseguirlo o estar cerca de hacerlo puede que adelante mucho la resolución del problema, eso es lo que espero yo, jajajajajaja
Solo me falta ver qué pasa con la mamá (fiera corrupia, descrita por su hija, jajajajaja) y estoy deseando que subas el capítulo para acabar con la intriga que me corroe, jajajajajaja
Sigue pronto por favor que es muy mala la desazón de la curiosidad, jajajajaja
BESOTESSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS

ha entrado o eso parece. Kate con la niña es así pero nada que ver con Rick. Le da "ternura"
Y carencias sí que tienen, por eso Kate tb es así con Daniela.
jajaja a ver si logro escribir algo... últimamente no sale nada y encima estoy vaga xD
Besos

Pues según dice mi madre: "la gente parada cría malos pensamientos", por lo que no es fácil estar cerca de ella, no logro tener ni el más minimo pensamiento, ni bueno ni malo, jajajaja así que échame una manita y a lo mejor en vez de tener los malos pensamientos, los puedo leer de tu mano, jajajajajaja
Venga ya cómo no vas a tener inspiración si lo estás bordando y casi que podría seguir yo misma la historia, con el millón de posibilidades que has dejado de par en par?????
Y la vagancia déjala para otras cosas, escribir no da pereza cuando se disfruta, y estoy segura de que tú lo disfrutas, sino no lo harías, jajajajaja
BESOTESSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS[/quote]
Qué va. ME "obligué" a escribir. Salió algo, malo y corto, pero algo...
Bueno esta historia no la "disfruto" precisamente XD
Besos

Capítulo 15

Abro los ojos con dificultad.  Siento que algo se mueve cerca de mí, golpeando el colchón. Gracias a la luz que entra por las ventanas desde la calle, puedo ver la silueta de Daniela. La niña intenta escalar por la cama, pero no logra conseguirlo.

Al moverme para ayudarla siento un brazo rodeando mi cuerpo. Ladeo la cabeza y veo a Castle detrás de mí. Me tiene completamente abrazada.

Retiro su brazo de mi cintura para incorporarme y ayudar a la pequeña.

Me doy cuenta  al hacerlo de que está pisando el edredón y, eso, hace que resbale y no logre montarse en la cama.

Cuando la rodeo con mis brazos, la llevo conmigo, metiéndola dentro de las mantas para que no pase frío. Ella, rápidamente, se remueve, poniéndose cómoda. Coloca una de sus pequeñas y regordetas manitas en mi mejilla derecha en el mismo momento que la escucho suspirar.

Acerco mis labios a su frente y dejo un beso ahí.

-Dulces sueños, peque –susurro cerca de su oído. Hace una mueca con sus labios sin abrir los ojos.

Sonrío. Ahora soy yo la que cierra los ojos, queriendo volver dormirme, pero, en ese preciso instante, Castle se mueve detrás de mí, pegando su pecho a mi espalda de nuevo, rodeándome la cintura con su brazo.

-Rick –me quejo, dándole pequeños golpes con mi codo en las costillas. Protesta, pero, en vez de separarse, pega su cuerpo más al mío. –Rick –repito, entre dientes. Lo codeo más fuerte al ver que no se despierta.

-¡Ah! –gimotea. Se vuelve a remover. Dice algo cuando insisto pero solo logro entender “dormir”. Me tenso al sentir sus labios dejando un beso en mi cuello. Inmediatamente se recuesta y su respiración acompasada puede volver a escucharse en la habitación.

Después de eso, me doy por vencida e intento concentrarme en volver a dormir.


La luz que se filtra por la ventana me molesta y se le unimos las voces que se escuchan cerca de mí, forman la mezcla necesaria para que me despierte.

-Shh. Cariño, vamos a despertar a Kate –oigo la voz de Rick. De pronto, abro los ojos al notar que estoy abrazada a alguien. Mis sospechas se hacen realidad: estoy abrazada a Castle.

Lo miro con los ojos muy abiertos y con mi cuerpo tenso.

-Buenos días –me saluda con una sonrisa, yo me separo al segundo de su cuerpo. Él ríe y me mira divertido. -¿Sirvo de almohada o no? –me pregunta con una sonrisa en su rostro al verme con el ceño fruncido. –Te veías muy relajada… -le doy un golpe en el hombro. –Auch, -se queja. –Encima que he dejado que me babees el pecho. –vuelvo a golpear su hombro. –Pero, ¡qué agresividad tan temprano!

-No babeo –digo, aún con la voz ronca.

-Pues… -deja la frase en el aire, señalándose con su dedo su pecho, justo donde tenía colocada mi cara.

-No lo hago. –replico.

-Bueno, bueno –dice, sentándose en la cama y girando la cara hacia su hija que le dice algo.

Yo aprovecho que está distraído para levantarme.

-Oye, -me agarra del brazo antes de que consiga ponerme de pie –pensaba traerte el desayuno a la cama.

-No hace falta –respondo, todavía enfadada.

-¡Qué mal despertar tenemos algunos! –canturrea y yo lo fulmino con la mirada. –Vale, ya me callo. –Hace que se cierra la boca como si se corriera una cremallera.

-Que sepas que esta noche eras tú el que estaba abrazado a mí y por más que intenté que te despegases, no lo hacías.

-Yo dejándote dormir en mi pecho y tú… No, no, no… -vuelve a bromear. Ahora sí, me pongo de pie y camino para salir de la habitación.

Antes de que logre estar fuera, siento los brazo de Castle abrazarme desde atrás.

-Solo era una broma –me susurra.

-Suéltame –le pido, sin moverme.

-Ok, -acepta al escuchar el tono de mi voz –solo pensé que si íbamos a fingir que éramos pareja, era mejor que practicásemos para que, luego, se viese más natural.

Yo no digo nada, ni siquiera me volteo para mirarlo, salgo de allí sin más.


Diez minutos después de estar abriendo y cerrando muebles de la cocina buscando lo necesario para preparar el desayuno, aparece Castle con su hija en brazos.

Él me mira pero no me dice nada.

-¿Quieres desayunar, Daniela? –le pregunta, abriendo la nevera para sacar la leche.

-Sí, leche.

-¿Quieres leche?

-Sí –responde, entusiasmada. Intenta coger el biberón cuando su padre vierte el líquido blanco en él.

-Espera, hay que calentarla y echarle cola cao.

-Coa cao –repite ella.  

Pasa por mi lado para meter en biberón en el microondas. Por como tiene apretada la mandíbula, sé que está molesto.

-¿Sabes dónde está las galletas que traje? –Cuestiono, con voz suave –No las encuentro.

-Tercera puerta empezando por la derecha –me responde sin mirarme.

Efectivamente, estaban ahí.

-Gracias –digo, pero Rick no contesta. Le da a Daniela la leche con cacao y la sienta en su silla. -¿Qué vas a querer desayunar? –le pregunto. –Estaba buscando las cosas para hacer el desayuno.

-Ya me lo hago yo. –sigue sin mirarme.

-Vale. –inspiro profundamente y sigo con lo que estaba haciendo.



Observo a Rick jugar con su hija y Olaf en la sala mientras yo sigo intentando escribir algo más que dos líneas cada diez minutos pero, por más que intento enfocarme en la escritura, no lo consigo.

Suspiro y vuelvo a posar mi vista en la pantalla del ordenador. Coloco mis dedos sobre el teclado, releo mi última frase y mis dedos aprietan dos teclas antes de borrarlas.

Bufo. Me cubro la cara con mis manos frustrada. La risa de Daniela hace que las retire y vuelva a mirar hacia ellos.

Me armo de valor y me levanto de la silla del despacho de Castle. Castle. Desde esta mañana no he vuelto a cruzar una palabra con él. Parece verdaderamente molesto conmigo.

Carraspeo y los dos me miran.

-¿Puedo jugar? –les pregunto, nerviosa por la mirada de Richard. Este vuelve a lo suyo sin decir nada. Daniela me sonríe y tira de uno de mis dedos hacia ella. Supongo que eso es un sí.

Me recoloco un mechón de pelo detrás de la oreja y me agacho junto a ellos.

La niña me ofrece uno de los bloques de colores con lo que están montando un muro.

Yo le sonrío y le acaricio la mejilla.

20 minutos más tarde.

-Castle –lo llamo, poniéndome de pie al igual que él y siguiéndolo.

Se gira para encararme.

-¿Vas a seguir así? ¿Sin hablarme? –me cruzo de brazos. –Desde esta mañana no has cruzado una palabra conmigo, me ignoras. ¡Ni siquiera me has hablado cuando hemos estado jugando con tu hija!

No dice nada. Simplemente, se da la vuelta y camina hacia la cocina.

Lo agarro del brazo, frenándolo.

-¿No me vas a responder?

Lo veo apretar la mandíbula.

-¿Lo hiciste tú antes? –espeta, tras unos segundos.

-Es por eso…

-No, no es por eso. Es porque estoy cansado de tus cambios de humor. De que estés bien y cinco minutos después estés enfadada. De que sea todo cuándo tú quieras y cómo tú quieras. Y porque, parece que tenga que darte las gracias por hacerte, repito, hacerte, a ti, un favor.

Trago saliva.

-Yo no te lo pedí.

-Ni yo te estoy reteniendo.

-No –contesto, afectada por su última respuesta.

Paso por su lado, adelantándolo para ir a la habitación. Aceptar su propuesta fue un error. Un maldito error que tiene que acabar ya.

Siempre kate tan borde con rick!! Algo le molesta y debería sincerarse para aclarar todas las cosas de una vez