Me voy a Washington ¿Si o no?/Cap. 9 /29-09-13 (Terminado)

No lo sigues

Solo deciros que en estoy en mi casa de la playa y allí no tengo internet y encima poca cobertura y he aprovechado hoy que estoy en mi casa para subir capi.
Muchas gracias por todos los comentarios.
Espero que os guste, ha llegado el momento esperado por todos, a mi no me termina de gustar como me ha quedado.

Cap.5

-Castle.-dijo cansado, descolgando su móvil.
-Castle, el triple asesino ha vuelto a matar.-dijo Esposito más despejado que su compañero.
Rick se levantó rápidamente de la cama y poniendo el altavoz, empezó a vestirse.
-Dime la dirección voy a ahora mismo.
Estaba agotado no había dormido bien, pensando en Kate.

Llevaba apenas unas horas que había conseguido quedarse dormida cuando su móvil comenzó a sonar.
-Beckett.-Contestó-Voy ahora mismo.-dijo poniéndose de pie.-Si en media hora bajo.
Kate se vistió rápidamente y con cuidado se tapó como pudo sus ojeras.
Había pasado toda la noche pensando en Rick y en todo lo que había pasado entre ellos hasta la noche anterior.
Bajó al portal y vio a Dave apoyado en un todo terreno negro.
Se saludaron.
-Por fin, nos lo han prestado.-Sonrió abriéndole la puerta del copiloto pero Kate giró y se subió en el conductor.
Los del FBI les habían dejado un coche al estar los suyos en Washington y se lo habían dejado la noche anterior en el hotel a Dave.
-Siempre al mando.-Bromeó sentándose en el asiento del copiloto.
Pero Kate no le siguió el juego, estaba seria y tensa, como siempre que iba a ver un cadáver, pero esta vez sería peor.

Como había adivinado fue peor que otras veces, tuvo que mirar dos veces el cadáver porque al llegar a la escena del crimen y ver el cuerpo había sentido que le fallaban las piernas al ver el parecido con Castle.
Al ver a este acercarse no pudo evitar, aguantando las lágrimas, rodearle el cuello y abrazarlo con desesperación. Rick la abrazó también con fuerza.
-Tranquila, estoy bien.-Susurró para que solo ella pudiera oírlo.
Todos miraron la escena sorprendidos y enternecidos, ya que aunque fuera el tercer cadáver que veían con parecido a Rick, las victimas tenían mucho parecido y a todos les impactaba.
Al ver el espectáculo que estaban dando delante de todos, se separaron sin mirarse a la cara.
-Lanie, cuéntanos.-dijo Kate tratando de parecer tranquila.
-Hombre blanco de cuarenta y pocos. El mismo procedimiento que las victimas anteriores, dos disparos, uno en cada rótula.-dijo señalando los lugares.-Y luego le estranguló con una cuerda.-dijo indicando la marca del cuello. Tiene signos de forcejeo. El mismo patrón y la misma conducta como ya he dicho, todo igual.-dijo cubriendo el cadáver.-Por la temperatura corporal y palidez, murió de la madrugada antes de las tres, cuando sepa una hora más exacta os aviso.
-Gracias Lanie.
-Chicos, un testigo vio a un hombre salir del callejón corriendo y se subió a un coche.
-¿Vio la matricula?
-No, dice que estaba muy obscuro. Pero me ha dicho el modelo de coche.-dijo mientras miraba el cuadernillo.
-En esta zona hay cámaras-dijo mirando a su alrededor.-Pediré que nos pasen las grabaciones de las horas del asesinato, cuando Lanie nos las aclare..-dijo Dave alejándose mientras llamaba por su móvil.

Se sentaron alrededor de la pizarra cuando volvieron a la comisaría.
Habían averiguado que la última victima se llamaba Jack Horton, era abogado y soltero. Tenía 43 años y era respetado en todos sus círculos. La única relación con las anteriores víctimas era el parecido físico con Castle y su edad parecida.
Kate apuntaba en la pizarra los datos nuevos. Sentía que volvía a hacer algo cotidiano y eso le encantaba, le encantaba volver a escribir en su pizarra.
-Ya están los videos de las cámaras de seguridad.-dijo Ryan asomando la cabeza desde la sala.
Todos fueron a la sala. Lanie le había confirmado que la muerte había sido sobre la una o dos de la madrugada.
Esperaron y pudieron ver como un hombre salía de un callejón y se montaba rápidamente en el coche que había descrito el testigo.
-Tenemos la matricula.-dijo Ryan recortando la imagen del coche para ampliarla y luego la imprimió.
-Ryan pasa la foto y que busquen el coche.-Pidió Kate mientras daba vueltas por la sala.
Este obedeció y salio de la sala con la foto en mano.
-Detective puede venir.-dijo un agente a Esposito. Este también salio de la sala.
-Pues ya tenemos el coche, parece que no será tan difícil cogerlo.-Dave se calló al ver a Kate. -¿Kate que ocurre?
-Ocurre que el triple asesino no comete estos fallos, el prepara minuciosamente sus asesinatos y no deja cabos tan grandes sueltos.-dijo con rabia Rick mirando fijamente la imagen del coche.
Los tres quedaron en silencio.
-Beckett, Castle.-dijo Esposito acercándose.-Tenéis que ver esto.-dijo entregándoles un sobre manchado de sangre.-Estaba con las cosas de la victima por eso los técnicos no nos lo han dado antes. Castle va dirigida a ti pero también a Kate.
Este abrió el sobre y Kate se puso a su lado.

“Castle, ya eres culpable de otra muerte ¿Qué se siente? No te preocupes, que pronto nos veremos las caras y serás tú la nueva víctima.
Inspectora, me gusta que haya vuelto, Ricky ha estado muy triste sin usted, otra vez junto el equipo, esto está cada vez más interesante. Para ti tengo también una sorpresa, es precioso. Cuídalo muy bien.”

-Kate-dijo Rick girándose hacia ella. Pero está ya salía corriendo de la sala.-Kate ¿Adonde vas?-La llamó pero ella no le respondió.


Sentía que no podía respirar, se apoyó en la pared del ascensor. Cuando salió de este fue corriendo a la calle y paró un taxi.
-Al aeropuerto, por favor.-Pidió al taxista intentando recomponerse.

Rick que había bajado corriendo las escaleras, casi cayéndose por ellas, la vio alejarse en el taxi. Muchas ideas se agolpaban en su cabeza y se sentía mareado. Tuvo que enterrar esos pensamientos y arrugando la nota en su puño, volvió a subir a la comisaría.

-¿De verdad? ¿Estás segura?-Preguntó Kate sin poder respirar.
-De verdad Kate, Alexander está perfectamente, ahora estamos en la guardería y dentro de un par de horas vamos a casa. ¿Ha ocurrido algo?-Preguntó mirando al niño, quién jugaba con otros en el parquecito.
-Cuando llegue te cuento.-dijo mientras le entregaba a la azafata el pasaporte y la tarjeta de crédito.
-¿Entonces, estás bien?-Preguntó preocupada.
-Ahora si.-Suspiró.-En un par de horas estoy en tu casa y hablamos.-dijo recogiendo la tarjeta de embarque y el resto de cosas.
Kate colgó y fue a la cafetería a tomar algo hasta la hora del embarque. Necesitaba una tila.

-Poner una patrulla a buscar el coche, es lo único que tenemos.-Gruñó Rick mientras añadía la foto del coche a la pizarra.
Ryan y Esposito se alejaron a hacer su trabajo.
-Howe.-dijo Rick acercándose a este y entregándole la arrugada nota. -¿Qué significa las últimas palabras? ¿Porqué Kate se ha marchado así?-Pregunto enfadado.
-No soy yo quien debe aclarártelo, sino Kate.-dijo encogiéndose de hombros.-Ahora voy a coordinar la patrulla, que para eso es el FBI quien lleva el caso.-dijo molesto entregándole la nota y acercándose a Ryan y Esposito.
Rick arrugó a nota con toda la rabia que sentía.

-Mi amor.-dijo abrazando a su hijo con lágrimas en los ojos.
El niño empezó a reír, feliz por ver de nuevo a su madre. Kate le llenó la cara de besos dejando su pintalabios en el rostro de su hijo.
-Sentémonos.-dijo Sam, llevándola al sofá.
Kate se sentó con su hijo en su regazo y limpiando su carita con un pañuelo.
-Ves, está bien.-Le sonrió mirando a ambos. -¿Qué ha pasado?
En ese momento el móvil de Kate empezó a sonar. Sin soltar a su hijo, sacó el móvil.
-Dime Lanie.-Contestó más tranquila.
-¿Katie que ha ocurrido? Javi me ha dicho que has salido corriendo de la comisaría ¿Tiene algo que ver con la nota?-Preguntó preocupada.
-Espera.-dijo y puso el altavoz.-Lanie, esta es Sam. Sam al otro lado del teléfono esta Lanie, mi mejor amiga.-Las presentó.
-Encantada.-dijeron ambas a la vez.
-Ahora os cuento.-dijo mirando a su amiga y su móvil.-El triple asesino, le ha dejado una nota a Richard con el último cadáver, en ella también me hablaba a mi.-Ambas mujeres contenieron el aliento.-En ella mencionaba a Alexander.
-¡Richard se ha enterado!-dijeron ambas mujeres a la vez.
-No…creo que no.-Pensó.-No ha dicho claramente que tengo un hijo. Me ha dicho que era precioso y que lo cuidara. Además no me ha dado tiempo a que me preguntara al ver la nota me he ido al aeropuerto.
-Blanco y en botella.-dijo Lanie.
-Vas a tener que dar muchas explicaciones cuando vuelvas.-Aseguró Samantha.-Sobre todo a Richard.
Las tres soltaron un suspiro.
-Yo os dejo, tengo autopsias que hacer. Me alegra saber que ambos estáis bien ¿Nos vemos esta noche Kate? Yo llevo la cena que muero por conocer a mi sobrino.
-Claro.
-Pues encantada de conocerte Samantha.-dijo Lanie despidiéndose.-Kate nos vemos esta noche.
-Igualmente.
Kate y Lanie colgaron.

-La patulla y los policías ya están informados.-dijo Dave al equipo.-Ahora vamos a averiguar de donde saco ese cabrón el coche. Ryan y Esposito buscar donde lo compró, alquiló o robo, seguir la matricula. Seguramente será robado o no lo ha comprado él pero vamos a averiguarlo.
Ambos afirmaron y se sentaron en sus mesas para empezar la investigación.
-Kate debería llevar la investigación ¿Dónde está?-Preguntó Rick molesto, acercándose a Dave, no le gustaba que él, les mandara.
-No lo sé.-dijo cruzándose de brazos, no le gustaba la actitud de Richard.
-No me gusta nada ese encubrimiento que tenéis.
-Pues a mi no me importa que te guste o no. Díselo a ella.-dijo girándose y dejándole con la palabra en la boca mientras se acercaba al resto.
Rick se sentía agobiado e histérico por los últimos acontecimientos. Este decidió que lo mejor era dejarse de dar vueltas y hablar con ella. Necesitaba salir de dudas.


Kate empujando la silleta de Alexander, que iba cargada de cosas mientras a él, lo llevaba en un porta-bebés.
-Ya mi amor ya hemos llegado.-dijo al pequeño que hacia ruiditos para demostrar lo cansado e incómodo que estaba.
Lo sacó y dejando las cosas en la entrada después de cerrar la puerta, y se sentó en el sofá con su hijo en brazos.
-Te quiero tanto mi amor.-Le susurró dándole besitos por todo el rostro.
Le montó la hamaca que había comprado y lo puso en ella mientras colocaba las cosas de su hijo y terminaba de montar la cuna de viaje y el parquecito.
Su móvil sonó y fue rápidamente a por él.
-Hola Dave.-Contestó mientras se secaba el sudor.
-Kate ¿cómo estás?-Preguntó preocupado.
-Me he asustado mucho por la nota y he ido a Washington a por él, ahora estoy en mi antiguo departamento, siento haberme ido así. Lo dejó en un rato con mi padre y voy.
-No te preocupes, estamos buscando el coche, así que hasta que no lo sepamos no hace falta que vengas, nos vemos mañana. Tú tranquila que ya me encargo yo de todo, descansar.
-Gracias.-dijo colgando.
Iba a dejar el móvil en la mesita cuando decidió llamar a su padre.
-Papá-dijo acercándose a su hijo.
-Hola Katie. Dime.
-Dile algo al abuelo.-dijo haciéndole cosquillas a su hijo mientras ponía el altavoz.
El niño hizo unos gorgoritos sonriendo.
-Hola pequeñajo, tengo muchas ganas de verte.
-¿Papá, mañana puedes quedarte con él?-Preguntó sentándose en el sofá con su hijo en brazos.
-Claro. Estoy deseando verlo, Katie os tengo que dejar que voy a entrar en una reunión, nos vemos mañana a las nueve. Os quiero.-dijo antes de colgar.
-Mañana vas a estar con el abuelito.-Sonrió haciendo cosquillas a su hijo.
Volvió a dejarlo en la hamaca y empezó a prepararle una papilla de frutas para merendar cuando el timbre sonó.
-Voy.-dijo Kate despreocupadamente abriendo la puerta con la papilla en la mano y el babero en la otra.
Se quedaron en silencio.
Rick pasó su mirada por ella y vio lo que llevaba en las manos, confirmando sus sospechas. Tragó con dificultad y Kate sintió que se había quedado muda.
Kate se dio cuenta que había llegado el momento de la verdad. De que sus amores se conocieran.
Alex empezó a hacer ruiditos desde la hamaca, reclamando su merienda.
Los adultos se miraron.
Rick entró en silencio y fue hasta donde provenía el sonido, sorprendiéndose más de lo que ya estaba al ver al bebe.
Kate asustada siguió sus pasos, dejó las cosas en la mesita y cogiendo en brazos a su hijo el cual se estaba impacientando por el hambre, se sentó con él en el sofá y le puso el babero. Luego lo abrazó de forma protectora y lo beso en la cabeza. Con cuidado le dio la primera cucharada de papilla.
-¿No piensas decir nada?-Preguntó Rick atónito, sentándose enfrente de ellos.
Kate lo miró con lágrimas en los ojos y un nudo en la garganta y besando la frente a su hijo siguió con su tarea.
-Yo, cuando he leído la nota y tú has salido corriendo, me he imaginado cualquier cosa. Me ha destrozado por dentro pensar que tenías un hijo con otro. Me esperaba encontrar un bebé de apenas unos meses o un niño como este y por eso fue uno de los motivos por lo que te fuiste, por tener una aventura con otro y miedo a darme la cara.-Kate miró a Rick dolida por sus pensamientos, mientras le limpiaba la boquita a su hijo y besando la frente de su hijo se acomodó en el sofá con él en brazos. Rick se puso de rodillas delante de ellos y le acarició el rostro a su hijo, quién sonrió.-Pero luego he visto a esta cosita que es tan clavadito a las fotos del bebe que tiene mi madre.-Sonrió con lágrimas en los ojos.
Alexander sorprendiendo a ambos estiró los brazos a su padre y este lo cogio en brazos encantado. Llenándole la cara de besos.
El corazón de Kate dejó de latir unos segundos al ver tan tierna escena, Kate empezó a llorar.
-¿Desde cuando sabias que estaba embarazada?-Preguntó Rick sentándose enfrente de ella con su hijo en brazos.
-Me enteré el mismo día que subí al avión.-dijo sin dejar de llorar. Ya no podía aguantar más, tenía que contarle todo lo referente a su hijo. Cogio un par de servilletas sobrantes de limpiarle la cara a su hijo y se secó los ojos.
-¡Y no me has dicho nada!-Acusó desviando la mirada de su hijo y cambiando la mirada dulce y paternal por una fría para Kate.
-Iba a decírtelo cuando paso lo de Gina.-Explicó mientras se secaba los ojos, no podía dejar de llorar.
-¿Y en este año no se te ha ocurrido volver a intentarlo?-Preguntó con rencor.
-Rick he estado infiltrada en un caso y apenas he tenido contacto con el exterior, además la noche que Alexander…
-Se llama Alexander.-Interrumpió mirando los preciosos e iguales ojos que tenía su hijo con los suyos.
-Si.-Aseguró.-La noche que nació te deje un mensaje en el contestador de tu móvil.-dijo recordando el momento.
-Yo no he visto ningún mensaje.-dijo seguro de sus palabras.
-Te juro que te lo deje.
-¿Qué día nació?-Preguntó mirando a su hijo.
-El 20 de enero. Tiene 5 meses.-dijo mirando con orgullo a su hijo que ahora jugaba con los botones de la camisa de su padre ajeno a la conversación de sus padres.
Rick se puso de pie con su hijo en brazos mientras hacia memoria y sacó su móvil para mirar su agenda.
-Ese día me deje el móvil en la editorial, me acuerdo porque había quedado con Alexis para ir al cine y al salir de la fiesta de despedida por las prisas se me olvido el móvil. Al día siguiente me lo llevó Gina.-dijo haciendo memoria.
Ese día para celebrar las grandes ventas de su último libro, aunque había dejado de escribir la editorial le preparó una fiesta.
-Gina, siempre Gina.-dijo poniéndose de pie enfadada.
-¿Crees que borró tu mensaje?-La animó a seguir.
-Rick, te juro por Alexander que es lo más importante que tengo, que el día que nació te mande un mensaje. Gina lo borró quien sino lo podría haber hecho.-Acusó enfadada.-Pregúntale.
Se quedaron en silencio.
-No se que decirte, no puedo creer que no me hayas dicho que teníamos un hijo sabiendo que era lo que siempre había querido.-dijo mientras se sentaba de nuevo sin soltar al pequeño.
-¿De verdad?
-Claro.
-Y yo que iba a saber si nunca hablamos de hacia donde iba nuestra relación.-dijo a la defensiva.
-Kate, yo quería casarme contigo, tener hijos, puede que no dijéramos nada, que no lo habláramos pero era lo que quería.-dijo con tristeza.-Puedo entender lo de la misión pero podías haberlo intentado más veces.
-Después de creer que te importaba una mierda, que por eso estabas con Gina, que por eso no me habías contestado. Yo pensé que habías escuchado el mensaje y por eso no insistí, si no querías saber nada de mi, no tenias porque querer saber nada de mi hijo.
-¡Nuestro hijo!-Le espetó.
Intentaban no levantar la voz por el niño, aunque les estaba costando a ambos.
Se quedaron en silencio. Kate recogió lo usado para darle la merienda a su hijo y lo llevo a la cocina, aguantando las ganas de volver a llorar se puso a fregar los platos mientras Rick con su hijo en brazos miraba a Kate que le daba la espalda.
Rick se dio cuenta que Kate estaba otra vez llorando y no pudo evitar desmoronarse, ella era tan fuerte y ahora se veía tan frágil y deshecha.
Se acercó a ella le cogio del brazo con suavidad para que dejara de fregar.
-Kate, para.-dijo moviendo el pulgar para acariciarle la muñeca.
-No puedo creer que estemos así por una serie de confusiones.-dijo Kate con rabia sin controlar las lágrimas.
Sin mirarlo besó a su hijo quien se removía en brazos de su padre notando el malestar de su madre.
-No, estamos así porque tú te fuiste y me dejaste.-Le recordó sin poder aguantarse Rick.
Kate hizo un movimiento brusco con el brazo para soltarse de su agarre y cogio el paño para secarse las manos.
-Tú me diste un ultimátum, era una gran oportunidad. Podías haber venido conmigo. Esperaba que lo hicieras.-Sollozó.-Yo nunca dije que elegía entre ambas cosas, fuiste tú quien dijo que no eran compatibles, en vez de haberte arriesgado y haber hecho que la relación seguida.
Rick se quedó helado por la confesión. Dejó al niño en la hamaca, estaba muy alterado y no quería transmitírselo a su hijo y alterarlo también.
-El día que me subí al avión me sentía confusa, esperaba que fueras a buscarme al aeropuerto y me dijeras que te venias conmigo o incluso que me quedara y en ese momento te habría dicho que si a todo.-dijo secándose las lágrimas con el puño.
-Estaba allí ¿Sabes?-Confesó recordando el amargo momento.-Pero no me atreví porque te mereces el trabajo que tienes, eres una gran profesional y si te hubieras quedado nunca nos lo habríamos perdonado.-dijo con tristeza.
Volvieron a quedarse en silencio pero esta vez mirándose a los ojos. Rick se acercó a ella quedando a escasos centímetros.
-Me confundes, parece que no te importara una mierda, pero luego vas y le pones mi nombre a nuestro hijo.-dijo Rick tocándose el pelo.
-Me recuerda tanto a ti.-dijo desviando la mirada a su hijo, quien mordía un juguete mientras su hamaca lo balanceaba.-Cada vez que veo sus ojos, me recuerda a ti, al nacer tenía los ojos más claros, como Alexis pero se le oscurecieron, ahora tiene tu mirada y tus ojos.-Susurró.
-¿Por qué le has puesto mi segundo nombre?-Preguntó mirando a su hijo y después a Kate.
-Me gusta el nombre.-dijo sin más, desviando su mirada.
Rick la miró con su mirada de no creerla.
-Es cierto, me enamoré del nombre cuando me dijiste que era tu segundo nombre antes de cambiártelo. El siempre será una parte de ti y en cierta manera era como confirmarlo al ponerle tu nombre.
-Pero así nunca te olvidarías de mí.-dijo casi pegándose a ella.
-¿Quién ha dicho que quiera?-dijo acercándose más, ruborizada por la confesión que acababa de hacerle.-Nunca podré dejar de quererte.-dijo sin creer lo que acababa de decir. Intentó echarle la culpa a la cercanía pero sabía que había dicho lo que de verdad sentía su corazón, ya era hora de dejar los miedos, mentiras, conversaciones vacías a un lado y decir las cosas que sentía, creía y necesitaba su corazón.
Con el corazón a mil, por su confesión se acerco su rostro a ella pero esta le ahorro la mitad del trabajo y también se acercó, fundiéndose ambos en un lento beso.
-Yo tampoco.-dijo sobre sus labios.
-¿Tú tampoco…?-Sonrió rodeándole el cuello con los brazos.
-Yo tampoco podré dejar de quererte, nunca.
Se besaron lentamente, degustando sus bocas mientras sus manos rodeaban sus cuerpos.
Se separaron al escuchar los ruiditos y risitas de su hijo.
-Esta mañana has ido por él a Washington, por eso has salido corriendo por la nota.-dijo acercándose a su hijo ahora sonriendo.
-Si.
Rick se arrodillo delante del niño.
-Ven con papá cariño.-dijo haciéndole cosquillas, provocando la risa del pequeño. Cogio a su hijo en brazos y se sentó con él en el sofá. Tenía los ojos húmedos por la emoción que sentía. Era padre de nuevo, de un precioso niño clavadito a él y su madre era la mujer que más había amado y no había podido dejar de amar.
-Rick, tengo miedo, no se como pero Jerry Tyson ha averiguado que tengo, que tenemos un hijo.-dijo sentándose al lado de ellos.
Rick pasó un brazo por sus hombros y la abrazó. Quedando los tres acurrucados y abrazados en el sofá.
-Te juro que no os va a pasar nada. No lo voy a permitir.-Susurró mientras le besaba la frente.-Ahora me encantaría que me contaras cosas sobre nuestro hijo y el famoso caso que te ha tenido tan separada del mundo.

Kate le contó todo lo que había pasado en ese año que no se habían visto. Estaba anocheciendo cuando el móvil de Kate sonó.
-Beckett.-Contestó.
-Hola guapa. En menos de una hora estoy allí.-dijo una feliz Lanie.
-Pues la verdad…-No sabía como decirle que estaba con Rick.
-¿Ocurre algo?-Preguntó preocupada.
-Es que Rick está aquí…
-No digas más.-dijo emocionada.-Mañana hablamos, pero me debes una comida con mi sobrino.
-Eso está hecho.-Sonrió.
-Pasároslo muy bien.-dijo de forma sugerente y colgó.
Kate colgó sin dejar de sonreir.

PD: Intentare como mínimo subir otro capi antes de irme.

Me a encantado la conversación
Continua pronto
Nos vemos:hi: 

Siiiiii porfaaaa me encantaaaa

Muy lindo el capítulo, que bueno que se ha arreglado
Todo, que estan felices y que por fin Rick sabe que tiene
Un hijo con Kate, sigue

Muchas gracias por comentar, me alegra que os haya gustado.

Aquí tenéis el siguiente capitulo. Se acerca el final.



Cap.6

Kate pidió la comida a su italiano favorito. Mientras esta preparaba el puré de verduras y pollo para Alex, Rick jugaba con su hijo en la alfombra.
-Este niño es adorable y muy listo.-dijo mientras alzaba a su hijo provocándole la risa.
-Igual que su padre.-dijo apagando el fuego.
Ambos se dedicaron una dulce sonrisa.
-¿Me dejas dárselo yo?-Pidió Rick con el niño en brazos.
-Claro, no tienes que pedírmelo. Es tu hijo.-dijo entregándole el bol y el babero.
-Si, es mi hijo.-dijo con una sonrisa de oreja a oreja mientras le colocaba el babero.
El timbre sonó y Kate fue abrir al repartidor.
Mientras Rick le daba la cena, Kate puso la mesa para cenar ellos.
-Puedes dejarlo en la hamaca mientras cenamos.-dijo Kate sentándose en la mesa.
-Me cuesta mucho dejar de tenerlo en brazos.-dijo sentándose en la mesa con el niño en su regazo quien se acurrucó en su pecho cansado.
Kate se limpió disimuladamente una lágrima pero no pudo controlarse y cogió un pañuelo.
-Siento todo lo que ocurrió, debí hablar contigo cuando fui a verte, en vez de salir huyendo.-dijo secándose las lágrimas.
A Rick se le encogió el corazón. Fue hasta ella con el niño en brazos, le beso la cabeza dulcemente y sentó en la mesa de nuevo, enfrente de ella.
-No pienses más en eso.-Sonrió.-Eso es pasado y ahora no pienso separarme de este pequeño nunca más.-dijo besando a su hijo.
Ambos se quedaron en silencio pensando en como iban a solucionar eso, ahora que no estaban en la misma ciudad, pero ninguno tenía ganas de hablar ese tema ahora. Cada uno tenía su idea de lo que podía pasar.
-¿Cuándo vas a decírselo a Alexis y Martha?-Preguntó Kate mirando a ambos.-Me van a odiar más de lo que ya lo hacen.
-Ellas no te odian Kate, te quieren mucho.
Kate alzó una ceja, indicando que no le creía.
-Vale puede que Alexis este algo enfadada, pero se le pasara. No sabes las veces que de pequeña me pidió un hermanito, pero yo no quise cometer otra vez el error.
-¿De tener otro hijo?
-Sabes que no. Casarme con la persona equivocada. Le dije que si alguna vez me enamoraba irremediablemente tendría otro hermanito y otra mamá, además de Meredith.
-Siento que no hayas cumplido eso.
-¿Bromeas? Puede que las circunstancias no sean con las que pensaba al tener otro hijo pero te aseguro que estoy irremediablemente enamorado de la madre de mi hijo.-Sonrió cogiendole la mano y besándosela dulcemente.
Kate no pudo contenerse y cogiendole el rostro le dio un largo beso en los labios.
Se quedaron en silencio, mientras bebían vino.
-¿Te gustaría venir mañana a cenar a casa con Alex? Me gustaría que el niño estuviera presente cuando se lo contara.-dijo mirando a su hijo que se le entornaban los ojos.
-Si quieres puedo llevártelo, yo no…
-Pues claro que debes estar.-Aseguró besándole de nuevo la mano.

Terminaron de cenar. Alex se había quedado durmiendo en brazos de su padre y mientras su madre lo cambiaba y metía en la cuna, Rick fregó los platos.
Kate salió del dormitorio con el pijama puesto cuando Rick terminaba de fregar los platos.
Se quedaron mirando sin saber que hacer.
-Puedes quedarte a dormir, si quieres, creo que en tu cajón todavía tienes ropa.
-¿Sigo teniendo mi cajón?-Preguntó dándole un vuelco el corazón.
Kate afirmó y Rick con una sonrisa radiante entró en el dormitorio a por su pijama.
Al ver a su hijo en la cuna no pudo resistirse y le dio un suave beso en la frente.
Kate apoyada en el marco vio el momento con una sonrisa radiante. Era tal y como ella había imaginado esos momentos.
-Dormiré en el sofá.-dijo Rick acercándose a ella para salir del dormitorio y fue al baño antes de que Kate dijera nada.
Kate suspiró y viendo que su hijo dormía plácidamente se metió en la cama.

Kate se despertó con el llanto de su hijo pero justo cuando iba a poner un pie fuera de la cama, Rick ya estaba con Alex en brazos intentando volver a dormirlo. Se quedó mirándolos en silencio pero el niño no se dormía.
-Ven, mira, le gusta dormirse así también.-dijo cogiendo al niño y tumbándolo en la cama.
Kate se tumbo a un lado y Rick al otro, dejando Alexander en medio. Esta empezó a hacerle masajitos por la barriga, extremidades y rostro calmando al niño.
Rick los miraba embobado. Alex tardo poco en dormirse pegado al cuerpo de su madre.
Con la tranquilidad y silencio ambos también cerraron los ojos intentando dormir.
-Kate.-Susurró Rick acercándose más a ella. -¿Estás dormida?
-No.-dijo en el mismo tono de voz.-Me cuesta dormirme.-dijo sin abrir los ojos
-A mí también, por ti.
-¿Por mi?-dijo abriendo los ojos y chocando con los de Rick.
Rick se acercó un poco más y con extrema suavidad acarició a su hijo.
-Kate cuando decías que nunca podrás dejar de quererme, ¿Tú quieres olvidarte de mí?
Kate se acercó su cara la de él y acariciándole el rostro, lo beso con suavidad.
-Rick que me fuera a Washington no quiso decir que no te quisiera. Te quiero.
-Yo también te quiero.-dijo besándolo ahora a él.-Cuando decía que no quiero separarme de Alex era cierto, pero también es cierto que no quiero ni puedo volver a separarme de ti.
-Yo tampoco. No se que haremos cuando esto acabe pero quiero volver a estar contigo.-Aseguró con una amplia sonrisa.
-Estoy deacuerdo. No pienso separarme de mi familia.-Sonrió besándola y luego abrazándola por la cintura, rodeando ambos, Kate hizo los mismo, quedando los dos entrelazados por las piernas y brazos con el niño entre ambos.
Se quedaron durmiendo, felices por volver a dormir juntos después de tanto tiempo separados.


Kate se despertó con el olor a tortitas. Con una amplia sonrisa abrió los ojos y se sobresaltó al ver que Alex no estaba con ella en la cama, pero se relajo al escuchar los ruiditos de su hijo y a Rick hablándole.
Se levantó de la cama y salió del dormitorio.
Rick llevaba en brazos a Alex rodeándolo con un brazo, pegado a su cadera, mientras con otra mano y mucha dificultad le daba la vuelta a la tortita.
-Buenos días.-Sonrió acercándose a sus dos amores y besando a cada uno.-Anda deja, que ya termino yo.-Sonrió quitándole la pala de madera.
-Tu mamá es una aguafiestas, nos ha estropeado la sorpresa del desayuno en la cama.-dijo mientras gesticulaba de manera teatral provocando sonrisas a su hijo.
Rick se sentó en el sofá para jugar con Alex.

Desayunaron entre risas y bromas, y luego se cambiaron.
-Antes de ir a la comisaría, voy a pasar por casa de mi padre a dejarle a Alex.
-Yo mientras iré a casa a cambiarme cuando lo haga paso por ti a casa de tu padre.
-Perfecto.-Sonrió dejando a su hijo en el carricoche.

-Voy a tener que comprarme una sillita de coche.-dijo abriendo su coche y mirándolo con el ceño fruncido.
-No crees que eres muy mayor para utilizarla.-Bromeó riendo.-Tranquilo la parte del asiento de la sillita también se convierte en sillita para el coche.
-Siempre tan precavida.-Sonrió acercándose a ella para coger el asiento y montarlo en la parte trasera de su coche cuando termino Kate le entregó a Alexander y un beso a Rick en los labios y mientras el montaba al niño en el coche ella se sentaba a su lado.
Rick sonrió y guardó el resto del carricoche en el maletero antes de ponerlo en marcha.


-Hola papá.-Saludó Kate cuando este le abrió la puerta.
-Katie.-Sonrió abrazándola. -¡Alex estás grandísimo!-Sonrió cogiendo a su nieto en brazos y dándole besitos en el moflete.
Kate le explicó a su padre que las cosas que necesitaba Alex.
-Katie cariño recuerda que fuiste bebe y yo te he cuidado.-Sonrió Jim.
-De verdad que puedes quedarte con él
-Pues claro, ¿sabes el tiempo que llevo sin pedir el día libre? Y esta es una ocasión especial. Lo pasaremos genial.-dijo mirando a su nieto.
-He quedado ha comer con Lanie, se muere por conocerlo…
-Tranquila, dame un toque y te lo llevo a comisaría.
-Gracias papá.-dijo abrazándolo.
Estuvieron un rato hablando, Kate contándole las novedades con Rick.
Cuando Rick le avisó que iba a recogerla se despidió de ambos y bajó al portal del edificio de su padre.


-Siempre he querido volver a hacer esto.-Susurró Rick mientras la empujaba contra la pared del ascensor.
Ambos sonrieron y se besaron con desesperación. Kate le acarició el cuello mientras Rick le metía las manos por debajo de la camisa y le acariciaba la cadera.
-Que ganas tenía de tenerte así, no veo el momento de hacerte el amor.-Susurró mientras le besaba el cuello y escote.-Te he echado de menos.
-Yo también pero vamos a tener que esperar y tener paciencia, con Alex va ser más difícil.-Sonrió acariciándole el pelo.
-Pero no imposible y sabes que me encanta lo difícil, las cosas que son importantes cuestan trabajo, sino míranos.-Sonrió dándole un dulce beso y se separaron al escuchar el sonido del ascensor indicando que habían llegado a su planta. –Pero merecen la pena, muchísimo.
Rick se hizo un lado, dejándola salir primero. Ambos salieron con una amplia sonrisa que fue vista por todos los presentes.
Ryan y Esposito se miraron de manera cómplice y chocaron las palmas por debajo de la mesa.
Dave se acercó rápidamente a ellos.
-Estábamos a punto de llamaros, han encontrado el coche.-dijo Dave reteniendo el ascensor.
Todos subieron al ascensor.
-Nos vemos allí.-dijo Rick con una amplia sonrisa cuando esta y Dave se bajaban en la planta baja para coger el todoterreno mientras el resto iban al garaje.

-Te veo contenta esta mañana.-dijo Dave subiéndose al coche.
-Si.-dijo con una sonrisilla tonta.
-Ayer te encubrí para que estuvieras tranquila por lo de la nota y arreglaras las cosas, no para que te acostaras con tu ex.-dijo Dave molesto mirando fijamente la carretera.
-Rick no es mi ex.-dijo enfadada, mirando por la ventanilla.
-¿Entonces estáis juntos de nuevo?-Preguntó con frialdad.
-Si.-Sonrió evitando su mirada, nadie le iba amargar la mañana.
-Kate no deberías estar con alguien solo porque es el padre de tu hijo.-dijo enfadado.
-Resulta que si estoy con él no es solo por Alexander, es por mí, quiero a Rick y quiero estar con él, y si encima añadimos que es el padre de mi hijo el conjunto es perfecto.
-¿Tanto como cuando te viniste a Washington o más?-Preguntó con malicia.
Ahora si que Kate lo miró, enfadada no lo creía tan capullo.
Dave tomó aire varias veces.
-Lo siento, me he pasado.-dijo arrepentido.
-Sabes que si me fui a Washington fue por el trabajo no porque huyera y no quisiera a Rick, no he podido dejar de quererlo.-Aseguró secándose una lágrima.
-Me importas mucho, lo siento, he hablado desde los celos que siento. Quiero lo mejor para ti y si es Richard, solo puedo decirte, felicidades.-Sonrió tristemente.
-Gracias.-dijo poniendo su mano en su hombro.
Estaban a las afueras, encontraron un par de coche de policías aparcados en una zona abandonada junto al coche que buscaban.
Rick y los chicos aparcaron cerca de ellos y los cinco se acercaron a los policías.
-No hay nada relevante, excepto, los técnicos están buscando huellas y hay algo interesante, la tierra que hay en la alfombrilla del conductor no es tierra de la zona, van a analizarla.-dijo uno de los agentes.-Sabremos pronto de que tipo es, puede que si solo se da en una zona sepamos por donde se mueve el 3XA.
-¿Han rastreado ya la zona?-Preguntó Kate mirando a su alrededor.
-Si, pero no hemos encontrado nada.
Todos estuvieron un rato mirando por la zona, pero como habían dicho, no había nada.
Finalmente decidieron volver a la comisaría a esperar los resultados de la tierra.
Al llegar llamaron a Rick y les dijeron que hasta la mañana siguiente no tendrían las pruebas de la tierra, por problemas con los ordenadores.
-Vas a comer con Lanie ¿Verdad?-Preguntó Rick entrando en la salita de descanso.
-Si.-dijo bebiendo de su refresco.-Mi padre viene con Alex, me iba ya.-Sonrió tirando el refresco y acercándose a él.
-No vemos esta noche para la cena.-dijo cogiendola de la cintura y besándola dulcemente.
-Claro.-Sonrió acercándose a la puerta.
-Espera-dijo cogiendole la mano.-Te acompaño que quiero ver a nuestro hijo antes de irme a casa.


-Rick que alegría de verte. ¿Cuánto tiempo ha pasado desde la última vez que nos vimos?-dijo Jim abrazándolo.
-Lo mismo digo Jim.-Sonrió correspondiendo a su abrazo.-Ha pasado demasiado pero tranquilo que no volverá a pasar.-Sonrió mirando como Kate sacaba a su hijo de la silleta para cogerlo en brazos.
-¿Ah no?-Preguntó entre curioso y divertido Jim.
-No, su hija no va a volver a separse de mi.-dijo rodeando la cintura de Kate y abrazando a ella y su hijo.
-¿Estás seguro?-Preguntó ahora serio.
Rick le hizo un gesto a Jim y ambos se alejaron. Kate con el ceño fruncido por la curiosidad los miraba.
A los pocos minutos volvieron con ella y el niño.
-¿Se pude saber de que hablabais con tanto secretismo?-Preguntó cuando Rick se acercó a ella para coger a su hijo en brazos con una amplia sonrisa.
Jim miro de manera cómplice a Rick y se acercó a su hija para besarla en la mejilla.
-Todo a su debido tiempo Katie.-Sonrió su padre.-Nos vemos mañana a la misma hora para que me dejes a Alexander.
-¿Estás seguro?
-Completamente hija, he hablado con el bufete y voy a tomarme unos días libres aprovechando que no tengo que representar a nadie.
-Gracias papá.
-No me las des cariño.
-Yo también me voy, Jim te acerco a donde quieras y así seguimos hablando de eso.-dijo Rick dándole al niño y besándola en los labios.- A las nueve paso por vosotros.
-¿De que tenéis que seguir hablando?-Preguntó curiosa pero ambos hombres le sonrieron y siguieron caminando.
-Hola. Javi me dijo que estabais aquí.-dijo Lanie entusiasmada a su espalda. -¿Qué miras?-Preguntó curiosa al ver que no la miraba.
-Mi padre y Rick traman algo y no quieren decírmelo.-dijo girándose para mirar a su amiga.
-¿Y eso es malo?
-No sé.-dijo encogiéndose de brazos.
-Dejemos temas que no sabemos y preséntame a este bombón.-dijo mirando embobada al niño que estaba en brazos de su madre.
-Alexander la loca de tu tía Lanie.-dijo con una pícara sonrisa.
A Lanie no le importo el apodo, cogio al niño en brazos y lo beso por toda la cara
-Kate, es precioso, es un mini Rick. Ahora vamos a comer y me cuentas todo sobre él.-Sonrió empezando a andar con el niño en brazos y Kate la siguió empujando el carrito.


Richard entró en el apartamento con una amplia sonrisa.
-Hola hijo, adiós hijo.-dijo Martha pasando por su lado para salir.
Rick tuvo que parpadear.
-Madre espera. Esta noche te quiero en casa para cenar, tengo que contaros algo muy importante. Además vienen dos invitados especiales.
Martha frunció el ceño penando y de golpe se le ilumino el rostro.
-No me digas…hijo te has reconciliado con Kate.-Gritó abrazándolo.- Cuanto me alegro. Lo que no entiendo es la otra persona ¿Viene Jim?
-Si vienes saldrás de dudas.-Sonrió de manera enigmática.
-No me lo perdería por nada del mundo.-Sonrió.
-Pues yo no pienso estar.
Alexis que bajaba las escaleras se había parado al escucharlos.
-Nos vemos esta noche.-Besó a su hijo en la mejilla. Adiós querida.-Le lanzo un beso a su nieta y Martha se marchó.
Alexis terminó de bajar las escaleras con el ceño fruncido y fue a la cocina a por un vaso de agua, ignorando a su padre. Rick suspiró y se sentó en la barra enfrente de donde estaba apoyada su hija.
-¿No me vas a explicar porque no quieres venir esta noche?-Preguntó calmado.
-Ka…Beckett no merece la pena.-dijo enfadada.
-Si que la merece.-Aseguró, contradiciéndola.
-¿De verdad papá merece tanto sufrimiento?
-Hasta la última gota cariño. El amor así, el amor que merece la pena es así.-dijo bajándose del taburete y acercándose a su hija.
Y sin esperarlo Rick, Alexis rompió a llorar y se abrazó a él.
-No quiero verte sufrir, no otra vez por ella.
-Te aseguro que esta es la definitiva. Ven esta noche, hablaremos todos y aclararemos las cosas.
Alexis alzó el rostro y Rick le limpió las lágrimas.
-Está bien.
-Esa es mi niña.-Sonrió besándole la frente. -Lo se no eres una niña, pero para mi siempre lo serás incluso ahora.
-¿Incluso ahora?
-Si…claro…ahora que eres toda una mujer.-Suspirando.
Ambos sonrieron y se abrazaron.

que lindo, me ha encantado, ya quiero ver la cena,
continua cuando puedas

Me ha gustado muchooo
Sigue prontoo

Sigueeeee me encantaaaaa

Aiss has vuelto! Me encantaa
Sigue pronto porfaa

Enserio tenemos que esperar otra vez tanto tiempo para poder ver la cena?
Mira que eres malvada  
CONTINUA PRONTO

Wow, me han encantado los dos capítulos. Deseando leer esa cena y ver la reacción de las dos cuando les presente al pequeño Alexander.

Que ganas de poder leer la continuacion.

Me encanto el encuentro con su hijo!   ya quiero saber que pasara en la cena!   pero cuando continuaras ojala sea pronto!

Y la continuación, yo quero que continues yaaaaaaa.
Me encanta, cotinua.

Muy bueno, quiero ver la reacción cuando conozcan a Alexander!!!!

Y Rick y Jim... si estan tramando lo que creo... estoy deseando leerlo!!!

Continua pronto

PORFAVOR SIGUE YAA JAJAJ ME ENCANTA       SIGUE PRONTO NO SE SI AGUANTARE MAS ...   

Oye nos tienes muy castigados  No planeas terminar la historia? ojala puedas te des un tiempito pf! Esta muy bonita y muy bien narrada!  

Vasna seguirbxon la historia??

Vasna seguir con la historia??me encanta

Porfa porfa porfa porfa porfa sigue , quiero saber que estan tramando Jim y Rick. Solo quiero saber cuando vas a continuar , no quuero ser pesada pero esque me encanta la hitoria

Porque ahora todo mundo nos hace sufrir eh?    ya quiero saber mas pf continuaaaaaaaaaaaaaaaaaa!     

porfavor sigueeeeeeeee , me encanta y no quiero que se acabe pero no nos dejes tanto tiempo sin capitulo ,  

Hi gente! Me echabais de menos a mi y a mis fics Yo a vosotros si, asique no os hago esperar más que ya habeis esperado bastante...Gracias por no abandonar el fic y seguir pidiendo más...Besos.



Cap. 7

Rick sabía que tenía que haberle dicho a Alexis que tenía un hermano pero tenia miedo de su reacción viendo como estaba con Kate. Después de darle muchas vueltas había decidido que se lo diría antes de ir a recoger a Kate y su hijo.
Faltaban casi una hora para ir a por ellos y Rick bajo las escaleras viendo a su madre e hija preparando la cena.
-Necesito hablar un momento con vosotras, ¿Podemos sentarnos en el sofá?
-Hijo no seas inoportuno, no ves que estamos ocupadas con la cena.-Le regañó cariñosamente su madre.
-Antes de irme quiero aclararos quien viene esta noche a cenar.
-Papá sabemos que viene Kate ¿Y Jim?-Preguntó lo último mirando a su abuela.
-No, Jim no viene, se lo he preguntado pero ya había quedado para cenar con unos amigos.
Ambas mujeres se miraron intrigadas y sin decir nada más se sentaron en el sofá.
-Esta noche Kate viene a casa con alguien que es muy importante para nosotros.-Carraspeó.-Esta noche vienen Kate y Alexander.
-¿Quién es Alexander?-Preguntaron ambas mujeres a la vez.
-Mi hijo.-dijo sin aire.
-¿Quién? Papá creo que he oído mal.
-No cariño, no has escuchado mal. Kate y yo tenemos un hijo.-Aseguró.
-Un nieto.-Gritó Martha abrazándolo.
Rick creyó ver una fugaz sonrisa en el rostro de su hija pero enseguida desapareció.
-Y si solo busca un padre para su hijo. Ella se fue y si se acostó con otro y se quedo embarazada y ahora solo busca un padre para su hijo, una mensualidad al mes.
-¡Alexis! ¿Pero como puedes pensar así? Después del tiempo que la conoces.-dijo Rick alterándose.
-Pensaba que la conocía hasta que decidió abandonarte, abandonarnos por un trabajo.-dijo empezando a enfadarse. Con el paso del tiempo había aprendido a querer a Kate y le había dado un hueco en su corazón, feliz de que algún día formara parte de su familia. Ella era la mujer que había querido para su padre.
-Yo le di a elegir en vez de apoyarla, ella no quería que lo nuestro se acabara.-Aseguró.
Se quedaron en silencio.
-Katherine es una mujer inteligente, independiente, se puede hacer cargo de un niño sin necesidad de un padre para su hijo. No se lo habría dicho a tu padre sino fuera mi nieto.-dijo segura Martha.
-Además ella no me lo dijo, no fue a buscarme con el niño precisamente.
-Esa es otra cuestión ¿porque no te ha dicho nada del niño hasta ahora?
-Mira Alexis, entiendo tus preguntas y pienso respondértelas, incluso Kate lo hará y aclarará todo pero ahora voy a por ellos y cuando vuelva lo hablamos. Esperar aquí.-dijo cerrando la puerta.


-Llegas puntual por los pelos.-Sonrió Kate mientras Rick se agachaba a besar a su hijo que iba en la silleta.
Rick no dijo nada le rodeó la cintura y cerrando la puerta con el pie la empujó contra ella y la besó con ferocidad. Kate se derritió rodeándole el cuello con ambos brazos para no caerse por culpa del temblor de sus piernas.
Al separar sus labios hinchados, Rick suspiró y apoyo su frente en el pecho de Kate. Ella lo abrazó.
-¿Qué ocurre?
Rick alzó la mirada e intentó sonreír.
-Te quiero.
-Yo también pero sabes que no es esa la respuesta.-Sonrió besándole la frente.
-Alexis no está por la labor de colaborar.-Suspiró.
-Es normal Richard, si yo fuera ella tampoco lo estaría pero voy hacer todo lo que este en mi mano porque me perdone.
-Así se habla.
-Es tiempo de dar la cara.
Rick apretó sus labios de nuevo con los de ella y fue bajando por su cuello.
-Rick.-Gimió cuando los labios de él se posaron en su pulso.
-Mmm.
-Debemos irnos.
Suspiraron ambos y se rieron.
-Te he echado tanto de menos, en todos los aspectos.-dijo alzando las cejas de manera sugerente.-Te he necesitado tanto.
Ahora fue ella quien las alzo de manera incrédula.
-No he estado con nadie.-dijo serio.
-Yo tampoco, entre el embarazo y la misión. Además de que no quería estar a nadie que no fueras tú.-dijo sincera.
Rick rió y se arrodillo delante de su hijo.
-Gracias por proteger a mamá de los Daves de Washington mientras estabas en ella.-Sonrió cogiendole en brazos y Kate rió.
Kate salió empujando la sillita y Rick con el niño en brazos y la bolsa con cosas del niño, cerró la puerta de la casa y la siguió.


-Katherine que feliz estoy por verte de nuevo en esta casa.-dijo Martha nada más abrir la puerta de loft Rick.
-Hola Martha, te he echado mucho de menos.
Ambas mujeres se abrazaron mientras Rick dejaba el carrito y la bolsa a un lado y cogia a su hijo en brazos.
-Pero que cosa más bonita de nieto tengo.-dijo acercándose a su hijo y nieto.-Es clavadito a ti de bebé.-dijo conteniendo las lágrimas.
-¿Quieres cogerlo?-Le pregunto Kate acercándose a ellos.
-Claro.-dijo cogiendo al niño en brazos pero al ver a su madre Alex estiró los brazos a su madre.
Kate la miró con cara de disculpa pero Martha le puso la mano en el hombro y le dedico una dulce sonrisa.
-Los hijos quieren estar con sus madres.-Le sonrió abrazándolos.
-¿Y Alexis?-Preguntó Rick al no ver a su hija.-No se habrá…
-Estoy aquí, papá.-dijo bajando por las escaleras y deteniéndose en el último escalón.
-Pues ven a ver a tu hermano.-dijo Martha.
Los tres adultos se acercaban al salón.
Alexis se acercó a Kate y al niño mirando a ambos pero fijándose finalmente en el bebé.
Alex le extendió los brazos para tocar la melena pelirroja de su hermana cuando está lo cogio en brazos.
-Hola peque, eres igualito a papá.-Sonrió besándole la cabecita mientras Alex jugaba con su pelo.
Todos sonrieron, especialmente Kate que se le habían humedecido los ojos. Martha fue a la cocina a revisar la cena y Rick con una amplia sonrisa fue a terminar de poner la mesa.
Y sin evitarlo Kate abrazó a ambos, feliz por ver que Alexis daba su brazo a torcer. Pero se separo al pensar en que podría enfadarse.
-No vuelvas a marcharte a Washington, al menos sin mi padre y mi hermano.-dijo Alexis también emocionada.
-Nunca.-dijo quitándose una lágrima con la mano.-Tengo mucho que contaros.
-Vamos a cenar, quiero escucharte.
Ambas sonrieron.
Kate le rodeó con el brazo y fueron hacia la mesa.

Se pasaron la cena escuchando a Kate y aclarando todo. Alex iba de brazos en brazos hasta que finalmente se durmió en brazos de su padre.
Estaban terminando de cenar cuando Alexis alzó su copa sin que nadie lo esperara.
-Te hemos echado de menos Kate.-Le sonrió y Kate le cogio la mano por encima de la mesa.-Por Alexander que es maravilloso, por vosotros que nunca más os separéis.-Los mencionados negaron con la cabeza con amplias sonrisas.-Por nuestra familia.
Todos sonrieron y bebieron.


-Quedaros a dormir.-Propuso Alexis fregando los platos de la cena y Kate los secaba.
-Si, Alex puede dormir con nosotras arriba y así estáis solos.-dijo Martha alzando las cejas y sonriendo sugerentemente.-Que seguro que aún no lo habéis estado con el niño.
Kate miró sonrojada a Rick quien acomodaba a Alex en el sofá.
-¿De que habláis?
-Le proponíamos a Kate que se quedaran a dormir y nosotras nos encargábamos de Alex mientras vosotros movíais la cama que ya lleva tiempo sin…
Rick automáticamente se tapó los oídos y las mujeres rieron.
Alexis sonrió con picardía a su padre y fue hasta el sofá a ver a su hermano.
-Sabes, cuesta escucharlo de tu hija pero tienen razón.-Sonrió Rick rodeando la cintura de Kate.
-Creo que yo también me voy a dormir. Tranquilos cerraremos las puertas para que no se oiga nada.-dijo Martha alejándose de ellos con una amplia sonrisa.-Alexis ya cojo al peque yo, va a dormir conmigo.
-Eso ni hablar, duerme conmigo abuela.
-Pero mi cama es más grande.-dijo Martha cogiendo la bolsa para sacar el pijama que Kate siempre llevaba en la bolsa por si tenia que irse de misión y dejar al niño con Samantha porque no le daba tiempo de ir a casa.
Ambas hablaban flojo para no despertar a Alex.
-Buenas noches.-dijeron ambas ya desde el pasillo.

Sonriendo Rick empezó a besarle el cuello mientras la llevaba al dormitorio.
-Rick, me siento incómoda con tu madre y Alexis en casa.
-Kate te necesito, mucho.-Gimió mientras le quitaba la camiseta de manga corta.-Además tienes que acostumbrarte cuando vivamos juntos aquí o en Washington no estaremos siempre solos y no querrás tener al pobre Ricky con abstinencia con lo mucho que te quiere él.-dijo cerrando también la puerta de su dormitorio como había hecho con la del despacho, con el pie mientras le quitaba el sujetador y jugaba con sus pechos.
Kate como respuesta soltó un ronco y sexy ronroneo al notar como mordía un pezón y masajeaba el otro.
La empujó haciendo que ambos cayeran en la cama y subió sus labios hasta los de ella para besarla profundamente mientras le desabrochaba los vaqueros y bajaba la cremallera.
-No sabes cuantas veces he soñado con estar así de nuevo desde que te fuiste y he tenido que aliviarme yo solito.-Se quejó.
Besó y lamió sus pechos y bajo hasta su ombligo, haciendo círculos alrededor y bajando con las manos. Kate arqueó la espalda y Rick de un tirón le quitó los pantalones y las bragas tirandolas a un lado.
Ambos excitados, ella mojada y él con protuberancia en el pantalón.
Le ayudo a doblar las piernas y a abrirlas para él, dejándola expuesta.
Rick le besó los muslos por la parte interna torturándola.
-¡Rick!-Gimió agarrandose a las sábanas.
Rick sonrió con su malicia y se hundió en su sexo, penetrándola con la lengua mientras acariciaba el clítoris con los dedos. Después se ayudo con los dedos.
-Más.-Suplico Kate retorciéndose y apretándo su cuerpo contra los dedos.
Tuvo que morderse el puño para no grita de la manera que ella quería hacerlo por el tremendo orgasmo.
-Que ganas tenia de saborearte. Sigues tan deliciosa como siempre.-dijo lamiéndose los labios mientras alzaba la cabeza para mirarla con los ojos oscuros.
Kate sonrió y cogiendole el rostro lo besó y Rick profundizó haciéndole el amor con la lengua ahora en la boca.
Kate los hizo girar quedando a horcajadas sobre él. Le ayudo a quitarse la camisa.
-Procura no chillar mucho Ricky.-Sonrió mientras bajaba por su pecho dejando un rastro de besos y pequeños mordiscos hasta el pantalón. Kate pasó los dedos por la zona abultada.
-Pues no me tortures.-Gimió.
Kate rió con malicia y soltándole el pantalón lo ayudo a quitárselo junto a los calzoncillos y así mostrar su gran erección. Kate sonrió mientras empezaba a acariciarlo y darle pequeños apretones.
-Kate, no voy a aguantar.-dijo entre dientes.
Esta no dijo nada sino que se lo metió en la boca jugando con sus dientes y lengua por toda su longitud.
-Kate sino te apartas…
No pudo terminar la frase ya que Kate se lo metió por completo y el se corrió violentamente en su boca. Se lo trago y sonriendo trepo por su cuerpo para besarlo dulcemente.
-¿Sigues usando la píldora?-Le preguntó Rick mientras los hacia girar para quedar encima.
Kate afirmó y lo beso profundamente mientras se restregaba contra él para crear fricción.
Rick soltó un gruñido e hizo reír a Kate, esta le rodeó la cadera con sus largas piernas.
-¿Listo Ricky?-Sonrió rozándose con más fuerza.
-Para ti, siempre.
Y terminando la frase la embistió hasta el fondo haciendo jadear a ambos. Se miraron a los ojos mientras salía y entraba de ella cada vez más rápido. Rick le mordió un pezón y Kate se sacudió en sus brazos, provocando el orgasmo a Rick, provocando que este se vaciara con fuerza en ella.
-Te quiero.-Susurró apoyando su frente en la de ella.
-Yo también te quiero Ricky.-Rió antes de darle otro beso.
Rick salió de ella y le besó la frente.
Como era junio y hacia calor se pusieron una camiseta de él cada uno y su ropa interior. Y abrazados, satisfechos y susurrándose palabras de amor, se quedaron durmiendo.


Kate se incorporó sudando, asustada y con la respiración agitada. Notaba el sudor frío deslizándose por su columna, haciendo que se estremeciera.
-Kate, cariño.-Susurró Rick que se había despertado al notarla. -¿Qué ocurre?
-Una pesadilla Rick, buscaba a Alexander y no lo encontraba por ningún lado, nadie sabia donde estaba.-Sollozó abrazándose las piernas.
-Cariño es solo una pesadilla.-Susurró frotándole los hombros.-Ven.
La abrazó y volvieron a tumbarse en la cama, Kate se acomodó en su pecho.
-Rick tengo miedo.-Sollozó.
-Kate, te prometo que no va a pasaros nada. Estoy aquí para vosotros, sois mi familia, mis tres mujeres y mi pequeño.-Sonrió con los labios en su frente.-Te quiero.
Richard siguió acariciándola por la espalda y brazo, y Kate poco a poco se fue relajando y asumiendo que Alexander estaba bien.
Notó la respiración profunda de Rick y sonrió, le besó la mejilla. Y para quedarse tranquila por completo se levantó de la cama y sin hacer ruido empezó a subir las escaleras.
Abrió la puerta del dormitorio de Martha y asomó la cabeza dentro. Sintió miedo al ver que dormía sola y salió rápidamente hacia el cuarto de Alexis.
Al entrar vio que había pegado la cama a la pared pero no vio a Alex con Alexis al otro extremo. Se acercó a la cama y su miedo se disipo al ver a su hijo durmiendo placidamente al lado de su hermana.
Kate suspiró y sonrió feliz al ver lo bien que había puesto Alexis la cama para que el pequeño durmiera seguro.
Acarició el cuerpo de su hijo y al pasar la mano rozó el brazo de Alexis el cual acarició y finalmente le dio un fugaz beso en la frente, no sabría si ella querría, pero a Kate le habría encantado que su madre lo hubiera hecho.
Sonrió y fue hasta la puerta.
-Buenas noches Kate.
-Buenas noches cariño.
Dijeron ambas en susurros.
Y con una amplia sonrisa Kate empezó a bajar las escaleras.
Rick que estaba al pie de la escalera dispuesto a subir al piso de arriba hasta que la había visto bajar.
-Al no verte pensé que habías vuelto a tener la pesadilla y me asuste.
-Tranquilo, solo comprobaba que todos dormían tranquilos y no se habían despertado por nuestros gritos.-Sonrió abrazándolo.
-¿Quieres volver a ver como soy capaz de resistirme a gritar?-Preguntó cogiendola en brazos.
Kate para no gritar le mordió el cuello.
-Estaré encantada.-Sonrió mientras la llevaba al dormitorio, cerrando puertas a su paso.


Rick abrió los ojos y no pudo mostrar otra sonrisa mejor que esa al ver a Kate dormida y abrazada a él.
En la segunda ronda habían quedado tan exhaustos que no se habían puesto nada por si alguien entraba, así que aprovecho para pasarle los dedos con delicadeza por todo el cuerpo.
Kate sonrió mientras se despertaba y al abrir los ojos vio sus ojos azules fijos en ella.
Al mirarse fijamente vieron que no estaban soñando, que eso era real.
Acercaron su rostro para besarse con dulzura disfrutando del momento.
-Buenos días, mi amor.
-Buenos días cariño.
Dijeron a la vez con amplias sonrisas y volvieron a besarse lentamente, se separaron al escuchar las voces de Alexis y Martha.
-Parece que nuestro hijo se ha despertado. Mi madre y Alexis no son tan madrugadoras.
-Tienes razón.-Sonrió sentándose en la cama y poniéndose la camiseta de Rick.
-¿Kate te he dicho lo mucho que agradezco y lo feliz que estoy por tener un hijo contigo y que estés de nuevo en mi vida?-Sonrió arrodillado en la cama y abrazando a Kate por la espalda mientras le besaba el cuello.-Porque en cuanto esto acabe voy a demostrártelo como te mereces. Te quiero.
-Yo también te quiero.-dijo girando la cabeza para besarlo.-Ahora vamos a desayunar que me muero de hambre.
Kate se puso su ropa interior con una camiseta y pantalón corto de Richard.
Salieron de la habitación de la mano y saludaron al resto. Alexander al ver a su madre empezó a estirarle los brazos mientras hacia ruiditos para llamar su atención.
-Buenos días príncipe.-dijo Kate cogiendo a su hijo de los brazos de Alexis. Ahora que lo tenía en brazos estaba completamente tranquila.
Rick se acercó a ellos y beso la cabecita de su hijo.
Martha ya estaba preparando el desayuno y Alexis fue a ayudarla mientras Kate que le entrego el niño a Rick fue a poner la mesa.



Y como os lo merecéis otro capi más...

Cap.8

Todos desayunaron relajados.
-Al abrir los ojos me ha mirado raro.-dijo Alexis imitando el gesto de su hermano.-Pero luego a sonreído.
-Es increíble el cariño que te ha cogido nada más verte.-dijo Martha antes de tomarse un trago de café.
-Es normal, los niños saben quien les quiere y vosotras le queréis.-dijo Kate mirando a su hijo.
-De eso puedes estar segura querida. Alexander tiene abuela y hermana para siempre.
Alexis afirmó segura al último comentario de su abuela.
-Gracias por no…él no tiene la culpa de todo lo que ha ocurrido.-dijo Kate emocionada. -¡Lo habéis recibido tan bien en vuestra familia!
Rick le cogio la mano y le beso la mejilla con dulzura.
-Pues claro que no la tiene querida.-Aseguro Martha acercándose y abrazándola.
-Y no solo él es parte de la familia, tú también lo eres.-dijo Alexis también abrazándola.-Esperemos que pronto de manera oficial.-dijo pegada a su padre para que solo él la oyera, este le guiñó un ojo y le sonrió.
-Bueno chicas basta, que voy a tener que llamar a los bomberos por inundación. Todos queremos a Alexander y Kate, y yo más que nadie.-Sonrió y la beso.
-Ya le estábamos quitando el protagonismo a mi hijo.-Bromeó Martha, yendo a la cocina con los restos del desayuno.
Alexis sonrió y siguió a su abuela.
-Si queréis podemos comer todos juntos hoy.-Propuso Rick aún abrazado a Kate y su hijo.-Recogeremos a Jim y a Alex cuando volvamos de la comisaría.
-Gran plan y ahora me voy a prepararme que tengo que ir a dar clases y mi escolta llegara pronto.
-Y yo a estudiar, que pasado mañana tengo examen y luego quiero estar con vosotros sin tener que estudiar.
Ambas se despidieron de los tres y fueron al piso superior.
Kate, Rick y Alexander una vez listos fueron al piso de Jim.


-Kate lo he estado pensando, creo que deberíamos ponerle escolta a tu padre también, ahora que estás aquí conmigo…me quedaría más tranquilo.-dijo Rick bajando la silleta del coche.-Además ahora que Alexander está con él…
-Creo que tienes razón, con todo esto…me avergüenza decirlo, es mi padre y no lo he pensado.
-No te preocupes cariño.-dijo antes de besarla.-Arreglaremos los trámites y esta tarde cuando volvamos de comer de mi casa tu padre tendrá un escolta.
-Gracias por pensar en él.
-Es el abuelo de mi hijo y el padre de la persona que amo, ya por eso merece que me preocupe por él y si añadimos que le tengo cariño, el combinado es perfecto.
Kate rió y lo beso profundamente.
-Espérame aquí, bajo enseguida.-dijo Kate poniendo a su hijo en el carrito.
Rick se despidió de su hijo y espero a que Kate bajara de casa de su padre para ir a comisaría.


Kate, Richard y Dave esperaban que Ryan y Esposito trajeran el informe en una de las salas. Por culpa del problema informático con los ordenadores aún no lo tenían.
Llevaban casi dos horas esperando y todos estaban nerviosos, ese informe podía abrirles puertas de investigación para encontrar la zona por donde estaba escondido el 3XA.
En un momento el móvil de Rick sonó y este abrió rápidamente el mensaje.
Kate que sonreía por una comentario que Dave había hecho para aligerar el cargado ambiente, al verle la cara a Rick mientras sus ojos se movían leyendo el mensaje, dejó de sonreír y frunció el ceño.
-¿Te encuentras bien?-Preguntó al verlo tenso mientras guardaba el móvil. La miró y Kate vio miedo en sus ojos.
-Solo cansado. Voy al baño a lavarme la cara y despejarme. Te quiero.-La besó y salio de la sala antes de que ella respondiera.
-¿Qué le ocurre?
-No lo sé, pero no me gusta la cara que ha puesto al leer el mensaje y lo que me ha contestado al preguntarle. Reconozco sus caras.-Suspiró mientras se cruzaba de brazos preocupada.
-¿Y que te decía?-Preguntó serio al ver su cara.
-Que me mentía, si pasa algo.


-¡Castle tenemos el informe! –dijeron ambos al verlo pasar como un rayo por su lado y entrando en el ascensor sin decirles nada. Ryan y Espo se encogieron de hombros y entraron en la sala en el momento que Kate iba a buscar a Rick.


-Este tipo de tierra se encuentra al excavar en las minas.-dijo Ryan mirado los informes y después enumeró sus componentes.
-Buscar minas en las afuera de Nueva York.-Pidió Kate.
En la pantalla aparecieron varias.
-Espera esta zona de aquí…-Empezó a decir Kate.
-Debe sonarte, por esta zona encontramos el coche.-dijo Esposito señalando con el dedo.-Esta es la más cercana y está cerrada desde hace años.
-Parece un buen lugar.-Insinuó Dave.
-¿Sabéis si tiene alguna casa o lugar donde pueda esconderse alguien?
-Si, tiene una pequeña nave.-dijo Ryan mirando el portátil y poniendo fotos de la zona.
-Debe estar allí, preparar una patrulla.-Pidió Kate.-Voy a buscar a Richard al baño y vamos para allá.
Ryan y Esposito se miraron preocupados.
-¿Qué ocurre?-Preguntó al ver sus caras.
-Kate, Castle no está en la comisaría.-Aseguró Esposito.
-Lo vimos coger el ascensor.-dijo Ryan.
-El mensaje, algo tiene que haber pasado. Localizar su móvil.
Esposito salio corriendo de la sala.
Kate llamaba por el móvil mientras esperaban.
-No contesta.-Gruñó mientras empezaba a andar por la sala preocupada.


-Lo han localizado, va para el norte hacia la zona donde encontramos el coche.
-Joder.-Maldijo dando vueltas.-Vamos para allá ahora mismo.
-Espera Kate ¿Por qué iba ir Castle a reunirse con el 3XA?
-No lo sé, puede que para evitar más muertes.-dijo mientras salía de la sala..
Un escalofrío recorrió su cuerpo.
-Tengo que llamar a mi padre está con Alex y decirle que vayan...-dijo cogiendo el móvil con manos temblorosas pero este se cayó.
Esposito le cogio las manos.
-Nosotros llevaremos a Jim y a ese Alex a casa de Castle y lo dejaremos con Alexis, Martha y un escolta. Después iremos para allá.
-¿Por cierto, quién es Alex?-Preguntó Kevin sin evitarlo.
-Mi hijo.-dijo empezando a temblar.
-¿Tu qué?-dijeron los chicos a la vez.
-No es el momento chicos.
-Tienes razón, iros.
Kate y Dave subieron al ascensor.
Llegando al coche el móvil de Dave sonó, lo llamaba su jefe. Este se paró mientras contestaba y se giró dándole un momento la espalda a Kate.
Cuando este se giró de nuevo al coche, este y Kate no estaban.

Kate piso el acelerador lo máximo que le pudo por los coches, no podía perder tiempo.



Richard había hecho todo lo que le había dicho en el mensaje.
El taxi lo había dejado en el lugar donde habían encontrado el coche y cogiendo la bicicleta que estaba allí empezó a moverse hasta un pequeño bosque el cual atravesó, al salir se encontró con una pequeña nave al lado de un montecillo con una gran perforación, formando una cueva. Dejó la bicicleta y caminó hacia la nave.
Por dentro temblaba hasta el más pequeño músculo mientras que por fuera se mantenía impasible, tenia que controlarse si quería salir de allí con su hijo y su suegro.
Encontró la puerta lateral roja y le costó un poco abrirla.
Dentro todo estaba oscuro, no se veía nada, ando un par de pasos inseguro mientras la vista se adaptaba al cambio de luz, agudizando el oído, escuchó unos pasos e intentó moverse pero tropezó con algo y al intentar levantarse notó un dolor fuerte en la cabeza antes de perder la consciencia.


Abrió los ojos los cuales le pesaban y al abrirlos quiso volver a cerrarlos por la incomodidad de un gran foco iluminándole directamente la cara. Notaba la cabeza pesada.
-Richard por fin te despiertas, tu familia estaba preocupada.-dijo Jerry cambiando el foco por uno alto que iluminaban la zona.
Rick abrió los ojos, estaba atado y enfrente de él y de igual manera estaba atado Jim, a su lado, Alexander jugaba con su muñeco preferido en su silleta.
-Cariño.-dijo mirando a su hijo y forcejeando con las cuerdas para acercarse. -¿Jim cómo estás?-Preguntó mirando a Jim con preocupación.
-Tranquilo Richard, estamos bien.-dijo removiéndose en la silla.
Pero por su aspecto Rick sabia que no lo estaba.
-Siento mucho todo esto.
-Tú no…
-Me alegra que lo sientas Richard, tú tienes la culpa de todo.
Rick agachó la cabeza.
-Bastardo.-Le gritó Jim.-La culpa es tuya.-Le volvió a gritar.
Jerry que sonreía torció el gesto y apuntó a Jim en la cabeza con la pistola.
-¿Decías?-Preguntó clavándole la pistola en la sien.
-Déjalos marchar, ya estoy aquí, dijiste que no les harías nada si venia.-Pidió.
-Pero que iluso te has vuelto Richard.-Rió.-O será que ser padre de nuevo te ha reblandecido.-dijo dando vueltas alrededor de Alex.
-¡No lo toques!
Jerry negó sonriendo.
-Aquí no estás en condición de exigir nada querido amigo.-dijo apuntándole ahora a Rick en la cabeza.
-Mátame ya, acaba con esto.
-No, sabes que lo divertido es esto, el sufrimiento, una vez muerto la diversión se habrá acabado.-Rió.
Jerry desapareció de la zona iluminada y volvió con una silla que coloco entre Jim y Alexander y paso la pistola de un lado a otro, haciendo que el corazón de Richard se encogiera cada vez que apuntaba a alguno.
-Bueno Richard dime, ¿a quien prefieres que salve?
Richard los miró con pánico.
-Por mi no te preocupes Richard. Elige a tu hijo.-dijo Jim serio.
-Él no te guardara rencor pero ¿y Kate? ¿No te lo guardara ella?-Rió Jerry.
-No, si salvas a su hijo.-dijo seguro Jim, intentando que solo lo escuchara a él y no a Jerry.
-Kate perdió a su madre, no podrá soportar también que a su padre también lo maten.-Sonrió Jerry paseando alrededor de Rick, cerca de su oído.
-Richard escúchame, no le hagas caso.-Gritó Jim forcejeando.
-¡Ya basta!-Gritó sentándose en su silla.
La voz de Jerry resonó por toda la nave.
Jerry iba a apuntar, elevando la pistola cuando el sonido de un disparo resonó en el aire.
Jerry se llevó una mano al pecho que empezaba a sangrar y este elevando la pistola disparó dos veces hacia el lugar donde provenía el disparo, y se escuchó un gran estruendo mientras Jerry se desplomaba muerto en la silla hacia delante.



Kate aparcó antes y atravesó corriendo el pequeño bosque, no quería alertar a Tyson acercándose mucho con el coche. Su móvil empezó a sonar pero lo dejo en el coche sin importarle. Creyó que era Esposito el nombre que salía en su pantalla.
Sentía que el corazón se le iba a salir del pecho mientras corría. Al salir al claro se paró y examinó unos segundos la zona antes de correr hacia una puerta lateral roja. Se recolocó el chaleco y cogio su pistola.
Abrió con el máximo cuidado la puerta y entró, cerrándola, tenía que dejar todo como estaba.
Por un segundo se quedo ciega por el contraste de luz, todo estaba oscuro. No se movió hasta que pudo ver con dificultad, alzó la pistola y escuchó las voces, ando lentamente y fue hasta una zona iluminada por un foco.
Tuvo que contener las ganas de gritar y moler a golpes a Tyson al ver que no solo estaba Rick atado de espaldas a ella sino también a su padre y su hijo en su silleta.
Respiró varias veces y se movió en la zona oscura para encontrar un ángulo para tener a tiro a Tyson sin que Rick quedara en medio. Sentía que temblaba.
Miró la escena mientras se ponía al lado de unas cajas de madera apiladas.
Al escuchar a Tyson y sus intenciones no se lo pensó más, le apuntó y disparó.
Vio que el levantaba el arma hacia donde estaba y al intentar moverse tropezaba con las cajas tirándolas y cayendo ella encima.


Espero que os haya gustado, no haber perdido mi toque escribiendo después de tanto tiempo, jejej.
A esto le queda poquito...hasta la semana que viene.