Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
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Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
¡¡JOOOOOEEER menuda pilló Kate!!
Jajajaja pobre no podía ni aguantarse... aunque eso no es excusa para liarse con otro... más vale que le de mejores explicaciones a Castle jajaja
Me encantó el capi, como siempre
Jajajaja pobre no podía ni aguantarse... aunque eso no es excusa para liarse con otro... más vale que le de mejores explicaciones a Castle jajaja
Me encantó el capi, como siempre
GabiiLovesMela<3- Escritor - Policia
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Fecha de inscripción : 24/07/2011
Edad : 29
Localización : Galicia
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
Genial Capitulo
Maku_Stanathan- Policia de homicidios
- Mensajes : 652
Fecha de inscripción : 07/10/2011
Edad : 30
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
Anda que nooooooooooooooooooooo,a quién se le ocurre porque a mí no!!!jajajajajajajaaLaughing Laughing Laughing Sólo diré una frase: "Si bebes no invites a Gates" u otra "Si invitas a Gates no te acerques al alcohol" Laughing Laughing
Perdona por la tardanza en escribir pero estoy muy liada y otra vez con mi querido gripazo que ha vuelto peor que hace 2 semanas pffff.Me parto de risa de imaginarme las caras cuando los pilla Exposito,ayyy lo que daría por ver una cosa así en la serie,jajajajajajaja.
Espero que éste fic no acabe nunca porque es de los más divertidos a la vez que dramáticos.Sigue así cariño!!!!
mdm- Policia de homicidios
- Mensajes : 656
Fecha de inscripción : 04/05/2011
Edad : 45
Localización : Granada
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
ha sido un capítulo genial
contiualo pronto !
contiualo pronto !
castlefan :)- Escritor novato
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Fecha de inscripción : 13/12/2011
Edad : 28
Localización : NY (LL)
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
asita24- Actor en Broadway
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Edad : 35
Localización : Heredia, Costa Rica
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
No sabes como me hacen reír cuando escriben escenas de Kate ebria, tu no has sido la excepción, me he reído como mala de la cabeza con este capítulo. Especialmente con la parte donde Espo los pilla , pobre Beckett, se le pasó la borrachera en seguida XDDDDDD. Me encantó, como todo lo que escribes, eres una genia *O*, espero el próximo .
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
Y yo y yo!! A mi también me encantan esos momentos cómicosmdm escribió:Me parto de risa de imaginarme las caras cuando los pilla Exposito,ayyy lo que daría por ver una cosa así en la serie,jajajajajajaja.
Última edición por la_loki el Miér Ene 18, 2012 6:20 pm, editado 2 veces
la_loki- Actor en Broadway
- Mensajes : 158
Fecha de inscripción : 12/09/2011
Edad : 47
Localización : Málaga
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
Gracias chicos por vuestros coments! que siempre me animan a seguir
Vamos ahora con otro capi, espero k os guste... aunque es un poquito largo es fácil de leer, o eso creo
Y muchas gracias editora ash, por tu ayuda
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Capítulo 29: El interrogatorio.
Al final, a pesar del descubrimiento de los chicos en el Old Haunt, todo había terminado más o menos bien. Kate se había quedado dormida en su coche y Castle condujo hasta su loft, llevándola a su habitación en brazos y colocándola con suavidad en un lado de su cama. Al día siguiente, Kate se había despertado con resaca y, al volverse, vio que él no estaba en la cama. Se dio cuenta que, en lugar del vestido, tenía una camisa de él puesta como pijama, pero no recordaba nada después de aquel encuentro en el guardarropa así que supuso que fue su chico el que la cambió. La luz del baño estaba encendida así que se dirigió hacia allí y vio a Castle con la mirada fija en el espejo. Se puso detrás de él y lo abrazó rodeando su cintura por detrás, mientras apoyaba la cabeza en su espalda. Él se apartó y se volvió, mirándola fijamente pero sin decir palabra, Kate lo abrazó de nuevo.
Voy a darme un baño que no me encuentro bien y en unas horas tengo que estar en la comisaría. – Kate se había acercado a su boca, sonriéndole pícaramente. - ¿Quieres acompañarme y enjabonar mi cuerpo?
Podría ayudarte a quitarte la ropa y meterme contigo pero no sé si te gustaría que te enjabonase yo... ¿No prefieres que llame a tu querido amigo Jack para que lo haga? – Ella se sorprendió ante su tono sarcástico y su mirada borde.
Hoy te has levantado con el pie izquierdo, por lo que veo. Si esto es por lo de anoche, sabes que fue para evitar líos. Ya bastante tengo con lo que voy a tener que soportar en el trabajo por lo de ayer. - Kate le acarició la mejilla y lo besó, Castle seguía con la mirada seria. - Gracias por no haber montado un espectáculo en el bar, al verme bailar con ese oficial...
¿Sólo bailar? ¡Si lo único que te faltó fue acostarte con él! Si hubieras estado en mi lugar seguro que me habrías montado una escena, que ya sabemos la que me liaste con lo de Linda... - Apartó la mirada de ella y volvió a mirar fijamente el espejo. Kate se había sorprendido al ver cómo él le había alzado la voz. - Sólo espero que lo que hiciste con él y ese beso no traigan más consecuencias, que bastante me dolió tener que verlo...
¿Beso? - Kate levantó la vista perpleja, parecía que no entendía a qué se refería. Castle se volvió y la miró extrañado, ante su reacción. - Sólo recuerdo haber bailado con él, el beso te lo di a ti en el guardarropa ¿no?
¿No lo recuerdas? ¡Pues a mí, en cambio, me va a costar olvidarlo! No, Kate, no fui el único al que besaste… Ese oficial estrenó tu boca en el Old Haunt anoche y yo sólo fui el segundo plato… Sólo te faltó opinar sobre cuál besaba mejor… – El sarcasmo de Castle se había vuelto más pronunciado. Se había separado de ella, sin dejar de mirarla, luego le dio la espalda y se fue hacia la cocina mientras seguía hablando. – Jack buscó tu lengua y tú se la entregaste, en mi bar y en mi presencia... Estuve a punto de pegarle un puñetazo y cortar aquello pero, aun así, me contuve. La próxima vez que vayas a comportarte así delante de Gates me gustaría hablar de ello antes. No sea que tengas que echar un polvo con otro la siguiente vez que quieras evitar sospechas ante ella...
¡Rick! - Kate sintió una punzada de dolor en su interior al oír aquellos comentarios, Castle sabía cómo dañar con las palabras. Se dirigió también hacia la cocina, tras él. - ¡Espera! Mírame, por favor...
Voy a preparar algo para tu resaca. - Castle se había vuelto hacia ella, su mirada era algo fría. - Ve a darte un baño que te sentará bien. No quiero discutir esto, prefiero olvidarlo...
Rick, lo siento. - Kate le agarró la mano y lo miró dulcemente. - En serio, ahora mismo sólo tengo imágenes sueltas en mi cabeza. ¿No puede ser que vieras, en realidad, otra cosa? No creo que fuese capaz de besar a otro...
Está claro que el alcohol te ha nublado la memoria. ¿No me crees? Mira Kate, paso de tener que darte los detalles que se me revuelve el estómago sólo de pensarlo, pero ya sabes que puedes ver el video de vigilancia mientras te tomas unas palomitas y una cerveza… Lo mismo, al verlo con detalle, puedes averiguar que parte de tu cuerpo se le olvidó tocar... - Su sarcasmo tan continuado e intenso cada vez indignaba más a Kate. - Pero eso es lo de menos, yo de ti me preocuparía más de lo que pueda decirte Jack en la comisaría cuando te vea, no sea que quiera acostarse contigo y Gates lo apoye... Miedo me da sabiendo que, últimamente, no le discutes a tu jefa...
¡Basta ya, Richard! Te he dicho que lo siento, si no quieres dejarlo pasar me lo dices y terminamos aquí, pero no quiero estar aguantando tu sarcasmo continuamente. - Kate no soportaba discutir con él pero tenía que parar aquello. Sus continuos sarcasmos e insinuaciones de acostarse con otro la llevaron al límite. - Estos días has estado muy raro y desde que te ocurrió aquello he estado a tu lado y he respetado todo lo que me pediste, a pesar de que deberíamos haber tomado medidas policiales. Supongo que ayer bebí de más intentando evadir todas las presiones y se me fue de las manos, pero todos cometemos errores. Tú también te has pasado más de una vez y aún sigo aquí. Sólo sé que no podemos estar todo el día así...
Está bien, dejémoslo así. - Se acercó a ella, mirándola fijamente a los ojos. - Es que no he podido pegar ojo pensando en lo de ayer y la falta de sueño no ayuda... Pero es que me volvió loco ver cómo te...
Shh. Tranquilo... Lo sé, yo también he pasado por eso... – le acarició el pelo y lo besó en la mejilla. – ¿Quieres venirte a la cama? Aun tengo algo de tiempo…
No, ahora no me apetece… Voy a ir preparándote mi zumo milagroso para la resaca. – Kate se quedó sorprendida ante la negativa de él y lo miró fijamente mientras le cogía de la mano.
¿Seguro que no quieres hablar de todo esto? – Kate no apartaba la vista de sus ojos.
Seguro. Además, tú no te acuerdas así que sólo necesito olvidarlo yo. – Castle apartó la mirada y fijó la vista en el suelo, Kate sintió su dolor.
Está bien. – Kate quería conseguir que Castle sonriese pero no sabía cómo, así que lo intentó, gastándole una broma. – La próxima vez que me vaya a emborrachar me aseguraré de estar a solas contigo.
Qué graciosa… Aunque hay que reconocer que tus deseos sexuales cuando estás borracha son demasiado peligrosos… - Le dio el zumo y Kate se lo agradeció con un dulce beso en los labios. – Voy a ir preparándome que te voy a acompañar a la comisaria.
Ryan y Esposito ya habían llegado a la comisaría a pesar de que Beckett aun no andaba por allí. Llevaban un rato mirando el contenido de las cajas que habían sacado del despacho de la periodista en su trabajo. De repente, Ryan se quedó mirando unas notas perplejo y Esposito, al ver su expresión, enseguida se acercó a mirar… Rápidamente, se pusieron a revisar las facturas telefónicas de los meses anteriores y, al cabo de un rato, algo les dejó completamente impactados… Ambos se miraron fijamente, asustados. Sabían que tenían que alejar todo aquello de su capitana, de inmediato, pero antes de que pudieran reaccionar, Gates ya estaba, a su lado, preguntándoles como iba la investigación y mirando aquellos papeles… Llamaron a algunos compañeros de la víctima por petición de la capitana, que no se apartó de su lado a causa de aquellas revelaciones, y acabaron sacando información nueva que no habían previsto…
Cuando Kate y Castle llegaron a la comisaría, ella notó que algo no iba bien. Tanto los chicos como Gates estaban mirando fijamente el ascensor del que acababan de salir. Ryan y Esposito no paraban de hacerles gestos con la cabeza a ambos para que se marchasen, pero la capitana ya se había acercado a ellos…
Sr. Castle, otra vez por aquí. Precisamente iba a llamarle, ¿qué tal va todo?.. – Antes de que pudiese contestar a la pregunta de Gates, ella continuó con un ligero tono sarcástico. - ¿Cuándo nos iba a decir que conocía a Helen Wyatt de una manera tan “cercana”?
¿Helen Wyatt? – Castle se había quedado perplejo. Kate lo miró aun más sorprendida, al oír lo que había dicho su capitana.
Sí, la periodista… No me dirá que no se acuerda de ella, ¿no? – Una sonrisa comenzó a dibujarse en el rostro de Gates. – Y eso que se acostaba con ella que si no…
¡¿Qué?! – Kate no pudo evitar dejar escapar un grito de su boca, se había quedado mirando a Castle con los ojos abiertos de par en par. Estaba impactada, pero más por el hecho de lo último que había dicho su capitana que por el hecho de que conociese a la víctima.
¿Qué pasa con Helen? – Castle seguía perplejo mirando a Gates y a los chicos. Últimamente no había estado pendiente de las noticias ni del caso que llevaba Kate por lo que no sabía ni siquiera quién había muerto en el centro comercial, sólo sabía que su novia había ido a investigar un homicidio allí. – No entiendo nada…
Acompañe al detective Ryan y Esposito que van a hablar con usted… - Le indicó la puerta de la sala de interrogatorios y les hizo un gesto a ellos, la cara de Gates reflejaba satisfacción. Kate aun no daba crédito a todo lo que estaba ocurriendo. Los chicos le dieron una palmada en el hombro a Castle, en señal de apoyo, y se fueron hacia la sala. – Inspectora Beckett, venga conmigo. Esto lo vamos disfrutar desde las gradas…
¿Chicos que está pasando? – Castle se asustó al ver sus caras, ellos se habían sentado en la sala de interrogatorios y le hicieron un gesto para que él también se sentase. Cuando lo hizo y terminó de hablar, Ryan y Esposito comenzaron a preguntarle. – Vamos, ¿por qué estoy en la sala de interrogatorios? ¿Qué ocurre?
¿Conocías a Helen Wyatt? – A ellos se les notaba sin muchas ganas de preguntar, pero sabían a quién tenían tras el espejo, así que comenzaron con las preguntas de rutina, enseñándole a su vez una foto de la víctima.
¿Helen? Sí... – Castle miraba a los chicos perplejo, sus ojos iban desde el espejo hasta la cara de ambos, pasando por la foto. Sabía que una situación así no indicaba nada bueno. A Kate le dio un vuelco el corazón cuando oyó aquella afirmación. - ¿Le ha pasado algo?
Es una periodista famosa, ¿no has visto las noticias estos últimos días? – Los chicos estaban muy suaves con sus preguntas y Gates cada vez estaba más indignada por ello. Había temas que ellos no iban a tocar porque ya sabían su respuesta y no querían comprometer a su amigo ni a Beckett, pero no sabían que eso iba a provocar que la capitana tomase medidas…
No, la verdad es que ando un poco desconectado últimamente. – Castle cada vez imaginaba con más certeza lo que podía estar pasando y cada vez notó un dolor más intenso en su interior. – Chicos, nunca entráis aquí si no es por un asesinato… ¿No será ella la víctima?
Sí… - Los chicos apartaron la vista de su amigo durante un momento y luego volvieron a mirarlo con tristeza. Ante aquel comportamiento tan atípico de una interrogación, Gates no pudo más y se dirigió a la sala de interrogatorios. – Lo siento, sabemos que la conocías bien…
¿Helen… ha… muerto? – La mirada de Castle se quedó hundida en la foto que tenía frente a él mientras una sensación de ahogo presionaba su pecho y un dolor intenso recorría todo su cuerpo. Los chicos se habían quedado en silencio, apenados, al verlo así. Ryan le dio unas palmaditas en su brazo, mostrando su apoyo. – No… No puede… ser…
¡Detectives! ¿Qué está pasando aquí? No están siendo objetivos. ¡Esto parece más una tertulia que un interrogatorio! – Se acercó a ellos y agarró la carpeta que tenían en la mesa. – ¿Así interrogan a un sospechoso? Miren y aprendan…
¿Yo? ¿Sospechoso de qué? ¿De asesinar a Helen? – Castle miraba perplejo a Gates y luego a los chicos, no daba crédito a lo que estaba pasando. Precisamente Kate, tras el espejo, estaba aun más perpleja que él. – ¿No estará hablando en serio?
¡¿Cree que esto es una broma?! – Se puso de pie frente a él y abrió la carpeta sacando una foto del cuerpo sin vida de la víctima, cubierta de sangre, poniéndola en la mesa junto a sus manos. Castle miró la foto y abrumado, al verla, apartó rápidamente la vista negando con la cabeza. – ¿La forma en que ha muerto esta mujer le parece una broma? ¿De verdad intenta hacernos creer que no sabía que había sido asesinada una mujer que conocía desde hace tiempo y con la que se acostaba? Venga ya, Sr. Castle, no puede ser que piense que somos tan ingenuos…
No lo sabía, en serio. – Miró a Gates y luego a los chicos, viendo que estaban tan incómodos como él por aquella situación. - Yo no pienso nada, sólo estoy diciendo la verdad… No he colaborado mucho con usted pero debería saber que no soy una persona que va de mala fe…
Es un escritor, está acostumbrado a inventar historias y a conseguir que las crean… - Gates seguía de pie frente a él. Se acercó más, invadiendo su espacio y poniendo su cara a unos centímetros de él, intentando intimidarle. - ¿Sabe lo que pienso? Intentó disuadir a la periodista de que publicara aquella columna que trataba sobre usted y, después de una acalorada discusión, le amenazó. Cuando se enteró de que, aun así, iba a publicarla, quedó con ella en el centro comercial y, de camino a los aseos, discutieron. Ella le golpeó y usted le disparó acabando con su problema.
¡Vaya! – Castle no había podido evitar reírse ante aquella absurda acusación, los chicos se quedaron perplejos ante la reacción de su amigo. – ¡Sí que tiene usted imaginación! Le diría que se dedicase a escribir si no fuese porque sus teorías son un poco absurdas… Está perdiendo el tiempo con la persona equivocada.
Tenemos testigos que le vieron discutir con la víctima y sabemos, con certeza, que tenía una relación íntima con ella. – Kate se quedaba más impactada a cada información nueva que iba recibiendo. Lanie, en cuanto se enteró, había acudido junto a ella. Había entrado en la sala de observación justo después de que saliese Gates. Se había acercado a Kate e intentaba que ella reaccionase, pero aun estaba en shock. – Tenía móvil, tenía oportunidad y sabe utilizar un arma con mucha precisión… Además, ese mismo mediodía apareció usted por aquí con un ojo morado… ¿Intentó acostarse con ella sin éxito y al insistir la periodista le pegó?
¡Señor! – Esposito no pudo evitar interrumpir a su jefa, eso no podía añadirlo a su acusación. Gates miró al detective de manera amenazadora, al verse interrumpida. – Ese ojo morado se lo puse yo… Le pegué un puñetazo el día anterior por un malentendido y hay testigos de eso…
¿Le pegó usted? – Gates arqueó las cejas sorprendida, no se esperaba esa información. Kate sonrió al ver la perplejidad de su capitana y a Lanie se le escapó un “Ese es mi chico” orgullosa ante lo que había hecho Esposito. Ryan se había quedado perplejo ante aquella revelación, riéndose ligeramente. Lo que menos se esperaba es que su compañero hubiese pegado a Castle. – Bueno, eso es lo de menos... El caso, Sr. Castle, es que tenía una relación con la víctima y tenía motivos para matarla.
Lo primero es que yo no mataría ni a una mosca y lo segundo es que esta acusación es totalmente absurda. ¿Cree que podría matar a alguien por estar en desacuerdo con su publicación? – Castle cada vez estaba más perplejo e indignado. No quería que la capitana estuviera allí, presionándole de aquella manera, cuando se acababa de enterar de la muerte de una amiga y tampoco que su novia estuviese, tras aquel cristal, soportando aquella extorsión. Kate observó que él no había negado nada de lo que había dicho su jefa, cada vez estaba más enfadada con ella ante aquel acoso a su novio y algo tenía que hacer. Cuando se dirigió a la puerta para intentar parar todo aquello, Lanie la detuvo. – Señor, sabe que todo esto no cuadra.
No me llame Señor, ahora mismo no es colaborador nuestro sino un sospechoso… - Gates no se apartaba de él ni de su mirada, estaba convencida de que algo ocultaba y, además, estaba disfrutando con aquello. – Ya puede ir diciéndonos qué estaba haciendo este lunes pasado entre las 9 y las 11 de la mañana porque si no va a acabar en una celda y su amigo, el Alcalde, no va a poder hacer mucho por impedirlo…
¿Todo esto no será por mi amistad con el Alcalde? Porque eso no denota mucha objetividad por su parte… - Los chicos abrieron los ojos de par en par, impactados ante las contestaciones del escritor hacia su capitana. Castle recordó que la madrugada del lunes había estado en el laboratorio sorprendiendo a Kate y luego en casa de ella pero, precisamente el intervalo de tiempo del homicidio, era cuando Kate ya se había ido a trabajar y a esas horas estuvo sólo. – Mire, en realidad, no recuerdo que estaba haciendo el lunes a esas horas pero, desde luego, no estaba en ningún centro comercial… Sé cómo va esto, sin pruebas no puede encerrarme, así que pregúnteme lo que quiera y luego me marcharé por dónde he venido…
Mientras, en la sala de observación, ambas amigas no dejaban de mirarse, transmitiéndose todas sus preocupaciones a través de los ojos.
Sé que estás indignada, pero no puedes entrar ahí e interrumpir a tu jefa. Eso te puede costar una suspensión y no puedes permitírtelo. – Lanie intentaba calmar a su amiga pero la situación no ayudaba. – Gates no tiene pruebas contra él y no hay nada en el cadáver que indique algo en su contra. Kate, no dejes que te provoque, que eso si que puede traer consecuencias.
Lo sé, pero todo esto sólo lo hace porque no le soporta. Tiene razón Castle, no está siendo objetiva y alguien tiene que hacérselo ver. – Se dirigió de nuevo hacia la puerta y se volvió a mirar a Lanie, ella negó con la cabeza intentando evitar que cometiese una locura.
Ya se lo ha dicho él… No te metas, Kate, no eres la adecuada para hacerlo. Lo conoces bien, sabes que él puede manejar esto solo. Además, puede que en situaciones de riesgo pierda los nervios antes pero en este tipo de ataque verbal no se altera tan fácilmente. – Se acercó a ella y le agarró la mano. – No vayas, por favor.
Está bien, me quedaré aquí. ¿Sabes? No sabía nada de su relación con la periodista, resulta que hay más aspectos de su vida que desconozco de los que pensaba… - Se quedó mirando a Castle a través del espejo, preguntándose aun de que iría aquella relación entre la víctima y él. – Pensaba que la última persona con la que estuvo fue Gina, su ex mujer…
No sabes aun lo que hay de verdad en lo que ha dicho Gates. – Se acercó a ella junto al espejo, para que el policía que estaba con los aparatos de grabación no escuchase su conversación. – Además, hace meses tú estabas con Josh, no hay nada de malo en que él hubiese tenido algún tipo de relación con otra mujer…
Lo sé, pero lo que me ha sorprendido es no saber nada de esa periodista… - Kate sabía que mientras él estuvo soltero podría haber tenido algo pero, aun así, todo eso le descuadraba. – Me parece raro.
¿Es que acaso habéis hablado alguna vez de vuestro historial anterior de ligues y te ha ocultado lo de la periodista? – Lanie intentaba hacer ver a su amiga que aquello no era nada extraño.
No, nunca hemos hablado de eso… - Kate le sonrió ligeramente a su amiga, al darse cuenta que, en realidad, nunca habían visto necesario conocer al detalle las conquistas de cada uno. – Precisamente, ese tema nunca ha salido. Creo que saber esas cosas no ha sido algo esencial…
Tú lo has dicho, no es una cosa que hayáis visto importante. ¿Entonces por qué ahora te extraña? – Lanie, mientras le hablaba, intentaba evadirle del interrogatorio pero Kate seguía pendiente de ambas cosas. – No dejes que esto te supere, sea verdad o no lo de la periodista, algo está claro… Él no ha matado a nadie y tienes que estar a su lado que, sabiendo cómo es Gates, necesitará tranquilizarse luego. Si quieres podemos irnos, así evitarías ponerte más nerviosa…
Sé que me va a necesitar y estaré ahí, apoyándole, pero no me voy a ir de aquí hasta que terminen… - Kate se quedó mirando a su amiga. Mientras, la capitana seguía presionando al escritor. – Aun es mi investigación y necesito saber hasta qué punto llega Gates. De todas maneras, gracias por todo Lanie.
Sr. Castle, esa no es una coartada muy solida. ¿Solo y sin nadie que pueda corroborar dónde estaba realmente? Tiene que aceptar que, precisamente, no está en una buena posición ahora mismo. – Gates no dejaba de presionar, los chicos se miraban preguntándose que podrían hacer contra aquella situación, Ryan se encogió de hombros y Esposito frunció el cejo. - ¿Hasta cuando ha estado acostándose con la víctima?
No tengo porque contestar a eso, mi vida privada no le concierne… - No quería dar detalles de su vida personal para evitar sacar ningún tema que pudiera comprometer a Kate, de algún modo. Los chicos estaban impactados con la tranquilidad y prudencia de su amigo ante la presión de Gates. – Mi relación con ella no tiene nada que ver con esto. No he estado saliendo con Helen pero éramos amigos y, aunque hace tiempo que no nos veíamos, conozco su círculo. Creo que debería cambiar su dinámica conmigo que ya sabe que yo no he hecho nada y, además, les podría ayudar a encontrar a su verdadero asesino.
¿Sabe? Es usted más listo de lo que pensaba. Veo que todo el tiempo que ha estado colaborando con los de homicidios le ha permitido aprender cómo controlar un interrogatorio. – Gates le sonrió y se alejó, caminando por la sala mientras no dejaba de mover unos papeles que había en la carpeta con información de la víctima. – Pero eso no le va a sacar del lío en el que está metido. ¿Dice que eran sólo amigos no? ¿Quiere que le ayude a recordar lo amigos que eran?
¿Y usted quiere qué llame a mi abogado? – Castle seguía tanteando a la capitana pero sabía que ella iba a intentar terminar de lanzar todas sus cartas antes y tenía que ser precavido. Los chicos se miraron y lanzaron una ligera sonrisa ante el golpe que lanzó el escritor a su capitana. – Porque esto que está haciendo no creo que sea muy legal…
Si quiere llamarlo ya sabe que tiene derecho, pero eso indica que intenta esconderse tras un abogado de lo que ha hecho realmente… - Gates le sonrió, buscando que perdiese los nervios pero Castle seguía manteniendo la calma de una manera sorprendente.
Ya me conozco de sobra esa frase… Suele utilizarse para evitar que el sospechoso llame a su abogado pero eso no quiere decir nada… Que yo sepa no me han detenido, así que estoy aquí por cortesía, ¿no es cierto? Por lo que puedo marcharme cuando quiera, Sra. Gates… - El nombre lo pronunció con un tono melodioso y algo sarcástico, haciendo hincapié en lo que le había pedido la capitana. Castle se levantó, y la miró fijamente, sonriéndole. Instantes después, terminó con una frase que dejó sin respuesta a Gates y perplejos a todos los que estaban escuchando. - ¿Usted cree que si hablo con él y le digo que me están reteniendo aquí sin pruebas y sin haberme leído mis derechos no tomará medidas legales?
Tiene razón, señor. – Esposito estaba deseando que terminase todo aquello y que su amigo pudiese salir de allí así que aprovechó que ella se había quedado sin palabras para ayudar a Castle. No se dio cuenta que estaba sonriendo por la contestación de su amigo hacia la capitana y esa actitud no le agradó a Gates. – No hay pruebas que nos permitan acusarlo de nada y no lo hemos detenido, así que puede irse si quiere. Además, él conoce muy bien sus derechos y si lo retiene a la fuerza puede demandarle a usted y a esta comisaria…
¿Esto le hace gracia, detective? – Esposito borró la sonrisa de su rostro. – Una mujer ha muerto y puede que su amigo haya tenido que ver en ello. No me parece nada gracioso que un sospechoso se pueda marchar, así como así, porque a ustedes no les guste lo que está pasando… Sr. Castle, sabe que si se va ahora sin contestar a todas las preguntas podemos detenerle después y acabar en un calabozo… ¿De verdad lo prefiere así?
Deje que lo consulte con mi abogado antes de responder a ninguna pregunta más que pueda hacerme y luego ya veremos… - Gates se indignó más ante la última contestación, sabía que tenía razón el escritor y no aguantaba su manera de vacilarle, pero no podía hacer nada. – De todas maneras, espero que cambie de parecer ya que eso ayudará a que su investigación avance por el camino correcto. Buenos días.
Castle salió por la puerta y los chicos se levantaron para salir de allí tras él, pero Gates les detuvo ordenándoles que buscasen en el histórico de llamadas del escritor y sacaran el listado de su móvil. Esposito le dijo a su capitana que no podían hacer eso sin una orden y ésta les hizo un gesto para que la consiguieran, ellos se indignaron aun más. Al salir por la puerta, Gates vio como el escritor se alejaba mientras marcaba un número en su móvil y Kate iba detrás, intentando alcanzarlo. Quería evitar posibles influencias así que la llamó antes de que pudiera llegar a él.
Inspectora, venga ahora mismo. – Gates sabía cómo acabar con los nervios de cualquiera. Kate la ignoró intentando simular que no le había oído. – ¡Inspectora Beckett!
¡Castle! ¡Espera! – Kate seguía andando tras él, antes de que pudiese pillar el ascensor e irse. Él se volvió viendo como Gates observaba desde la puerta de la sala de interrogatorios. Espero a Kate para evitar que lo que iba a decirle se oyese por terceros.
Kate, ahora no puedes venirte, tu jefa no lo va a permitir. Y la comisaría no es el lugar para hablar de esto. – La miró fijamente a los ojos. – Tranquila, quiere jugar pero no sabe que con esto no puede ganar.
¿Y si le digo que estuve contigo? – Kate no sabía ya cómo sacarle de aquello. – Eso servirá, no hay mejor coartada que la de un policía…
¡No! Nada de mentiras. A la hora del asesinato tú ya no estabas en casa y yo estaba solo, no hay nada que hacer. Además, no estás hablando de ocultar algo o mentir por algo sin importancia, sino de mentir en una investigación de asesinato y puedes perder la placa por ello… - Le dirigió una mirada tranquilizadora, a pesar de la situación que tenía no quería que Kate se alterase ni se buscase problemas. - No lo permitiré y lo sabes.
¿La periodista y tú…? – Kate no sabía si debía preguntarlo allí pero tenía mucha curiosidad. Castle sabía de sobra lo que le quería preguntar pero la comisaría no era el lugar.
Ahora no, Kate. Aquí no… - Le hizo un gesto y se despidió. – Tengo que hablar con mi abogado, cuando termine te aviso…
Al mediodía, Kate acudió a la cafetería de enfrente de la comisaría. Castle le había mandado un mensaje a su móvil y le estaba esperando allí. Cuando entró, lo vio leyendo en una mesa del fondo…
Hola Castle. – Él levantó la vista y le sonrió, Kate se sentó frente a él. - ¿Por qué has quedado conmigo precisamente en una cafetería que frecuentan los de la comisaría?
No he hecho nada ni estoy huyendo de nadie, Kate. – Castle vislumbró la preocupación de ella en sus ojos e intentó transmitirle calma. - Tranquila, ya he hablado con mi abogado y Gates no puede hacer nada basándose sólo en una publicación.
La investigación aun la dirijo yo y la están llevando los chicos pero Gates la sigue de cerca. Imagino que ya habrá pedido una orden para tu móvil y una investigación oficial sobre ti. Si te vuelve a interrogar será ella la que lo lleve y eso me preocupa… - Castle comenzó a reírse mientras le dirigía una mirada pícara. - ¿De qué te ríes?
¿No has pensado en que si consigue esa orden se dará cuenta de que te he estado llamando mucho, verdad? – Le dirigió una sonrisa juguetona pero Kate seguía sin sonreír. – Relájate, no pasa nada. Si se da el caso, le diré que sólo intentaba acostarme contigo pero que no pretendía matarte como a otras...
Ahora mismo me están cubriendo los chicos, saben que estoy contigo pero, aún así, no tengo mucho tiempo. – Kate le hizo un gesto haciéndole ver que no era momento para bromear. - Necesito que me ayudes a resolver esto, hay que buscar una coartada.
Kate, no voy a mentir… Lo único que voy a hacer es ocultar lo nuestro, sabes que no te comprometería por nada del mundo. – Castle la miró con dulzura mientras le sonreía.
En realidad, eso me da igual… - Kate lo miró fijamente, Castle notó que su preocupación no había cesado y que seguía tensa. – Sólo quiero sacarte de todo esto.
No he hecho nada malo, hace tiempo que no veía a Helen. Éramos amigos, más o menos. – Castle sabía que tenía que poner al día a Kate sobre todo aquello y ese era el momento. – Respecto a tu pregunta, lo que decía Gates es verdad, tuve una relación sexual con ella, ¿quieres saber algo más?
¿Cuándo fue la última vez que te acostaste con ella? – Kate prácticamente susurró, Castle se rio ante la pregunta de su novia. - ¿La pregunta te resulta graciosa?
Sí… Me parece graciosa tu forma de preguntar si me acosté con ella estando contigo. - Le sonrió de nuevo y Kate se sonrojó al ver como él había adivinado su objetivo. Castle se acercó a ella y le agarró la mano. – No, Kate. Todo eso fue antes de estar contigo, pero no puedo decirte que fuese hace mucho. Las últimas veces ya estaba enamorado de ti pero tú estabas con Josh y Helen me ayudaba a evadirme de todo…
¿Desde cuándo la conocías? – La forma tan insegura de preguntar de Kate provocó que Castle volviese a reír. Kate intentaba relajarse pero sabía que en lo que estaba metido era algo serio.
¿Te refieres desde cuando la conocía en persona o desde cuando la conocía sexualmente? – Castle sonrió de nuevo, sin soltarle la mano. Intentaba que Kate sonriera pero le estaba costando conseguirlo. – ¿Seguro que quieres saberlo? Lo digo porque yo prefiero evitar saber esas cosas de ti… No te enfadaras por esto, ¿no?
No… Simplemente tengo curiosidad… Además, seguramente volverán a preguntarte eso si te llaman para otro interrogatorio. – Kate lo miró fijamente, él no dejaba de sonreírle y, poco a poco, se sintió algo más relajada a pesar de todo aquello.
Ya veré lo que decir y lo que no en un interrogatorio pero, a ti te diré todo lo que quieras saber. – Se acercó más a ella y le susurró. – Personalmente, la conocía desde mucho antes de conocerte a ti. Lo más gracioso es que me la presentó un día Gina, mi ex. Al principio, Helen y yo nos llevábamos a matar… Pero un día, en un evento que se había organizado para reunir fondos para una organización que ayudaba a niños sin hogar, terminamos en la cama con unas copas de más… Fue en la época en que nunca decía que no a una mujer atractiva…
¿Y no llegasteis a tener nada serio? – A Kate cada vez le salían más preguntas de su boca. Precisamente iba a ser el centro de su investigación y prefería saber antes todo con detalle.
No, no éramos muy compatibles. Nuestro carácter chocaba bastante… Discutíamos a menudo pero nos llevábamos bien, no sé cómo explicarlo. En cuanto al sexo, Kate, me resulta muy raro hablar de eso contigo… - Castle la miró fijamente, intentando indagar si había decepción en su mirada pero lo único que vio fue preocupación. - ¿Seguro que quieres saberlo todo?
Tranquilo, no pasa nada. Prefiero saber los detalles ahora que enterarme de ellos por mi jefa… - Kate clavó su mirada en la de él. Sí que se sentía algo incómoda hablando de aquello pero era, sobre todo, porque aquella mujer había sido asesinada y sabía que él estaría afectado por su muerte. Aun así, le incitó a hablar, comenzando ella con el tema. - Imagino que, puntualmente, acabarías en la cama con ella… ¿No?
En realidad, bastante a menudo… Siempre que ella necesitaba desahogarse o viceversa. En ese aspecto, éramos bastante compatibles… Podría decirse que, quitando las relaciones serias, ha sido la relación sexual más larga que he tenido… Pero ambos teníamos claro que no era más que eso, una simple diversión…
¿Cuándo acabo todo? – Kate tenía esa pregunta en su mente desde que sabía que habían estado juntos. Quería saber la fecha exacta, aunque no estaba segura si era para saber si podrían relacionar aquello con la investigación o por otra cosa.
Después de la última discusión que tuvimos en público, que fue hace unos cuatro meses, más o menos. Supongo que habrán sido sus compañeros los que habrán informado a Gates de esa disputa, ya que fue en su trabajo… - Castle ya había dejado de sonreír, ahora su expresión reflejaba dolor. La muerte de ella se estaba apoderando de su mente. – Terminamos de nuevo en la cama pero fue la última vez que nos vimos hasta…
¿Hasta? – Kate notó que Castle se quedó cabizbajo y en silencio por algo importante y eso le intrigó aun más. – Rick, ¿hasta qué?
Hasta que me llamó hace un mes o así y, al ver que no contesté, vino a verme a casa. Estaba fastidiada, tenía problemas que me estuvo contando y luego quiso evadirse de todo… Ya me entiendes… - Castle le hizo un gesto y Kate abrió los ojos de par en par, al enterarse de la intención de la periodista.
¿Pasó eso estando conmigo? - Kate no daba crédito a lo que oía. En ese momento, si la periodista hubiera estado viva, ella misma hubiera ido a sacarle los ojos. - ¿Te buscó para acostarse contigo?
Sí, pero le dije que estaba con alguien, que estaba enamorado de esa persona y que ya no iba a tener nada más con ella. Pero no le dije con quién estaba saliendo, sólo que si necesitaba algo de mí como amigo me podría llamar… – Castle comenzó a acariciarle la mano, mientras la miraba con dulzura. - Al final terminamos discutiendo de nuevo y luego se marchó diciendo algunas palabras fuera de tono que no voy a repetir…
¿Intentó acostarse contigo sabiendo que estabas con alguien? ¡Será… – Kate no llegó a soltar la palabra que se le pasó por su mente, al recordar que había sido alguien importante para él. Estaba indignada y había alzado la voz, Castle intentó tranquilizarla.
No, Helen no lo sabía… Se enteró ese día, Kate, pero no pasó nada. Esa fue la última vez que la vi… - Castle suspiró y recordó lo de la publicación. – Pero amenazó con sacar a la luz aquella publicación sobre ciertos aspectos privados de mi vida y, por eso, terminamos discutiendo…
Ese es el motivo principal que tienen para acusarte, Rick… - Kate sabía que, si no encontraban al verdadero asesino pronto, Castle lo podría pasar bastante mal. – Tienen lo de la publicación, aún no he tenido tiempo de leerla pero los chicos y Gates sí lo han hecho… ¿Le mandaste algún tipo de amenaza por escrito?
No, sólo verbalmente y estaba de broma, muchas veces nos comportábamos así. En realidad, aquello no era para tanto… Sólo estuve picándola para evitar que lo publicase simplemente por el hecho de estar indignada. – Castle le volvió a sonreír. – Puedes leerla, quizás te rías con lo que pone de mí. Es más, sabrás lo que es cierto y lo que no. Si no añadió más cosas, sólo era una columna sobre un escritor famoso y sus “gustos privados”… No es algo que me quite el sueño aunque me molesta un poco que lo haya podido leer Gates…
Gracias por contármelo… - Kate le sonrió y Castle le devolvió la sonrisa. – Siento lo de… Helen.
Ya, lo sé. – En ese momento, unos oficiales entraron por la puerta con Gates. Castle, al verlos, se levantó y le hizo un gesto a Kate, que estaba de espaldas a la puerta. – Beckett márchate, creo que vienen a detenerme.
¡Vaya Inspectora! Los detectives me habían dicho que estaba en la sala de archivos, no imaginaba que estaría con nuestro sospechoso… – Gates miró a Kate sonriendo y luego se acercó a él con las esposas. – Lo quería de manera oficial, ¿no? Pues ya lo es… Richard Castle, queda usted detenido por el asesinato de Helen Wyatt. Tiene derecho a permanecer en silencio, todo lo que diga podrá ser usado en su contra ante un tribunal. Tiene derecho a un abogado, sino puede pagarlo se le asignará uno de oficio…
Se equivoca, soy inocente… - Castle había esperado a que terminase de leerle sus derechos mientras lo esposaba, luego miró fijamente a Gates. – No haga de esto algo personal…
¡No puede hacerlo, señor! – Kate se había puesto entre él y la capitana. – ¡Él no ha hecho nada!
Lo siento, inspectora… Hemos descubierto nuevas pruebas que indican que la periodista quedó con él en el centro comercial la misma mañana en que fue asesinada. Todo apunta a él, ahora sí que es el principal sospechoso en este caso… - Gates ordenó a los oficiales que se lo llevasen y se dirigió a Kate con un tono sarcástico. – Debería estar familiarizada con todo esto, me he enterado que ya lo ha detenido más de una vez, es una pena que esta vez no haya sido usted la que le pusiese las esposas… Por cierto, si no puede seguir con la investigación me lo dice y la relevo del caso…
¡No, señor! ¡Aun es mi caso y llegaré al fondo de todo esto, puede estar segura de ello! – Le dirigió una mirada amenazadora y llena de ira a su capitana y salió de la cafetería en dirección a la comisaría.
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Vaya panorama!!! y Gates disfrutando d su momento Bueno, la segunda parte anda a la espera de vuestra opinión
Vamos ahora con otro capi, espero k os guste... aunque es un poquito largo es fácil de leer, o eso creo
Y muchas gracias editora ash, por tu ayuda
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Capítulo 29: El interrogatorio.
Al final, a pesar del descubrimiento de los chicos en el Old Haunt, todo había terminado más o menos bien. Kate se había quedado dormida en su coche y Castle condujo hasta su loft, llevándola a su habitación en brazos y colocándola con suavidad en un lado de su cama. Al día siguiente, Kate se había despertado con resaca y, al volverse, vio que él no estaba en la cama. Se dio cuenta que, en lugar del vestido, tenía una camisa de él puesta como pijama, pero no recordaba nada después de aquel encuentro en el guardarropa así que supuso que fue su chico el que la cambió. La luz del baño estaba encendida así que se dirigió hacia allí y vio a Castle con la mirada fija en el espejo. Se puso detrás de él y lo abrazó rodeando su cintura por detrás, mientras apoyaba la cabeza en su espalda. Él se apartó y se volvió, mirándola fijamente pero sin decir palabra, Kate lo abrazó de nuevo.
Voy a darme un baño que no me encuentro bien y en unas horas tengo que estar en la comisaría. – Kate se había acercado a su boca, sonriéndole pícaramente. - ¿Quieres acompañarme y enjabonar mi cuerpo?
Podría ayudarte a quitarte la ropa y meterme contigo pero no sé si te gustaría que te enjabonase yo... ¿No prefieres que llame a tu querido amigo Jack para que lo haga? – Ella se sorprendió ante su tono sarcástico y su mirada borde.
Hoy te has levantado con el pie izquierdo, por lo que veo. Si esto es por lo de anoche, sabes que fue para evitar líos. Ya bastante tengo con lo que voy a tener que soportar en el trabajo por lo de ayer. - Kate le acarició la mejilla y lo besó, Castle seguía con la mirada seria. - Gracias por no haber montado un espectáculo en el bar, al verme bailar con ese oficial...
¿Sólo bailar? ¡Si lo único que te faltó fue acostarte con él! Si hubieras estado en mi lugar seguro que me habrías montado una escena, que ya sabemos la que me liaste con lo de Linda... - Apartó la mirada de ella y volvió a mirar fijamente el espejo. Kate se había sorprendido al ver cómo él le había alzado la voz. - Sólo espero que lo que hiciste con él y ese beso no traigan más consecuencias, que bastante me dolió tener que verlo...
¿Beso? - Kate levantó la vista perpleja, parecía que no entendía a qué se refería. Castle se volvió y la miró extrañado, ante su reacción. - Sólo recuerdo haber bailado con él, el beso te lo di a ti en el guardarropa ¿no?
¿No lo recuerdas? ¡Pues a mí, en cambio, me va a costar olvidarlo! No, Kate, no fui el único al que besaste… Ese oficial estrenó tu boca en el Old Haunt anoche y yo sólo fui el segundo plato… Sólo te faltó opinar sobre cuál besaba mejor… – El sarcasmo de Castle se había vuelto más pronunciado. Se había separado de ella, sin dejar de mirarla, luego le dio la espalda y se fue hacia la cocina mientras seguía hablando. – Jack buscó tu lengua y tú se la entregaste, en mi bar y en mi presencia... Estuve a punto de pegarle un puñetazo y cortar aquello pero, aun así, me contuve. La próxima vez que vayas a comportarte así delante de Gates me gustaría hablar de ello antes. No sea que tengas que echar un polvo con otro la siguiente vez que quieras evitar sospechas ante ella...
¡Rick! - Kate sintió una punzada de dolor en su interior al oír aquellos comentarios, Castle sabía cómo dañar con las palabras. Se dirigió también hacia la cocina, tras él. - ¡Espera! Mírame, por favor...
Voy a preparar algo para tu resaca. - Castle se había vuelto hacia ella, su mirada era algo fría. - Ve a darte un baño que te sentará bien. No quiero discutir esto, prefiero olvidarlo...
Rick, lo siento. - Kate le agarró la mano y lo miró dulcemente. - En serio, ahora mismo sólo tengo imágenes sueltas en mi cabeza. ¿No puede ser que vieras, en realidad, otra cosa? No creo que fuese capaz de besar a otro...
Está claro que el alcohol te ha nublado la memoria. ¿No me crees? Mira Kate, paso de tener que darte los detalles que se me revuelve el estómago sólo de pensarlo, pero ya sabes que puedes ver el video de vigilancia mientras te tomas unas palomitas y una cerveza… Lo mismo, al verlo con detalle, puedes averiguar que parte de tu cuerpo se le olvidó tocar... - Su sarcasmo tan continuado e intenso cada vez indignaba más a Kate. - Pero eso es lo de menos, yo de ti me preocuparía más de lo que pueda decirte Jack en la comisaría cuando te vea, no sea que quiera acostarse contigo y Gates lo apoye... Miedo me da sabiendo que, últimamente, no le discutes a tu jefa...
¡Basta ya, Richard! Te he dicho que lo siento, si no quieres dejarlo pasar me lo dices y terminamos aquí, pero no quiero estar aguantando tu sarcasmo continuamente. - Kate no soportaba discutir con él pero tenía que parar aquello. Sus continuos sarcasmos e insinuaciones de acostarse con otro la llevaron al límite. - Estos días has estado muy raro y desde que te ocurrió aquello he estado a tu lado y he respetado todo lo que me pediste, a pesar de que deberíamos haber tomado medidas policiales. Supongo que ayer bebí de más intentando evadir todas las presiones y se me fue de las manos, pero todos cometemos errores. Tú también te has pasado más de una vez y aún sigo aquí. Sólo sé que no podemos estar todo el día así...
Está bien, dejémoslo así. - Se acercó a ella, mirándola fijamente a los ojos. - Es que no he podido pegar ojo pensando en lo de ayer y la falta de sueño no ayuda... Pero es que me volvió loco ver cómo te...
Shh. Tranquilo... Lo sé, yo también he pasado por eso... – le acarició el pelo y lo besó en la mejilla. – ¿Quieres venirte a la cama? Aun tengo algo de tiempo…
No, ahora no me apetece… Voy a ir preparándote mi zumo milagroso para la resaca. – Kate se quedó sorprendida ante la negativa de él y lo miró fijamente mientras le cogía de la mano.
¿Seguro que no quieres hablar de todo esto? – Kate no apartaba la vista de sus ojos.
Seguro. Además, tú no te acuerdas así que sólo necesito olvidarlo yo. – Castle apartó la mirada y fijó la vista en el suelo, Kate sintió su dolor.
Está bien. – Kate quería conseguir que Castle sonriese pero no sabía cómo, así que lo intentó, gastándole una broma. – La próxima vez que me vaya a emborrachar me aseguraré de estar a solas contigo.
Qué graciosa… Aunque hay que reconocer que tus deseos sexuales cuando estás borracha son demasiado peligrosos… - Le dio el zumo y Kate se lo agradeció con un dulce beso en los labios. – Voy a ir preparándome que te voy a acompañar a la comisaria.
Ryan y Esposito ya habían llegado a la comisaría a pesar de que Beckett aun no andaba por allí. Llevaban un rato mirando el contenido de las cajas que habían sacado del despacho de la periodista en su trabajo. De repente, Ryan se quedó mirando unas notas perplejo y Esposito, al ver su expresión, enseguida se acercó a mirar… Rápidamente, se pusieron a revisar las facturas telefónicas de los meses anteriores y, al cabo de un rato, algo les dejó completamente impactados… Ambos se miraron fijamente, asustados. Sabían que tenían que alejar todo aquello de su capitana, de inmediato, pero antes de que pudieran reaccionar, Gates ya estaba, a su lado, preguntándoles como iba la investigación y mirando aquellos papeles… Llamaron a algunos compañeros de la víctima por petición de la capitana, que no se apartó de su lado a causa de aquellas revelaciones, y acabaron sacando información nueva que no habían previsto…
Cuando Kate y Castle llegaron a la comisaría, ella notó que algo no iba bien. Tanto los chicos como Gates estaban mirando fijamente el ascensor del que acababan de salir. Ryan y Esposito no paraban de hacerles gestos con la cabeza a ambos para que se marchasen, pero la capitana ya se había acercado a ellos…
Sr. Castle, otra vez por aquí. Precisamente iba a llamarle, ¿qué tal va todo?.. – Antes de que pudiese contestar a la pregunta de Gates, ella continuó con un ligero tono sarcástico. - ¿Cuándo nos iba a decir que conocía a Helen Wyatt de una manera tan “cercana”?
¿Helen Wyatt? – Castle se había quedado perplejo. Kate lo miró aun más sorprendida, al oír lo que había dicho su capitana.
Sí, la periodista… No me dirá que no se acuerda de ella, ¿no? – Una sonrisa comenzó a dibujarse en el rostro de Gates. – Y eso que se acostaba con ella que si no…
¡¿Qué?! – Kate no pudo evitar dejar escapar un grito de su boca, se había quedado mirando a Castle con los ojos abiertos de par en par. Estaba impactada, pero más por el hecho de lo último que había dicho su capitana que por el hecho de que conociese a la víctima.
¿Qué pasa con Helen? – Castle seguía perplejo mirando a Gates y a los chicos. Últimamente no había estado pendiente de las noticias ni del caso que llevaba Kate por lo que no sabía ni siquiera quién había muerto en el centro comercial, sólo sabía que su novia había ido a investigar un homicidio allí. – No entiendo nada…
Acompañe al detective Ryan y Esposito que van a hablar con usted… - Le indicó la puerta de la sala de interrogatorios y les hizo un gesto a ellos, la cara de Gates reflejaba satisfacción. Kate aun no daba crédito a todo lo que estaba ocurriendo. Los chicos le dieron una palmada en el hombro a Castle, en señal de apoyo, y se fueron hacia la sala. – Inspectora Beckett, venga conmigo. Esto lo vamos disfrutar desde las gradas…
¿Chicos que está pasando? – Castle se asustó al ver sus caras, ellos se habían sentado en la sala de interrogatorios y le hicieron un gesto para que él también se sentase. Cuando lo hizo y terminó de hablar, Ryan y Esposito comenzaron a preguntarle. – Vamos, ¿por qué estoy en la sala de interrogatorios? ¿Qué ocurre?
¿Conocías a Helen Wyatt? – A ellos se les notaba sin muchas ganas de preguntar, pero sabían a quién tenían tras el espejo, así que comenzaron con las preguntas de rutina, enseñándole a su vez una foto de la víctima.
¿Helen? Sí... – Castle miraba a los chicos perplejo, sus ojos iban desde el espejo hasta la cara de ambos, pasando por la foto. Sabía que una situación así no indicaba nada bueno. A Kate le dio un vuelco el corazón cuando oyó aquella afirmación. - ¿Le ha pasado algo?
Es una periodista famosa, ¿no has visto las noticias estos últimos días? – Los chicos estaban muy suaves con sus preguntas y Gates cada vez estaba más indignada por ello. Había temas que ellos no iban a tocar porque ya sabían su respuesta y no querían comprometer a su amigo ni a Beckett, pero no sabían que eso iba a provocar que la capitana tomase medidas…
No, la verdad es que ando un poco desconectado últimamente. – Castle cada vez imaginaba con más certeza lo que podía estar pasando y cada vez notó un dolor más intenso en su interior. – Chicos, nunca entráis aquí si no es por un asesinato… ¿No será ella la víctima?
Sí… - Los chicos apartaron la vista de su amigo durante un momento y luego volvieron a mirarlo con tristeza. Ante aquel comportamiento tan atípico de una interrogación, Gates no pudo más y se dirigió a la sala de interrogatorios. – Lo siento, sabemos que la conocías bien…
¿Helen… ha… muerto? – La mirada de Castle se quedó hundida en la foto que tenía frente a él mientras una sensación de ahogo presionaba su pecho y un dolor intenso recorría todo su cuerpo. Los chicos se habían quedado en silencio, apenados, al verlo así. Ryan le dio unas palmaditas en su brazo, mostrando su apoyo. – No… No puede… ser…
¡Detectives! ¿Qué está pasando aquí? No están siendo objetivos. ¡Esto parece más una tertulia que un interrogatorio! – Se acercó a ellos y agarró la carpeta que tenían en la mesa. – ¿Así interrogan a un sospechoso? Miren y aprendan…
¿Yo? ¿Sospechoso de qué? ¿De asesinar a Helen? – Castle miraba perplejo a Gates y luego a los chicos, no daba crédito a lo que estaba pasando. Precisamente Kate, tras el espejo, estaba aun más perpleja que él. – ¿No estará hablando en serio?
¡¿Cree que esto es una broma?! – Se puso de pie frente a él y abrió la carpeta sacando una foto del cuerpo sin vida de la víctima, cubierta de sangre, poniéndola en la mesa junto a sus manos. Castle miró la foto y abrumado, al verla, apartó rápidamente la vista negando con la cabeza. – ¿La forma en que ha muerto esta mujer le parece una broma? ¿De verdad intenta hacernos creer que no sabía que había sido asesinada una mujer que conocía desde hace tiempo y con la que se acostaba? Venga ya, Sr. Castle, no puede ser que piense que somos tan ingenuos…
No lo sabía, en serio. – Miró a Gates y luego a los chicos, viendo que estaban tan incómodos como él por aquella situación. - Yo no pienso nada, sólo estoy diciendo la verdad… No he colaborado mucho con usted pero debería saber que no soy una persona que va de mala fe…
Es un escritor, está acostumbrado a inventar historias y a conseguir que las crean… - Gates seguía de pie frente a él. Se acercó más, invadiendo su espacio y poniendo su cara a unos centímetros de él, intentando intimidarle. - ¿Sabe lo que pienso? Intentó disuadir a la periodista de que publicara aquella columna que trataba sobre usted y, después de una acalorada discusión, le amenazó. Cuando se enteró de que, aun así, iba a publicarla, quedó con ella en el centro comercial y, de camino a los aseos, discutieron. Ella le golpeó y usted le disparó acabando con su problema.
¡Vaya! – Castle no había podido evitar reírse ante aquella absurda acusación, los chicos se quedaron perplejos ante la reacción de su amigo. – ¡Sí que tiene usted imaginación! Le diría que se dedicase a escribir si no fuese porque sus teorías son un poco absurdas… Está perdiendo el tiempo con la persona equivocada.
Tenemos testigos que le vieron discutir con la víctima y sabemos, con certeza, que tenía una relación íntima con ella. – Kate se quedaba más impactada a cada información nueva que iba recibiendo. Lanie, en cuanto se enteró, había acudido junto a ella. Había entrado en la sala de observación justo después de que saliese Gates. Se había acercado a Kate e intentaba que ella reaccionase, pero aun estaba en shock. – Tenía móvil, tenía oportunidad y sabe utilizar un arma con mucha precisión… Además, ese mismo mediodía apareció usted por aquí con un ojo morado… ¿Intentó acostarse con ella sin éxito y al insistir la periodista le pegó?
¡Señor! – Esposito no pudo evitar interrumpir a su jefa, eso no podía añadirlo a su acusación. Gates miró al detective de manera amenazadora, al verse interrumpida. – Ese ojo morado se lo puse yo… Le pegué un puñetazo el día anterior por un malentendido y hay testigos de eso…
¿Le pegó usted? – Gates arqueó las cejas sorprendida, no se esperaba esa información. Kate sonrió al ver la perplejidad de su capitana y a Lanie se le escapó un “Ese es mi chico” orgullosa ante lo que había hecho Esposito. Ryan se había quedado perplejo ante aquella revelación, riéndose ligeramente. Lo que menos se esperaba es que su compañero hubiese pegado a Castle. – Bueno, eso es lo de menos... El caso, Sr. Castle, es que tenía una relación con la víctima y tenía motivos para matarla.
Lo primero es que yo no mataría ni a una mosca y lo segundo es que esta acusación es totalmente absurda. ¿Cree que podría matar a alguien por estar en desacuerdo con su publicación? – Castle cada vez estaba más perplejo e indignado. No quería que la capitana estuviera allí, presionándole de aquella manera, cuando se acababa de enterar de la muerte de una amiga y tampoco que su novia estuviese, tras aquel cristal, soportando aquella extorsión. Kate observó que él no había negado nada de lo que había dicho su jefa, cada vez estaba más enfadada con ella ante aquel acoso a su novio y algo tenía que hacer. Cuando se dirigió a la puerta para intentar parar todo aquello, Lanie la detuvo. – Señor, sabe que todo esto no cuadra.
No me llame Señor, ahora mismo no es colaborador nuestro sino un sospechoso… - Gates no se apartaba de él ni de su mirada, estaba convencida de que algo ocultaba y, además, estaba disfrutando con aquello. – Ya puede ir diciéndonos qué estaba haciendo este lunes pasado entre las 9 y las 11 de la mañana porque si no va a acabar en una celda y su amigo, el Alcalde, no va a poder hacer mucho por impedirlo…
¿Todo esto no será por mi amistad con el Alcalde? Porque eso no denota mucha objetividad por su parte… - Los chicos abrieron los ojos de par en par, impactados ante las contestaciones del escritor hacia su capitana. Castle recordó que la madrugada del lunes había estado en el laboratorio sorprendiendo a Kate y luego en casa de ella pero, precisamente el intervalo de tiempo del homicidio, era cuando Kate ya se había ido a trabajar y a esas horas estuvo sólo. – Mire, en realidad, no recuerdo que estaba haciendo el lunes a esas horas pero, desde luego, no estaba en ningún centro comercial… Sé cómo va esto, sin pruebas no puede encerrarme, así que pregúnteme lo que quiera y luego me marcharé por dónde he venido…
Mientras, en la sala de observación, ambas amigas no dejaban de mirarse, transmitiéndose todas sus preocupaciones a través de los ojos.
Sé que estás indignada, pero no puedes entrar ahí e interrumpir a tu jefa. Eso te puede costar una suspensión y no puedes permitírtelo. – Lanie intentaba calmar a su amiga pero la situación no ayudaba. – Gates no tiene pruebas contra él y no hay nada en el cadáver que indique algo en su contra. Kate, no dejes que te provoque, que eso si que puede traer consecuencias.
Lo sé, pero todo esto sólo lo hace porque no le soporta. Tiene razón Castle, no está siendo objetiva y alguien tiene que hacérselo ver. – Se dirigió de nuevo hacia la puerta y se volvió a mirar a Lanie, ella negó con la cabeza intentando evitar que cometiese una locura.
Ya se lo ha dicho él… No te metas, Kate, no eres la adecuada para hacerlo. Lo conoces bien, sabes que él puede manejar esto solo. Además, puede que en situaciones de riesgo pierda los nervios antes pero en este tipo de ataque verbal no se altera tan fácilmente. – Se acercó a ella y le agarró la mano. – No vayas, por favor.
Está bien, me quedaré aquí. ¿Sabes? No sabía nada de su relación con la periodista, resulta que hay más aspectos de su vida que desconozco de los que pensaba… - Se quedó mirando a Castle a través del espejo, preguntándose aun de que iría aquella relación entre la víctima y él. – Pensaba que la última persona con la que estuvo fue Gina, su ex mujer…
No sabes aun lo que hay de verdad en lo que ha dicho Gates. – Se acercó a ella junto al espejo, para que el policía que estaba con los aparatos de grabación no escuchase su conversación. – Además, hace meses tú estabas con Josh, no hay nada de malo en que él hubiese tenido algún tipo de relación con otra mujer…
Lo sé, pero lo que me ha sorprendido es no saber nada de esa periodista… - Kate sabía que mientras él estuvo soltero podría haber tenido algo pero, aun así, todo eso le descuadraba. – Me parece raro.
¿Es que acaso habéis hablado alguna vez de vuestro historial anterior de ligues y te ha ocultado lo de la periodista? – Lanie intentaba hacer ver a su amiga que aquello no era nada extraño.
No, nunca hemos hablado de eso… - Kate le sonrió ligeramente a su amiga, al darse cuenta que, en realidad, nunca habían visto necesario conocer al detalle las conquistas de cada uno. – Precisamente, ese tema nunca ha salido. Creo que saber esas cosas no ha sido algo esencial…
Tú lo has dicho, no es una cosa que hayáis visto importante. ¿Entonces por qué ahora te extraña? – Lanie, mientras le hablaba, intentaba evadirle del interrogatorio pero Kate seguía pendiente de ambas cosas. – No dejes que esto te supere, sea verdad o no lo de la periodista, algo está claro… Él no ha matado a nadie y tienes que estar a su lado que, sabiendo cómo es Gates, necesitará tranquilizarse luego. Si quieres podemos irnos, así evitarías ponerte más nerviosa…
Sé que me va a necesitar y estaré ahí, apoyándole, pero no me voy a ir de aquí hasta que terminen… - Kate se quedó mirando a su amiga. Mientras, la capitana seguía presionando al escritor. – Aun es mi investigación y necesito saber hasta qué punto llega Gates. De todas maneras, gracias por todo Lanie.
Sr. Castle, esa no es una coartada muy solida. ¿Solo y sin nadie que pueda corroborar dónde estaba realmente? Tiene que aceptar que, precisamente, no está en una buena posición ahora mismo. – Gates no dejaba de presionar, los chicos se miraban preguntándose que podrían hacer contra aquella situación, Ryan se encogió de hombros y Esposito frunció el cejo. - ¿Hasta cuando ha estado acostándose con la víctima?
No tengo porque contestar a eso, mi vida privada no le concierne… - No quería dar detalles de su vida personal para evitar sacar ningún tema que pudiera comprometer a Kate, de algún modo. Los chicos estaban impactados con la tranquilidad y prudencia de su amigo ante la presión de Gates. – Mi relación con ella no tiene nada que ver con esto. No he estado saliendo con Helen pero éramos amigos y, aunque hace tiempo que no nos veíamos, conozco su círculo. Creo que debería cambiar su dinámica conmigo que ya sabe que yo no he hecho nada y, además, les podría ayudar a encontrar a su verdadero asesino.
¿Sabe? Es usted más listo de lo que pensaba. Veo que todo el tiempo que ha estado colaborando con los de homicidios le ha permitido aprender cómo controlar un interrogatorio. – Gates le sonrió y se alejó, caminando por la sala mientras no dejaba de mover unos papeles que había en la carpeta con información de la víctima. – Pero eso no le va a sacar del lío en el que está metido. ¿Dice que eran sólo amigos no? ¿Quiere que le ayude a recordar lo amigos que eran?
¿Y usted quiere qué llame a mi abogado? – Castle seguía tanteando a la capitana pero sabía que ella iba a intentar terminar de lanzar todas sus cartas antes y tenía que ser precavido. Los chicos se miraron y lanzaron una ligera sonrisa ante el golpe que lanzó el escritor a su capitana. – Porque esto que está haciendo no creo que sea muy legal…
Si quiere llamarlo ya sabe que tiene derecho, pero eso indica que intenta esconderse tras un abogado de lo que ha hecho realmente… - Gates le sonrió, buscando que perdiese los nervios pero Castle seguía manteniendo la calma de una manera sorprendente.
Ya me conozco de sobra esa frase… Suele utilizarse para evitar que el sospechoso llame a su abogado pero eso no quiere decir nada… Que yo sepa no me han detenido, así que estoy aquí por cortesía, ¿no es cierto? Por lo que puedo marcharme cuando quiera, Sra. Gates… - El nombre lo pronunció con un tono melodioso y algo sarcástico, haciendo hincapié en lo que le había pedido la capitana. Castle se levantó, y la miró fijamente, sonriéndole. Instantes después, terminó con una frase que dejó sin respuesta a Gates y perplejos a todos los que estaban escuchando. - ¿Usted cree que si hablo con él y le digo que me están reteniendo aquí sin pruebas y sin haberme leído mis derechos no tomará medidas legales?
Tiene razón, señor. – Esposito estaba deseando que terminase todo aquello y que su amigo pudiese salir de allí así que aprovechó que ella se había quedado sin palabras para ayudar a Castle. No se dio cuenta que estaba sonriendo por la contestación de su amigo hacia la capitana y esa actitud no le agradó a Gates. – No hay pruebas que nos permitan acusarlo de nada y no lo hemos detenido, así que puede irse si quiere. Además, él conoce muy bien sus derechos y si lo retiene a la fuerza puede demandarle a usted y a esta comisaria…
¿Esto le hace gracia, detective? – Esposito borró la sonrisa de su rostro. – Una mujer ha muerto y puede que su amigo haya tenido que ver en ello. No me parece nada gracioso que un sospechoso se pueda marchar, así como así, porque a ustedes no les guste lo que está pasando… Sr. Castle, sabe que si se va ahora sin contestar a todas las preguntas podemos detenerle después y acabar en un calabozo… ¿De verdad lo prefiere así?
Deje que lo consulte con mi abogado antes de responder a ninguna pregunta más que pueda hacerme y luego ya veremos… - Gates se indignó más ante la última contestación, sabía que tenía razón el escritor y no aguantaba su manera de vacilarle, pero no podía hacer nada. – De todas maneras, espero que cambie de parecer ya que eso ayudará a que su investigación avance por el camino correcto. Buenos días.
Castle salió por la puerta y los chicos se levantaron para salir de allí tras él, pero Gates les detuvo ordenándoles que buscasen en el histórico de llamadas del escritor y sacaran el listado de su móvil. Esposito le dijo a su capitana que no podían hacer eso sin una orden y ésta les hizo un gesto para que la consiguieran, ellos se indignaron aun más. Al salir por la puerta, Gates vio como el escritor se alejaba mientras marcaba un número en su móvil y Kate iba detrás, intentando alcanzarlo. Quería evitar posibles influencias así que la llamó antes de que pudiera llegar a él.
Inspectora, venga ahora mismo. – Gates sabía cómo acabar con los nervios de cualquiera. Kate la ignoró intentando simular que no le había oído. – ¡Inspectora Beckett!
¡Castle! ¡Espera! – Kate seguía andando tras él, antes de que pudiese pillar el ascensor e irse. Él se volvió viendo como Gates observaba desde la puerta de la sala de interrogatorios. Espero a Kate para evitar que lo que iba a decirle se oyese por terceros.
Kate, ahora no puedes venirte, tu jefa no lo va a permitir. Y la comisaría no es el lugar para hablar de esto. – La miró fijamente a los ojos. – Tranquila, quiere jugar pero no sabe que con esto no puede ganar.
¿Y si le digo que estuve contigo? – Kate no sabía ya cómo sacarle de aquello. – Eso servirá, no hay mejor coartada que la de un policía…
¡No! Nada de mentiras. A la hora del asesinato tú ya no estabas en casa y yo estaba solo, no hay nada que hacer. Además, no estás hablando de ocultar algo o mentir por algo sin importancia, sino de mentir en una investigación de asesinato y puedes perder la placa por ello… - Le dirigió una mirada tranquilizadora, a pesar de la situación que tenía no quería que Kate se alterase ni se buscase problemas. - No lo permitiré y lo sabes.
¿La periodista y tú…? – Kate no sabía si debía preguntarlo allí pero tenía mucha curiosidad. Castle sabía de sobra lo que le quería preguntar pero la comisaría no era el lugar.
Ahora no, Kate. Aquí no… - Le hizo un gesto y se despidió. – Tengo que hablar con mi abogado, cuando termine te aviso…
Al mediodía, Kate acudió a la cafetería de enfrente de la comisaría. Castle le había mandado un mensaje a su móvil y le estaba esperando allí. Cuando entró, lo vio leyendo en una mesa del fondo…
Hola Castle. – Él levantó la vista y le sonrió, Kate se sentó frente a él. - ¿Por qué has quedado conmigo precisamente en una cafetería que frecuentan los de la comisaría?
No he hecho nada ni estoy huyendo de nadie, Kate. – Castle vislumbró la preocupación de ella en sus ojos e intentó transmitirle calma. - Tranquila, ya he hablado con mi abogado y Gates no puede hacer nada basándose sólo en una publicación.
La investigación aun la dirijo yo y la están llevando los chicos pero Gates la sigue de cerca. Imagino que ya habrá pedido una orden para tu móvil y una investigación oficial sobre ti. Si te vuelve a interrogar será ella la que lo lleve y eso me preocupa… - Castle comenzó a reírse mientras le dirigía una mirada pícara. - ¿De qué te ríes?
¿No has pensado en que si consigue esa orden se dará cuenta de que te he estado llamando mucho, verdad? – Le dirigió una sonrisa juguetona pero Kate seguía sin sonreír. – Relájate, no pasa nada. Si se da el caso, le diré que sólo intentaba acostarme contigo pero que no pretendía matarte como a otras...
Ahora mismo me están cubriendo los chicos, saben que estoy contigo pero, aún así, no tengo mucho tiempo. – Kate le hizo un gesto haciéndole ver que no era momento para bromear. - Necesito que me ayudes a resolver esto, hay que buscar una coartada.
Kate, no voy a mentir… Lo único que voy a hacer es ocultar lo nuestro, sabes que no te comprometería por nada del mundo. – Castle la miró con dulzura mientras le sonreía.
En realidad, eso me da igual… - Kate lo miró fijamente, Castle notó que su preocupación no había cesado y que seguía tensa. – Sólo quiero sacarte de todo esto.
No he hecho nada malo, hace tiempo que no veía a Helen. Éramos amigos, más o menos. – Castle sabía que tenía que poner al día a Kate sobre todo aquello y ese era el momento. – Respecto a tu pregunta, lo que decía Gates es verdad, tuve una relación sexual con ella, ¿quieres saber algo más?
¿Cuándo fue la última vez que te acostaste con ella? – Kate prácticamente susurró, Castle se rio ante la pregunta de su novia. - ¿La pregunta te resulta graciosa?
Sí… Me parece graciosa tu forma de preguntar si me acosté con ella estando contigo. - Le sonrió de nuevo y Kate se sonrojó al ver como él había adivinado su objetivo. Castle se acercó a ella y le agarró la mano. – No, Kate. Todo eso fue antes de estar contigo, pero no puedo decirte que fuese hace mucho. Las últimas veces ya estaba enamorado de ti pero tú estabas con Josh y Helen me ayudaba a evadirme de todo…
¿Desde cuándo la conocías? – La forma tan insegura de preguntar de Kate provocó que Castle volviese a reír. Kate intentaba relajarse pero sabía que en lo que estaba metido era algo serio.
¿Te refieres desde cuando la conocía en persona o desde cuando la conocía sexualmente? – Castle sonrió de nuevo, sin soltarle la mano. Intentaba que Kate sonriera pero le estaba costando conseguirlo. – ¿Seguro que quieres saberlo? Lo digo porque yo prefiero evitar saber esas cosas de ti… No te enfadaras por esto, ¿no?
No… Simplemente tengo curiosidad… Además, seguramente volverán a preguntarte eso si te llaman para otro interrogatorio. – Kate lo miró fijamente, él no dejaba de sonreírle y, poco a poco, se sintió algo más relajada a pesar de todo aquello.
Ya veré lo que decir y lo que no en un interrogatorio pero, a ti te diré todo lo que quieras saber. – Se acercó más a ella y le susurró. – Personalmente, la conocía desde mucho antes de conocerte a ti. Lo más gracioso es que me la presentó un día Gina, mi ex. Al principio, Helen y yo nos llevábamos a matar… Pero un día, en un evento que se había organizado para reunir fondos para una organización que ayudaba a niños sin hogar, terminamos en la cama con unas copas de más… Fue en la época en que nunca decía que no a una mujer atractiva…
¿Y no llegasteis a tener nada serio? – A Kate cada vez le salían más preguntas de su boca. Precisamente iba a ser el centro de su investigación y prefería saber antes todo con detalle.
No, no éramos muy compatibles. Nuestro carácter chocaba bastante… Discutíamos a menudo pero nos llevábamos bien, no sé cómo explicarlo. En cuanto al sexo, Kate, me resulta muy raro hablar de eso contigo… - Castle la miró fijamente, intentando indagar si había decepción en su mirada pero lo único que vio fue preocupación. - ¿Seguro que quieres saberlo todo?
Tranquilo, no pasa nada. Prefiero saber los detalles ahora que enterarme de ellos por mi jefa… - Kate clavó su mirada en la de él. Sí que se sentía algo incómoda hablando de aquello pero era, sobre todo, porque aquella mujer había sido asesinada y sabía que él estaría afectado por su muerte. Aun así, le incitó a hablar, comenzando ella con el tema. - Imagino que, puntualmente, acabarías en la cama con ella… ¿No?
En realidad, bastante a menudo… Siempre que ella necesitaba desahogarse o viceversa. En ese aspecto, éramos bastante compatibles… Podría decirse que, quitando las relaciones serias, ha sido la relación sexual más larga que he tenido… Pero ambos teníamos claro que no era más que eso, una simple diversión…
¿Cuándo acabo todo? – Kate tenía esa pregunta en su mente desde que sabía que habían estado juntos. Quería saber la fecha exacta, aunque no estaba segura si era para saber si podrían relacionar aquello con la investigación o por otra cosa.
Después de la última discusión que tuvimos en público, que fue hace unos cuatro meses, más o menos. Supongo que habrán sido sus compañeros los que habrán informado a Gates de esa disputa, ya que fue en su trabajo… - Castle ya había dejado de sonreír, ahora su expresión reflejaba dolor. La muerte de ella se estaba apoderando de su mente. – Terminamos de nuevo en la cama pero fue la última vez que nos vimos hasta…
¿Hasta? – Kate notó que Castle se quedó cabizbajo y en silencio por algo importante y eso le intrigó aun más. – Rick, ¿hasta qué?
Hasta que me llamó hace un mes o así y, al ver que no contesté, vino a verme a casa. Estaba fastidiada, tenía problemas que me estuvo contando y luego quiso evadirse de todo… Ya me entiendes… - Castle le hizo un gesto y Kate abrió los ojos de par en par, al enterarse de la intención de la periodista.
¿Pasó eso estando conmigo? - Kate no daba crédito a lo que oía. En ese momento, si la periodista hubiera estado viva, ella misma hubiera ido a sacarle los ojos. - ¿Te buscó para acostarse contigo?
Sí, pero le dije que estaba con alguien, que estaba enamorado de esa persona y que ya no iba a tener nada más con ella. Pero no le dije con quién estaba saliendo, sólo que si necesitaba algo de mí como amigo me podría llamar… – Castle comenzó a acariciarle la mano, mientras la miraba con dulzura. - Al final terminamos discutiendo de nuevo y luego se marchó diciendo algunas palabras fuera de tono que no voy a repetir…
¿Intentó acostarse contigo sabiendo que estabas con alguien? ¡Será… – Kate no llegó a soltar la palabra que se le pasó por su mente, al recordar que había sido alguien importante para él. Estaba indignada y había alzado la voz, Castle intentó tranquilizarla.
No, Helen no lo sabía… Se enteró ese día, Kate, pero no pasó nada. Esa fue la última vez que la vi… - Castle suspiró y recordó lo de la publicación. – Pero amenazó con sacar a la luz aquella publicación sobre ciertos aspectos privados de mi vida y, por eso, terminamos discutiendo…
Ese es el motivo principal que tienen para acusarte, Rick… - Kate sabía que, si no encontraban al verdadero asesino pronto, Castle lo podría pasar bastante mal. – Tienen lo de la publicación, aún no he tenido tiempo de leerla pero los chicos y Gates sí lo han hecho… ¿Le mandaste algún tipo de amenaza por escrito?
No, sólo verbalmente y estaba de broma, muchas veces nos comportábamos así. En realidad, aquello no era para tanto… Sólo estuve picándola para evitar que lo publicase simplemente por el hecho de estar indignada. – Castle le volvió a sonreír. – Puedes leerla, quizás te rías con lo que pone de mí. Es más, sabrás lo que es cierto y lo que no. Si no añadió más cosas, sólo era una columna sobre un escritor famoso y sus “gustos privados”… No es algo que me quite el sueño aunque me molesta un poco que lo haya podido leer Gates…
Gracias por contármelo… - Kate le sonrió y Castle le devolvió la sonrisa. – Siento lo de… Helen.
Ya, lo sé. – En ese momento, unos oficiales entraron por la puerta con Gates. Castle, al verlos, se levantó y le hizo un gesto a Kate, que estaba de espaldas a la puerta. – Beckett márchate, creo que vienen a detenerme.
¡Vaya Inspectora! Los detectives me habían dicho que estaba en la sala de archivos, no imaginaba que estaría con nuestro sospechoso… – Gates miró a Kate sonriendo y luego se acercó a él con las esposas. – Lo quería de manera oficial, ¿no? Pues ya lo es… Richard Castle, queda usted detenido por el asesinato de Helen Wyatt. Tiene derecho a permanecer en silencio, todo lo que diga podrá ser usado en su contra ante un tribunal. Tiene derecho a un abogado, sino puede pagarlo se le asignará uno de oficio…
Se equivoca, soy inocente… - Castle había esperado a que terminase de leerle sus derechos mientras lo esposaba, luego miró fijamente a Gates. – No haga de esto algo personal…
¡No puede hacerlo, señor! – Kate se había puesto entre él y la capitana. – ¡Él no ha hecho nada!
Lo siento, inspectora… Hemos descubierto nuevas pruebas que indican que la periodista quedó con él en el centro comercial la misma mañana en que fue asesinada. Todo apunta a él, ahora sí que es el principal sospechoso en este caso… - Gates ordenó a los oficiales que se lo llevasen y se dirigió a Kate con un tono sarcástico. – Debería estar familiarizada con todo esto, me he enterado que ya lo ha detenido más de una vez, es una pena que esta vez no haya sido usted la que le pusiese las esposas… Por cierto, si no puede seguir con la investigación me lo dice y la relevo del caso…
¡No, señor! ¡Aun es mi caso y llegaré al fondo de todo esto, puede estar segura de ello! – Le dirigió una mirada amenazadora y llena de ira a su capitana y salió de la cafetería en dirección a la comisaría.
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Vaya panorama!!! y Gates disfrutando d su momento Bueno, la segunda parte anda a la espera de vuestra opinión
la_loki- Actor en Broadway
- Mensajes : 158
Fecha de inscripción : 12/09/2011
Edad : 47
Localización : Málaga
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
Isaaa Isaaa Isaaaaa te lo he dicho antes, pero no me cansaré de decirlo, escribes genial!!! wowwww y más wowwwww Castle arrestado pobre Kate!!!............
Necesito saber pronto como sale Castle de esta!!!!
Necesito saber pronto como sale Castle de esta!!!!
asita24- Actor en Broadway
- Mensajes : 187
Fecha de inscripción : 07/09/2011
Edad : 35
Localización : Heredia, Costa Rica
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
Quiero matar a Gates la odiooooo
Espero que todo se solucione y que Gates pague por lo que esta haciendo al pobre Castle.
Me encanta tu fic, no tardes mucho en subir el siguiente
Espero que todo se solucione y que Gates pague por lo que esta haciendo al pobre Castle.
Me encanta tu fic, no tardes mucho en subir el siguiente
Duende- Escritor - Policia
- Mensajes : 1212
Fecha de inscripción : 01/03/2011
Edad : 36
Localización : Galicia
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
Que fuerte
IMPRESIONANTE CAPITULO UN GIRO EN LA HISTORIA MUY INTERESANTE MA HA GUSTADO MUCHO
GATES QUE MALA
MUCHAS GRACIAS POR EL CAPI
IMPRESIONANTE CAPITULO UN GIRO EN LA HISTORIA MUY INTERESANTE MA HA GUSTADO MUCHO
GATES QUE MALA
MUCHAS GRACIAS POR EL CAPI
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
Que capitulo!!!!! Intenso e increibleeeeeee
No puedo esperar el proximo, te superas dia a dia
FELICITACIONESSSS
No puedo esperar el proximo, te superas dia a dia
FELICITACIONESSSS
silvanalino- Escritor - Policia
- Mensajes : 2439
Fecha de inscripción : 01/12/2010
Edad : 51
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
POR favor no puedo esperar que subas el proximo esta tan genial!!!
me falta palabras para definirtelo.
Impresionante
me falta palabras para definirtelo.
Impresionante
IsaVera- Autor de best-seller
- Mensajes : 762
Fecha de inscripción : 10/01/2011
Edad : 40
Localización : Cartagena, Murcia
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
Aaaaaaaaaaaaaaags ODIO a la petarda de Gates DIOS.... que la QUEMEN jajajajajajjajajajajajajaj
Muy buen capi Isaaaaaaaa, continua porfaiiis ^^
Muy buen capi Isaaaaaaaa, continua porfaiiis ^^
MelaD7- Moderador
- Mensajes : 732
Fecha de inscripción : 27/12/2011
Edad : 34
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
sigue prontooooooooo-me encantaaaa
castle&beckett..cris- Escritor - Policia
- Mensajes : 5471
Fecha de inscripción : 20/03/2011
Edad : 33
Localización : Menorca..I LOVE NEW YORK..NYPD..RICK CASTLE & KATE BECKETT
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
Qué chunga la Gates!!! Espero que no nos hagas esperar demasiado, que esto está muy bien!
Estefanía988- Actor en Broadway
- Mensajes : 170
Fecha de inscripción : 19/12/2011
Edad : 36
Localización : Una pequeña isla en medio del Atlántico
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
Menuda HP la capitana Gates, a ver si lo que le falta es un buen p..., porque está un poco agría la señora.
Me gusta la historia, continúa que lo has dejado en lo mejor.
Me gusta la historia, continúa que lo has dejado en lo mejor.
Cata Castillo- Escritor - Policia
- Mensajes : 1729
Fecha de inscripción : 25/09/2010
Localización : Al sur del sur
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
ISAAA, me encanta, porfavor no tardes en subir la segunda parte o me dara un infartooooo
Sera H·········· la capitana, i encima disfruta de ello, ya veras cuanado se entere de que Castle y Beckett estan saliendo.... se a quedar con la boca abierta
Sera H·········· la capitana, i encima disfruta de ello, ya veras cuanado se entere de que Castle y Beckett estan saliendo.... se a quedar con la boca abierta
carly becket- Policia de homicidios
- Mensajes : 631
Fecha de inscripción : 19/10/2011
Edad : 28
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
¡¡Pobre Gates!!
La dejaste en un mal lugar... Y en el fondo es buena u.u
¡Sigue pronto!
La dejaste en un mal lugar... Y en el fondo es buena u.u
¡Sigue pronto!
GabiiLovesMela<3- Escritor - Policia
- Mensajes : 1195
Fecha de inscripción : 24/07/2011
Edad : 29
Localización : Galicia
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
Vaya Mami tu nunca dejaras de sorprendernos,ahora resulta que Castle es el principal sospecho de un asesinato y claro Gates estara dando palmas con las orejas la muy .....................eso si ole y ole los cojones de Castle,manteniendo una tranquilidad que nos deja con la boca abierta.
Y Beckett la pobre resulta que es la que peor lo esta pasando,mira tu como son las cosas.
Ya estoy deseando leer el siguiente capi y ver como a la...........de IronGates se da un buen ostiazo al ver que Castle es inocente de todos los cargos.
Sigue asi Mami
Y Beckett la pobre resulta que es la que peor lo esta pasando,mira tu como son las cosas.
Ya estoy deseando leer el siguiente capi y ver como a la...........de IronGates se da un buen ostiazo al ver que Castle es inocente de todos los cargos.
Sigue asi Mami
Raúl- Moderador
- Mensajes : 1189
Fecha de inscripción : 18/05/2011
Edad : 32
Localización : Parla City
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
Isa gracias por el capitulo sube pronto el siguiente
karla rodgers- As del póker
- Mensajes : 295
Fecha de inscripción : 19/01/2011
Edad : 30
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
Un capítulo francamente bueno... todo muy bien explicado. Creo que tod@s deseamos que a Gates le ocurra algo siniestro.!!!
Espero que no tardes mucho en subir el próximo capítulo.
Espero que no tardes mucho en subir el próximo capítulo.
marypaz- Policia de homicidios
- Mensajes : 687
Fecha de inscripción : 09/06/2011
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
wwoooo!! Pero que le pasa a Gates, es decir que intenciones o porque quiere acusar a Castle de lo que le paso a la periodista, espero que no tenga nada que ver ella con el caso de la madre de Beckett y este en contra de Castle por eso. Quiero saber que nuevas pruebas hay en contra de él y que es lo que va hacer Beckett por su amor que tan lejos llegara.
Isa escribes espectacular me gusta mucho tu fic sigue así y espero la continuación
Isa escribes espectacular me gusta mucho tu fic sigue así y espero la continuación
Maku_Stanathan- Policia de homicidios
- Mensajes : 652
Fecha de inscripción : 07/10/2011
Edad : 30
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
Eso,Gates ya que no "se lo pasa por la piedra" a Castle ala,a putearlo.Todos odiamos a Gates!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!Si con la carita que tiene Castle como esposarlo para algo malo... ¬¬
Buahhhhhhhhhhh Isaaaaa nos tienes a todos enganchadísimos!!!!!!!!!!
Te quiero petarda
Buahhhhhhhhhhh Isaaaaa nos tienes a todos enganchadísimos!!!!!!!!!!
Te quiero petarda
mdm- Policia de homicidios
- Mensajes : 656
Fecha de inscripción : 04/05/2011
Edad : 45
Localización : Granada
Re: Reflexiones y consecuencias por Kate Beckett
Jajaja Yo no digo que sea mala, Gabi, no he cambiado su formar de ser. Una cosa es que el fondo de ella y otra distinta que ante su desconfianza y desagrado hacia Castle esté actuando así contra él. Lo que está claro es que no aguanta a Castle y uno d los ejemplos fue su frase:GabiiLovesCastle:D escribió:¡¡Pobre Gates!!
La dejaste en un mal lugar... Y en el fondo es buena u.u
"Sr. Castle no se que ve el Alcalde en usted, pero los dos tienen algo en común, tarde o temprano ambos se irán"
Sigue queriendo alejar a Castle de su comisaría (aun en el último capi lo hemos visto así) y ella no confía en el escritor, al contrario que los demás. Por lo que ella cree realmente que él puede llegar a hacer algo así , aunque los demás lo vean algo absurdo y por eso ataca con ello. Simplemente reflejo su desagrado hacia él, aprovechando la situación presente
mdm escribió:Te quiero petarda
Y yo pendona Hay un trozo que te dedico pero aún no t puedo decir cual hasta k lo leas
Mi niña, eres grande!
Ash, muchas gracias por aguantarme, eres un solete
Gracias a todos por vuestros coments!! Me alegro que os haya gustao y espero k la continuación también os guste! Muaks a todos
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Capítulo 30: Sospechoso.
Aquella tarde había demasiado movimiento en la comisaría, casi todos estaban en desacuerdo con lo que había ocurrido y la mayoría estaba colaborando con los de homicidios. Castle estaba recibiendo bastante apoyo de parte de los policías de la 12. El escritor, Ya había llamado a su abogado y estaba de camino, esperaba su llegada en el calabozo, ya que no había querido decir nada más sin la presencia de éste. Mientras, los chicos y Kate trabajaban a destajo buscando otros sospechosos.
Poco antes de detener a Castle, se había localizado un mensaje que la periodista había mandado a su jefe, la misma mañana del asesinato, avisándole de que llegaría más tarde ya que había quedado con el escritor en el centro comercial para hablar con él acerca de la publicación… Gracias a eso, Gates había lanzado la orden de detención contra él, al pasar a ser el principal sospechoso. Instantes después de aquel descubrimiento, se habían puesto a rastrear el GPS de su móvil, localizándolo en la cafetería en la que estaba con Kate y, poco más tarde, Gates ya estaba realizando su detención.
Cuando Kate estaba concentrada mirando los movimientos bancarios de la víctima, un oficial se acercó. Ella le había ordenado registrar la casa de uno de los conocidos de Helen, Ronie Wiggs, mientras había sido interrogado. La información sobre él la habían conseguido gracias a Castle, e intentaban comprobar si estaba relacionado con todo aquello, aunque sin éxito ya que acababan de enterarse que tenía coartada. Cuando el oficial le informó que tampoco había obtenido nada relevante en aquella casa, Kate le gritó. Esposito al ver a Beckett tan alterada, se acercó a ellos, le ordenó al oficial que se marchase y apoyó la mano en el hombro de ella, el brillo de los ojos de Kate indicaba que estaba a punto de llorar pero, a pesar de todo, aun contenía sus lágrimas…
Beckett, deberías dejarnos esto a nosotros… Ve con él que te necesita… - Esposito le intentó transmitir tranquilidad. Ryan se acercó también a darle apoyo, al ver la situación. – Y tranquilízate, que todo va a salir bien.
Exacto, lo sacaremos de ahí cuanto antes. – Ryan puso su mano en el brazo de Beckett, animándola. – Baja y habla con él un rato, que está solo y seguro que le vendrá bien…
Gracias, chicos. Sois geniales… - Kate les sonrió, apoyando las manos en el hombro de cada uno, luego se dirigió hacia los calabozos. – Voy a ver cómo va, si me entero de algo importante subiré enseguida.
Cuando llegó al calabozo en el que estaba Castle, ordenó al vigilante que le abriera la puerta y entró a sentarse junto al escritor. Sin esperar ni un segundo, lo abrazó y estuvieron así durante un rato. Luego él se separó y la miró dulcemente.
No deberías haber bajado, estar en un calabozo junto a ti me recuerda ciertas cosas y saca mis deseos más salvajes… - Castle le sonrió pícaramente y Kate sonrió, al verlo referenciar uno de sus encuentros sexuales. – No sé si podré aguantarme.
Eres un caso… Con la situación que tenemos y andas bromeando sobre sexo… - Se acercó más a él y le susurró. – De todas maneras, ya me gustaría que estuvieses aquí abajo sólo para eso…
Bueno, cuando llegue mi abogado abandonaré esta celda enseguida así que, mientras, podríamos aprovechar… - Castle volvió a reír y Kate le volvió a sonreír. Él no había perdido su picardía, a pesar de todo.
Deja las bromas para otro momento, Richard. Hay una cosa importante que debes saber… No te han detenido sólo por la publicación, ha salido a la luz un correo electrónico que le mandó Helen a su jefe en el que te nombra, situándote en el centro comercial aquel día… - A Kate se le notaba la preocupación en su rostro, aun estaba algo descentrada por aquella nueva información.
¿A qué te refieres? – Castle la miró extrañado, arqueando las cejas, sin entender nada de lo que le decía. Kate le dio un papel con la copia del correo y él se puso a leerla.
“Buenos días, Jake. Te prometí darte hoy la publicación y la tendrás en breve. Llegaré más tarde al despacho, ya que he quedado ahora en el centro comercial con nuestro conocido escritor para hablar con él de las últimas modificaciones que he realizado en ésta. He tenido problemas con él y me ha estado evitando, por eso no he podido hacer esto antes, pero ya he conseguido que quede conmigo así que pronto te lo recompensaré. De paso, aprovecharé para hacer un reportaje sobre el local nuevo de comida francesa que han abierto allí. Antes del mediodía estaré en tu oficina con la columna y el reportaje para tu revisión. Saludos, Helen.”
¿Quedaste con ella, Rick? – Kate se quedó mirándolo fijamente, intrigada, esperando a que levantase la vista de aquel papel y le respondiese. Castle al oírla, dejó de leer de inmediato y dirigió su mirada al frente, totalmente perplejo. – En serio, no me importa… Pero para llegar al fondo de todo esto tenemos que saber la verdad.
Yo… Yo… No… - Castle no apartaba la mirada de ella, con los ojos abiertos de par en par, sin conseguir que las palabras saliesen de su boca. Kate, a cada instante que pasaba, iba descontrolándose más, su mente no dejaba de pensar en el tipo de situaciones que harían que su escritor le ocultase un encuentro con una mujer como la periodista y un dolor intenso recorrió todo su cuerpo…
¡¿En qué diablos estabas pensando cuando se te olvidó comentármelo en la cafetería?! – Kate lo miró y un instante después, al ver que no contestaba, reventó, dominada por los nervios. - ¡Richard, precisamente no es el momento de ocultarme las cosas por temor a represalias! ¡Te están acusando de un asesinato! ¡¿No te das cuenta que eres el principal sospechoso?! ¡¿Te crees que ahora mi mayor preocupación es que hayas podido quedar con tu ex, a escondidas, mientras yo estaba trabajando?!
Ka… Ka… ¡Kate! – Castle prácticamente lo único que podía hacer era balbucear ante la incesante lluvia de palabras de su novia. Le agarró ambas mejillas y la miró fijamente, intentando que se quedase en silencio y le prestase atención, Kate vio la expresión de sus ojos y paró de hablar. – ¡Escúchame, no te he ocultado nada! ¡Yo no quedé con ella! ¡La última vez que hable con Helen fue hace un mes! No sé de qué va esto, tiene que ser un error, puede que esté hablando de otra persona…
¿En serio? – Castle asintió, con una expresión de impotencia y honestidad en sus ojos. Kate se quedó un momento en silencio, mirándolo extrañada, y volviendo a la calma… Después de un instante, reaccionó ya más tranquila, sacando otra posibilidad. – Un error, otra persona o alguien que quiere destruirte… ¿Sabes si ella u otra persona de su círculo te tenía manía? Ten en cuenta que, a veces, puedes resultar bastante insufrible así que no sería muy difícil…
Reconoce que esa es una de las cosas que me hace irresistible… Además, ya sabes que mi encanto supera a todo lo demás. – Castle se rio, ya estaba más relajado al ver que ella estaba más tranquila e incluso había bromeado. – No tengo ni idea, Kate… No me viene nadie a la mente pero sé que ella, a pesar de nuestras diferencias, no sería capaz de hacer algo tan mezquino…
Pues investigaremos a todo su círculo, a fondo, pero si se te ocurre alguien o cualquier cosa que no te cuadre, nos lo dices enseguida. – Kate le acarició la mano y lo miró con dulzura. - ¿De acuerdo?
Sí, no te preocupes… - Él le dedicó una sonrisa y le apretó la mano. – Aquí tengo tiempo para pensar en ello…
Ahora necesito que me digas todo lo que sepas acerca de las personas que conocían a Helen y, sobre todo, de los problemas que te contó la última vez… - Castle suspiró, mirándola con tristeza. Kate no quería alterarlo pero tenía que saber todo lo posible para buscar otros indicios. – Quizás eso que te contó pueda estar relacionado con su asesinato…
No creo que sea relevante, pero bueno, te diré todo lo que sé. – Castle le contó todo y ella, en todo momento, estuvo tomando nota. Justo antes de terminar la última frase, el abogado llegó a la puerta del calabozo.
Hola, Rick. Espero que no le hayas dicho nada a la inspectora sin mi presencia. Más de uno puede acabar demandado por lo que te han hecho, ya he visto la acusación y no tienen mucho que hacer. – El oficial abrió la puerta y el abogado entró, haciendo un gesto a la inspectora para que se marchase. – Necesito hablar a solas con mi cliente.
Tranquilo, Mike. Con ella no hay problema… - Castle le sonrió y ella se levanto, para dejarlos a solas. - Puede quedarse, si quiere. Es la Inspectora Beckett.
Lo sé, lleva la investigación en la muerte de Helen Wyatt. Precisamente por eso, no puede estar aquí. – Miró a Kate y le hizo un gesto. – Yo soy Michael Gallaguer, abogado del Sr. Castle. Lo siento inspectora, no es nada personal pero tiene que marcharse.
Lo sé. – El escritor se puso de pie para dirigirse a Kate pero ella le hizo un gesto con la mano, parándole. – Tranquilo Castle, luego hablamos.
Momentos después, Kate se dirigía de nuevo arriba con sus chicos mientras dejaba a solas a Castle y a Michael Gallaguer. Se enteró que Gates había conseguido una orden para registrar la casa del escritor y se lo había comunicado a su abogado en cuanto llegó. Avisó rápidamente a Martha de lo que estaba pasando y de que pasarían unos policías con una orden.
Más tarde, Kate ya había puesto al día a los chicos respecto a los detalles y estos habían ido a localizar a alguien que estaba relacionado con la víctima para interrogarlo, Sean Rockwell que, según Castle, era un ex compañero de trabajo que también había estado saliendo con ella. Al rato, el escritor apareció por el pasillo central de de la comisaría y acompañado de su abogado. Le acababan de quitar las esposas y estaba tocándose las muñecas, molesto por el dolor que tenía, a causa de las marcas que habían causado la presión de las esposas de la capitana, al detenerle. Gates salió de su oficina y se dirigió a ellos, después de cruzar unas palabras con el abogado, se acercó a Kate.
Imagino que no querrá interrogar a su amigo así que lo haré yo… - Kate no dijo ni una palabra. Pero su mirada se clavó en la de su capitana, reflejando su indignación. – Si quiere puede acompañarme, pero si va a preguntarle algo mejor que sea objetiva…
Intentaré ser más objetiva de lo que está siendo usted… - Castle y su abogado se dirigieron a la sala de interrogatorios y Kate les siguió junto con Gates. Antes de entrar, le pidió a un oficial que le informase si volvían Ryan y Esposito.
Antes de empezar, mi cliente va a contarles todo lo que sabe sobre la víctima para ayudarles a resolver este caso. Pueden preguntarle lo que quieran ya que quiere colaborar con ustedes, pero si se pasan de la raya terminaremos este interrogatorio, de inmediato. ¿He sido claro? – El abogado miró a Gates y ésta asintió. - Por cierto, capitana Gates, debería dejar que la inspectora Beckett llevase el interrogatorio, puede que así consiga obtener más de mi cliente… Debería sopesarlo…
De acuerdo. – Gates miró fijamente a Kate mientras Castle y su abogado se sentaban en la sala de interrogatorios. – Pero si pierde su objetividad yo retomaré el interrogatorio, ¿entendido?
Sí. – Kate le contestó fríamente a su capitana y se sentó, mirando fijamente a Castle. Él le sonrió e hizo un gesto que indicaba a Kate que podía simular presión contra él. – Castle, ¿cómo era tu relación con la víctima?
La conocía bien, era mi amiga y, de vez en cuando, nos acostábamos. – Castle desvió su mirada hacia Gates y continuó, dirigiendo sus últimas palabras a la capitana. – Nos llevábamos muy bien y el sexo era bueno así que soy la última persona que hubiera querido verla muerta…
¿Cuándo fue la última vez que la viste? – Kate mantenía su seriedad para evitar que Gates pudiera sacarle del interrogatorio. Castle sabía que no podía omitir la última vez ya que se reflejaba en sus llamadas…
Hace un mes vino a mi casa, me habló de ciertos problemas que tenía con un tal Alan Turner. Había estado con él realizando una investigación sobre algunos movimientos extraños que había en el círculo por el que se movía. – Castle volvió a mirar a Gates. – Habló de algunos asuntos de drogas, quizás deberían investigar eso…
Una manera muy oportuna de desviar la atención hacia otro, ¿no Sr. Castle? - Gates no había podido evitar saltar ante aquello, Kate la miró fríamente y él le sonrió.
Señor, estoy llevando yo este interrogatorio así que le agradecería que me dejase continuarlo. – Kate no apartaba su mirada de ella, se le había ocurrido una manera de callar a su capitana. – Además, en cualquier investigación, siempre hemos mirado todos los aspectos posibles. Tendremos que investigar a ese tipo para saber en qué grado está involucrado…
Kate estuvo preguntando muchas de las cuestiones que le había hecho en el calabozo para conseguir detalles sobre los círculos de la víctima que desviasen las sospechas hacia otro lado. Después de un rato así, un oficial llamó a la puerta y reclamó la presencia de la capitana. Ella salió y éstos se quedaron a solas.
¿Estoy siendo muy dura? – le susurró a Castle en voz muy baja, mientras sonreía, para que no se oyese en la grabación.
No mucho, me pondrías más si fueses aun más agresiva… - Castle le sonrió pícaramente y Kate hizo un gesto señalando al abogado, que estaba sonriendo. – Lo sabe todo, pero no te preocupes es mi amigo y, además, está el secreto entre abogado y cliente así que no va a sacar ese tema. Por eso ha dicho que llevases tú el interrogatorio que ya se ha enterado de que conoces todos los detalles…
En ese momento, entró Gates con una bolsa de pruebas y el arma homicida en su interior. Miró a Castle y luego a su abogado, sonriendo, se acercó al escritor y le enseñó el contenido de la bolsa.
¿El arma homicida? – Castle suspiró al saber que habían encontrado el arma y que toda aquella pesadilla terminaría, Kate también respiró aliviada. - ¿Entonces ya han encontrado al asesino?
Sí, usted… La policía científica ya ha terminado de registrar su casa con la orden que habíamos conseguido y esta pistola, junto con el silenciador, estaba en un cajón de su despacho… - Castle abrió los ojos de par en par, perplejo. Él no tenía posesión de ninguna pistola y era imposible que hubiera una en su casa, Kate se quedó con la boca abierta y sin poder reaccionar ante aquello. – Hemos comprobado que el calibre de las balas coincide y el silenciador tiene restos de sangre de nuestra víctima. Ésta es el arma que se usó para asesinarle… Sr. Castle, ¿si usted no mató a su amiga por qué diablos estaba el arma homicida en su casa?
Rick, no contestes a más preguntas. – El abogado se había puesto de pie y miraba de manera amenazadora a Gates. – Este interrogatorio se ha terminado, tengo que hablar con mi cliente.
Puede que, de momento, haya terminado pero él no va a irse a ninguna parte. – Gates sonrió de nuevo al escritor. – Ya sabe, Sr. Castle, que tenemos una suite de lujo aquí abajo reservada a su nombre. Tiene todas las comodidades que usted necesita…
¡Esa pistola no es mía! – Castle se había alterado, alzando la voz, no entendía nada de lo que estaba pasando. Su abogado intentó que se callase pero no pudo, Castle intentó acercarse más a Gates pero su abogado le sujetó para evitar que cometiese alguna locura. - ¡Yo no tengo ningún arma! ¡Cualquiera se lo puede decir!
Es lo que suelen decir los sospechosos en estos casos. – Gates le hizo un gesto al oficial para que acompañase al escritor de nuevo a la celda. El oficial no estaba muy contento con lo que tenía que hacer pero obedeció. – Llévale de vuelta a su sitio, oficial Kale…
Vámonos Rick. – El abogado le hizo un gesto para que se calmase y siguieron al oficial. Kate, en todo ese rato, no había pronunciado palabra, aun impactada por el golpe de su capitana. Cuando Gates salió para llevar el arma a Lanie, los chicos entraron en la sala buscando a Kate.
Acabamos de enterarnos, ¿cómo es posible lo del arma? ¿Castle tiene pistola? – Kate los miró y negó con la cabeza. Sus ojos reflejaban su asombro, los chicos estaban, a su vez, indignados y sorprendidos.
No, no tiene. Es más, conozco de sobra el contenido de los cajones de su despacho y no hay armas de ningún tipo en ellos. – Kate comenzó a reflejar indignación e ira. – Aquí está pasando algo muy raro y Castle está siendo el objetivo. Lo único posible es que alguien haya colocado el arma allí para inculparlo y tenemos que averiguar quién…
Sí, pero ¿cómo? – Esposito y Ryan tenían un semblante serio. Kate no podía calmar a sus chicos ya que ella no lo estaba.
Hasta ayer, su casa casi siempre ha estado con gente, ya fuese Martha, Castle o yo… Siempre uno de los tres estábamos allí, así que alguien ha tenido que colocarla después. Investigad el último día, las cámaras de tráfico cercanas y videos de los cajeros. – Kate se quedó un momento pensativa. – Yo iré a su casa y hablaré con el portero, puede ser que tengan cámara de videovigilancia dentro.
Emmm, Beckett… ¿Tú…? - Esposito quería preguntarle algo pero no sabía cómo hacerlo. Prácticamente estaba susurrando.
Esposito, lo que me quieras decir suéltalo ya… - Kate lo miró, sonriéndole, intentando transmitir tranquilidad en su sonrisa.
No estarías con él a la hora del asesinato, ¿no? – Kate se sorprendió ante la pregunta del detective.
¿Tú te crees que si hubiera estado con él no lo hubiera dicho? – Esposito negó con la cabeza. El rostro de Kate reflejaba tristeza. – Chicos, ya sabéis que nunca comprometería a nadie por ocultar algo.
Lo sé, pero tenía que preguntarlo. – Miró a su compañero y le hizo un gesto para que se moviese. – Vámonos a investigar lo de las cámaras ahora, Ryan. En cuanto sepamos algo te llamamos.
Los chicos se marcharon y Kate se fue a casa de él. Había llamado a Martha de camino allí y había notado que la madre de él estaba de los nervios por lo que había ocurrido. Intentó tranquilizarla por teléfono pero no consiguió nada así que colgó la llamada esperando lograr algo al llegar allí. Se fue con el coche de Castle ya que esa mañana le había llevado el escritor a la comisaría con el suyo, al estar el de ella en el taller. Pero, precisamente, ahora él no lo necesitaba y a ella le venía bien tenerlo…
Más tarde, los chicos volvieron a la comisaría con las cámaras que habían conseguido y se pusieron, enseguida, a revisarlas esperando encontrar algo relevante. Kate aun seguía con Martha, estaba esperando al portero para indagar algo sobre el video pero él no estaba por allí.
¡No puede ser que Richard esté detenido! ¡No entiendo nada! ¡Debería haber estado aquí en lugar de pasarme todo el día en la escuela! – Martha no dejaba de sollozar culpándose de haber dejado la casa vacía. – Nadie habría metido pruebas falsas contra mi hijo, si hubiese estado aquí.
No, Martha... No hubieras podido evitar nada. Mejor que no estuvieras, ya que podría haber ocurrido algo peor si llega a entrar esa persona contigo aquí dentro… - Kate abrazó a Martha consiguiendo que se calmase un poco.
¿Sabes si hay video-vigilancia dentro del edificio? – Ella negó con la cabeza y Kate suspiró. – Voy a ver si ha llegado el portero para hacerle algunas preguntas, ¿Estás bien? ¿Puedes quedarte sola?
Sí. Gracias por todo, Beckett. – Miró con dulzura a Martha y le sonrió. – Sé que eres una mujer fuerte pero ¿cómo puedes con todo esto?
Porque voy a descubrir quién está detrás de todo y cuando lo haga le daré en las narices a Gates. Ella no sabe lo motivada que estoy a causa de lo que ha pasado… - Se levantó y se dirigió a la puerta. – Me voy a ver si descubro algo más. Hemos puesto vigilancia policial junto a la casa así que puedes quedarte tranquila.
En cuanto terminó de hablar con el portero, salió de allí y se dirigió al coche para irse de nuevo a la comisaría. Salió de aquel edificio, desanimada, al enterarse de que no había cámaras en éste. Intentó encender el motor pero no conseguía que arrancase. En ese momento, golpeó el volante y pensó que, a pesar de ser un coche de lujo, siempre se conducía mejor el coche de uno mismo… Lo intentó unas cuantas veces más y al final arrancó. Se relajó un instante, respirando hondo, y presionó ligeramente el acelerador en cuanto el semáforo se puso en verde, girando después por la siguiente avenida. El Ford, que había frente a la casa de Castle, salió de su aparcamiento y avanzó en la misma dirección que la inspectora, a una distancia prudencial, Kate no se percató de que alguien le seguía. En el asiento del copiloto de aquel Ford, encima de los papeles, había un dispositivo extraño que parpadeaba sin cesar, tenía un interruptor en él. Algo también parpadeaba bajo el coche de Castle, acompañado de un sonido casi imperceptible… Cuando ya llevaba más de la mitad del camino, pasó por una calle que estaba desierta y, en ese momento, aquel hombre fue disminuyendo su velocidad hasta detenerse, aumentando la distancia entre ambos coches. Tenía que asegurarse, no quería volver a fallar… Ella estaba sola y él sabía que aquel era el momento perfecto... Estaba entrenado para encontrarlo, pasara el tiempo que pasase… Agarró el dispositivo y apoyó su dedo en el interruptor, esperando el instante adecuado para accionarlo… Se fijó detenidamente en las manecillas de su reloj, clavando intensamente la mirada en el movimiento de los segundos… Mientras, Kate había girado de nuevo por otra calle sin transitar. Unos segundos después de que desapareciese de su vista, su dedo se movió lentamente y, en el mismo instante que sonó el “click” del interruptor, una fuerte explosión se oyó cerca de allí… Arrancó el Ford y pasó por el cruce de la otra calle, comprobando que el coche de la inspectora estaba completamente en llamas, iluminando la oscuridad de aquella calle… Se alejó de allí y, en cuanto pudo, escribió junto a la foto de Beckett: “Objetivo caído, misión completada”…
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Tachan tachan... eso es un cliffhanger? jajajja a ver k pasa...
Por cierto, ando en mi fase dark&twisty, creo que ya os habréis dado cuenta
la_loki- Actor en Broadway
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