Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
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Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
Hola!!! Antes que nada ¡Muy Feliz Cumple! Te deseo lo mejor de lo mejor para este día y que la pases súper lindo con todos tus afectos!
Vengo atrasada nuevamente, ya sabés, por falta de tiempo y no de ganas…
Ahora el comentario del capi 17: ¡Pobre el gato! Pero supongo que es mejor un gato con un balazo en la cabeza que alguien cercano a Kate y a Rick con un balazo en la cabeza, así que supongo que el sacrificio del pobre animal no fue en vano. Imaginaba que Kate no querría abandonar el caso, lo que me sorprendió es que Rick quisiera continuar. Supongo que se dio cuenta de que ayudando con la investigación a Ryan y a Espo conseguirían atrapar al asesino. Te diré que cuando encontraron la primer nota pensé automáticamente en Tom, pero después lo descarte por lo de las huellas (muy bien por eso, creo que nos confundiste a tod@s!) Ahora ya no tengo dudas!!!
En cuanto al capi 18: Me encantan los momentos que ellos dos están solos aunque permanezcan en silencio. Son tan dulces sus pensamientos sobre el otro… Geniales! Ahora el caso: Me pareció fantástico el giro que pegó. Incluir a los padres de Kate creo que fue muy acertado. Imagino que viene por el lado de algún caso antiguo en el que trabajaron, pero tendré que esperar para saber si estoy en lo cierto!!! Espero también que Jim y Johanna no tengan demasiados problemas para aceptar a Rick como el novio de su hija. Precioso el lugar donde viven… como lo describiste parece ser un verdadero paraíso! No quería dejar de decírtelo…
En cuanto a Tom, se notaba que se había enamorado de Hellen y le dolió su muerte. Ojalá que su remordimiento sea más fuerte que su lealtad a su jefe y no le haga daño ni a Kate ni a Rick.
Y por último: Excelente que hayas juntado a Lanie y Espo! Me encanta esa pareja y no podían no estar juntos!!!!
Excelentes los dos capis, como siempre!!! Felicitaciones!!!
Ah! Y concuerdo con tu hermana, deberías escribir algo completamente tuyo. No me cabe la menor duda de que lo harías genial!!! Escribes de mil maravillas…
Disfrutá de tu cumple! Besos y hasta la próxima!!!!
Vengo atrasada nuevamente, ya sabés, por falta de tiempo y no de ganas…
Ahora el comentario del capi 17: ¡Pobre el gato! Pero supongo que es mejor un gato con un balazo en la cabeza que alguien cercano a Kate y a Rick con un balazo en la cabeza, así que supongo que el sacrificio del pobre animal no fue en vano. Imaginaba que Kate no querría abandonar el caso, lo que me sorprendió es que Rick quisiera continuar. Supongo que se dio cuenta de que ayudando con la investigación a Ryan y a Espo conseguirían atrapar al asesino. Te diré que cuando encontraron la primer nota pensé automáticamente en Tom, pero después lo descarte por lo de las huellas (muy bien por eso, creo que nos confundiste a tod@s!) Ahora ya no tengo dudas!!!
En cuanto al capi 18: Me encantan los momentos que ellos dos están solos aunque permanezcan en silencio. Son tan dulces sus pensamientos sobre el otro… Geniales! Ahora el caso: Me pareció fantástico el giro que pegó. Incluir a los padres de Kate creo que fue muy acertado. Imagino que viene por el lado de algún caso antiguo en el que trabajaron, pero tendré que esperar para saber si estoy en lo cierto!!! Espero también que Jim y Johanna no tengan demasiados problemas para aceptar a Rick como el novio de su hija. Precioso el lugar donde viven… como lo describiste parece ser un verdadero paraíso! No quería dejar de decírtelo…
En cuanto a Tom, se notaba que se había enamorado de Hellen y le dolió su muerte. Ojalá que su remordimiento sea más fuerte que su lealtad a su jefe y no le haga daño ni a Kate ni a Rick.
Y por último: Excelente que hayas juntado a Lanie y Espo! Me encanta esa pareja y no podían no estar juntos!!!!
Excelentes los dos capis, como siempre!!! Felicitaciones!!!
Ah! Y concuerdo con tu hermana, deberías escribir algo completamente tuyo. No me cabe la menor duda de que lo harías genial!!! Escribes de mil maravillas…
Disfrutá de tu cumple! Besos y hasta la próxima!!!!
Solexite- Policia de homicidios
- Mensajes : 646
Fecha de inscripción : 30/04/2012
Localización : America, debo estar en America del Sur ¡Bien al Sur!
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
Solexite escribió:Hola!!! Antes que nada ¡Muy Feliz Cumple! Te deseo lo mejor de lo mejor para este día y que la pases súper lindo con todos tus afectos!
Vengo atrasada nuevamente, ya sabés, por falta de tiempo y no de ganas…
Ahora el comentario del capi 17: ¡Pobre el gato! Pero supongo que es mejor un gato con un balazo en la cabeza que alguien cercano a Kate y a Rick con un balazo en la cabeza, así que supongo que el sacrificio del pobre animal no fue en vano. Imaginaba que Kate no querría abandonar el caso, lo que me sorprendió es que Rick quisiera continuar. Supongo que se dio cuenta de que ayudando con la investigación a Ryan y a Espo conseguirían atrapar al asesino. Te diré que cuando encontraron la primer nota pensé automáticamente en Tom, pero después lo descarte por lo de las huellas (muy bien por eso, creo que nos confundiste a tod@s!) Ahora ya no tengo dudas!!!
En cuanto al capi 18: Me encantan los momentos que ellos dos están solos aunque permanezcan en silencio. Son tan dulces sus pensamientos sobre el otro… Geniales! Ahora el caso: Me pareció fantástico el giro que pegó. Incluir a los padres de Kate creo que fue muy acertado. Imagino que viene por el lado de algún caso antiguo en el que trabajaron, pero tendré que esperar para saber si estoy en lo cierto!!! Espero también que Jim y Johanna no tengan demasiados problemas para aceptar a Rick como el novio de su hija. Precioso el lugar donde viven… como lo describiste parece ser un verdadero paraíso! No quería dejar de decírtelo…
En cuanto a Tom, se notaba que se había enamorado de Hellen y le dolió su muerte. Ojalá que su remordimiento sea más fuerte que su lealtad a su jefe y no le haga daño ni a Kate ni a Rick.
Y por último: Excelente que hayas juntado a Lanie y Espo! Me encanta esa pareja y no podían no estar juntos!!!!
Excelentes los dos capis, como siempre!!! Felicitaciones!!!
Ah! Y concuerdo con tu hermana, deberías escribir algo completamente tuyo. No me cabe la menor duda de que lo harías genial!!! Escribes de mil maravillas…
Disfrutá de tu cumple! Besos y hasta la próxima!!!!
Hola Sol! Muchas gracias.
No te preocupes, sé que andas ocupada y que cuando puedes te pones al día.
Con respecto al capítulo 17, eso es lo que decía yo, que es mejor un gato a una persona, el sacrificio es menor.
Lo de que Rick quisiera continuar es por lo que dices. Aunque quiera apartar a Kate del caso, no quiere que le pase nada y sabe que si no va tras las personas que están detrás de todo, ella no estará a salvo.
Lo de las huellas era necesario para no resolver el caso en dos o tres capítulos. Bien, entonces veo que voy por buen camino, al menos las dudas se van aclarando. Tengo que confesar que incluso yo algunas veces con este caso me he llegado a liar.
Con respecto al capítulo 18, las escenas de ellos dos son las que más me gusta escribir aunque el caso se está convirtiendo en mi favorito de todos los que he escrito hasta ahora. Muchos os estáis acercando bastante a lo que tengo en mente sobre el caso, pero no voy a adelantar nada de momento.
El lugar donde viven traté de describirlo como un lugar donde disfrutar de la tranquilidad que no existe en la ciudad. Me alegro que te gustara.
Creo que eres la primera que se da cuenta de que Tom estaba enamorado de Helen. Veremos a ver que ocurre con él...
A mi también me encanta la pareja de Lanie y Esposito y se merecían un lugar en la historia.
Muchas gracias Sol. Alguna vez lo haré, cuando tenga algo bueno que contar.
Muchas gracias. Besos!
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Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
La verdad es que la idea de que Joanna siga viva en tu historia me traba y me transtorna un poco, pero me gusta de todos modos. Así no han sucedido nada malo. Me ha gustado mucho la cena familiar, ella siempre ha sido la buena, se nota que Jim se volvio más gruñon.
Espero que continues pronto...(martes)
Espero que continues pronto...(martes)
Invitado- Invitado
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
Cuando decidí continuar con esta historia pensé que ya que era un fic donde la vida de los personajes principales era diferente a la de la serie, cambiaría algunas cosas de su vida. Joahnna sigue viva pero en cambio Alexis no existe, fue una decisión que tomé para variar un poco de lo que he escrito hasta ahora.Skyscraper escribió:La verdad es que la idea de que Joanna siga viva en tu historia me traba y me transtorna un poco, pero me gusta de todos modos. Así no han sucedido nada malo. Me ha gustado mucho la cena familiar, ella siempre ha sido la buena, se nota que Jim se volvio más gruñon.
Espero que continues pronto...(martes)
Me alegra saber que aun transtornándote, te guste.
Esta semana me atrasaré un poco con el capítulo.
He tenido una semana llena de cumpleaños y estudios y sin tiempo para escribir
No llevo casi nada escrito así que espero tenerlo para finales de semana.
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Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
Siento haber tardado un poco más esta semana en dejaros un nuevo capítulo. Pensaba que sería más fácil desarrollarlo pero me dio bastantes dolores de cabeza y me llevó bastantes tiempo terminarlo.
Espero que os guste.
CAPÍTULO 19
Los espesos árboles parecían bailar al ritmo del viento en una danza desordenada. El día comenzaba a teñirse de gris, creando una oscuridad siniestra dentro del bosque. Las aves, presagiando lo que se avecinaba, partían en bandadas a través de las ramas de los diversos árboles, tomando altura para perderse en el negro y temeroso cielo. El paisaje resultaba melancólico tras llegar la calma.
Dentro de aquella casa de madera alojada en el denso bosque de árboles caducifolios, el ambiente acompañaba al plomizo día que se cernía sobre ella.
- Papá, ¿me puedes decir qué ocurre? - le preguntó Kate con el semblante serio temiendo la respuesta.
- Es algo que ocurrió hace muchos años – dijo Jim.
- Tú ni siquiera habías nacido – respondió Joahnna.
- ¿Esto quiere decir que...? - empezó a preguntar Richard.
- Si, Richard, conocemos a Graimes – le contestó Jim.
- ¿Cómo? - preguntó una sorprendida Kate.
- Es una larga historia – dijo Jim.
- No te preocupes papá. En la comisaría sabrán arreglárselas sin nosotros – Kate se acomodó en el sofá y miró a Richard, que permanecía a su lado con la vista fija en el padre de ella.
- Yo era un abogado recién llegado al bufete The Cochran Firm cuando se unió tu madre y tres compañeros más y juntos comenzamos a hacernos notar en esta gran ciudad. El bufete fue ganando prestigio y poco a poco nos fuimos ganando el respeto y reconocimiento de nuestros compañeros. Dos años después, cuando el bufete gozaba de una buena fama avalada por nuestro trabajo, un cliente contactó con nosotros. Al principio creímos que sería un trabajo más como los que habíamos llevado a cabo en aquellos dos años, pero nos equivocamos. Tiffany Nash contacto con nosotros tras creer que su hermano había sido asesinado. Marc Nash era un joven universitario de 22 años que vivía junto a otros compañeros en una residencia universitaria. Un 15 de noviembre de hace 36 años, Marc salía de las clases de guitarra que impartía en sus horas libres para no volver a ser visto. Tras semanas de búsqueda lo encontraron muerto en su coche que estaba abandonado en Hutchinson River Pkwy N, en la entrada a Connecticut. Según los estudios que se le realizaron, todo parecía indicar que había sido una muerte por asfixia mientras dormía. Sin embargo, Tiffany no lo creyó y pidió nuestra ayuda.
- Al principio creímos que no había nada que hacer. El trabajo de la comisaría de policías y de los forenses parecía no dejar lugar a dudas – dijo Joahnna relevando a su marido en la narración de los hechos – Pero, la lucha de Tiffany por encontrar al asesino de su hermano nos hizo creer que podía tener razón, así que aceptamos su caso. De ese modo comenzamos a investigar las amistades de Marc, los lugares que frecuentaba,... Un día un amigo del joven nos contó que la última semana Marc se comportaba de un modo extraño. Estaba muy irascible y cualquier comentario le afectaba de sobremanera. Pensó que sería estrés por los exámenes hasta que un día cuando fue a visitarlo vio marihuana en su mesita de noche. Marc le dijo que no era suya, que sería de alguno de sus compañeros que lo habría puesto allí, pero él no le creyó. Esto nos llevó a contactar con los compañeros de la residencia de Marc hasta llegar a la persona que le vendía la droga.
- Graimes Nicola – sentenció Richard, que había seguido la historia sin perder detalle.
- Así es – corroboró Jim – Graimes era un camello que conoció a Marc cuando este pasaba una difícil situación tras la ruptura con su novia. Marc se refugió en las drogas, pasando a ser un cliente habitual de Graimes. Pero comenzó a verse en apuros al empezar a deberle dinero. Teniendo un motivo para matar, nos centramos en Graimes. Nuestra sorpresa llegó al descubrir que este era el jefe del mayor grupo de narcotraficantes de Nueva York, por lo que tuvimos que avisar a los de narcóticos y cederle el caso. Sin embargo, antes de que esto ocurriese, recibimos multitud de amenazas por parte de Graimes y los suyos para que no siguiésemos con el caso. Temíamos por nuestra integridad así que, tras pasarle el caso a los de narcóticos, no quisimos saber nada más.
- Luego supimos que Graimes y su banda habían sido condenados a 25 años por narcotráfico, ya que no se pudo comprobar que fuesen responsables de la docena de crímenes de los que se le acusaba debido a la falta de pruebas – dijo Joahnna.
- Eso quiere decir que hace 9 años que salió de la cárcel – calculó Kate – Lo que no entiendo es que puede estar buscando ahora de mi ni por qué ha asesinado a Helen y a la otra víctima.
- Tras salir de la cárcel, Graimes parecía haberse reformado – explicó Joahnna – pero nada más lejos de la realidad. Graimes comenzó trabajando en anuncios, pasando a tener pequeños papeles en series de televisión, hasta convertirse en una promesa del cine y llegar a ser un conocido director. Supongo que al ir haciéndote un hueco en el mundo del cine temió encontrarse con nosotros y que se le volviese a relacionar con el narcotráfico, ya que según hemos sabido, nunca dejó ese mundo aunque lo tenía muy bien oculto.
- Por eso reaccionamos de ese modo – dijo Jim – Graimes y sus hombres son muy peligrosos, ya lo habéis podido comprobar. Tenéis que manteneros alejados de ellos. Si se lo proponen, pueden llegar a hacer mucho daño.
- Papá, con lo que nos has contado, no podemos dejarlo. Puede que consigamos destapar la mayor red de narcotráfico de Nueva York además de hacerle pagar a Graimes por todos los asesinatos cometidos – le dijo Kate a su padre mientras se levantaba del sofá.
- Kate, tus padres tienen razón – le dijo Richard levantándose como un resorte del sofá para cerrarle el paso – Esto está yendo demasiado lejos.
Tras ellos, Jim y Joahnna asentían a las palabras del doctor.
Richard, al ver que Kate fijaba sus ojos en él, continuó hablando.
- Ya has escuchado a tu padre. Graimes es capaz de todo con tal de mantener en la sombra esa parte de su vida que le traería problemas con la ley ¿Es que pretendes ponerte en el blanco de su diana?
- Ya hemos tenido esta conversación antes, Richard y ya sabes cual es mi respuesta. Sé que te prometí tener cuidado y lo tendré, pero no puedo dejar que siga en la calle como si nada hubiese ocurrido. Puedes seguir conmigo o alejarte. No puedo pedirte que vengas conmigo puesto que también irían tras de ti si decides acompañarme y yo no podría soportar ser la causante de ponerte en una situación de peligro. Yo voy a seguir adelante, tú puedes hacer lo que quieras – dijo antes de salir por la puerta de la casa rumbo al coche.
- Richard – Jim le colocó la mano en el hombro para sorpresa del doctor – Ya sé que no recibiste el mejor trato por nuestra parte y que tú no eres el culpable de la cabezonería de mi hija. Lo sentimos mucho, no queremos que le pase nada malo.
- Yo no dejaría que nada le sucediese – dijo Richard muy seguro de sus palabras.
- Es por eso que te pedimos que no la dejes sola – dijo Joahnna acercándose a su marido – Kate no se detendrá en su lucha. Se está metiendo en algo muy peligroso y no debe estar sola. Por favor Richard, ve con ella, protégela.
Richard asintió sorprendido ante la confianza que ambos depositaban ahora en él.
- Conmigo no le ocurrirá nada, estará protegida – les dijo desde la puerta mientras se dirigía hacia el coche de Kate, quien parecía saber que vendría tras ella y permanecía en el coche esperándolo.
Tras abrir la puerta y sentarse en el asiento del copiloto, se produjo un largo silencio que ninguno de los dos parecía dispuesto a romper. Finalmente Richard decidió pronunciarse.
- Kate, esto es una locura. Nos van a matar.
- No lo harán. Iremos a la comisaría y le contaremos a los chicos lo que mi padres nos ha dicho. Ellos sabrán como debemos actuar a partir de ahora.
- ¿Y si Graimes descubre lo que sabemos? Hasta ahora parece que siempre ha ido un paso por delante de nosotros.
- Y, ¿cómo lo iba a saber? Jugamos con ventaja. Vamos a desenmascararlo y esta vez no se nos escapará – sentenció Kate.
Richard asintió sabiendo que estaría más segura teniendo a alguien a su lado. Se iba a enfrentar con tipos peligrosos y no podía hacerlo sola.
Kate lo miró una última vez antes de meter la llave en el contacto del coche para salir de aquel bosque hacia la 12th.
Como una exhalación, Kate y Richard entraron en la comisaría buscando con la mirada a los inspectores. Allí estaban, frente a la pizarra blanca hablando entre ellos mientras recolocaban las fotos de las víctimas y sospechosos en la línea del tiempo.
- Tenemos que hablar con vosotros – dijo Kate nada más acercarse a ellos.
- Buenos días para ti también – se burló Esposito.
- No estamos para bromas – respondió Kate borrando inmediatamente la sonrisa de los rostros de los inspectores.
- ¿Qué ocurre? - preguntó Ryan.
- Es sobre Graimes – dijo Richard – Será mejor que os sentéis.
Ryan y Esposito se miraron sin entender nada y, tomando las sillas de sus escritorios, se sentaron, haciendo lo mismo Richard y Kate.
Tras diez minutos en los que tanto el doctor como Kate iban narrando alternativamente todo lo que Jim les había contado horas antes, Esposito se levantó de la silla en la que había permanecido sentado aquellos minutos.
- Tenemos que informar a la capitana. Nos podemos seguir adelante sin que ella lo sepa. Ryan, tú ve a hablar con tus compañeros de narcóticos, a ver si nos pueden pasar todo lo que tengan de Graimes. Richard, Kate, vosotros esperad aquí. Os vamos a necesitar para llevar a cabo la operación.
- ¿Operación? - preguntó Richard.
- Si estáis en lo cierto y Graimes sigue siendo narcotraficante, estará con las grandes bandas. No podemos llevar a cabo una detención al uso contra ese tipo de personas, necesitamos elaborar una operación. Después de hablar con Gates os informaremos de lo que debéis hacer. Estaréis seguros, os protegeremos.
Richard asintió mientras los veía desaparecer, sabiendo que por mucha protección le brindasen seguirían estando en el blanco de la diana. Un blanco fácil para alguien como Graimes Nicola. Con el miedo en el cuerpo tomó la mano de Kate quien, pese a la vorágine en la que estaban sumidos, conservaba la tranquilidad. Había vuelto de nuevo la Kate imperturbable, esa que se colocaba una coraza para que nada le afectase, esa que a vista de todos era una persona dura que no se derrumbaba.
Kate giró la cabeza para ver como esos ojos azules como el mar la miraban intensamente. Un escalofrío recorrió todo su cuerpo llegando a cada una de sus terminaciones nerviosas, provocándole una mezcla de sensaciones. Se había autoimpuesto no dejarse vencer por el miedo, no ser vulnerable en una situación que fácilmente le podía costar la vida. Sin embargo, al ver el terror reflejado en los ojos de Richard, su determinación comenzó a flaquear. No podía llegar a entender como una sola mirada podía llegar a desarmarla. Y es que él tenía ese poder sobre ella, un poder que utilizaba sin llegar a saber lo que en ella provocaba, sin saber lo mucho que podía llegar a perturbarla. Se reprendió a si misma por estar divagando sobre ello en una situación tan complicada como la que se encontraban y volvió a protegerse en su coraza, apartando la vista de los ojos de Richard.
El doctor había visto como en un momento de debilidad, Kate había apretado fuertemente su mano mientras lo miraba preocupada. Creyó que había sido una mala pasada que su imaginación le había jugado pues cuando quiso darse cuenta, Kate estaba en esa posición de dura detective que había adoptado las últimas semanas.
A los pocos minutos vieron a Esposito dirigirse hacia ellos con una mujer de piel morena, cabellos oscuro y mirada penetrante capaz de intimidar a cualquier persona.
- Richard, Kate, os presento a la capitana Victoria Gates.
Richard le tendió la mano pero Gates hizo como si no hubiese visto nada y, tras estudiar detenidamente a los dos civiles, volvió a centrar su mirada en Esposito.
- ¿Dónde está su compañero?
- Aquí estoy señor – dijo Ryan que se acercaba con paso decidido hacia donde estaban todos – He hablado con los de narcóticos y me han pasado el largo historial de Graimes y su juego con el narcotráfico.
- Bien, quizás eso nos sirva para contactar con el resto de personas de la antigua banda de narco de Graimes – dijo Esposito.
- Debemos poner en marcha cuanto antes la operación – dijo Gates – Al parecer el alcalde sabe todo lo que está ocurriendo y quiere que lo solucionemos antes de que todo esto pueda empañar las próximas elecciones.
- Hay algo que no entiendo – dijo Richard provocando que todas las miradas se centrasen en él – A Graimes no se le pudo condenar por ninguno de los asesinatos de los que se le acusaba por falta de pruebas. Con estos dos últimos asesinatos ocurre lo mismo. Todo lo que tenemos son conjeturas, algo que no aceptará un jurado en un juicio. Si realmente no tenemos nada, solo sus huellas en la casa de Kate, ¿para que vamos a montar un operativo? ¿En base a qué lo detendremos?
- No se adelante, señor Rodgers – pidió la capitana – Si estoy aquí es para informarles sobre lo que vamos a llevar a cabo. Necesitamos algo que nos permita detenerlo mientras buscamos las pruebas necesarias sobre la muerte de las dos víctimas que nos lleve a él. Será una operación encubierta que contará con todo el equipo de la 12th. Haremos que Graimes muestre sus cartas, pero para ello debemos prepararnos y asegurarnos de que todo sale bien. Un solo fallo y pondremos en alerta a Graimes sobre nuestros movimientos - hizo una breve pausa - Ahora me gustaría saber si cuento con vosotros.
Richard se giró buscando con la mirada a Kate. Esta imitó al doctor quedando frente a él. Ambos habían descubierto cuando aun eran unos niños que el mayor poder de comunicación entre ellos residía en las miradas. Así, mirándose a los ojos, estuvieron unos segundos, tras los cuales se giraron nuevamente quedando frente a los inspectores y la capitana que es esperaban una respuesta.
- ¿En qué podemos ayudar? - preguntó Kate mientras Richard volvía a apretarle la mano, gesto que ella agradeció con una leve, casi imperceptible, sonrisa que sin embargo no pasó desapercibida para el doctor.
Espero que os guste.
CAPÍTULO 19
Los espesos árboles parecían bailar al ritmo del viento en una danza desordenada. El día comenzaba a teñirse de gris, creando una oscuridad siniestra dentro del bosque. Las aves, presagiando lo que se avecinaba, partían en bandadas a través de las ramas de los diversos árboles, tomando altura para perderse en el negro y temeroso cielo. El paisaje resultaba melancólico tras llegar la calma.
Dentro de aquella casa de madera alojada en el denso bosque de árboles caducifolios, el ambiente acompañaba al plomizo día que se cernía sobre ella.
- Papá, ¿me puedes decir qué ocurre? - le preguntó Kate con el semblante serio temiendo la respuesta.
- Es algo que ocurrió hace muchos años – dijo Jim.
- Tú ni siquiera habías nacido – respondió Joahnna.
- ¿Esto quiere decir que...? - empezó a preguntar Richard.
- Si, Richard, conocemos a Graimes – le contestó Jim.
- ¿Cómo? - preguntó una sorprendida Kate.
- Es una larga historia – dijo Jim.
- No te preocupes papá. En la comisaría sabrán arreglárselas sin nosotros – Kate se acomodó en el sofá y miró a Richard, que permanecía a su lado con la vista fija en el padre de ella.
- Yo era un abogado recién llegado al bufete The Cochran Firm cuando se unió tu madre y tres compañeros más y juntos comenzamos a hacernos notar en esta gran ciudad. El bufete fue ganando prestigio y poco a poco nos fuimos ganando el respeto y reconocimiento de nuestros compañeros. Dos años después, cuando el bufete gozaba de una buena fama avalada por nuestro trabajo, un cliente contactó con nosotros. Al principio creímos que sería un trabajo más como los que habíamos llevado a cabo en aquellos dos años, pero nos equivocamos. Tiffany Nash contacto con nosotros tras creer que su hermano había sido asesinado. Marc Nash era un joven universitario de 22 años que vivía junto a otros compañeros en una residencia universitaria. Un 15 de noviembre de hace 36 años, Marc salía de las clases de guitarra que impartía en sus horas libres para no volver a ser visto. Tras semanas de búsqueda lo encontraron muerto en su coche que estaba abandonado en Hutchinson River Pkwy N, en la entrada a Connecticut. Según los estudios que se le realizaron, todo parecía indicar que había sido una muerte por asfixia mientras dormía. Sin embargo, Tiffany no lo creyó y pidió nuestra ayuda.
- Al principio creímos que no había nada que hacer. El trabajo de la comisaría de policías y de los forenses parecía no dejar lugar a dudas – dijo Joahnna relevando a su marido en la narración de los hechos – Pero, la lucha de Tiffany por encontrar al asesino de su hermano nos hizo creer que podía tener razón, así que aceptamos su caso. De ese modo comenzamos a investigar las amistades de Marc, los lugares que frecuentaba,... Un día un amigo del joven nos contó que la última semana Marc se comportaba de un modo extraño. Estaba muy irascible y cualquier comentario le afectaba de sobremanera. Pensó que sería estrés por los exámenes hasta que un día cuando fue a visitarlo vio marihuana en su mesita de noche. Marc le dijo que no era suya, que sería de alguno de sus compañeros que lo habría puesto allí, pero él no le creyó. Esto nos llevó a contactar con los compañeros de la residencia de Marc hasta llegar a la persona que le vendía la droga.
- Graimes Nicola – sentenció Richard, que había seguido la historia sin perder detalle.
- Así es – corroboró Jim – Graimes era un camello que conoció a Marc cuando este pasaba una difícil situación tras la ruptura con su novia. Marc se refugió en las drogas, pasando a ser un cliente habitual de Graimes. Pero comenzó a verse en apuros al empezar a deberle dinero. Teniendo un motivo para matar, nos centramos en Graimes. Nuestra sorpresa llegó al descubrir que este era el jefe del mayor grupo de narcotraficantes de Nueva York, por lo que tuvimos que avisar a los de narcóticos y cederle el caso. Sin embargo, antes de que esto ocurriese, recibimos multitud de amenazas por parte de Graimes y los suyos para que no siguiésemos con el caso. Temíamos por nuestra integridad así que, tras pasarle el caso a los de narcóticos, no quisimos saber nada más.
- Luego supimos que Graimes y su banda habían sido condenados a 25 años por narcotráfico, ya que no se pudo comprobar que fuesen responsables de la docena de crímenes de los que se le acusaba debido a la falta de pruebas – dijo Joahnna.
- Eso quiere decir que hace 9 años que salió de la cárcel – calculó Kate – Lo que no entiendo es que puede estar buscando ahora de mi ni por qué ha asesinado a Helen y a la otra víctima.
- Tras salir de la cárcel, Graimes parecía haberse reformado – explicó Joahnna – pero nada más lejos de la realidad. Graimes comenzó trabajando en anuncios, pasando a tener pequeños papeles en series de televisión, hasta convertirse en una promesa del cine y llegar a ser un conocido director. Supongo que al ir haciéndote un hueco en el mundo del cine temió encontrarse con nosotros y que se le volviese a relacionar con el narcotráfico, ya que según hemos sabido, nunca dejó ese mundo aunque lo tenía muy bien oculto.
- Por eso reaccionamos de ese modo – dijo Jim – Graimes y sus hombres son muy peligrosos, ya lo habéis podido comprobar. Tenéis que manteneros alejados de ellos. Si se lo proponen, pueden llegar a hacer mucho daño.
- Papá, con lo que nos has contado, no podemos dejarlo. Puede que consigamos destapar la mayor red de narcotráfico de Nueva York además de hacerle pagar a Graimes por todos los asesinatos cometidos – le dijo Kate a su padre mientras se levantaba del sofá.
- Kate, tus padres tienen razón – le dijo Richard levantándose como un resorte del sofá para cerrarle el paso – Esto está yendo demasiado lejos.
Tras ellos, Jim y Joahnna asentían a las palabras del doctor.
Richard, al ver que Kate fijaba sus ojos en él, continuó hablando.
- Ya has escuchado a tu padre. Graimes es capaz de todo con tal de mantener en la sombra esa parte de su vida que le traería problemas con la ley ¿Es que pretendes ponerte en el blanco de su diana?
- Ya hemos tenido esta conversación antes, Richard y ya sabes cual es mi respuesta. Sé que te prometí tener cuidado y lo tendré, pero no puedo dejar que siga en la calle como si nada hubiese ocurrido. Puedes seguir conmigo o alejarte. No puedo pedirte que vengas conmigo puesto que también irían tras de ti si decides acompañarme y yo no podría soportar ser la causante de ponerte en una situación de peligro. Yo voy a seguir adelante, tú puedes hacer lo que quieras – dijo antes de salir por la puerta de la casa rumbo al coche.
- Richard – Jim le colocó la mano en el hombro para sorpresa del doctor – Ya sé que no recibiste el mejor trato por nuestra parte y que tú no eres el culpable de la cabezonería de mi hija. Lo sentimos mucho, no queremos que le pase nada malo.
- Yo no dejaría que nada le sucediese – dijo Richard muy seguro de sus palabras.
- Es por eso que te pedimos que no la dejes sola – dijo Joahnna acercándose a su marido – Kate no se detendrá en su lucha. Se está metiendo en algo muy peligroso y no debe estar sola. Por favor Richard, ve con ella, protégela.
Richard asintió sorprendido ante la confianza que ambos depositaban ahora en él.
- Conmigo no le ocurrirá nada, estará protegida – les dijo desde la puerta mientras se dirigía hacia el coche de Kate, quien parecía saber que vendría tras ella y permanecía en el coche esperándolo.
Tras abrir la puerta y sentarse en el asiento del copiloto, se produjo un largo silencio que ninguno de los dos parecía dispuesto a romper. Finalmente Richard decidió pronunciarse.
- Kate, esto es una locura. Nos van a matar.
- No lo harán. Iremos a la comisaría y le contaremos a los chicos lo que mi padres nos ha dicho. Ellos sabrán como debemos actuar a partir de ahora.
- ¿Y si Graimes descubre lo que sabemos? Hasta ahora parece que siempre ha ido un paso por delante de nosotros.
- Y, ¿cómo lo iba a saber? Jugamos con ventaja. Vamos a desenmascararlo y esta vez no se nos escapará – sentenció Kate.
Richard asintió sabiendo que estaría más segura teniendo a alguien a su lado. Se iba a enfrentar con tipos peligrosos y no podía hacerlo sola.
Kate lo miró una última vez antes de meter la llave en el contacto del coche para salir de aquel bosque hacia la 12th.
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Como una exhalación, Kate y Richard entraron en la comisaría buscando con la mirada a los inspectores. Allí estaban, frente a la pizarra blanca hablando entre ellos mientras recolocaban las fotos de las víctimas y sospechosos en la línea del tiempo.
- Tenemos que hablar con vosotros – dijo Kate nada más acercarse a ellos.
- Buenos días para ti también – se burló Esposito.
- No estamos para bromas – respondió Kate borrando inmediatamente la sonrisa de los rostros de los inspectores.
- ¿Qué ocurre? - preguntó Ryan.
- Es sobre Graimes – dijo Richard – Será mejor que os sentéis.
Ryan y Esposito se miraron sin entender nada y, tomando las sillas de sus escritorios, se sentaron, haciendo lo mismo Richard y Kate.
Tras diez minutos en los que tanto el doctor como Kate iban narrando alternativamente todo lo que Jim les había contado horas antes, Esposito se levantó de la silla en la que había permanecido sentado aquellos minutos.
- Tenemos que informar a la capitana. Nos podemos seguir adelante sin que ella lo sepa. Ryan, tú ve a hablar con tus compañeros de narcóticos, a ver si nos pueden pasar todo lo que tengan de Graimes. Richard, Kate, vosotros esperad aquí. Os vamos a necesitar para llevar a cabo la operación.
- ¿Operación? - preguntó Richard.
- Si estáis en lo cierto y Graimes sigue siendo narcotraficante, estará con las grandes bandas. No podemos llevar a cabo una detención al uso contra ese tipo de personas, necesitamos elaborar una operación. Después de hablar con Gates os informaremos de lo que debéis hacer. Estaréis seguros, os protegeremos.
Richard asintió mientras los veía desaparecer, sabiendo que por mucha protección le brindasen seguirían estando en el blanco de la diana. Un blanco fácil para alguien como Graimes Nicola. Con el miedo en el cuerpo tomó la mano de Kate quien, pese a la vorágine en la que estaban sumidos, conservaba la tranquilidad. Había vuelto de nuevo la Kate imperturbable, esa que se colocaba una coraza para que nada le afectase, esa que a vista de todos era una persona dura que no se derrumbaba.
Kate giró la cabeza para ver como esos ojos azules como el mar la miraban intensamente. Un escalofrío recorrió todo su cuerpo llegando a cada una de sus terminaciones nerviosas, provocándole una mezcla de sensaciones. Se había autoimpuesto no dejarse vencer por el miedo, no ser vulnerable en una situación que fácilmente le podía costar la vida. Sin embargo, al ver el terror reflejado en los ojos de Richard, su determinación comenzó a flaquear. No podía llegar a entender como una sola mirada podía llegar a desarmarla. Y es que él tenía ese poder sobre ella, un poder que utilizaba sin llegar a saber lo que en ella provocaba, sin saber lo mucho que podía llegar a perturbarla. Se reprendió a si misma por estar divagando sobre ello en una situación tan complicada como la que se encontraban y volvió a protegerse en su coraza, apartando la vista de los ojos de Richard.
El doctor había visto como en un momento de debilidad, Kate había apretado fuertemente su mano mientras lo miraba preocupada. Creyó que había sido una mala pasada que su imaginación le había jugado pues cuando quiso darse cuenta, Kate estaba en esa posición de dura detective que había adoptado las últimas semanas.
A los pocos minutos vieron a Esposito dirigirse hacia ellos con una mujer de piel morena, cabellos oscuro y mirada penetrante capaz de intimidar a cualquier persona.
- Richard, Kate, os presento a la capitana Victoria Gates.
Richard le tendió la mano pero Gates hizo como si no hubiese visto nada y, tras estudiar detenidamente a los dos civiles, volvió a centrar su mirada en Esposito.
- ¿Dónde está su compañero?
- Aquí estoy señor – dijo Ryan que se acercaba con paso decidido hacia donde estaban todos – He hablado con los de narcóticos y me han pasado el largo historial de Graimes y su juego con el narcotráfico.
- Bien, quizás eso nos sirva para contactar con el resto de personas de la antigua banda de narco de Graimes – dijo Esposito.
- Debemos poner en marcha cuanto antes la operación – dijo Gates – Al parecer el alcalde sabe todo lo que está ocurriendo y quiere que lo solucionemos antes de que todo esto pueda empañar las próximas elecciones.
- Hay algo que no entiendo – dijo Richard provocando que todas las miradas se centrasen en él – A Graimes no se le pudo condenar por ninguno de los asesinatos de los que se le acusaba por falta de pruebas. Con estos dos últimos asesinatos ocurre lo mismo. Todo lo que tenemos son conjeturas, algo que no aceptará un jurado en un juicio. Si realmente no tenemos nada, solo sus huellas en la casa de Kate, ¿para que vamos a montar un operativo? ¿En base a qué lo detendremos?
- No se adelante, señor Rodgers – pidió la capitana – Si estoy aquí es para informarles sobre lo que vamos a llevar a cabo. Necesitamos algo que nos permita detenerlo mientras buscamos las pruebas necesarias sobre la muerte de las dos víctimas que nos lleve a él. Será una operación encubierta que contará con todo el equipo de la 12th. Haremos que Graimes muestre sus cartas, pero para ello debemos prepararnos y asegurarnos de que todo sale bien. Un solo fallo y pondremos en alerta a Graimes sobre nuestros movimientos - hizo una breve pausa - Ahora me gustaría saber si cuento con vosotros.
Richard se giró buscando con la mirada a Kate. Esta imitó al doctor quedando frente a él. Ambos habían descubierto cuando aun eran unos niños que el mayor poder de comunicación entre ellos residía en las miradas. Así, mirándose a los ojos, estuvieron unos segundos, tras los cuales se giraron nuevamente quedando frente a los inspectores y la capitana que es esperaban una respuesta.
- ¿En qué podemos ayudar? - preguntó Kate mientras Richard volvía a apretarle la mano, gesto que ella agradeció con una leve, casi imperceptible, sonrisa que sin embargo no pasó desapercibida para el doctor.
Última edición por Beckett_Castle_Alba el Vie Abr 12, 2013 10:59 am, editado 2 veces
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Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
Muy bueno, me encanta!
Ojala que no les pase nada malo... y me encanta como se entienden Rick y Kate
CONTINUA PRONTO ALBA!!
Ojala que no les pase nada malo... y me encanta como se entienden Rick y Kate
CONTINUA PRONTO ALBA!!
AlwaysSerenity- Autor de best-seller
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Edad : 27
Localización : Málaga (Andalucia) España
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
Muchas gracias Clau!AlwaysSerenity escribió:Muy bueno, me encanta!
Ojala que no les pase nada malo... y me encanta como se entienden Rick y Kate
CONTINUA PRONTO ALBA!!
Están protegidos aunque nunca se sabe lo que puede pasar... el modo en que los dos se entienden en la serie siempre me ha encantado y por eso intenté reflejarlo de algún modo en este fic.
Tengo en mente el siguiente capítulo, ahora solo me falta tiempo para poderme poner a escribirlo.
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Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
Que gran capítulo, me ha gustado mucho.
Hasta la capitana ha querido contar con ellos para intentar resolver el caso. Espero que los tengan bien vigilados y protegidos para que no les pase nada.
Continúa pronto.
Hasta la capitana ha querido contar con ellos para intentar resolver el caso. Espero que los tengan bien vigilados y protegidos para que no les pase nada.
Continúa pronto.
Yaye- Escritor - Policia
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Fecha de inscripción : 05/06/2012
Localización : Huelva
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
Yaye escribió:Que gran capítulo, me ha gustado mucho.
Hasta la capitana ha querido contar con ellos para intentar resolver el caso. Espero que los tengan bien vigilados y protegidos para que no les pase nada.
Continúa pronto.
Muchas gracias Yaye.
Es un caso que a Richard y Kate les viene grande, Gates tenía que intervenir. Veremos que ocurre en el siguiente capítulo.
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Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
Me encanta, continua pronto.
_Caskett_- Escritor - Policia
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Fecha de inscripción : 22/01/2013
Localización : en un mundo feliz
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
Un gran capítulo. Espero que no les pase nada malo por meterse en la boca del lobo de cabeza, pero es que esta Kate, es mucha Kate y a terca no hay quien le gane.
Queriendo ya saber como transcurre todo.
Queriendo ya saber como transcurre todo.
Cata Castillo- Escritor - Policia
- Mensajes : 1729
Fecha de inscripción : 25/09/2010
Localización : Al sur del sur
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
Muchas gracias._Casckett_ escribió:Me encanta, continua pronto.
En cuanto disponga de tiempo me pongo con el nuevo capítulo.
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Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
Muchas gracias Cata.Cata Castillo escribió:Un gran capítulo. Espero que no les pase nada malo por meterse en la boca del lobo de cabeza, pero es que esta Kate, es mucha Kate y a terca no hay quien le gane.
Queriendo ya saber como transcurre todo.
Kate es muy terca pero tiene la suerte de contar con el apoyo de la 12th.
Veremos que ocurre en el siguiente capítulo la semana próxima.
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Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
Excelente capítulo!!! Me encantó como lo involucraste a Graimes Nicola dentro de uno de los primeros casos de los padres de Kate. Lo has hecho maravillosamente! Ahora con Gates pidiéndole ayuda a Rick y a Kate para armar un operativo se siente que ya son parte importante del equipo. Estoy segura de que la operación para atrapar al asesino será súper interesante. Ya quiero leerla!
Me encanta el apoyo incondicional que Rick le brinda a Kate a pesar del miedo que tiene a que le pase algo, como así también, lo fácil que la desarma con tan sólo una mirada. Ya te lo he dicho: me fascina como describes las escenas entre ellos… ¿Será porque a vos también te gusta escribirlas como me dijiste alguna vez? Jajajaja.
En fin… escribís de mil maravillas y no me voy a cansar de decirlo. Es un verdadero placer leer tus capítulos!
Besos y hasta la próxima!
Me encanta el apoyo incondicional que Rick le brinda a Kate a pesar del miedo que tiene a que le pase algo, como así también, lo fácil que la desarma con tan sólo una mirada. Ya te lo he dicho: me fascina como describes las escenas entre ellos… ¿Será porque a vos también te gusta escribirlas como me dijiste alguna vez? Jajajaja.
En fin… escribís de mil maravillas y no me voy a cansar de decirlo. Es un verdadero placer leer tus capítulos!
Besos y hasta la próxima!
Solexite- Policia de homicidios
- Mensajes : 646
Fecha de inscripción : 30/04/2012
Localización : America, debo estar en America del Sur ¡Bien al Sur!
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
Solexite escribió:Excelente capítulo!!! Me encantó como lo involucraste a Graimes Nicola dentro de uno de los primeros casos de los padres de Kate. Lo has hecho maravillosamente! Ahora con Gates pidiéndole ayuda a Rick y a Kate para armar un operativo se siente que ya son parte importante del equipo. Estoy segura de que la operación para atrapar al asesino será súper interesante. Ya quiero leerla!
Me encanta el apoyo incondicional que Rick le brinda a Kate a pesar del miedo que tiene a que le pase algo, como así también, lo fácil que la desarma con tan sólo una mirada. Ya te lo he dicho: me fascina como describes las escenas entre ellos… ¿Será porque a vos también te gusta escribirlas como me dijiste alguna vez? Jajajaja.
En fin… escribís de mil maravillas y no me voy a cansar de decirlo. Es un verdadero placer leer tus capítulos!
Besos y hasta la próxima!
¡Muchas gracias Solexite!
El caso fue realmente complicado de escribir al quererlo ligar a los padres de Kate. La verdad es que ni siquiera sé como conseguí que quedara coherente jaja
Gates era la que faltaba para hacerles ver que son parte del equipo, como tú dices. Bueno, la operación la tengo todavía que desarrollar, la verdad es que ando falta de ideas con este fic últimamente
Jajaja será por eso que las escenas entre ellos te fascinan, porque a mi me encanta escribirlas y me lo paso muy bien imaginándomelas
Muchas gracias Solexite.
Besos.
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Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
POOOOOR FIN PUEDO LEER EL NUEVO CAPI! Siento no haber comentado antes, es que estoy hasta arriba de todo .
Ayyyyy dios, me encanta como lo estas llevando, Alba. En serio, lo estas bordando *___*. La explicacion de los padres de Beckett sobre lo que pasaba con Graimes ha estado super elaborada, se nota que te lo has currado y eso te hace grande <3.
Castle me da mucha pena, esta metido en el mismo rollo de siempre, Beckett siendo una cabezota y el pobre apañandoselas para tragarselo. Aiiiiins, aun asi me encanta la ternura con la que los pones, en serio. JO, ES QUE TU FIC ES AMOR! *_______*
estoy deseando leer el siguiente, quiero ver que van a hacer para acabar con Graimes. Animo Alba, que estas hecha una pedazo escritora!
Ayyyyy dios, me encanta como lo estas llevando, Alba. En serio, lo estas bordando *___*. La explicacion de los padres de Beckett sobre lo que pasaba con Graimes ha estado super elaborada, se nota que te lo has currado y eso te hace grande <3.
Castle me da mucha pena, esta metido en el mismo rollo de siempre, Beckett siendo una cabezota y el pobre apañandoselas para tragarselo. Aiiiiins, aun asi me encanta la ternura con la que los pones, en serio. JO, ES QUE TU FIC ES AMOR! *_______*
estoy deseando leer el siguiente, quiero ver que van a hacer para acabar con Graimes. Animo Alba, que estas hecha una pedazo escritora!
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
iamaplatypus escribió:POOOOOR FIN PUEDO LEER EL NUEVO CAPI! Siento no haber comentado antes, es que estoy hasta arriba de todo .
Ayyyyy dios, me encanta como lo estas llevando, Alba. En serio, lo estas bordando *___*. La explicacion de los padres de Beckett sobre lo que pasaba con Graimes ha estado super elaborada, se nota que te lo has currado y eso te hace grande <3.
Castle me da mucha pena, esta metido en el mismo rollo de siempre, Beckett siendo una cabezota y el pobre apañandoselas para tragarselo. Aiiiiins, aun asi me encanta la ternura con la que los pones, en serio. JO, ES QUE TU FIC ES AMOR! *_______*
estoy deseando leer el siguiente, quiero ver que van a hacer para acabar con Graimes. Animo Alba, que estas hecha una pedazo escritora!
No te preocupes Sara, yo estoy igual últimamente.
Este capítulo ha sido de los más complicados que he escrito desde que empecé con este de los fics. La verdad es que la trama la he complicado tanto que para que todo tenga sentido me lleva mucho tiempo y mucha documentación. Así que me alegra ver que te esté gustando.
Los personajes son tal cual son en la serie, quise que sus profesiones y sus vidas no fuesen las mismas, pero traté de mantener las personalidades de todos lo más real posible a como son en la serie.
Esta semana casi no he tenido tiempo de escribir con el examen que tuve ayer así que a ver si la semana que viene puedo ponerme de nuevo con esta historia y escribir el siguiente capítulo.
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Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
El siguiente capítulo me está costando más de lo que esperaba escribirlo. Aunque tengo todo pensando, es un capítulo complejo así que siento no haberlo podido subir la semana pasada, pero al menos os compensé con un capítulo de "Y después... ¿qué?"
Si todo va bien, a finales de esta semana espero poderlo tener terminado. Será el penúltimo capítulo así que si nada lo impide, a mediados de mayo esta historia habrá llegado a su fin.
Si todo va bien, a finales de esta semana espero poderlo tener terminado. Será el penúltimo capítulo así que si nada lo impide, a mediados de mayo esta historia habrá llegado a su fin.
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Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
leches, es el tipo ese se merece que terminen con él de una vez.
me encanta tu Kate, ajjajaja. claro que eso siendo yo no es nada raro, jajajaja.
Me la estoy imaginando queriendo entrar en la policía al final de la historia, ya se ya se, un desvarío mio.
Aquí estaré esperando el próximo capitulo.
besos
me encanta tu Kate, ajjajaja. claro que eso siendo yo no es nada raro, jajajaja.
Me la estoy imaginando queriendo entrar en la policía al final de la historia, ya se ya se, un desvarío mio.
Aquí estaré esperando el próximo capitulo.
besos
meln- As del póker
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Fecha de inscripción : 20/10/2012
Edad : 51
Localización : madrid
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
Alba
Pensé que durante los días de mi baja, mi viaje, mi puesta al día y demás, habría perdido tanto el hilo que volví a leerte de nuevo desde el principio.
Ahora que ya estoy al día, espero que tengas tiempo ( ya es final de semana senorita ) y subas otro pronto. Y aunque los finales dan pena, entiendo que tengas ganas de acabarlo, es una gran responsabilidad semana a semana satisfacer a tanta gente.
Ánimo Alba!! Ahora voy a por tus otros relatos, poco a poco eso si, espero me perdones.
Pensé que durante los días de mi baja, mi viaje, mi puesta al día y demás, habría perdido tanto el hilo que volví a leerte de nuevo desde el principio.
Ahora que ya estoy al día, espero que tengas tiempo ( ya es final de semana senorita ) y subas otro pronto. Y aunque los finales dan pena, entiendo que tengas ganas de acabarlo, es una gran responsabilidad semana a semana satisfacer a tanta gente.
Ánimo Alba!! Ahora voy a por tus otros relatos, poco a poco eso si, espero me perdones.
Anver- Policia de homicidios
- Mensajes : 711
Fecha de inscripción : 14/06/2012
Localización : Madrid
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
Anver escribió:Alba
Pensé que durante los días de mi baja, mi viaje, mi puesta al día y demás, habría perdido tanto el hilo que volví a leerte de nuevo desde el principio.
Ahora que ya estoy al día, espero que tengas tiempo ( ya es final de semana senorita ) y subas otro pronto. Y aunque los finales dan pena, entiendo que tengas ganas de acabarlo, es una gran responsabilidad semana a semana satisfacer a tanta gente.
Ánimo Alba!! Ahora voy a por tus otros relatos, poco a poco eso si, espero me perdones.
Hola Ana, ya echaba de menos tus comentarios
No sé como has podido volver a leertelo todo de nuevo, si soy yo que lo tengo que hacer a veces porque no me acuerdo ni de lo que he escrito y me lleva un tiempo, lo tuyo tiene mérito jaja
Ey, que aun es jueves y finales de semana para mi es sábado o domingo, pero no voy a ser tan mala, ya lo tengo escrito a mano así que supongo que en una o dos horas estará escrito a ordenador y listo para dejarlo por aquí. No es tanta la responsabilidad como la locura de historia en la que me he metido yo solita, si es que no tengo remedio jaja
Muchas gracias Ana. No tengo que perdonarte nada, al contrario, siempre agradeceré que te tomes un tiempo y leas lo que escribo.
Besos.
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Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
meln escribió:leches, es el tipo ese se merece que terminen con él de una vez.
me encanta tu Kate, ajjajaja. claro que eso siendo yo no es nada raro, jajajaja.
Me la estoy imaginando queriendo entrar en la policía al final de la historia, ya se ya se, un desvarío mio.
Aquí estaré esperando el próximo capitulo.
besos
Quedan solo una hora para que puedas leer lo que pasa con ese tipo
Jajaja no ya, no me extraña, aunque tengo que reconocer que a mi también me gusta la Kate de mi historia.
Umm, mejor no te contesto a tu desvarío que acabo desvelando más de lo que debo jaja
Muchas gracias Estrella.
Besos.
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Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
Pronto terminará esa intriga.Kynu escribió:Me tienes completamente intrigada =_=
Muchas gracias Ana.
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Castlet: What happens if you don’t like what you see?
Beckett: What happens if you don’t let me look?
Re: Brain Heart- Epílogo (pag.36) 02/05
CAPÍTULO 20
La tensión se respiraba en el ambiente. El miedo y la preocupación se podía observar en el rostro de cada una de las personas presentes en le sala de reuniones de la comisaría 12th.
Los diversos inspectores que conformaban la plantilla de la comisaría se habían reunido junto a la capitana y los dos civiles para recibir las instrucciones del trabajo que se realizaría a partir de ese momento. Todos hablaban entre ellos esperando, con expectación, lo que Victoria Gates tenía para decirles.
- Os he mandado reunir porque tengo algo importante que deciros – dijo alzando la voz por encima de todos – Vamos a llevar a cabo una operación contra uno de los mayores narcotraficantes de Nueva York, Graimes Nicola – dijo enseñando la foto.
- Señor, ¿eso no le correspondería a los de narcóticos? - preguntó un joven de unos 25 años, esbelto, de tez blanca como la nieve y ojos negros como el azabache.
- Y así sería, Edward, pero a Graimes se le acusaron de más de una docena de asesinatos de los que salió absuelto y ahora es sospechoso de la muerte de otros dos. Nos corresponde a nosotros aunque para ellos debamos hacer un trabajo que es de los de narcóticos – Edward asintió y Kate pudo comprobar el respeto e incluso temor que Gates ejercía sobre sus inspectores – Voy a necesitar la colaboración de todos vosotros. Es una operación complicada, no puede haber un solo fallo, debéis tener vuestro cinco sentidos puestos en la escena – se produjo un pronunciado silencio en el que no dejaron de sucederse las miradas entre los inspectores que allí se habían agregado – Dicho esto, voy a pasar a explicaros como se va a llevar a cabo la operación. Gracias a la colaboración de los de narcóticos hemos podido averiguar el lugar donde Graimes y los suyos guardaban la mercancía antes de ser encarcelados. Obviamente, tras su salida de prisión, ese lugar quedó abandonado. Graimes cuidó muy bien su imagen para no ser relacionado nuevamente con el narcotráfico pero no cuidó lo más importante, sus hombres – dijo provocando un murmullo generalizado – Uno de ellos que, por temor a ser descubierto por Graimes,no ha revelado su identidad, ha llamado para darme la dirección del lugar donde guarda la droga.
- Un momento – dijo Richard dando un paso hacia delante - ¿Cómo sabía esa persona que buscábamos dar con el lugar donde Graimes guarda la droga? Parece como si supiese cuales eran nuestros movimientos.
- Eso es imposible, señor Rodgers. Nadie, salvo los que nos encontramos en esta sala, lo sabe. Me ha asegurado que quiere ayudarnos pero teme dar la cara. Aun así, he pedido que rastreen la llamada para ver si podemos sacar alguna información de quien es esa persona.
Richard asintió y volvió a su posición junto a Kate.
Una hora después de haber dado las indicaciones pertinentes, Gates salía de la comisaría flanqueada por Esposito y Ryan. Tras ellos, Kate y Richard caminaban protegidos por cuatro policías que no dejarían de vigilarlos en ningún momento para que nada les ocurriese.
Cuando llegaron al aparcamiento se dividieron. Gates junto con dos policías se fueron en un coche que fue seguido por Ryan y Esposito, que iban en otro vehículo conducido por este último. Por otra parte, Kate conducía su propio coche con Richard de copiloto en la dirección opuesta a los inspectores. Un vehículo de la comisaría los seguían a una distancia prudencial que evitara sospechas por parte de la población neoyorquina.
- No te preocupes Rick, estamos protegidos por cuatro policías que no nos van a perder de vista.
- Eso no hace que me sienta mejor, Kate. Si algo ocurriese...
- Que no va a ocurrir – le interrumpió.
- Pero si algo ocurriese, ellos no podrían evitarlo a tiempo si el ataque viene de Graimes o alguno de los suyos. Por muchos policías vengan con nosotros, estamos solos.
- Richard, saben lo que hacen. No nos habrían dicho que hiciésemos esto si creyesen que nos podría ocurrir algo. Confía en ellos, confía en mí. No nos pasará nada – le dijo mientras depositaba una de sus manos sobre las de él sin apartar la vista de la carretera.
Mientras Kate conducía, Richard llamó a Paula, la persona que años atrás había sido su compañera en la universidad y descubrió su pasión por escribir. Desde entonces, siempre le animó a que continuará ya que ella acabó siendo muy respetada como relaciones públicas, su verdadera vocación, y podía ayudarle a hacerse un hueco como escritor. Richard nunca le mencionó que tenía varias obras completas que no publicaba por inseguridad o, por qué no decirlo, por cobardía. Aun así, nunca habían perdido el contacto.
- Paula, soy Richard.
- Rick, que alegría me da oírte. Hace semanas que no sé nada de ti y empezaba a preocuparme ¿Va todo bien?
- De eso quería hablarte. Necesito pedirte algo.
- ¿Dé que se trata?
El trayecto hasta el loft les pareció muy largo, pese a ser el mismo por el que volvían siempre. Los nervios y la tensión soportada hacía que pareciese que el tiempo no pasaba.
Media hora después, Kate, con temor, aparcaba el coche frente al loft. Apesadumbrada debido a todo los acontecimientos ocurridos durante el día, Kate se sentía segura dentro de aquel vehículo junto a Richard. Quería acabar con toda aquella situación pero no podía evitar que el miedo antes lo que se avecinara. Se reprendió a si misma por dejarse acobardar justamente en ese momento que tan fría necesitaba mantener su mente. Richard la tomó de la mano viéndola abstraída en sus propios pensamientos y esta le sonrió antes de salir del coche del mismo modo que lo hizo él.
Una vorágine de paparazzis se agolparon a su alrededor, provocando que ambos se vieran acorralados. Richard apretó la mano con la que llevaba agarrada a Kate para que no se separase de él mientras caminaban hacia el loft.
- Señor Rodgers, ¿es cierto que su corazón ya está ocupado? - preguntaba uno poniéndole el micrófono para que contestase.
- ¿Qué nos puede decir acerca de los rumores que circulan últimamente sobre cartas amenazadoras y animales muertos que le han hecho llegar? - le preguntó otro realizando la misma operación que el anterior.
- Mi compañera y yo hemos pasado un mes bastante duro debido a todo ello así que, temiendo por nuestras propias vidas, hemos decidido dejar de investigar – contestó el doctor ante el insistente paparazzi.
Richard se apresuró y entró junto a Kate en el loft. Kate caminó hasta el sofá y se dejó caer en él. El doctor la siguió y la rodeó con sus brazos.
- ¿Crees que será creíble? - le preguntó Kate.
- Esperemos que así sea. De momento todo ha salido según lo planeado. Paula ha hecho un buen trabajo. No me esperaba que pudiese reunir a tantos paparazzis en tan poco tiempo.
- Voy a llamar a Gates para que ponga en marcha la segunda parte del plan – le dijo Kate mientras tomaba su móvil.
En otra parte de la ciudad, dos coches de policías se dirigían al lugar donde se llevaría a cabo la operación. Ryan y Esposito llegaban los primeros, seguidos de Gates y los dos policías.
- He recibido una llamada de la señorita Beckett – dijo la capitana acercándose a ellos.
- ¿Está bien? - preguntó Ryan preocupado.
- Si inspector, todo ha salido según lo planeado. Ahora nos toca a nosotros hacer nuestro trabajo.
- Yo entraré – dijo Esposito para sorpresa de su compañero y su superior.
- ¿Estás loco, bro?
- Esposito, no tiene por qué hacerlo. Es peligroso, a usted ya lo conocen. Tenemos personas preparadas para ello.
- Señor, puedo y quiero hacerlo.
- Está bien, pero llevará un micro. Si ocurre algo entraremos por usted.
- No ocurrirá nada. No es la primera vez que me infiltro en un grupo de narcotraficantes. Sé lo que hago – dijo Esposito muy seguro de sí mismo.
- Antes debemos esperar a que conteste a nuestra llamada. No vendamos la piel del lobo antes de cazarlo.
Los inspectores asintieron esperando que Graimes y los suyos no sospecharan del plan que tenían entre manos.
Parecía que su llamada a la comisaría había surtido efecto. Sin embargo, ahora, tras haberla realizado, tenía más miedo que antes. No se arrepentía de lo que había hecho porque sabía que era lo correcto, pero no dejaba de pensar que si por alguna razón las fichas del dominó caían, la suya sería derribada al inicio ya que se encontraba en primera línea de fuego. Cualquier otra persona temería por su vida, pero él no. Él temía más el castigo, la tortura a la que sabía que sería sometido de saberse su traición.
- Señor – dijo - ¿ha escuchado las nuevas noticias?
- ¿Te parece que tengo tiempo para sentarme a ver que dicen esa panda de buitres que se hacen llamar periodistas? - le preguntó aireado mientras se giraba en la silla de su despacho para encararlo – Si tienes algo que decirme, hágalo. Sino, deja de hacerme perder el tiempo.
- La actriz y su compañero han dicho que van a dejar de investigarnos. Al parecer surtió efecto el gato que les dejó en el loft.
- ¿Acaso lo dudabas? Mis planes nunca fallan. Aun así, todo esto me parece muy raro ¿Por qué lo han dejado justo ahora? Esto me huele muy mal.
- Señor, es lo que usted quería. Han dejado de investigar, eso es lo importante. No tenemos a nadie que nos vigile. Podemos volver a nuestras vidas.
- Tiene razón – dijo levantándose de la silla para acercarse a su hombre – Esto nos va a venir muy bien. Están esperando nuestra contestación para que les pasemos la mercancía por la frontera México. Ahora es el momento.
El teléfono de su despacho comenzó a sonar.
- Graimes Nicola.
- ...
- ¿Cien kilos? ¿Para qué quiere una cantidad tan grande?
- ...
- ¿Me está diciendo que no confían en que les llegue y nos quedemos con ella? ¿Saben con quien están tratando? Yo no me quedo con lo que no es mio, deberían saberlo.
- ...
- Ya sé que usted sólo cumple órdenes. Dígale al señor Márquez que dentro de unas horas tendrá ese adelanto que me ha pedido – dijo antes de colgar.
Graimes comenzó a dar vueltas por su despacho llevándose las manos a la cabeza. Con furia, golpeó la mesa provocando que su hombre se sobresaltase.
- ¡Joder! ¡Maldita Kate Beckett! Ha estado a punto de arruinarme la venta de la mercancía.
- Pero, ¿sigue en pie? - le preguntó para no levantar sospechas aunque él ya imaginaba la respuesta.
- Sí, sigue en pie, aunque dudo que ahora quieran discutir el porcentaje que me deben por esa merca – volvió a llevarse las manos a la cabeza – Esa mediocre actriz me las va a pagar. Te juro que me las pagará.
- Señor, ha picado. Graimes Nicola se ha creído la llamada. Parece ser que la persona que le aviso sobre el lugar donde guardaba la droga y la operación con la frontera de México que se llevaría a cabo es fiable – le dijo Esposito a Gates – En una hora estarán aquí con la droga.
- De acuerdo – se giró y se dirigió a los policías de la comisaría que habían pedido como refuerzo al llegar allí – Necesito que rodeéis al almacén pero que os mantengáis fuera de la vista de todos. Estad atentos a mis órdenes – todos asintieron y se encaminaron a hacer lo que Gates les había dicho – Tenga cuidado inspector – le dijo a Esposito mientras se giraba y le daba un micro y un pinganillo que les permitiría a ambos comunicarse.
Una hora después, tal y como Espósito había asegurado, dos porsches negros con los cristales tintados hacían su aparición en el almacén. Esposito le hizo un gesto a Gates para que supiese que a partir de ese momento comenzaba la operación. El inspector rodeó el almacén y se dirigió tres metros al norte, donde la habían dejado un coche para hacerle creer a Graimes y los suyos que había llegado en él. Condujo hasta la puerta del almacén y entonces se abrió, permitiéndole introducir el coche. Una vez dentro, aparcó y se bajó.
Cuatro hombres con trajes de chaqueta rodearon el coche cuando el inspector bajó de él. Puesto que Graimes ya lo conocía del interrogatorio que le realizó junto a su compañero, Esposito se había colocado una peluca rubia con melena lacia y se había puesto lentillas de color azul. Además, llevaba un pendiente en la oreja izquierda y una gorra con la visera hacia atrás. Se había puesto un pantalón vaquero ancho y una camisa negra ajustada de maga corta. El resultado era asombroso. Nadie diría que esa persona era la misma que día a día luchaba contra el crimen.
- Señor García – dijo Graimes separándose de la formación aludiendo a Esposito con el apellido inventado que este le había dicho por teléfono - Bienvenido a nuestro país
- Gracias señor – dijo tratando de imitar el acento mexicano – Si no le importa, preferiría ir directamente al grano. Mi jefe espera mi llamada – le dijo para acelerar el proceso.
- Lo entiendo, es comprensible que no confíe en mí – le dijo Grames invitando al inspector a caminar a su lado – Pero créame, no tiene por qué dudar. Mi hombres han traído la mercancía – dijo haciendo un chasquido con los dedos. Inmediatamente los tres hombres que habían acompañado a Graimes se dirigieron a los coches y sacaron dos maletas. Graimes les hizo un gesto con la cabeza y los tres hombres abrieron las maletas, haciendo visible la droga – Ya le dije que yo no me quedo con lo que no es mio.
- Ya veo, pero después de todo lo que circula últimamente a su alrededor, mi jefe no podía fiarse. Lo que se dice por ahí de usted no es nada bueno para este trabajo.
- ¿Y qué se dice si se puede saber? - pregunto Graimes.
- Ya sabe. Que hay una actriz que con ayuda de la policía lo está poniendo en evidencia al intentar destapar lo que hace.
- Bueno, ya no hay por qué preocuparse de eso. Esa malnacida no volverá a molestarme. La policía ya no es un problema para mí.
- ¿Está usted seguro? - le preguntó.
Inmediatamente las puertas del almacén se abrieron dando paso a una veintena de policías.
- ¡Que nadie se mueva! - gritaba Ryan.
Esposito se deshizo de la gorra, la peluca y el pendiente.
- Sus problemas con la policía no han hecho más que empezar – le contestó a Graimes mientras este se resistía a que le colocase las esposas – Graimes Nicola, queda detenido por posesión de marihuana y narcotráfico.
Uno de los policías se llevó a Graimes al coche de la comisaría y el resto de policías hicieron lo mismo con los otros tres hombres.
Ryan se acercó a Esposito y le dio una palmada en la espalda.
- Buen trabajo Esposito.
- Ha sido más fácil de lo que esperaba. Graimes ha cantando La traviata. Tenemos que encontrar pruebas que los relacione con los asesinatos. Ese maldito cabrón no se puede ir de rositas.
- Lo encontraremos.
- Esposito – dijo la capitana acercándose a él - ¿Se puede saber a que jugaba?
- ¿A qué se refiere?
- No me vengas con esas, no soy estúpida ¿Qué intentaba? Ya lo teníamos con la droga ¡Podría haberlo descubierto! - le dijo irritada ante el comportamiento del inspector.
- Intentaba que hablase. Intentaba sacarle una confesión pero parece que no está dispuesto a hablar tan fácilmente.
- No vuelve a desobedecerme nunca más. No quiera saber de lo que soy capaz si se desacata mis órdenes – le dijo antes de salir del almacén y montarse en su coche.
- Por una vez estoy de acuerdo con la dama de hierro. Hemos estado muy preocupados hay fuera – le dijo señalando el exterior del almacén – Si Graimes te hubiese descubierto, las cosas se hubiese puesto muy feas.
- No ha sucedido nada, sabía lo que hacía. Tenemos que llamar a los chicos. Se alegrarán de saber que lo peor ya ha pasado.
- Lo tienen – dijo Richard acercándose a Kate que preparaba la cena – Estamos a salvo.
Ésta se giró y lo rodeó con sus brazos. Richard depositó sus brazos en la cintura de ella y la besó.
- Tengo una idea – le dijo Kate en sus labios - ¿Qué te parece si lo celebramos?
- Aunque tu propuesta suena de lo más tentadora, debo recordarte que aun sigues con las curas.
- Vamos, Rick, ya no me duele y sé que tú cuidarás de mí.
- Alguien debe mantener la cordura y aunque suene irónico, seré yo quien lo haga.
- ¿Estás seguro? - le preguntó mordiéndose el labio - ¿Crees que serás capaz de mantener la cordura si hago esto? - le preguntó mientras comenzaba a desabrocharse la camisa dejando al descubierto uno de sus hombros.
- Kate, por favor, no lo hagas.
- Dijiste que tú serías el sensato, pero no dijiste que yo lo tuviera que ser también – le susurró al oído mientras terminaba de desabrochar la camisa, dejándola caer al suelo.
- A la mierda todo – le dijo atrayéndola con fuerza hacia él para besarla con fiereza, dando comienzo a un juego en el que ambos eran los únicos protagonistas.
La tensión se respiraba en el ambiente. El miedo y la preocupación se podía observar en el rostro de cada una de las personas presentes en le sala de reuniones de la comisaría 12th.
Los diversos inspectores que conformaban la plantilla de la comisaría se habían reunido junto a la capitana y los dos civiles para recibir las instrucciones del trabajo que se realizaría a partir de ese momento. Todos hablaban entre ellos esperando, con expectación, lo que Victoria Gates tenía para decirles.
- Os he mandado reunir porque tengo algo importante que deciros – dijo alzando la voz por encima de todos – Vamos a llevar a cabo una operación contra uno de los mayores narcotraficantes de Nueva York, Graimes Nicola – dijo enseñando la foto.
- Señor, ¿eso no le correspondería a los de narcóticos? - preguntó un joven de unos 25 años, esbelto, de tez blanca como la nieve y ojos negros como el azabache.
- Y así sería, Edward, pero a Graimes se le acusaron de más de una docena de asesinatos de los que salió absuelto y ahora es sospechoso de la muerte de otros dos. Nos corresponde a nosotros aunque para ellos debamos hacer un trabajo que es de los de narcóticos – Edward asintió y Kate pudo comprobar el respeto e incluso temor que Gates ejercía sobre sus inspectores – Voy a necesitar la colaboración de todos vosotros. Es una operación complicada, no puede haber un solo fallo, debéis tener vuestro cinco sentidos puestos en la escena – se produjo un pronunciado silencio en el que no dejaron de sucederse las miradas entre los inspectores que allí se habían agregado – Dicho esto, voy a pasar a explicaros como se va a llevar a cabo la operación. Gracias a la colaboración de los de narcóticos hemos podido averiguar el lugar donde Graimes y los suyos guardaban la mercancía antes de ser encarcelados. Obviamente, tras su salida de prisión, ese lugar quedó abandonado. Graimes cuidó muy bien su imagen para no ser relacionado nuevamente con el narcotráfico pero no cuidó lo más importante, sus hombres – dijo provocando un murmullo generalizado – Uno de ellos que, por temor a ser descubierto por Graimes,no ha revelado su identidad, ha llamado para darme la dirección del lugar donde guarda la droga.
- Un momento – dijo Richard dando un paso hacia delante - ¿Cómo sabía esa persona que buscábamos dar con el lugar donde Graimes guarda la droga? Parece como si supiese cuales eran nuestros movimientos.
- Eso es imposible, señor Rodgers. Nadie, salvo los que nos encontramos en esta sala, lo sabe. Me ha asegurado que quiere ayudarnos pero teme dar la cara. Aun así, he pedido que rastreen la llamada para ver si podemos sacar alguna información de quien es esa persona.
Richard asintió y volvió a su posición junto a Kate.
Una hora después de haber dado las indicaciones pertinentes, Gates salía de la comisaría flanqueada por Esposito y Ryan. Tras ellos, Kate y Richard caminaban protegidos por cuatro policías que no dejarían de vigilarlos en ningún momento para que nada les ocurriese.
Cuando llegaron al aparcamiento se dividieron. Gates junto con dos policías se fueron en un coche que fue seguido por Ryan y Esposito, que iban en otro vehículo conducido por este último. Por otra parte, Kate conducía su propio coche con Richard de copiloto en la dirección opuesta a los inspectores. Un vehículo de la comisaría los seguían a una distancia prudencial que evitara sospechas por parte de la población neoyorquina.
- No te preocupes Rick, estamos protegidos por cuatro policías que no nos van a perder de vista.
- Eso no hace que me sienta mejor, Kate. Si algo ocurriese...
- Que no va a ocurrir – le interrumpió.
- Pero si algo ocurriese, ellos no podrían evitarlo a tiempo si el ataque viene de Graimes o alguno de los suyos. Por muchos policías vengan con nosotros, estamos solos.
- Richard, saben lo que hacen. No nos habrían dicho que hiciésemos esto si creyesen que nos podría ocurrir algo. Confía en ellos, confía en mí. No nos pasará nada – le dijo mientras depositaba una de sus manos sobre las de él sin apartar la vista de la carretera.
Mientras Kate conducía, Richard llamó a Paula, la persona que años atrás había sido su compañera en la universidad y descubrió su pasión por escribir. Desde entonces, siempre le animó a que continuará ya que ella acabó siendo muy respetada como relaciones públicas, su verdadera vocación, y podía ayudarle a hacerse un hueco como escritor. Richard nunca le mencionó que tenía varias obras completas que no publicaba por inseguridad o, por qué no decirlo, por cobardía. Aun así, nunca habían perdido el contacto.
- Paula, soy Richard.
- Rick, que alegría me da oírte. Hace semanas que no sé nada de ti y empezaba a preocuparme ¿Va todo bien?
- De eso quería hablarte. Necesito pedirte algo.
- ¿Dé que se trata?
El trayecto hasta el loft les pareció muy largo, pese a ser el mismo por el que volvían siempre. Los nervios y la tensión soportada hacía que pareciese que el tiempo no pasaba.
Media hora después, Kate, con temor, aparcaba el coche frente al loft. Apesadumbrada debido a todo los acontecimientos ocurridos durante el día, Kate se sentía segura dentro de aquel vehículo junto a Richard. Quería acabar con toda aquella situación pero no podía evitar que el miedo antes lo que se avecinara. Se reprendió a si misma por dejarse acobardar justamente en ese momento que tan fría necesitaba mantener su mente. Richard la tomó de la mano viéndola abstraída en sus propios pensamientos y esta le sonrió antes de salir del coche del mismo modo que lo hizo él.
Una vorágine de paparazzis se agolparon a su alrededor, provocando que ambos se vieran acorralados. Richard apretó la mano con la que llevaba agarrada a Kate para que no se separase de él mientras caminaban hacia el loft.
- Señor Rodgers, ¿es cierto que su corazón ya está ocupado? - preguntaba uno poniéndole el micrófono para que contestase.
- ¿Qué nos puede decir acerca de los rumores que circulan últimamente sobre cartas amenazadoras y animales muertos que le han hecho llegar? - le preguntó otro realizando la misma operación que el anterior.
- Mi compañera y yo hemos pasado un mes bastante duro debido a todo ello así que, temiendo por nuestras propias vidas, hemos decidido dejar de investigar – contestó el doctor ante el insistente paparazzi.
Richard se apresuró y entró junto a Kate en el loft. Kate caminó hasta el sofá y se dejó caer en él. El doctor la siguió y la rodeó con sus brazos.
- ¿Crees que será creíble? - le preguntó Kate.
- Esperemos que así sea. De momento todo ha salido según lo planeado. Paula ha hecho un buen trabajo. No me esperaba que pudiese reunir a tantos paparazzis en tan poco tiempo.
- Voy a llamar a Gates para que ponga en marcha la segunda parte del plan – le dijo Kate mientras tomaba su móvil.
***
En otra parte de la ciudad, dos coches de policías se dirigían al lugar donde se llevaría a cabo la operación. Ryan y Esposito llegaban los primeros, seguidos de Gates y los dos policías.
- He recibido una llamada de la señorita Beckett – dijo la capitana acercándose a ellos.
- ¿Está bien? - preguntó Ryan preocupado.
- Si inspector, todo ha salido según lo planeado. Ahora nos toca a nosotros hacer nuestro trabajo.
- Yo entraré – dijo Esposito para sorpresa de su compañero y su superior.
- ¿Estás loco, bro?
- Esposito, no tiene por qué hacerlo. Es peligroso, a usted ya lo conocen. Tenemos personas preparadas para ello.
- Señor, puedo y quiero hacerlo.
- Está bien, pero llevará un micro. Si ocurre algo entraremos por usted.
- No ocurrirá nada. No es la primera vez que me infiltro en un grupo de narcotraficantes. Sé lo que hago – dijo Esposito muy seguro de sí mismo.
- Antes debemos esperar a que conteste a nuestra llamada. No vendamos la piel del lobo antes de cazarlo.
Los inspectores asintieron esperando que Graimes y los suyos no sospecharan del plan que tenían entre manos.
***
Parecía que su llamada a la comisaría había surtido efecto. Sin embargo, ahora, tras haberla realizado, tenía más miedo que antes. No se arrepentía de lo que había hecho porque sabía que era lo correcto, pero no dejaba de pensar que si por alguna razón las fichas del dominó caían, la suya sería derribada al inicio ya que se encontraba en primera línea de fuego. Cualquier otra persona temería por su vida, pero él no. Él temía más el castigo, la tortura a la que sabía que sería sometido de saberse su traición.
- Señor – dijo - ¿ha escuchado las nuevas noticias?
- ¿Te parece que tengo tiempo para sentarme a ver que dicen esa panda de buitres que se hacen llamar periodistas? - le preguntó aireado mientras se giraba en la silla de su despacho para encararlo – Si tienes algo que decirme, hágalo. Sino, deja de hacerme perder el tiempo.
- La actriz y su compañero han dicho que van a dejar de investigarnos. Al parecer surtió efecto el gato que les dejó en el loft.
- ¿Acaso lo dudabas? Mis planes nunca fallan. Aun así, todo esto me parece muy raro ¿Por qué lo han dejado justo ahora? Esto me huele muy mal.
- Señor, es lo que usted quería. Han dejado de investigar, eso es lo importante. No tenemos a nadie que nos vigile. Podemos volver a nuestras vidas.
- Tiene razón – dijo levantándose de la silla para acercarse a su hombre – Esto nos va a venir muy bien. Están esperando nuestra contestación para que les pasemos la mercancía por la frontera México. Ahora es el momento.
El teléfono de su despacho comenzó a sonar.
- Graimes Nicola.
- ...
- ¿Cien kilos? ¿Para qué quiere una cantidad tan grande?
- ...
- ¿Me está diciendo que no confían en que les llegue y nos quedemos con ella? ¿Saben con quien están tratando? Yo no me quedo con lo que no es mio, deberían saberlo.
- ...
- Ya sé que usted sólo cumple órdenes. Dígale al señor Márquez que dentro de unas horas tendrá ese adelanto que me ha pedido – dijo antes de colgar.
Graimes comenzó a dar vueltas por su despacho llevándose las manos a la cabeza. Con furia, golpeó la mesa provocando que su hombre se sobresaltase.
- ¡Joder! ¡Maldita Kate Beckett! Ha estado a punto de arruinarme la venta de la mercancía.
- Pero, ¿sigue en pie? - le preguntó para no levantar sospechas aunque él ya imaginaba la respuesta.
- Sí, sigue en pie, aunque dudo que ahora quieran discutir el porcentaje que me deben por esa merca – volvió a llevarse las manos a la cabeza – Esa mediocre actriz me las va a pagar. Te juro que me las pagará.
***
- Señor, ha picado. Graimes Nicola se ha creído la llamada. Parece ser que la persona que le aviso sobre el lugar donde guardaba la droga y la operación con la frontera de México que se llevaría a cabo es fiable – le dijo Esposito a Gates – En una hora estarán aquí con la droga.
- De acuerdo – se giró y se dirigió a los policías de la comisaría que habían pedido como refuerzo al llegar allí – Necesito que rodeéis al almacén pero que os mantengáis fuera de la vista de todos. Estad atentos a mis órdenes – todos asintieron y se encaminaron a hacer lo que Gates les había dicho – Tenga cuidado inspector – le dijo a Esposito mientras se giraba y le daba un micro y un pinganillo que les permitiría a ambos comunicarse.
Una hora después, tal y como Espósito había asegurado, dos porsches negros con los cristales tintados hacían su aparición en el almacén. Esposito le hizo un gesto a Gates para que supiese que a partir de ese momento comenzaba la operación. El inspector rodeó el almacén y se dirigió tres metros al norte, donde la habían dejado un coche para hacerle creer a Graimes y los suyos que había llegado en él. Condujo hasta la puerta del almacén y entonces se abrió, permitiéndole introducir el coche. Una vez dentro, aparcó y se bajó.
Cuatro hombres con trajes de chaqueta rodearon el coche cuando el inspector bajó de él. Puesto que Graimes ya lo conocía del interrogatorio que le realizó junto a su compañero, Esposito se había colocado una peluca rubia con melena lacia y se había puesto lentillas de color azul. Además, llevaba un pendiente en la oreja izquierda y una gorra con la visera hacia atrás. Se había puesto un pantalón vaquero ancho y una camisa negra ajustada de maga corta. El resultado era asombroso. Nadie diría que esa persona era la misma que día a día luchaba contra el crimen.
- Señor García – dijo Graimes separándose de la formación aludiendo a Esposito con el apellido inventado que este le había dicho por teléfono - Bienvenido a nuestro país
- Gracias señor – dijo tratando de imitar el acento mexicano – Si no le importa, preferiría ir directamente al grano. Mi jefe espera mi llamada – le dijo para acelerar el proceso.
- Lo entiendo, es comprensible que no confíe en mí – le dijo Grames invitando al inspector a caminar a su lado – Pero créame, no tiene por qué dudar. Mi hombres han traído la mercancía – dijo haciendo un chasquido con los dedos. Inmediatamente los tres hombres que habían acompañado a Graimes se dirigieron a los coches y sacaron dos maletas. Graimes les hizo un gesto con la cabeza y los tres hombres abrieron las maletas, haciendo visible la droga – Ya le dije que yo no me quedo con lo que no es mio.
- Ya veo, pero después de todo lo que circula últimamente a su alrededor, mi jefe no podía fiarse. Lo que se dice por ahí de usted no es nada bueno para este trabajo.
- ¿Y qué se dice si se puede saber? - pregunto Graimes.
- Ya sabe. Que hay una actriz que con ayuda de la policía lo está poniendo en evidencia al intentar destapar lo que hace.
- Bueno, ya no hay por qué preocuparse de eso. Esa malnacida no volverá a molestarme. La policía ya no es un problema para mí.
- ¿Está usted seguro? - le preguntó.
Inmediatamente las puertas del almacén se abrieron dando paso a una veintena de policías.
- ¡Que nadie se mueva! - gritaba Ryan.
Esposito se deshizo de la gorra, la peluca y el pendiente.
- Sus problemas con la policía no han hecho más que empezar – le contestó a Graimes mientras este se resistía a que le colocase las esposas – Graimes Nicola, queda detenido por posesión de marihuana y narcotráfico.
Uno de los policías se llevó a Graimes al coche de la comisaría y el resto de policías hicieron lo mismo con los otros tres hombres.
Ryan se acercó a Esposito y le dio una palmada en la espalda.
- Buen trabajo Esposito.
- Ha sido más fácil de lo que esperaba. Graimes ha cantando La traviata. Tenemos que encontrar pruebas que los relacione con los asesinatos. Ese maldito cabrón no se puede ir de rositas.
- Lo encontraremos.
- Esposito – dijo la capitana acercándose a él - ¿Se puede saber a que jugaba?
- ¿A qué se refiere?
- No me vengas con esas, no soy estúpida ¿Qué intentaba? Ya lo teníamos con la droga ¡Podría haberlo descubierto! - le dijo irritada ante el comportamiento del inspector.
- Intentaba que hablase. Intentaba sacarle una confesión pero parece que no está dispuesto a hablar tan fácilmente.
- No vuelve a desobedecerme nunca más. No quiera saber de lo que soy capaz si se desacata mis órdenes – le dijo antes de salir del almacén y montarse en su coche.
- Por una vez estoy de acuerdo con la dama de hierro. Hemos estado muy preocupados hay fuera – le dijo señalando el exterior del almacén – Si Graimes te hubiese descubierto, las cosas se hubiese puesto muy feas.
- No ha sucedido nada, sabía lo que hacía. Tenemos que llamar a los chicos. Se alegrarán de saber que lo peor ya ha pasado.
***
- Lo tienen – dijo Richard acercándose a Kate que preparaba la cena – Estamos a salvo.
Ésta se giró y lo rodeó con sus brazos. Richard depositó sus brazos en la cintura de ella y la besó.
- Tengo una idea – le dijo Kate en sus labios - ¿Qué te parece si lo celebramos?
- Aunque tu propuesta suena de lo más tentadora, debo recordarte que aun sigues con las curas.
- Vamos, Rick, ya no me duele y sé que tú cuidarás de mí.
- Alguien debe mantener la cordura y aunque suene irónico, seré yo quien lo haga.
- ¿Estás seguro? - le preguntó mordiéndose el labio - ¿Crees que serás capaz de mantener la cordura si hago esto? - le preguntó mientras comenzaba a desabrocharse la camisa dejando al descubierto uno de sus hombros.
- Kate, por favor, no lo hagas.
- Dijiste que tú serías el sensato, pero no dijiste que yo lo tuviera que ser también – le susurró al oído mientras terminaba de desabrochar la camisa, dejándola caer al suelo.
- A la mierda todo – le dijo atrayéndola con fuerza hacia él para besarla con fiereza, dando comienzo a un juego en el que ambos eran los únicos protagonistas.
Última edición por Beckett_Castle_Alba el Jue Abr 25, 2013 9:04 am, editado 1 vez
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